El lenguaje arquitectónico

El lenguaje arquitectónico
Milán Ivelié K.
El Arte tiene su propio lenguaje
característico, inconfundible e in
cambiable; cada clase de Arte tiene sus propios medios y modos de expre
sión dentro del lenguaje artístico. Los
medios de expresión de las diversas
de
clases
Arte pueden
cuando un poema
bujos
un
poema;
guaje particular
campo
ser
colocados
pero no pueden ser
tiene
en
como, por ejemplo,
ilustra con di
conexión,
es puesto en música o cuando se
que
"traducidos"
cumplir una misión
uno en otro.
especial
en
su
Cada len
respectivo
del Arte.
En
para
lírico
el
lenguaje humano se han diversificado los
los múltiples valores de la cultura
comunicar
modos
de
expresión
(Ciencia, Filosofía,
Técnica,
se
etc.); cada modo de expresión ha llegado a ser específico y
habla de un lenguaje filosófico, científico, técnico, etc., que, por
así
su
puesto, no son excluyentes unos de otros; entre ellos existe interacción.
No obstante, el lenguaje específico debe predominar, o mejor, los no espe
cíficos
deben estar
al servicio
del
específico.
ha sido y sigue siendo no distinguir los modos espe
de expresión, tanto en el lenguaje humano corriente como en el
lenguaje artístico! No tomar en cuanta esta diferencia ha producido abe
¡Cuan peligroso
cíficos
lenguaje corriente y en el del Arte. Incluso se pre
los modos y medios de expresión de la técnica como únicos
y valederos en la creación arquitectónica!... "Llegará un día en que no
se concebirá un edificio sino totalmente hecho por las máquinas, con la
misma perfección que hoy tienen nuestros
1. Se olvida que las
rraciones graves en el
tende
utilizar
aviones"
máquinas,
los productos de una industria, los vulgariza sin
la Arquitectura con su específico modo de expresión
al multiplicar
expresarlos;
sólo
creará realmente una obra de arte.
El lenguaje artístico,
guaje
de las palabras
que
no
debe,
por
lo tanto,
habitualmente
confundirse con el
len
empleamos para
comunicarnos,
pues ambos no designan las mismas realidades ni las designan dé la misma
manera.
1
El lenguaje
artístico
cubre una zona
Diario "El Mercurio": Arquitectura
e
de la
vida
interior distinta
Industria. Stgo., 2-V-1969.
39
de la de las ideas, de las cuales son reflejos las palabras; y cuando,
incidencia la aborda no lo hace desde el mismo ángulo.
Asi,
su nuevo
ma.
lenguaje,
a ese
sentido, y,
Comunicar
sentido
del
campo utilitario.
y la
fondo
o
formada
contenido,
Señalábamos
forma y
y el artista,
de su for
cosa, sí, pero de cierta manera. Buscar la claridad
de la sintaxis establecida no llevaría más allá
Para que haya Arte es preciso que la forma, al igual
alcancen una calidad propia.
que versifica
de
el problema
su vocabulario
plantea ya el problema
corrección
"...porque logras
al afirmar:
ya
toda lengua,
alguna
del
que el
hombre le ha dado
el
como
por
su
piensa por
y
Goethe tenía razón
lengua
expresarte en verso mediante una
¿crees que eres poeta?
ti,
"
.
.
2
.
lenguaje artístico, como todo lenguaje, plantea
forma y, a la vez, la exacta correspondencia entre la
que el
su contenido.
Si llevamos esta idea a la Arquitectura, nos encontramos con Una
de problemas: uno de ellos es que la Arquitectura está indisoluble
mente unida a satisfacer necesidades humanas vitales; no hay ninguna
serie
necesidad relacionada con el
amparo
o el
abrigo
que
la Arquitectura
no
haya previsto; ahora bien, la primera condición de este arte, es también
la perfecta conveniencia de la obra con su destino: la necesidad no apa
rece
purificada
y ennoblecida
deriva la idea de
hecho
tida es
vierte
la
suya
en
y
premisa anterior:
la forma debe
que
si
adecuación
no
servida.
exactamente
es
utilidad.
