OxfordResearchGroup | Agosto 2007 Informe Mensual de Seguridad Internacional € Agosto 2007 IRAK DESPU•S DEL AUMENTO DE TROPAS Paul Rogers A finales de 2006 el informe Baker-Hamilton recomendaba a la Administraci€n Bush un cambio de pol•tica respecto a Irak. Las dos principales propuestas aconsejaban que Estados Unidos deb•a realizar una reducci€n significativa de tropas en el pa•s y que deb•a hacerlo en paralelo a un acercamiento a las potencias de la regi€n para asegurar que Irak despu‚s de la retirada no degenerar•a en violencia generalizada y guerra civil. Tal acercamiento diplomƒtico deber•a incluir necesariamente a pa•ses como Arabia Saud• e Irƒn. Este enfoque asum•a que las potencias regionales importantes como Irƒn y Arabia Saud• estƒn interesadas en evitar un estado fallido asolado por la violencia en sus fronteras. Aunque a Arabia Saud• le preocupa el riesgo de un aumento de la influencia iran• en la fase posterior a la ocupaci€n de Irak, tiene una minor•a chi• significativa en su poblaci€n, especialmente en las regiones del este del pa•s, ricas en petr€leo. La violencia generalizada en Irak podr•a tener su efecto dentro del propio reino. De forma similar, Irƒn tiene una amplia minor•a ƒrabe en el oeste del pa•s, cerca de la frontera con Irak, y no querr•a ver un conflicto interno sostenido en Irak por el riesgo potencial de aumentar la disidencia dentro de sus propias fronteras. El informe Baker-Hamilton fue muy criticado en c•rculos neoconservadores por considerarlo como una rendici€n y la Administraci€n Bush decidi€ rƒpidamente rechazar la mayor parte de sus recomendaciones. En su lugar, adopt€ una pol•tica que supuso esencialmente un refuerzo de la ocupaci€n militar, al tiempo que nombr€ un nuevo comandante militar en Irak, el general David Petraeus. El refuerzo, conocido como surge, comenzar•a a implementarse a principios de 2007 y habr•a una revisi€n de los logros en septiembre. La naturaleza del refuerzo La esencia del repentino aumento de tropas consisti€ en cinco brigadas de combate adicionales a las fuerzas en Irak. Cada brigada estaba compuesta por unos 4.500 soldados y contaba con elementos de apoyo suplementarios. Ello result€ en un incremento del contingente en el pa•s de 30.000 soldados, lo que elev€ el total a 168.000, la cifra mƒs alta desde el inicio de la guerra en marzo de 2003. Su prop€sito principal fue fortalecer la presencia militar en Bagdad a fin de controlar la insurgencia y la violencia sectaria, abarcando despu‚s otros centros de la insurgencia en las provincias al norte y al oeste de la ciudad. El aumento de tropas se realiz€ entre febrero y junio, al ritmo de una brigada adicional al mes. Esto significaba que la nueva disposici€n de tropas se habr•a completado tres meses antes de la evaluaci€n en septiembre. Antes del aumento de tropas, exist•a una tendencia a que las tropas estadounidenses estuvieran repartidas en pocas grandes bases bien protegidas. Aunque hab•a frecuentes patrullas sobre el terreno, exist•a tambi‚n una fuerte dependencia de la fuerza a‚rea, tanto de helic€pteros de combate y como cazas. Dada la elevada capacidad de disparo de las tropas estadounidenses, se produjeron muchos incidentes con gran n„mero de v•ctimas civiles, ya que las tropas estadounidenses se enfrentaban a la insurgencia en zonas urbanas muy pobladas. Al margen de las consecuencias humanas directas, ello supon•a que las fuerzas estadounidenses ten•an relativamente pocos contactos con los iraqu•es comunes. Con el aumento de tropas, las fuerzas adicionales permitieron a los comandantes estadounidenses incrementar las patrullas y establecer un n„mero sustancial de puestos de apoyo peque…os, especialmente en Bagdad. Se esperaba que esto aumentar•a las oportunidades de contacto con los 1 OxfordResearchGroup | Agosto 2007 iraqu•es; a ello se a…adi€ una