Documento descargado de http://www.elsevier.es el 16/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. 274.835 REVISIONES Influencia de los trastornos de la personalidad en el pronóstico de la depresión Giles Newton-Howes Hawke’s Bayn District Health Board. Nueva Zelanda. Imperial College. Londres. Reino Unido. Aunque continúa siendo motivo de debate, casi sin ninguna duda el pronóstico de los trastornos depresivos se agrava con la presencia de un trastorno comórbido de la personalidad. Este hallazgo es intuitivo pero no aceptado por todos los investigadores que trabajan en este campo. En parte, esto podría deberse a las dificultades en el diseño y la interpretación de los estudios de investigación sobre ambos procesos, las dificultades para evaluar transversalmente los trastornos de la personalidad en relación con la depresión, la naturaleza variable tanto de la depresión como los trastornos de la personalidad y los factores etiológicos similares para ambos procesos. A esto se debe añadir que este pronóstico más desfavorable se observa con independencia del tipo de intervención utilizada para tratar la depresión. No se dispone de estudios que hayan examinado programas de tratamiento específico para ambos procesos, instaurados de forma paralela, lo que dificulta la separación de los efectos del tratamiento de los trastornos depresivos de los marcadores de rasgo de los pacientes. El tratamiento de pacientes con comorbilidades requiere una estrategia terapéutica diseñada individualmente que tenga en cuenta la gravedad de cada entidad y su influencia en la función social y la psicopatología. La depresión ha de tratarse de manera agresiva y es probable que las intervenciones específicas dirigidas a la influencia del trastorno de la personalidad se traduzcan en mejoras. Puede ser que la duración del tratamiento tenga que ser más prolongada, al igual que en el caso de numerosos procesos duales. Es necesario realizar investigaciones que clarifiquen la interrelación de ambos procesos. Las claras diferencias en las clasificaciones clínicas actuales y los marcos de tiempo de ambos procesos, en comparación con los hallazgos de investigación hasta la fecha, dificultan esta investigación. Palabras clave: Depresión. Tratamiento. Metaanálisis. Pronóstico. Temperamento. The influence of personality disorders on the outcome of depression Although some debate remains, the outcome in depressive disorders is almost certainly worsened by the presence of a comorbid personality disorder. This finding is intuitive but not accepted by all researchers working in the field. This may be partly due to the difficulties in designing and interpreting research studies into both disorders, to the difficulties in assessing personality pathology in cross-section when depression is present, to the variable nature of both depression and personality pathology, and to the similar aetiological factors for both disorders. Added to this, these poorer outcomes are found regardless of the type of intervention used to treat the depression. There are no studies looking at specific treatment programmes for both disorders running in parallel, making it difficult to disentangle the treatment effects of depressive disorders on the trait markers of patients. Management of patients with comorbidity requires an individually designed treatment package that takes into account the severity of each disorder and its impact on social function and psychopathology. Depression needs to be treated aggressively and specific interventions aimed at the impact of personality disorder are likely to lead to improvements. treatment length may need to be longer, as is the case for many dual disorders. Future research is needed to clarify the interrelation of both disorders. Such research is hindered by the clear differences in the current clinical classifications and time frames of both disorders when compared with the research findings to date. Key words: Depression. Management. Meta-analysis. Outcome. Temperament. Previamente publicado en Psychiatry. 2008;7:105-8. Psiq Biol. 2008;15(6):223-7 223 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 16/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Newton-Howes G. Influencia de los trastornos de la personalidad en el pronóstico de la depresión INTRODUCCIÓN La influencia de la personalidad en el pronóstico de los trastornos depresivos ha sido desde siempre un tema de debate en psiquiatría. Los primeros teóricos conceptuaron muchas enfermedades psiquiátricas mayores simplemente como una expresión manifiesta de la personalidad y, por lo tanto, habrían considerado que el problema de la influencia de la una en la otra no es susceptible de investigación. Por ejemplo, Kretschmer1 consideraba que el estilo de personalidad ciclotímica explicaba tanto la depresión como el trastorno bipolar y, por esta razón, un individuo no podría estar deprimido sin este estilo de personalidad. Desde entonces, este concepto ha sido reemplazado por un modelo de trastorno mental, que hace hincapié en los aspectos etiológicos y biológicos de la depresión, y la diferencia del trastorno de la personalidad2. Desde la introducción