Una teoría
De
aquí
contemporánea
se
ha
la teoría funcionalista. Su punto de par
la función, y esta afirmación se con
e igualmente constituye un
seguir a
principio rector para el arquitecto,
la Arquitectura. Pues bien, no se puede menospreciar
la idea de adecuación o utilidad. El problema está en que las tendencias
funcionalistas le asignan el papel fundamental. Este hecho puede inter
patrón para medir a
pretarse
desde dos puntos de
vista:
que
la
utilidad
y la
adecuación sean
consideradas como la medida de la excelencia o perfección de un edificio,
pero no forzosamente como la medida de su belleza, o bien, que la función
convierta en el requisito fundamental de la belleza. Ahora bien, las
teorías funcionalistas, por lo general, hacen de la adaptación de la forma
a la finalidad el principio rector básico para medir la belleza de la Arqui
se
tectura.
Muy
relacionado con el concepto
"orgánico". La idea de
moderna ciencia
poránea.
biológica,
sin embargo estas
2
40
que si
todas las partes
subrayando
funciones
el
"funcionalismo"
funcional es una
como así
Algunos sostienen
sentido que
mosas
adaptación
de
también
en
está el término
premisa
básica
la Arquitectura
bien la Arquitectura
es
con
se expresan en
el
Arte.
Barcelona, Labor, 1925,
la
orgánica, en el
están perfectamente adaptadas a su
formas y líneas de
elemento espiritual en la Arquitectura,
Huyghe, Rene: Diálogo
en
contem
pág.
102.
función,
suyo
her
contrapo-
niéndolo al material. Los fines espirituales no eran
sólo una parte de la
función,
sino que poseen un valor
El término
analogía;
es
"orgánico"
forma de
una
se
intrínseco.
puede
considerar
de
especie
una
como
la Arquitectura funcional
equiparar
con
la
vida animal o vegetal.
El hecho evidente es que los edificios no son plan
tas ni animales, aunque se los pueda crear aplicando
el principio de la
adaptación de las formas a las funciones. La Arquitectura no es sólo un
organismo:
es un producto
de la
voluntad
humana.
Otro problema
que cada día se intensifica más, tiene relación con
la sociedad de consumo, de la que formamos
parte; es tal la urgencia de
satisfacer las necesidades del consumo en el mercado
humano, que ni la
Arquitectura ha quedado excluida de esta intensa demanda. Si en las so
fuertemente desarrolladas el consumo ha llegado a ser un fin
mismo, en las sociedades de escaso desarrollo económico, como la
nuestra, la demanda de bienes obedece al imperioso anhelo de subsisten
ciedades
en
sí
cia,
decir,
es
el
consumo
está
precedido
por
fin
un
superior.
hecho de características socioeconómicas ha impactado
la
Arquitectura,
las necesidades de abrigo y albergue del
gramente al hombre.
En
definitiva,
omitido.
humano,
ser
del "espacio
De mantenerse esta
socioeconómicos
que
habitable"
situación
afligen
y
a
al
lo
que
sociedades
esencial
para
y
hombre integralmente. En la Arquitectura,
de las necesidades y ésta comienza
en
que
el
ínte
instrumento imprescindible de
el
Arte
la
alguna
los
pro
subdesarrolladas,
según parece
—
por
la
totalmente
superen
hacer obras de Arquitectura es
purificación
visión
sin considerar
cuando se
aun
las
en
a satisfacer
está parcial o
nunca podremos modificar esta realidad, puesto que
olvidado
este
nos encontramos con una pseudo-arquitectura, en
cual el profundo sentido
blemas
limitando
puesto que sus obras sólo se están
Pero
negativamente
se
—
se
ha
considerar
realiza
renovación
necesidad
por
de
la
una
percibe
valoriza el elemento que nos arranca de esa misma necesidad.
