El jarrón de los deseos

Domingo 3º de cuaresma CICLO A
Eucaristía preparada por jóvenes
Barcelona, 3 de marzo de 2002
AMBIENTACIÓN
Buenas noches y bienvenidos. Como podéis ver en el mural, este domingo
trataremos el tema de la sed; la sed que tenemos de saciar nuestras expectativas y
ambiciones, y veremos que, en última instancia, es Jesús quien nos da el Agua que
calma nuestros deseos y, en definitiva, nuestra sed.
ACTO PENITENCIAL
Todos sabemos muy bien las limitaciones que tenemos y por ello tenemos siempre
la ambición de superarnos. Vivimos insatisfechos, metidos en la rutina, y con ganas de
liberarnos de todo ello, pero solemos equivocarnos a la hora de encontrar lo que
realmente sacie nuestra insatisfacción. Por ello te pedimos perdón:

Señor, te pedimos perdón porque ponemos nuestro afán en saciar nuestra
sed con cosas perecederas.
Señor, ten piedad!

Señor, te pedimos perdón porque solemos echarte en cara nuestras
deficiencias y mediocridades.
Cristo, ten piedad!

Señor, te pedimos perdón porque no nos prestamos para saciar la sed de
tantos y tantos que viven en sequía..
Señor, ten piedad!
INTRODUCCIÓN A LAS LECTURAS
Todos hemos podido experimentar lo que es pasar sed, la necesidad imperiosa de
beber cuando llevamos mucho tiempo sin hacerlo. Saciar la sed se convierte en algo
vital y el resto de problemas desaparecen. La Palabra de Dios hoy utiliza esta
poderosa imagen para enseñarnos cómo ha de ser nuestra fe y cómo hemos de
buscar a Dios. Estemos atentos!
DINÁMICA PARA LA HOMILÍA:
En el presbiterio habrá una mesa con un gran jarrón vacío. Tras hacer un breve
comentario sobre la imagen de la sed, lo que sugiere, las necesidades fundamentales
que podemos simbolizar con ello, invita a la asamblea a pensar durante 1 minuto en
aquellas necesidades tan importantes para la vida como el agua para el cuerpo
cuando llevamos mucho tiempo sin beber.
A continuación el sacerdote tomará una jarra de agua y un vaso, e invitará a los
asistentes a decir qué vaso de “agua” les gustaría tomar, qué necesidad les gustaría
saciar. Por cada persona que diga algo se llena un vaso de agua y se vierte en el
jarrón de la mesa.
Cuando se haya hecho varias veces en el jarrón quedarán simbolizados nuestros
deseos y necesidades, aquello que más ansía nuestro corazón. Pues bien… todo esto
es lo que Jesús nos puede dar si le seguimos. Jesús es el que puede saciar toda
nuestra sed… y de raíz.
ORACIÓN UNIVERSAL
Señor, Tú que has prometido escuchar a los que te invocan, escucha esta oración
que te presentamos por nosotros y por todos los hombres.
1. Oramos por todos los que hoy formamos la Iglesia: para que estemos atentos a
las necesidades de los nuevos tiempos y sepamos responder a la sed y a las
ansias de los hombres y mujeres de hoy. Oremos: Padre, escúchanos.
2. Pedimos por todos los que sufren la sed de agua y el hambre de pan: para que
por el amor y la solidaridad de todos puedan recobrar la esperanza y vivir con
dignidad y sin angustia. Oremos: Padre, escúchanos.
3.Oramos por todos los jóvenes, particularmente por los que están en algún
proceso de catequesis: para que descubran en Jesucristo la respuesta que
necesitan y lo confiesen como el Señor de su vida. Oremos: Padre,
escúchanos.
4. Pedimos por los que participamos en esta eucaristía en el Día del Señor: para
que en cada celebración tratemos de superar la rutina, la vivamos desde dentro
y la llevemos luego con coherencia a la vida. Oremos: Padre, escúchanos.
Escucha, Padre, nuestra oración y concédenos lo que te hemos pedido, no
apoyadas en nuestros méritos sino confiando en tu bondad. Por Jesucristo, Nuestro
Señor AMÉN.
OFRENDAS

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
Pan
Vino
Cántaro de agua.
Estamos tan acostumbrados a oír expresiones como sed de paz, sed de justicia,
sed de amor, etc... que ya hemos perdido la conciencia de su significado y por eso
nunca nos sentimos saciados, porque acudimos a falsos surtidores para intentar
calmarnos.
Al igual que el PAN y el VINO se convierten en tu Cuerpo y Sangre, verdadero
alimento de Vida, te presentamos Señor este CÁNTARO, en él recogeremos el Agua
que Tú nos das, porque sabemos que en Ti hallaremos la verdadera fuente que
saciará todos nuestros anhelos y deseos de felicidad, paz, esperanza, amor, etc...