tƒctica adicional en el ƒrea de Bagdad: levantar barreras entre los barrios susceptibles de sufrir ataques sectarios. Los mayores enfrentamientos con la insurgencia resultaron en un elevado n„mero de muertes o detenciones de sospechosos. Fuentes estadounidenses estiman que entre enero y finales de mayo (ver el informe mensual Treinta aÄos de guerra) se produjeron mƒs de 3.000 muertos y casi 18.000 detenidos pero tambi‚n se registr€ un aumento significativo de bajas en las filas estadounidenses, con mƒs de 300 muertos y 1.800 heridos entre abril y junio, el peor trimestre desde el inicio de la guerra. Ya en agosto, era evidente que la situaci€n de seguridad en Bagdad hab•a mejorado de alguna forma, y hab•a signos de que los grupos sun•es en las provincias del norte y del oeste de Bagdad ten•an crecientes diferencias con los insurgentes vinculados a Al Qaeda. En paralelo, apenas se produjo progreso pol•tico en Irak , a pesar de que uno de los principales objetivos del aumento de tropas era mejorar la seguridad de forma sustancial con el fin de ofrecer a los progresos pol•ticos una oportunidad mayor y mƒs realista de ‚xito. Mƒs a„n, a medida que la violencia se reduc•a en Bagdad, surgieron graves problemas en otros lugares del pa•s, incluida la retirada de tropas britƒnicas de una base en el centro de Basora que se hab•a convertido en uno de los enclaves mƒs peligrosos del pa•s. Aun as•, en Estados Unidos la Administraci€n Bush contribuy€ a aumentar el antagonismo entre los sun•es y los elementos de Al Qaeda, incluso si ello supon•a una cooperaci€n mƒs estrecha entre las tropas de Estados Unidos y los sun•es que segu•an opuestos a la presencia extranjera. Uno de los temas mƒs repetidos por la Administraci€n Bush en los „ltimos meses ha sido la fortaleza del movimiento Al Qaeda en Irak. Una ventaja de resaltarlo es que conecta la guerra en Irak con la respuesta original a los atentados del 11-S. A la vez, se ha subrayado la implicaci€n de Irƒn en la insurgencia en Irak. De esta forma, dos enemigos se contemplan vinculados con la ra•z del problema que enfrentan las tropas estadounidenses en Irak: Al Qaeda e Irƒn. Dado el largo antagonismo entre Estados Unidos e Irƒn, que se remonta al derrocamiento del Sha, la Revoluci€n Iran• y la crisis de los rehenes, esto significa que el foco de la guerra en Irak puede presentarse como respuesta a lo que a ojos de la Administraci€n Bush son los dos principales enemigos de Estados Unidos en el mundo. La realidad sobre el terreno en Irak es que Al Qaeda no es la fuerza dominante de la insurgencia, ya que los principales elementos son las milicias sun•es, compuestas por iraqu•es, y milicias chi•es. Mƒs a„n, aunque existen v•nculos entre los Guardianes de la Revolucionaria iran• y algunas milicias chi•es, la mƒs importante de ellas es el Ej‚rcito de Al Mahdi del cl‚rigo Moqtada al Sadr, que tiene relativamente pocos lazos con Teherƒn. Pese a todo, la Administraci€n Bush mantiene este enfoque, que se combina con declaraciones contundentes en el sentido de que el aumento de tropas estƒ funcionando lo bastante bien como para que sea totalmente equivocado hablar de una retirada completa. El presidente Bush ha establecido incluso un paralelismo entre Irak y Vietnam, y parece sugerir que la retirada de Vietnam fue prematura e incluso deja impl•cito que la guerra de Vietnam se podr•a haber ganado si Estados Unidos hubiera mantenido el rumbo. Es una visi€n bastante extendida en los c•rculos neoconservadores y que refuerza la opini€n mantenida contundentemente que cualquier menci€n a la retirada de Irak es muy peligroso al tiempo que profundamente antipatri€tica. El contexto interno Las elecciones de 2006 dieron a los dem€cratas el control de las dos cƒmaras del Congreso, pero ello no ha resultado en el desarrollo de una „nica l•nea de actuaci€n consistente