Maurice Pradines, hacemos
purifica de la necesidad que
Siguiendo
a
nuestra
sirve"
edificio
nos
3. Lo
su
idea de
que
característico
"el
del
abrigo, tal como lo define la necesidad, consiste en la protección contra
la atmósfera externa y sus peligros: frío, calor, viento, lluvia, nieve, polvo
y
agresión.
zos
ha
sido
fue más
Si seguimos la historia humana, vemos que desde sus comien
ése el papel cumplido por las cavernas: el primer abrigo no
que
yéndolo
con
su
es más que un
3
1948,
caverna; pero dicho abrigo, limitado por la necesidad,
última sino aplastando al hombre con su peso y disminu
medida. De tal manera que el hombre así amparado no
una
no sirve a esta
hombre
al amparo, porque, si
Pradines, Maurice: Traite de
vol.
2,
pág.
bien
Psychologie Genérale.
es cierto que
la
caverna
Paris, Presses Univ. de France,
343.
41
lo ha
de la naturaleza,
amparado
de
cuidándose
sus
peligros
que ella puede otorgarle:
se
lo rodea constantemente. Sus
ojos
bren un campo limitado, un poco
algunos movimientos. El abrigo
bargo, durante
tiempo y
mucho
de la
mal, casi
respira
caminar, la
no puede
penumbra
al, infinito sólo
táctil aumentado
cu
adaptados
más que el espacio
perfecto
separado
parte
mayor
oídos
y
de ella;
de los beneficios
tiempo lo ha
al mismo
priva
lo
Sin
demasiado.
abriga
con
em
con algunas variantes, será el abrigo que
se construirá.
El edificio sublime, en cambio, es un abrigo que se niega y por esto
Toda la naturaleza parece tender a esto, pero mucho más
parece superarla. La nave gótica, por ejemplo, da al espacio lo infinito:
la elevación de la bóveda fatiga la vista más que la del cielo; sus vitrales
parece sublime.
luz más brillante
entregan una
que
la del
blime, incluso para los incrédulos. Desde
una belleza extraña la sublimidad de la
necesidad que se niega en el mismo
creticen
aún
bienes de
en
el mundo
consumo.
Arquitectura
se
las ideas
parece que
Lo
ha
así
viviendas se
en
estas virtudes es
comienzo
piedra.
se
que
el
Es la
Arte
de
creciente
y
ocurrido es que se
debe
un
servir
simple
su
adorna con
de la
sublimidad
emplea para satis
que
liberándose
reconstruye
expuestas no se oponen a que ellas se
actual
en el sentido que
ha transformado
demanda de
que
Por
sol.
instrumento
facerse: es la belleza de una humanidad
de los límites de la necesidad.
Nos
el
vertiginosa
con-
demanda de
ha instrumentalizado la
sociedad de consumo";
"para la
valor
instrumental.
está satisfaciendo mediante
La
creciente
construcciones ma
y standardizadas, donde sólo interviene el lenguaje de la técnica y
la mecanización, sin ningún respecto al hombre que lucha por conservar
su individualidad.
sivas
Un ejemplo práctico de este problema
nemos
nuevo
en
la llamada "Vía Elevada":
camino
entre
se
—
en
el
trata de la
Valparaíso y Viña del
Mar,
Urbanismo
lo te
construcción
de
—
que
ha
provocado
un
una
fuerte polémica, como muchos lectores estarán enterados. Se plantea el
de solucionar la comunicación entre ambas ciudades mediante
problema
una
vía
plantea
podrá
y expedita, porque el actual camino costero cumple
forma deficiente. Sin embargo, el proyecto propuesto
rápida
"función"
en
una
lograr
Valparaíso,
solución
funcional,
porque
si
bien
no
se
y expedita de acceso entre Viña del Mar y
costa de la destrucción de la naturaleza, que
una vía rápida
se
ha ofrecido
urbanística, sino sólo
esa
conseguirá a
ambas ciudades un bien inapreciable: el mar. Hombre y
naturaleza, indisolublemente unidos a través de la Arquitectura y de la
Urbanística mediante la reconstrucción humana de la naturaleza que li
bera al hombre de su peso, pero que, a la vez, le permite recrearse en ella,
queda
ahora
a
destruida y
Como vemos,
como
42
se
la facilidad de
aniquilada.
tiende ahora
circulación
a
(en
destacar los valores inmediatos, tales
el caso que aludíamos), la facilidad
de mantenimiento, la buena
iluminación y ventilación,
Pero
etc.
