CONTRATO DE SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL MÉDICA PRESENTADO POR: MARÍA ELISA MORÓN BAUTE MARÍA FERNANDA RAMIREZ GARCIA PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS BOGOTÁ D.C. 2002 2 TABLA DE CONTENIDO pág. INTRODUCCIÓN 6 CAPITULO I NOCIONES DE RESPONSABILIDAD CIVIL 1. 1.1 1.2 1.2.1 1.2.1.1 1.2.2 1.2.2.1 1.2.3 1.3 1.3.1 1.3.2 1.4 1.4.1 1.4.2 1.5 GENERALIDADES CONCEPTO DE RESPONSABILIDAD ELEMENTOS DE LA RESPONSABILIDAD CIVIL La Culpa Clases de Culpa Contractual El Daño Requisitos del daño El Nexo Causal o Relación de Causalidad FUENTES DE LA RESPONSABILIDAD CIVIL Responsabilidad Civil Contractual Responsabilidad Civil Extracontractual CLASIFICACIÓN Responsabilidad Civil Contractual Responsabilidad Civil Extracontractual DIFERENCIAS ENTRE RESPONSABILIDAD CIVIL CONTRACTUAL Y RESPONSABILIDAD CIVIL EXTRACONTRACTUAL 8 8 8 11 12 13 14 14 15 15 15 17 27 27 28 28 CAPITULO II DE LA RESPONSABILIDAD MÉDICA 2.1 2.1.1 2.2 RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL Noción RESPONSABILIDAD CIVIL MÉDICA 31 31 31 35 3 2.2.1 2.2.2 2.2.3 Noción 35 Antecedentes 44 Responsabilidad Contractual y Responsabilidad Extracontractual del Médico 51 Otras Clases de Responsabilidad en las que Puede Incurrir el Médico 53 RESPONSABILIDAD DE LOS AUXILIARES DE LA MEDICINA 58 REGULACIÓN LEGAL 63 POSICIÓN DE LA JURISPRUDENCIA Y LA DOCTRINA 84 2.2.4 2.3 2.4 2.5 CAPITULO III CONSIDERACIONES GENERALES DEL CONTRATO DE SEGUROS 3. 3.1 3.2 3.2.1 3.2.2 3.2.3 3.2.4 3.3 3.3.1 3.3.2 3.3.3 3.3.4 3.3.5 3.3.6 3.3.7 3.3.8 3.3.9 3.3.10 3.3.11 3.3.12 3.4 3.4.1 3.5 3.5.1 3.5.2 GENERALIDADES NOCIÓN ELEMENTOS ESENCIALES El Interés Asegurable El Riesgo Asegurable La Prima o Precio del Seguro Obligación Condicional del Asegurado CARACTERÍSTICAS Consensual Bilateral Oneroso Aleatorio Ejecución Sucesiva Intuito Personae De Adhesión Mercantil Típico Principal Indivisible De Ubérrima Fe CLASIFICACIÓN Según el Código de Comercio PARTES DEL CONTRATO DE SEGUROS El Asegurador El Tomador 122 122 122 123 124 126 129 131 132 132 133 133 133 134 134 135 135 135 135 135 136 136 136 138 138 139 4 3.6 3.6.1 3.6.2 3.7 OBLIGACIONES QUE NACEN DEL CONTRATO DE SEGUROS Obligaciones a cargo del Tomador, Asegurado o Beneficiario Obligaciones a cargo del Asegurador EXTINCIÓN DEL CONTRATO DE SEGUROS 141 142 153 157 CAPITULO IV CONTRATO DE SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL MÉDICA 4.1 159 SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL 159 4.1.1. Noción 159 4.1.2 Ubicación 160 4.1.3 Ámbito de Aplicación 160 4.1.3.1 Definición de Profesional 161 4.1.3.2 Cobertura del seguro de Responsabilidad Civil Profesional 162 4.1.4 Función del Seguro de Responsabilidad Civil Profesional 164 4.1.5 Siniestro 164 4.1.6 Prescripción 167 4.2 SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL MÉDICA 169 4.2.1 Noción 169 4.2.2 Relación entre Responsabilidad Civil Médica y el Seguro de Responsabilidad Civil Médica 170 4.2.3 El Aseguramiento del Médico 172 4.2.4 Partes del Contrato de Seguro 176 4.2.5 Relación entre las Partes del Contrato de Seguro 177 4.2.6 Elementos 179 4.2.6.1 El Riesgo Asegurable 180 4.2.6.1.1 La Conducta Asegurable 182 4.2.6.1.1.1Clases de Conductas Asegurables 182 4.2.6.1.1.2 Conductas no Asegurables 185 4.2.6.1.1.3 Culpa Grave como Caso Especial 186 4.2.6.1.2 El Daño Asegurable en la Responsabilidad Civil Médica 189 4.2.6.1.3 Nexo Causal 192 4.2.6.2 El Interés Asegurable 193 4.2.6.3 Prima o Precio del Seguro 195 4.2.6.4 Obligación Condicional del Asegurado 198 4.2.7 Elementos Especiales del Aseguramiento Médico 200 4.2.8 Delimitación Temporal de la Cobertura del Seguro 203 5 4.2.8.1 Criterios de Delimitación Temporal 205 4.2.8.1.1 Criterio del Hecho Generador o Causal 205 4.2.8.1.2 Criterio de la Ocurrencia del Daño 206 4.2.8.1.3 Criterio de la Reclamación 206 4.2.8.1.3.1 Cláusula Claims Made 207 4.2.8.1.3.2 Cláusula Mixta 207 4.2.8.1.3.3 Cláusula Claims Made con Cláusula de Retroactividad 207 4.3 SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL MÉDICA EN OTROS PAÍSES 209 4.3.1 Estados Unidos de América 210 4.3.2 España 213 4.3.3 Francia 216 4.3.4 Bélgica 217 4.3.5 Canadá 218 4.3.6 Argentina 221 4.3.7 Brasil 223 4.3.8 Chile 225 4.3.9 Uruguay 227 4.3.10 Paraguay 229 CONCLUSIONES 231 ANEXOS 234 BIBLIOGRAFIA 251 6 INTRODUCCION La responsabilidad que puede derivarse de las diferentes actuaciones profesionales y el desarrollo de un mecanismo efectivo para evitar un eventual detrimento patrimonial derivado de la obligación de indemnizar todos los perjuicios que el profesional haya ocasionado en el ejercicio de su oficio, son preocupaciones importantes del mundo moderno no solo por las implicaciones sociales que plantea sino por las diversas posibilidades de aplicación. En nuestro ordenamiento jurídico privado existe una herramienta diseñada para proteger el patrimonio frente a amenazas de acciones judiciales por actuaciones profesionales: Se trata del contrato de responsabilidad civil profesional, que en el caso de los profesionales de la salud presenta características especiales en razón a que el ejercicio médico se da en un esquema de relación jurídica con el paciente, en donde el paciente es poseedor de una serie de derechos derivados de su dignidad de ser humano, y al mismo tiempo es poseedor de derechos como consumidor que demanda servicios de salud. De otra parte, los profesionales de la salud están advertidos de la problemática que los afecta y tienen mayor conciencia de los 7 peligros a que se exponen cuando trabajan sin un seguro de responsabilidad profesional. Estas consideraciones justifican plenamente la existencia de un seguro de responsabilidad médica y plantea la necesidad de modernizar la legislación colombiana en el tema. La metodología utilizada en el presente trabajo de tesis consistió en estudiar de manera general la responsabilidad civil y el contrato de seguro para luego profundizar en la responsabilidad médica y su aseguramiento. El desarrollo por capítulos se presenta de la siguiente manera: El primer capítulo examina los conceptos generales de la responsabilidad civil; el segundo capítulo profundiza en la responsabilidad civil médica; el tercer capítulo ilustra algunas consideraciones del contrato de seguro, y el último capítulo desarrolla los aspectos más importantes del seguro de responsabilidad civil médica. Esperamos que este trabajo de tesis sirva como medio de consulta básico para aquellas personas interesadas en el tema, pues recoge los conceptos y criterios actualizados que se están aplicando en el mundo sobre el contrato de responsabilidad civil médica. Por último, queremos invitar a las personas con experiencia relacionada a enriquecer el presente trabajo con base en el conocimiento que tienen de la realidad colombiana, para que en el futuro inmediato pueda cumplir sus cometidos de beneficio académico y social. 8 CAPITULO I NOCIONES DE RESPONSABILIDAD CIVIL 1. GENERALIDADES A continuación se estudiará el tema de la Responsabilidad Civil, de una manera general debido a que no es el principal objetivo de este trabajo. propósito de este capítulo es El ubicar al lector dentro del marco de la Responsabilidad Civil, para luego, abordar el tema de la Responsabilidad Civil Profesional y su correspondiente Seguro. 1.1 Concepto de Responsabilidad Civil La responsabilidad, según el Diccionario de la Lengua Española, es “la obligación de reparar y satisfacer un daño”. El término responsabilidad implica una relación entre personas, una que causa un daño y otra que lo sufre. El daño puede ser patrimonial, por ejemplo, en los bienes del individuo; o en su persona, libertad, honor, afectos, creencias, donde se estaría frente al daño extrapatrimonial. 9 La responsabilidad se divide en: Responsabilidad Moral. Responde a tendencias religiosas o espirituales, donde Dios y la conciencia son patrones determinantes, este tipo de responsabilidad es una noción puramente subjetiva, es una responsabilidad interior. Para determinar la existencia de responsabilidad moral hay que analizar el estado anímico de la persona, tal como lo expresan los autores Henri y León Mazeaud en su libro Tratado Teórico y Práctico de la Responsabilidad Civil Delictual y Contractual. El problema de la responsabilidad moral es el pecado. Se es responsable moralmente cuando, ante Dios, si es creyente, y ante la propia conciencia tan sólo, si se es ateo, se debe responder por un acto o una abstención. “Ahora bien, Dios y la conciencia nada reprochan al que ha obrado de buena fe y con suficiente atención; ése no es responsable moralmente”.1 Responsabilidad Jurídica. Es la obligación que tiene una persona de reparar un daño que le ha causado a otro. La responsabilidad en términos jurídicos trasciende al campo externo de la persona, en donde la conciencia pierde importancia y se responde por hechos, actos o conductas que atentan contra el orden social o que causan peligro. 1 MAZEAUD, Henri y León. Tratado teórico y Práctico de la Responsabilidad Civil Delictual y Contractual. Buenos Aires: Ediciones Jurídicas Europa-América, 1961. p. 4 10 La responsabilidad jurídica a su vez se divide en: Responsabilidad Penal. Es la obligación de asumir las consecuencias jurídicas que resultan de la violación de bienes jurídicamente tutelados por la ley penal. La misma ley penal determina las conductas generadoras de responsabilidad penal y sus respectivas sanciones. Según el Diccionario Básico de Términos Jurídicos Legis, la Responsabilidad Penal “es el sometimiento del autor o participe de un hecho punible a las consecuencias jurídicas de la infracción de la ley penal. Se es penalmente responsable cuando por acción u omisión se ha realizado una conducta delictiva o contravencional.”2 Responsabilidad Civil. “Es la obligación de reparar el daño causado a una persona, sea por culpa, sea, en ciertos casos determinados por la ley, por el riesgo resultante de la actividad del responsable.”3 La responsabilidad civil supone la existencia de un daño que una persona causa a otra, en donde la víctima podrá únicamente pedir la reparación de ese daño en particular. Consagración Legal. Artículo 2341 Código Civil Colombiano define la responsabilidad civil extracontractual como: “El que ha cometido un delito o 2 MADRID-MELO G., Mario. Editorial Legis, 1994. p. 457 3 Diccionario Básico de Términos Jurídicos. Bogotá: CAPITANT, Henri. Vocabulario Jurídico. Buenos Aires: Ediciones Depalma, 1961. p. 489 11 culpa, que ha inferido daño a otro, es obligado a la indemnización, sin perjuicio de la pena principal que la ley imponga por culpa o delito cometido”. En los artículos 1602 y siguientes del C. C, se regula el tema de la responsabilidad civil contractual. Artículo 1604 hace referencia a la responsabilidad civil contractual: “El deudor no es responsable sino de la culpa lata en los contratos que por su naturaleza solo son útiles al acreedor; es responsable de la leve en los contratos que se hacen para beneficio recíproco de las partes; y de la levísima en los contratos en que el deudor es el único que reporta beneficio. El deudor no es responsable del caso fortuito, a menos que se haya constituido en mora (siendo el caso fortuito de aquellos que no hubieran dañado a la cosa debida, si hubiese sido entregada al acreedor), o que el caso fortuito haya sobrevenido por su culpa. La prueba de la diligencia o cuidado incumbe al que ha debido emplearlo; la prueba del caso fortuito al que lo alega. Todo lo cual, sin embargo, se entiende sin perjuicio de las disposiciones especiales de las leyes, y de las partes.” 1.2 Elementos de la responsabilidad civil Los elementos que resultan de la responsabilidad civil ya sea contractual o extracontractual, son tres: la culpa, el daño o perjuicio y el nexo causal entre culpa y daño. 12 1.2.1 La culpa: Este elemento lo han definido varios autores. Planiol, la define: “es la violación de una obligación preexistente”.4 Colin y Capitant precisan que: “la culpa no es otra cosa que un error de conducta, una falta de actitud que normalmente se precisa según el tipo abstracto del hombre recto y seguro de sus actos”.5 Ripert, dice que: “todo atentado a la integridad de la persona o de su patrimonio, constituye culpa”.6 Para los hermanos Mazeaud, la culpa es “un error de conducta en que no habría incurrido una persona advertida y prudente, colocada en las mismas circunstancias externas en que obro el autor del daño”7 Para Rafael Duran Trujillo la culpa es: “el acto imprudente de acción o abstención que causa un perjuicio”.8 “La culpa y la inejecución en los contratos, son dos conceptos distintos, en donde la primera es un elemento de la responsabilidad extra contractual y la segunda es tenida como un requisito esencial de la responsabilidad en los contratos. La culpa hace pues relación a la acción o abstención causados por 4 El autor hace mención en su obra a la definición de Planiol. DURAN, Trujillo Rafael. Nociones de responsabilidad civil. Bogotá D.C.: Temis. 1957 p. 66 5 El autor hace mención en su obra a la definición de Colin y Capitant. DURAN, Trujillo. Ob. Cit. p. 66 6 El autor hace mención en su obra a la definición de Ripert. DURAN, Trujillo. Ob. Cit. p. 66 7 MAZEAUD Henri y León y Tunc André. Tratado Teórico y Práctico de la Responsabilidad Civil delictual y Contractual. Tomo I, Vol. I. Buenos Aires. 1977. p. 52 8 DURAN, Trujillo Rafael. Nociones de responsabilidad civil. Bogotá D.C.: Temis. 1957. p. 67 13 un error de conducta, la inejecución se refiere a la culpa y al perjuicio. La inejecución es un fenómeno objetivo, material y la culpa es un acto conciente que depende de la voluntad del causante.”9 1.2.1.1 Clases de culpa contractual En materia de culpa contractual el artículo 63 del Código Civil Colombiano acoge una división tripartita. Divide la culpa en culpa grave, culpa leve y culpa levísima: “La ley distingue tres especies de culpa o descuido. Culpa grave, negligencia grave, culpa lata, es la que consiste en no manejar los negocios ajenos con aquel cuidado que aun las personas negligentes o de poca prudencia suelen emplear en sus negocios propios. Esta culpa en materias civiles equivale al dolo. Culpa leve, descuido leve, descuido ligero, es la falta de aquella diligencia y cuidado que los hombres emplean ordinariamente en sus negocios propios. Culpa o descuido, sin otra calificación, significa culpa o descuido leve. Esta especie de culpa se opone a la diligencia o cuidado ordinario o mediano. El que debe administrar un negocio como un buen padre de familia, es responsable de esta especie de culpa. Culpa o descuido levísimo es la falta de aquella esmerada diligencia que un hombre juicioso emplea en la 9 DURAN, Trujillo. Ob. Cit. P. 67 14 administración de sus negocios importantes. Esta especie de culpa se opone a la suma diligencia y cuidado.”10 El daño: Es el menoscabo a una facultad jurídica11 de un tercero, que 1.2.2 lo priva total o parcialmente de un derecho patrimonial. Para que nazca la obligación de indemnizar derivada de un contrato, se requiere no sólo el incumplimiento del deudor sino un perjuicio causado por ese incumplimiento. 1.2.2.1 Requisitos del daño El daño o perjuicio debe reunir ciertos requisitos para que sea objeto de indemnización o reparación pecuniaria y para que sea estimado como tal. El daño debe ser cierto, actual y directo. Debe ser Cierto: “El perjuicio es cierto, cuando aparece consumado y • definitivo, efectivo y real en el momento de liquidarse.”12 La certeza del daño debe ser absoluta, para que el daño sea resarcible. 10 Artículo 63 Código Civil Colombiano 11 Facultad Jurídica: Es toda posibilidad de obrar, que tiene una persona en el derecho privado y que es permitida por la ley. 12 DURAN Trujillo, Ob. Cit., p.91 15 Debe ser actual: “El perjuicio debe ser actual y también puede ser • futuro, pero debe haber certeza del daño. La actualidad del perjuicio hace relación a su existencia en el pasado y en el presente.”13 Debe ser directo: • El perjuicio debe tener como única causa el incumplimiento de un contrato. 1.2.3 El nexo causal o relación de causalidad Entre el motivo de la inejecución del contrato y el perjuicio o daño causado, debe existir una causalidad directa para que pueda configurarse responsabilidad civil contractual o extracontractual. 1.3 Fuentes de la Responsabilidad Civil 1.3.1 Responsabilidad Civil Contractual La fuente de la responsabilidad civil contractual es el incumplimiento de las obligaciones emanadas de un contrato y que además genere un daño al acreedor; para determinar el alcance de la obligación del deudor y su incumplimiento, se acude al criterio propuesto por el Demogue, que distingue entre obligaciones de medios 13 DURAN Trujillo, Ob. Cit. p. 91 tratadista René (obligationes de 16 moyens) y las obligaciones de resultado (de rèsultat). La clasificación de obligaciones de medios y de resultados es conocida desde hace muchos años por la jurisprudencia colombiana, en cabeza de la Corte Suprema de Justicia con la Sentencia del 5 de Marzo de 1940 y luego reiterada en Sentencia del 12 de septiembre de 1985. “Esta clasificación se endereza a determinar cuándo hay o no inejecución de obligaciones y el papel que desempeña el caso fortuito, cuestiones estas que son fundamentales para valorar la responsabilidad que compete al deudor por la referida inejecución.”14 1.3.1.1 Las Obligaciones de Medios Una obligación es de medios “cuando el deudor solamente ha de poner éstos con la diligencia requerida para el logro de un resultado cuya realización él no garantiza.”15 Un ejemplo de obligaciones de medios es la del médico, el particular acude a su consultorio, con la esperanza de obtener su curación, el galeno debe cuidar a su paciente sin que tenga que responder por la curación de este, el resultado no se puede garantizar. 14 OSPINA, Ferandez Guillermo. Régimen General de las Obligaciones. Bogotá D.C.: Editorial Temis. 1988. p. 27. 15 OSPINA, Fernández. Ob. Cit. p. 27 17 1.3.1.2 Las Obligaciones de Resultado Una obligación es de resultado “cuando la obtención de este queda incluida en el objeto de aquella.”16 Es el caso del vendedor, que tiene la obligación de dar la cosa vendida, en un contrato de compraventa. El tratadista Demogue introdujo esta clasificación, con base en la consideración del objeto de cada contrato. En este sentido, si el objeto existe o se espera que exista, el deudor puede obligarse a un resultado: Dar, hacer o no hacer algo. 1.3.2 Responsabilidad Civil Extracontractual La doctrina y la jurisprudencia colombiana, guiados por los textos positivos que regulan este tema, han estipulado como fuentes de la responsabilidad civil extracontractual las siguientes: 1.3.2.1 Por el hecho propio “Es el hecho directo producto de la actividad personal de los individuos.”17 O como lo expresa el tratadista Guillermo Martínez Rave: “Es la consagración del antiguo y determinante principio del derecho <quien causa un daño debe indemnizarlo>”. 16 17 La responsabilidad civil extracontractual originada por el OSPINA, Fernández. Ob. Cit. p. 27 SANTOS, Ballesteros Jorge. Instituciones de responsabilidad civil. Tomo I. Bogotá D.C.: Javegraf, 1996. p.156 18 Hecho Propio, se le conoce como responsabilidad personal y se le ha llamado también responsabilidad civil extracontractual simple, para distinguirla de la responsabilidad que se causa en el hecho de ajeno o por el hecho de las cosas, que se clasifican dentro de la responsabilidad civil extracontractual compleja. La responsabilidad civil extracontractual originada por el Hecho Propio se encuentra regulado en los artículos 2341 y 2345 del Código Civil Colombiano. Del primer artículo en mención18 se infieren los elementos de la responsabilidad civil por el hecho propio o responsabilidad directa. Los elementos son: • Daño • Culpa • Nexo Causal La consecuencia normal para todo aquel que ha cometido delito o culpa infiriendo daño a otro, es la obligación de indemnizar a la victima, quien tendrá la carga probatoria de demostrar la culpa del deudor o causante del daño, porque ésta no se presume, y probar también el daño y el nexo causal. El Artículo 2343 del C.C. consagra la transmisibilidad de la responsabilidad personal, haciendo civilmente responsable, no sólo al sujeto o sujetos que 18 Artículo 2341 Código Civil Colombiano: “El que ha cometido un delito o culpa, que ha inferido daño a otro, es obligado a la indemnización, sin perjuicio de la pena principal que la ley imponga por culpa o delito cometido”. 19 causaron el daño, sino que instituye expresamente la transmisibilidad de la responsabilidad a sus herederos.19 En la responsabilidad civil extracontractual causada por el hecho propio, el régimen aplicable de responsabilidad es el de la Culpa Probada, es decir, para que se constituya este tipo de responsabilidad el perjudicado debe probar la culpa del causante “y cuando ésta no se da, se rechaza o se desconoce la solicitud del perjudicado sobre la correspondiente indemnización.”20 Este régimen es aceptado por la doctrina y la jurisprudencia colombiana, basados en el análisis del articulo 2341 de nuestro Código Civil. 1.3.2.2 Por el hecho ajeno Es el hecho producto de la actividad de terceros, con respecto a los cuales existe una relación de dependencia o cuidado. Es denominado también responsabilidad civil extracontractual por el hecho de terceros. Su consagración legal se encuentra en los artículos 2346, 2347, 2348, 2349 y 2352 del Código Civil Colombiano, en donde los artículos 2347, 2348 y 2349 establecen algunos casos, que según la doctrina colombiana, tienen carácter enunciativo. 19 Artículo 2341 Código Civil Colombiano: “Es obligado a la indemnización el que hizo el daño y sus herederos...” 20 MARTINEZ Rave, Gilberto. La responsabilidad civil extracontractual en Colombia. Medellín: Editorial Diké. 1993. p. 167 20 Casos: Artículo 2347: “Toda persona es responsable no sólo de sus propias acciones para el efecto de indemnizar el daño, sino del hecho de aquellos que estuvieren a su cuidado. Así, los padres son responsables solidariamente del hecho de los hijos menores que habiten en la misma casa. Así el tutor o curador es responsable de la conducta del pupilo que vive bajo su dependencia y cuidado. Así, los directores de los colegios y escuelas responden del hecho de los discípulos mientras están bajo su cuidado, y los artesanos y empresarios del hecho de sus aprendices o dependientes, en el mismo caso. Pero cesará la responsabilidad de tales personas si con autoridad y el cuidado que su respectiva calidad les confiere y prescribe, no hubieren podido impedir el hecho.” Artículo 2348: “Los padres serán siempre responsables del daño causado por las culpas o los delitos cometidos por sus hijos menores y que conocidamente provengan de mala educación o de hábitos viciosos que les han dejado adquirir.” Artículo 2349: “Los amos responderán del daño causado por sus criados o sirvientes, con ocasión del servicio prestado por éstos a aquellos; pero no responderán si se probare o apareciere que en tal ocasión los criados o sirvientes se han comportado de un modo impropio que los amos no tenían 21 medio de prever o impedir empleando el cuidado ordinario y la autoridad competente; en este caso recaerá toda responsabilidad del daño sobre dichos criados o sirvientes.” El fundamento de la responsabilidad por el hecho ajeno o responsabilidad indirecta es la violación de una obligación de vigilancia o cuidado por parte de la persona que va a responder. La conducta o hecho de un tercero vincula al responsable porque existe una garantía ante el perjudicado, quien no esta obligado a arrogarse las consecuencias patrimoniales de hechos cometidos por terceros. “La persona encargada de la vigilancia o cuidado de otras, garantiza que los daños ocasionados por éstas, serán indemnizados.”21 En la responsabilidad civil extracontractual causada por el hecho ajeno, el régimen de responsabilidad aplicable es el de la presunción de Culpa, ésta presunción está en favor del perjudicado porque no tiene que probar la culpa ya que esta se presume. Para desvirtuar la presunción de culpa, basta que el responsable pruebe la debida diligencia exigida. No es necesario romper el nexo causal. 1.3.2.3 Por el hecho de las cosas Es el hecho de las cosas animadas o inanimadas, sobre las cuales hay una obligación de custodia o guarda. “En este tipo de responsabilidad no está 21 MARTINEZ Rave. Ob.. Cit. P. 173 22 presente esa vinculación del sujeto responsable con una actividad personal suya”22. “Se menciona hecho de las cosas por cuanto el término hecho señala una actividad material, no referida a ninguna voluntad o elemento subjetivo incluido en el término acto. Por lo tanto los hombres pueden ejecutar hechos o actos, en cambio los animales y las cosas solamente hechos.”23 Los dueños de las cosas deben responder por los daños que con ellas se produzcan, debido a que éstos, si bien tienen derechos y prerrogativas, asi mismo tienen la responsabilidad en todos los hechos dañosos que con ellas se causen. Su regulación se encuentra en los artículos 2350, 2351, 2353, 2354, 2355 y 2356 Código Civil Colombiano, en donde la ley establece una lista de casos, en los cuales puede originarse responsabilidad y que pueden clasificar en dos grupos: Responsabilidad que nace por los hechos de las cosas animadas • En este grupo se hace referencia al hecho de los animales, los cuales tienen vida y capacidad para desplazarse y actuar sin necesidad de mediación u órdenes del hombre. 22 SANTOS. Ob. Cit., p. 157 23 MARTINEZ Rave. Ob.. Cit. P. 193 23 Los animales se han dividido en dos categorías: 1- Los animales domésticos: “entendiendo por tales aquellos que han sido puestos por el hombre a su servicio y que le prestan utilidad.”24 Nuestra legislación en el artículo 2353 del C.C. regula la responsabilidad generada por los hechos de los animales domésticos. 2- Los animales fieros o salvajes: “ entendiendo por tales aquellos que no han sido domesticados y por lo tanto no son dominados por el hombre.”25 El Código Civil Colombiano en el Artículo 2354 hace referencia a la responsabilidad generadapor los hechos de estos animales. Artículo 2353: “El dueño de un animal es responsable de los daños causados por el mismo animal, aún después que se haya soltado o extraviado, salvo que la soltura, extravío o daño no puedan imputarse a culpa del sueño o del dependiente encargado de la guarda o servicio del animal. Lo que se dice del dueño se aplica a toda persona que se sirva de un animal ajeno; salva su acción contra el dueño si el daño ha sobrevivido por una calidad o vicio del animal, que el dueño con mediano cuidado o prudencia, debió conocer o prever, y de que no le dio conocimiento.” 24 MARTINEZ Rave. Ob.. Cit. P. 197 25 MARTINEZ Rave. Ob.. Cit. P. 197 24 Artículo 2354: “El daño causado por un animal fiero, del que no se reporta utilidad para la guarda o servicio de un predio, será siempre imputable al que lo tenga; y si alegare que no le fue posible evitar el daño, no será oído.” Responsabilidad que nace por los hechos de las cosas inanimadas • Las cosas inanimadas, no tienen vida, ni capacidad de moverse por si solas; tienen que ser impulsadas y actuar por disposición del hombre. “En el caso de las cosas inanimadas, se ha hecho una división que permite estudiar independientemente lo que sucede con daños ocasionados por ruina de edificios o cosas que caen de ellos y los que son ocasionados por otras cosas.”26 Daños ocasionados por la ruina de edificios Artículo 2350 “El dueño de un edificio es responsable de los daños que ocasione su ruina, acaecida por haber omitido las reparaciones necesarias, o por haber faltado de otra manera al cuidado de un buen padre de familia. No habrá responsabilidad si la ruina acaeciere por caso fortuito, como avenida, rayo o terremoto. Si el edificio perteneciere a dos o más personas pro indiviso, se dividirá entre ellas la indemnización, a prorrata de sus cuotas de dominio.” 26 MARTINEZ Rave. Ob.. Cit. P. 199 25 Artículo 2351 “Si el daño causado por la ruina de un edificio proviniere de un vicio de construcción, tendrá lugar la responsabilidad prescrita en la regla 3ª del art. 2060 27” Responsabilidad por las cosas que caen de un edificio. Artículo 2355 “El daño causado por una cosa que cae o se arroja de la parte superior de un edificio, es imputable a todas las personas que habitan la misma parte del edificio y la indemnización se dividirá entre todas ellas, a menos que se pruebe que el hecho se debe a culpa o mala intención de alguna persona exclusivamente, en cuyo caso será responsable esta sola.” En la responsabilidad civil extracontractual causada por el hecho de las cosas, se le aplica el régimen de presunción de Responsabilidad. presumen En donde se la culpa y el nexo causal, pero el presunto responsable podrá liberarse si desvirtúa el nexo causal demostrando una causal de exoneración, que son fuerza mayor, caso fortuito, culpa exclusiva de la víctima o el hecho de un tercero. 27 Artículo 2060 C.C., regla 3ª: “si el edificio perece o amenaza ruina en todo o en parte, en los diez años subsiguientes a su entrega, por vicio de la construcción o por vicio del suelo que el empresario o las personas empleadas por él hayan debido conocer en razón de su oficio, o por vicio de los materiales, será responsable el empresario; si los materiales han sido suministrados por el dueño, no habrá lugar a la responsabilidad del empresario sino en conformidad al artículo 2041, inciso final”. El articulo que debió citarse es el 2357. 26 1.3.2.4 Por actividades peligrosas Esta regulada por el artículo 2356 del Código Civil Colombiano28-29 Toda actividad social lleva implícita la posibilidad del riesgo o peligro para los asociados, pero esto no implica que este tipo de actividad quede enmarcada dentro de las actividades peligrosas. La actividad peligrosa es aquella en donde el peligro virtual se manifiesta y exterioriza al generarse un proceso propio y espontáneo que escapa a todo control del hombre, en donde puede existir un peligro eventual. “ La actividad peligrosa para que sea así considerada exige una apreciable, intrínseca y objetiva posibilidad de causar un daño, en donde la peligrosidad debe existir con anterioridad a la generación del perjuicio, ya que lo que se mide es la conducta humana que no sopesa el peligro”.30 “La responsabilidad por el hecho de otro y la responsabilidad por el hecho de las cosas, dentro de la cual se encuentra la responsabilidad por actividades peligrosas, son excepcionales por no provenir el daño de la actividad personal 28 Artículo 2356 Código Civil Colombiano: “Por regla general todo daño que pueda imputarse a malicia o negligencia de otra persona, debe ser reparado por ésta. Son especialmente obligados a esta reparación: 1º El que dispara imprudentemente un arma de fuego; 2º El que remueve las losas de una acequia o cañería........ 3ª El que obligado a la construcción o reparación de un acueducto.....” 29 En sentencia de Casación Civil. 29 de agosto de 1986. G.J. Tomo CLXXXIV. Nº 2423, pp. 231, la jurisprudencia ha establecido que el texto legal hace una referencia implícita a cualquier actividad que se repute peligrosa. Los numerales de este artículo son ejemplos de actividades peligrosas no taxativos. 30 SANTOS. Ob. Cit., p. 159 y 160 27 de los individuos sino de presunciones de culpa que la ley establece contra la persona responsable: «la ley presume la culpa de ésta, sin la cual el daño no se hubiera cometido»”.31 En el caso de las actividades peligrosas, el régimen de responsabilidad aplicable es el de Presunción de responsabilidad, donde el responsable solamente se exonera demostrando caso fortuito, fuerza mayor, culpa exclusiva de la víctima o hecho de un tercero. 1.4 Clasificación La responsabilidad jurídica civil se clasifica en responsabilidad civil contractual y responsabilidad civil extracontractual. Esta clasificación tradicional ha prevalecido durante mucho tiempo, pero ahora intenta entrar en crisis, pues los elementos constitutivos y sus diferencias tienden a desaparecer, y a demás es cuestionada, en la medida que lo importante es que los daños causados a la víctima sean reparados en su totalidad; sin importar el tipo de responsabilidad de que se trate. 1.4.1 Responsabilidad Civil Contractual. “Es aquella que resulta por el incumplimiento total o parcial de la obligación nacida de un contrato.”32 31 32 SANTOS. Ob. Cit., p. 156 MADRID-MALO G. Ob. Cit. p 457 28 Si el deudor incumple con su obligación o la cumple indebidamente, puede causar un daño a su acreedor o contratante y en este caso surgirá para el deudor o causante del daño una nueva obligación: Reparar el daño causado por su incumplimiento. 1.4.2 Responsabilidad Civil Extracontractual. “Es aquella responsabilidad en que incurre una persona por todo daño que cause a otra por su culpa, negligencia o imprudencia”33 En este caso el causante adquiere la obligación de indemnizar patrimonialmente a la persona perjudicada con el hecho dañoso y cabe anotar que entre el causante y el perjudicado no existe ninguna relación jurídica anterior. Este tipo de responsabilidad se conoce también como responsabilidad delictual. 1.5 Diferencias entre responsabilidad civil contractual y responsabilidad civil extracontractual. 1.5.1 Según el vínculo jurídico: En la responsabilidad civil contractual, existe un vínculo jurídico contractual previo entre las partes. 33 CAPITANT, Henri. Ob. Cit. p 489 29 En la responsabilidad civil extracontractual, no existe ningún vínculo jurídico anterior entre el causante del daño y la víctima; éste se crea cuando se produce el daño derivado del delito. 1.5.2 Según a la constitución en mora: La mora es el retardo culposo en el cumplimiento de una obligación. El principio general en la responsabilidad civil contractual, “es menester constituir en mora al deudor para que pueda demandársele indemnización de perjuicios, a menos que la obligación sea de no hacer, en cuyo caso aquélla se debe desde el momento de la contravención.”34 En la responsabilidad civil extracontractual, el deudor no debe constituirse en mora, porque es innecesaria; debido a que el incumplimiento del deber jurídico genera un perjuicio en la víctima, y su autor está en mora de indemnizar el perjuicio de pleno derecho. 1.5.4 Según la culpa: De acuerdo con lo establecido en el artículo 1604 del Código Civil Colombiano, en la responsabilidad civil contractual, “la culpa admite graduaciones, se 34 ALESSANDRI, Rodríguez Arturo. De la Responsabilidad Civil Extracontractual en el Derecho Civil. Santiago: Imprenta Universal. 1891. p. 49 30 distinguen culpa grave, culpa leve y culpa levísima” y la responsabilidad se determinará según el beneficio que las partes obtienen del contrato, así: • Culpa grave: en donde la utilidad es sólo para el acreedor. Por ejemplo el contrato de depósito. • Culpa leve: la utilidad o beneficio es para la dos partes, es recíproca. Por ejemplo el contrato de compraventa. • Culpa levísima: el deudor es el único que reporta utilidad. Por ejemplo el contrato de comodato. En la responsabilidad civil extracontractual, hay un solo grado de culpa entendida como: “error de conducta en la que no hubiera incurrido una persona prudente y diligente, colocada en las mismas condiciones del autor del daño”. 31 CAPITULO II DE LA RESPONSABILIDAD MÉDICA 2.1 RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL 2.1.1 Noción Antes de entrar a definir concretamente qué es la responsabilidad civil profesional, es conveniente precisar qué es un profesional. Profesional: Según los hermanos Mazeaud, profesional “es aquella persona que frente a la sociedad realiza una actividad habitual y presta y ofrece sus servicios. El profesional, es una persona dotada de conocimientos, pericias o saberes que, por lo habitual, están respaldados por la ostentación de un título acreditativo de la idoneidad para el desempeño de su función”.35 “Cuando con su conducta profesional, el titulado ocasiona un daño que afecta el patrimonio material y moral de una persona asume la responsabilidad civil, 35 MARTINEZ-CALCERRADA, Luis. La responsabilidad civil profesional. Editorial Colex. 1999. p. 21. Madrid: 32 que no es más que la obligación de indemnizar, compensar patrimonialmente, todos los perjuicios que con su conducta haya ocasionado el profesional en el ejercicio de su oficio”.36 O como lo expresa Luis Martínez – Calcerrada: “la responsabilidad civil profesional, cuyo nomen aboca, sin más, a la que contraen o se atribuye a aquellas personas que en el ejercicio de su quehacer profesional y, precisamente por eso, incurren en un ilícito o infringen un precepto que produce consecuencias perjudiciales para una persona.”37 La responsabilidad civil del profesional, se compromete cuando se incumple con un deber jurídico a su cargo que trae como consecuencia un daño; es importante, determinar frente a cada actividad los deberes jurídicos a cargo del profesional, para así establecer los daños y el alcance de la responsabilidad que conlleva el incumplimiento de los mismos. La responsabilidad civil profesional puede ser contractual o extracontractual. Será contractual, si las consecuencias del hecho se suscitan por el incumplimiento o el cumplimiento tardío o inoportuno de un contrato de prestación de servicios. El profesional al celebrar un contrato de prestación de servicios, se compromete con el cliente a cumplir las obligaciones derivadas del mismo, ya sean las que expresamente se pactaron o las que son de la naturaleza del contrato y se entienden incorporadas así no se indiquen 36 MARTINEZ Rave, Ob. Cit. p.487 37 MARTINEZ-CALCERRADA. Ob. Cit. p. 22 33 expresamente, como también lleva implícitas las obligaciones esenciales de cada actividad profesional. Por regla general, las obligaciones contractuales que adquieren los profesionales son obligaciones de medio, es decir que no exigen la obtención un resultado exitoso de las gestiones o actividades profesionales. Los profesionales se comprometen a poner todos sus conocimientos, habilidades y experiencias, pero no se comprometen a obtener un resultado con las gestiones. El acto médico se cumple a cabalidad siempre que el médico haga lo correcto (sin importar si alcanza el resultado querido), o lo incumple si no actúa con la propiedad que la ciencia exige. La diferencia existente entre la obligación de medios y obligaciones de resultados constituye el criterio que se usa para determinar cuál es el alcance de la obligación a cargo del deudor. En consecuencia, permite determinar cuándo hay incumplimiento. El incumplimiento constituye el hecho o acto culpable que debe acreditarse al igual que el daño y nexo causal para que se genere Responsabilidad Civil. En las obligaciones de resultado, habría incumplimiento cuando no se obtenga resultado, esto hace compromiso y presumir la responsabilidad de quien adquirió el por tanto el perjudicado se liberaría de la carga procesal de demostrar la culpa del causante del daño. En este caso el deudor debe responder por la indemnización; en el caso de las obligaciones de medio si no se obtiene el resultado esperado no habría incumplimiento no teniendo el 34 deudor el deber responder en todos los casos por la indemnización, debido a que éste se puede exonerar de ella demostrando diligencia y cuidado. El médico se compromete a emplear todos los medios a su alcance para efectuar un procedimiento (médico o quirúrgico), actuando con apoyo en sus conocimientos, su adiestramiento técnico y su diligencia y cuidado personal para curar o aliviar los efectos de la enfermedad, sin poder garantizar los resultados, previa advertencia de los posibles riesgos y complicaciones inherentes al mismo. La responsabilidad civil profesional será extracontractual, cuando por cualquier evento, no existe un acuerdo de voluntades con el cliente38 o con sus parientes para la prestación del servicio. Un ejemplo puede ser el abogado que tiene que atender una defensa de oficio que es impuesta por un funcionario público sin que medie la voluntad del defendido. 38 Que en la mayoría de los casos es paciente, al ser tan frecuentes los casos en que los médicos tiene que pestar sus servicios de urgencia a personas que llegan en estado de inconciencia o cuando son llevados por nnterceros que no tienen ninguna relación con ellos. 