sobre Irak. Igual que los republicanos, y como una caracter•stica sostenida de la pol•tica estadounidense, los dem€cratas son una amalgama de opiniones, y en ninguna parte es mƒs claro que en la pol•tica sobre Irak. Mientras que 2 OxfordResearchGroup | Agosto 2007 muchos elementos dentro del partido apuestan por una retirada en breve plazo, tambi‚n les preocupan las consecuencias, especialmente en la cuesti€n del patriotismo. Sin embargo, dos aspectos de la actual escena pol•tica estadounidense sugieren que el periodo en el Congreso este oto…o puede resultar particularmente dif•cil para la acosada Administraci€n Bush. El primero de ellos es que el periodo de vacaciones ha dado a los miembros de la Cƒmara de Representantes y del Senado una buena oportunidad para mantener contactos con sus electores. Para muchos dem€cratas, esto fortalecerƒ su perspectiva del grado de impopularidad de la guerra, lo que tendrƒ un efecto en su trabajo en Washington. El segundo elemento se relaciona directamente con el anterior. Al tomar el control de las dos cƒmaras, los dem€cratas tienen mƒs posibilidades de fijar la agenda con numerosas sesiones para examinar c€mo se ha realizado la guerra de Irak. Esto les permitirƒ interrogar en detalle a muchos oficiales, incluyendo a comandantes de alta graduaci€n. Mƒs significativo a„n es la manera en que una serie de comit‚s puede iniciar evaluaciones sobre la guerra durante los „ltimos cuatro a…os. El tema de estas sesiones, tanto si se relacionan con abusos, †rendici€n‡ de prisioneros, suministro de equipamiento para el Ej‚rcito, uso de contratistas de seguridad privada o el tema central del control del gasto, todos pueden investigarse en profundidad, con las agendas definidas por los dem€cratas en lugar de los republicanos. Como los comit‚s tienen un estatus mucho mƒs alto en c•rculos pol•ticos y de los medios de comunicaci€n que, por ejemplo, los comit‚s parlamentarios britƒnicos, significa que muchos aspectos de la guerra hasta ahora ignorados recibirƒn atenci€n. La cuesti‚n de Irƒn Pese a que trata de presentar ciertos avances, la Administraci€n Bush enfrenta graves problemas en Irak. Sin embargo, una de las sorpresas de las „ltimas semanas ha sido la forma en que Irƒn ha crecido, de nuevo, en la agenda, por primera vez desde que a principios de a…o capt€ la atenci€n por una posible confrontaci€n militar. Junto a la cuesti€n de la implicaci€n iran• en Irak, hay otros tres factores relevantes. El primero se refiere a que la Marina de Estados Unidos y la britƒnica han mantenido niveles de tropas en el Golfo P‚rsico y el Mar de Arabia mƒs elevados en los „ltimos meses que en cualquier otro momento desde principios de 2003. La presencia media durante este periodo consist•a en varios portaviones desplegados con la V Flota de los Estados Unidos, con punto de amarre en Bahrain, junto con un grupo de ataque anfibio compuesto por varios miles de soldados. Desde la primavera, ha duplicado prƒcticamente su presencia, con peque…as variaciones. La rotaci€n de las unidades supone disponer regularmente en la regi€n de tres escuadras de portaviones. El segundo factor se refiere al endurecimiento de la una ret€rica de la Administraci€n Bush hacia Irƒn. El presidente Bush y el vicepresidente Cheney se muestran inflexibles respecto a la naturaleza totalmente inaceptable del r‚gimen iran• del presidente Ahmadinejad. La cuesti€n de las ambiciones nucleares de Irƒn sigue siendo importante, pero la oposici€n de Estados Unidos en este punto no ayuda a mantener la relativamente buena cooperaci€n que la Agencia Internacional de la Energ•a At€mica estƒ recibiendo de Irƒn. Quizƒs como consecuencia de ello, la administraci€n Bush trata de presentar la implicaci€n iran• en Irak como el foco real de la oposici€n estadounidense a Teherƒn. El „ltimo elemento es mucho mƒs claro en sus perfiles: c€mo han pasado a primer t‚rmino las se…ales informales que lanza Estados Unidos respecto a preparativos para una acci€n militar contra Irƒn, a menudo a trav‚s de blogs y otros medios. Es fundamental ser extremadamente cauto con estas fuentes de informaci€n, dado que Internet ha probado ser un hervidero de teor•as conspirativas. Pero incluso teniendo esto en cuenta, se ha registrado un aumento significativo se…ales que indican una actitud mƒs beligerante. 