un rico
orden de valores inmediatos debe gusírdar una vinculación intrínseca con
los valores mediatos y últimos —de lo
el automóvil devorará
contrario,
la línea que separa los valores inmediatos de los
últimos no es una barrera infranqueable. Prácticamente todos los valores
inmediatos pueden considerarse desde un punto de vista arquitectónico,
al
hombre—,
puesto que
expandidos en su aplicación o mejor sublimados hasta convertirse en un
último.
valor
Pudiera parecer, a primera vista, que no somos partidarios del em
de la técnica en la obra arquitectónica o urbanística. No es así
y si
algo que deba reconocerse al
funcionalismo, es justamente el empleo
pleo
hay
ha hecho del mundo de la tecnología; actualmente, incluso es de la
importancia en la Arquitectura. Pero, rechazamos el quehacer ar
quitectónico como una simple tecnología de la
construcción; como lo de
que
mayor
de este ensayo, la Arquitectura tiene su propio len
y sólo puede haber interacción con otros si están al servicio de
éste. Si la Arquitectura ha pasado a ser una tecnología de la construcción,
lo que ha ocurrido es que un lenguaje específico ha sido avasallado por
cíamos al comienzo
guaje
otro.
A
medida
la máquina
que
derna, industrializada, que,
por
todo
cuanto no respondía a un
hallar
creyó
su reino, la sociedad mo
la ciencia, mostraba repugnancia
fin positivo, asoció lo bello a lo útil y
ensanchaba
en su culto a
el punto
justo
en
la
perfecta adecuación a una
función
prác
tica, claramente perceptible. Sin embargo, lo útil reclama un complemen
to, pues es útil a algo, sirve a un fin que le es externo; lo bello, en cambio,
no puede concebirse con un fin que no sea el de la propia belleza. No hay
nada
que
mental
sea
de
bello "en función de
su naturaleza
basta
otra
cosa".
Y
esta
diferencia funda
distinguir las dos nociones,
para
que
jamás
podrán compensarse.
Por eso el Arte empieza
técnica;
sin
embargo,
en
sible reducir al extremo
de la
obra.
formarla
cuando
basado
por
Lo
en
en
el
construir
proyecto
la
"Más
parte
que
dirigido
a
con referencia
.
Gropius, Walter: Arquitectura
parte
utilidad
biólogo Julián
integrante
hasta trans
Huxley tenía
abandonar
el
razón
sistema
de los deseos del hombre y comenzar
cualitativamente las auténticas
abandonar
única
Después de estas consideraciones,
lenguaje de la Arquitectura?.
4
la
satisfacer
humanas. Esto implica
del hombre
es maximizar
tarde hemos de
artificial
de la
mecanismos
de la Arquitectura no es po
utilitaria, porque ésta es
eminente
pronto
los
acaban
se
específico
debe hacerse
incremento
uno
donde
allí
caso
único fin. El
el
afirmó:
necesidades
el
que sí no
el
y
a su
el
hábito de
valorar
todo
utilidad"4.
cabe preguntarse ahora:
¿cuál es
.
Planeamiento.
Buenos
Aires, Infinito,
1962
43
Sostenemos
Son
mente.
ellas el modo
bien encontramos
tura,
lenguaje de la Arquitectura son las formas
que el
léxico de
que vienen a ser el
ciales,
sólo
en
de
espacio en otras clases
la Arquitectura es
Mediante
el
satisfacción a
las espiritualiza
el
"verbo"
tiende
del lenguaje artístico,
de todos los otros
para
de esas
él
en
que
sugerirnos
necesidades5.
definir
a sugerir más que a
que, a la vez,
sino
algo
existe
que
arquitectó
como ocurre
designar,
la
sobrepasa
Porque el lenguaje
o a
aquel
elementos.
arquitecto no sólo
lenguaje de las formas espaciales, el
las necesidades primarias del hombre
simple satisfacción
nico
de la Arquitectura, y, si
de Arte, como Pintura y Escul
expresión específico
que subordina a sí mismo el significado
da
espa
que se vale para expresarse artística
con el
lenguaje hablado.