35 2.2 RESPONSABILIDAD CIVIL MÉDICA 2.2.1 NOCIÓN Como lo expresa el autor Gilberto Martínez Rave, en su libro “La responsabilidad Civil Extracontractual en Colombia” El ACTO PROFESIONAL, “es la conducta profesional que genera el resultado dañoso, es el hecho generador de responsabilidad; ya sea contractual o extracontractualmente.”39 El hecho generador de responsabilidad en la actividad médica es conocido como ACTO MEDICO, que puede darse por acción o por omisión. El acto médico comprende todas aquellas actividades que profesionalmente deben cumplirse en relación con la atención que debe brindarse al paciente y se define como: “una forma especial de relación entre personas; por lo general una de ellas, el enfermo, acude motivada por una alteración en su salud a otra, el médico, quien está en capacidad de orientar y sanar, de acuerdo a sus capacidades y al tipo de enfermedad que el primero presente.”40 La Corte Suprema de Justicia en 1985 señalo: “ ... cuando de responsabilidad civil se trate por ejercicio profesional de medico, ella puede ser contractual cuando se origina en el cumplimiento de un contrato, o extracontractual si nace de un hecho que perjudica a otro sin que exista vinculo jurídico entre quien causa el daño y quien lo sufra, debiéndose en ambas situaciones responder 39 40 MARTINEZ Rave. Ob.. Cit. P. 112 GUZMÁN, Mora Fernando. El acto médico: consideraciones esenciales. Tomado de la página en Internet: http://www.medspain.com/ant/n10_mar00/Actomed.htm. 36 por la conducta irregular, igual que en todos los campos de la actividad humana”. La Ley 23 de 1981 por la cual se dictan normas en materia de ética medica, establece en su articulo quinto “que la relación medico paciente se cumple por decisión voluntaria y espontánea de ambas partes, por acción unilateral del medico en caso de emergencia, por solicitud de tercera persona o por haber adquirido el compromiso de atender a personas que están a cargo de una entidad privada o publica”. “Igualmente cabe señalar que los elementos de la responsabilidad, es decir la conducta, el daño y el nexo de causalidad son ... comunes en ambos ámbitos”.41 El acto médico tiene tres momentos diferentes, y son : El diagnóstico: “es la actividad encaminada a conocer, descubrir las • causas que originan el malestar, la enfermedad o la necesidad de servicios profesionales del paciente”.42 En otras palabras, el diagnóstico es la opinión del médico obtenida de la observación directa o de laboratorio, del paciente. Los errores, imprudencias, la impericia y la negligencia generalmente se presentan en esta etapa, y una falla en el diagnóstico puede ser la causa de un 41 YEPES RESTREPO, Sergio. La responsabilidad civil medica Medellín Biblioteca Jurídica Diké. 4ª edición 1996, Pág.52 42 MARTINEZ RAVE. Ob. Cit. p. 492 37 fracaso en toda la actividad profesional con ese paciente; por eso es necesario que el médico sea lo más diligente posible en el diagnóstico y practique previamente todos los exámenes y pruebas necesarias para determinar el mejor tratamiento o para recurrir a otros profesionales especializados si las circunstancias exigen mayores conocimientos. El tratamiento: "Conocida la enfermedad o el trastorno que motiva el • acercamiento del paciente al médico, es necesario acertar en el tratamiento que se le va a dar al paciente. Se necesita precisar cuáles son las actuaciones, procedimientos o mecanismos que se van a utilizar para encontrar la curación y recuperación del paciente o para proteger su salud”.43 El tratamiento es la segunda etapa del acto medico, conocida también como etapa terapéutica en donde se buscan las diversas formas de tratamiento para la enfermedad, es también de gran importancia, por eso el médico debe adoptar el mecanismo adecuado, como por ejemplo la cirugía, o el tratamiento terapéutico a base de drogas, o terapias que permitan la recuperación del paciente; es aconsejable que el médico haga conocer al paciente la situación, el procedimiento, los riesgos y molestias que se puedan generar. 43 MARTINEZ RAVE. Ob. Cit. p. 492 38 El postratamiento: • “es el conjunto de medidas encaminadas a completar la terapéutica para reincorporar al individuo a su entorno personal y social.”44 “Es aquella etapa posterior a la cirugía o a la terapia, que exige el control, cuidado, seguimiento, vigilancia a lo que se vaya dando después”. 45 La negligencia, el error o el descuido en cualquiera de las tres etapas del acto médico, puede generar responsabilidad civil, es decir, puede originar para el profesional médico la obligación de indemnizar todos los daños o perjuicios que se ocasionen. Otra fuente de Responsabilidad Civil médica es la Falta de Información a los pacientes sobre los procedimientos médicos que se les va a llevar a cabo de ahí nace el concepto de consentimiento informado, él cual, “se establece rotundamente como derivada de la dignidad de la persona, en el Convenio relativo a los Derechos Humanos y a la Biomedicina, conocido como Convenio de Oviedo, suscrito el 4 de abril de 1997, que establece: "Una intervención en el ámbito de la Sanidad sólo puede efectuarse después de que la persona afectada haya dado su libre e inequívoco consentimiento. Dicha persona deberá recibir previamente una información adecuada a cerca de la finalidad y la naturaleza de la intervención, así como sus riesgos y 44 GUZMÁN, Mora. Ob. Cit. Página de Internet: http://www.medspain.com/ant/n10_mar00/Actomed.htm. 45 MARTINEZ RAVE. Ob. Cit. p. 492 39 consecuencias. En cualquier momento, la persona afectada podrá retirar libremente su consentimiento."”46. Para evitar que se presenten responsabilidades civiles por falta de información los Españoles crearon “una norma que estableciese pautas claras de unificación de los elementos, cantidades y formas de la información y, por lo que aquí importa y resumidamente, destaca: - De qué debemos informar: Un formulario escrito de consentimiento informado debe respetar, al menos, los siguientes criterios de información: a. Naturaleza de la intervención: en qué consiste, qué se va hacer. b. Objetivos de la intervención: para qué se hace. c. Beneficios de la intervención: qué mejoría espera obtenerse. d. Riesgos, molestias y efectos secundarios posibles, incluidos los derivados de no hacer la intervención. e. Alternativas posibles a la intervención propuesta. f. Explicación breve del motivo que lleva al sanitario a elegir una y no otras. g. Posibilidad de retirar el consentimiento de forma libre cuando lo desee. 46 Formación en Responsabilidad Profesional, Tomado de la página de Internet: http://www.aeds.org/respprofesi1.htm 40 - Cuánta información hay que dar: Más específicamente, en relación a la información sobre riesgos en los formularios escritos de consentimiento informado, debe ser la siguiente: a. Consecuencias seguras de la intervención. b. Riesgos típicos de la intervención: aquellos cuya producción deba normalmente esperarse, según el estado y conocimiento actual de la ciencia. c. Riesgos personalizados: aquellos que se derivan de las condiciones peculiares de la patología o estado físico del sujeto, así como de las circunstancias personales o profesionales relevantes. d. Contraindicaciones. e. Disponibilidad explícita a ampliar toda la información si el sujeto lo desea. - Cuándo debe utilizarse la información escrita Sería conveniente especificar algunos criterios que indiquen cuándo una intervención es susceptible de tener formulario escrito de consentimiento informado. Podrían ser los tres siguientes, vinculados todos ellos a las peculiaridades del procedimiento diagnóstico o terapéutico en cuestión: 41 a. Aquellos procedimientos que sean invasores requieren el uso de formularios de consentimiento informado. El problema es definir qué se entiende por procedimiento "invasor". b. Aquellos procedimientos diagnósticos o terapéuticos que supongan riesgos e inconvenientes, notorios y previsibles, no inherentes a la actuación clínica (perse), que repercutan de manera importante en las actividades de la vida cotidiana. c. Cuanto más dudosa sea la efectividad de un procedimiento diagnóstico o terapéutico más necesario es desarrollar cuidadosos procesos de información y consentimiento y, por tanto, más necesario el uso del soporte escrito. - Destinatarios de la información. En principio, el destinatario de la información es el propio paciente o usuario o la persona legitimada para recibirla. Se presumirán legitimados a estos efectos sus familiares más próximos y los acompañantes en el momento de la admisión en el hospital, si así lo autorizó el paciente. En el caso de menores o incapaces se recurrirá a la figura del representante o pariente más próximo y, cuando así lo exijan las leyes para determinados supuestos especiales, se informará, si es preciso, al propio juez (por ejemplo en los supuestos de internamiento psiquiátrico involuntario). 42 - Excepciones o límites a la información. Hay que reconocer determinados límites al deber de información que pueden sistematizarse de la siguiente manera: a) Situaciones de urgencia. A tenor de lo expuesto en el artículo 10.6.c de la LGS y el artículo 8 del Convenio sobre Derechos Humanos y Biomedicina, entendemos que el deber de informar, así como la exigencia del consentimiento, ceden sólo en aquéllas situaciones en que "la urgencia no permite demoras por poderse ocasionar lesiones irreversibles o existir peligro de fallecimiento", es decir, cuando el paciente no está en condiciones de recibir la información y/o de prestar su consentimiento ni es posible acudir a sus familiares. Esto rige estrictamente por el período de tiempo en que concurra tal situación, de modo que, tan pronto como se haya superado, debe informarse inmediatamente al paciente, según se ha dicho con anterioridad. b) Pronóstico fatal. El pronóstico, tal como ha señalado la doctrina, lejos de excluir el deber de informar constituye una manifestación importante de este deber y, en principio, es un derecho que corresponde a todo enfermo que quiera conocer su verdadero estado de salud. Otra cosa distinta es que este supuesto concurra con una renuncia del destinatario, expresa o tácita. c) Información claramente perjudicial para la salud del paciente 43 En este supuesto es ineludible la valoración de los valores en conflicto, para lo cual parece recomendable el asesoramiento del Comité Asistencial de Ética. Este requerimiento es especialmente conveniente cuando la situación descrita concurre con el deseo expresado por el paciente de conocer su verdadero estado de salud. Debe hablarse aquí de necesidad terapéutica. d) Renuncia del destinatario. La renuncia a ser informado expresa o tácitamente, mediante hechos concluyentes, ha sido tradicionalmente admitida por la doctrina como un supuesto de excepción o límite efectivo al deber de información. Recogiendo este criterio, el artículo 10.2 del Convenio sobre Derechos Humanos y Biomedicina consagra tal excepción o límite al decir que "deberá respetarse la voluntad de una persona a no ser informada", debiendo quedar este extremo debidamente documentado. - Responsabilidad de informar. La responsabilidad de informar incumbe al médico responsable del paciente, sin perjuicio de la que corresponde al médico que practica la intervención diagnóstica o terapéutica al realizar las especificaciones adecuadas sobre la técnica concreta. 44 Otros profesionales sanitarios, tales como los profesionales de enfermería, pueden y deben participar en el proceso de información clínica del paciente, aunque dentro del ámbito de su función propia en el proceso de atención.”47. 2.2.2 ANTECEDENTES A través de la historia, sin importar de qué parte del mundo estemos hablando, siempre los médicos han tenido que responder por sus actuaciones ante su pueblo o tribu, dependiendo de sus creencias, formas de vida y religiones. La responsabilidad Civil, en su aspecto general nace como sucedáneo de la venganza privada, no existía el concepto indemnización sino el concepto de venganza. Quien sufría el daño tomaba venganza sin limitación, luego vino la ley del Talión imponiendo límites y proporcionalidad entre el daño y la venganza. La venganza evoluciona con la indemnización o pago por parte del que causó el daño, pero no era obligación ofrecerla ni aceptarla. Luego si fue obligatorio ofrecer la suma de dinero como indemnización, si la víctima aceptaba estaba renunciando a la ley del Talión y cuando se excluye la venganza nace, el concepto de RESPONSABILIDAD. 47 Formación en Responsabilidad Profesional, Tomado de la página de Internet: http://www.aeds.org/respprofesi1.htm 45 Los indios Taínos originarios de Quisqueya hoy conocida como Republica Dominicana, entregaban el arte de curar al “Behique, médico brujo, shaman caracterizado por ser el miembro más sabio de la tribu, encargado de curar a los enfermos, y que había recibido el conocimiento ancestral de todas las plantas y sustancias medicinales, y métodos de sanación”48, él debía responder al pueblo por sus actuaciones, poniendo en peligro hasta su propia vida cuando realizaba lo que la gente consideraba como mala praxis, debido a que si “el Behique dejaba morir al enfermo, debía ser apedreado hasta morir por los familiares del fallecido”49. El Doctor Luis Alberto Kvittko, secretario general de la World Asociation of Legal Medicine y secretario general permanente de la Asociación Latinoamericana de Medicina Legal y Deontología Médica e Iberoamericana de ciencias Forenses, en su articulo “antecedentes históricos de los procesos por Responsabilidad Profesional médica y la mala praxis en el ejercicio de la medicina legal” relata que el Código Penal Chino, se refirió a la responsabilidad médica diciendo: “él médico únicamente debía responder cuando no aplicaba su conocimiento, su criterio y las reglas de su arte, es decir, cuando no había observado el principio general de prudencia y diligencia, que es el relativo a la existencia o no de responsabilidad de medio. Determinaba también que se 48 MIRANDA SUAREZ. Francisco. Seguro de Responsabilidad Civil por Mal Praxis Médica. Revista chilena de Derecho de Seguros. AIDA año 2 numero 4 Santiago de Chile de 2000, Pág. 20 46 debía nombrar peritos médicos para que consideraran el caso y dieran su asesoramiento a los jueces. También diferenciaron entre las lesiones que se podían provocar en el cuerpo, la salud y los casos de muerte. Condenaban a los médicos a indemnizar por muerte o por lesiones dejadas en su paciente que los inhabilitaba físicamente.”50 Tal vez este sea el compendio normativo mas parecido al que tenemos hoy en día a la hora de determinar la responsabilidad y castigar al médico por su mala praxis. Ciertos antecedentes de la responsabilidad civil médica, se encuentran en el DERECHO ROMANO, que según la Autora María Isabel Núñez Paz, “entre los pueblos de la antigüedad quizá sea el romano el que más valora la salud.”51 En el derecho romano también se reflejó el pensamiento de la responsabilidad por incumplimiento de una obligación de resultado, pero un poco más depurada, pues los romanos atribuían la responsabilidad al médico cuando habiendo procedido bien, los resultados no fueran los esperados. 49 MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 20 50 KVITTKO, Luis Alberto. Tomado de la página de Internet: http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0005.html 51 NUÑEZ PAZ, María Isabel. La responsabilidad de los médicos en el derecho romano. Gijón: Gráficas Apel. 1996. p. 14 47 La “relación medico-paciente se desarrolla ampliamente en los textos romanos dentro del ámbito de los contratos y más concretamente de las acciones de buena fé”52. En el caso del FUERO JUSGO las cosas fueron distintas, pues aquí la ley revestía a la familia del afectado, con el derecho de hacer con el médico lo que ellos quisieran, era una forma de hacer justicia. Algunos piensan que esta sanción solo era aplicada cuando el médico abandonaba al enfermo, pero no hay mucha claridad al respecto. Lo que sí se puede establecer es que el médico era responsable por la mala ejecución de su oficio y que la pena o sanción en ocasiones quedaba en manos de los familiares del afectado. Desde la época de la República (años 509-530 A.C.) en el derecho Romano se tienen referencias de la actividad médica. Con la Lex Aquilia de damno que data del año 286 A.C. que basada en criterios de responsabilidad objetiva pretendía determinar quién debía soportar las consecuencias del resultado dañoso. “El examen de los textos en los que se aborda la responsabilidad del médico constituye un elemento interpretativo básico para apreciar los diversos matices del concepto de culpa, desde la relación causal a la negligencia, desde la impericia a la valoración de la conducta y sus causas de justificación. Las llamadas acciones útiles y 52 NUÑEZ PAZ. Ob. Cit. Pág. 88 ad exemplum van a ser un instrumento 48 enormemente flexible para introducir nuevos comportamientos en el marco de la responsabilidad extracontractual.”53 La Lex Aquilia que hace referencia a los daños causados por el médico a un esclavo en cuanto objeto del patrimonio de un hombre libre. Este no es único caso de responsabilidad civil médica, es solo un punto de partida, como lo pauta el Digesto en el título I: “Sicuti medico imputari eventus mortalitatis non debet, ita quod per imperitiam commisit imputari ei debit: praetextu humanae fragilitatis delictum decipientis in periculo homines innoxium esse non debet”54 “Al médico se le imputa el resultado dañoso cuando actúa imperite. Se considera reprobable la conducta de aquel que con el pretexto de la fragilidad natural pone en peligro la vida de los hombres. delictum en el texto55 La aparición del término puede servir para recordar que la responsabilidad extracontractual tiene su origen precisamente en el marco de determinadas conductas delictivas”.56 53 NUÑEZ PAZ, Ob. Cit. p. 88 54 NUÑEZ PAZ. Ob. Cit. p. 89. D. 1, 18,6,7 55 La autora hace referencia a la Lex Aquilia 56 NUÑEZ PAZ. Ob. Cit p. 89 49 “La relación médico-paciente se desarrolla ampliamente en los textos romanos dentro del ámbito de los contratos y más concretamente de las acciones de buena fe.”57 El código del REY HAMMURABI dedica por lo menos nueve de sus artículos a las faltas y castigos para los médicos, pero esta compilación va mas allá de consagrar la responsabilidad médica, pues diferencia la responsabilidad civil de la responsabilidad penal, atribuyéndole a la primera una sanción económica y a la segunda, una pena más gravosa, que podía llegar hasta la mutilación de las manos del médico si éste era cirujano. Un ejemplo de lo anterior es “Si un médico abre a alguien una gran herida con un cuchillo de bronce y lo mata, o si vacía a alguien una cavidad con un cubillo de bronce y le deja sin ojo, se le deberán cortar las manos”58. Otro de los aportes del Código Hamurabi de 2392 A. de C. es la consagración del contrato o pacto entre el médico y el paciente, donde se establecía que el primero realizaría su labor a cambio de unos beneficios económicos que podían ser pagados en dinero o en especie por el paciente o por sus familiares. Sobre lo consagrado en este código el doctor Juan Fernando Cobo expreso: “se manifiesta que en el Código de Hammurabi había indemnización cuando el cirujano –me imagino que entonces no tendría este calificativo- cometía una 57 58 NUÑEZ PAZ. Ob. Cit p. 90 Formación en Responsabilidad Profesional. Tomado de la página de Internet: http://www.aeds.org/responsa1.htm 50 negligencia en su labor, dejando en el cuerpo del paciente, por ejemplo, unas tijeras –también supongo que en aquel tiempo el nombre tijeras no existía; pero hay tienen ustedes ya un principio de seguro de responsabilidad civil”59. ALEJANDRO MAGNO, creó bajo su gobierno una especie de responsabilidad por el incumplimiento de una obligación de medios para el médico, debido a que éste sólo era responsable cuando abandonaba libre y voluntariamente a un enfermo, caso en el cual su castigo era la crucifixión. Primer juicio por responsabilidad medica en América Como resultado de una investigación histórica, el Doctor Luis Alberto Kvitko descubre el primer caso de responsabilidad médica en América, que acaeció en la ciudad de Córdoba; Argentina, el 26 y 27 de julio de 1598. Cuando un comerciante español, llamado Valenzuela, se presenta ante el capitán y gobernador de Córdoba denunciando que un licenciado, Téllez de Rojo, le había tratado nueve de sus esclavos por estar enfermos, de los cuales habían fallecido cinco. Téllez de Rojo exigió la indemnización por la muerte de cada esclavo debido a la mala praxis del médico pues todos fallecieron, porque en lugar de darles calor, como necesitaba su patología 59 COBO. Juan F. Seguros y Reaseguros (conferencias), memorias de la cuarta Conferencia Hemisférica de Seguros. Pág. 180. 51 por tener un dolor y una puntada de costado, les había dado frío y prescribió que les hicieran dos sangrías por día cuando no les tenia que hacer ni una por año. 2.2.3 Responsabilidad contractual y responsabilidad extracontractual del médico Como se expuso anteriormente en la noción de responsabilidad civil profesional, ésta podrá ser contractual o extracontractual, por lo tanto esta clasificación le es aplicable a la actividad médica. La responsabilidad contractual del médico, “es la que se deriva del incumplimiento de un contrato por parte del médico, que vincula al paciente, y presupone, por tanto, que aquel acudió al médico como cliente particular, o bien como miembro de una organización de naturaleza pública o privada”.60 Algunas de las características del contrato de prestación de servicios médicos son: Es un contrato intuito personae, es decir, es un acto de confianza, • donde el paciente escoge al médico, en donde las partes están claramente identificadas. 60 MARTINEZ-CALCERRADA. Ob. Cit. p. 294 52 Es un contrato rescindible, donde cualquiera de las partes puede • terminar el contrato. Pero con la limitación de que el médico no podrá hacerlo, cuando ello suponga un abandono que haga peligrar la vida del paciente. Es un contrato consensual, es decir, que para su perfeccionamiento se • requiere sólo el consentimiento de las partes. Es un contrato de tracto sucesivo. • En donde el cumplimiento del contrato esta diferido a través del tiempo de su vigencia. Es un contrato bilateral porque las dos partes del contrato se obligan • recíprocamente. Es un contrato oneroso, porque el objeto del contrato es el beneficio de • ambos contratantes. La responsabilidad extracontractual del médico, tiene lugar cuando entre el médico y el paciente no ha mediado ningún acuerdo de voluntades previo, así “cuando, según las circunstancias, no se trata de asistencia médica con base a un contrato ni cuasicontrato, las consecuencias perjudiciales de esa asistencia ha de regularse por la responsabilidad civil extracontractual”.61 Se considera que la regla general es la responsabilidad civil contractual del los médicos y que la extracontractual se da excepcionalmente. 61 MARTINEZ-CALCERRADA. Ob. Cit. p. 296 53 Según la doctrina existen algunos eventos de responsabilidad civil extracontractual y a manera de hipótesis plantea varias situaciones: • Cuando el médico atiende en casos de urgencia. • Cuando el paciente esta inconsciente y no media voluntad. • En el caso de un potencial suicida que se rehúsa a recibir atención médica. • Cuando el paciente es llevado por un tercero con el cual no tiene ninguna relación. 2.2.4 Otras Clases de Responsabilidad en las que puede Incurrir El Médico 2.2.4.1 Responsabilidad Penal : Se genera esta responsabilidad personal del profesional médico que ocasiona el daño cuando su acción u omisión lesiva está tipificada en el Código Penal como constitutiva de un DELITO o de una FALTA. Por tanto para que una actuación médica genere responsabilidad penal es imprescindible que tal conducta esté tipificada como tal en el código Penal y que en el mismo se describa como delito o falta 54 Nuestro Código Penal consagra “una serie de comportamientos denominados delitos que, en caso de ser cometidos por algún individuo, lo hacen merecedor de penas, generalmente privativas de la libertad”. Las normas penales son igualmente aplicables a cualquier profesional de la salud cuando su conducta se adecue a uno de los tipos descritos en la ley, por lo que la Corte Suprema de Justicia ha dicho que “la profesión medica cuyo objeto es cumplir una función social, implica obligaciones de carácter ético y profesional para quienes la ejercen, de tal manera que su trasgresión delictiva y culposa puede dar lugar a sanciones penales o civiles, según que aquella configure una conducta tipificada por la ley penal o quede circunscrita a la responsabilidad civil. En consecuencia el medico tiene el deber de poner todo su cuidado y diligencia siempre que atienda a sus pacientes con el fin de procurar su curación o mejoría, así que cuando por negligencia, descuido u omisión cause perjuicios en la salud de aquellos, incurrirá en una conducta ilícita, que será calificada por el juez según su magnitud, desde la simple culpa hasta la mas grave, para así mismo imponer al demandado la respectiva condena a indemnizar a la victima del daño causado, sin perjuicio de las sanciones penales a que haya lugar”62”. “La comisión por parte de los profesionales médico de delitos o faltas genera una personal responsabilidad penal del profesional y si de ésta se derivan daños también la responsabilidad civil y por tanto su obligación indemnizatoria. 62 CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, 1985. 55 Es decir que la ejecución de un hecho descrito por el Código Penal como delito o falta obliga a quien lo realiza a la reparación de los daños y perjuicios causados en la comisión de ese delito o falta. La responsabilidad penal es una responsabilidad personal y ello implica que la sanción (condena) penal prevista solamente puede ser cumplida por la persona que de forma directa es autor del delito o la falta. No obstante si de la comisión del delito o la falta se generan daños en las personas o bienes responde de la indemnización de dichos daños (a parte de la penal) directamente el responsable penalmente y otros en virtud a distintas relaciones. Por tanto, ... el médico responderá de la sanción penal y su entidad aseguradora (si tuviera concertada una póliza de responsabilidad civil) afrontará el pago de la indemnización por las lesiones ocasionadas.”63. Ahora, “dentro de los delitos en que puede incurrir un medico se encuentra el homicidio, no tanto en su modalidad de intencional, como si en su hipótesis culposa, la cual puede surgir cuando el paciente muere durante un acto médico debido a imprudencia, negligencia, impericia o violación de reglamentos. Cabe anotar también que cuando el médico mata a su paciente, para poner fin a intensos sufrimientos provenientes de lesión corporal o enfermedad grave e 63 World Wide Hospital. Instituto Europeo de Medicina Virtual. Requisitos de la Responsabilidad Médica: daño. Tomado de la página de Internet: http://www.worldwidehospital.com/h24h/legresp4.htm#admin 56 incurable, lo induce eficazmente al suicidio o le presta una ayuda efectiva para su realización, estará incurriendo en delito. Otro delito aplicable seria el de las lesiones personales que son de diferentes clases, a saber, deformidad, perturbación funcional síquica, y perdida anatómica o funcional de un órgano o miembro. Por otra parte, el aborto es un delito previsto por la ley penal tanto para la mujer como para la persona que se lo cause, además de que pueden producir otro tipo de lesiones. Seria también posible eventualmente el delito de falsedad en documentos, en los casos en que el médico e incluso el paciente, borren, cambien, destruyan u oculten una determinada historia clínica. Debemos mencionar finalmente que el derecho debe desarrollarse acorde con los nuevos descubrimientos y procedimientos médicos, regulándolos de acuerdo a los intereses jurídicos, por lo que debe auxiliarse de aquellos que tienen especiales conocimientos para poder hacer una legislación acorde con la ciencia y la practica”.64 2.2.4.2 Responsabilidad administrativa o falla del servicio: “Los particulares tendrán derecho a ser indemnizados por las Administraciones Públicas correspondientes de toda lesión que sufran en cualquiera de sus 64 YEPES RESTREPO, Sergio. La responsabilidad civil medica Medellín Biblioteca Jurídica Diké. 4ª edición 1996, Pág.32 y 33 57 bienes o derechos, salvo en los casos de fuerza mayor, siempre que la lesión sea consecuencia del funcionamiento normal o anormal de los servicios públicos. Por tanto los pacientes usuarios de la sanidad pública que sean dañados por actos médicos se entienden que son dañados por actos de la administración y por ello ésta debe indemnizarlos siempre y cuando el daño sea efectivo, evaluable económicamente e individualizado con una persona o grupo de personas y no tenga el particular el deber jurídico de soportar el daño. Por ejemplo el sometimiento voluntario a un tratamiento experimental de efectos desconocidos. La responsabilidad patrimonial de la Administración engloba pues a los actos de los profesionales médico sanitarios que trabajan a su servicio y la indemnización de los daños”.65 Esto es lo que llamamos en Colombia responsabilidad del Estado por falla del servicio. 2.2.4.3 Responsabilidad ético-disciplinaria: La Ley 23 de 1981 y su decreto reglamentario del mismo año regulan el tema de ética médica en Colombia, pues la ética “paso de ser una responsabilidad moral a una jurídica, al ser la 65 World Wide Hospital. Instituto Europeo de Medicina Virtual. Requisitos de la Responsabilidad Médica: daño. Tomado de la página de Internet: http://www.worldwidehospital.com/h24h/legresp3.htm 58 conducta examinada por un Tribunal del Estado mediante un procedimiento legal y con sanciones que producen efectos externos.”66 “La responsabilidad ético-disciplinaria se aplica exclusivamente a quienes tienen titulo de médicos, no pudiendo por tanto imputarse a estudiantes de medicina, enfermeras o personas jurídicas como clínicas o sociedades. Es una responsabilidad personal e intransferible ya que solo puede juzgarse al galeno por sus propios actos y no puede extenderse a sus herederos. No es susceptible de desistimiento, transacción ni conciliación por el carácter in enajenable e indisponible que tienen sus contenidos éticos. El juzgador es el Tribunal de Ética Médica, la sanción es de carácter disciplinario y surge de la violación de alguna de las normas de la Ley 23 de 1981 o de su reglamentación, sin consideración a los antecedentes o a la personalidad del infractor, ya que se trata de un derecho de acto y no de autor"67. 2.3 RESPONSABILIDAD DE LOS AUXILIARES DE LA MEDICINA La responsabilidad de los médicos no solo se genera “por hechos propios sino por la de aquellas personas de las que se deba responder, y que puede abarcar tanto daños derivados de la organización del trabajo horizontal, esto es, en los casos de trabajo en equipo médico las que se deriven del propio 66 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit Pág.22 67 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág.23 y 24 59 funcionamiento del equipo cuando no pueda aislarse la responsabilidad de cada participante (cirujano y anestesista, como caso paradigmático), que en principio responden independientemente con base al principio de especialización y competencia, como las derivadas de la organización del trabajo vertical (médico, personal o auxiliar), en el que la responsabilidad puede alcanzar jerárquicamente al médico aún cuando quepa aislar la responsabilidad del auxiliar, si éstos traspasan el límite de su respectiva competencia y se extienden a proporcionar cuidados estrictamente médicos. Para deslindar este tipo de responsabilidades se hará una breve incursión en las competencias de estos profesionales”68. En la medicina de hoy “la distribución del trabajo se produce tanto en sentido horizontal, en el que se producen relaciones entre iguales, basadas en la independencia, en la complementariedad y en la igualdad, como en sentido vertical, en el que el principio jerárquico se impone al de competencia, dando lugar a relaciones subordinadas, en las que ciertamente cada miembro del equipo debe confiar en que el personal auxiliar realice las tareas que le son propias, pero siempre reservándose y siendo responsable el facultativo de las tareas de control, instrucción y vigilancia y, desde luego, de la parte esencial de su actuación profesional o que no podrá delegar en absoluto en personal auxiliar”69. 68 Formación en Responsabilidad Profesional, Tomado de la página de Internet: http://www.aeds.org/respprofesi1.htm 69 Formación en Responsabilidad Profesional, Tomado de la página de Internet: http://www.aeds.org/respprofesi1.htm 60 Puede existir responsabilidad civil del personal de enfermería o de los auxiliares de la medicina cuando, “en el ejercicio de sus funciones propias incurra en negligencia, descuido o falta de atención, e incluso cuando cometa indebidamente funciones propias del médico. Pero responderá éste en el caso de que el daño al tercero se haya debido a su despreocupación en las funciones de control y vigilancia o cuando encomiende o permita que el personal de enfermería traspase los límites de su competencia profesional”70. Para poder establecer la mala praxis de estos profesionales, habrá que acudir a la determinación de sus funciones, las cuales son primordialmente: “ las de cumplir la terapéutica prescrita por los facultativos encargados de la asistencia así como aplicar la medicación correspondiente, auxiliar al médico en las intervenciones quirúrgicas, practicar las curas de los operados y prestar los servicios de asistencia inmediata en casos de urgencia hasta la llegada del médico, observar y recoger los datos clínicos necesarios para la correcta vigilancia de los pacientes, realizar las anotaciones que les correspondan, realizar sondajes, disponer los equipos de todo tipo para intubaciones, drenajes, y vendajes así como preparar lo necesario para una asistencia urgente, así como prestar la asistencia a los pacientes en la esfera de su competencia”71. 70 Formación en Responsabilidad Profesional, Tomado de la página de Internet: http://www.aeds.org/respprofesi1.htm 71 Formación en Responsabilidad Profesional, Tomado de la página de Internet: http://www.aeds.org/respprofesi1.htm 61 2.4 REGULACION LEGAL La profesión de la medicina, es tal vez la actividad que más se contempla en las distintas leyes y códigos del país, pero de forma dispersa y poco coherente con la realidad actual. El desarrollo legislativo de la medicina comienza en la colonia con la expedición del primer Protomédico de Juan José Cortes en 1635, que tenia como fin crear acciones para refrenar el abuso de médicos y evitar la presencia de intrusos en esta profesión. En 1801 se crea la Policía Médica, la cual tenía como objetivos el reconocimiento de los médicos a través de la certificación del titulo, la realización de exámenes a los médicos extranjeros con títulos dudosos, las visitas anuales a las boticas, el reconocimiento de los hospitales y las diligencias médico legales. En la época de la República aparecen nuevas leyes que regulan la actividad médica. En 1841 se dicta la Ley que reglamenta el ejercicio de la profesión de la medicina y que consagro una lista de los médicos autorizados para ejercer, y en 1844 la Ley de los deberes de los miembros de la escuela de medicina, por otro lado en 1846 aparece una Ley que fija los honorarios que pueden cobrar los médicos autorizados para ejercer esta profesión, es decir los que aparecen en la lista de la Ley de 1841, además establece unos casos especiales en los cuales se pueden fijar unos valores diferentes a los honorarios. 62 En 1929 aparece la Ley 35 de este año que reglamenta la profesión de la medicina y establece quienes pueden ejercerla. La Ley 67 de 1935 consagra la responsabilidad penal y civil de los médicos en el ejercicio de su profesión cuando ocurría algún perjuicio al paciente por su culpa, pero esta Ley no tuvo la importancia que se quería pues el doctor Alfonso Cardona explicó en 1942 que la Ley 67 era inoperante, ya que se necesitaba un código positivo que estableciera con claridad cuando incurría el médico en culpa y cuando no, es decir cuando era responsable. En 1957 aparece en Colombia un decreto ley que sin mucha variedad respecto al resto del compendio legislativo pretendió establecer las clases de indemnizaciones que tenían que pagar los médicos cuando estos eran hallados responsables. Existe otras leyes y decretos que también “han tratado la reglamentación de la practica médica como la Ley 25 de 1935, y el decreto 281 de 1954, la Ley 14 de 1962, y la Ley 23 de 1981 pero se encuentran desactualizados con relación a las abundantes normas expedidas por diferentes gobiernos con objetivos políticos y de cobertura como la Ley 10 de 1990, la Ley 60 de 1992, y la Ley 100 de 1993, descuidándose en gran parte la labor importantísima que desarrollan los profesionales de la salud, y entre ellos, los médicos”.72 72 PROYECTO DE LEY NUMERO 144 DE 1998 SENADO, Virgilio Galvis Ramírez, Gaceta numero 303, 27 de noviembre de 1998, Pág. 5 63 La Ley 23 de 1981 y su decreto reglamentario 3380 del mismo año, incluyen aspectos de ética médica y sus sanciones. Pero esta que ha venido rigiendo el ejercicio de la medicina por más de 20 años a quedado desueta debido que a través del tiempo se han presentado avances tecnológicos, científicos y cambios normativos principalmente los introducidos por la Constitución de 1991, en relación con los derechos fundamentales de las personas. Otro cambio de gran influencia ha sido la creación del sistema de Seguridad Social Integral que cambió el concepto de la práctica de la prestación de los servicios médicos en el país. El Doctor Juan Ramón Castañeda opina que la Ley 23 de 1981 “es tal vez el único código de ética médica que sea vuelto Ley en algún país, pero lamentablemente no se aplica, o se diluye su aplicación, por diferentes circunstancias como la carencia de recursos, el desconocimiento de la norma o el acto voluntario de desconocer la Ley en procura de intereses creados por las circunstancias que enfrenta el médico o sus intermediarios”73. La Constitución Política de Colombia en él articulo 49 dice: “La atención de la salud y el saneamiento ambiental son servicios públicos a cargo del Estado. Se garantiza a todas las personas el acceso a los servicios de promoción y recuperación de la salud. 73 CASTAÑEDA F. Juan Ramón. De la Responsabilidad Médica. Revista Derecho & Medicina. Pág. 2b 64 Corresponde al Estado organizar, dirigir y reglamentar la prestación de servicios de salud a los habitantes y de saneamiento ambiental conforme a los principios de eficacia, universalidad y solidaridad.....”. De dicha constitución, se derivan leyes especiales, o generales, normas, y proyectos que aún cuando no sean leyes, son documentos que tiene como fin regular el ejercicio médico y establecer sus funciones y campo de operación, para así poder determinar su responsabilidad a la hora de ejercer su oficio. Con el avenimiento de la Ley 100 de 1993, se presentaron muchos cambios en materia de prestación de servicios médicos, al igual que en el tema de la responsabilidad medica, es por eso que hay que ver con mayor énfasis el punto de “la responsabilidad médica individual y en equipo, así como la de los establecimientos de salud y por ende de la responsabilidad del Estado, que al producirse un cambio en la relación médico- paciente y en la intermediación de las entidades de salud en la prestación de los servicios médicos y de asistencia social, se ve fuertemente involucrada”74. La ley ha recibido criticas, como su poca profundidad a la hora de referirse a la relación médico-paciente, pues esta relación “debe basarse en la libre escogencia que el paciente hace de su médico… cosa que resulta casi imposible puesto que el enfermo tiene que aceptar la imposición de la entidad correspondiente. De manera, que el especialista escogido no se ha elegido en razón del prestigio, idoneidad y modelo de trabajo, sino que se viene 74 CASTAÑEDA F. Juan Ramón. Ob. Cit. Pág. 2b 65 interfiriendo el derecho de escogencia de un acto libre, por una imposición que muchas veces no satisface a unos ni a otros”75. Existe en Colombia un gran número de propuestas que se han convertido en ley de la República como otras que no llegaron a serlo, pero que de todas formas hacen parte del desarrollo legislativo de nuestro parlamento en los últimos años. A continuación haremos un breve recorrido por las leyes y proyectos archivados relacionados con el campo del ejercicio de la medicina en Colombia desde la nueva Constitución Política de 1991 hasta nuestros días: 2.4.1 LEYES EXPEDIDAS 2.4.1.1 REGLAMENTACIÓN DE LAS ESPECIALIDADES DE LA PROFESIÓN DE MEDICINA. LEY 6 DE ENERO 16 DE 1991 POR LA CUAL SE REGLAMENTA LA ESPECIALIDAD MEDICA DE ANESTESIOLOGIA Y SE DICTAN OTRAS DISPOSICIONES. PROYECTO: 95 de 1987 ORIGEN: Cámara 75 REY FORERO, Eduardo. Responsabilidad en la Psiquiatría. Revista Derecho & Medicina. Volumen 4 # 35. Julio 2001 Pág. 3b 66 En esta ley se establece a la anestesiología como una especialidad de la medicina, y por el riesgo potencial al que están expuestos se considera de alto riesgo y con un tratamiento laboral especial. Solo podrán practicarla quienes de acuerdo con esta ley cumplan con los requisitos exigidos para su práctica en Colombia. Se creó por medio de esta ley el Comité Nacional del Ejercicio de la Anestesiología, el cual tiene como una de sus funciones vigilar y controlar el ejercicio de estos especialistas. Con el Proyecto de Ley 104 de 1997 propuesto por la entonces ministra de salud la Doctora Maria Teresa Forero, se buscó modificar parcialmente la ley en mención, por medio de la inclusión de otras disposiciones para su ejercicio y la responsabilidad de éstos en su práctica. LEY 657 DE JUNIO 7 DE 2001 POR LA CUAL SE REGLAMENTA LA ESPECIALIDAD MÉDICA DE LA RADIOLOGÍA E IMÁGENES DIAGNOSTICAS Y SE DICTAN OTRAS DISPOSICIONES. PROYECTO: 82 de 1999 ORIGEN: Cámara Con el Proyecto de Ley 115 de 1998 comienza la idea de reglamentar la especialidad de radiología, propuesto por el honorable senador Mario Uribe 67 Escobar, pero este fue archivado durante las sesiones de la cámara de representantes. Posteriormente esta iniciativa fue retomada, tramitada, y aprobada como Ley de la Republica. La Ley 657 establece el objeto y la competencia de esos especialistas, sus derechos y deberes, al igual que el órgano que los regula. En su articulo 17 consagra la responsabilidad profesional del radiólogo de la siguiente forma: “En materia de responsabilidad profesional, los médicos a los que hace referencia la presente ley, estarán sometidos a los principios generales de la responsabilidad a los profesionales de la salud”. 