3 OxfordResearchGroup | Agosto 2007 Es importante tener presente que la ret€rica de Estados Unidos respecto a Irƒn es particularmente „til para el gobierno de Ahmadinejad. Los graves problemas econ€micos que afectan al pa•s recaen con especial dureza en los sectores mƒs pobres de la poblaci€n, que fueron responsables de la sorprendente elecci€n de Ahmadinejad en 2005. El descenso de su popularidad se refleja en los pobres resultados de sus compa…eros de filas en las elecciones municipales de principios del verano; por tanto, le beneficia que Irƒn se vea obligado a enfrentar el antagonismo de Washington. En este contexto, el presidente Ahmadinejad declar€ a finales de agosto que Irƒn ya dispon•a de 3.000 centrifugadoras de uranio enriquecido. Aunque esta afirmaci€n fue puesta en duda por la AIEA, los elementos mƒs pr€ximos a los halcones de Washington pueden encontrar en ello la evidencia de la inminente capacidad de Irƒn para construir armas nucleares. Resulta dif•cil de valorar si realmente existe un deseo en Estados Unidos para atacar militarmente a Irƒn antes del fin de la Administraci€n Bush el pr€ximo a…o. Hay elementos cercanos a la Casa Blanca que consideran esencial que en ese periodo una operaci€n militar frene el programa nuclear iran•. Existe la opini€n de que un ataque paralelo a los Guardianes de la Revoluci€n iran• limitar•a la capacidad de Irƒn de devolver el golpe a trav‚s de su influencia en Irak. Por contra, algunos elementos poderosos en el Departamento de Estado e incluso en el Pentƒgono consideran cualquier ataque a Irƒn como temerario y peligrosamente contraproducente. A„n es necesario a…adir dos factores. Primero, que una Administraci€n Bush que enfrenta grandes dificultades en el Congreso y problemas continuos en Irak y Afganistƒn puede ver una crisis con Irƒn como una distracci€n valiosa pol•ticamente. Como m•nimo, un aumento del tono de la ret€rica contra Irƒn podr•a tener considerable valor internamente, incluso si una operaci€n militar no es inminente en este momento. Segundo, que el r‚gimen de Ahmadinejad en Teherƒn puede recibir con los brazos abiertos una confrontaci€n; incluso elementos de la l•nea dura asociados a los Guardianes de la Revoluci€n podr•an realizar actos de provocaci€n dise…adas deliberados para incitar una respuesta de Estados Unidos. El elemento esencial es que dos gobiernos estƒn en aprietos con sus p„blicos internos y cada uno puede estar buscando un elemento de distracci€n en el exterior. Esto no es una situaci€n que apoye la estabilidad. Paul Rogers es Profesor de Estudios de Paz en la Universidad de Bradford y Asesor de Seguridad Global del Oxford Research Group (ORG). Sus informes mensuales de seguridad internacional estƒn disponibles en Ingl‚s y Espa…ol en el sitio web www.oxfordresearchgroup.org.uk y los visitantes pueden suscribirse para recibirlos via e.mail mensualmente. Estos informes son distribuidos sin cargo y sin fines de lucro, pero por favor, consid‚rese hacer una donaci€n al ORG si Ud. se encuentra en condici€n de hacerlo. Traducido al castellano por Nuria del Viso. Copyright € Oxford Research Group, 2007 Ciertos derechos reservados. Este informe se encuentra licenciado bajo Atribuci€n-NoComercial-NoDerivada Licencia 3.0 de Creative Commons. Para mayor informaci€n visitar http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/3.0/. 4