Este lenguaje de las formas
es
artístico,
que
es
lugar (espacio limitado)
un
lenguaje arquitectónico,
gracias al
sino
práctico,
una
sino
la
el
lugar de
"poesía"
donde
se
del arquitecto; ha
al
Quizás
se
y
pero
actúa
integralmente
esos
que,
concreto-
abstracto, espiritual,
de
toda
necesidades
la plena humanización
espacios
ya
curiosidad
nuestra
para
creados
que
él.
todos los edificios tienen espacio, ya que
caminar, entrar, estar. Pero ésta es la raíz de un grave
considera que dicho espacio concreto-práctico en que se
alguien observe que
en ellos se puede
error:
"vivir"
hombre
a
van
espacio
volcado en esos espacios
sino que espiritualizándolas, revelan
permite
un
en
satisfacer específicas
primarias,
sólo
vive
estadía o
expresión,
no
concreta
(transfigurado, sublimado)
carácter
nuestra
su propia
que
se
ya no es solamente un espacio
humana, de
creación
que no es solamente
turística,
espaciales
es un espacio transformado
decir,
aquel que
es, definitivamente, el que cuenta. El equívoco es corriente, se cae en
él continuamente, está en la base de muchas teorías arquitectónicas y es
responsable de las dificultades, muchas veces subrayada, para comprender
vive
la Arquitectura,
plica porque
en
comparación con
el espacio
donde
con el espacio que el arquitecto
miento, donde de hecho
específicas,
espacio
de
que no es otro
humanos
De
aquí
se
y
no
ha
y
otras clases
se
de
arte.
Esto
actúa prácticamente
construido para
ha logrado
elevando el espacio
artístico,
carácter espiritual
valores
se
las
se vive
sublimar
la
dar forma
se ex
coincide
a su senti
necesidad o necesidades
concreto-práctico, útil, instrumental a
espacio, sino el mismo, pero
un
transfigurado,
práctico; necesario, que responde
a
anhelos
y
permanentes.
desprende
que
un
criterio
de valoración volumétrica,
decidir la verdad artística de un edi
decorativa,
ficio, sino que deben hacerlo la fuerza y la coherencia con que se expresan
las formas espaciales para lograr que el espacio concreto-práctico llegue
práctica
5
no
puede
K., Milán: Consideraciones sobre la Historia y su relación con la Crítica
Facultad de Filosofía y Ciencias de la Educación, U. Católica. Anales, 1968, pág. 291.
Ivelic
artística.
44
o
a
ser verdaderamente espacio
artístico. Y la individualización crítica de
cada obra arquitectónica, la
diferencia entre una y otra, la diferencia
entre una época y otra de la
Historia de la Arquitectura, debe fijarse
fundamentalmente sobre la base de las diferentes
maneras de Imaginar,
de crear, de visualizar los
espacios. Por eso creemos que la Historia de la
Arquitectura debe
la historia de la evolución de las formas
ser
espaciales.
Es indudable que toda expresión
del lenguaje necesita de los medios
para lograr su fin. El lenguaje
arquitectónico no escapa a dicha afirma
ción
así sus medios
y
los toma del mundo
externo, ya sea directamente,
Todo —al menos en germen— se halla en la natu
ya sea indirectamente.
raleza. Pero todo yace en ella con
indiferencia, a merced de los azares o
de las leyes físicas, desprovisto de significación humana. Corresponde
al
hombre valorizar estos elementos todavía
amorfos, como la piedra que se
encuentra en la cantera: hace falta que un
arquitecto la escoja, la ex
traiga, la integre en una construcción, le confiera una forma
un sentido.
y
De esta manera el lenguaje de las formas espaciales requiere
los medios
técnicos (estructuras) y constructivos
(muros, bóvedas, etc.) y los mate
riales (madera, cemento, fierro, etc.). Los medios de expresión de que
hoy
dispone un arquitecto son notoriamente diferentes de los que disponían
generaciones anteriores:
sobre
grandes
espacios
esqueletos de acero y hormigón armado, puentes
vacíos, partes móviles en el edificio mismo, ven
todos nuevos elementos de la técnica contemporá
tanales continuos, son
de la construcción.
nea
Naturalmente, ellos influyen sobre la forma del
actual, de igual manera como la invención del arco, la cúpula y
los techos abovedados determinaron la forma de las construcciones de
antaño. Los sistemas estructurales son medios para la realización de crea
ciones arquitectónicas. De igual manera como la construcción posee un
lenguaje propio de materiales y de construcciones, la Arquitectura cuenta
espacio
con una
"gramática"
Comparemos,
desde
el
espacio
punto
que
de
enteramente suya.
por
ejemplo, la realidad física de un espacio edificado
del técnico y el empresario, con el aspecto del
vista
ha atendido el
arquitecto.