2.4.1.2 REGLAMENTACIÓN DE POFESIONES AFINES A LA MEDICINA. LEY 36 DE ENERO 6 DE 1993 POR LA CUAL SE REGLAMENTA LA PROFESIÓN DE BACTEROLOGO Y SE DICTAN OTRAS DISPOSICIONES. PROYECTO: 067 de 1992 ORIGEN: Senado La bacteriología a pesar de no ser una especialización de la medicina guarda gran relación con ella por dedicarse ambas al área de la salud. Esta ley fue presentada al Congreso por el honorable senador Gustavo Dajer, con el fin de establecer los requisitos necesarios para poder desarrollar esta 68 profesión en el país, y se constituyo el Colegio Nacional de Bacteriología, el cual estará encargado entre otras cosas de regular el buen ejercicio de estos profesionales. LEY 2 66 DE ENERO 25 DE 1996 POR LA CUAL SE REGLAMENTA LA PROFESIÓN DE ENFERMERIA EN COLOMBIA Y SE DICTAN OTRAS DISPOSIONES PROYECTO: 48 de 1995 ORIGEN: Senado En él artículo primero se establece que “la presente ley reglamenta el ejercicio de la profesión de enfermería, define la naturaleza y el propósito de la profesión, determina el ámbito del ejercicio profesional, desarrolla los principios que la rigen, determina sus entes rectores de dirección, organización, acreditación y control del ejercicio profesional y las obligaciones y derechos que se derivan de su aplicación”. Esta ley fue propuesta por la honorable senadora Maria Del Socorro Bustamante, y fue analizada por la Cámara de Representantes mediante el Proyecto de Ley 222 de 1995. 69 LEY 372 DE MAYO 28 DE 1997 POR LA CUAL SE REGLAMENTA LA PROFESIÓN DE OPTOMETRÍA EN COLOMBIA Y SE DICTAN OTRAS DISPOSICIONES. PROYECTO: 127 de 1996 ORIGEN: Senado Propuesta por la entonces ministra de salud la doctora Maria Teresa Forero de Saade, busco la regulación de la profesión de optometría y el sujetamiento de estos especialistas a la ley. Estableció la creación del Consejo Técnico Nacional Profesional de la optometría, con el objeto de regular el servicio prestado por estas personas. Lo más importante de esta ley, es que estableció detalladamente los campos de acción de esta profesión y por lo tanto facilita el trabajo a la hora de determinar las responsabilidades de éstos en la ejecución de sus funciones. LEY 376 DE JULIO 4 DE 1997 POR LA CUAL SE REGLAMENTA LA PROFESIÓN DE FONOUDIOLOGÍA Y SE DICTAN NORMAS PARA SU EJERCICIO EN COLOMBIA. PROYECTO: 98 de 1996 ORIGEN: Cámara La primera vez que se trato de establecer los linimientos básicos que deben cumplir los profesionales de esta rama de la salud fue 1992 por medio del 70 Proyecto de Ley 107, propuesto por el honorable representante José Fernando Castro, pero este fue archivado. En esta Ley se definían los parámetros para establecer quienes son fonoaudiologos, y el ámbito de aplicación de esta carrera. Se creo la Asociación Colombiana de Fonoaudiologia y Terapia de Lenguaje, con el objeto de regular la profesión y su ejercicio. LEY 528 DE SEPTIEMBRE 14 DE 1999 POR LA CUAL SE REGLAMENTA LA PROFESIÓN DE FISIOTERAPEUTA Y SE DICTAN NORMAS PARA SU EJERCICIO EN COLOMBIA. PROYECTO: 184 de 1998 ORIGEN: Senado Propuesta por el honorable senador Hernando Pinedo Vidal. La ley en mención trata sobre los requisitos necesarios para ejercer la profesión de fisioterapia en Colombia. Por otro lado establece la competencia de estos profesionales y sus responsabilidades a la hora de la ejecución de su trabajo. 71 2.4.2 PROYECTOS DE LEY ARCHIVADOS Fueron muchas las iniciativas de los honorables congresistas que resultaron archivadas durante esto últimos años, pues a partir de la nueva Constitución Política creció el ímpetu por desarrollar campos como el de la medicina, tan necesarios en la vida moderna, para no dejar desamparadas a las personas que requerían los servicios de estos profesionales y que resultaban perjudicados por estos en el ejercicio de su labor. Con el Proyecto de Ley 201 de 1992 propuesto por el Senador Gustavo Rodríguez Vargas comienza una larga cadena de iniciativas que tenían como fin la reglamentación de las especialidades de los médicos en Colombia. En 1994 con el Proyecto 102 el mismo senador se encargaría de volverlo a presentar a su comisión pero una vez mas fue rechazado y archivado en plenaria por no creerse necesario. El Senador Luis Guillermo Vélez Trujillo en 1996 recogería esa iniciativa con el proyecto, pero una vez mas sería archivado. Fueron varias las áreas de la medicina que fueron objeto de iniciativas y que no llegaron a ser leyes, pero que es importante mencionar para conocer el desarrollo legislativo desde la nueva Constitución Política hasta nuestros días: 1. PROYECTO DE LEY 161 DE 1992, Con el cual se reglamenta un proceso único de habilitación del oficio del DENTISTA. 72 2. PROYECTO DE LEY 105 DE 1992, por la cual se reglamenta la profesión de FONOUDIOLOGIA-TERAPIA DE LENGUAJE y se dictan otras disposiciones para su ejercicio en el país, senador ponente José Fernando Castro Caicedo. 3. PROYECTO DE LEY 159 DE 1996, Por medio de la cual se reglamenta la especialidad de NEUROLOGÍA en Colombia y se dictan otras disposiciones, Senador ponente: Fermín Ovalle Isaza. 4. PROTECTO DE LEY 217 DE 1997, por medio del cual se reglamenta la especialidad odontológica de cirugía MAXILOFACIAL y se dictan otras disposiciones, Senadora ponente Consuelo Durán de Mustafa. 5. PROYECTO DE LEY 184 DE 1998, por medio de la cual se reglamenta la profesión de FISIOTERAPIA, senador ponente Hernando Pinedo. 6. PROYECTO DE LEY 144 DE 1998, por la cual se reglamenta él la especialidad médica de RADIOLOGÍA E IMEGENES DIAGNÓSTICAS, senador ponente Mario Uribe Escobar. 73 7. PROYECTO DE LEY 238 DE 2000, por medio de la cual se reglamenta la TERAPIA RESPIRATORIA y se dictan otras disposiciones, Senador ponente Luis Javier Castaño. 8. PROYECTO DE LEY 241 DE 2000, por medio de cual se reglamenta la ocupación de PARAMÉDICO y se dictan normas complementarias, representante ponente William Vélez. 9. PROYECTO DE LEY 158 DE 2001, con la cual se reglamenta las especialidades HEMATOLÓGICAS y ONCOLÓGICA clínica y pediátrica, senador ponente José Jaime Nicholls. 10. PROYECTO DE LEY 176 DE 2001, La Cámara de Representantes pretendió con este proyecto reglamentar la especialidad médica de la CIRUGÍA PLÁSTICA, mediante normas que determinaban su naturaleza en relación con otras especialidades, disposiciones que aluden a su servicio, funciones y derechos de los especialistas, así como normas sobre organización y control de la especialidad. Existen tres proyectos que ameritan nuestra atención por tratar directamente del tema que estamos estudiando, pero que al igual que los otros proyectos 74 también quedaron archivados, pero no por esto pierden su importancia y relevancia en la vida actual. 1. PROYECTO DE LEY 144 DE 1998 con el cual se trató de reglamentar el EJERCICIO DE LA PROFESIÓN MÉDICA en Colombia propuesto por el Ministro de Salud de ese año el Doctor Virgilio Galvis Ramírez, él cual fue archivado. Este proyecto fue retomado en 1999 por el honorable senador Luis Eduardo Vives con él numero 160 DE 1999. El proyecto de ley tenía como objeto “dictar las normas relativas al ejercicio profesional de la medicina, definir la naturaleza y el propósito de la profesión médica, determinar el ámbito del ejercicio profesional, desarrollar los principios que la rigen, señalar sus entes rectores, de organización, acreditación y control del ejercicio profesional y las obligaciones que se derivan de su aplicación”. En la exposición de motivos el Doctor Virgilio Galvis Ramírez explica que: “el desarrollo normativo de la medicina ha sido escaso con relación a los cambios que se han producido a nivel social, educativo, científico y tecnológico, y el avance de estos aspectos rebasan los reglamentos y disposiciones, necesitándose actualizar y compenetrar todo ese desarrollo con la realidad existente a través de una regulación integral. Es así como este proyecto de ley se propone regular la medicina en general y sus especialidades, y es de evidente urgencia para la salud de los colombianos, por cuanto la falta de regulación integral de ellas, impide lo que 75 puede denominarse un control de calidad en el servicio médico y no existe una ley actualizada que precise los elementos necesarios para practicar la medicina o especialidades de manera idónea...”. 2. PROYECTO DE LEY 125 DE 1999, por medio de la cual se establecen los principios que regulan la RESPONSABILIDAD DE LOS PROFESIONALES DE LA SALUD, propuesto por el honorable representante Jorge Giraldo Serna, este proyecto fue archivado. “Los profesionales de la salud solo serán responsables de los daños causados en el ejercicio de su profesión por dolo o culpa grave, sin perjuicio de que puedan exonerarse demostrando ausencia de culpa o causa extraña”76, con este articulo se busco establecer un marco de acción para que el juez determinara en que casos existe o no responsabilidad del médico. Un punto importante de este texto es el que se refiere al consentimiento informado, él cual “debe obtenerse en forma libre y consciente; debe otorgarse de manera clara, expresa, sencilla, y por escrito, permitiéndole al informado conocer la clase de tratamiento o procedimiento que se pretende efectuar, los riesgos y complicaciones previstos de acuerdo a las condiciones clínico patológicas del paciente, la existencia de otros tratamientos o procedimientos 76 PROYECTO DE LEY NUMERO 125 DE 1999 CAMARA DE REPRESENTANTES, Articulo 1, Jorge Giraldo Serna. 76 con sus posibles implicaciones, y todos los demás aspectos que de acuerdo con la naturaleza y características del caso deban ser informados”77. Por otro lado, el proyecto recoge lo establecido por la jurisprudencia y la doctrina durante muchos años al consagrar: que “salvo disposición legal especial o pacto expreso en contrario, el profesional de la salud, en ejercicio de su profesión adquiere obligación de medio, no de resultado”78. A demás “la responsabilidad del profesional no ira mas allá del riesgo previsto, entendiéndose éste como el referido a la situación clínico-patológica del paciente en cada situación específica, de acuerdo con la lex artis vigente al momento de los hechos, y no por la descripción general de riesgos de las ciencias de la salud”79. La prescripción será de dos años contados a partir del hecho causal, sin perjuicio de la vigencia de normas especiales sobre prescripción o caducidad que establezcan términos menores, lo cual es un error, pues este tiempo es demasiado corto para que se presenten las secuelas de una mala actuación médica. El articulo octavo consagra: “Excepto los casos de urgencia o en los que no fuera posible, a la realización de tratamientos médicos y procedimientos quirúrgicos debe anteceder el consentimiento informado por parte del paciente 77 PROYECTO DE LEY NUMERO 125 DE 1999 CAMARA DE REPRESENTANTES, Parágrafo del articulo octavo, Jorge Giraldo Serna. 78 PROYECTO DE LEY NUMERO 125 DE 1999 CAMARA DE REPRESENTANTES, Articulo 2, Jorge Giraldo Serna. 79 PROYECTO DE LEY NUMERO 125 DE 1999 CAMARA DE REPRESENTANTES, Articulo 3, Jorge Giraldo Serna. 77 o de sus representantes legales. Si este es menor de edad, salvo que se trate de procedimientos médicos de carácter altamente invasivo e irreversible que tengan incidencia en el desarrollo futuro del menor, el consentimiento otorgado por sus representantes legales será valido, siempre que se trate de un consentimiento cualificado y persistente, y se garanticen sus derechos a la vida, la integridad personal, la autonomía y al libre desarrollo de la personalidad”80. Es importante tener claro que el “consentimiento debidamente otorgado eximirá de responsabilidad al medico por la concreción del riesgo, que teniendo el deber y la forma de prever de acuerdo a la lex artis, haya informado”81, es decir, que una vez sea informado el paciente de los posibles riesgos que corre en el actuar médico, éste queda exonerado de la responsabilidad que se pueda generar de esa atención. El consentimiento cualificado y persistente es aquel que “implica la comprensión de las posibilidades, límites y riesgos de los actuales tratamientos, así como su otorgamiento en forma reiterada y por etapas de acuerdo al tratamiento o procedimiento de que se trate”82. 80 PROYECTO DE LEY NUMERO 125 DE 1999 CAMARA DE REPRESENTANTES, Articulo 8, Jorge Giraldo Serna. 81 PROYECTO DE LEY NUMERO 125 DE 1999 CAMARA DE REPRESENTANTES, Articulo 8, Jorge Giraldo Serna. 82 PROYECTO DE LEY NUMERO 125 DE 1999 CAMARA DE REPRESENTANTES, Articulo 8 parágrafo, Jorge Giraldo Serna. 78 El representante Jorge Giraldo Serna planteó en esa oportunidad que “este proyecto de ley busca actualizar la normatividad legal ante los nuevos fenómenos planteados y ante los nuevos parámetros constitucionales, recorriendo la jurisprudencia de los últimos años de tal forma que el ejercicio de estas profesiones se dé ante un mejor marco de seguridad jurídica”. Sin lugar a dudas este proyecto de ley es de los más importantes tramitados en el congreso, pues recoge tanto la jurisprudencia de nuestro país como la doctrina internacional sobre el tema. 3. PROYECTO DE LEY 214 DE 1998 DE LA CAMARA DE REPRESENTANTES, por el cual se dictan normas en materia de ÉTICA MÉDICA, propuesto por la ministra de salud Maria Teresa Flores. En 1996 también se intentó determinar las normas en materia de ética médica con el proyecto de ley 135. Retomado en el 2001 con el proyecto de ley 62, por el cual se dictan normas ÉTICO DISIPLINARIAS para el ejercicio de la medicina en Colombia, realizado por el honorable senador Carlos Corsi Otalora. Este proyecto de Ley tenía como fin actualizar a la Ley 23 de 1981, la cual se encuentra desactualizada con respecto a los acontecimientos jurídicos que ha vivido el país durante la década de los noventa y los años del dos mil. 79 2.4.3 TEXTO DEFINITIVO DEL PROYECTO DE LEY 173 DE 2001 APROBADO POR EL SENADO En el 2001 fue presentado al senado por el honorable senador Eduardo Arango Piñeres, el PROYECTO DE LEY 173, por el cual se establecen los principios que regulan la RESPONSABILIDAD DE LOS MÉDICOS y se dictan otras disposiciones para el ejercicio de la profesión médica en Colombia. Este proyecto no se ha convertido aún en Ley de la república, pero si fue aprobado su texto definitivo en sesión plenaria del día 13 de diciembre de 2001, y solo falta la sanción presidencial. El objeto del proyecto según el texto, es la delimitación de la responsabilidad de los profesionales de la salud y el desarrollo de los principios básicos aplicables a éstos. Las obligaciones de lo médicos son por regla general de medios y excepcionalmente de resultado, así lo confirma este proyecto en su articulo 11 cuando expresa: “... Los médicos sólo serán responsables de los daños causados en el ejercicio de su actividad y ella se entenderá que es gestión de medio y no de resultado”83. 83 PROYECTO DE LEY NUMERO 1173 DE 2001 SENADO, Articulo 11, Eduardo Arango Piñeres 80 Respecto a la responsabilidad de los galenos el texto consagra: que “la responsabilidad del profesional de la salud no irá más allá del riesgo previsto, entendiéndose éste como el referido a la situación clínico patológica del paciente en cada situación específica, de acuerdo con la Lex Artis vigente al momento de los hechos y no por la descripción general de riesgos de las ciencias de la salud...”84. Al respecto el Doctor Eduardo Rey explica: “de acuerdo con el proyecto la responsabilidad no irá más allá del riesgo previsto para cada situación clínica de acuerdo con la Lex artis”85. Entendiendo como riesgo previsto: “aquel que se corre con la sujeción a las normas que rigen la ciencia y el arte médicos, y a la prudencia, pericia y diligencia exigibles al médico de acuerdo con las condiciones clínico-patológicas del paciente y las circunstancias de modo tiempo y lugar en que se desarrollo el acto médico”86. El proyecto en un principio contemplaba “la prescripción a los dos años por las acciones y daños causados con ocasión del ejercicio de su profesión”87, ahora establece que: “las acciones de responsabilidad éticas, disciplinaria, fiscal, civil o administrativa de los médicos y de los profesionales de la salud, en general, que se llegaren a presentar con oportunidad del acto médico o del ejercicio de su profesión, prescribirá según los términos previstos por las normas legales 84 PROYECTO DE LEY NUMERO 1173 DE 2001 SENADO, Articulo 11, Eduardo Arango Piñeres. 85 REY FORERO. Eduardo. Responsabilidad de los Médicos. Revista Derecho & Medicina. Junio 2001.Bogotá Pág. 3b 86 REY FORERO. Eduardo. Articulo Cit. Pág. 3b 87 REY FORERO. Eduardo. Articulo Cit. Pág. 3b 81 correspondientes”88. Cambio que consideramos muy valido, ya que muchos doctrinantes anotaron “que este tiempo es demasiado corto, pues, hay ciertos casos en los que el daño aparecen mucho tiempo después, como en las enfermedades de evolución lenta (hepatitis b, SIDA, etc.)”89, opinión que compartimos, por lo que pensamos que es improcedente para el paciente contar con un término de prescripción tan corto como el que se propuso en esta oportunidad. En cuanto a los perjuicios, estos se regirán por las tablas o tarifas de indemnización previamente establecidas y vigentes para el sistema de seguridad social. Es decir que cuando se presenten perjuicios en un paciente como consecuencia del ejercicio de la actividad médica, éstos serán resarcidos de acuerdo a tablas preestablecidas. 2.4.4 SOCIEDAD COLOMBIANA DE ANESTESIOLOGIA Y REANIMACIÓN En la XLI Asamblea General de la Sociedad Colombiana de Anestesiología y Reanimación “SCARE”, reunida en Manizales en Agosto de 1991, aprobó las normas mínimas de anestesiología, las cuales fueron posteriormente analizadas y aprobadas por el Comité Nacional del ejercicio de la Anestesiología; el cual es un organismo de alto nivel conformado por los 88 PROYECTO DE LEY NUMERO 1173 DE 2001 SENADO, Articulo 12, Eduardo Arango Piñeres. 89 REY FORERO. Eduardo. Articulo Cit. Pág. 3b 82 representantes de SCARE, Ministerio de salud, Superintendencia de salud y ASCOFADE. Hacemos referencia a este tema, por considerar que si bien este compendio normativo no es una Ley de la República, si tiene como fin regular el comportamiento del médico anestesiólogo y brindar mayor seguridad a los pacientes, pues su desconocimiento y posterior violación desencadenaría responsabilidad civil del galeno. 2.4.4.1 GRUPO DE TRABAJO 8 DE LA IV ASAMBLEA ORDINARIA SOBRE RESPONSABILIDAD PROFESIONAL. La Confederación Médica Latinoamericana y del Caribe se creo en 1997 y está integrada por 14 países: Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Chile, Ecuador, El Salvador, Haití, Honduras, Paraguay, Puerto Rico, Uruguay y Venezuela. La Declaración de la Confemel sobre la Responsabilidad Legal en el ejercicio de la Medicina, aprobada en diciembre de 1999 en Cartagena, Colombia, consagra determinaciones como las siguientes: a) “Constituye un motivo de preocupación la existencia de muy elevados plazos en la prescripción en materia de responsabilidad civil del médico. Se 83 entiende que tales normas legislativas no se adecuan a la realidad actual y que determinan costos adicionales innecesarios al sistema de salud”90. b) “La posibilidad de litigar sin costo en el fuero civil es uno de los factores que estimula la formulación de reclamos judiciales injustificados contra los médicos. Tal situación se revela como preocupante en países como Argentina y Brasil, mereciendo el apoyo de Confemel los reclamos de los médicos de estos países en cuanto a que el litigio sin costo se someta a los siguientes principios: que el reclamo sea patrocinado por un Defensor Público; que las pericias sean realizadas por entidades públicas; que se regule con suficiente rigor el otorgamiento de este beneficio”. 91 d) “Se debe propender a que los montos de las indemnizaciones por responsabilidad médica se establezcan con criterios realistas, en especial los referidos al daño moral”92. e) “En tanto la adecuada formación de pregrado y postgrado es un elemento decisivo en la prevención de la mala praxis médica, se observa con suma Preocupa El Marco Legal De Varios De Los Países. Grupo De Trabajo 8 De La Iv Asamblea Ordinaria. Tomado de la pagina de Internet: http://www.smu.org.uy/confemel/as0012-grupo8.htm 90 91 Preocupa el Marco Legal de Varios de los Países. Grupo De Trabajo 8 De La Iv Asamblea Ordinaria. Tomado de la pagina de Internet: http://www.smu.org.uy/confemel/as0012-grupo8.htm 92 Preocupa el Marco Legal de Varios de los Países. Grupo De Trabajo 8 De La Iv Asamblea Ordinaria. Tomado de la pagina de Internet: http://www.smu.org.uy/confemel/as0012-grupo8.htm 84 preocupación la descontrolada proliferación de escuelas de medicina en varios países de la Región”93. f) “Si bien se reconoce universalmente que las fallas en la relación médicopaciente son una de las claves en la generación de demandas por responsabilidad médica, la Asamblea de Confemel llama la atención sobre la existencia de fallas éticas en la relación interprofesional entre los médicos, las que frecuentemente son el origen de juicios por presunta responsabilidad profesional de médico”94. g) “Se debe estimular, desde las instituciones médicas, formas de protección contra las demandas por mala praxis”95. 2.5 POSICION JURISPRUDENCIAL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA Como nota preliminar al tema de jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia, estimamos pertinente hacer las siguientes consideraciones: 93 Preocupa el Marco Legal de Varios de los Países. Grupo De Trabajo 8 De La Iv Asamblea Ordinaria. Tomado de la pagina de Internet: http://www.smu.org.uy/confemel/as0012-grupo8.htm 94 Preocupa el Marco Legal de Varios de los Países. Grupo De Trabajo 8 De La Iv Asamblea Ordinaria. Tomado de la pagina de Internet: http://www.smu.org.uy/confemel/as0012grupo8.htm 95 Preocupa el Marco Legal de Varios de los Países. Grupo De Trabajo 8 De La Iv Asamblea Ordinaria. Tomado de la pagina de Internet: http://www.smu.org.uy/confemel/as0012grupo8.htm 85 La responsabilidad del Estado por falla del servicio médico es un tema especifico del Derecho Administrativo. Por ésto nos limitaremos a hacer una breve exposición de la posición adoptada por el Consejo de Estado sobre el particular, por considerar que éste guarda relación con el objeto de este trabajo. La responsabilidad por falla del servicio consiste “en afirmar que la ausencia de la prestación de un servicio estatal o la deficiencia en la misma que genera un daño, da lugar a la responsabilidad directa del estado”96. En este orden de ideas, se origina una obligación de “resarcimiento a favor de los ciudadanos cuando se presenta una falla en algún servicio prestado por el ente estatal”97. Este régimen de responsabilidad estatal se aplica a los profesionales de la salud al servicio del Estado, cuando por su indebida práctica médica se ocasionan daños a los pacientes, por considerarse en este evento, que los galenos son funcionarios del Estado. En Sentencia de Octubre 29 de 1990 el Consejo de Estado así lo expreso: “De esta forma, al comprobarse por la declaración del médico mismo que a la lesionada no se le practicó el examen preanestésico, que por lo general cosiste en información verbal simplemente, lo cual por si excluye que se tratará de un examen especializado de muy alto costo, la sala no puede menos que declarar que está probada la Falla o Falta del servicio, y que como consecuencia directa de ella se produjo el daño, esto es, la parálisis, hecho que se encuentra debidamente acreditado, ya que por demás subsiste y es de carácter permanente o irreversible”. 96 97 VIDAL PERDOMO, Jaime. Derecho administrativo. Bogotá, Ed. Temis, 1987. 9º ed. YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 125. 86 Es importante analizar en este punto, la diferencia que existe en la culpa por responsabilidad civil contractual o extracontractual, y la culpa que genera la responsabilidad por falla en el servicio médico. En esta última “no se requiere necesariamente probar que la culpa individual del agente, sino que basta probar que hubo una falla catalogarse como “anónima”, en el servicio, la cual puede inclusive según los principios del derecho administrativo”98. Por lo tanto lo que tiene que probarse es una irregularidad en la prestación del servicio médico independientemente del análisis de la conducta del galeno que la realizó. Esto configura un tratamiento jurídico y procesal distinto para la responsabilidad del médico que actúa como funcionario del Estado, ya que se regirá por los principios del derecho administrativo. El Consejo de Estado ha dicho que: “Así se absuelva al agente autor material del daño, esta circunstancia no es obstáculo para considerar que el hecho generador del perjuicio, si constituye una Falla del Servicio, porque como lo tiene repetido la jurisprudencia de esta Corporación, la responsabilidad del Estado es objetiva, anónima, basta que se acredite que el perjuicio se produjo como consecuencia de la prestación de un servicio a cargo del Estado”99. 98 99 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 129. Consejo de Estado. Sección 3ª. Sala de lo Contencioso Administrativo. s.c., Oct. 29, 1990. 87 En la responsabilidad médica por falla del servicio la culpa se presume, es por ésto que quien reclama perjuicios sólo tiene que probar el daño y el nexo causal con la prestación del servicio, pues como lo expresó el Consejo de Estado en sentencia del 24 de agosto de 1992: “ en la falla del servicio médico se presume uno de los tres supuestos de esa responsabilidad (los otros, como se sabe, son el daño y la relación de causalidad)” . Respecto al consentimiento informado100 el mismo Tribunal recientemente expresó que éste “debe ser ilustrado, idóneo y concreto, previo, y que su prueba corre a cargo del demandado, en atención a la situación de privilegio en se encuentra fácticamente, para procurar la verdad dentro del proceso” pues este debe cumplir todos estos requisitos expresados por el Consejo para que exonere de toda responsabilidad al médico, y en este caso al Estado. En la evolución jurisprudencial sobre la responsabilidad por el servicio médico asistencial, exigía al aportar la prueba de la falla para la prosperidad de sus 100 Consentimiento Informado: en la relación médico-paciente, este último debe tener claridad y certeza al manifestar su consentimiento expresamente, sea de manera personal o, a través de una persona que tenga su representación legal para hacerlo, o la más allegada; y este consentimiento será válido en la medida que se obtenga de una persona bien informada. El médico igualmente tiene la obligación de mantener informado al paciente, la cual debe ser suministrada en forma completa y precisa. El consentimiento debe referirse exclusivamente a tópicos inherentes a la salud del paciente, además no requiere de determinadas formalidades, pero esta premisa tiene una excepción en materia de trasplante de órganos, tema regulado en la legislación colombiana, al señalar que el consentimiento otorgado por el paciente, en uno de tales eventos, debe ser consignado en un escrito (Decreto 1171 de 1989, artículo 33). 88 pretensiones. Posteriormente, en sentencia de octubre 24 de 1990, la Sala consideró, que el artículo 1604 del Código Civil, debía ser aplicado también en relación con la responsabilidad extracontractual y en consecuencia, la prueba de la diligencia y cuidado correspondía al demandado en los casos de responsabilidad médica. La presunción de falla del servicio médico, que con esta posición jurisprudencial se acogió, fue reiterada en la decisión del 30 de junio de 1992, pero con una fundamentación jurídica diferente, la cual hacia referencia a la posibilidad en que se encuentran los profesionales, dado su conocimiento técnico y real, por cuanto ejecutaron la respectiva conducta, de satisfacer las inquietudes y cuestionamientos que puedan formularse contra sus procedimientos. La responsabilidad del Estado por los servicios médicos, se rige por el régimen de la falla presunta, luego sólo bastará probar los anteriores elementos, para que se configure esta clase responsabilidad. La jurisprudencia se refiere a la Falla del servicio y su procedencia, así: “...Una intervención quirúrgica por sencilla que sea lleva implícito un riesgo y por tanto, debe hacerse previa información de estado físico y psíquico del paciente...”101 101 Consejo de Estado. Sección 3ª. Sala de lo Contencioso Administrativo. s.c., Oct. 24, 1990. M.P. Gustavo de Greiff Restrepo 89 La Jurisprudencia en lo referente a la Falla del servicio médico, señala: “...Al médico no se obliga a realizar el hecho preciso y determinado consistente en el resultado de sanar al enfermo, pero sí se obliga a realizar y aún garantiza otros hechos no menos precisos y determinados, a saber, la sucesión de actos en que consiste un tratamiento médico con miras a obtener el resultado deseado...”.102 Con respecto a la falla presunta del servicio médico, la Jurisprudencia señala: “...Ahora bien, por norma general le corresponde al actor la demostración de los hechos y cargos relacionados en la demanda. Sin embargo, con mucha frecuencia se presentan situaciones que le hacen excesivamente difícil, cuando no imposible, las comprobaciones respectivas, tal el caso d las intervenciones médicas, especialmente quirúrgicas, que por su propia naturaleza, por su exclusividad, por la privacidad de las mismas, por encontrarse en juego intereses personales o institucionales etc., en un momento dado se constituyen en barreras infranqueables, para el paciente, para el cuidado común obligado procesalmente a probar aspectos científicos o técnicas profesionales sobre los cuales se edifican los cargos que por imprudencia, negligencia o impericia formula en el ejercicio de una determinada acción judicial, contra una institución encargada de brindar servicios médicos u hospitalarios. Sin duda, resultaría más beneficioso para la administración de justicia en general, resolver esta clase de conflictos, si en lugar de someter al paciente, normalmente el actor o sus familiares, a la demostración de las fallas en los servicios y técnicas científicas prestadas por especialistas, fueron éstos, los que por encontrarse en las mejores condiciones de conocimiento técnico y real por cuanto ejecutaron la respectiva conducta profesional, quienes satisficieran directamente las inquietudes y cuestionamientos que contra sus procedimientos se formulan. Podrán así los médicos exonerarse de responsabilidad y con ello los centros clínicos oficiales que sirven al paciente, mediante la comprobación, que para ellos, se repite, es más fácil y práctica, de haber actuado con la eficiencia, prudencia o idoneidad requeridas por las circunstancias propias al caso concreto, permitiéndole al juzgador un 102 Consejo de Estado. Sección 3ª. Sala de lo Contencioso Administrativo. s.c., Agosto 16, 1989. M.P. Gustavo de Greiff Restrepo 90 mejor conocimiento de las causas, procedimientos, técnicas y motivos que llevaron al profesional a asumir determinada conducta o tratamiento. Esta, por lo demás, es la orientación moderna de algunas legislaciones, que pretenden en los casos de las profesionales liberales atribuir a éstos la carga de la prueba de haber cumplido una conducta carente de culpa. Precisamente, en relación con el tema comentado y su consagración en el “ Proyecto de unificación de la legislación civil y comercial” de Argentina, el profesor Augusto M. Morello en su obra “La prueba. Tendencias Modernas”, Editorial Platense-Abeledo-Perot, 1991, páginas 84 y 85 escribe: “1. En consonancia con las ideas hoy predominantes, se ha desplazado el eje de referencia hacia el consumidor jurídico-quien es el que recaba la tutela jurisdiccional- más que colocarlo en el vértice del operador (juez o abogado) del fenómeno litigioso involucrado. 2.Responde solidariamente a la más conveniente función razonablemente posible, del lado del consumidor e, igualmente, del lado del profesional accionado, con los concurrentes beneficios para el órgano destinatario de la prueba. Si como con acierto se ha puntualizado, en principio y como regla, no es otro que el médico y no el enfermo el que mejor conoce “cuál fue la situación al comienzo de la atención, qué terapia era la más conveniente de acuerdo con el diagnóstico, que dificultades se presentaron, con qué medios técnicos disponían, cuáles fueron las causas probables de la frustración, qué rol le culpo a la entidad sanatorial”, la norma insinuada recoge esa evidencia de la situación real para reglamentarla en la asignación de un deber de cooperación (carga) que no significa, de por sí, atribuir culpa en el obrar del médico en el caso...”103. El Consejo de Estado acerca de la falla presunta en los servicios médicos oficiales, expuso: “...Como se observa, la nueva jurisprudencia, que implica un trascendental avance en este campo, consagra en forma más técnica la noción de falla presunta. Y aunque esta especie del género falla del servicio se asemeja en cierta forma a la noción que se ha venido 103 Consejo de Estado. Sección 3ª. Sala de lo Contencioso Administrativo. s., Julio. 30, 1992. M.P. Daniel Suárez Hernández 91 aplicando como tal con esa misma denominación (en los eventos de lesiones o muertes causadas por las armas de dotación oficial o por vehículos automotores o líneas de conducción de energía), estima la Sala que debe hacer algunas precisiones, porque entre una y otra existen motivos diferenciales. Así: Mientras en el evento de la responsabilidad por falla del servicio médico oficial se presume dicha falla, es decir se presume uno de los tres supuestos de esa responsabilidad ( los otros, como se sabe, con el daño y la relación de causalidad). En el evento de los daños producidos por las cosas por las cosas o actividades peligrosas, ya no juega la falla o la conducta irregular de la administración, sino sólo el daño antijurídico (C.N., art. 90) produciéndose así más que una presunción de falla, una responsabilidad...” 104. Responsabilidad Administrativa. Con la Constitución Política de 1991, se consagra la cláusula general de responsabilidad del Estado, sustentada en el artículo 90, en donde se abre paso a la posibilidad de que el Estado repita contra sus funcionarios cuando éste es condenado por responsabilidad de alguno de ellos, pero esta responsabilidad debe ser consecuencia de una conducta dolosa o gravemente culposa 105 . Con esto el médico que actúa dentro de alguna de estas dos conductas responderá ante el Estado, como consecuencia de la acción de repetición que se genera después de haberse condenado al Estado por falla del servicio médico. 104 Consejo de Estado. Sección 3ª. Sala de lo Contencioso Administrativo. s., Agosto 24, 1992. Expediente 6754 M.P. Carlos Betancur Jaramillo. 105 Artículo 90 C.P.: El Estado responderá patrimonialmente por los daños antijurídicos que el sean imputables, causados por la acción o la omisión de las autoridades públicas. En el evento de ser condenado el estado a la reparación patrimonial de uno de tales daños, que haya sido consecuencia de la conducta dolosa o gravemente culposa de un agente suyo, aquel deberá repetir contra este. 92 Esta cláusula general de responsabilidad extracontractual del Estado, tiene dos elementos característicos: la existencia de un daño antijurídico y que sea imputable al Estado. Una definición sobre esta responsabilidad la señala el autor Gustavo Mora como: “el incumplimiento en el funcionamiento normal del servicio, que incumbe a uno o varios agentes de la administración, pero no imputable a ellos personalmente. Ese incumplimiento debe examinarse a la luz del nivel medio que se espera del servicio, variable según su misión y según las circunstancias, estructurándose la falla, cuando éste se presta por debajo del nivel”.106 Competencia. Siguiendo el artículo 78 del C.C.A. “ Los perjudicados podrán demandar, ante la jurisdicción de lo contencioso administrativo según las reglas generales, a la entidad, al funcionario o a ambos. Si prospera la demanda contra la entidad o contra ambos y se considera que el funcionario debe responder, en todo o en parte, la sentencia dispondrá que satisfaga los perjuicios la entidad. En este caso la entidad repetirá contra el funcionario por lo que le correspondiera.” La respectiva acción se instaurara ante la Jurisdicción Contenciosa Administrativa, puesto que, una de las partes es una entidad pública que presta servicios médicos, por ende, es competencia exclusiva de la jurisdicción contenciosa administrativa. La Jurisdicción de lo Contencioso administrativo no ésta instituida para fallar controversias científicas, lo cual consta en el siguiente fallo: 106 GUZMÁN MORA, Fernando la Práctica de la Medicina y la ley. Editorial Biblioteca Jurídica DIKE, Medellín, 1996. 1 Ed. Pág.158 93 “...Saber si un tratamiento ha sido bien o mal ordenado, si no hubiere sido preferible otro, si tal operación era o no indispensable, si hubo o no imprudencia al arriesgarla, habilidad o no al ejecutarla, si este o aquel instrumento, según este o aquel procedimiento no habría resultado mejor, son cuestiones científicas a debatirse entre médicos y que no pueden constituir casos de responsabilidad civil ni caer bajo el examen de los tribunales, pero ello no es así desde el momento en que los hechos reprochados a los médicos salen de la clase de los que, por su naturaleza, están exclusivamente reservados a las dudas y discusiones de la ciencia, desde el momento que se complican de negligencia, ligereza o ignorancia de cosas que necesariamente deben saber...”107. La acción de Reparación Directa, es la acción idónea para entablar una demanda ante la Jurisdicción Contenciosa administrativa, consagrada en el artículo 86 Modificado por la Ley 446/98, Art.31 que reza: Acción de reparación directa. “La persona interesada podrá demandar directamente la reparación del daño cuando la causa de la petición sea un hecho, una omisión, una operación administrativa o la ocupación temporal o permanente de inmueble por causa de trabajos públicos o por cualquier otra causa. Las entidades públicas deberán promover la misma acción cuando resulten condenadas o hubieren conciliados por una actuación administrativa originada en culpa grave o dolo de un servidor o exservidor público que no estuvo vinculado al proceso respectivo, o cuando resulten perjudicadas por la actuación particular o de otra entidad pública”. 107 Consejo de Estado. Sección 3ª. Sala de lo Contencioso Administrativo. s., Abril 18, 1994. Expediente 7973 M.P. Julio Cesar Uribe Acosta. 94 Elementos estructurantes. Los elementos que se destacan en esta clase de responsabilidad, son: 1. Una acción u omisión, que es el hecho dañoso a cargo del médicoagente. 2. Un daño antijurídico, que aquel daño que el particular no tiene la obligación de soportar y que implica un detrimento patrimonial. 