del Diagnostic and Statistical Manual-III (DSM-III)3, los trastornos de la personalidad se han clasificado por separado de los trastornos del eje I. Con independencia de sus limitaciones4, esta clasificación ha estimulado la investigación de la influencia de la personalidad en los trastornos mentales mayores. En la actualidad, una diversidad de pruebas nos permiten extraer algunas conclusiones sobre la epidemiología de la comorbilidad y la influencia del trastorno de personalidad en el pronóstico y el tratamiento de pacientes con un trastorno de personalidad comórbido y depresión, aunque persiste el debate sobre la firmeza de las conclusiones clínicas que pueden extraerse. EPIDEMIOLOGÍA La epidemiología de la depresión está descrita exhaustivamente y se comprende. La enfermedad es frecuente; aproximadamente una quinta parte de individuos experimentan un episodio de depresión mayor durante la vida5. Es posible que no siga un curso benigno y produce una importante influencia en la carga en conjunto de incapacidad general causada por la enfermedad6. Aunque está menos caracterizado el impacto general del trastorno de la personalidad, también es frecuente, con una prevalencia poblacional del orden del 8%7, que se incrementa hasta en casi la mitad de los pacientes de atención secundaria8. Por lo tanto, quizá no resulta sorprendente encontrar que la comorbilidad de ambos procesos es habitual. Las revisiones de los estudios publicados indican que la comorbilidad en atención secundaria es del 85% para el trastorno de la personalidad en la depresión, aunque esto probablemente sobrestime hasta cierto punto las tasas reales9. Claramente, la interrelación de ambas es tan habitual como importante para la práctica clínica. 224 Psiq Biol. 2008;15(6):223-7 Problemas en la comprensión de las pruebas procedentes de los estudios clínicos Buena parte del debate sobre la influencia del trastorno de la personalidad en la depresión procede de la amplia variación de los datos publicados. Los estudios individuales varían desde los que demuestran que el trastorno de la personalidad carece de influencia en el desenlace de la depresión10,11 hasta los que describen un efecto negativo profundo12,13. Esta amplia variación requiere de revisiones sistemáticas y metaanálisis para entender mejor estos resultados variables; sin embargo, también han de interpretarse con precaución. Las razones de la variación incluyen: la definición del trastorno de la personalidad, su historia natural, la historia natural de la depresión, la diferenciación de la personalidad y de la sintomatología depresiva y la interpretación de los datos. DEFINICIÓN DE TRASTORNO DE LA PERSONALIDAD A pesar del valor de contribuir al diagnóstico clínico y alentar la investigación de la personalidad como claramente diferente de los trastornos de eje I, persisten los problemas con el modelo actual usado con objetivos clínicos. La estrategia categórica adoptada tanto por el DSM3 como por la Clasificación Internacional de las Enfermedades (CIE)14 no representa los hallazgos de la investigación que recomendarían una estrategia dimensional más robusta desde un punto de vista científico15. No es necesario separar por completo esta estrategia de la clasificación a partir de la que se establecen los diagnósticos y, por esta razón, no sería práctico desde un punto de vista clínico16. El sistema politético de uso actual tiene en cuenta la amplia heterogeneidad clínica en la presentación del trastorno de la personalidad, hasta el punto de que no está claro que todos los pacientes con un trastorno de la personalidad compartan una etiología común. Esto es verdad incluso dentro de las categorías individuales según se definen. Claramente, dicha heterogeneidad debilita la interpretación de los hallazgos de los resultados clínicos. HISTORIA NATURAL DE LA DEPRESIÓN Y EL TRASTORNO DE LA PERSONALIDAD Al problema de si las poblaciones de estudio son representativas de la población de riesgo se añade la com- Documento descargado de http://www.elsevier.es el 16/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Newton-Howes G. Influencia de los trastornos de la personalidad en el pronóstico de la depresión prensión cambiante de la historia natural de ambos procesos. Tradicionalmente, la depresión se ha tratado de forma optimista, con una expectativa de remisión y buen pronóstico. Los estudios longitudinales no respaldan esta opinión y demuestran que en la mayor parte de los pacientes siguen un curso crónico o recidivante o caracterizado por recidivas y remisiones17; estos estudios están dando lugar a cambios en las intervenciones en este grupo de pacientes18. Al contrario, los trastornos de la personalidad diagnosticados como “patrones de conducta profundamente enraizados y persistentes, que se manifiestan como respuestas inflexibles a una amplia variedad de situaciones personales y sociales”14, parecen remitir gradualmente con el tiempo 19. Estos hallazgos contraintuitivos (y contradiagnósticos) han de considerarse cuando se interpretan los datos longitudinales sobre el pronóstico de la depresión, cuando el trastorno de la personalidad es habitual. Los estudios de