© ESA VOLCANES EXTRATERRESTRES ¿Cuál es su relación con el desarrollo de vida en el Universo? Helena R. Olmo 2 www.eloctavosabio.com El Monte Olimpo de Marte mide 25 Km., siendo el volcán más alto del Sistema Solar, tres veces mayor que el Monte Everest de la Tierra. Su caldera, de 60 Km. de largo por 90 Km. de ancho, contienen seis cráteres superpuestos. 3 © ESA Helena R. Olmo Amparados bajo la advocación de la antigua divinidad romana del fuego volcánico, Vulcano, su actividad ha sido crucial durante el periodo de formación de la Tierra. La Humanidad, tratando de explicar las erupciones, las interpretaron como una expresión de cólera divina. Pueden crear enormes ríos incandescentes, alterar la temperatura atmosférica, cubrir una isla entera de ceniza y generar terribles olas de lava. ¿Es este fenómeno análogo al comportamiento de los volcanes detectados en otros ámbitos del Sistema Solar? ¿Cuáles son los fundamentos de la exobiología? ¿Puede ser un volcán de hielo? 4 www.eloctavosabio.com L a convicción de que el único cuerpo del Sistema Solar geológicamente activo fuera la Tierra, se disipó en 1979, cuando la sonda Voyager I se acercó a Io, uno de los cuatro satélites galileanos de Júpiter, el impacto fue considerable: la superficie de la luna joviana, en vez de presentar el habitual aspecto geológico de los cuerpos de nuestro entorno cósmico, cicatrices causadas por colisiones meteóricas, estaba infestada de volcanes en erupción. Paisaje infernal Las primeras imágenes eran la representación exacta de las Calderas de Pedro Botero: un mundo atormentado por ochenta volcanes activos, una superficie desolada por el fuego eterno: extensas planicies desérticas y sorprendentes plumas eruptivas, compuestas por gases venenosos, que se elevan hasta 300 Km. La causa de esa permanente vomitera de azufre líquido son las imponentes deformaciones provocadas por las mareas debidas a la atracción gravitacional de Júpiter. Este hallazgo puso de manifiesto que los procesos físicos que dan lugar al vulcanismo terrestre son comunes a los de otros planetas y satélites, de los que resulta una morfología diversa y espectacular. Tras recopilar información sísmica, datos de temperatura, presión y densidad en las profundidades de los cuerpos que presentaron evidencias pasadas o presentes de esta actividad, se han determinado dos tipos de vulcanismo: el que presentan los llamados planetas interiores –Mercurio, Venus y Marte–, y el de algunos satélites de los planetas exteriores –Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno–. Ambos entornos han generado paisajes sumamente interesantes y hermosos. En ocasiones en- Io tiene 80 volcanes activos sobre una superficie de azufre que disparan plumas eruptivas de hasta 300 Km. de altura. Por el momento, es el objeto con mayor número de volcanes del Sistema Solar contramos montañas de basalto parecidas a las terrestres; en otras, admiramos volcanes de hielo que nada asemejan a los de nuestro planeta. Ríos de hielo Colisiones y fricciones entre las placas tectónicas, y cráteres que escupen hielo, han reformado la caótica superficie de otro satélite de Júpiter: Europa, la luna congelada. De acuerdo con las imágenes obtenidas por la nave Galileo cuando se aproximó a menos de 692 Km., Europa no muestra ningún volcán de hielo o geiser activo, pero en la superficie se aprecia la erosión con forma de enormes lenguas, probablemente originadas por ellos. Esto convierte a Europa en uno de los lugares del Sistema Solar que podría haber albergado desarrollo de la vida. Según el doctor Ronald Greeley, miembro del equipo de reconocimiento fotográfico de la misión Galileo, «existen tres criterios fundamentales que deben ser considerados cuando se estudia la posibilidad de que exista vida fuera de la Tierra: la presencia de agua, compuestos orgánicos y un calor adecuado. Europa obviamente posee una cantidad im- Los procesos físicos que dan lugar al vulcanismo terrestre son comunes a los de otros planetas y satélites A parte de la Tierra, Tritón, Io y Venus son los únicos cuerpos del Sistema Solar volcánicamente activos en el presente © NASA-JPL Helena R. Olmo Superficie helada de Europa fotografiada por la sonda Galileo. El satélite de Júpiter es uno de los lugares del Sistema Solar que podría haber albergado desarrollo de la vida. Nadie se explica cómo los cráteres de Io pueden permanecer a una temperatura de un 1/3 la del Sol. portante de hielo de agua, y se sabe que los compuestos orgánicos son comunes en el Sistema Solar. La gran cuestión es determinar cuánto calor se genera en su interior. Las imágenes demuestran que hubo el suficiente como para conducir estos ríos a la superficie, por tanto, Europa posee un gran potencial para cumplir con los fundamentos de la exobiología». La superficie del planeta rojo también refleja el castigo de haber sufrido una intensa actividad volcánica. De hecho, en Marte se encuentra el volcán más grande de todo el Sistema Solar, el monte Olimpo, con 600 Km. de ancho y ¡26 Km. de alto! Los flujos de lava se remontan a una edad comprendida entre los 20 y los 200 millones de años, y quizá representen el último aliento del planeta. Una de las razones que hace pensar que en Marte pudo desarrollarse la vida es que la actividad volcánica apareció mucho después de la formación del Sistema Solar, siendo antes un planeta de características más benignas. Sobre la superficie marciana se aprecian otros gigantes volcánicos inactivos. Parecen viejos cráteres, algunos con huellas de erosión, otros rodeados de lava fangosa, lo cual indica que se produjo un derrumbamiento de lodo impregnado de agua. p