3. Nexo causal entre la acción u omisión y el daño antijurídico, es una relación causa efecto en la responsabilidad médica. En el régimen de responsabilidad médica, se presume el cuarto elemento que es la falla del servicio. Hay que tener en cuenta que, si bien se presume la falla del servicio, se debe demostrar el vinculo entre el nexo causal y la falla del servicio para que se configure la responsabilidad del Estado, porque sino se rompería dicho nexo, y no habría sustento para acreditar la responsabilidad. El presente caso lo señala: “...Pero en el caso concreto no hay lugar a aceptar como probable el hecho de que la menor murió como consecuencia de una deficiente atención médica frente a la broncoaspiración sufrida, por la negligencia del personal auxiliar del hospital porque aquí no fue imposible obtener certeza de dicho vínculo por razones de la complejidad científica del caso sino por la decisión de la misma parte demandante y en consecuencia, es ésta y no las entidades demandadas quien debe soportar los efectos negativos de la carencia probatoria. En síntesis, aunque se presuma la falla del servicio de las entidades demandadas, no es posible condenarlas a pagar los perjuicios sufridos 95 por los demandantes con la muerte de su hija, porque no se acreditó el vinculo causal entre esta falla y el daño por razones imputables sólo a estos...”108. Hechas las anteriores consideraciones, pasamos a abordar el tema de la Jurisprudencia de la CORTE SUPREMA DE JUSTICIA en materia de Responsabilidad Civil. 2.5.1 Sentencia del 30 de octubre de 1915 (G.J numero 1282 y 1283) No es precisamente sobre responsabilidad civil medica pero sí sobre un tema que guarda mucha relación con éste, el cual tocaremos por ser la primera vez que la Corte toma en consideración la relación médico-paciente y las posibles consecuencias jurídicas que se puedan presentar entre ellos. La naturaleza jurídica del contrato de prestación de servicios médicos no ha sido tratado de una forma uniforme por la Corte Suprema de Justicia, pues ha tratado de establecerlo sin éxito en muchas ocasiones. En esta oportunidad estima que este contrato es un arrendamiento de servicios al que se le aplican normas del mandato: “La Corte observa que la asistencia de un facultativo a un enfermo constituye una prestación de servicios en arrendamiento… pero esta clase de servicios, esto es, los de profesionales y carreras que suponen largos estudios, sin dejar de estar comprendidas en la nomenclatura y reglas legales establecidas en el Capitulo 9º, Titulo 26, Libro 4º, del Código Civil, está asimilado, según disposiciones de los artículos 2069 y 2144 del mismo Código, al mandato y se 108 Consejo de Estado. Sección 3ª. Sala de lo Contencioso Administrativo. s., Marzo 22, 2001. M.P.Ricardo Hoyos Duque. 96 rigen tanto por las reglas de este contrato como por las relativas a 109 arrendamiento de servicios inmateriales… ”. 2.5.2 Sentencia del 29 de marzo de 1923 (G.J.t XXX) La Corte en esta sentencia sigue sosteniendo que la relación que surge entre él médico y su paciente a la hora de prestarle los servicios médicos es un contrato de arrendamiento de servicios inmateriales asimilado al mandato: “Esta doctrina esta de acuerdo con la disposición del articulo 2069 del Código Civil, sobre arrendamiento de servicios inmateriales en relación con él articulo 2144, disposición que esta en el Titulo sobre mandato, y que versa sobre 110 servicios de profesionales y carreras que suponen largos estudios” . Pero la Corte en esta jurisprudencia agrega que: “La fijación de servicios médicos debe hacerse, a falta de convenio, por la costumbre establecida, y en su defecto por avaluó pericial, en lo cual entra indudablemente la fijación que hace el Juez, de acuerdo con la facultad que tiene para estimar la prueba pericial, con lo que no choca lo dispuesto en los artículos 2054 y 2143 del código citado”111. 2.5.3 Sentencia del 7 de diciembre de 1923 (G.J. t XXX) Esta sentencia comienza por diferenciar entre la consulta y el tratamiento, y las obligaciones que se desprenden de cada una de estas relaciones médicopaciente. “El médico atendió al enfermo no en mera consulta, sino en tratamiento completo de la enfermedad, el cual, como es bien sabido en la práctica profesional, exige las visitas domiciliares, más o menos frecuentes, según sea mayor o menor la gravedad del enfermo o más o menos lento el progreso de 112 curación” . 109 SENTENCIA DEL 30 DE OCTUBRE DE 1915. Corte Suprema de Justicia, Pág. 204 110 SENTENCIA DEL 29 DE MARZO DE 1923. Corte Suprema de Justicia, Pág. 52 111 SENTENCIA DEL 29 DE MARZO DE 1923. Corte Suprema de Justicia, Pág. 52 112 SENTENCIA DEL 7 DE DICIEMBRE DE 1923. Corte Suprema de Justicia, Pág. 238 97 En otro aparte la Corte se refiere al mismo tema diciendo: “... el tratamiento en conjunto de una enfermedad se aprecia de ordinario, según el uso profesional, en un mayor valor del que tienen visitas aisladas, pero jamás en uno menor”113. 2.5.4 Sentencia del 29 de octubre de 1930 (G.J.t. XXXVIII) En esta jurisprudencia se sigue desarrollando el tema del contrato de prestación de servicios médicos y se determina que un médico no tiene qué probar que pertenece a un determinado gremio profesional para que se le aplique él articulo 2144 del Código Civil, sino que basta que esta sea de aquellas que requieren largos estudios para que no se necesite pruebas: “En concepto de la Corte, para la aplicación del citado articulo 2144 no es preciso acreditar que el individuo que ha prestado los servicios es miembro de determinado gremio profesional, sino que basta inquirir si la profesión es de aquellas que suponen largos estudios, punto este que se resuelve en abstracto, o sea sin necesidad de prueba: no hay porqué exigirlas para saber, por ejemplo, que la ingeniería, la medicina y la abogacía se hallan en semejante caso”114. El Doctor Juan Castañeda explico: “la practica médica se encuentra incluida dentro de las llamadas profesiones liberales y por razones inherentes a ella no puede quedar fuera del ámbito de la responsabilidad civil, máxime teniendo en cuenta el principio fundamental de la igualdad de los individuos ante la ley”115. 113 SENTENCIA DEL 7 DE DICIEMBRE DE 1923. Corte Suprema de Justicia, Pág. 239 114 SENTENCIA DEL 29 DE OCTUBRE DE 1930. Corte Suprema de Justicia, Pág. 243 115 CASTAÑEDA F. Juan Ramón. Articulo Cit. Pág. 2b 98 2.5.5 Sentencia del 5 de marzo de 1940 (G.J.t XLIX) Es tal vez la primera sentencia colombiana que toca el tema de la responsabilidad civil profesional en que incurren los médicos cuando desarrollan su profesión. La Corte Suprema de Justicia en esta sentencia encuadra a la medicina dentro de las profesiones liberales, y por tal razón establece que las relaciones que se dan entre él médico y su paciente son actos jurídicos que llevan envueltos un su ejecución la responsabilidad civil del profesional. “Las relaciones jurídicas entre este y su cliente no están circunscritas únicamente a una actuación pasajera y fugaz, sino que trasciende a la órbita más amplia de la responsabilidad”116 Por otro lado, la responsabilidad profesional del médico que consagra esta jurisprudencia es siempre contractual, aun cuando los servicios médicos que se presten al paciente sean por cortesía, es decir gratuitos. “La responsabilidad del médico es contractual, no solo en la convención ordinaria, en donde los cuidados se dan mediante una prestación de honorarios, sino también en los contratos resultantes de las relaciones de confraternidad o cortesía donde los cuidados se dan sin contraprestación de dinero”117. La obligación profesional del médico por regla general es de medios, es decir que el galeno solo esta obligado a utilizar todos sus conocimientos que él 116 SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 117 117 SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 116 99 posea en pro de la recuperación de su paciente, pero no se obliga ha recuperarlo. “El facultativo esta obligado a desplegar en pro de su cliente los conocimientos de su ciencia y pericia y los dictados de su prudencia sin que pueda ser responsable del funesto desenlace de la enfermedad que padece su cliente o de la no curación de éste”118. Ahora, puede haber eventos en los cuales el médico asume una obligación de resultado, como es el caso de las intervenciones quirúrgicas con fines estéticos, en donde el profesional se compromete a dar un resultado. “Pueden haber casos en que el médico asume una obligación de resultado, como la intervención quirúrgica en una operación de fines estéticos. Algunos expositores sostienen que, salvo estipulación en contrario, él medico en ese caso esta vinculado a una operación de resultado”119. La responsabilidad del médico no es ilimitada, ni motivada por cualquier cosa, sino que exige además la certidumbre de la culpa, y la gravedad, es decir, que para que exista responsabilidad civil profesional médica es necesaria la demostración de la culpa cometida por él medico y la gravedad de ésta, además debe existir una relación de causalidad entre el acto imputado al médico y el daño sufrido; con ésto comienza ha estructurarse la doctrina y consagración jurisprudencial de la culpa probada en este tema. “El médico no será responsable de la culpa o falla que se le imputan sino cuando haya una relación de causalidad entre su acto y el daño sufrido por el cliente, o cuando esa culpa o falta haya sido la determinante del perjuicio causado”120. 118 SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 118 119 SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 116 120 SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 116 100 El Doctor Yépez Restrepo considera, que el criterio de la Corte no es del todo acertado cuando establece: que “la responsabilidad... exige no sólo la certidumbre sino también la gravedad”121, pues existen varias razones que determinan lo contrario: “Primero por que el contrato de servicios médicos reporta beneficios para ambas partes, y por ello se debe responder no sólo de la culpa grave, sino también de la leve, de acuerdo a las normas vigentes en nuestro ordenamiento”122. “Segundo porque dada la importancia de la vida y la integridad personal es conveniente exigirle al médico una mediana y máxima diligencia en su accionar, como si se tratara de la labor de sus propios asuntos”123. “Y tercero, porque se desprotegería ostensiblemente a la víctima, la cual estaría en una situación de indefensión procesal, al tener que demostrar una culpa de gran entidad”124. Con la consagración de la culpa probada como base para resolver los casos de responsabilidad civil del médico se descarta el pensamiento de otros doctrinantes sobre que la actividad médica es peligrosa, ya que esta tesis 121 SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 116 122 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 71 123 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 71 124 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 71 101 “seria inadmisible desde el punto de vista legal y científico125” y por lo tanto haría “imposible el ejercicio de la profesión”126. La carga de la prueba en esta sentencia la tiene el demandante, y el médico tanto en la responsabilidad contractual como extracontractual, en caso de que existan perjuicios, puede proponer a su favor su actuación diligente o el descuido, desobediencia o imprudencia del paciente, como también la fuerza mayor y el caso fortuito, descartándose así la presunción de culpa en contra del médico. “Al demandante incumbe probar esa relación de causalidad, o en otros términos, debe demostrar los hechos de donde sé desprende aquella”127. Finalmente y por vía de doctrina la Corte Suprema de Justicia estableció: que “no siempre que el profesional médico incurre en la culpa es necesario la intervención de peritos médicos para establecerla, puesto que pueden existir casos en que no se trate de un asunto de técnica médica, sino de una culpa independiente de ésta, como sería que por un descuido o negligencia del médico encargado de una clínica donde estuviera a su cuidado un enfermo enloquecido por la fiebre se escapara de éste y se arrojara desde una de las 125 SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 119 126 SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 119 127 SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 119 102 ventanas del edificio y se matara o lesionara. En este caso un concepto médico no sería necesario, podrían bastar declaraciones de testigos”128. En otro aparte la Corte Expresa: “La apreciación de la culpa imputada al médico, en unos casos requiere la estimación de una cuestión técnica de orden médico y en otras esa estimación no es necesaria”129. Por otro lado, “uno de los inconvenientes prácticos de los dictámenes en responsabilidad médica, es que los peritos se parcializan a favor del médico en virtud de un supuesto colegaje, lo cual en vez de favorecer la medicina lo que hace es perjudicarla encubriendo los malos profesionales”130. 2.5.6 Sentencia del 14 de marzo de 1942 (G.J. numero 1941 y 1942) Comencemos por anotar que el caso de la sentencia en referencia es de responsabilidad del estado por culpa de uno de sus agentes, pero fue conocido por la Corte Suprema de Justicia por que en esta época no existía el Consejo de Estado, y por lo tanto la Corte conocía de estos temas. “En el caso de autos la conducta del médico Sarmiento, manifiesta y gravemente contradictoria y negligente, compromete su responsabilidad y, por ende, la del Estado a cuyo servicio estaba”131. 128 SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 120 129 SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 120 130 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 72 131 SENTENCIA DEL 14 DE MARZO DE 1942. Corte Suprema de Justicia, Pág. 920 Y S.S. 103 En otro aparte la Corte dice: “Es este un caso típico de mal funcionamiento de un servicio, falta por la cual debe responder civilmente quien acciona por medio de sus agentes o dependientes, tal servicio”132. El caso es claro, un perro callejero muerde a un soldado, y este es remitido donde él médico para que le dé el tratamiento pertinente, pues el perro era desconocido por todos y desapareció después del hecho, por lo tanto se desconoce su salud. El médico no realiza el tratamiento preventivo de mal de rabia y el soldado muere como consecuencia de la enfermedad que sufría el perro, como consecuencia de ésto el médico es hallado responsable de la muerte del soldado por negligencia. Al respecto la Corte dice: “Tratándose de un mal de tan terribles consecuencias de no evitarlo en oportunidad por medio del tratamiento preventivo que la ciencia aconseja, bastaba la simple sospecha –no, la seguridad- de que el animal que mordió a Valencia estuviese afectado con esa enfermedad, para que la prudencia del médico se hubiese hecho conocer, aconsejando la inmediata aplicación de tal tratamiento al paciente, tanto más si de esta aplicación no resultaba a éste 133 ningún daño, en caso de no estar enfermo el animal que lo mordió” . La Corte con esta sentencia cambia la posición que venía adoptando en años anteriores respecto al tema de la culpa en la responsabilidad civil médica, pues invoca como fundamento de derecho en este caso el articulo 2356 del Código 132 SENTENCIA DEL 14 DE MARZO DE 1942. Corte Suprema de Justicia, Pág. 938 133 SENTENCIA DEL 14 DE MARZO DE 1942. Corte Suprema de Justicia, Pág. 937 104 Civil sobre actividad peligrosa, es decir que la Corte pasa de la posición de la culpa probada, a la tesis de considerar la actividad médica una actividad peligrosa en donde se presume la culpa. “Esa conducta del doctor Sarmiento, manifiesta y gravemente contraria y negligente… (artículos 2341,2347,2349 y 2356 del Código Civil)”134. Existe otro punto importante en esta sentencia, y es el error en el diagnóstico o en el tratamiento, ya que la Corte en este tema determinó la importancia del reconocimiento, comprobación y aceptación de un tratamiento en el campo de la ciencia. Mal haría la jurisprudencia al establecer responsabilidad al médico cuando un tratamiento que aún presenta controversias por su efectividad, o no cumpla el fin para el cual fue aplicado, siendo este caso una causal de exoneración de culpa. “El error de diagnóstico o de tratamiento puede disminuir y aún excluir la culpa y la responsabilidad por parte de un médico, cuando se trate de casos que aún permanezcan dentro del campo de la controversia científica…”135. Pero, más adelante reafirma la presunción de culpa que existe en los casos como la mal de rabia en donde la ciencia tiene ya suficientes conocimientos y no es irracional presumir que un médico debe saber cual es el tratamiento adecuado y que debe aplicar a su paciente so pena de incurrir en negligencia. “… como el presente –el mal de rabia- la ciencia médica tiene ya suficientemente estudiados y conocidos, de suerte que ha presumirse que un facultativo competente y diligente no puede ignorar, en presencia de uno de 134 SENTENCIA DEL 14 DE MARZO DE 1942. Corte Suprema de Justicia, Pág. 937 135 SENTENCIA DEL 14 DE MARZO DE 1942. Corte Suprema de Justicia, Pág. 937 105 estos casos, lo que le corresponde hacer para salvar la vida del paciente que a 136 su saber y diligencia confía” . Respecto al tema del error en el diagnóstico o en el tratamiento El Doctor Juan Ramón Castañeda opinó: “el respeto a la prescripción de un médico debe ser total, pues debe suponerse que prescribe con base en sus conocimientos para tomar las decisiones y asumir las repercusiones de responsabilidad que acarrea un documento como la receta, fórmula o prescripción”137. Por otro lado, explica que lo “anterior implica que el médico debe conocer profundamente y suficientemente lo que prescribe o receta”, porque de lo contrario será responsable por mal diagnóstico; ahora, cuando lo que hace es prescribir “un medicamento a sabiendas de que hay mejores disponibles y no lo hace saber a sus pacientes... no solo se tipifica como negligente sino que incurre en mala práctica”138. 2.5.7 Sentencia del 14 de octubre de 1959 ( G.J numero 2217) Si bien la Corte Suprema de Justicia reconoce en esta sentencia que la responsabilidad del médico para con su paciente es contractual, agrega que la responsabilidad nacida de los daños causados al paciente genera responsabilidad extracontractual del médico para con los familiares de éste cuando se presenten como terceros en dicho contrato, es decir, como víctimas por los daños cometidos al familiar. Al respecto Laleu dice: “La responsabilidad contractual del médico que descansa en una convención es evidentemente 136 137 SENTENCIA DEL 14 DE MARZO DE 1942. Corte Suprema de Justicia, Pág. 937 CASTAÑEDA F. Juan Ramón. De La Prescripción Médica. Revista Derecho & Medicina. Registro Medico. Volumen 4 · 38. Octubre 2001. Pág. 3b 106 inaplicable en caso de daño causado a tercero”139. Savatier también expresó: “Bien que la responsabilidad del médico es normalmente contractual ella puede ser delictual frente a terceros, especialmente a los parientes de la víctima”140. Sobre el tema la Corte a dicho lo siguiente: “La doctrina ha aceptado que éstos pueden ejercer la acción de responsabilidad contractual o extracontractual según ocupen él puesto de su causante a quien se incumplió con la… o se presenten como extraños a dicha convención, pero como víctimas por él impacto material o moral del hecho causante del daño, es decir, del deceso… desde luego los principios anteriores son extensivos a todo contrato cuyo incumplimiento pueda perjudicar a un tercero”141. Por otro lado, la Corte afirma que la actividad médica, es decir los tratamientos aplicados por éstos son actividad peligrosa, en la cual existe una presunción de culpa en contra del facultativo, la cual tiene que desvirtuar probando que existió caso fortuito, fuerza mayor o culpa exclusiva de la víctima o de un tercero. “… y que los tratamientos médicos implican actividad peligrosa a la luz de la 142 doctrina sobre él articulo 2356 del C.C” . En otro aparte de la sentencia la Corte dice: “Es aplicable él articulo 2356 del código civil por tratarse de actividades peligrosas. Debe indagarse de la presunción de culpa que milita contra él, frente a quienes aparecen como terceros al contrato de hospitalización”143. 138 CASTAÑEDA F. Juan Ramón. Articulo Cit. Pág. 3b 139 LALOU. Heri. Traite Practique de la Responsabilite civile. Librarie Dalloz, Paris 1955, Pág. 296 140 SAVATIER. Rene. Traite de la Responsabilite civil. Droit & Jurisprudence, Paris 1951, tome I, Pág. 386 141 SENTENCIA DEL 14 DE OCTUBRE DE 1959. Corte Suprema de Justicia, Pág. 758 142 SENTENCIA DEL 14 DE OCTUBRE DE 1959. Corte Suprema de Justicia, Pág. 762 143 SENTENCIA DEL 14 DE OCTUBRE DE 1959. Corte Suprema de Justicia, Pág. 762 107 Es importante anotar que si bien no hace un análisis sobre el tema, la Corte sí estableció en esta sentencia al recoger el pensamiento de Lalou que el médico director de clínica responde por las enfermeras y enfermeros que tiene bajo sus ordenes, de la siguiente forma: “… El caso del médico director de clínica que tiene bajo sus ordenes los enfermeros y enfermeras que él mismo ha escogido. Estos enfermeros y enfermeras son evidentemente sus dependientes en el sentido del articulo 1384 del código civil”144; que trata sobre responsabilidad indirecta extracontrato. 2.5.8 Sentencia del 3 de noviembre de 1977 (G.J. numero 2398) La sentencia trata sobre el incumplimiento de un contrato de asistencia técnica y financiera para el cultivo de tomates, pero es analizada por nosotros en este trabajo, por que en ella la Corte mediante un ejemplo de responsabilidad médica establece que la carga de la prueba pasa ha ser del facultativo al tratar el daño como consecuencia directa del incumplimiento de una obligación. “Es el médico a quien corresponde demostrar, ora que no pudo continuar prestándolos por fuerza mayor, o caso fortuito, ora que aún el supuesto de haberlos prestado hasta ultima hora el paciente hubiera fallecido de todos modos”145. Aparece un tema que hasta ahora no había sido tratado, y es la reclamación de los perjuicios por parte de los herederos cuando el paciente muere por responsabilidad del galeno, en esta jurisprudencia la Corte consagra que tienen derecho a reclamar y además que ellos sólo tienen que denunciar, 144 LALOU. Ob. Cit. Pág. 300 145 SENTENCIA DEL 3 DE NOVIEMBRE DE 1977. Corte Suprema de Justicia, Pág. 332 108 porque es al médico a quien le corresponde probar que la víctima no falleció por su culpa. “Si el paciente fallece, valga de nuevo el ejemplo, y sus herederos afirman que el médico obligado a tratarlo suspendió o disminuyo sus servicios desde determinado momento, no pueden exigírsele que demuestren que el fallecimiento de su causante se produjo precisamente por la supresión o 146 disminución del tratamiento” Al igual que en otras sentencias la Corte considera que por regla general las obligaciones que contraen los facultativos con sus pacientes son obligaciones de medios y no de resultado, por tal razón ellos no se obligan “a sanar el enfermo, sino a ejecutar correctamente el acto o serie de actos que, según los principios de su profesión, de ordinario deben ejecutarse para conseguir el resultado. El haber puesto estos medios, con arreglo a la ciencia y a la técnica, constituye el pago de esta clase de obligaciones”147. Al respecto el Doctor Tamayo Jaramillo dice que: “lo que hace que el médico, a pesar del papel activo que desempeña en la ejecución del contrato, sólo tenga una obligación de medios, radica en que, por más que controle la ejecución del contrato de todas maneras hay una serie de fuerzas físicas y biológicas que influyen en el resultado, hasta el punto de que el médico solo tiene unas limitadas probabilidades de lograr la curación, que es el objeto del acreedor, es decir por el paciente”148. 146 SENTENCIA DEL 3 DE NOVIEMBRE DE 1977. Corte Suprema de Justicia, Pág. 332 147 SENTENCIA DEL 3 DE NOVIEMBRE DE 1977. Corte Suprema de Justicia, Pág. 332 148 TAMAYO JARAMILLO, Javier. Culpa Contractual. Bogotá, Editorial Temis, 1990. Pág. 198 109 2.5.9 Sentencia del 12 de septiembre de 1985 (G.J numero 2419) “La profesión médica, cuyo objeto es cumplir una función social, implica obligaciones de carácter ético y profesional para quienes la ejercen, de tal manera que su transgresión delictiva o culposa pueda dar lugar a sanciones penales y civiles, según que aquella configure una conducta tipificada por la Ley penal o quede circunscrita a la responsabilidad civil”149. Frente a esto, el Doctor Juan Ramón Castañeda en su articulo “De La Responsabilidad Médica” concluyó “que el médico tiene el deber de poner todo su cuidado y diligencia siempre que atienda o intervenga a sus pacientes con el fin de procurar su curación o mejoría, así que cuando por negligencia, descuido u omisión causa perjuicio en la salud de aquellos incurre en una conducta ilícita, que será calificada por el juez, según la magnitud, desde la simple culpa hasta la más grave, para así mismo imponer al demandado la respectiva condena o indemnizar a la víctima del daño causado, sin perjuicio de las sanciones penales a que haya lugar”150. Esta sentencia, ratifica la reiterada jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia que consagra las obligaciones de los médicos en el contrato de servicios profesionales como de medios y no resultado. “Con relación a las obligaciones que él medico asume frente a su cliente, hoy no se discute que el contrato de servicios profesionales implica para el galeno el compromiso sino exactamente de curar al enfermo, sí al menos de suministrarle los cuidados concienzudos solicitados y conformes con los datos adquiridos por la ciencia…”151 149 SENTENCIA DEL 12 DE SEPTIEMBRE DE 1985. Corte Suprema de Justicia, Pág. 763 150 CASTAÑEDA F. Juan Ramón. Articulo Cit. Pág. 3b 151 SENTENCIA DEL 12 DE SEPTIEMBRE DE 1985. Corte Suprema de Justicia, Pág. 764 110 Por otro lado, abandona la posición sentada por esta misma Corte en jurisprudencias anteriores con relación al tema de que la responsabilidad civil profesional medica es una actividad peligrosa, y retoma el pensamiento francés, que afirma que la responsabilidad médica es contractual o extra contractual, según la naturaleza, y por lo tanto la culpa hay que probarla. Castañeda afirmó: “la Corte Suprema de Justicia en el año 1985 se refirió al tema de la responsabilidad civil del médico, y estableció que ésta puede ser contractual o extracontractual;... de allí se pude concluir que el médico podrá incurrir en responsabilidad civil por daños eventuales que ocasione a sus pacientes por omisión o exceso en los tratamientos y procedimientos quirúrgicos, que generalmente están precedidos por la celebración de un contrato de servicios médicos y en algunas ocasiones de la simple intervención unilateral del médico en razón de sus deberes”152. Este mismo autor en otro artículo llamado “De La Prescripción Médica” afirmó: “la actividad del médico debe realizarse (exista o no contrato), según unas directrices comprendidas en las normas ético-médicas ya anotadas y por esta razón sus deberes y obligaciones son los mismos tanto en el plano contractual como en el extracontractual”153. La carga de la prueba vuelve al paciente que sufre los perjuicios, por lo tanto es él quien debe probarlos ante el juez si quiere su resarcimiento. 152 CASTAÑEDA F. Juan Ramón. Articulo Cit. Pág. 3b 153 CASTAÑEDA F. Juan Ramón. Articulo Cit. Pág. 3b 111 “El médico tan solo se obliga a poner en actividad todos los medios que tenga a su alcance para curar al enfermo; de suerte que en caso de reclamación, este deberá probar la culpa del médico, sin que sea suficiente demostrar ausencia de curación”154. 2.5.10 Sentencia del 26 de noviembre de 1986 (G. J. numero 2423) Esta sentencia tiene un gran valor en el desarrollo jurisprudencial colombiano, pues por primera vez la Corte Suprema de Justicia se refiere directamente a las cirugías estéticas, es decir desarrolla el tema y lo aplica a un caso concreto. “Por lo que a la cirugía estética se refiere, o sea cuando el buscado con la intervención es la corrección de un defecto físico, pueden darse situaciones diversas que así mismo tendrán consecuencias distintas respecto de la responsabilidad del cirujano. Así las cosas, deberá establecerse cual fue la obligación que contrajo el cirujano con su paciente, para deducir si el fracaso 155 de su operación le hace o no responsable” . Las obligaciones que contraen los galenos en los contratos de prestación de servicios continúan siendo por regla general de medios, y en casos excepcionales como las intervenciones quirúrgicas con fines estéticos donde se asegura el resultado la obligación del médico serán de resultado. “Cuando en el contrato hubiere asegurado un determinado resultado si no lo obtiene será culpable y tendrá que indemnizar a la víctima, salvo que se den los casos de exoneración previamente mencionados de fuerza mayor, casos fortuito o culpa de la perjudicada. Pero, sí tal resultado no se ha asegurado expresamente, cuando se alcanza, el médico quedará sujeto a las reglas 156 generales sobre culpa o ausencia de esta” . Es por esto, que a diferencia de los otros médicos, el cirujano plástico tiene una mayor responsabilidad con el paciente, pues él se compromete a dar un 154 SENTENCIA DEL 12 DE SEPTIEMBRE DE 1985. Corte Suprema de Justicia, Pág. 407 155 SENTENCIA DEL 26 DE NOVIEMBRE DE 1986. Corte Suprema de Justicia, Pág. 359 156 SENTENCIA DEL 26 DE NOVIEMBRE DE 1986. Corte Suprema de Justicia, Pág. 360 112 resultado, el cual es esperado por todos. Al respecto el Doctor Coiffman opina: “que en la cirugía estética existe un concepto más riguroso en cuanto al pronóstico de cada caso: el super resultado es esperado por el paciente, por los familiares o por unos y otros, quienes deben estar bien preparados y conocer claramente las limitaciones que pueden acompañar los resultados deseados: Cuando falta esta preparación, existe insatisfacción que se podría transformar en un proceso contra el médico”157, ésto es lo que se conoce como consentimiento informado. Respecto a este tema el Doctor Yépez Restrepo opinó: “el paciente acude al médico no porque tenga alguna enfermedad que lo aqueje, sino porque desea mejorar su aspecto estético en virtud del cambio de alguna parte de su cuerpo, rostro, etc. Por esta razón no se está hablando de una curación del paciente, sino de realizar un cambio estético en la persona que al ser preciso y determinado se constituye en un resultado, el cual es convenido al celebrar el contrato de servicios médicos”158. Se dice entonces que “en general la obligación asumida por el facultativo especializado en cirugía estética es de resultado, ya que de no prometer un resultado feliz el paciente no se sometería al acto quirúrgico o tratamiento”159. 157 COIFFMAN, Felipe. Texto de Cirugía Plástica Reconstructiva y Estética. Barcelona Editorial Salvat. 1986. 158 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 77 y 78 159 BUSTAMANTE ALSINA, Jorge. Teoría General de la Responsabilidad Civil. Pág. 407 113 La Corte con relación a la naturaleza jurídica del contrato de prestación de servicios médicos después de muchos cambios concluye en esta sentencia que es un contrato sui generis al predicar, “sin hacer calificación alguna, que al contrato médico de prestación de servicios profesionales le eran aplicable”160: “Las normas del titulo XII del libro cuarto del Código Civil, sobre efectos de las obligaciones y no las relativas a la responsabilidad extracontractual…”161. El contrato que se celebra entre el médico y su paciente sigue siendo de prestación de servicios profesionales, pero en esta jurisprudencia el pensamiento de la Corte con respecto a la carga de la prueba cambia, pues pasa de tenerla el demandante, al médico, es decir que es al galeno a quien le toca desvirtuar la culpa, ya que existe en su contra una presunción de culpa, la cual desvirtuara probando su diligencia y cuidado a la hora de realizar su labor, o alguna causal de exoneración como “fuerza mayor, caso fortuito o culpa de la perjudicada”162. Son muchas las “posibilidades que tiene el profesional de la medicina para exonerarse de la responsabilidad, la cual pretende imputársele a través de un proceso judicial. Esto lo confirma la Corte al decir que “el demandado podrá exonerarse de responsabilidad demostrando ausencia de culpa, por haber 160 SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia, Pág. 10 161 SENTENCIA DEL 26 DE NOVIEMBRE DE 1986. Corte Suprema de Justicia, Pág. 360 162 SENTENCIA DEL 26 DE NOVIEMBRE DE 1986. Corte Suprema de Justicia, Pág. 360 114 puesto todo el cuidado que el caso requería, caso fortuito, fuerza mayor o culpa del paciente por no haber cumplido las prescripciones”163. 2.5.11 Sentencia del 12 de julio de 1994 (G.J. numero 3656) Con esta sentencia se buscó consolidar la tesis francesa de la culpa probada en nuestro país para los casos de responsabilidad civil médica, de ahí que la sala de esta corte afirme que: “Para que esta culpa sea idónea en su responsabilidad es necesario que sea imputable al profesional o institución médica correspondiente y que además sea la causa eficiente de los perjuicios que se ocasionen al paciente, esto es, igualmente indispensable que exista relación de causalidad entre la primera y los últimos”164. También se reiteró que para que exista responsabilidad civil médica es necesario que se configuren los tres elementos de la responsabilidad: culpa del médico, el daño y la relación de causalidad. “Responsabilidad contractual se encuentre plenamente probados, conforme a derecho, los elementos que la estructuran, como son la culpa contractual, el daño y la relación de causalidad; y que sólo puede el juez acudir al arbitrium judicium o potestad discrecional judicial para fijar el quántum o cuantía del daño moral”165. 163 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 73 164 SENTENCIA DEL 12 DE JULIO DE 1994. Corte Suprema de Justicia. Tomado de la pagina de Internet: http://www.legis.com.co 165 SENTENCIA DEL 12 DE JULIO DE 1994. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina de Internet: http://www.legis.com.co 115 Es importante recoger un tema que si bien ha sido tratado por la Corte desde 1915, también es cierto que hasta esta sentencia lo presenta con tanta claridad, y es el tema de los perjuicios que se le causan al paciente como consecuencia de la culpa del médico, por esto creemos relevante transcribir el pensamiento de la sala: “Dentro de estos perjuicios resultan indemnizables tanto los materiales como los morales. Los primeros comprenden tanto el daño emergente como el lucro cesante (Art. 1613 del C.C.), que en este evento asumen características particulares. Porque el daño emergente, como la pérdida que sufre el paciente por haberse cumplido imperfectamente el servicio médico profesional, si bien no comprende el deterioro y disminución psicofísica en la salud humana, por su carácter estrictamente extrapatrimonial, no es menos cierto que sí contiene las pérdidas consecuenciales de este daño corporal valorables económicamente, como serían la reducción y pérdida de la capacidad laboral (que importa y tiene incidencia más bien para el lucro cesante), los gastos hospitalarios, quirúrgicos, terapéuticos; rehabilitación, gastos de transporte, etc. De otra parte, el lucro cesante, como aquella ganancia o provecho que se deja de percibir precisamente por el daño ocasionado al cuerpo y a la salud, estaría representado por la supresión o reducción temporal o indefinida (hasta que ella subsista) de los ingresos, por efecto de la eliminación, reducción o transformación (en caso de rehabilitación para otro trabajo) de la capacidad laboral, así como de algunos que específica e inequívocamente se hayan dejado de percibir. Y por último, esta Corporación siguiendo la doctrina 116 universal en el punto, estima que por referirse este contrato en su esencia y ejecución a la salud de la persona humana, es posible de manera excepcional (lo que no ocurre generalmente cuando se trata de cosas o bienes) que el incumplimiento del servicio médico profesional sea causa concurrente tanto de los daños materiales mencionados como de daños morales en el paciente. Como consecuencia del primero se produce de manera autónoma de manera independiente (sic) dolores, padecimientos, aflicciones y afectaciones como individuo y ser social, todos ellos constitutivos de lo que se denomina el daño moral, evento en el cual deberá indemnizarse”166. Aparece en la doctrina el termino áleas, él cual hace referencia a los imprevistos físicos y biológicos que se pueden presentar durante el desarrollo de un tratamiento u operación. La presencia de estos áleas es lo que justifica que la obligación del médico sea de medios y no de resultados. Al respecto opinó la Doctora Domínguez: “por lo general las jurisprudencias, tratan de separar en el interior del contrato médico lo que depende del álea propia de la enfermedad, donde no existirá más que una obligación de medio, ya que cuando el álea se ausenta, la obligación se vuelve de resultado”167. Con esto queremos precisar que en esta jurisprudencia también se sigue el pensamiento anotado por la Corte durante varios años, sobre la obligación del médico. 166 SENTENCIA DEL 12 DE JULIO DE 1994. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina de Internet: http://www.legis.com.co 167 DOMÍNGUEZ DE MORA, Olga Victoria. Responsabilidad Médica en la Legislación y Jurisprudencia Nacionales. Tesis. Pontificia Universidad Javeriana. 1983. Pág. 36 117 2.5.12 Sentencia del 30 de enero de 2001 Con esta sentencia la sala civil de la Corte recoge el pensamiento emitido por ella durante los últimos años y determina que es lo que esta vigente en la responsabilidad civil de los médicos por la prestación del servicio profesional. A pesar de que la Corte durante algunos años acogió la tendencia de calificar la responsabilidad del médico como actividad peligrosa (entre 1959 y 1942), en el 2001 reconfirma lo emitido en 1940, sobre la demostración de la culpa, es decir, que él médico se presume inocente hasta que no se demuestre que actuó con culpa y que por lo tanto es responsable. Al respecto la Corte expresó: “Tratándose de responsabilidad civil de los médicos por la prestación del servicio profesional, desde hace algún tiempo, la Corte ha venido predicando que ésta es una responsabilidad que se deduce mediando la demostración de la culpa, independientemente de que la prestación indemnizatoria tenga causa contractual o extracontractual”168. Ahora, la Corte no desconoce que existe un riesgo potencial en la prestación de los servicios médicos por parte del facultativo, pero explica que esto no hace que la actividad médica se torne peligrosa, pues, “los fundamentos éticos, científicos y de solidaridad”169lo justifican y lo hacen necesario para el bienestar del paciente: “Ciertamente, el acto medico y quirúrgico muchas veces comporta un riesgo, pero éste, al contrario de lo que sucede con la mayoría de las conductas que la jurisprudencia ha signado como actividades peligrosas en consideración al 168 SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina de Internet: http://www.legis.com.co 169 SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina de Internet: http://www.legis.com.co 118 potencial riesgo que generan y al estado de indefinición en que se colocan los asociados, tiene fundamento ético, científico y de solidaridad que lo justifican y lo proponen antológica y razonablemente necesario para el bienestar del paciente, y si se quiere legalmente imperativo para quien ha sido capacitado como profesional de la medicina, no sólo por el principio de solidaridad social que como deber ciudadano impone él articulo 95 de la Constitución, sino particularmente, por las implicaciones humanísticas que le son inherentes, al ejercicio de la medicina…”170. Las obligaciones de los médicos continúan siendo de medios por regla general, y excepcionalmente de resultados, igualmente se les sigue aplicando el principio de la carga de la demostración de la culpa del médico sin la condición de la gravedad, que en una época se exigió, pues ésta “graduación hoy en día no puede aceptarse, porque aún teniendo en cuenta los aspectos tecnológicos y científicos del acto profesional médico, la conducta sigue siendo enmarcable dentro de los limites de la culpa común, pero, si duda alguna, sin perder de vista la profesionalidad...”171. La Corte agrega que en el caso de la distribución de carga de la prueba “lo fundamental está en identificar el contenido y alcance del contrato de prestación de servicios médicos celebrado en el caso concreto, porque es este contrato especifico el que va a indicar los deberes jurídicos que hubo de asumir el médico, y por contera el comportamiento de la carga de la prueba en torno a los elementos que configuran su responsabilidad y particularmente de la culpa, por que bien puede suceder, como en efecto ocurre, que el régimen 170 SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina de Internet: http://www.legis.com.co 171 SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina de Internet: http://www.legis.com.co 119 jurídico específico excepcione el general de los primeros incisos del articulo 1604 del Código Civil, conforme lo autoriza el inciso final de la norma”172. Acerca de la naturaleza jurídica del contrato de prestación de servicios, después de muchos cambios, la Corte en esta sentencia establece que es un contrato multiforme o proiforme, o variable, es decir, “un contrato que enabstracto no se puede clasificar”173, por que es necesario verlo referido a un caso concreto para poder determinar su naturaleza. Al respecto la Corte consagra: “... no se puede clasificar, como ahora lo entiende la Corte, dada la falta de una regulación especifica del mismo, por que en concreto, es decir teniendo en cuenta la relación efectivamente ajustada, bien pudiera configurarse como uno u otro contrato de los típicamente previstos por la Ley: arrendamiento de servicios, confección de obra, mandato, de trabajo, etc., o un contrato atípico, o si se quiere sui generis”174. Al respecto el Doctor Fernández Costales expreso: “la naturaleza jurídica del contrato de servicios médicos vendrá determinada por la actividad o tipo de asistencia facultativa que realice en cada momento, hecho que guarda intima conexión con las especialidades médicas, siendo necesario analizar cada una de ellas y en función del contenido técnico de las mismas”175. 