Como técnico,
el
arquitecto
debe
de gravedad; como creador de formas espaciales, en
de ellas, a un código totalmente diverso al de
partiendo
cambio, obedece,
las leyes y reglas que inspiran la labor del técnico constructor, y, en mu
someterse
a
la
ley
chos casos, parece
desafiar,
Es fundamental
los
cuales el
lenguaje
espaciales concretas.
pero no
contradecir,
que el arquitecto conozca
esas
leyes y
esas reglas.
muy bien los medios con
la creación de formas
arquitectónico se expresa para
Uno de esos medios,
ya
lo dijimos,
es
la construcción,
de expresión;
que a cada momento está presentando nuevas posibilidades
de igual manera
separarse
ocurre
con
de la construcción,
construcción
los
con un material.
nados con su estructura
materiales
ya que
Sus
física y,
toda
que
naturalmente, no
construcción supone
pueden
siempre
la
atributos característicos están relacio
por
lo
tanto,
sólo si el arquitecto conoce
45
realmente
sus
existen para
yan
en
la
físicos y todos los
atributos
dominarlos,
de
será capaz
recursos
y posibilidades
que
aprovecharlos para que contribu
de formas espaciales 6.
creación
La ignorancia
desprecio de las
o
buena medida llegar
creaciones
a una escala verdaderamente
masiado conocido procedimiento
del
espacios
utilidad
simplemente
según
su
seudoproyecto
impide
espaciales
arquitectónica. El
consistente
en
alinear
luego darles
un
práctica,
pulido estilístico, desconoce la esencia misma de la creación espacial, que
es la única que merece el nombre de Arquitectura. Puesto que ella es crea
ción efectiva
"vida en
dolo
de
y
habitaciones
en
edificio somos
una
forma
presa
un nuevo espacio vital para el
espacio"
el
para
en
de
no
separadas.
testigos de
espacial
maravillosa
fuerza
una
coherente,
que
hombre,
lo objetivo es crear
hombre del espacio total encerrán
Cuando al ingresar y recorrer todo el
separar al
creadora
dominada,
un orden
produce
espacial,
la Arquitectura.
que
ha logrado
experimentamos
la
sor
Antes de terminar este breve trabajo, quisiéramos referirnos muy
a la Pintura y a la Escultura, por estar más estrechamente
vinculadas con la Arquitectura, insistiendo una vez más que son autó
en
general
nomas tanto en su lenguaje como en sus medios de expresión.
En la
Escultura,
de expresión son los volúmenes
dicho lenguaje. Ha ocurrido y ocurre que la
otros modos de expresión artísticos han llegado a ser
muchas veces perjudiciales en la Escultura. A modo de ejemplo, tenemos
el caso concreto de la Arquitectura, que le ofrece sus formas espaciales. A
través de la Historia del Arte podemos comprobar que la Escultura, en
el modo específico
y el escultor debe
interacción de los
atenerse a
numerosas
históricas,
tura,
etapas
quedó sometida
no sólo estando al servicio de ella
(en
al
dominio de la Arquitec
románico) o junto
(en el período gótico) sino que, más aún, acatando la ley de la
frontalidad (elemento arquitectónico) que dominaba casi toda la Historia
de la Escultura hasta Rodin. Muchas estatuas necesitaban ser vistas de
frente, necesitaban un marco. A partir de Rodin, en cambio, la Escultura
se fue emancipando de la tutela de la Arquitectura
y pudo desarrollarse
el período
con ella
independientemente,
sin
que
fuera condición esencial para la
creación
escultórica un parentesco absoluto con ella.