seguimiento individuales pueden estar expuestos a una amplia variación, basada exclusivamente en la historia natural cambiante de ambas entidades. DIFERENCIACIÓN DE LA DEPRESIÓN Y LA PERSONALIDAD sonalidad en la depresión, la interpretación de los datos presentados puede ser, en el mejor de los casos, confusa y, en el peor, incomprensible. La amplia variedad de los diagnósticos y puntos de tiempo de las medidas y análisis estadísticos dan lugar a resultados muy diversos. No obstante, esta heterogeneidad aumenta el valor relativo de las revisiones sistemáticas y los metaanálisis. Si el trastorno de la personalidad no tiene una influencia en el desenlace de la depresión, el resultado estadístico probable de combinar estos estudios diversos sería la regresión a la media. Cuando esto no ocurre, los hallazgos son cada vez más pertinentes desde un punto de vista clínico. Por esta razón, antes de los efectos potenciales de los rasgos particulares de la personalidad, se abordarán los resultados metaanalíticos. RESULTADOS CLÍNICOS: LOS METAANÁLISIS En dos grandes revisiones sistemáticas y metaanálisis se ha examinado la influencia del trastorno de la personalidad en los resultados clínicos de la depresión. Metaanálisis de Kool También surgen problemas potenciales cuando se considera la diferenciación de los síntomas de rasgo de personalidad y su identificación precisa en pacientes con depresión aguda. Los investigadores clínicos reconocen este problema y lo identifican como una debilidad de los estudios, abordándolo a través del estudio de la personalidad cada vez que los pacientes se encuentran en remisión de los síntomas depresivos o tratando de efectuar un ajuste para la presencia de dichos síntomas. Con independencia de la estrategia que se adopte, ha de tener en cuenta la inestabilidad de los trastornos de personalidad individuales20. Este hallazgo podría reflejar las dificultades en la identificación de los rasgos de personalidad cuando hay una enfermedad mental mayor, un efecto directo del tratamiento en los trastornos de personalidad combinado con el tratamiento de la depresión, o un reflejo de la naturaleza remitente de la descripción diagnóstica actual del trastorno de la personalidad. Sin embargo, hay argumentos convincentes que respaldan la opinión de que los rasgos principales de la personalidad, como el neuroticismo y la extroversión, son independientes de este efecto21. INTERPRETACIÓN DE LOS DATOS Si se consideran los problemas mencionados previamente con los estudios que examinan el efecto de la per- El primer estudio de Kool et al22 examinó datos de alta calidad procedentes de ensayos aleatorizados, controlados, que describían la influencia del trastorno de la personalidad en pacientes incluidos en ensayos sobre tratamiento con farmacoterapia exclusiva. Dicho estudio no encontró ninguna influencia de la comorbilidad y describió una odds ratio de 1,14 (intervalo de confianza [IC] del 95%, 0,93-1,39) entre ambos grupos (con trastorno de la personalidad o sin él). Esta revisión sólo incluyó seis artículos, dos de los cuales duplicaban los resultados del ensayo. La eliminación de la duplicación amplió los intervalos de confianza (0,88-1,45), pero no cambió el resultado total. Al no ser generalizable, la posibilidad estadística de regresión a la media y la dificultad para decidir qué artículos incluir en función de los criterios de “alta calidad” debilitan la aplicabilidad clínica de este metaanálisis23. Metaanálisis de Newton-Howes El segundo estudio de Newton-Howes et al24 incluyó todos los ensayos que examinaban la influencia del trastorno de personalidad en el desenlace de la depresión, con independencia del diseño del estudio. Los autores identificaron un peor desenlace utilizando un modelo de Psiq Biol. 2008;15(6):223-7 225 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 16/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Newton-Howes G. Influencia de los trastornos de la personalidad en el pronóstico de la depresión efectos aleatorios para la combinación (2,18; IC del 95%, 1,7-2,8). Cuando sólo se incluyeron los ensayos aleatorizados, controlados, los resultados siguieron demostrando que los pacientes deprimidos con un trastorno comórbido de la personalidad tuvieron alrededor del doble de probabilidades de presentar un pronóstico desfavorable. Aunque este estudio subanalizó los artículos incluidos por tipo de tratamiento, no fue posible demostrar que la farmacoterapia, la psicoterapia, el tratamiento de combinación o el tratamiento electroconvulsivo (TEC) fueran ventajosos para el grupo comórbido, aunque en el grupo con TEC se demostró una tendencia hacia una mayor eficacia de este tratamiento. Merece la pena mencionar que este metaanálisis sobre el desenlace de la depresión incluyó estudios tanto sobre tratamiento como naturalistas y que en ninguno de los incluidos se instauró un tratamiento específico para el trastorno de la personalidad. Interpretación de los dos metaanálisis Aunque estos dos estudios extraen conclusiones algo diferentes, los resultados no lo son tanto como indica la interpretación posterior. Ambos estudios demuestran, como mínimo, una tendencia