172 SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina de Internet: http://www.legis.com.co 173 SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina de Internet: http://www.legis.com.co 174 SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina de Internet: http://www.legis.com.co 175 FERNÁNDEZ COSTALES, Javier. El Contrato De Servicios Médicos. Madrid. Edición Civilistas S.A. 1988. Pág. 69 120 Ahora, es importante anotar que en ésta jurisprudencia se establece que no es “dable, ni prudente, sentar precisos criterios de evaluación probatoria”176, pues la Corte reconoce que cada caso concreto determinará los elementos que le permitan “identificar cuál fue realmente la prestación prometida, para a partir de ella proceder al análisis del comportamiento del profesional de la medicina y así establecer la relación de causalidad con el daño sufrido por el paciente, por que definitivamente el médico no puede responder sino cuando su comportamiento, dentro de la estima profesional, fue determinante del perjuicio causado”177. El Doctor Sergio Yepes se refirió así sobre esta sentencia: “la Corte Suprema de Justicia dictó en Colombia, en enero de 2001, una sentencia en la cual, aunque se habla de la carga dinámica de las pruebas, se señala que corresponde al paciente demostrar los elementos que configuran la responsabilidad, esto es, el daño y el nexo de causalidad y en especial la culpa del médico” 178 ; con esto, trata de demostrar que la “culpa continua siendo, entonces, uno de los aspectos centrales de la responsabilidad profesional del 176 SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina de Internet: http://www.legis.com.co 177 SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina de Internet: http://www.legis.com.co 178 YEPES RESTREPO. Evolución jurisprudencial de la prueba de la culpa médica. Revista Derecho & Medicina. Pág. 5b 121 médico”179, y que “la teoría tradicional de la responsabilidad civil basada en la culpa probada, por lo menos en el examen individual de la conducta del médico ha resistido la aparición de teorías de responsabilidad objetiva y continua vigente en nuestros días”180. 179 YEPES RESTREPO, Sergio. Articulo Cit. Pág. 5b 180 YEPES RESTREPO, Sergio. Articulo Cit. Pág. 5b 122 CAPITULO III CONSIDERACIONES GENERALES DEL CONTRATO DE SEGURO 3. GENERALIDADES En este capítulo se estudiarán algunos de los aspectos más importantes del contrato de seguro, de una manera general y sencilla, con el fin de situar el tema de la responsabilidad civil profesional dentro del contexto del contrato de seguro, pero sin hacer un estudio exhaustivo de los mismos. 3.1 Noción Según CAPITANT el contrato de seguro es: “el contrato por el cual un asegurador, mediante el pago de una prima o una cotización, se obliga a pagar al asegurado o al beneficiario convenido una indemnización, capital o renta, en caso de producirse un riesgo determinado.”181 181 CAPITANT. Ob. Cit., p. 505 123 Según Joseph Hemard, “el seguro es una operación por la cual una parte, el asegurado, se hace prometer, mediante una remuneración, la prima, para él o para un tercero, en caso de realización de un riesgo, una prestación por otra parte, el asegurador, que tomando a su cargo un conjunto de riesgos, los compensa conforme a las leyes de la estadística.”182 En las definiciones anteriores se pueden identificar algunas nociones básicas del contrato de seguro, como por ejemplo los sujetos que intervienen en este contrato (asegurador, asegurado y beneficiario) o la prima y lo más importante su objeto: el traslado del riesgo. Consagración Legal. contrato de seguro. La ley de nuestro país no trae una definición de El Artículo 1036 de el Código de Comercio solamente enumera las características de dicho contrato. 3.2 ELEMENTOS ESENCIALES Según el artículo 1045 del código de comercio son elementos esenciales del contrato de seguro: 1. El interés asegurable; 2. El riesgo asegurable; 3. La prima o precio del seguro y 4. La obligación condicional del asegurador. 182 El autor hace mención en su obra a la definición de Joseph Hemard. OSSA GOMEZ, J. Efrén. Teoría General del Seguro. El Contrato. Tomo II. Bogotá: Editorial Temis. 1991 p. 2. 124 Estos elementos son concurrentes, si faltara uno de ellos el contrato de seguro no producirá efecto alguno. 3.2.1 El Interés Asegurable Según Isaac Halperin: “se entiende por interés asegurable la relación lícita de valor económico sobre un bien cuando se halla amenazada por un riesgo.”183 El Dr. J. Efrén Ossa respecto del interés asegurable dice que “es el objeto del contrato de seguro. Y, por lo mismo, uno de sus elementos esenciales. Puede definirse como la relación económica, amenazada en su integridad por uno o varios riesgos, en que una persona se halla consigo misma o con otra persona, o con otras cosas o derechos tomados en sentido general o particular”184. “En los artículos 1083 (para seguros de daños) y 1137 (para seguros de personas) del código de comercio se hace referencia al interés asegurable condicionado por la posibilidad de afectación de una relación jurídica de contenido patrimonial cuando ocurra un siniestro.” Artículo 1083 C.Co “Tiene interés asegurable toda persona cuyo patrimonio pueda resultar afectado, directa o indirectamente, por la realización de un riesgo. Es asegurable todo interés que, además de lícito, sea susceptible de estimación en dinero.”185 183 HALPERIN. Ob. Cit. p. 21 184 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 73 185 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 63 125 El concepto de interés asegurable en los seguros de daños es muy amplio, y el artículo 1083 trae una “definición con la cual quedan cubiertos todos los supuestos de daño patrimonial: la lesión del interés económico sobre una cosa corporal o incorporal concreta, mueble o inmueble, llámese interés de dueño, de usufructuario, de comunero (seguros reales), o la lesión del patrimonio en su unidad financiera como conjunto y confrontación de los derechos y las obligaciones, por eventual incremento del pasivo a cargo del asegurado (seguros patrimoniales), o la frustración, por el siniestro, de una seria y razonable expectativa de lucro (lucro cesante).” 186 Artículo 1137 C.Co. “Toda persona tiene interés asegurable: 1. En su propia vida. 2. En la de las personas a quienes legalmente pueda reclamar alimentos, y 3. En la de aquellas cuya muerte o incapacidad pueden aparejarle un perjuicio económico, aunque éste no sea susceptible de una evaluación cierta....” Según el tratadista J. Efrén Ossa, el interés asegurable en los seguros de personas es muy difícil de encuadrar, debido a su naturaleza peculiarísima. “la ley Colombiana, empero mantiene su fidelidad al interés asegurable en los seguros de personas, como elemento esencial del contrato.”187 186 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 74 187 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 83 126 3.2.2 El Riesgo Asegurable Es el segundo elemento esencial del contrato de seguros. La ley define el riesgo como “el suceso incierto que no depende exclusivamente de la voluntad del tomador, del asegurado o del beneficiario, y cuya realización da origen a la obligación del asegurador.”188 “O sea, en otros términos, que lo único que escapa al ámbito del riesgo es el acto vinculado a la voluntad del asegurado mediante una dependencia exclusiva. Y que puede tener ese carácter, el carácter de riesgo.”189 Ámbito del Riesgo Asegurable: • En el riesgo asegurable el suceso debe ser incierto: El riesgo se caracteriza por ser Futuro e Incierto. “O sea que el riesgo se halla enmarcado entre los dos linderos: la imposibilidad y la certeza.... No constituye riesgo el hecho físicamente imposible, que en la teoría de las probabilidades se presenta por el número cero (0). Ni el hecho cierto que, como tal, ha de suceder fatalmente y que, en la misma teoría se representa por el número uno (1).”190 188 Artículo 1054 del CCO. 189 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 94 190 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 94 127 “ La incertidumbre del suceso ha de ser objetiva. Refiriéndose, precisamente, al art. 1054 del C. de Co., ha dicho la Corte: <fluye del texto trascrito que el riesgo asegurable debe ser incierto objetivamente y, además, futuro. Los hechos ya acontecidos, por ser ciertos y. Por ende no ser futuros, ya no entrañan riesgo asegurable de conformidad con la ley. Como tampoco la incertidumbre cuando es subjetiva.191> La incertidumbre subjetiva, la que solo existe en la conciencia de las partes (tomador y asegurador), respecto de un hecho que pudo o no tener cumplimiento.”192 • El Suceso, además de incierto, no debe depender exclusivamente de la voluntad del tomador, asegurado o beneficiario: “A la luz de la doctrina moderna y de las leyes que la desarrollan, la intervención de la voluntad humana en la gestación de un hecho -con tal que sea futuro e incierto- no lo despoja necesariamente de su fortuidad, ni destruye por tanto, su naturaleza de riesgo asegurable. Basta que no se identifique en ella su causa exclusiva.”193 191 Sentencia del 5 de noviembre de 1998, Sala de Casación Civil. Corte Suprema de Justicia. 192 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 94 193 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 97 128 La doctrina en armonía con la legislación anterior, no admitía que en el concepto de riesgo interviniera la voluntad del hombre; a diferencia de nuestro código actual que en su artículo 1054194, que si acoge esta situación • La realización del riesgo da origen a la obligación del asegurador: En principio, el asegurador adquiere una obligación condicional que “depende de un acontecimiento futuro, que puede suceder o no,” 195 o como lo expresa el tratadista J. Efrén Ossa: “Obligación que, mientras se halla en estado de indemnidad, mientras esconde un daño meramente potencial, es apenas una obligación condicional..... Realizado el riesgo, configurado el siniestro (art. 1075) –que es el riesgo en estado de daño- nace ipso facto, por ministerio de la ley (art. 1054), la obligación actual del asegurador, la de pagar la prestación asegurada conforme a las estipulaciones del contrato y a los principios legales que la gobiernan”196 • El suceso incierto no es riesgo si su realización depende de la voluntad exclusiva del tomador, asegurado o beneficiario: Cuando la realización del evento asegurado, dependen exclusivamente de la voluntad del 194 Artículo 1054 C. De Co: “Denominase riesgo el suceso incierto que no depende exclusivamente de la voluntad del tomador, del asegurado o del beneficiario, y cuya realización da origen a la obligación del asegurador. 195 Artículo 1530 C.C. 196 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 99 129 tomador, del asegurado o del beneficiario; éste no generará riesgo por la falta de incertidumbre. “No es concebible el seguro sobre un evento cuya realización dependa de la sola voluntad del interesado.”197 3.2.3 La Prima o Precio del Seguro El tercer elemento esencial del contrato de seguro, de acuerdo con el artículo 1045 del C.de Co. Num. 3, es “la prima o precio del seguro”, la cual se puede definir como “la contraprestación que persigue el asegurador por la asunción del riesgo; como la asunción del riesgo es la contraprestación que persigue el asegurado que paga la prima.”198 El artículo 1047 C. de Co. Num. 8 la póliza debe contener “la prima o el modo de calcularla y la forma de su pago” “El seguro no puede concebirse técnica y económicamente sin los aportes de la comunidad asegurada cuya acumulación permita al asegurador atender al pago de las prestaciones a que den origen los eventos asegurados. Ni el respectivo contrato se concibe jurídicamente sin una contraprestación a cargo 197 198 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 99 SOLER ALEU, Amadeo. El nuevo contrato de seguro. Buenos Aires: Editorial Depalma. 1969. p. 81 130 del tomador que sirva de causa a la obligación del asegurador. El seguro es un contrato oneroso (C. De Co., art. 1036).”199 Desde la perspectiva técnico-económica, la prima hace parte de un proceso complejo, que según la clase de riesgo y el ramo del seguro, “se inicia con la determinación de la tasa pura (loss rate), pasa por la del recargo administrativo (expense rate) e, integrados estos en la tarifa, habida cuenta de la suma asegurada y la duración del seguro, culmina con su aplicación a cada contrato específicamente considerado. De ahí los conceptos de prima pura y prima comercial” 200. La prima pura es la medida exacta del riesgo asumido, “es el valor matemática del riesgo asegurado que, calculado sobre un conjunto numeroso de intereses del mismo género vinculados a determinada cartera, debe suponerse suficiente para cubrir siniestros. Mas la prima pura no basta. La operación económica del seguro reclama, además del fondo adecuado para atender a las eventuales necesidades de los asegurados, otros ingredientes que permitan preservar la integridad financiera de la organización, saber: la promoción, la colocación, la administración......”201. 199 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 385 200 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 385 201 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 385 131 La prima comercial es la prima pura más unos recargos, es la que se le cobra al asegurado y figura en las pólizas; “es la que cuenta, finalmente, como elemento esencial del contrato de seguro.”202 3.2.4 Obligación condicional del asegurador Para el Dr. J Efrén Ossa, la obligación principal del asegurador no es solo la de asumir el riesgo sino es la de pagar la indemnización en caso de ocurrir el evento que la condiciona, además afirma que nuestra legislación acoge la teoría de la prestación pecuniaria, en la medida que la obligación condicional del asegurador se concreta en el pago de la indemnización. “El asegurado paga una prima porque recibe la promesa de ser indemnizado, conforme a las condiciones del contrato, a la ocurrencia del suceso sobre el que versa la protección del seguro. Tal es en términos jurídicos, la causa de su obligación.”203 El pago de la prima es la justificación de la obligación condicional a cargo del asegurador. 3.3 CARACTERISTICAS 202 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 385 132 El artículo 1036 del Código de Comercio204 enumera algunas de las características del contrato de seguro. 3.3.1 Consensual: para su perfeccionamiento se requiere sólo el consentimiento de las partes sobre los elementos esenciales del contrato. Antes de la expedición de la Ley 389 de 1997 el contrato de seguro era solemne, en la medida que para su perfeccionamiento se requería además del acuerdo de voluntades el cumplimiento de ciertas solemnidades o formalidades especiales. La formalidad requerida era la expedición de la póliza por parte del asegurador. Actualmente la póliza es un factor de prueba o como lo manifiesta el artículo 1046 del Código de Comercio: “El contrato de seguro se probará por escrito o por confesión. Con fines exclusivamente probatorios, el asegurador está obligado a entregar en su original, al tomador, dentro de los quince días siguientes a la fecha de su celebración el documento contentivo del contrato de seguro, el cual se denomina póliza, el que deberá redactarse en castellano y firmarse por el asegurador.” 3.3.2 Bilateral: un contrato es bilateral, “cuando las partes contratantes se obligan recíprocamente.”205 203 OSSA G. Ob. Cit. p. 426 133 El contrato de seguro es bilateral, “en la medida en que en todo caso surgen de él obligaciones para las partes entre las que se concluye: En efecto, ab initio, el asegurador debe hacer entrega de la póliza al tomador, y nace para éste la obligación de pagar la prima.”206 3.3.3 Oneroso: según el artículo 1497 C.C, un contrato es oneroso, “cuando tiene por objeto la utilidad de ambos contratantes, gravándose cada uno a beneficio del otro.” 3.3.4 Aleatorio: Artículo 1498 C.C “el contrato oneroso es conmutativo, cuando cada una de las partes se obliga a dar, o hacer una cosa que se mira como equivalente a lo que la otra parte debe dar o hacer a su vez; y si el equivalente consiste en una contingencia incierta de ganancia o pérdida, se llama aleatorio” “El contrato oneroso recibe el nombre de aleatorio si la materia está constituida de un hecho eventual o fortuito, de modo que el equivalente es una contingencia incierta de pérdida o beneficio.”207 3.3.5 Ejecución sucesiva: es un contrato cuyo cumplimiento esta diferido a través del tiempo de su vigencia. 204 Articulo 1036 C. de Co: “El seguro es un contrato consensual, bilateral, oneroso y de ejecución sucesiva.” 205 Artículo 1496 C. C. 206 BARRERA TAPIAS, Carlos Darío. Los seguros y el derecho civil. Bogotá: Javegraf. 1991. p. 13 207 MADRID-MALO G. Ob. Cit. p. 123 134 En los contratos de ejecución o tracto sucesivo el cumplimiento de las obligaciones a cargo de las partes se harán periódicamente. Aparte de las características enunciadas por el código de comercio, diferentes autores agregan las siguientes características: 3.3.6 Intuita personae: El contrato intuito persona es aquel que se celebra teniendo en cuenta la calidad de las partes. La ley precisa sobre la consideración del asegurador y sobre el asegurado, en donde “el asegurador mira más a la condición moral del asegurado que a la sustancia o calidades de la cosa asegurada.”208 3.3.7 De Adhesión: El contrato posee unas condiciones pre establecidas fijadas por una de las partes, la más fuerte, y que son aceptadas por la otra parte debido a la necesidad de celebrar el contrato. La aceptación de la parte adhesiva no es totalmente libre, en la medida que no puede ésta discutir libremente ciertos puntos o cláusulas del contrato que está aceptando. En el contrato de seguro la regla general es que sea de adhesión. 208 OSSA G. Ob. Cit. p. 42 135 3.3.8 Mercantil: Según el artículo 20 del C de Co. Num. 10: “son mercantiles para todos los efectos legales: .... 10. Las empresas de seguros y la actividad aseguradora.” Si en un contrato una de las partes es comerciante el contrato es mercantil y reglamentado por la ley comercial. 3.3.9 Típico: es el contrato que está regulado por la ley. 3.3.10 Principal: el contrato es principal, cuando subsiste por sí mismo sin necesidad de otra convención.209 3.3.11 Indivisible: “El carácter de indivisible del contrato de seguros aparece confirmado a la luz de la legislación colombiana. En efecto: “el pago fraccionado de la prima no afecta la unidad del contrato de seguro, ni la de los distintos amparos individuales que acceden a él”. (artículo 1069 C.Co.).”210 209 Artículo 1499 del C.C. 210 OSSA G. Ob. Cit. p. 44 136 3.3.12 De Ubérrima buena fe: las partes del contrato de seguro deben actuar de buena fe. “En los preliminares del contrato, en su desenvolvimiento sucesivo y en su ejecución, el asegurador debe encomendarse a la lealtad del asegurado, de cuya honestidad y de cuya prudencia depende, por modo casi exclusivo, el equilibrio de la relación económico-jurídica que los vincula.”211 El obrar de buena fe es una característica tan importante, que su trasgresión está castigada con la imposición de drásticas sanciones, como lo es por ejemplo la caducidad. 3.4 CLASIFICACION 3.4.1 Clasificación según el Código de Comercio El Código de Comercio Colombiano en el Libro IV, título V, capítulos II y III, clasifica el contrato de seguro en: Seguros de daños y Seguros de personas. 3.4.1.1 Seguros de daños: “Estos seguros implican protección contra un perjuicio patrimonial en la acepción económica-jurídica de este vocablo. “Dentro de las notas jurídicas de este tipo de seguros se puede destacar que el interés asegurable es concebido solo en su sentido económico como “susceptible de estimación en dinero”. 211 OSSA G. Ob. Cit. p. 44 Con respecto al principio de la 137 indemnización, se aplica la correlatividad entre la prestación a cargo del asegurador y el importe real del perjuicio sufrido por el asegurado.”212 Los seguros de daños se clasifican en seguros reales y en seguros patrimoniales Los seguros reales “son aquellos que versan sobre cosas muebles o inmuebles, determinadas o determinables, amenazadas en su integridad física o en la integridad jurídica de los derechos radicados en ellas.”213 Los seguros patrimoniales son los que “protegen la integridad del patrimonio económico contra el detrimento eventual que pueda afectarlo desfavorablemente y que tanto puede originarse en una disminución del activo como en un aumento del pasivo.”214 3.4.1.2 Seguros de personas: “Según definición de Isaac Halperin los seguros de personas garantizan el pago de un capital o una renta cuando se produce un hecho que afecta la existencia, salud o vigor del asegurado; 212 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 61 213 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 61 214 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 62 138 generalmente terminan en un pago de dinero, pero las prestaciones están subordinadas a hechos atinentes directamente a la persona del asegurado.”215 3.5 PARTES DEL CONTRATO DE SEGURO Según el artículo 1037 de C.Co, son partes del contrato de seguro el asegurador y tomador. 3.5.1 El Asegurador El numeral 1 del mencionado artículo define que el asegurador: “es la persona jurídica que asume los riesgos, debidamente autorizada para ello con arreglo a las leyes y reglamentos.” Nuestra legislación se inclina por la tesis del asegurador-empresa, ya que este debe ser una persona jurídica, sometida a un régimen especial. El asegurador debe constituirse bajo la figura de sociedades anónimas mercantiles o de asociaciones cooperativas según el artículo 53 del EOSF, además el asegurador debe estar sometido al control y vigilancia de la Superintendencia Bancaria216 esto se debe a la influencia del mercado asegurador en el comercio, a demás deben contar con un capital mínimo y una organización técnica contable. 215 216 HALPERIN, Isaac. Lecciones de seguros. Buenos Aires: Ediciones Depalma. 1989. p. 11 Art. 46 C. de Co. “Objetivos de la Intervención: Conforme al artículo 150 numeral 19 literal d) de la Constitución política, corresponderá al Gobierno Nacional ejercer la intervención en las 139 “La tesis del asegurador-empresa, original del tratadista italiano VIVANTE, a todas luces es la más conveniente porque lo complejo de la actividad aseguradora hace que resulte casi imposible su adecuado ejercicio por personas naturales. Es por ello por lo que al obligarse a la constitución de una persona jurídica se puede exigir una serie de requisitos mínimos de orden técnico, administrativo y legal que permitan la suficiente confianza de los asociados para la celebración de contratos de seguros, y, además, porque solamente la actividad empresarial aseguradora puede garantizar la seriedad y estabilidad que requiere la protección que ofrecen,...”217 3.5.2 El Tomador El numeral 2º del artículo 1037 del C.Co define al tomador como “la persona que, obrando por cuenta propia o ajena, traslada los riesgos.” El tomador puede ser cualquier sujeto de derecho, es decir cualquier persona natural o jurídica, nuestra legislación no exige ningún requisito para poder trasladar un riesgo propio o de un tercero. Nuestra legislación reconoce 3 figuras que intervienen en el desarrollo del contrato frente al asegurador, aunque en estricto sentido, de acuerdo con la actividades financieras, aseguradora, y demás actividades relacionadas con el manejo aprovechamiento e inversión de los recursos captados del público,....” 217 LOPEZ BLANCO, Hernan Fabio. Contrato de seguro. Bogotá: Dupré Editores. 1999. p. 86 140 disposición contenida en el Artículo 1037 del C. De Co., solamente son partes el tomador y el beneficiario. Tomador: “es la persona que celebra el contrato con el asegurador y puede hacerlo por cuenta propia o por cuenta ajena.”218 Asegurado: “Es la persona titular de un interés que, de verse afectado con un siniestro, puede sufrir un perjuicio patrimonial.”219 Beneficiario: “es la persona que recibe la indemnización en el caso de la ocurrencia del siniestro previsto al contratar.”220 Generalmente la persona del tomador coincide con la persona del asegurado y con la del beneficiario, pero en ocasiones pueden ser 3 personas diferentes, ya que estas calidades pueden estar desmembradas en diferentes personas. El asegurado y el beneficiario, cuando son personas distintas del tomador, no son partes. 3.5.2.1 Seguro por cuenta propia Cuando el interés, que constituye el objeto del contrato, esta radicado en la persona del contrayente, es decir el tomador, el seguro es por cuenta propia. Aquí el asegurado es el propio contrayente o tomador. 218 MEILIJ, Gustavo. Manual de seguros. Buenos Aires: Ediciones Depalma. 1987. p. 35 219 LOPEZ BLANCO. Ob. Cit. p. 89 220 MEILIJ. Ob. Cit. p. 35 141 3.5.2.2 Seguro por cuenta ajena Cuando el interés, que constituye el objeto del contrato, se radica en la persona de un tercero y no en la persona del tomador, el seguro es por cuenta ajena. En este caso el asegurado es una persona diferente al contrayente. “El tomador del seguro bien puede estipularlo por cuenta de un tercero del cual no tenga poder para representarlo (art. 1038 del C. de Co.), y el asegurado puede ratificar lo acordado aun después del siniestro, en razón de que el contrato sigue existiendo mientras el tercero no exprese su voluntad de aceptación o rechazo.”221 El tercero puede ratificar o rechazar el contrato; y desde el momento en que el asegurador reciba la noticia de la ratificación o el rechazo, releva al tomador del cumplimiento de las obligaciones derivadas del contrato, ya que éste está obligado por ley a cumplir personalmente las obligaciones derivadas del mismo (art. 1038 C.de Co inc. 1º). 3.6 OBLIGACIONES QUE NACEN DEL CONTRATO El Contrato de seguro se caracteriza por ser un contrato bilateral, del cual resultan obligaciones recíprocas para las partes y su incumplimiento genera sanciones. 221 LOPEZ BLANCO. Ob. Cit. p. 91 142 3.6.1 Obligaciones a cargo del tomador, asegurado o beneficiario 3.6.1.1 Precontractuales Antes de perfeccionarse el contrato, se realizan diferentes actuaciones que generan obligaciones o responsabilidades, y el deber que le concierne al tomador en la etapa precontractual es uno solo; el deber de declarar el estado del riesgo. 3.6.1.1.1 La declaración del estado del riesgo Esta obligación está regulada en el Artículo 1058 C. de Co. que dice: “El tomador está obligado a declarar sinceramente los hechos o circunstancias que determinan el estado del riesgo, según el cuestionario que le sea propuesto por el asegurador.....” “Es fácil advertir que esa obligación no emana del contrato, puesto que debe ejecutarse con anterioridad a él, como una condición básica para el otorgamiento del consentimiento del asegurador. El seguro es un contrato peculiar. El asegurador no puede asumir los riesgos, sin conocer antes su extensión, vale decir el grado de peligrosidad que ellos encierran. Y la fuente natural de ese conocimiento no es otra, no puede serlo (si se considera que la gradación del riesgo responde a un complejo de circunstancias de orden 143 objetivo y subjetivo), que el tomador mismo, a quien ordinariamente hay que suponer en contacto directo con la relación asegurable.”222 El tomador o asegurado debe declarar sinceramente las diferentes circunstancias o hechos que conforman el estado del riesgo, esta declaración puede hacerse ciñéndose a un formulario o cuestionario previamente preparado por el asegurador o sin la necesidad de este por medio de la declaración espontánea del estado del riesgo. En la práctica el uso del formulario para el cumplimiento de esta obligación precontractual es el sistema más utilizado y como lo expresa el doctrinante J. Efrén Ossa: “es más técnico y más jurídico.”223 El ya mencionado artículo 1058 dispone también que: “La reticencia o inexactitud sobre hechos o circunstancias que, conocidos por el asegurador, lo hubieran retraído de celebrar el contrato, o inducido a estipular condiciones más onerosas, producen la nulidad relativa del seguro. Si la declaración no se hace con sujeción a un cuestionario determinado, la reticencia o la inexactitud producen igual efecto si el tomador ha incubierto por culpa, hechos o circunstancias que impliquen agravación objetiva del estado del riesgo. Si la inexactitud o la reticencia provienen de error inculpable del tomador, el contrato no será nulo, pero el asegurador sólo estará obligado, en caso de siniestro, a pagar un porcentaje de la prestación asegurada, equivalente al que la tarifa o la prima estipulada en el que contrato represente respecto de la tarifa o la 222 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 325 223 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 325 144 prima adecuada al verdadero estado del riesgo, excepto lo previsto en el artículo 1160. Las sanciones consagradas en este artículo no se aplican si el asegurador, antes de celebrarse el contrato, ha conocido o debido conocer los hechos o circunstancias sobre que versan los vicios de la declaración, o si, ya celebrado el contrato, se allana a subsanarlos o los acepta expresa o tácitamente. ” “El consentimiento del asegurador es otorgado con base en la declaración del estado del riesgo. Y debe ser exento de todo vicio para que el contrato de seguro sea válido.”224 “Tanto la reticencia o inexactitud “pueden ser intencionales (por provenir de dolo o culpa grave), culposas (por provenir de culpa leve o levísima) o inocentes (por provenir de error inculpable). Su origen en otras palabras, incide sobre la naturaleza de la sanción,...puede ser la nulidad relativa o la reducción proporcional de la prestación asegurada en caso de siniestro.”225 Tanto la reticencia como la inexactitud de las manifestaciones sobre el estado del riesgo, pueden ser relevantes o irrelevantes, estas últimas son las inexactitudes o reticencias carentes de influencias en la vida del contrato, y serán relevantes si los hechos o circunstancias omitidos o inexactamente declarados: “1) eran o debían ser conocidos por el tomador o por su representante”226 “2) si los hechos o circunstancias encubiertos, por acción u 224 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 326 225 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 330 226 Artículo 834 C..de Co. 145 omisión, eran de tal naturaleza que hubieran influido en el consentimiento del asegurador o en las condiciones de su otorgamiento.”227 Las sanciones para las inexactitudes o reticencias relevantes son: a- la nulidad relativa y breducción proporcional de la indemnización. 3.6.1.2 Obligaciones durante la ejecución del contrato 3.6.1.2.1 Mantener el estado del riesgo Esta obligación es una extensión de la obligación precontractual de declaración del estado del riesgo consagrada en el artículo 1058 del C. de Co., y es abordado con mayor precisión en el artículo 1060 del citado estatuto. Artículo 1060 C.de Co.: “El asegurado o el tomador, según el caso, están obligados a mantener el estado del riesgo. En tal virtud, uno u otro deberán notificar por escrito al asegurador los hechos o circunstancias no previsibles que sobrevengan con posterioridad a la celebración del contrato y que, conforme al criterio consignado en el inciso 1º del artículo 1058, signifiquen agravación del riesgo o variación de su identidad local. La notificación se hará con antelación no menor de diez días a la fecha de la modificación del riesgo, si ésta depende del arbitrio del asegurado o del tomador. Si le es extraña, dentro de los diez días siguientes a aquel en que tengan conocimiento de ella, 227 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 331 146 conocimiento que se presume transcurridos treinta días desde el momento de la modificación. Notificada la modificación del riesgo en los términos consignados en el inciso anterior, el asegurador podrá revocar el contrato o exigir el reajuste a que haya lugar en el valor de la prima. La falta de notificación oportuna produce la terminación del contrato. Pero sólo la mala fe del asegurado o del tomador dará derecho al asegurador a retener la prima no devengada. Esta sanción no será aplicable a los seguros de vida, excepto en cuanto a los amparos accesorios, a menos de convención en contrario; ni cuando el asegurador haya conocido oportunamente la modificación y consentido en ella.” “La obligación de mantener el estado del riesgo que la ley impone al tomadorasegurado o al tomador o al asegurado, según el caso, se traduce en una carga de información cuya infracción o cuya oportuna observancia tienen señalada influencia en la vida del contrato.”228 El artículo 1060 del C. de Co. impone al asegurado, tomador o beneficiario la carga de información que comprende: a- los hechos o circunstancias que signifiquen agravación del riesgo o, b- variación de su identidad local. Estas variaciones o cambios pueden depender o no de la voluntad del asegurado, tomador o beneficiario la ley obliga a que éste dé aviso al asegurador de cualquier situación que agrave el estado del riego. 228 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 368 147 Si la modificación al estado del riesgo es voluntaria, se entiende que el asegurado o tomador tiene conocimiento del mismo, en este caso la notificación a la aseguradora debe hacerse “con antelación no menor de diez días a la fecha de la modificación del riesgo.”229 Si la modificación es involuntaria, la notificación debe hacerse “dentro de los diez días siguientes a aquel en que tengan conocimiento de ella. Conocimiento que se presume transcurridos treinta días desde el momento de la modificación.”230 Es decir, la notificación se debe dar dentro de los diez días siguientes en que tuvo conocimiento o debió haberlo tenido. 3.6.1.2.2 Pago de la prima Esta obligación que corresponde al tomador, “es una obligación que nace con el contrato, en el cual encuentra su fuente,”231 y está consagrado en el artículo 1066 del C. de Co. Artículo 1066 C. de Co. Modificado. L. 45/90, art. 81: “Término para el pago de la prima. El tomador del seguro está obligado al pago de la prima. Salvo disposición legal o contractual en contrario, deberá hacerlo a más tardar dentro del mes siguiente contado a partir de la fecha de la entrega de la póliza o, si fuere el caso, de los certificados o anexos que se expidan con fundamento en ella. 229 Artículo 1060 del C. de Co. 230 Artículo 1060 del C. de Co. 231 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 395 148 2.6.1.2.3 Cumplir con las Garantías Según el artículo 1061 del C. de Co.: “Se entenderá por garantía la promesa en virtud de la cual el asegurado se obliga a hacer o no determinada cosa, o a cumplir determinada exigencia, o mediante la cual afirma o niega la existencia de determinada situación de hecho.” Siguiendo el esquema del Dr. J. Efrén Ossa, los atributos esenciales de las garantías son: a- “La garantía supone una declaración del tomador (afirmativa o negativa) que, consignada en la proposición de seguro o incorporada en el clausulado de la póliza, debe entenderse determinante del consentimiento del asegurador. O una obligación o carga que contraen el tomador o asegurado en virtud de un contrato.”232 b- “La garantía debe tener relación con el riesgo asegurado. La doctrina ha dicho que “el rasgo característico de la garantía, como condición del contrato, que la distingue de otras condiciones, es que ella dice relación al riesgo.”.... De no existir esa relación, por remota que sea, la institución de las garantías, que la ley ha concebido como instrumento de protección del asegurador y del seguro mismo, se convertiría en venero de abusos.”233 232 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 358 233 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 358 149 c- “La garantía debe constar por escrito. Aparecer consignada “la garantía deberá constar en la póliza o en los documentos accesorios a ella.” (art- 1061 inc 2º).”234 d- “La garantía debe cumplirse estrictamente.”235 Como lo expresa el artículo 1061 del C. de Co. Inc. 3º: “La garantía, sea o no sustancial respecto del riesgo, deberá cumplirse estrictamente. En caso contrario, el contrato será anulable. Cuando la garantía se refiere a un hecho posterior a la celebración del contrato, el asegurador podrá darlo por terminado desde el momento de la infracción.” 3.6.1.2.4 Declarar los seguros coexistentes Según el Artículo 1093 del C. de Co. “El asegurado deberá informar por escrito al asegurador los seguros de igual naturaleza que contrate sobre el mismo interés, dentro de los diez días a partir de su celebración. La inobservancia de esta obligación producirá la terminación del contrato, a menos que el valor conjunto de los seguros no exceda el valor real del interés asegurado.” 234 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 359 235 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 360 150 3.6.1.3 Obligaciones con ocasión del siniestro 3.6.1.3.1 Evitar la extensión y propagación del siniestro y proveer al salvamento de las cosas aseguradas El artículo 1074 del C. de Co. impone al asegurado la carga de evitar la extensión y propagación del siniestro y de proveer al salvamento de las cosas aseguradas: Artículo 1074: “Ocurrido el siniestro, el asegurado estará obligado a evitar su extensión y propagación, y a proveer al salvamento de las cosas aseguradas. El asegurador se hará cargo, dentro de las normas que regulan el importe de la indemnización, de los gastos razonables en que incurra el asegurado en cumplimiento de tales obligaciones.” Ocurrido el siniestro, es obligación del asegurado participar en la extinción del mismo como también evitar su propagación, el asegurado debe atenuar en lo que esté a su alcance y posibilidad, que el siniestro no se extienda más allá de lo que puso ser; “la indiferencia del asegurado, al iniciarse el siniestro, prevalido de la existencia del seguro, es jurídicamente incompatible con la buena fe que debe presidir la ejecución de todo contrato.”236 La ley pretende que la conducta del asegurado no sea pasiva, que por el contrario sea una conducta diligente y activa, que “frente al peligro que amenaza sus intereses, 236 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 412 151 el asegurado reaccione de igual modo que si ellos no estuvieran asegurados.”237 3.6.1.3.2 Dar aviso oportuno de la ocurrencia del siniestro Esta carga la impone al asegurado el artículo 1075 del C. de Co. que dice: “El asegurado o el beneficiario estarán obligados a dar noticia al asegurador de la ocurrencia del siniestro, dentro de los tres días siguientes a la fecha en que lo hayan conocido o debido conocer. Este término podrá ampliarse, mas no reducirse por las partes. El asegurador no podrá alegar el retardo o la omisión si, dentro del mismo plazo, interviene en las operaciones de salvamento o de comprobación del siniestro.” “Importa a la ley que el asegurador tenga información oportuna del hecho que da origen a su obligación principal, esto es, de la “realización del riesgo asegurado” (art. 1072). Es la que permite, en ejercicio de sus facultades preventivas, identificar las circunstancias del siniestro (lugar, tiempo, modo); conocer, por percepción directa, sus causas y evaluar, así sea tentativamente, la magnitud de sus efectos.”238 237 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 412 238 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 414 152 3.6.1.3.3 Declarar la coexistencia de seguros Esta obligación, “debe entenderse como una carga específica que obliga la responsabilidad del asegurado con ocasión del siniestro y que es distinta de la que, en igual sentido, debe cumplir durante la vigencia del contrato.”239 El deber de declarar los seguros coexistentes, es impuesta al asegurado por el artículo 1076 del C. de Co. que reza: “Sin perjuicio de la obligación que le impone el artículo 1074, el asegurado estará obligado a declarar al asegurador, al dar la noticia del siniestro, los seguros coexistentes, con indicación del asegurador y de la suma asegurada. La inobservancia maliciosa de esta obligación le acarreará la pérdida del derecho a la prestación asegurada.” La carga del art. 1076 debe cumplirse con ocasión al siniestro, y su inobservancia, en este caso trae como consecuancia la caducidad. Hay coexistencia de seguros cuando se reúnen las siguientes condiciones: 1. Diversidad de aseguradores 2. Identidad del asegurado 3. Identidad del interés asegurado, y 4. Identidad de riesgo. 