ermitie ron que el calor interno del planeta emergiera a la superficie, pero que más tarde se agotaron con el enfriamiento del propio núcleo. El vulcanismo marciano ha sido generado por los llamados puntos calientes, son las fisuras que Nuestra Luna es otro de los cuerpos celestres cuya actividad volcánica lleva miles de millo- > © NASA Gigantes volcánicos EL ENIGMA DE LAS MANCHAS DE IO Los volcanes del satélite joviano son los puntos más calientes del Sistema Solar, llegando a alcanzar los 1.527º C. En la imagen, las manchas más brillantes indican los cráteres que están eyectando lava. El Pillan Patera la escupe a más de 1.400º C., > nes de años parada. No hemos encontrado ninguna evidencia de un sistema de placas tectónicas y la gravedad es una sexta parte de la que tenemos en la Tierra, lo que indica que las fuerzas que guiaron los flujos de lava fueron mucho más débiles. Sin embargo, los mares de lava son planos y suaves, y ocupan áreas extraordinariamente amplias. Sin duda, se debe a que eran lavas muy líquidas que podían extenderse con mucha facilidad. Morfología femenina A pesar de la misteriosa impenetrabilidad de Venus, también en sus superficie hay inequívocas señales de fogosidad. cuando en la Tierra, las erupciones más calientes son de 1.227º C. Hace billones de años la lava basáltica terrestre era así de caliente, pero ahora, debido a la mezcla de las zonas de subducción, los basaltos tienen un bajo punto de fusión. El suelo de Io ha sido remodelado muchas veces, por lo que las temperaturas de fusión deberían sufrir el mismo descenso que en la Tierra, pero no es así. © NASA-JPL © NASA-JPL POLOS OPUESTOS Venus, cuyos nombres geográficos siempre homenajean a mujeres y heroínas de la mitología, está protegido por una atmósfera de anhídrido carbónico y densas nubes compuestas de ácido sulfúrico. La espesa nebulosidad por el efecto de los gases sierra, principalmente vapor de agua y anhídrido carbónico, eleva la temperatura de la superficie hasta los 482º C., superando la fiebre de Mercurio, el planeta más cercano al Sol. Al igual que en Marte, la actividad volcánica procede de un recalentamiento de la superficie motivado por puntos calientes análogos a los que en la Tierra originaron las islas Hawai. Se ha avanzando una hipótesis según la cual hace aproxmadamente 500 millones de años se produ- Io y Europa son los dos saté- lites de Júpiter que presentan actividad volcánica, pero su aspecto y composición no podría ser más dispar. Para ser un mundo dominado por abrasadores volcanes es impensable que Io sea un cuerpo frío. El suelo alrededor de los cráteres es un hervidero, pero el resto de la superficie se encuentra a una –150º C. La tenue atmósfera de la luna atrapa poco calor del distante Sol y, en cuanto los gases volcánicos son expelidos, se condensan y congelan, cubriendo la superficie de nieve sulfurosa. Por su parte, la superficie venosa de Europa está compuesta de hielo, y es el objeto más liso del Sistema Solar. Probablemente se formó de una mezcla de hielo y roca, pero, al igual que Io, recibió suficiente calor de Júpiter como para fundir parcialmente sus capas externas, permitiendo que el agua de su interior emergiera a la superficie, congelándose. > © NASA Gula es una diosa de la mitología asiria, pero también es un claro ejemplo de los característicos volcanes escudos venusinos, altos y anchos. Gula es uno de los accidentes geográficos más espectaculares del planeta, que abarca una extensión de cientos de kilómetros por solo tres de altura. En un comienzo se creyó que podía ser un volcán activo, pero imágenes más detalladas mostraron el cráter de impacto y fracciones de materia expelida encima del flujo de lava que lo circunda. jo un descomunal episodio de vulcanismo que modeló por entero la superficie del planeta. Otros opinan que la actividad volcánica no ha cesado nunca de conformar la sinuosa y anaranjada piel venusina. Criovulcanismo activo En agosto de 1989 Tritón era explorado por primera vez, por la sonda Voyager II, que nos desveló datos tales como sus pasmosos –235º C., que tiene una atmósfera extremadamente tenue (cerca de 0.01 milibares), compuesta principalmente de nitrógeno y con una pequeña fracción de metano, y que las interesantes estructuras de su terreno – crestas y valles que forman complejos patrones–, probablemente fueron resultado de diferentes ciclos de hielo y deshielo. Un 25% de Tritón, casi todo el hemisferio sur, está cubierto por un casquete helado de nitrógeno y metano congelado. Las características más interesantes de este inusual mundo son los volcanes de hielo, cuyo material eruptivo probablemente sea nitrógeno líquido, polvo o compuestos de metano procedentes del interior del planeta. Es importante notar que los procesos volcánicos son muy diferentes en el Sistema Solar exterior. Las erupciones terrestres y venusianas, como lo fueron las marcianas, son de material rocoso y están alimentadas por el calor interno; las erupciones de Io son de sulfuro o compuestos sulfurosos y están alimentadas por las interacciones de marea con Júpiter; y las erupciones de Tritón son de compuestos muy volátiles como el nitrógeno o el metano, alimentadas por el calentamiento estacional que causa el Sol. ¢ Tritón fue fotografiado por la Voyager II en agosto de 1989. Tritón es el satélite más grande de Neptuno (al fondo). © NASA Del cuerpo planetario más caliente pasamos al más frío y nos desplazamos hasta los confines del Sistema Solar. Allí encontramos a Tritón, el mayor de los ocho satélites que orbitan alrededor de Neptuno. Es un mundo gélido, treinta veces más alejado del Sol que la Tierra.