cómo establecer objetivos personales: 1. Establecer objetivos generales En primer lugar debemos establecer nuestros objetivos generales. Los objetivos generales son objetivos genéricos que queremos alcanzar en la vida, los cuales nos servirán de guía para establecer nuestros objetivos específicos. Para establecer nuestros objetivos generales, debemos basarnos en nuestras propias pasiones, en nuestro propósito en la vida, en aquello que nos permita alcanzar una vida con significado, en aquello que nos permita obtener el estilo de vida que queremos o, simplemente, en aquello que nos permita ser felices. Algunos ejemplos de objetivos generales podrían ser: ser millonario, alcanzar la libertad financiera, ser económicamente independiente, encontrar el amor de nuestra vida, ser el mejor en lo que hacemos, ser el mejor deportista, etc. Como consejo debemos establecer pocos objetivos generales, ya que así nos enfocamos y concentramos nuestra energía en pocos objetivos y no la dispersaremos en varios, pudiendo al final no conseguir ninguno. Lo recomendable es establecer como máximo unos 5 objetivos generales. Una forma de establecer pocos objetivos es establecer objetivos que abarquen otros, por ejemplo, si queremos tener una casa y un auto, podríamos establecer como objetivo tener mucho dinero. 2. Establecer objetivos específicos Los objetivos específicos (también conocidos como metas) son objetivos concretos y medibles, los cuales nos permitirán alcanzar nuestros objetivos generales. Estos objetivos específicos deben ser claros y precisos; mientras más claros sean nuestros objetivos específicos mayores posibilidades tendremos de alcanzarlos. Asimismo, es preferible establecer objetivos específicos cuantitativos y que estén ligados a un límite de tiempo, por ejemplo, ganar un determinado monto de dinero en un determinado plazo. Para establecer nuestros objetivos específicos debemos guiarnos de nuestros objetivos generales, por ejemplo, para nuestro objetivo general de ser millonario, algunos ejemplos de objetivos específicos podrían ser: tener nuestra propia empresa antes de finalizar el año, tener ingresos mensuales de 10 000 para el siguiente mes, escribir un libro en un plazo de 6 meses, etc. Al igual que en el caso de los objetivos generales, también es recomendable establecer pocos objetivos específicos; lo recomendable es tener como máximo unos 5 objetivos específicos por cada objetivo general que tengamos. Algo que resaltar es que nuestros objetivos específicos deben ser desafiantes, altos, casi inalcanzables, pero realistas y factibles (ir por etapas, una vez alcanzado un objetivo establecer el siguiente). Establecer objetivos específicos ambiciosos nos ayudará a sentirnos más motivados, y además, en caso de no alcanzarlos, al menos habremos obtenido un resultado un poco menor, pero satisfactorio; a diferencia de objetivos pequeños que en caso de no alcanzarlos podríamos sentirnos decepcionados. 3. Diseñar planes de acción Una vez que hemos establecido nuestros objetivos, el siguiente paso es diseñar planes de acción que incluyan los pasos o las acciones que tomaremos para poder alcanzarlos. Por ejemplo, para el objetivo de ganar 10 000 al mes, podríamos establecer como pasos o acciones solicitar un aumento de sueldo, buscar un nuevo empleo, aumentar las ventas de nuestro negocio, aprender a invertir en acciones, etc. O para el objetivo de tener nuestra propia empresa, podríamos establecer como pasos o acciones buscar ideas de negocios, buscar fuentes de financiamiento, hacer los contactos necesarios, buscar un socio, hacer un plan de negocios, etc. 4. Poner todo por escrito Poner por escrito todos nuestros objetivos, así como los pasos o acciones que vamos a tomar para poder alcanzarlos, nos ayudará a alcanzar nuestros objetivos, ya que nos permitirá hacer una fuerte declaración de éstos, así como poder recordarlos permanentemente. En primer lugar hacemos una lista con todos nuestros objetivos generales ubicados en orden de importancia, poniendo nuestro objetivo principal en la parte de arriba. Luego, en la misma lista (aunque es posible también hacerlo en otra) escribimos los objetivos específicos que nos hemos propuesto para cumplir cada objetivo general (los escribimos debajo de cada objetivos general). Y, luego, en una lista aparte (aunque también es posible hacerlo en la misma lista que incluya los objetivos generales y específicos) escribimos los pasos o acciones que vamos a tomar para poder cumplir nuestros objetivos. Nuestra lista de objetivos debe estar en un lugar (o varios lugares) que siempre veamos, de modo que siempre tengamos presente cuáles son nuestros objetivos y, por ejemplo, sepamos que siempre debemos hacer cosas que nos permitan alcanzarlos, y evitar hacer cosas que nos desvíen del camino hacia el cumplimiento de éstos. Nuestra lista podría estar ubicada en un cuaderno que siempre usemos, en nuestra computadora, en nuestra billetera, o incluso, pegada en la pared o en el espejo. Cabe resaltar que nuestra lista de objetivos debe ser flexible, es decir, con el tiempo puede que queramos modificar algún objetivo, que lo quitemos de nuestra lista, o que cambiemos de prioridades y decidamos cambiar la ubicación de alguno de ellos. Lo mismo en el caso de nuestros planes de acción, debemos revisar constantemente los pasos y acciones que hemos decidido tomar poder alcanzar nuestros objetivos, y cambiarlos en caso de que no estemos obteniendo los resultados esperados. 