3.6.1.3.4 Demostrar la ocurrencia del siniestro y la cuantía de la pérdida De acuerdo con lo establecido por el artículo 1077 del C. de Co. “Corresponderá al asegurado demostrar la ocurrencia del siniestro, así como la 239 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 416 153 cuantía de la pérdida, si fuere el caso. El asegurador deberá demostrar los hechos o circunstancias excluyentes de su responsabilidad.” Con la ocurrencia del siniestro, es el asegurado o beneficiario, quien sufre el menoscabo patrimonial, y es éste quien debe demostrar tanto la ocurrencia del siniestro, como asegurador. su cuantía, al momento de formular su reclamación al Además debe demostrar la existencia y exigibilidad de la obligación a cargo del asegurador. 3.6.2 Obligaciones a cargo del Asegurador 3.6.2.1 Obligación de entregar la póliza El artículo 1046 del C. de Co. hace referencia a la obligación del asegurador de entregar la póliza. Artículo 1046 Modificado. L. 389/97, art. 3º. “El contrato de seguro se probará por escrito o por confesión. Con fines exclusivamente probatorios, el asegurador está obligado a entregar en su original, al tomador, dentro de los quince días siguientes a la fecha de su celebración el documento contentivo del contrato de seguro, el cual se denomina póliza, el que deberá redactarse en castellano y firmarse por el asegurador. señalará La Superintendencia Bancaria los ramos y la clase de contratos que se redacten en idioma extranjero. PAR.—El asegurador está también obligado a librar a petición y a costa del tomador, del asegurado o del beneficiario duplicados o copias de la póliza.” 154 3.6.2.2 Devolver la prima no devengada “La de devolver parte de la prima percibida es también una obligación strictu sensu que la ley impone al asegurador en determinados casos en que, a falta de interés asegurable o de riesgo asegurable o de uno y otro o merced al designio unilateral de las partes o a su voluntad concorde, cesa la responsabilidad del asegurador o se torna menos onerosa. La devolución debe hacérsela al tomador dado que, conforme a la norma legal (art. 1066),240 es quien ha debido pagar la prima.”241 La ley consagra ciertos casos en los cuales el tomador tiene acción judicial para hacer efectiva la obligación de devolver la parte no devengada de la prima, y los casos son: • Artículo 1060 inc. 4 Terminación del seguro. “La falta de notificación oportuna produce la terminación del contrato. Pero sólo la mala fe del asegurado o del tomador dará derecho al asegurador a retener la prima no devengada.” 240 ART. 1066.—Modificado. L. 45/90, art. 81. Término para el pago de la prima. El tomador del seguro está obligado al pago de la prima. Salvo disposición legal o contractual en contrario, deberá hacerlo a más tardar dentro del mes siguiente contado a partir de la fecha de la entrega de la póliza o, si fuere el caso, de los certificados o anexos que se expidan con fundamento en ella. 241 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 429 155 • Artículo 1065 Disminución de la prima. “En caso de disminución del riesgo, el asegurador deberá reducir la prima estipulada, según la tarifa correspondiente, por el tiempo no corrido del seguro, excepto en los seguros a que se refiere el artículo 1060, inciso final.” • Artículo 1071 inc 2 y 3 Revocación del contrato. “En el primer caso, la revocación da derecho al asegurado a recuperar la prima no devengada, o sea, la que corresponde al lapso comprendido entre la fecha en que comienza a surtir efectos la revocación y la de vencimiento del contrato. La devolución se computará de igual modo, si la revocación resulta del mutuo acuerdo de las partes. En el segundo caso, el importe de la prima devengada y el de la devolución se calcularán tomando en cuenta la tarifa de seguros a corto plazo.” • Artículo 1091 Exceso asegurado. “El exceso del seguro sobre el valor real del interés asegurado producirá la nulidad del contrato, con retención de la prima a título de pena, cuando de parte del asegurado haya habido intención manifiesta de defraudar al asegurador. En los demás casos podrá promoverse su reducción por cualquiera de las partes contratantes, mediante la devolución o rebaja de la prima correspondiente al importe del exceso y al período no transcurrido del seguro.” • Artículo 1107 inc. 2 Transferencia del interés asegurado. “La extinción creará a cargo del asegurador la obligación de devolver la prima no devengada.” 156 • Artículo 1109 Pérdida por causas ajenas al amparo. “Se producirá igualmente la extinción del contrato, con la obligación a cargo del asegurador de devolver la prima no devengada, si la cosa asegurada o a la cual está ligado el seguro, se destruye por hecho o causa extraños a la protección derivada de aquél. Si la destrucción es parcial, la extinción se producirá parcialmente y habrá lugar así mismo a la devolución de la prima respectiva.” • Artículo 1137 inc. 3 Seguros sobre la vida de incapaces o en los que falta interés asegurable. “En defecto del interés o del consentimiento requeridos al tenor de los incisos que anteceden, o en caso de suscripción sobre la vida de un incapaz absoluto, el contrato no producirá efecto alguno y el asegurador estará obligado a restituir las primas percibidas. Sólo podrá retener el importe de sus gastos, si ha actuado de buena fe.” • Artículo 1159 Revocación del seguro de vida a solicitud del asegurado. “El asegurador no podrá, en ningún caso, revocar unilateralmente el contrato de seguro de vida. La revocación efectuada a solicitud del asegurado dará lugar a la devolución del saldo del valor de cesión o rescate.” 3.6.2.6 Obligación de pagar la indemnización o prestación Asegurada Según el artículo 1045 del C. de Co. Es elemento esencial del seguro la obligación condicional del asegurador. Acaecida o cumplida la condición, ésta nace a la vida jurídica y es plenamente exigible después que se haya cumplido con la obligación de demostrar la ocurrencia del siniestro y la cuantía de la 157 pérdida por parte del tomador (asegurado) según lo dispuesto por el artículo 1077 del C. de Co. La oportunidad para el pago de la indemnización, según lo dispone el artículo 1080 del C. de Co. es “dentro del mes siguiente a la fecha en que el asegurado o beneficiario acredite, aún extrajudicialmente, su derecho ante el asegurador de acuerdo con el artículo 1077.” 3.7 EXTINCIÓN DEL CONTRATO DE SEGURO El contrato de seguro puede terminarse o extinguirse por diferentes causales, a saber: 2.7.1 Vencimiento del plazo. 2.7.2 Con el pago total de la indemnización. 2.7.3 Por acuerdo entre las partes 2.7.4 Por Revocación. Artículo 1071 C.de Co. 2.7.5 Por destrucción o pérdida de la cosa asegurada. Artículo 1086 y 1109 C.de Co. 2.7.6 Por la terminación sanción. Artículo 1061, 1066, 1068, C de Co. 158 2.7.7 Por nulidad absoluta. Artículo 1129 C de Co. (Especial para el seguro de Responsabilidad Civil Profesional) 2.7.8 Por falta de un elemento esencial. Artículo 1045 y 1137 159 CAPITULO IV CONTRATO DE SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL MÉDICA 4.1 SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL 4.1.1 NOCIÓN Consagración legal. El Artículo 1127 del C. de Co. Estipula que “El seguro de Responsabilidad impone a cargo del asegurador la obligación de indemnizar los perjuicios patrimoniales que cause el asegurado con motivo de determinada responsabilidad en que incurra de acuerdo con la ley y tiene como propósito el resarcimiento de la víctima, la cual, en tal virtud, se constituye en el beneficiario de la indemnización, sin perjuicio de las prestaciones que se le reconozcan al asegurado. Son asegurables la responsabilidad contractual y la extracontractual, al igual que la culpa grave, con la restricción indicada en el artículo 1055.” 160 4.1.2 UBICACIÓN El Código de Comercio Colombiano establece una clasificación del contrato de seguro, que permite ubicar el seguro de responsabilidad civil profesional, en un orden jerárquico, donde cada clase de seguro forma parte de la modalidad inmediatamente superior, hasta llegar a la noción más general del seguro, así: Seguros Seguros de Daños Seguros Patrimoniales Seguro de Responsabilidad Civil Seguro de Responsabilidad Civil Profesional El fin que se persigue con el seguro de responsabilidad civil profesional, es cubrir la responsabilidad que pueda pesar sobre el asegurado, proveniente de circunstancias que se presentan en el desarrollo de su actividad profesional y de las cuales sea civilmente responsable. Está referido a daños ocasionados en el desarrollo de su actividad profesional. 4.1.3 AMBITO DE APLICACIÓN De acuerdo con el artículo 1127, el seguro de responsabilidad civil, “tiene como propósito el resarcimiento de la víctima, la cual en tal virtud, se constituye en el beneficio de la indemnización... ” Busca la protección de la víctima de los 161 daños que pueda sufrir cuando tenga su origen en la denominada “culpa profesional” que es una de las manifestaciones de la culpa. Protege también el patrimonio del civilmente responsable pues de no existir el seguro, sería su patrimonio el que se afectaría como consecuencia de la responsabilidad civil. Por culpa profesional, podemos entender aquélla en la que incurre una persona que ejerce una profesión, al faltar a los deberes especiales que ella impone. Se trata de una infracción típica concerniente a ciertos deberes propios de esa determinada actividad. Todo individuo que ejerce una profesión debe poseer los conocimientos teóricos y prácticos propios de la misma y aplicarlos de manera cuidadosa y diligente. 4.1.3.1 Definición de Profesional Como ya lo habíamos anotado anteriormente profesional “es aquella persona que frente a la sociedad realiza una actividad habitual y presta y ofrece sus servicios. El profesional, es una persona dotada de conocimientos, pericias o saberes que, por lo habitual, están respaldados por la ostentación de un título acreditativo de la idoneidad para el desempeño de su función”.242 De esta manera, la expresión profesional se asocia con la persona que ha cursado una carrera universitaria o, como dice el Código Civil, “El que realice largos estudios”. Esta persona ofrece y presta sus servicios a la comunidad; y 242 MARTINEZ-CALCERRADA, Luis. La responsabilidad civil profesional. Madrid: Editorial Colex. 1999. p. 21. 162 la comunidad celebra contratos para obtener la prestación de sus servicios, puede exigir que éste cumpla diligentemente con sus obligaciones y que responda por los daños causados. 4.1.3.2 Cobertura del seguro de responsabilidad civil profesional Antes de analizar la cobertura que ofrece el seguro de responsabilidad civil profesional, vamos a enunciar algunas notas características de este contrato en particular, que nos ayudará más adelante, a precisar el alcance de su cobertura. • Es un seguro Multidisciplinar: “Inciden sobre él una serie de materias, de carácter jurídico, sociológico, estadístico..., que de alguna manera, como en el caso del derecho, nos trazan un esquema previo, que va a orientar de forma decisiva el desarrollo de esta disciplina.”243 • Es un seguro amplio: “Bajo las sencillas y minimizadas siglas del RC se esconden una variadísima gama de modalidades de aseguramiento, que van desde la esfera privada de cualquier individuo hasta los más complejos riesgos industriales.”244 243 LOPEZ-COBO, Claudio I. El Seguro de Responsabilidad Civil. Fundamentos y Modalidades. Madrid: Comercial Impresora. 1988 p. 20 244 LOPEZ-COBO Ob. Cit. p. 20 163 • Es un seguro moderno: “Este seguro es una consecuencia directa, aunque no inmediata, de la evolución de la práctica mercantil y de la Revolución Industrial de los siglos XVII y XIX.”245 • La responsabilidad civil no es un concepto estático: “Por el contrario, es algo permanentemente ligado a los cambios y necesidades sociales y a los criterios jurisprudenciales del momento.”246 La finalidad del seguro de responsabilidad civil profesional, es preventiva, busca evitar que el patrimonio del asegurado resulte afectado como consecuencia de la responsabilidad derivada de su ejercicio profesional. El ámbito de aplicación de este tipo de seguro es muy amplio, porque se puede pactar para cualquier caso, salvo aquellos en los que el asegurado no sea legalmente hábil para ejercer la profesión o cuando la profesión no goza de la tutela del Estado. Esto de acuerdo con el artículo 1129 del C. de Co. Que establece que: “será nulo, de nulidad absoluta, el seguro de responsabilidad profesional cuando la profesión y su ejercicio no gocen de la tutela del Estado o cuando, al momento de celebrarse el contrato, el asegurado no sea legalmente hábil para ejercer la profesión”247. 245 LOPEZ-COBO Ob. Cit. p. 21 246 LOPEZ-COBO Ob. Cit. p. 21 247 ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Responsabilidad Civil Profesional. Tesis. Pontificia Universidad Javeriana. 1995. Pág. 85 164 4.1.4 FUNCIÓN DEL SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL El seguro de Responsabilidad Civil Profesional contiene todos y cada uno de los elementos y características propias del seguro de Responsabilidad Civil, diferenciándose en la clase de daño que genera la responsabilidad del asegurado, pues es un daño que se origina como consecuencia del ejercicio de una actividad profesional, de hay la importancia de este seguro, ya que persigue la asunción del riesgo por parte de una aseguradora con el fin de indemnizar a la víctima en el evento de que se cause un daño en el desempeño o ejercicio profesional del agente. 4.1.5 SINIESTRO El Código de Comercio en su artículo 1072 define el siniestro como “la realización del riesgo asegurado”248; pero determinar el momento en que se produce la realización del riesgo no es fácil en la práctica, y más cuando se trata de un seguro de Responsabilidad, en donde el siniestro “consistirá en el que dio lugar a la responsabilidad”249, por esto el “tema de la daño identificación del daño en este seguro ha dado lugar a grandes discusiones doctrinales. Así como es sencillo identificar el siniestro con el incendio en el seguro de este nombre (o en el de granizo, o robo, o rotura de cristales), en el de la responsabilidad civil cabe discutir si el siniestro coincide con el hecho 248 249 Articulo 1072 C. Co. GARRIGUES, Joaquín. Contrato de Seguro Terrestres. Imprenta Aguirre. Madrid. 1982. Pág. 369 165 jurídico de la reclamación del perjudicado, o con el hecho de haber cumplido el asegurado su obligación de indemnizar al tercero”250. Las distintas tesis de la doctrina confluyen en dos teorías principales, que se pueden dividir en “la que sostiene que el siniestro coincide con el hecho dañoso, del que nace la responsabilidad; la que afirma que no hay siniestro hasta que el tercero perjudicado no haya hecho su reclamación”251. En Colombia el Código de Comercio no toma un criterio único, sino que mezcla estas dos teorías para establecer cuándo se entiende ocurrido el siniestro, por ésto en el articulo 1131 de este mismo código se consagra lo siguiente: “en el seguro de responsabilidad se entenderá ocurrido el siniestro en el momento en que acaezca el hecho externo imputable al asegurado, fecha a partir de la cual correrá la prescripción respecto de la víctima. Frente al asegurado, ello ocurrirá desde cuando la víctima le formula la petición judicial o extrajudicial”252. ¿Pero cuando se da el hecho externo imputable al asegurado en la responsabilidad civil profesional? Si tenemos en cuenta que “no siempre concurren todos los elementos de la responsabilidad en un mismo momento…”253, pues pueden presentarse “dentro de un lapso de tempo más o menos largo”254; podemos entender que de ésta determinación dependerá que 250 GARRIGUES, Joaquín. Ob. Cit. Pág. 369 y 370 251 GARRIGUES, Joaquín. Ob. Cit. Pág. 370 252 Articuló 1131 C. Co. 253 ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág.59 y 60 254 ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág.59 y 60 166 el “evento del cual el asegurado es civilmente responsable se encuentra o no cubierto por un determinado contrato de seguros…”255. Al respecto, la Comisión Redactora en su exposición de motivos expreso: “La Comisión ha querido (Art. 951) dar solución a algunos problemas que suscita la noción de siniestro en el seguro de responsabilidad civil. Y por eso ha dicho que el siniestro se encuentra ocurrido desde el momento en que se registre el hecho externo imputable al asegurado. Pero ha agregado, al mismo tiempo, que la responsabilidad del asegurador no podrá hacerse efectiva sino cuando el damnificado o sus causahabientes formulen su reclamación judicial o extrajudicial, con lo cual se da solución a los problemas atinentes a la vigencia de ese contrato, a la fecha desde la cual empieza a contarse el término dentro del cual el asegurado debe notificar el siniestro, al momento que marca la iniciación del lapso de prescripción de la acciones, etc.”256. “De lo que concluimos que la intención del legislador fue entender por ocurrencia del siniestro la realización del hecho imputable al asegurado, momento en el cual nace la obligación del asegurador (Schuld), pero condicionar dicha obligación a la presentación de la víctima en cuyo caso ésta 255 256 ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág. 60 ACTAS de la COMISIÓN REDACTORA. Exposición de Motivos. OSSA GOMEZ, Efrén. Tomo II. El Contrato. Págs. 593 y 594 167 se torna exigible (Haftung), momento a partir del cual corre prescripción respecto del asegurado”257. Pero “frente a la víctima la obligación del asegurador es completa (Schuld y Haftung) desde el momento de la ocurrencia del hecho, momento a partir del cual el damnificado puede ejercer su acción directa contra el asegurador para obtener el pago de la indemnización”258. 4.1.6 PRESCRIPCIÓN Los Doctores Rafael Gamboa, Carlos Darío Barrera y José Fernando Torres explican en su análisis: La Prescripción en el Contrato de Seguros que “el problema de la determinación del momento desde el cual corre o debe correr él termino de la prescripción de la acción del asegurado o beneficiado contra el asegurador, derivada del seguro de responsabilidad civil, ha suscitado fuertes controversias en la doctrina y la jurisprudencia, no solo en Colombia sino en otros países”. Por ésto el nuevo Código Civil trae una norma especial259 que regula el momento a partir del cual comienza a correr los términos de prescripción, disipando de esta forma las dudas que se tenían sobre el tema. 257 ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág. 62 258 ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág. 62 259 Articulo 1131: “En el seguro de responsabilidad se entenderá ocurrido el siniestro en el momento en que acaezca el hecho externo imputable al asegurado, fecha a partir de la cual correrá la prescripción respecto a la victima. Frente al asegurado ello ocurrirá desde cuando la victima le formula la petición judicial o extrajudicial”. 168 “Así las cosas, las cosas la prescripción de la obligación del asegurado frente a la víctima se regirá por las normas que reglamentan la responsabilidad civil. El asegurador sólo podrá ser demandado en ejercicio de la acción directa si el termina de la prescripción establecido en el Código de Comercio en el articulo 1081 no se ha cumplido, contado a partir del acaecimiento del hecho externo imputable al asegurado, según lo establece el Art. 1131 C. Co. La prescripción del derecho del asegurado contra el asegurador, está sujeta a los términos del artículo 1080 del C. Co pero la prescripción empieza a correr desde el momento en que la obligación se torna exigible, esto ocurre según lo preceptuado por él articulo 1131, a partir de la reclamación judicial o extrajudicial del damnificado o de sus causahabientes”260. Es tal vez este punto el que mayores problemas a generado a las empresas aseguradoras Colombianas, pues con lo consagrado en la norma se amplió de una forma significativa el tiempo de reclamación directa de la víctima, lo que hace que las reaseguradoras no muestren interés en de seguros de responsabilidad civil médica, debido a que el tiempo de prescripción se encuentra suspendido hasta el día en que la víctima presenta la reclamación al asegurado. 260 ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág. 87 169 Actualmente en el mundo, el mercado ofrece las pólizas con cláusulas Claims Made, las cuales exigen que la reclamación sea efectuada durante el período de vigencia de la póliza independientemente del momento de la ocurrencia del hecho, para evitar los seguros long tail. En Colombia con el artículo 4 de la Ley 389 de 1997261 se abrió la posibilidad de suscribir contratos de seguros de responsabilidad con cláusulas Claims Made. 4.2 SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL MÉDICA 4.2.1 NOCIÓN Con el seguro de responsabilidad civil médica se transfiere la responsabilidad que se genera como consecuencia de la mala praxis del médico, de una persona física o jurídica, hacia una institución que dispone de mayores recursos financieros, conocida como aseguradora, para la pronta atención de indemnizaciones requeridas. El seguro de responsabilidad médica trasmite al público, la idea de que la persona que los atiende, es decir el profesional esta protegido y por lo tanto ellos también, por esto tanto médico como quien 261 ARTICULO 4, Ley 389 De 1997. Cobertura del Seguro de Manejo y del de Responsabilidad: “En el seguro de manejo y riesgos financieros y en el de responsabilidad la cobertura podrá circunscribirse al descubrimiento de pérdidas durante la vigencia, en el primero, y a las reclamaciones formuladas por el damnificado al asegurado o a la compañía durante la vigencia, en el segundo, así se trate de hechos ocurridos con anterioridad a su iniciación. Así mismo, se podrá definir como cubiertos los hechos que acaezcan durante la vigencia del seguro de responsabilidad siempre que la reclamación del damnificado al asegurado o al asegurador se efectúe dentro del termino estipulado en el contrato, el cual no será inferior a dos años. Parafrago: El Gobierno Nacional, por razones de interés general, podrá exceder lo dispuesto en el presente artículo a otros ramos de seguros que así lo ameriten”. 170 requiere sus servicios, es decir, el paciente, se sienten confiados en el ejercicio de la profesión. Cabe anotar, que todos los planteamientos antes descritos en el seguro de responsabilidad civil profesional son aplicables a el contrato suscrito por los médicos con las compañías aseguradoras. 4.2.2 RELACIÓN ENTRE RESPONSABILIDAD CIVIL MÉDICA Y EL SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL “El seguro de responsabilidad civil surge como una necesidad inherente al ejercicio profesional actual, generando la seguridad de que los posibles daños y perjuicios causados en el ejercicio profesional podrán ser resarcidos, o al menos paliados. Pero esa seguridad que el profesional cree tener, a veces se ve truncada por la falta de un adecuado entendimiento acerca del seguro de responsabilidad civil y de las condiciones de la póliza que se ha pactado, que en mas de una ocasión puede dejar a la clínica, hospital o profesional, asumiendo directamente los riesgos que en su momento procuro trasladar a la compañía aseguradora”262. Frente al interés público de que todo daño sea reparado, surge la necesidad de trasladar los riesgos a un tercero, en este caso a un asegurador, que los 262 MIRANDA SUAREZ. Francisco Ob. Cit. Pág. 21 y 22 171 asuma a cambio del pago de una cantidad de dinero, denominada prima. Este fenómeno ha generado un nuevo escenario en materia de reparación integral del daño. El aumento de las condenas por concepto de la responsabilidad civil de los médicos, clínicas u hospitales, permite entender el incremento en la contratación de seguros para cubrir los daños que aquellos puedan ocasionar. Entonces, “el seguro de responsabilidad profesional actúa en el campo patrimonial del asegurado, siendo en principio una herramienta valiosa y eficaz en aras de evitar el riesgo patrimonial involucrado. Decimos en principio, pues la agravación de los riesgos, y el auge en materia de responsabilidad medica, han obligado a los aseguradores y reaseguradores, a revisar las cláusulas y modalidades de los seguros de responsabilidad civil, que pueden resultar en contradicción con los elementos esenciales que informan el contrato de seguros, generando dudas acerca del alcance de la autonomía de la voluntad en este ámbito, y provocando situaciones a veces contrarias a los derechos del propio asegurado”.263 263 MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 24 172 4.2.3 EL ASEGURAMIENTO DEL MÉDICO Es curioso como los avances de la medicina, contrastan con el notable incremento de las demandas y denuncias de pacientes insatisfechos en la búsqueda de un resarcimiento económico y social pues, poner todos los medios al alcance del paciente para intentar paliar su enfermedad, empieza a no ser suficiente: ahora se busca la garantía en el resultado. El resultado de las demandas por responsabilidad que termina en la condena del médico ha aumentado en un 40% cada año, de aquí nace la verdadera necesidad de contratar un seguro de responsabilidad civil como medida de atenuación al impacto contra el patrimonio de los médicos. En este sentido, no se debe buscar sólo una póliza que garantice una serie de amparos para las actuaciones profesionales, sino un completo paquete que se adapte a las necesidades, y que tengan como objeto fundamental crear seguridad en el ejercicio de la profesión médica. Para determinar qué es el aseguramiento médico es conveniente precisar algunos aspectos: Medicina: “Es la ciencia, arte y profesión que reúne el conjunto de conocimientos y procedimientos organizados de acuerdo con el método científico que permite aplicarse para la promoción de la salud, prevención, diagnóstico de la enfermedad; terapeuta y rehabilitación del ser humano y 173 mejorar los patrones de vida de la colectividad, y su entorno, en el contexto del proceso salud, enfermedad y muerte”264. Ejercicio de la medicina: “Aplicación de medios y conocimientos científicos, saberes y disciplinas cuyo fin es la promoción de la salud, y la prevención, diagnóstico de la enfermedad; tratamientos y rehabilitación del enfermo desde el punto de vista biológico, mental y social mediante actividades y actos médicos ejecutados por personal idóneo debidamente capacitado para tal fin conforme a su formación de pregrado y/o postgrado y adecuado a las necesidades sociales del país. Este puede ser independiente, institucional, público, y privado; y puede ser ejecutado individualmente o por equipos de salud. El campo del trabajo médico-asistencial puede ser general o especializado”.265 Acto médico: “Conjunto de acciones producto de los conocimientos y método científico que constituyen la medicina, se aplican por él médico autorizado para ejercerla, se orienta a la promoción de la salud y la prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de la enfermedad”.266 264 PROYECTO DE LEY NUMERO 144 DE 1998 SENADO, Virgilio Galvis Ramírez, Gaceta numero 303, 27 de noviembre de 1998, Pág. 5 265 PROYECTO DE LEY NUMERO 144 DE 1998 SENADO, Virgilio Galvis Ramírez, Gaceta numero 303, 27 de noviembre de 1998, Pág. 5 266 PROYECTO DE LEY NUMERO 144 DE 1998 SENADO, Virgilio Galvis Ramírez, Gaceta numero 303, 27 de noviembre de 1998, Pág. 5 174 Médico: “El médico es la persona a quien legalmente se le ha otorgado él titulo de médico previa formación a nivel universitario y quien se compromete a ejercer su profesión con principios humanísticos, éticos y científicos. El médico se compromete a utilizar todos los medios a su alcance para efectuar el acto médico con apoyo en sus conocimientos, su adiestramiento técnico y su diligencia y responsabilidad para mantener la salud y tratar o aliviar los efectos de la enfermedad, previa información de los posibles riesgos y complicaciones inherentes al acto médico.”267 El seguro de responsabilidad médica cubre la responsabilidad profesional del asegurado derivada del ejercicio de su profesión médica, y la de sus empleados que ejerzan una profesión médica, médica auxiliar, o farmacéutica, y que por su culpa, ya sea por negligencia o impericia, causen daños corporales o inclusive la muerte a sus pacientes. Así mismo, ampara la responsabilidad civil legal por los daños que causen a terceros en sus bienes o en sus personas, que se deriven por el uso, posesión o mantenimiento de inmuebles, de aparatos y tratamientos médicos con fines de diagnóstico o terapéutica, y de equipos de medicina nuclear y materias radioactivas empleados para el desarrollo de dichas actividades médicas. También ampara los gastos de defensa si es presentada una demanda en contra del asegurado, como por ejemplo las primas por fianzas judiciales en garantía del pago de las sumas reclamadas, así como, el pago de las 267 PROYECTO DE LEY NUMERO 144 DE 1998 SENADO, Virgilio Galvis Ramírez, Gaceta numero 303, 27 de noviembre de 1998, Pág. 5 175 cauciones o de las primas de las fianzas que deban otorgarse como caución para que alcance su libertad preparatoria, provisional o condicional durante un proceso penal o civil, que se siga en su contra. El Seguro de Responsabilidad Civil para Profesiones Médicas, está dirigido a médicos titulados de cualquier especialidad, asociaciones, institutos y grupos de colegios médicos. En los últimos años se ha presentado un incremento en las demandas, pero estas no están directamente relacionadas con la existencia de un Seguro sino con el progreso social, médico y jurídico que desde hace algún tiempo se viene poniendo de manifiesto. Social porque el paciente no se resigna ya a los problemas de salud y ve con más certeza la posibilidad de reclamar por los perjuicios sufridos, y de obtener por ello una compensación económica en el caso de que se pruebe la ocurrencia del daño; progreso médico porque la protección a la salud cuenta cada vez con técnicas sofisticadas, pero también más complejas y peligrosas que, por una parte, propician una exigencia quizás excesiva de los pacientes en este progreso y, por otra, generan mayores riesgos, a lo que habría que añadir que el progreso técnico ha desdibujado la relación humana entre profesional y paciente, desapareciendo la figura del profesional, cada vez más considerado como un técnico; y progreso jurídico, ya que la responsabilidad del profesional médico no se basa sólo en la negligencia o mala práctica sino en la contravención de los derechos de los pacientes positivizados jurídicamente. 176 4.2.4 PARTES DEL CONTRATO DE SEGUROS Según el Código de Comercio “son partes en el contrato de seguros: 1. El asegurador o sea la persona jurídica que asume los riesgos debidamente autorizada para ello con arreglo a las Leyes y reglamentos, y 2. El tomador o sea la persona que, obrando por cuenta propia o ajena, traslada los riesgos”268. Existen otras personas que sin ser parte del contrato de seguro de responsabilidad civil médica, intervienen en el contrato, estas son los interesado, los cuales pueden ser: 4.2.4.1 El Asegurado: Que es “la persona que tiene interés asegurable en el riesgo que traslada. Es, como lo decía el articulo 635 del antiguo Código de Comercio, la persona que queda libre del riesgo, naturalmente dentro de la relatividad del concepto de indemnización”269. 4.2.4.2 Beneficiario: “Quienes como tales, no intervienen en la formación del contrato (a menos que tenga la calidad de “asegurados” y “tomadores” en el seguro de daños y aún en los de personas sobre riesgo de la muerte), pero 268 269 ARTICULO 1037 C.Co. BUSTAMANTE FERRER, Jaime. URIBE OSORIO, Ana Inés. Principios Jurídicos del Seguro. Colombo Editores. Bogotá. 1994. Pág. 61 177 han de percibir el valor del seguro, en caso de siniestro, ajustado naturalmente con arreglo a sus condiciones y límites”270. 4.2.5 RELACIÓN ENTRE LAS PARTES DEL CONTRATO DE SEGURO 4.2.5.1 Relación Asegurado – Asegurador Esta relación nace bajo el amparo del contrato de seguros, por lo tanto la responsabilidad que se derive de él será contractual, salvo, que se dé el daño por el incumplimiento del contrato, caso en el cual la responsabilidad será extracontractual. Hay que tener en cuenta que en este tipo de seguros el tomador es el mismo asegurado, pues es su “integridad patrimonial la que pretende ser resguardada mediante la contratación del seguro”271. No siempre el tomador es el mismo asegurado en otro tipo de contrato de seguro. 4.2.5.2 Relación Asegurador – Víctima Con la Ley 45 de 1990 nace para la víctima la acción directa contra el asegurador, ya que antes de esta Ley la víctima tenía que demandar al asegurado y éste llamaba en garantía al asegurador. 270 OSSA GÓMEZ, Efrén. Teoría General del Seguro. El Contrato. Tomo II. Editorial Temis. Bogotá. Págs. 12 y 13 271 ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Obra Citada. Pág. 72 178 La acción directa esta consagrada en él articulo 1133 del nuevo Código de Comercio de la siguiente forma: “En el seguro de responsabilidad civil los damnificados tienen acción directa contra el asegurador…”272. “Para acreditar su derecho ante el asegurador de acuerdo con él articulo 1077, la victima en ejercicio de la acción directa podrá en un solo proceso demostrar la responsabilidad del asegurado y demandar la indemnización del asegurador”273, pero antes deberá acreditar él o sus causahabientes que sí existió la responsabilidad del asegurado; por otro lado, si no lo hace en el mismo proceso se tendrá que esperar “el resultado de éste para poder entrar a resolver las pretensiones contra el asegurador, nacidas del contrato de seguro”274. 4.2.5.3 Relación Asegurado – Víctima Según Peirano Facio: “el sentido común se niega a admitir la existencia de un daño que debe ser soportado por quien no ha contribuido a su realización, debe darse necesariamente, cierta relación entre el daño causado y la conducta de la que esta llamado a responder por el mismo”275, de ahí que se necesite que el daño soportado por la víctima tenga origen en el desarrollo de la actividad profesional del asegurado. 272 Articulo 1133 C. Co. 273 Articulo 1133 C. Co. 274 ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág.82 275 PEIRANO FACIO, Jorge. Responsabilidad extracontractual. Tercera edición. Bogotá, Editorial Temis, 1981. Pág. 401 179 La relación que se presenta entre la víctima y el asegurado no se deriva del contrato de seguro, por éste vínculo jurídico podrá ser contractual o extracontractual, pero siempre se regirá por las normas aplicables a la responsabilidad civil, pues se trata de relaciones independientes pero conexas, ya que de una depende la exigibilidad de la otra, es decir, que debe existir previo a la relación victima – asegurado. Cuando se trata de eventos previamente excluidos o se excede el monto del valor asegurado, estamos frente a unos casos donde se presenta responsabilidad por parte del asegurado pero no responde el asegurador, esto quiere decir, que no siempre que el asegurado cause un daño a la víctima como consecuencia de su actividad responde la aseguradora. Por otro lado, también es posible que el asegurador esté obligado a responder sin que medie culpa del asegurado, tal es el caso de las demandas temerarias. 4.2.6 ELEMENTOS La responsabilidad de un médico no puede ser evaluada por un magistrado con el mismo criterio que se aplica a un conductor que atropella a una persona y le produce distintos daños, pero desafortunadamente la mayoría de países incluyendo Colombia, no cuentan con una normatividad especifica para los médicos, sino que son juzgados de acuerdo a la norma general de responsabilidad civil. 180 En el amito de la responsabilidad civil, para determinar la culpa de un ciudadano en un acto cualquiera, el Código Civil establece como un criterio rector el comportamiento de un Buen Padre de Familia. Para establecer si existe la responsabilidad de un médico no se puede manejar con el criterio de un buen padre de familia, sino que se debe partir de la base que el médico es una persona que tiene, o debe tener, un conjunto de conocimientos técnicos, que debe aplicar a cada caso, y cuando al aplicarlos mal produce un daño, evidentemente hay que juzgarlo de una manera distinta. No obstante ello, también en materia de responsabilidad medica, se tiene que utilizar criterios generales, como son la imprudencia, la impericia, la negligencia o la violación de ciertas leyes o reglamentos. Por ello puede decirse que el seguro de responsabilidad civil profesional médica merece un tratamiento específico y diferenciado en el campo general de la responsabilidad civil profesional, entre otras circunstancias por la especialidad del riesgo que se asume. 4.2.6.1 EL RIESGO ASEGURABLE “El riesgo es la eventualidad de verificar un acontecimiento incierto. El riesgo asegurable es, pues, la eventualidad que llegue a verificarse el acontecimiento incierto previsto en el contrato de seguro: un acontecimiento susceptible de ocasionar un daño... una consecuencia económicamente 181 desventajosa cuya realización ha de obligar al asegurador a cumplir su prestación indemnizatoria”276. El Código de Comercio define el riesgo como “el suceso incierto que no depende exclusivamente de la voluntad del tomador, del asegurado o del beneficiario, y cuya realización da origen a la obligación del asegurador”277. Este riesgo varía dependiendo del tipo de seguro, por esto en los casos del seguro de responsabilidad civil “el riesgo está constituido, precisamente, por la eventualidad del nacimiento de una responsabilidad civil”278, entonces, el riesgo en estos casos “consiste en la posible responsabilidad civil en que, por aplicación de las normas legales, puede incurrir el asegurado por acción u omisión, no dolosa, que le obligue a reparar el daño causado”279. Ahora, refiriéndonos al tema de nuestra tesis “El Seguro de Responsabilidad Civil Profesional Médica”, podemos decir, que al igual que en los demás seguros de responsabilidad, debemos establecer los elementos que configuran esta responsabilidad para así delimitar el riesgo asegurable: 276 STIGLITZ Y STIGLITZ. Seguro Contra la Responsabilidad Civil. Abeledo-Perrot. Buenos Aires. Argentina. 1991. Pág. 207 277 Articulo 1054 C. Co. 278 STIGLITZ Y STIGLITZ. Ob. Cit. Pág. 208 279 GARRIGUES, Joaquín. Ob. Cit. Pág. 361 182 4.2.6.1.1 LA CONDUCTA ASEGURABLE El doctor Sergio Yépez Restrepo explica que es más adecuado hablar de conducta por que ésta “además de la intención y la imprudencia, comprende también el incumplimiento de la obligación que adquiere el médico que aunque por regla general es de medios, en ciertos casos puede ser de resultados”280. Entonces, se requiere de una conducta dañosa para que exista responsabilidad civil del médico y por lo tanto, entre a responder la aseguradora como la persona jurídica que asumió el riesgo. Esta conducta puede ser “un hecho positivo: acción por comisión o un hecho negativo: acción por omisión.”281. 