hacia un peor desenlace con un trastorno comórbido de la personalidad, y ambos coinciden en que la famacoterapia no proporciona un tratamiento esencial del trastorno de la personalidad. Ninguno de los dos metaanálisis pudo clarificar si una modalidad particular de tratamiento para la depresión produjo un efecto directo en el trastorno de la personalidad. INFLUENCIA DE LOS RASGOS DE LA PERSONALIDAD EN LA DEPRESIÓN En el análisis de los datos de personalidad se han identificado repetidamente cuatro rasgos comunes de personalidad que producen efectos variables en las tendencias depresogénicas (tabla 1)25. Sigue siendo un tema debatido si representan factores etiológicos en el desarrollo de la depresión o factores comórbidos que la agravan; no obstante, tienen un efecto longitudinal en el pronóstico. Está claro que los pacientes con un trastorno de personalidad no sólo tienen un peor pronóstico, sino que también manifiestan un curso peor de la enfermedad26. De las cuatro dimensiones de la personalidad, los elevados grados de neuroticismo e introversión conllevan mayores tasas de trastornos depresivos. También se ha demostrado que la introversión da lugar a un curso más crónico27. Estos resultados respaldan los hallazgos longitudinales de mayores tasas de personalidad del grupo C, no sólo con la depresión, sino también con todos los trastornos de interiorización28. CONCLUSIONES ¿Qué nos indican estas pruebas sobre la influencia de los trastornos de la personalidad en la depresión? Los estudios sobre el trastorno de la personalidad y sus interacciones con los trastornos de eje I siguen siendo diversos y son un reflejo de que el tema es relativamente incipiente. Buena parte de la heterogeneidad requiere investigación más fundamental, en particular en el campo de los trastornos de la personalidad, para garantizar TABLA 1. Rasgos temperamentales y su relación con la clasificación actual del trastorno de la personalidad y la depresión Rasgo Categoría diagnósticaa Grupob Relación con depresión Extroversión-introversión Disocial, impulsiva, límite, histriónica Ansioso, dependiente Paranoide, esquizoide Anancástica Grupo B Introversión elevadac Grupo C Grupo A Sin grupo Neuroticismo elevado – Perfeccionismo Neurótico Evitador/esquizoide Anancástico aDiagnóstico según lo descrito en la Clasificación Internacional de las Enfermedades (CIE)-10. bUtilizando el modelo de grupo actual del Diagnostic and Statistical Manual. cEste rasgo es un factor de riesgo de curso crónico en todos los trastornos neuróticos, incluida la depresión. TABLA 2. Implicaciones clínicas de las pruebas sobre trastorno de la personalidad en la depresión Cuando se tratan trastornos depresivos, es importante una evaluación cuidadosa de la personalidad Los individuos muy introvertidos, neuróticos y perfeccionistas corren un riesgo de curso crónico Cualquier trastorno de la personalidad aumenta la probabilidad de resultado desfavorable en la depresión Si se diagnostica un trastorno de la personalidad, suele estar justificado un tratamiento específico dirigido a ese trastorno Las estrategias de tratamiento del trastorno de la personalidad y la depresión se solapan pero no son idénticas 226 Psiq Biol. 2008;15(6):223-7 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 16/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Newton-Howes G. Influencia de los trastornos de la personalidad en el pronóstico de la depresión que los investigadores están estudiando el mismo trastorno y, al mismo tiempo, usan tipos de instrumentos de medida similares. La combinación de los datos en un metaanálisis disminuye esta heterogeneidad ya que demuestra peores desenlaces en la depresión para pacientes con un trastorno de la personalidad, con independencia de la modalidad de tratamiento utilizada. Los pacientes con depresión pueden presentar tasas de pronóstico desfavorable de más del doble comparado con aquellos sin un problema de la personalidad (tabla 2). Los rasgos temperamentales de neuroticismo e introversión conllevan pronósticos más desfavorables y cursos más crónicos de los trastornos depresivos. Se requiere mayor investigación para entender la interacción entre temperamento, entorno social y depresión. La mayor parte de la investigación en este campo presta atención a la influencia del trastorno de la personalidad en la depresión, sin abordarlo en realidad. Claramente, es necesario garantizar que se reconocen y tratan apropiadamente ambas entidades. 11. 12. 13. 14. 15. 16. 17. 18. 19. 20. BIBLIOGRAFÍA 1. Kretschmer E. Physique and character. London: Routledge; 1931. 2. Grove WM, Andreasen NC, Young MA, et al. Isolation and characterization of a nuclear depressive syndrome. Psychol Med. 1987;17:471-84. 3. American Psychiatric Association. Diagnostic and statistical manual of mental disorders. 3.a ed. Washington DC: American Psychiatric Association; 1980. 4. Darrel A, Regier D, Kaelber C, et al. Limitations of diagnostic criteria and assessment instruments for mental disorders, implications for research and policy. Arch Gen Psychiatry. 1998;55:109-15. 5. Kessler R, Berglund P, Demler O, et al. 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