Ha
sido una
absorbente que
supuesto,
la
que una
de las grandes luchas del escultor liberarse de la tutela
de frontalidad le había impuesto. Se
entiende, por
estatua debe estar en un lugar; pero el problema está
ley
lugar no absorba los volúmenes escultóricos, sino
que, por el
lugar debe ser adecuado para la justa apreciación artística
de la obra escultórica. Por lo tanto, el lugar es sólo receptáculo de un
en
que
el
contrario,
6
el
Hesselgren, Sven: Los
deba, 1964, pág. 214.
46
medios
de
expresión
de la Arquitectura. Buenos
Aires,
Eu-
contenido que vale por sí mismo; es el volumen que se contiene a sí
mismo
y es valioso, no por el lugar en que está, sino a pesar del lugar. Por eso,
una obra de escultura puede ser trasladada de
lugar, sin que por ello
pierda su propio valor artístico.
Así, la Escultura
no necesita de la Arquitectura para su genuina
Son las formas espaciales que originan un espacio arquitec
tónico las que hablan en una obra
arquitectónica; son los volúmenes
expresión.
(sólidos
o
que moldean un espacio volumétrico
vacíos)
la Escultura.
Esta,
de la frontalidad,
en su
plasticidad, no
que debe ocupar
los
que
hablan
puede quedar sometida
a
en
la ley
sino
un lugar que permita que sea
y experimentada sucesivamente, porque nuestra atención so
bre una escultura está dirigida a ella desde distintos puntos situados fuera
de la misma. En cambio, en la Arquitectura, nuestra atención está ligada
"recorrida"
de modo indisoluble
al
recinto
que nos cobija y donde
El punto de coincidencia
recinto también constituye
constituimos el punto central.
está
paredes
decir,
que
el
es
una
mismos
la Escultura
experiencia
puede ser
no
tando, entonces, distintos
distintas
de
hombre hacia
Estos
corresponden
en
oposición
al
que
también —y en primer término
la
por diferenciar este ambiente7.
—
nos
a
el mundo circundante co
su naturaleza que explican su necesidad
"artificial"
ambiente
del recinto.
caracteres
actitudes que adopta el
mo consecuencia
como
con
interpretado simultáneamente, mediante
golpe de vista. Por eso, la atención puede ser atraída hacia sus
y objetos, o hacia el espacio vacío entre paredes y objetos, resul
sucesiva,
un solo
hecho de
el
en
nosotros
de
crear un
la naturaleza,
de los distintos es
suministra
explicación
fuerzos
Si
pasamos
importante
pictórico, que no
ricas a través de
como algo ya
Se
ahora
la Pintura, observamos que en ella tiene un
Esta noción debe entenderse como el espacio
que una sugerencia dada por las formas pictó
a
papel el espacio.
es
más
un
origina
bidimensional. El
plano
determinado
de la
por el pintor:
visión creadora
cuya
cíficamente
finalidad
espacio
es
entendido
aquí
es un espacio pintado.
del artista, que es una visión espe
es la representación o ef objeto
no
pictórica,
representado, ni su significado objetivo, sino que su finalidad es sepa
rarnos de la representación, cuya verdadera naturaleza está más allá de
lo que nos refleja el cuadro. Detrás de la epidermis de realidad que es su
y lo hace sensible para nosotros (al tiempo que encubre su ver
dadera esencia) existe un mundo que trasciende lo sensible que vemos a
"objeto"
es aprehendido de una manera
través de nuestros sentidos. El
transfiguran
el "motivo".
colores
en
que
líneas
el
las
y
nueva,
pretexto
El espacio
elementos
7
pictórico es un
de perspectiva, los
Hesselgren, Sven:
op.
cit.,
lugar
planos
pág.