4.2.6.1.1.1 CLASES DE CONDUCTAS ASEGURABLES Es asegurable todo acto u omisión cometidos en el ejercicio de una actividad profesional médica por el facultativo. Las conductas del médico que son objeto del seguro de responsabilidad civil médica serán: 280 YEPES RESTREPO, Sergio. La Responsabilidad Civil Médica. Biblioteca Jurídica Dike, Primera edición, Medellín 1992, Pág. 35 281 MOSSET ITURRASPE. Jorge. Responsabilidad Civil del Medico. Editorial Ábaco de Rodolfo Depalma. Buenos Aires, 1986. Pág. 166 183 Negligencia: “se traduce en la no aplicación de las técnicas médicas y los procedimientos terapéuticos cuando éstos son conocidos por el facultativo y, a pesar de ello, no los utiliza en su accionar, agravando la salud del paciente”282. Impericia: “Consiste en la falta de habilidad o de capacidad profesional para realizar un determinado tratamiento o una operación y que lo conduce culposamente al fracaso”283. Imprudencia: “Se presenta con una conducta temeraria que se realiza sin diligencia y sin el cuidado debido y que ocasiona un daño en la salud del paciente que hubiera podido preverse y evitarse”284. Violación del reglamento: “Podemos indicar que las normas de ética médica ordenan deberes de cuidado en el campo médico y los mismos estudios profesionales señalan pautas y tratamientos a seguir según el tipo de enfermedad de que trate. En cuanto a ésto, la simple violación del reglamento conllevaría la responsabilidad en el evento en que se produjera un daño debido a la no observación de los deberes y las pautas indicadas por la ciencia médica y que se denomina Lex artis”285. Estos daños en principio no son 282 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 36 283 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 36 284 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 37 285 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 37 y 38 184 cubiertos por las pólizas de seguro de responsabilidad civil médica, al respecto póliza de Suramericana consagra: “Exclusiones: 1.11os daños a causa de la inobservancia o la violación de una obligación determinada impuesta por reglamentos o por instituciones emitidas por cualquier autoridad así como la violación de estipulaciones contractuales, a no ser que ni el asegurado ni la persona con funciones directivas hayan actuado dolosamente ni hayan permitido una actuación dolosa de los demás empleados”286. Incumplimiento Contractual: “Este dependerá de la obligación que asume el médico al tratar un paciente que a veces puede ser de medios y en ocasiones de resultado. La obligación será de medio cuando el galeno debe emplear la diligencia y el cuidado debidos en el tratamiento o en la intervención, sin estar obligado a conseguir la curación efectiva; y será de resultado, cuando la prestación del médico consiste en obtener un especifico propósito o un determinado efecto”287. Pero la mayoría de las pólizas de seguros no responden por la responsabilidad civil del médico derivada de una cirugía plástica o estética, a no ser que esta tenga como fin la reconstrucción después de un accidente o la corrección de anomalías congénitas. Omisión: “Cuando un profesional no asiste a un paciente y por esa abstención se causa un daño en la salud de éste la responsabilidad es la misma ya que se tiene el deber jurídico de impedir el resultado, no evitarlo pudiendo hacerlo equivale a producirlo”288. 286 POLIZA DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL PARA MEDICOS. Suramericana 287 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 38 288 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 39 185 Es importante anotar, que la medicina no es una ciencia exacta y por lo tanto se pueden presentar eventos en los cuales, a pesar de haberse dado un tratamiento adecuado los resultados no son los esperados, ésto debido a que no todos los organismos son iguales y se comportan de la misma forma frente a una misma enfermedad; por lo tanto, seria ilógico pensar que los médicos tuvieran que responder por estos casos. Otro punto relevante en este tema es el relacionado con la Lex Artis, pues existen momentos donde el tratamiento reconocido se ve revaluado frente a uno nuevo que ofrece mejores resultados pero talvez no tiene la aceptación y reconocimiento del otro. Aquí la ley permite que el galeno aplique el nuevo tratamiento a su paciente con la autorización de éste, sin que el no obtener los resultados produzcan responsabilidad del médico y por lo tanto una obligación a la empresa aseguradora. 4.2.6.1.1.2 CONDUCTAS NO ASEGURABLES El Código de Comercio establece que “el asegurador podrá, a su arbitrio, asumir todos o algunos de los riesgos a que estén expuestos el interés o la cosa asegurada, el patrimonio o la persona asegurado”289, por lo tanto, las partes podrán pactar todas las exclusiones que estimen convenientes y las que la Ley dispone como obligatorias. 289 Articulo 1056 C. Co. 186 Son exclusiones establecidas por la Ley: El Dolo: no es asegurable por ningún motivo, “ya que quien a través del ejercicio de su profesión posee intención de dañar a otro... no puede pretender indemnidad, pues sería legalizar el delito y perdería el contrato de seguros su característica de aleatorio”290. Provocación Intencional del Siniestro: según lo dispuesto por el artículo 1055 del Código de Comercio “los actos meramente potestativos del tomador, asegurado o beneficiario” no constituyen un riesgo asegurable por desvirtuar la eventualidad del riesgo asegurable. Al respecto Efrén Ossa dijo que: “No es concebible el seguro sobre un evento cuya realización dependa de la sola voluntad del interesado”291. 4.2.6.1.1.3 CULPA GRAVE COMO UN CASO ESPECIAL Al llegar al tema de la culpa grave en los seguros de responsabilidad civil Rubén Stiglitz dice que nos encontramos frente a un tema “ininteligible, oscuro, ambiguo, por no decir incomprensible”292. Y es que, este tema ha sido motivo de controversia para la doctrina durante muchos años, por las distintas apreciaciones que del él hacen los tratadistas. 290 GHERSI. Carlos A. Responsabilidad por Prestación Médico Asistencial. Biblioteca Jurídica Diké. 1° edición colombiana. 1993. Pág. 311 291 292 EFRËN, Ossa. Ob. Cit. Pág. 99 STIGLITZ, Rubén. TRIGO REPRESAS, Félix. El Seguro Contra la Responsabilidad civil Profesional del medico, Editorial Astrea, Buenos Aires, 1983, Pág. 50 187 Es por eso que, el artículo 1055293 establece expresamente que el dolo al igual que la culpa grave y los actos meramente potestativos del tomador, asegurado o beneficiario son inasegurables, para evitar controversias. Pero él articulo 84 de la Ley 45 de 1990294 hizo una excepción ha esta norma, al consagrar que la culpa grave sí es un riesgo asegurable en los seguros de responsabilidad civil. Entonces, tratándose el seguro de responsabilidad civil médica una especie del anterior, podemos decir que en este seguro se puede cubrir la culpa grave de los médicos en el ejercicio de su profesión, siendo apreciada ésta bajo el criterio del “buen profesional” y no del buen padre de familia, como es la regla general. Tenemos que, por disposición de la Ley cuando las partes no estipulan expresamente en el contrato de seguros que éste no cubre la culpa grave, se entenderá que esta cubierta por la póliza, según lo establecido por él articulo 1127 del Código de Comercio, algunos sostienen esta posición, pero otros afirman que se requiere pacto expreso en el sentido de incluirla. Para concluir, Nicolás Barbato expone que la culpa grave “reviste en el seguro, características particulares”295, que la hacen diferente de la que se aplica en el 293 Articulo 1055 C, Co: “El dolo, la culpa grave y los actos meramente potestativos del tomador, asegurado o beneficiario son inasegurables. Cualquier estipulación en contrario no producirá efecto alguno; tampoco lo producirá la que tenga por objeto amparar al asegurado contra sanciones de carácter penal o policivo”. 294 Articulo 84 de la Ley 45 de 1990: “El seguro de responsabilidad... son asegurables la responsabilidad contractual y la extracontractual, al igual que la culpa grave, con la restricción indicada en el artículo 1055”. 295 BARBATO, Nicolás, Culpa Grave y Dolo en el Derecho de Seguros. Editorial Hamurabi, Buenos Aires, 1988. Pág. 123 y 124 188 derecho civil, pues “está formulada con una función que responde a la técnica especifica del seguro que requiere la delimitación del riesgo para poder funcionar eficazmente”296. Otro tema que genera aún más controversia es él referente a la culpa grave asimilable al dolo, pues aquí las posiciones son variadas y en Colombia la Ley no tiene una posición sobre el tema. Al respecto, compartimos la idea del Doctor Barbato, en que la culpa grave asimilable al dolo no puede ser amparada por ningún seguro, incluyendo el de responsabilidad civil, pues esto produciría “una intensificación desorbitada del riesgo”297. ¿Pero cuando se produce culpa grave asimilable al dolo en el seguro de responsabilidad civil profesional del médico? “Cuando el nivel de omisión de las diligencias de acuerdo a la naturaleza de la obligación, las circunstancias de persona, tiempo y lugar, indiquen que su utilización ha sido un grado exorbitante de ignorancia o descuido que colocan a la situación de riesgo asegurable, en certidumbre de provocación del daño indemnizable”298, estaremos hablando de la culpa asimilable al dolo. 296 BARBATO, Nicolás. Ob. Cit. Pág. 125 297 BARBATO, Nicolás. Ob. Cit. Pág. 123 298 GHERSI. Carlos A. Ob. Cit. Pág. 312 y 313 189 4.2.6.1.2 EL DAÑO ASEGURABLE EN LA RESPONSABILIDAD CIVIL MÉDICA Uno de los requisitos de todo seguro es la existencia de un daño, pero éste en el caso del aseguramiento de la responsabilidad civil médica presenta unas connotaciones que lo distinguen de la generalidad, pues, como ya hemos explicado antes, la responsabilidad de los profesionales de la medicina requiere para su análisis y juzgamiento, un tipo de estudio especifico, debido a que no es lo mismo determinar la responsabilidad de una persona normal que la del médico en ejercicio de sus funciones. Al respecto Trigo explica: “... para apreciar la culpa profesional no se puede recurrir al modelo del bonus pater familiae, o sea el hombre prudente y diligente, muy por el contrario, acá será necesario acudir al arquetipo del “buen profesional”; y así como se exige a los deudores comunes que pongan en el cumplimiento de sus obligaciones “todos los cuidados de un buen padre de familia”, cabrá pretender del deudor “profesional” que ponga en el cumplimiento de la suya “todos los cuidados del buen profesional de su especialidad” ya que no puede compararse con el hombre medio prudente y diligente a quien actúa en un orden de cosas en que posee evidentemente conocimientos o aptitudes superiores al grado medio, sea o no un profesional”299. 299 TRIGO REPRESAS, Félix A. Ob. Cit. Pág. 45 190 Podemos distinguir tres tipos de daños, según ellos tarden en manifestarse: Daño de Manifestación Instantánea: “Esto es, aquellos daños causados por una acción u omisión imputable que se manifiesta en su totalidad en forma inmediata”300. Daño de Manifestación Gradual: “Esto es, aquellos causados por una acción u omisión imputable que se pone de manifiesto no en forma inmediata, sino gradualmente”301. Daños de Manifestación Diferida: “Esto es aquellos que entre la acción u omisión imputable y la manifestación del daño existe un prolongado lapso de tiempo”302. Estableceremos los requisitos del daño que se asegura tratándose de los médicos. A. Daño efectivo: “El daño ocasionado en el paciente ha de ser efectivo y es efectivo el DAÑO REAL (no la molestia), CONCRETO, PRESENTE (no el futuro), COMPROBABLE (no el hipotético). 300 SATELER A. Ricardo. La Delimitación Temporal del Período de Cobertura de los Seguros de Responsabilidad Civil. Revista chilena de Derecho de Seguros. AIDA año 2 numero 4 Santiago de Chile de 2000. Pág. 7 301 SATELER A. Ricardo. Ob. Cit. Pág. 7 302 SATELER A. Ricardo. Ob. Cit. Pág. 7 191 Se indemnizan los daños personales (muerte, lesiones físicas o psíquicas), como los morales (entorno afectivo), ocasionados por el actuar negligente de los profesionales. Son indemnizables los daños ocasionados por la organización sanitaria (falta de camas, falta de especialistas en los servicios de urgencias, instrumental en mal estado, etc.) y los ocasionados por los actos médicos propiamente dichos. Es indemnizable no solamente el daño inminente, la valoración concreta de lo dañado (lesiones determinadas) y la disminución patrimonial ocasionada sino también el daño compuesto por lucro cesante, es decir lo que se deja de ganar como consecuencia del daño irrogado. Se pretende la reparación integral de los daños ocasionados”.303 B. Daño evaluable económicamente: “La valoración económica del daño tiene como fin eludir aquellos que no sean significativos y que consistan en meras molestias”304, es de dos tipos: * Daños personales”: (muerte, lesiones físicas o psíquicas): se cuantifican y reparan atendiendo a los gastos de hospitalización y asistencia médica recibida hasta la recuperación y a una cantidad que se determina atendiendo a 303 World Wide Hospital. Instituto Europeo de Medicina Virtual. Requisitos de la Responsabilidad Médica: daño. Tomado de la página de Internet: http://www.worldwidehospital.com/h24h/legresp3.htm 304 World Wide Hospital. Instituto Europeo de Medicina Virtual. Requisitos de la Responsabilidad Médica: daño. Tomado de la página de Internet: http://www.worldwidehospital.com/h24h/legresp3.htm 192 la edad, ingresos profesionales, expectativas de trabajo fundadas, etc., del paciente”305. * Daños morales”: (lesiones que sufre el entorno socio-familiar del lesionado): se cuantifica atendiendo a las lesiones producidas en las relaciones afectivas familiares del paciente y su valoración dependiendo del criterio del tribunal.”306. 4.2.6.1.3 NEXO CAUSAL Existe responsabilidad médica tan solo si los daños reclamados son consecuencia directa del actuar médico o de la omisión de aquellas acciones precias por los profesionales médicos correspondientes, pues debe existir una relación indudablemente firme y directa entre el daño ocasionado y la acción u omisión médica, es decir, entre él diagnóstico y/o tratamiento médico aplicado y el daño, entre el diagnóstico y tratamiento medico omitido y el daño; entonces se indemnizaran los daños ocasionados por la evolución de una enfermedad que pudo evitarse mediante la aplicación de un tratamiento médico adecuado y se indemnizarán los daños ocasionados por la aplicación de un tratamiento médico inadecuado. 305 World Wide Hospital. Instituto Europeo de Medicina Virtual. Requisitos de la Responsabilidad Médica: daño. Tomado de la página de Internet: http://www.worldwidehospital.com/h24h/legresp3.htm 193 La Corte al respecto ha dicho: “En los litigios sobre responsabilidad médica debe establecerse la relación de causalidad entre el acto imputado al médico y el daño sufrido por el cliente. Por lo tanto, el médico no será responsable de la culpa o falta que se le imputa, sino cuando éstas hayan sido las determinantes del perjuicio causado”307. El asegurador sólo responderá por el médico en los eventos en que éste produzca un daño al paciente “como consecuencia de su acción o de omisión, ya sea que exista un contrato válidamente celebrado entre las partes, o no exista ningún vinculo jurídico entre ellas”308. 4.2.6.2 EL INTERES ASEGURABLE Se entiende por interés asegurable “la relación lícita de valor económico sobre un bien cuando se halla amenazada por un riesgo”309. Ahora, establecida “la naturaleza del seguro de responsabilidad civil como seguro contra daños, la presencia de un interés es necesaria, como presupuesto del seguro. Habrá que investigar en qué consiste la relación que es inherente a todo seguro contra daños. En el seguro de responsabilidad civil esta relación será la que liga a toda persona con su patrimonio y no con cosas determinadas de ese patrimonio, porque el siniestro, esto es, la asunción de una deuda de responsabilidad, grava todo nuestro patrimonio como conjunto 306 World Wide Hospital. Instituto Europeo de Medicina Virtual. Requisitos de la Responsabilidad Médica: daño. Tomado de la página de Internet: http://www.worldwidehospital.com/h24h/legresp3.htm 307 SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 116 308 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 34. 194 de relaciones jurídicas de valor económico. El interés consistirá por tanto, aquí en la conservación de la integridad del patrimonio, expuesto al riesgo de ser disminuido por la relación de eventos dañosos que hagan surgir a cargo del asegurado la obligación de resarcir el daño”310. Entonces, el interés asegurable en los seguros de responsabilidad civil profesional del médico será al igual que en los seguros de responsabilidad civil “la relación susceptible de valoración económica, entre una persona y su patrimonio entero”311, por ser éste un seguro contra daños. El interés asegurable por regla general es el que determina el monto del valor asegurado, pues dependiendo de lo que se ponga en riesgo, así será el monto asegurado. Pero esta relación pierde toda proporción cuando nos encontramos frente a un seguro de responsabilidad, ya que en estos eventos sólo podrá determinarse el valor asegurado una vez se realice el riesgo. Es por eso que en estos seguros “la obligación del asegurado frente al tercero es teóricamente ilimitada e indeterminada al momento de celebrarse el contrato. Sin embargo el asegurador puede limitar su responsabilidad hasta el monto de la suma 309 HALPERIN, Isaac. Ob. Cit. Pág. 21 310 GARRIGUES, Joaquín. Ob. Cit. Pág. 364 311 GARRIGUES, Joaquín. Ob. Cit. Pág. 366 195 asegurada, y el valor de la prima se establecerá de conformidad con dicha suma”312. La limitación que hace el asegurador de su responsabilidad en los seguros de responsabilidad no es del todo cierta, pues el Código de Comercio establece “que el asegurador responderá, además, aún en exceso de la suma asegurada por los costos del proceso que el tercero damnificado o sus causahabientes promuevan en su contra o la del asegurado,...”, con lo que se confirma que en estos seguros no es posible establecer un tope a las indemnizaciones antes de que se produzca el siniestro, aún en los eventos en que se establece un valor máximo asegurado. 4.2.6.3 PRIMA O PRECIO DEL SEGURO Es la “contraprestación que persigue el asegurador por la asunción del riesgo…”313. Concebida la prima como “el precio del seguro, la prestación que debe pagar el asegurado a trueque de la promesa de una contraprestación eventual (la indemnización de la perdida o daño o el pago de la suma asegurada en un caso de siniestro), la prima esconde un contenido económico íntimamente vinculado a su significación técnica y a su naturaleza jurídica. Porque sin ella 312 ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág. 49 313 SOLER ALEU, Amadeo. Ob. Cit. Pág. 81 196 (o sin la cotización que es su equivalente en la organización mutualista), el seguro carecería de viabilidad, algo más, sería inconcebible”314. Entonces, al ser el seguro un contrato oneroso, requiere necesariamente de la existencia de un pago por parte del tomador al asegurador como contraprestación a la asunción del riesgo. Pero este riesgo puede variar en el seguro de responsabilidad civil del médico, pues no todas las áreas de la medicina tienen el mismo nivel de peligrosidad en su aplicación, por ésto el precio o prima del seguro dependerá de la rama de la salud asegurada. La Doctora María Cristina Isaza sostiene que las normas generales que “regulan el pago de la prima son iguales para todo el seguro, y la diferencia radica en los sistemas de tarifación para determinar el valor de la prima que son por naturaleza variables y disímiles, según se trate de una u otra actividad, de los riesgos subjetivos, de las condiciones particulares de cada asegurado. No caben aquí las tarifas uniformes, generales, puede decirse que la tarifación es, en principio, individual”315. Respecto a este tema, la experiencia ha demostrado que algunas especialidades médicas son más propensas a generar responsabilidad, por 314 OSSA GÓMEZ, Efrén. Teoría General del Seguro. Tomo I. La Institución: Editorial Temis. Bogotá. 1988. Pág. 49 315 ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág.52 197 esto los neurocirujanos y de los obstetras, son quizás los más judicializados por mala praxis, de ahí que muchas compañías de seguros les apliquen unas tarifas más altas respecto a las otras áreas de la medicina. Por lo tanto, “puede cometer mala praxis un dermatólogo como un neurocirujano, el tema es que la exposición al riesgo de un neurocirujano y de un obstetra es mayor que la de un dermatólogo u otras especialidades que están dentro de la categoría uno, y que no tienen, ni por semejanza, la misma peligrosidad de ejercer la profesión”316, y en consecuencia las aseguradoras son mas rígidas a la hora de calcular la prima para ellas. Un ejemplo claro de esto se da en la ciudad de Nueva York, en la cual “la primera categoría era justamente neurocirujanos, la segunda obstetras y los anestesiólogos, están en un cuarto o quinto nivel de riesgo, dado que a través de los programas de gerenciamiento que se realizan comúnmente en otros países se ha logrado disminuir el riesgo de la anestesiología”317, lo mismo ha sucedido en Colombia, según la compañía FEPASDE, los anestesiólogos han pasado de ser los mas demandados a los menos comprometidos en los casos por mala praxis debido a las regulaciones tanto del estado como de organismos internacionales y por lo tanto su prima del seguro ha bajado. 316 KVITKO, Luis Alberto. Ob. Cit. http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0003.html Tomado de la página de Internet: 198 4.2.6.4 OBLIGACION CONDICIONAL DEL ASEGURADOR La obligación condicional del asegurador en el contrato de seguro de responsabilidad civil del médico es igual a la de las demás pólizas, pues comprende tanto la asunción del riesgo, como el pago de la indemnización en el evento en que se presente el siniestro. La asunción del riesgo como ya hemos visto antes lo hace a cambio de un pago que para estos efectos se conoce como prima, y que genera en él el nacimiento de una obligación condicionada, es decir, el asegurador se obliga a que una vez sucedido él “el acontecimiento futuro”318, o sea “configurado el siniestro (Art. 1075) –que es el riesgo en estado de daño- nace ipso, por ministerio de la Ley (Art. 1054), la obligación actual del asegurador, la de pagar la prestación asegurada conforme a las estipulaciones del contrato y a los principios legales que la gobiernan”319, Entonces, mientras el riesgo “se halle en estado de indemnidad, mientras esconde un daño meramente potencial, es apenas una obligación condicional…”320. La importancia de la indemnización en el seguro de responsabilidad civil médica, radica en devolver al hombre su integridad física y moral, cuando se presenta un daño como consecuencia de la ejecución de la profesión del médico, es por esto, que “cuando alguno de esos bienes aparece dañado, el 317 KVITKO, Luis Alberto. Ob. Cit. http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0003.html 318 Tomado de la página de Internet: Articulo 1530 C.C. “Es obligación condicional la que depende de una condición, esto es, de un acontecimiento futuro, que puede suceder o no”. 319 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. Pág. 99 199 hombre de hoy piensa de inmediato en la superación del perjuicio, en recobrar la salud, la integridad, la capacidad, la aptitud perdida o en parte. Y si tal posibilidad aparece inalcanzable, o a la menos dificultosa, cae en la cuenta de su derecho a una compensación económica”321, que en este caso la puede satisfacer la aseguradora. Se busca entonces con la indemnización la “reparación del menoscabo que sufre la víctima y ante esto la primera opción es procurar devolverle la salud al perjudicado si es posible… en ultima instancia hacer la indemnización integral de todos los perjuicios…”322. Son indemnizables los daños orgánicos y psíquicos, como también los gastos de hospital, drogas, y médicos, etc., “que se hubieran sufragado, así como también los perjuicios materiales por no haber desempeñado sus labores normales durante la recuperación. Tampoco puede dejarse de lado los perjuicios morales que son comunes en la anormalidad orgánica, tales como sentirse enfermo, no poder realizar las funciones físicas y el miedo a morir producido por el estado del organismo. Además de los perjuicios morales existe otro perjuicio extrapatrimonial proveniente de los atentados contra la 320 EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. Pág. 99 321 MOSSET ITURRASPE. Jorge. Ob. Cit. Pág. 220 322 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 41. 200 integridad personal, el cual se denomina daño fisiológico y consiste en la pérdida de las actividades vitales y placenteras de las personas”323. 4.2.7 ELEMENTOS ESPECIALES DEL ASEGURAMIENTO MEDICO La responsabilidad civil del médico tiene un sinnúmero de conceptos propios de esta rama de la salud, que es necesario conocer para poder establecer en que casos se presenta responsabilidad y en que casos no, pues de esto depende la intervención de la aseguradora. La iatrogénia: “ha sido definida como el ámbito de aquellos casos en que se produce un daño, como consecuencia de la gestión inculpable debida a un error excusable del médico. Esto se puede traducir así: cuando para salvar un mal mayor se produce un mal menor el médico es absolutamente excusable de culpa; o sea, cuando realiza una determinada intervención quirúrgica, que sea como fuere tiene secuelas menores, el médico no puede ser inculpado de ese tipo de daño, considerando que en realidad para realizar esa intervención que le salva de una secuela muy importante, le produce una consecuencia menor”324. 323 324 YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 41. GRILLE, Antonio. La Responsabilidad Médica en el Uruguay. Tomado de la página de Internet: http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0003.html 201 El consentimiento informado: Se presenta cuando “indiscutiblemente se tiene que informar al paciente que va a ser sometido a determinado acto médico, intervención quirúrgica, o tratamiento especial, y el médico tiene también la obligación de informarle las consecuencias eventualmente positivas que puede tener ese tratamiento, y las negativas, para que a su vez el paciente evalúe entre una cosa y otra, y en definitiva decida. Esa es la función esencial del consentimiento informado. En cierto modo el médico endosa la responsabilidad que tiene como médico para realizar determinado acto y las probables consecuencias negativas al propio paciente, quien evalúa si le conviene someterse a ese acto médico, esa intervención quirúrgica o tratamiento, con las eventuales consecuencias positivas que le informa el médico, o si prefiere continuar como está y evitar las posibles consecuencias negativas que ese acto le puede producir”325. El error de diagnóstico: “El médico indiscutiblemente en una de sus actuaciones más rápidas tiene que determinar el diagnóstico de la patología. Este diagnóstico puede ser equivocado o no; en el primer caso sin duda se maneja con los elementos imprescindibles que tiene y puede equivocarse. Pero en materia de culpa, el error de diagnóstico sustancialmente puede ser excusable o inexcusable. Es decir, puede ser un error en el que en realidad el médico se equivoque porque ha incurrido en impericia o en imprudencia, o 325 GRILLE, Antonio. Ob. Cit . Tomado de la página de Internet: http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0003.html 202 puede ser que a pesar de adoptar todas las medidas imprescindibles para llegar a ese diagnóstico, en situaciones de cierta anomalía, no lo determine concretamente”326. Obligación de medio o de resultado: “Es posible que el médico en ciertos casos le asegure a su paciente que específicamente su obligación será la de curarlo. Esa no es en esencia la obligación del médico, sino poner todos sus conocimientos a disposición del paciente a los efectos de obtener, en lo posible, su mejoría, pero jamás le puede asegurar, de ninguna manera, la sanidad total de la patología que tiene. Por eso se dice que en principio la obligación del médico es una obligación de medios. Es decir, hacer todo lo que pueda. En cambio, la obligación de resultado implica estrictamente obligarse a que en efecto el médico lo va a curar”.327 La obligación de seguridad: “Otro de los elementos que con el tiempo se han ido depurando en este tipo de juicios por responsabilidad médica es la llamada obligación de seguridad. Ésta se le imputa sustancialmente a las clínicas médicas; las doctoras Szafir y Venturini explican que: "Hay quienes erróneamente llegan a la conclusión de que siempre está incita en un contrato mutual una cláusula de seguridad, que tiñe de tinta el resultado", es decir que 326 GRILLE, Antonio. Ob. Cit. Tomado de la página de Internet: http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0003.html 327 GRILLE, Antonio. Ob. Cit. Tomado de la página de Internet: http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0003.html 203 siempre las instituciones clínicas de asistencia médica tienen una obligación de resultado en el sentido de mejorar totalmente al enfermo. Esta obligación de seguridad vinculada al contrato de asistencia médica". Esta obligación de seguridad comprende ciertas circunstancias en que el paciente que entra por una patología determinada sale por otra. Por ejemplo, un paciente que ingresa por cualquier patología y en el tratamiento se cae de una camilla y se fractura, ahí hay una obligación innegable por parte de la clínica médica porque esa persona, además de la patología que tenía, puede salir con la secuela de una fractura que no fue por lo que ingresó. Esto no implica que exista en la realidad una especie de responsabilidad objetiva, y esto nos lleva de la mano a algo que se da con cierta frecuencia: las infecciones hospitalarias. 4.2.8 DELIMITACION TEMPORAL DE LA COBERTURA DEL SEGURO “La delimitación temporal de la cobertura del seguro dice relación con el periodo de tiempo durante el cual el seguro producirá sus efectos, esto es, generara derechos y obligaciones para las partes, entre ellas la obligación esencial del asegurador de asumir los riesgos amparados por la póliza. Lo normal, en materia de seguros es que haya una simultaneidad entre el hecho dañoso y sus consecuencias, como ocurre en materia de accidentes automovilísticos, incendios u otros, pero la naturaleza de determinados siniestros, como aquellos propios de la responsabilidad médica, provocan generalmente una falta absoluta de simultaneidad entre la acción u omisión generadora de responsabilidad, y su manifestación y posterior reclamo. La 204 particularidad de los seguros de responsabilidad civil de médicos es que en ellos suelen darse distintos momentos, normalmente no coincidentes en el tiempo: la causa del siniestro (acción u omisión), el daño derivado del mismo (manifestación), y la reclamación (acción pro indemnización) suelen surgir en distintos estados en el tiempo”328. El jurista español, Claudio López-Cobo, señala “que en el ámbito de la responsabilidad civil se observan con frecuencia situaciones dañosas en las que se quiebra de una parte la simultaneidad hecho-daño, y de otras, la inmediatez de la manifestación de sus consecuencias, ha clasificado los daños en: inmediatos, progresivos o continuos, iniciales o sobrevenidos y diferidos o de manifestación diferida, entendiendo precisamente por estos últimos, “aquellos en los que entre la acción u omisión del sujeto y la manifestación de las consecuencias dañosas media un cierto periodo de tiempo”.329 Los daños diferidos son “manifestados mas allá de un periodo razonable de tiempo, pero imputado retroactivamente en sus consecuencias a la fecha de ocurrencia, es un elemento que escapa plenamente al control técnico y financiero del asegurador, resultando imposible establecer su precio y provisión y con una potencialidad muy acusada para provocar fuertes desequilibrios en la economía de las entidades aseguradoras”.330 328 MIRANDA SUAREZ. Francisco Ob. Cit. Pág. 25 329 LOPEZ-COBO. Claudio, Ob. Cit. Pág. 29 330 LOPEZ-COBO. Claudio, Ob. Cit. Pág. 32 205 La existencia de plazos de prescripción mayores a la vigencia de las pólizas o periodos de cobertura, implican en principio la obligación del asegurador de mantener siniestros abiertos por el periodo de prescripción legal, y la necesidad de mantener reservas técnicas para responder de eventuales reclamos posteriores a la vigencia de la póliza; esto obligó a los aseguradores a revisar las condiciones y modalidades de la cobertura. El Doctor Carlos Ghersi también se refiere al tema de la cobertura del seguro de responsabilidad civil del médico y explica “que uno de los graves problemas que se presentan en el seguro de responsabilidad médica, está demarcado por el acaecimiento de la causa siniestro y la manifestación externa del siniestro a través del daño”331. 4.2.8.1 CRITERIOS DE DELIMITACION TEMPORAL Se han formulado diversos criterios de delimitación temporal de la cobertura del seguro: 4.2.8.1.1 Criterio del Hecho Generador o Causal También conocido como actino comitted basis, “conforme al cual son objeto de cobertura las consecuencias dañosas, cuya causa o hecho generador tenga lugar entre las fechas de inicio y término de la cobertura, con independencia de la oportunidad cuando se manifieste o reclame el daño”332. 331 GHERSI. Carlos, Ob. Cit. Pág. 313 332 MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 26 206 4.2.8.1.2 Criterio de la Ocurrencia del Daño Criterio de la ocurrencia del daño o Loss Ocurrence Basis o per Occurrence, “conforme al cual se considera como siniestro los daños que sobrevengan o se manifiesten entre la fecha de inicio y término del periodo de cobertura, siendo indiferente la fecha de la causa previa o hecho generador, o de aquellas en que se formalice la reclamación; y”333 4.2.8.1.3 Criterio de la Reclamación Criterio de la reclamación o claims made basis. “Conforme a él se cubren las reclamaciones recibidas por el asegurado durante la vigencia de la póliza, con independencia de la fecha del hecho generador o de la manifestación del daño”334. Como consecuencia a la ocurrencia de los siniestros tardíos, se sustituyó el criterio de los ocurrence basis, por el claims made basis. Este último comenzó a ser considerado por los aseguradores como un medio necesario de seguridad frente a los siniestros diferidos o de consecuencias prolongadas (Long tail risks). 333 MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 26 334 MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 26 207 Podemos distinguir tres posibilidades de cláusulas sentadas sobre la ocurrencia del daño, que hacen tres tipos de pólizas distintas: 4.2.8.1.3.1 Cláusulas Claims Made: propiamente dicha son “aquellas que sólo requieren que la reclamación sea efectuada durante el período de vigencia de la póliza”335. Entonces, “el asegurador está obligado a indemnizar sólo si la reclamación del tercero perjudicado se produce estando la póliza en vigor o dentro de un período adicional para reclamaciones, no siendo esencial por tanto el momento en que se produjo el evento dañoso, ni el momento en que el daño se manifestó, sino sólo el momento en que se formulo el reclamo”336. 4.2.8.1.3.2 Cláusulas Mixtas: son “aquellas en que se requieren que tanto el hecho generador como la reclamación se tengan durante el período de vigencia de la póliza. Esta cláusula equivale a la póliza sobre la base ocurrencia más claims made”337. 4.2.8.1.3.3 Cláusula Claims Made con cláusula de retroactividad (cláusula sunrise) y/o de Cobertura Extendida (cláusula subset): “esta cláusula exige que el hecho generador haya ocurrido durante el período de vigencia de la póliza o el período de retroactividad (cláusula sunrise) y/o que la reclamación se 335 SATELER A. Ricardo. Ob. Cit. Pág. 11 336 SATELER A. Ricardo. Ob. Cit. Pág. 12 337 SATELER A. Ricardo. Ob. Cit. Pág. 11 208 efectué durante el período de vigencia de la póliza o durante el período de cobertura extendida”338. El siguiente ejemplo muestra la forma de aplicación de los criterios ya comentados en el ámbito de la profesión médica. “Supongamos que un profesional médico ha contratado una póliza de seguro de responsabilidad civil profesional, vigente a contar del 1 de enero de 1998 y con vencimiento el 31 de diciembre de 1998. En diciembre de 1998, efectúa una intervención quirúrgica a un paciente, en el curso de la cual, en forma accidental, y sin precaverse, secciona parcialmente un nervio, a consecuencia de lo cual el paciente, varios meses después, comienza a perder lentamente la movilidad de una de sus extremidades. El profesional, quien en 1998 había suscrito una póliza de la compañía A, a partir del 1 de enero de 1999, y hasta el 31 de diciembre de 1999, contrata una nueva póliza, esta vez con la compañía B. El año 2000, y dado que el profesional estima que su siniestralidad era baja, buscó otra compañía C, y contrato una póliza mas barata. La paciente busca consejo legal y finalmente reclama extrajudicialmente al médico en enero del año 2000”339. Bajo el primer criterio, esto es, el hecho generador o causal, el siniestro debiese de quedar cubierto por la compañía A. Conforme al segundo de los criterios enunciados, el de la ocurrencia del daño, el siniestro debería ser cubierto por la compañía B, y finalmente conforme al tercero de los criterios 338 SATELER A. Ricardo. Ob. Cit. Pág. 11 339 MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 27 209 enunciados, el siniestro debiera ser cubierto por la compañía C. Pero como veremos, puede que a pesar de todo ello, el siniestro quede sin cobertura y él sea el propio profesional el que deba asumir las indemnizaciones procedentes”.340 4.3 SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL MÉDICA EN OTROS PAÍSES A pesar que la historia nos demuestra que el concepto de responsabilidad no es extraño para los pueblos de la antigüedad, también es cierto que es relativamente reciente la toma de conciencia sobre la responsabilidad civil profesional del médico y por consiguiente el auge del derecho indemnizatorio en este campo. Tal vez el cambio de pensamiento se ha producido como consecuencia de la progresiva consideración del médico como un profesional y no como un mago o hechicero, y que los resultados de sus intervenciones dependen de agentes externos a ellos como Dioses o simplemente de la suerte. Un punto desfavorable de la evolución del seguro de responsabilidad civil médica es el fenómeno de la reclamación, que ha sido desbordante en todos los países en los cuales se ha establecido, por esto se han ideado diversas formas de contrarrestarlo y de hacer de él un derecho bien ejercido. El sistema 340 MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 26 y 27 210 más común es el de desplazamiento de responsabilidad, que consiste en acudir a algunas de las diversas pólizas de seguro que se ofrecen en el mercado. 