DOCTRINA INSPIRACIÓN DE LAS ESCRITURAS “Toda la Escritura es inspirada por Dios”. Por Escritura entendemos todo el libro que se llama LA BIBLIA; compuesta por el Antiguo y Nuevo Testamento, que es infalible en su escrito original y que su enseñanza y autoridad son absolutas, supremas y finales. Que el Espíritu Santo inspiró a los santos hombres de Dios en todo lo que escribieron “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia” (2ª Timoteo 3:16) “No añadiréis a la palabra que yo os mando, ni disminuiréis de ella, para que guardéis los mandamientos de Jehová vuestro Dios que yo os ordene.” (Deuteronomio 4:2) “Porque ninguna profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo” (2ª Pedro 1:21) De la misma manera que hablaron, los hombres de Dios escribieron también siendo inspirados lo que previamente habían hablado. Dios obró de la misma manera al dar una revelación, como al hacer que esa revelación a través de la escritura pasara a ser patrimonio de todos los hombres. Inspiración es la operación por la cual Dios garantizó el contenido de la Biblia como auténtica expresión de su revelación. - la inspiración no anula la personalidad del escritor sagrado. Los guió y controló de la influencia del pecado y del error, pero los dejó expresarse a su manera, en su vocabulario y de acuerdo a su tiempo y contexto. - La inspiración abarca todo el contenido de la palabra de Dios. (inspiración plenaria). Difieren en cuanto a la aplicación y propósito para el cual fueron inspiradas, pero no en cuanto al grado de inspiración. No hay un libro más inspirado que otro. - La inspiración hace de la Biblia la palabra de Dios. (canon) El Dios que reveló su propósito redentor a los hombres libre de todo error, haciendo que esa revelación alcanzase el carácter de Escritura libre de error, cuidó también que llegara a formar un volumen, accesible a todos los hombres y libre de todo error. - Autoridad de las Escrituras. El hecho de tener un registro fehaciente de la revelación de Dios, hace de la Biblia la autoridad final en todo asunto de fe y práctica. Pacto de Lausana: afirmamos la inspiración divina, la veracidad y autoridad de ambos testamentos en su integridad, como la única palabra de Dios escrita, y la única infalible regla de fe y práctica” tanto la razón como la iglesia tienen un grado de autoridad, pero siempre en subordinación a la Palabra de Dios. Interpretación de Las Escrituras. La Biblia contiene en sí misma la información necesaria para su propia interpretación, siendo el cristiano un juez idóneo, siempre que éste esté dispuesto a ser enseñado por el ES y a obedecerle. LA TRINIDAD - La Divinidad existe eternamente en tres personas: El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Estos tres son un solo Dios, teniendo la misma naturaleza, los mismos atributos y la misma perfección. “Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles en la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa.” (Romanos 1:20) “Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo” (Mateo 28:19) “A ti te fue mostrado, para que supieses que Jehová es Dios, y no hay otro fuera de él.” (Deuteronomio 4:35) “Ahora pues, Padre, glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antes que el mundo fuese.” (Juan 17:5) La palabra trinidad no aparece en la Biblia, pero si el concepto de un Dios trinitario. Su punto de partida es la historia de la salvación: la obra de Cristo, con la posterior llegada del ES con su impacto continuo en la iglesia y el mundo. La experiencia cristiana lo ratifica: Dominio, comunión, posesión. Tertuliano fue el primero en definirla: “una sustancia en tres personas”. - sustancia o esencia, es decir las perfecciones de Dios son precisamente Dios. Por ej el hombre puede dejar de amar sin dejar de ser hombre, en cambio, “Dios es amor” y no puede dejar de amar porque dejaría de ser Dios. - Tres personas, al referirnos a Dios no decimos que son tres individuos, sino distinciones personales dentro de uno mismo, dentro de la esencia divina. Dios es uno genéricamente y también numéricamente. La esencia está plenamente con todas sus perfecciones y no fragmentada en cada una de las personas, por consiguiente no puede haber subordinación entre las personas de la trinidad. Cuando mencionamos ciertos atributos personales por los cuales se distinguen (por ej Espíritu Santo) no es algo exclusivo, Dios Padre y Dios Hijo no son menos “santos” Creemos en la Personalidad y Deidad del Señor Jesucristo, concebido por obra del Espíritu Santo, nacido de la virgen María, verdadero Dios y verdadero hombre. “En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios… y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad” (Juan 1:1, 14) “Yo y el Padre uno somos.” (Juan 10:30) “Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu santo es.” (Mateo 1:20) “Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia delante de Dios. Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS.” (Lucas 1:30, 31) “Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, siendo que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres.” (Filipenses 2:5-7) “E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue manifestado en carne, Justificado en Espíritu, Visto de los ángeles, Predicado a los gentiles, Creído en el mundo, Recibido arriba en gloria” (1ª Timoteo 3:16) - Personalidad y Deidad del Espíritu Santo, Es la fuente y el poder de toda adoración y servicio aceptable. Que el Espíritu Santo es el intérprete infalible de la Palabra infalible. Que mora en cada creyente verdadero, y que está siempre presente para testificar de Cristo, buscando que Cristo sea en todo tiempo nuestra sola preocupación y no nosotros mismos y nuestras experiencias. “Pero cuando venga el Consolador, a quien yo os enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, él dará testimonio acerca de mí.” (Juan 15:26) “Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad? Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? Y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios. (Hechos 5:3-4) “Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles. Mas el que escudriña los corazones sabe cual es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos.” (Romanos 8:26-27) “Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de Dios, para que sepamos lo que Dios nos ha concedido, lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual. Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente.” (1ª Corintios 2:12-14) “Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él.” (Romanos 8:9) “¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros? (1ª Corintios 3:16) “Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir. El me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber.” (Juan 16:13-14) El ES es Dios, su fundamento está en las mismas Escrituras recibe nombres divinos se le adjudican perfecciones divinas realiza obras divinas se le tributan honores divinos La obra del E.S. abcd- a- Bautismo del ES. entramos en una comunión tan íntima que se impone la idea de “sumergirnos”. b- Investidos de poder. Se posesiona del hombre y lo usa como Dios quiere y lo hace apto para el servicio a Dios. c- Llenos del Espíritu. No nos referimos a que podemos poseerlo en mayor o menor cantidad, sino que el creyente se encuentra tan identificado con la esencia, propósito, modo de ser, de sentir del ES que hay una plena identidad con él. d- Derramamiento del ES. se usa en dos ocasiones por Lucas para indicar la iniciación del ministerio especial del ES, en el pueblo de Dios o en el mundo pagano EL HOMBRE - Creemos que el hombre fue creado a imagen y semejanza de Dios, pero la raza humana entera cayó al caer Adán. No solo fue grandemente perjudicada su naturaleza moral por la caída, sino que perdió totalmente su vida espiritual, siendo muerto en delitos y pecados y quedando sujeto al poder de Satanás. “Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios, porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden; y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios” (Romanos 8:7-8) Por lo tanto el hombre no puede ver el reino de Dios ni entrar en él hasta que nazca de nuevo por el Espíritu Santo. Que ningún grado de reforma, no importa cuan grande sea; ni la cultura, no importa lo atractiva que sea; ni ninguna obra humanitaria y filantrópica, no importa cuan útiles sean; ni el bautismo, ni ninguna otra ordenanza, no importa como sean administradas, podrán ayudar al pecador para adelantar, ni siquiera un paso hacia el cielo. Una nueva naturaleza impartida de arriba, una nueva vida implantada por el Espíritu Santo por medio de la Palabra es absolutamente necesaria para la salvación.“Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.” (Génesis 1:26-27) “Por tanto, como el pecado entró al mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, la muerte pasó a todos los hombres, por cuento todos pecaron.” (Romanos 5:12) “Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.”