312.
sin
no
extensión, donde a pesar de los
verdaderamente lejanos o
están
próximos. Es un espacio donde cada objeto renuncia a su límite
a su
volumen, a su peso, a su plano,
de una luz que él no refleja sino que
Se trata, pues, de
unos espacios
descansar
para
de dentro
recibe
dibujado,
la omnipresencia
en
como su ser.
creados por el pintor o me
nuevos,
jor dicho, concreados con las formas pictóricas. El pintor crea en su obra
nuevas formas pictóricas que, realizándose, sugieren un espacio. No se
por
entienda,
terial,
con
lo
tanto,
pintor no crea el
nuevo,
ocupan
que
hasta
es
también
luz,
es
en el sentido ma
existían
lo
en
dicho,
las formas y siendo éstas
la naturaleza, el espacio
con
en
el
algo
que
pictórico.
que utiliza
lenguaje colórico
el
el pintor para
que
supone
"crear"
dicho
implícitamente
el
espacio pictó
empleo
de la
esencial en la expresión pictórica. Siendo el lenguaje colórico el modo
de
específico
las
entonces no
nuevo:
la tela
determinados. Insistiendo
ancho
espacio, es concreado
El lenguaje
rico
el espacio pictórico como
largo y
su
expresión
otras clases
de Arte,
arquitectónico con
el
Si llevamos la
de la
Pintura,
como ya
no
puede
lo hemos
transferirse
como
visto al comparar el
fin
a
lenguaje
escultórico.
comparación
al
empleo
del
color
en
la Escultura,
podemos afirmar que éste no habla por sí mismo en una estatua, sino que
función de la volumetricidad plástica, ya sea como
bien, contribuyendo a marcar los volúmenes.
está en
elemento
de
corativo, o
De la
pictórico
realidad
de
manera, no hay confusión posible entre el lenguaje
lenguaje arquitectónico; el espacio pictórico expresa una
muy diferente al espacio arquitectónico. Este tiene la propiedad
misma
el
y
ser pluriespacial porque al
quedamos en el
entre el rincón
recorrerlo, el espacio no es el mismo si nos
centro, o nos quedamos en un rincón o a medio camino
y el centro. En cambio, la Pintura, en su presentación, es
monoespacial; tiene
cuadro
es
tualmente,
un
aprehendido
se
inicie
un
centro, o más exactamente, ella es su centro. Un
de una manera simultánea antes de que, even
análisis estructural sucesivo. Al
contrario, somos
quienes constituimos
"móvil"
el centro
nosotros, rodeados,
de un edificio
transformando su sistema de referencias, según nuestros desplazamientos.
"móvil"
"estático"
El centro
creado por el arquitecto deben
y el centro
coincidir para una justa apreciación de la obra.
En la Pintura podemos mirar las formas pictóricas que sugieren el
pictórico; en la Arquitectura, en cambio, las formas espaciales
espacio
nos
envuelven,
través de la
están
englobadas
experiencia
muy
en
edificio. Este se aprehenderá a
del acto de habitar. La percepción
el
compleja
arquitectónica, englobada, capta muros, vanos, bóvedas y capta también
el volumen de aire luminoso definido por esos muros, esos vanos, esas
bóvedas. Mientras
aquí se
toca
nuestro ser.
48
en
una parte
la Pintura la percepción sigue siendo intencional,
de las formas; las sentimos atravesándola con todo
Decíamos que las formas pictóricas se expresan a través del color,
donde los colores han sido transustanciados en luz, hasta el punto que se
puede hablar de "luz-esencia" en la Pintura. Pues bien, la Arquitectura
utiliza
la
luz,
no como lenguaje
específico, sino en función de las formas
La Arquitectura no pide prestado nada esencial a la Pintura
y viceversa. Si la Arquitectura hace uso de la luz, no la emplea para crear
las formas espacíales —como en las formas pictóricas— sino que para
espaciales.
atenuar o reforzar
determinados
caracteres del recinto. La
luz,
en
la Ar
quitectura, asume el significado de iluminación y contribuye a cambiar
los caracteres del recinto, de tal manera que al variar la luz según las
horas del día, arrastra a las formas espaciales en sus mutaciones; en la
Pintura, en cambio, la luz surge de las mismas formas pictóricas que son,
por lo tanto, incambiables. De aquí deducimos una diferencia fundamen
tal: la Pintura es
Como
a
prácticas,
la luz.
no nos es posible referirnos con más
estas reflexiones
comparativas entre
peramos contar más adelante con un
estas
utiliza
el marco en que está contenido este ensayo es reducido
a necesidades
pecto
luz; la Arquitectura
los lenguajes
"espacio"
debido
detalles
artísticos.
res
Es
que nos permita completar
ideas.
49