5. Actuar De nada sirve establecer objetivos si no hacemos nada por alcanzarlos, por lo que el siguiente y último paso en el proceso de establecer objetivos personales es poner en práctica nuestros planes de acción y empezar a alcanzar nuestros 1. Preocúpate por decidir bien más que por acertar: es habitual tener un injustificado sentimiento de responsabilidad, el cual nos lleva a pensar que si hacemos las cosas bien todo saldrá como estaba previsto. Pero en una decisión concreta podemos haber decidido bien y obtener malos resultados (y viceversa). El factor suerte también interviene. 2. Identifica claramente tus objetivos: si no sabemos dónde vamos difícilmente llegaremos. Es fundamental plantearnos ¿qué quiero/necesito conseguir? Saber dónde vamos nos permite actuar en función de nuestros objetivos, en vez de reaccionar ante lo que acontece. 3. Planteamientos realistas: el marco de referencia condiciona nuestro curso de acción. Es imprescindible que nuestros planteamientos puedan desarrollarse en la realidad. 4. No te autoengañes, es muy fácil hacerlo: cuando tomamos una decisión solemos buscar razones que avalan nuestra alternativa y no consideramos las razones que la cuestionan. Este problema se acrecienta cuando nos rodeamos de gente que piensa como nosotros, por eso, cuanto más heterogéneo sea el equipo directivo mejores serán las tomas de decisiones. 5. Atiende sólo a la información relevante: esta información es aquella que reduce la incertidumbre a la hora de tomar una decisión y que su coste es inferior al beneficio que aporta. Sin embargo, a veces utilizamos otra información que no es la relevante y nos lleva a tomar malas decisiones. 6. Reconoce la incertidumbre y gestiónala: tenemos miedo a la incertidumbre y no sabemos manejarnos en ella. Por eso, es fundamental aceptarla, plantear varios escenarios y hacer planes contingentes para cada escenario. En general, no aceptamos la incertidumbre de los grandes proyectos, prueba de ello es que el 65% de los procesos de fusión no funciona y la mayoría de los proyectos emprendedores no tienen éxito, y es que infravaloramos las consecuencias futuras dando mucho peso al presente. 7. Sé creativo y genera alternativas: solemos pensar que la primera alternativa es la buena, pero no hay ninguna razón para afirmar que ante un problema ésa sea la mejor.En realidad, a más alternativas, en principio, mayor calidad de las decisiones. En cambio, si sólo tienes una alternativa no eliges, sólo decides lo que puedes. 8. Consecuencias de las decisiones: juzgamos muchas veces nuestras decisiones por lo eficaces que son, pero las decisiones tienen otro tipo de consecuencias. 9. Lo que decidas, ponlo en práctica: a la decisión le tiene que seguir la acción, ya que ninguna decisión es buena hasta que se aplica. Un criterio a la hora de tomar una decisión es su aplicabilidad: gastar tiempo en tomar una decisión puede ser un ejercicio inútil si luego no se va a poder poner en práctica. Para ello, la voluntad es fundamental. 10. Sé consciente de que no todo es racionalidad: el último punto nos hace tener en cuenta que también las personas tenemos sentimientos y que éstos influyen en la toma de decisiones. --------------- No nos damos cuenta de la gran maravilla que representa poder admirar cada día una estrella consumiéndose en llamas No nos damos cuenta de la gran maravillosa casualidad que representra este lapso de tiempo en el cual la naturaleza ha dado la posibilidad de crear una forma de vida capaz de crear elementos industriales y tecnológicos No nos damos cuenta que los recursos son finitos, se pueden extinguir igual que lo hará nuestra existencia. El ser industrio-tecnológico tiene apenas 500 años y vivirá quizás unos 500 más, ¿qué vendrá después? En todo caso, a mi me causa dudas, cómo puede ser tan estable la luz de algo enorme quemándose. ¿No sería más lógico que fuera algo así como fogonazos? ------------------PLAN DE DEDICACION PERSONAL 1. AUTORECONOCIMIENTO (TEST+ANALISIS GENETIC+ESTUDIO ENTORNO) 2. PLAN DE OBJETIVOS PARA LA FELICIDAD 3. SEGUIMIENTO ACCIONES, ANÁLISIS Y MEJORA ERES FELIZ CON ALGUIEN CUANDO LE PROYECTAS LA IMAGEN DE TI QUE DESEAS Y TE SATISFACE TUS DESEOS DESCONOCIDOSxx 1. MANUAL PERSONAL: A. DEFINETE: HOMBRE, FISICO, CARACTER, CONOTACIONES CULTURALES SIGNIFICATIVAS (CARGAS RELIGIOSAS, MORALES), ESTADO ¿civil? ACTUAL ... B. MAPA DE INTERACCIÓN CON POLIVERSALIA -exclusionesC. INDICE DE TU SISTEMA DE GESTIÓN PERSONAL 2. CÓMO ---------------PIENSA CONTINUAMENTE EN cómo definir tu objetivos. Guarda registro de tu evolución histórica