4.3.1 ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA Hoy en día, son sin duda los Estados Unidos de América los que encabezan los listados de reclamaciones de seguros de responsabilidad civil profesional médica en el mundo. Ejemplo de ésto es que en 1995 según fuentes de la American Medical Association, 5 de las 10 mayores indemnizaciones decretadas judicialmente en EE.UU. se impusieron a los médicos, o sistemas de salud, siendo la indemnización media durante ese año US $500.000, un 40% mayor que 1994. Por esto algunos aseguradores se encuentran renuentes nuevamente a dar coberturas de malapractice médica como en la década de 1970/80 pues los montos de las condenas se han incrementado en un 400% en los últimos diez años. También se ha producido un aumento significativo en las decisiones de jurados desfavorable a los médicos condenando por encima del millón de dólares. Lo mismo ocurre con el costo de los arreglos extrajudiciales que han aumentado en su monto promedio en el 65%. Por ejemplo, en Philadelphia en el año 2000, condenó a cuatro médicos a pagar 100 millones de dólares por su mala práctica en la ejecución de una operación en un recién nacido de 26 semanas. En Texas, se condenó en once millones de dólares a un médico por 211 la demora en diagnosticar un cáncer de testículos. En West Virginia, un jurado trato de sobrepasar la limitación estatal del monto máximo de reclamo por daños médicos a personas, que es de un millón de dólares, y acordaron entre ellos que el monto de la condena debía ser de dos millones, a un paciente cuya cirugía por reflujo esofágico se complicó. En los Estados Unidos la regla general ha sido que los aseguradores suscriban el riesgo de responsabilidad civil sobre la base Claims Made. Esta cláusula provee de cobertura si el acto u omisión negligente es reclamada y notificada al asegurador durante el periodo de vigencia de la póliza independientemente de la fecha de ocurrencia. Mientras que en las pólizas de ocurrencia el evento asegurado ésta vinculado a la época del daño, en las pólizas Claims Made, el evento asegurado es la reclamación en sí misma. En oposición a la póliza de ocurrencia, donde no hay cobertura retroactiva, en las pólizas Claims Made no hay una cobertura prospectiva. En Estados Unidos, “si bien la jurisprudencia no es uniforme, existen decisiones judiciales que rechazan las cláusulas en estudio. Se acostumbra citar los casos Jones vs. Continental Casualty Company, y J.G. Link & Co. V. Continental Casualty Co., este ultimo rechazando la cláusula Claims Made, basado en la violación de las expectativas razonables de los asegurados. Conforme a dicha doctrina, debe entenderse que el seguro brinda la cobertura 212 que una persona común, en el lugar del asegurado, hubiera creído que tenía, luego de haber leído la póliza. De forma tal que si no obstante esa lectura, ante la poca claridad o confusión en la forma de redacción de la póliza, el asegurado hubiera creído que estaba cubierto (aunque la póliza dijese lo contrario), se entendía que se encontraba amparado por el contrato de seguro. La doctrina mencionada obedece a la realidad que el asegurado por una póliza de Responsabilidad Civil, tiene una valedera, lógica y razonable expectativa, en el sentido de esperar que si se produce un siniestro, la póliza de seguros que contrató lo va amparar, independiente de la fecha en que se produzca el reclamo”.341 A pesar de estas excepciones que “se han formulado a la póliza Claims Made en los Estados Unidos, la mayor parte de las cortes han reconocido la validez de las pólizas Claims Made toda vez que éstas han sido puestas en tela de juicio ante los tribunales”.342 Pero siempre las cortes “han sido muy cuidadosas al llegar el momento de juzgar las pólizas Claims Made puesto que han estado muy concientes que el poner en duda la validez de la cláusula Claims Made tendría un efecto en el interés publico puesto que se limitara la cobertura o bien las primas pueden llegar a niveles que los hacen inaceptables para las empresas. En general la jurisprudencia tiende a reconocer la validez de las cláusulas Claims Made y en 341 MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 33 342 MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 14 213 particular la reconoce cuando el consumidor tiene acceso a una explicación clara de cuales son las limitaciones inherentes a una póliza Claims Made”343 4.3.2 ESPAÑA Él artículo 73 de la Ley del Contrato de Seguro de España define el seguro de responsabilidad así: “el asegurador se obliga, dentro de los límites establecidos en la ley y el contrato, a cubrir el riesgo del nacimiento a cargo del asegurado de la obligación de indemnizar a un tercero los daños y perjuicios causados por un hecho previsto en el contrato de cuyas consecuencias sea responsable el asegurado, conforme a derecho”. No existe en el derecho español una regulación separada y específica de la responsabilidad profesional del médico con relación a la responsabilidad profesional en general. Por otro lado la jurisprudencia en relación con la responsabilidad médica hasta los años setenta fue muy escasa. En los últimos años al crecer él numero de reclamaciones, la Jurisprudencia en este tema es mucho más profusa, hasta el punto de que sólo en los últimos diez años ha habido ocasión para variar la doctrina que establecen estas sentencias. Por ejemplo ha ocurrido en materia de consentimiento informado, en que luego de haberse sostenido durante algunos años que le correspondía al paciente demostrar que había sido informado, hoy en día existe ya una doctrina jurisprudencial asentada precisamente en el sentido opuesto, es decir que es en todo caso el médico quien debe probar que si informó. 343 MIRANDA SUAREZ. Ob. Cit. Pág. 14 214 En España según la definición del contrato de seguro de responsabilidad civil y sus características, surgirá la responsabilidad profesional del médico cuando en el cumplimiento de sus obligaciones haya violado sus obligaciones, tanto deriven de un contrato con el paciente, como de la asistencia que está obligado a prestar en el desempeño de un puesto de trabajo público o privado. Destaca pues el Tribunal Supremo las siguientes obligaciones del profesional prestador de los servicios. - La sujeción a la lex artis ad hoc. - La obligación de actualización de conocimientos y de medios. - La obligación de continuidad de los cuidados. - La obligación de información. - La obligación de cada médico de tener el material adecuado para que el trabajo a realizar pueda efectuarse en condiciones normales de diagnóstico y tratamiento, naturalmente que atendiendo a la modalidad de ejercicio profesional. - La obligación de mantener en correcto estado los medios técnicos de que disponga, y de controlar su funcionamiento. Como nos hemos podido dar cuenta en la legislación y jurisprudencia española se cierran todas las puertas a la implantación de la responsabilidad objetiva en 215 la actividad médica, al respecto el Doctor Carlos M. Romero explica: “las características de la actividad médica y el contexto social rechazan que tal vía de concreción de responsabilidad civil puede ser trasladada al ejercicio de esta profesión “344. Por otro lado, se ha propuesto en España la creación de un Seguro Obligatorio para los médicos, que cubra los riesgos que implica el ejercicio de esta profesión, el cual tendría como principal beneficiado al propio facultativo, quien podrá con esta póliza “trasladar así la carga patrimonial derivada de su responsabilidad civil; pero ello no implicaría el peligro de cierta relajación en su actividad que, por lo demás, podría ser valorada por la entidad aseguradora-, al estar siempre abierta la posibilidad de su responsabilidad penal”345. Otro beneficio que reporta esta póliza obligatoria es que este sistema “implicaría un procedimiento de resarcimiento al paciente automatizado y despersonalizado, con lo que se evitaría que el médico se sintiera perjudicado en su prestigio e imagen profesional”346. La pregunta que queda de esta idea es ¿quién responde por la carga económica del seguro?, la respuesta no es simple, ya que hay que tener en cuenta las implicaciones económicas que esto conlleva. El doctor Romero ha dicho, que no debe descartarse que sea el propio Estado quien asuma 344 ROMERO CASABONA. Carlos M. El Médico Ante el Derecho- Responsabilidad Civil y Penal del medico. Ediciones Ministerio de Sanidad y Consumo. Madrid. Primera edición. Pág. 117 345 ROMERO CASABONA. Carlos M. Ob. Cit. Pág. 118 346 ROMERO CASABONA. Carlos M. Ob. Cit. Pág. 118 y 119 216 parcialmente este gasto o los propios médicos, bien por sí mismos o a través de la Organización Medica Colegial; pero de todas formas en nuestro parecer esto traería consecuencias aún más gravosas que las económicas, pues los médicos descuidarían sus obligaciones por no preocuparles ya las indemnizaciones. 4.3.3 FRANCIA Este país fue quizás el primero en consagrar que las obligaciones de los médicos son de medios y no de resultados, pues con la posición acogida “... desde 1936 por la Corte de Casación Francesa en el Fallo “MERCIER”, según la cual el vínculo contractual del médico con el paciente no lo obligaba a curarlo sino a brindarle cuidados conforme a los datos adquiridos por la ciencia”347, muchos países incluyendo a Colombia han seguido su posición. En Francia sea dado un gran avance en la doctrina y la jurisprudencia alrededor del tema del seguro de responsabilidad médica y en especial de la cláusula Claims Made. Ejemplo de este desarrollo son decisiones como las siguientes: “La Corte de Casación, ha señalado que las Compañías de seguros que ampara al asegurado al momento de la ocurrencia del hecho daño, debe brindarle cobertura con independencia de la fecha en que se produzca el reclamo. En Sentencia de diciembre de 1990, se sostuvo que la cláusula claims made crea para la compañía de seguros una ventaja desprovista de 347 YEPES RESTREPO. Articulo Cit. Pág. 5b 217 causa, y finaliza sentenciando que esta estipulación, en consecuencia, debe ser reputada como no escrita. En Sentencia de abril de 1991, la misma Corte se pronuncia señalando que el seguro debe cubrir los daños que sean consecuencia de hechos generadores cometidos durante la vigencia del contrato. Bajo la ocurrencia de hecho generador es preciso integrar no solamente la ocurrencia del daño, sino también la falta de origen del mismo, esto es, el hecho generador”348. Respecto al tema de la responsabilidad del Estado por prestación del servicio público hospitalario, el Consejo de Estado Francés, dictó en 1993 una sentencia denominada fallo “Bianchi”, que consagro la responsabilidad médica sin culpa, la cual se pretendió consagrar en materia civil a comienzos de 1999 a través “de un fallo de la Corte de París en el cual se indicó que existía para el médico una obligación accesoria de seguridad, que lo obligaba a reparar el daño causado al paciente aún en ausencia de falta”349. Esta decisión causó gran revuelo en el sector médico y asegurador francés, por las implicaciones que representaba ésta decisión, pero a finales del año 2000 la Corte de Casación Francesa descartó la aplicación de la teoría de la responsabilidad médica sin culpa en el derecho privado. 4.3.4 BÉLGICA 348 MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 33 349 YEPES RESTREPO. Articulo Cit. Pág. 5b 218 Bélgica no ha desarrollado un seguro de responsabilidad civil específicamente para el médico, sino que cubre los riesgos de su actuar bajo el seguro de responsabilidad civil profesional general, bajo un interés de proteger al asegurado, por esto la Ley del contrato de seguro que entró en vigencia en junio de 1992, en la sección dedicada al seguro de responsabilidad civil, impuso a los aseguradores la obligación de indemnizar los daños, incluso cuando las reclamaciones fueran formuladas una vez vencida la póliza, siempre que el evento dañoso tenga lugar dentro del periodo de duración de las mismas, todo esto con el fin de proteger al asegurado. El resultado práctico de esta Ley fue el aumento progresivo de las reclamaciones. Es por ésto que la asociación de aseguradoras belga ha reaccionado enérgicamente contra la norma legal y han tratado durante estos años de modificarla sin éxito hasta ahora. 4.3.5 CANADÁ La responsabilidad civil médica es manejada en Canadá desde el punto de vista de las obligaciones inherentes al ejercicio del médico, por esto su responsabilidad está íntimamente relacionada con la atención a sus pacientes. Los deberes que se tienen en cuenta en la legislación canadiense y que son motivo de reclamación cuando se infringen al respecto el doctor Joseph Colángelo Abogado Especialista en Responsabilidad Civil explica cuales son los deberes para un médico en Canadá: 219 Él deber de ejercer cuidado y cautela razonable: “la cautela que se puede esperar de un médico razonablemente prudente, capaz y cuidadoso es establecida por los estándares de la práctica que son desarrollados periódicamente por la profesión médica. El desempeño de este, presupone que el médico conoce los estándares de práctica y tiene la capacidad de aplicarlos en el ejercicio de su profesión. La responsabilidad legal resulta cuando el paciente puede demostrar que una violación del deber de usar cautela razonable lo ha perjudicado”.350 El deber de avisarle al paciente sobre los riesgos del tratamiento: “En Canadá los médicos tiene él deber de avisar los riesgos materiales de un tratamiento. Los riesgos materiales son aquellos que son probables o materialmente posibles. Un riesgo materialmente posible es el que, aunque no sea probable, tendrá graves consecuencias si por alguna razón se hace realidad. La responsabilidad legal a causa de no avisar convenientemente, es evidente cuando el paciente puede demostrar que una persona razonable habría rechazado el tratamiento propuesto, si el riesgo material le hubiera sido revelado por él medico”.351 350 COLÁNGELO, Joseph. La Responsabilidad Profesional Médica en Canadá. Tomado de la página de Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm 220 El deber de confidencialidad: “El medico no tiene derecho a revelar estos datos a menos que lo requiera la ley o que el paciente le dé su consentimiento. En circunstancias especiales, se le puede obligar a un médico a revelar a instituciones públicas o a una víctima posible, información confidencial acerca de un paciente, para evitar el riesgo o daño a terceros”.352 Canadá posee la ley sobre el consentimiento al cuidado médico, Health Care Consent act. , de 1996, referente al consentimiento informado del paciente cuando se somete a un tratamiento médico, y considera que debe ser dado en los casos que determina esta ley, por que de lo contrario generan responsabilidad para el profesional de la medicina El paciente debe recibir información suficiente sobre: La naturaleza del tratamiento Los efectos benéficos y esperados del tratamiento. Los riesgos materiales del tratamiento. Las otras medidas posibles. Las consecuencias probables de la falta de tratamiento. La persona recibió las respuestas a sus pedidos de información. 351 COLÁNGELO, Joseph. La Responsabilidad Profesional Médica en Canadá. Tomado de la página de Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm 352 COLÁNGELO, Joseph. La Responsabilidad Profesional Médica en Canadá. Tomado de la página de Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm 221 4.3.6 ARGENTINA La historia del Seguro de Responsabilidad Profesional Médica o mala praxis en la Argentina se ha desarrollado en tres períodos claramente identificables. Pero fue sin duda “la resolución 15.517/80, la que abrió el camino, cumplimentada luego por la resolución 16.115/81 que establece el modelo de solicitud y posteriormente la resolución 16.680/82”353. La primera etapa hace referencia a la época de introducción de este seguro al mercado, donde eran ocho (8), los médicos que lo tomaron, por creerlo los otros innecesario. Otro de los problemas que enfrentaba este seguro para su masificación era sin duda el hecho de exigir que el sujeto asegurado debía ejercer la profesión de médico y actuar habitualmente en ella de acuerdo al artículo 21 de la Ley 17.132, el cual colocaba una serie de trabas al ejercicio profesional de los médicos al exigir una autorización del Ministerio de Salud y Acción Social, que se obtenía cumpliendo requisitos como: “ser profesor universitario por concurso de la materia y en actividad”354. Al respecto el Doctor Ghersi opina: “el problema es serio, pues limita –creemos que injustificadamente- la posibilidad de cobertura, generando una situación de desigualdad ante la Ley, por lo que entendemos que este requisito es inconstitucional, pues por sobre 353 GHERSI. Carlos A. Ob. Cit. Pág. 309 354 ARTICULO 21. Ley 17.132 inciso b. de la Argentina 222 todo debe pesar el carácter social del seguro, incluso no se compatibiliza con el decreto 2284/90 de desregulación”355. El segundo período comenzó cuando la profesión médica fue golpeada por la realidad de las demandas. Con un incremento en la frecuencia y la severidad de las mismas, entonces, los profesionales e instituciones cayeron en cuenta de la necesidad de la cobertura y requirieron un producto que respondiera a sus inquietudes. Pero por ese entonces la situación no era de las mejores: las compañías debían conformarse con seguros de tipo Claims-made del mercado reasegurador, que ofrecían una inadecuada cobertura y la imposibilidad de ofrecer límites más elevados de responsabilidad. La tercera instancia se inició cuando los aseguradores descubrieron la complejidad de la administración del riesgo, y las demandas que ocurren en el campo de la salud. Con el crecimiento del mercado, resultó evidente que se debían desarrollar coberturas especiales para distintas estructuras médicas, tales como hospitales privados, centros de diagnóstico, programas de salud sindicales y prepagas, centros de emergencia, etc; pero los aseguradores no estaban preparados para enfrentar estas nuevas necesidades de la comunidad médica y además carecían de personas con experiencia en seguros de RPM., por otro lado, las compañías internacionales de reaseguro no estaban listas para 355 GHERSI. Carlos A. Ob. Cit. Pág. 310 223 arriesgarse en un mercado desconocido para ellas y crear un programa de apoyo a las aseguradoras locales, no sólo respecto del reaseguro compatible con el sistema jurídico del país, sino con los límites necesarios de la responsabilidad, acompañado por experiencia suficiente como para poner en marcha este programa. Se puede decir que la tercera etapa terminó en 1996, cuando una empresa Argentina de seguros se alió con una consultora norteamericana, especializada en seguros de RPM, y con una compañía reaseguradora británica para formar una entidad local especializada en el tema. Actualmente, existen varias compañías que ofrecen seguros de RPM en éste país, ya sea por medio del seguro Claims-made, o las pólizas de responsabilidad médica del tipo ocurrencia; también poseen un reaseguro sólido, posibilitando su funcionamiento correcto. 4.3.7 BRASIL En Brasil el seguro de responsabilidad civil médica esta poco desarrollado, debido a la falta de conocimiento sobre las condiciones de la póliza que son ofrecidas a los médicos en el ejercicio de sus funciones y a las complejidades de asumir el riesgo en un país donde la falta de experiencia de las compañías aseguradoras locales respecto al seguro de responsabilidad civil médica es el común denominador. 224 A pesar de no existir una cultura aseguradora por parte de los médicos, “desde hace unos pocos años, los profesionales han iniciado una tibia y limitada contratación de este tipo de seguros”356, y el índice de reclamos ha presentado un crecimiento sostenido, lo que conlleva a que por lo menos “una de las 150 entidades registradas han asegurado al menos a algún médico o a alguna institución prestadora de servicios”357, pero aún así el porcentaje de profesionales asegurados es de apenas el 8%. Por otro lado, en Brasil se presenta una diferencia legislativa con otros países donde sí existe y ha sido exitoso la puesta en marcha de este cubrimiento. En el derecho brasilero la responsabilidad médica fue regulada como responsabilidad aquilina. “La culpa contractual es aquella que determina el daño por falta de ejecución de un contrato, en tanto que la culpa aquilina es la que deriva del acto ilícito, sin nexo jurídico que anteceda a la actuación médica. Hay, realmente, entre el médico y el paciente un contrato de prestación de servicios, su responsabilidad es contractual pero, no obstante, figura en el derecho brasileño como actos ilícitos en casos de responsabilidad médica”.358 Esto conlleva a que se haga difícil la prestación de un cubrimiento 356 CATALANI, Carlos. Praxis médica: análisis comparativo del Mercosur. Tomado de la pagina de Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm 357 CATALANI, Carlos. Praxis médica: análisis comparativo del Mercosur. Tomado de la pagina de Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm 358 BLOISE, Walter. Seguro de Mala Praxis Médica en Brasil. Tomado de la página de Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm 225 al médico en este país, pues el contrato exige al médico una gran responsabilidad profesional. En Brasil, solo dos compañías se han especializado en pólizas de responsabilidad civil médica, son: SAOEZ de Porto Alegre y NOMBRE de San Pablo, las cuales ofrecen básicamente seguros de responsabilidad médica con cláusulas Claims Made. El tiempo de prescripción actualmente es hasta 20 años. En conclusión, “la falta de una cultura del reclamo, los pocos juicios y la virtual inexistencia de ofertas de seguros, indican que el mercado brasilero es aún ínfimo”359, respecto a la póliza de responsabilidad civil médica. 4.3.8 CHILE Chile en la actualidad maneja un tipo de seguro general para todas las profesiones, es decir que los médicos para protegerse tienen que tomar el seguro de responsabilidad civil profesional general; así lo explica el Abogado Ricardo Peralta, director del Capitulo Chileno de la Asociación Internacional de Seguros cuando se refirió al tema: “hasta ahora existe el Seguro de Responsabilidad Civil, que ha aumentado de siete millones de dólares en 1997 a doce millones de dólares al 2000, pero se desconoce la póliza por 359 CATALANI, Carlos. Praxis médica: análisis comparativo del Mercosur. Tomado de la pagina de Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm 226 responsabilidad civil médica por que el ítem no esta registrado en forma individual en la superintendencia”.360 El abogado dijo también: “que el seguro no tiene por objeto amparar el honor, orgullo, y buen nombre del profesional, pero que incorpora la modernización, además de mejorar la cobertura”.361 Refiriéndose a la siniestralidad por mala praxis, el académico Pedro Zela, de la facultad de Derecho de Chile, manifestó que va en aumento. Los pacientes ya no se resignan frente al daño y piden indemnizaciones, pero éstas “no llegan a reparar, sino que compensan por que el daño ya está causado”. Además agregó que “en Chile no ha existido una verdadera explosión de la responsabilidad civil médica por que el juicio civil es de larga tramitación y porque las cuantías de las indemnizaciones por muerte y por lesiones son bajísimas”. Otro punto importante para comentar sobre Chile, es que la Asociación de Aseguradores registrará una nueva póliza de responsabilidad médica ante la Superintendencia de Valores y Seguros, que incluirá la cobertura del Daño moral a los pacientes, como otro ítem a indemnizar en las reclamaciones. 360 Amplían seguro para médicos. Tomado de la página de Internet: http://www.odontodos.net/noticias.htm 227 El Doctor Francisco Miranda Suárez, abogado con magíster en derecho médico explica en su articulo “El nuevo proceso penal chileno y responsabilidad médica” que: la reforma procesal penal que incluye las “salidas alternativas contribuirán a un auge espectacular de la responsabilidad médica, debido a que tipos penales culposos como la negligencia del médico, constituyen terreno ideal para hacer operar tales mecanismos alternativos, pues lejos de procurar la aplicación de una pena (la que no les interesa), los querellantes buscarán una compensación monetaria. Asimismo, el Nuevo Proceso Penal, oral y público, involucra un costo imagen de proporciones por exposición pública, que ni el médico ni menos la clínica u hospital querrán asumir. Si a ello agregamos en la etapa de investigación, la presión de la propia víctima o del propio fiscal investigador, la conveniencia de una salida alternativa al Juicio Oral es innegable”. 4.3.9 URUGUAY Desde principios de los noventa se ofrece este tipo de seguros, pero la experiencia en este país no ha sido muy provechosa para las aseguradoras, ya que en el Uruguay hay alrededor de 12 mil médicos, y la cantidad de asegurados no llega a 10%, o sea entre mil y 1.200 tienen este seguro. Durante muchos años el Banco de Seguros del Estado (BSE) ejerció un monopolio absoluto sobre el mercado Uruguayo, ofreciendo pólizas con coberturas Claims Made únicamente para profesionales individuales, y con 361 Amplían seguro para médicos. Tomado de la página de Internet: http://www.odontodos.net/noticias.htm 228 primas bastantes altas; pero hoy en día cuentan con otra compañía aseguradora, Suramérica Surinvest SA. La cual, lanzo al mercado una póliza que cubre tanto a profesionales como a las instituciones médicas, con coberturas Claims Made y de Ocurrencia. Con el ingreso de Sudamérica al competencia los costos de las primas han bajado de precio. Los corredores de seguros del sindicato médico han establecido algunas premisas para que el riesgo continúe siendo tan bueno como es y mejorarlo. “Primero, la selección del riesgo, es decir una correcta suscripción del Seguro; cuando viene el médico a contratar el Seguro hacer una buena historia de su riesgo, ver qué experiencia siniestral tuvo, cuántos años de antigüedad tiene en la profesión, si tiene personal a su cargo, cuántas horas trabaja, etcétera. Eso permite hacer una composición de lugar, ayuda a elaborar estadísticas de las cuales se sacan conclusiones, y además el profesional queda tranquilo ya que ha cumplido con una serie de requisitos que no le dejan dudas en el momento en que tiene un siniestro. La otra premisa fundamental es la difusión y la prevención. Desde el punto de vista del Seguro, los reaseguradores tienen una parte muy importante en este negocio, el Banco no fija las primas por capricho, tiene un reasegurador que es el que le ayuda a contribuir en el éxito o en el fracaso del negocio. Si bien es cierto que se han mejorado las condiciones, nosotros pensamos que se pueden mejorar aún más, pero se ha 229 dado un paso importante respecto a lo que hasta hoy tenía el Sindicato Médico”362. El Doctor Antonio Grille, explica que “con respecto a la jurisprudencia también en sus principios fue bastante disímil. No obstante estimo que hoy existe un criterio genérico de los jueces para determinar, porque no es lo mismo que quede sin un dedo un cirujano (al margen del daño material porque no va a poder seguir ejerciendo su especialidad, le implica un tremendo dolor la frustración de su carrera) que le amputen un dedo a un futbolista. También en este aspecto indiscutiblemente tiene que haber una selección. En general, yo diría que la jurisprudencia en este momento es bastante coherente”363. 4.3.10 PARAGUAY Paraguay es quizás el país de sur América con el mercado más virgen en el campo del seguro de responsabilidad civil médica, pues no existe una posición definida respecto al tema de la responsabilidad médica, y el índice de reclamos es tan bajo que podría decirse que no existe. Las “compañías trabajan en este ramo bajo el esquema de diferenciación por especialidad en el caso de los médicos y, según el tipo de actividad/ tamaño en lo referido a prestadores institucionales de servicios de salud”364. 362 KVITTKO, Luis Alberto. Tomado de la página de Internet: http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0023.html 363 KVITTKO, Luis Alberto. Tomado de la página de Internet: http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0023.html 364 CATALANI, Carlos. Praxis médica: análisis comparativo del Mercosur. Tomado de la pagina de Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm 230 El término de prescripción para reclamación es hasta 10 años, y el diseño de la póliza que se ofrece en el mercado esta soportada en coberturas Claims Made. Cabe anotar, que a pesar del poco desarrollo del seguro de responsabilidad civil médica, en Paraguay existe por parte de la comunidad médica una gran preocupación por el riesgo que representa para ellos ejercer su profesión sin una cobertura apropiada, sumado a una posible evolución de la litigiosidad como consecuencia del aumento de las reclamaciones, es por eso que a partir de este año aseguradoras como: Segesa, El Sol de Paraguay y el Productor, cuentan con un programa integral de seguros / reaseguros en Responsabilidad Profesional. 231 CONCLUSIONES 1. La Medicina actual se encuentra en un avanzado nivel de evolución, pues no solo se limita al estudio de cada cuadro clínico (enfermedad y sanación del paciente), sino que se desarrolla como una medicina activa que busca intervenir y actuar frente a la enfermedad de manera rápida, ayudada por los avances tecnológicos. Esto implica una rápida toma de decisiones que en un futuro podrán ser consideradas obsoletas a la luz de los avances que se presenten con posterioridad. Frente a esta situación, los médicos y entidades prestadoras del servicio de salud se encuentran expuestos a riesgos de naturaleza médico legal, y a la amenaza de tener que enfrentarse a las acciones judiciales que se intenten contra ellos, viéndose en la necesidad de hacer frente a las consecuencias patrimoniales adversas que ello conlleva. Por ésta razón concluimos, después de haber realizado este trabajo, que resulta necesario difundir la figura del 232 legal del Seguro de Responsabilidad Civil Profesional, como mecanismo que les permitirá afrontar las consecuencias patrimoniales de la responsabilidad que podría derivarse de sus actuaciones en el ejercicio de actividad profesional. 2. El tema de la protección del paciente, entendiendo al paciente como el usuario del servicio médico, ha adquirido hoy gran importancia debido a la política proteccionista del consumidor desarrollada por los Estados. Esta situación ha llevado a que los profesionales tomen conciencia de que su relación profesional con el paciente se desenvuelve dentro del marco jurídico de la responsabilidad civil, en la que el paciente es poseedor de una serie de derechos para obtener la indemnización de los perjuicios que pudiere llegar a sufrir. La importancia dada hoy a los derechos del consumidor se ha presentado como una consecuencia del reconocimiento de la dignidad del ser humano, como poseedor de derechos para demandar servicios adecuados a sus necesidades, principio que resulta plenamente aplicable cuando se trata de la prestación de servicios médicos y actividades relacionadas con la salud. 233 3. El Seguro de Responsabilidad Civil Médica como tal, ha tenido un tímido y limitado desarrollo en el mercado colombiano, pues son pocas las condenas en los procesos judiciales que se llevan por mala praxis médica. La razón de esto es la escasa cultura de reclamo con la que contamos en nuestro país. A esto se agrega que no existen abundantes elementos sobre los cuales estructurar un sistema de interpretación de las disposiciones aplicables tanto a la responsabilidad civil del médico, como a las estipulaciones contractuales consignadas en las pólizas de seguro de responsabilidad civil profesional, pues la legislación y la jurisprudencia sobre el tema son escasas. De lo anterior concluimos que es sentida la necesidad de contar con una legislación clara y unificada sobre la Responsabilidad Médica, para que de ahí, se pueda determinar cuáles son los riesgos de cubriría el Seguro de Responsabilidad Civil Médica. Resulta evidente que esto contribuiría a facilitar la solución de las controversias derivadas del contrato de prestación de servicios médicos. 234 ANEXOS COOMEVA “Seguro de Responsabilidad Civil Médica Profesional * Ventajas El seguro de Responsabilidad Civil Profesional Médica protege el patrimonio de los profesionales de la salud, en el evento de resultar responsables civilmente en el desarrollo normal de las actividades profesionales. Sorpréndase con las facilidades exclusivas que ofrecen para los asociados a Coomeva. Médicos generales, Especialistas, Cirujanos, Odontólogos, Ortodoncistas y otras especialidades afines. Coberturas Responsabilidad Civil Profesional por: - E&O (Errores y omisiones) - Uso de Equipos - Personal paramédico. 235 - Gastos de defensa en Proceso penal y civil. Amparo adicional por daño moral (previa sentencia) “365 $ Tarifa por especialidad 100 $ 200 $ 50 MM MM MM 31.752 23.461 17.640 24.045 14.288 12.678 19.278 14.288 10.773 18.900 14.490 6.552 Anestesiólogos Ginecólogos Cirugía Urología Oftalmología y Radiología Otros Especialistas y Médicos Generales Odontólogos y Ortodoncistas Tarifa por especialidad $ 300 MM $ 500 MM 31.752 43.500 24.045 33.713 Anestesiólogos Ginecólogos Cirugía Urología Oftalmología y Radiología 365 Clasificados COMEVA, Tomado de la Página de Internet: http://www.coomeva.com.co/sys/sys_rcmedica.html 236 Otros Especialistas y 19.278 21.569 15.588 18.900 Médicos Generales Odontólogos y Ortodoncistas SURAMERICANA Suramericana ha diseñado un seguro que cubre la responsabilidad civil profesional del médico, con él cual se amparan “las indemnizaciones que tenga que pagar el Asegurado en razón de la responsabilidad civil profesional que le sea imputable por un acontecimiento que cause daños personales, y que se ocasionen como consecuencia de siniestros ocurridos durante la vigencia de la póliza y causados directamente por el ejercicio de la profesión médica legalmente habilitada para ejercerse y especificada en la carátula de la póliza”366. La póliza cubre las siguientes responsabilidades del médico asegurado: “Imputable al Asegurado por actos u omisiones cometidos en el ejercicio de una actividad profesional médica por personal médico, paramédico o médico auxiliar al servicio y bajo la supervisión del asegurado. Derivada de la sustitución provisional que del asegurado efectuara otro médico que ejerza la misma especialidad que la del Asegurado, sin incluir la 366 POLIZA DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL PARA MEDICOS. Suramericana 237 responsabilidad civil profesional propia del médico sustitúyete. En materia extracontractual por daños personales, derivada de la propiedad, arriendo o usufructo de los predios de un consultorio, en las que se desarrollan las actividades propias de la profesión de la médica materia de este seguro, y que figuran en la carátula de póliza (predios asegurados). Derivada de la posesión y el uso de aparatos y tratamientos médicos con fines de diagnóstico o de terapéutica, en cuanto dichos aparatos y tratamientos estén reconocidos por la ciencia médica y que no se encontraren comprendidos en el amparo adicional de los riesgos especiales de esta póliza. Imputable por daños personales a consecuencia del suministro de medicamentos, drogas u otros materiales médicos, quirúrgicos o dentales de acuerdo al numeral tercero de esta cobertura, siempre y cuando el suministro sea parte necesaria de la prestación de servicios y los mencionados productos hayan sido elaborados por el Asegurado mismo o bajo supervisión directa, dentro de los predios asegurados, o los mencionados productos hayan sido registrados ante la autoridad competente sin que en este caso quede cubierta la responsabilidad civil productos del fabricante”.367 Entonces el amparo comprende: el pago de la indemnización que deba cubrir el Asegurado; el pago de los gastos de defensa que asuma el Asegurado bajo 367 POLIZA DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL PARA MEDICOS. Suramericana 238 las condiciones de la presente póliza, pero “en ningún caso están cubiertas las indemnizaciones que tenga que pagar el Asegurado por: Dolo o culpa grave del tomador, asegurado o beneficiario. Daño a las personas o a los bienes del cónyuge del Asegurado o de sus parientes dentro del cuarto grado de consanguinidad, segundo de afinidad o único civiles. La misma exclusión opera con respecto a los socios del Asegurado, directores y representantes legales de la entidad asegurada. Deslizamiento de tierra, fallas geológicas, terremotos, temblores, asentamientos, cambios en los niveles de temperatura o agua, inconsistencias del suelo o subsuelo, lluvias, inundaciones, erupción volcánica o cualquier otra perturbación atmosférica o de la naturaleza. El incumplimiento total, parcial, tardío o defectuoso de pactos que vayan más allá del alcance de la responsabilidad civil del Asegurado (como también responsabilidades ajenas, en las que el Asegurado, por convenio o contrato, se comprometa a la sustitución del responsable original. Daños a consecuencia de reacción nuclear, radiación nuclear, explosiones nucleares o contaminación radiactiva...”.368 Los limites máximos de indemnización son: “La responsabilidad de la SURAMERICANA de cubrir los daños y perjuicios causados por el Asegurado y cuyas causas sea un mismo siniestro no podrá 368 POLIZA DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL PARA MEDICOS. Suramericana 239 exceder él limite fijado en la carátula de la póliza como limite por evento. La máxima responsabilidad de la SURAMERICANA de cubrir dichos daños y perjuicios causados por todos los eventos ocurridos durante la vigencia de la póliza no podrán exceder el límite fijado en la carátula de la póliza como límite global por vigencia. Cuando en la cláusula o amparo adicional se estipule un sublímite por persona, por unidad asegurada o por siniestro cuya cobertura es objeto de la cláusula o amparo adicional, tal sublímite será el límite máximo de la indemnización. No obstante, si las reclamaciones exceden en su monto la suma asegurada, la SURAMERICANA solo responderá por los gastos del proceso contra la SURAMERICANA o el Asegurado en proporción a la cuota que le corresponde en la indemnización de las reclamaciones aun cuando se tratare de varios procesos resultantes de un mismo acontecimiento. En tales casos, la SURAMERICANA podrá eximirse de otras reclamaciones mediante el pago de la suma asegurada y su participación proporcional en los gastos hasta entonces causados”.369 ING COMERCIAL AMERICANA “El Seguro de Responsabilidad Civil para Profesiones Médicas de ING Comercial América - Seguros, da el respaldo económico al médico asegurado y sus empleados, para resarcir los daños que ocasionen a sus 369 POLIZA DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL PARA MEDICOS. Suramericana 240 pacientes o a terceros, en sus bienes o en sus personas, con motivo de su actividad profesional. Este seguro cubre la responsabilidad profesional del asegurado derivada del ejercicio de su profesión médica, y la de sus empleados que ejerzan una profesión médica, médica auxiliar, farmacéutica o laboratorista, y que por su culpa, ya sea por negligencia o impericia, causen daños corporales o inclusive la muerte a sus pacientes. Así mismo, ampara la responsabilidad civil legal por los daños que causen a terceros en sus bienes o en sus personas, que se deriven por el uso, posesión o mantenimiento de inmuebles, de aparatos y tratamientos médicos con fines de diagnóstico o terapéutica, y de equipos de medicina nuclear y materias radioactivas empleados para el desarrollo de dichas actividades. También ampara los gastos de defensa si es presentada una demanda en contra del asegurado, como por ejemplo las primas por fianzas judiciales en garantía del pago de las sumas reclamadas, así como, el pago de las cauciones o de las primas de las fianzas que deban otorgarse como caución para que alcance su libertad preparatoria, provisional o condicional durante un proceso penal que se siga en su contra”.370 ST. PAUL COMPANY 241 Para la investigación del seguro de responsabilidad médica recibimos una cooperación muy valiosa por parte de la compañía de seguros THE ST. PAUL COMPANY sede Argentina, a través de su E-mail: info@respaldoseguros , quienes nos explicaron como funciona este seguro y los elementos que ellos tienen en cuenta para asegurar un médico. La información parte describiendo ¿qué es para ellos el seguro de responsabilidad civil medica?, y dice que “es un seguro mediante el cual la Aseguradora se obliga a mantener indemne al profesional por cuanto este deba a un tercero en razón de la responsabilidad civil derivada del ejercicio legal de la profesión”371. Dando a entender con esto que se protege el patrimonio profesional del medico frente a la responsabilidad de responder a un reclamo efectuado por una persona atendida por este y que en el desarrollo de la actividad recibió un perjuicio. Esta aseguradora brida a sus asegurados sin costo adicional los siguientes beneficios: Defensa penal. Servicio de administración de riesgos Asistencia medico-legal las 24 horas del día Esta póliza esta dirigida a: 370 Tomado de página de Internet: http://seguros.ingcomercialamerica.com/seguros/danos/danos_respcivil_profesiones.asp 371 Tomado de página de Internet: http://www.respaldoseguros.com.ar/Productos_y_Servicios/Praxis_Medica/Cobertura/cobertura.ht ml 242 Médicos, odontólogos y otros profesionales de la salud en forma individual. Asociación de profesionales de la salud en forma colectiva. Centros ambulatorios de diagnósticos y /o tratamiento. Laboratorio de análisis clínico. Cínicas y sanatorios privados. Instituciones de medicina prepagada. TABLAS DE ESTADÍSTICAS A continuación presentaremos una somera información estadística sobre el ramo de la Responsabilidad Civil en el mercado Colombiano 243 244 245 246 247 248 249 250 BIBLIOGRAFÍA ACTAS de la COMISIÓN REDACTORA. Exposición de Motivos. OSSA GOMEZ, Efrén. Tomo II. El Contrato. ALESSANDRI RODRÍGUEZ, Arturo. 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