(Romanos 6:23) “Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden; y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios.” (Romanos 8:7-8) “Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados, en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia, entre los cuales también todos nosotros vivimos todos nosotros en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás.” (Efesios 2:1-3) “Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios. Lo que es nacido de de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es. No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo.” (Juan 3:3, 6-7) “De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.” (Juan 5:24) “Nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo.” (Tito 3:5) a- El AT hace énfasis en la responsabilidad del hombre frente a Dios. Dios lo creó, le dio una posición de privilegio y lo hizo responsable ante Él. Se destaca la creación del hombre como un acto personal de Dios (hagamos – produzca) b- Fue creado como un ser libre y pensante. Puede escoger entre obedecer o no, lo que no puede es modificar las consecuencias se su libertad de elección c- El NT designa al hombre como una totalidad, un ser indivisible a. Cuerpo: es el constituyente material del hombre, no es esencialmente malo como el pensamiento griego, pero Pablo aclara que es el asiento de actitudes opuestas a Dios y requiere de una constante “vigilancia” b. Alma: es la vida humana, individual de un sujeto consciente y voluntario c. Espíritu: se usa el término para el principio vital que continúa viviendo más allá de la muerte o para el modo de ser d. Corazón: es el punto central de la vida espiritual, no solo origen de lo afectivo, sino cumple una función intelectiva d- Imagen de Dios: esta imagen de Dios no fue algo añadido, por lo tanto todo hombre lleva la imagen de Dios, aún el más pecador y deprabado a. La imagen de Dios incluye el conocimiento perfecto, la justicia y la santidad, con la salvación en Cristo el hombre vuelve a recuperar ese camino de perfección b. La imagen de Dios no se pierde con el pecado, pero si se ve totalmente desfigurada c. La imagen de Dios es lo que distingue al hombre de todo lo creado e- El hombre es un ser de relación. Con Dios, con el hombre, con la naturaleza y consigo mismo. JESÚS EL CRISTO - Creemos que Cristo Jesús se hizo el sustituto del pecador delante de Dios y murió en sacrificio propiciatorio por el pecado de la humanidad entera. Que fue hecho maldición por nosotros los pecadores; Y que murió por nuestros pecados conforme a las Escrituras; que nada ni nadie pueden agregar un ápice al valor de la preciosa sangre, o al mérito de esa obra consumada por Él a nuestro favor; Cristo sufrió la muerte por todos los hombres. “Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.” (Romanos 5:8) “Y él es la propiciación por nuestros pecados, y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo.” (1ª Juan 2:2) “Pero vemos a aquel que fue hecho un poco menor que los ángeles, a Jesús, coronado de gloria y de honra, a causa del padecimiento de la muerte, para que por la gracia de Dios gustase la muerte por todos.” (Hebreos 2:9) “Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero)” (Gálatas 3:13) “Pero al que obra, no se le cuenta el salario como gracia, sino como deuda; mas al que no obra, sino cree en aquel que justifica al impío, su fe le es contada por justicia.” (Romanos 4:4-5) a- La revelación se mueve entre dos extremos: Dios y el hombre, Jesucristo es la unidad entre esos dos extremos. La iglesia primitiva nunca tuvo problemas en reconocer la perfecta humanidad y la perfecta divinidad de Cristo, “Jesús es el Cristo”. Su predicación era decir que Jesús es el Cristo: este Jesús que vosotros crucificasteis, Dios le ha hecho Señor y Cristo (Pedro) confundía a los judíos que moraban en Damasco, demostrando que Jesús era el Cristo (Pablo) demostrando por las escrituras que Jesús era el Cristo (Apolos) éstas se han escrito para que creais que Jesús es el Cristo (Juan) b- Este misterio de las dos naturalezas de Cristo fue tema central especialmente en el mundo griego, donde la esencia era lo fundamental. Quien es y no que hizo Cristo - Creemos en la resurrección del cuerpo crucificado de nuestro Señor Jesucristo; que su cuerpo resucitó de los muertos conforme a las Escrituras, y que ascendió al cielo y está sentado a la diestra de Dios como sumo sacerdote y abogado de los creyentes intercediendo por ellos. “Mirad mis manos y mis pies, que yo mismo soy; palpad, y ved; porque un espíritu no tiene carne ni huesos, como veis que yo tengo.” (Lucas 24:39) “Y estando ellos con los ojos puestos en el cielo, entre tanto que él se iba, he aquí se pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas, los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo.” (Hechos 1:10-11) “El que descendió, es el mismo que también subió por encima de todos los cielos para llenarlo todo.” (Efesios 4:10) “El cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas.” (Hebreos 1:3) “Ahora bien, el punto principal de lo que venimos diciendo es que tenemos tal sumo sacerdote, el cual se sentó a la diestra del trono de la Majestad en los cielos, ministro del santuario, y de aquel verdadero tabernáculo que levantó el Señor, y no el hombre.” (Hebreos 8:1-2) “Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.” (1ª Juan 2:1) - Creemos que Cristo es la plenitud de la bendiciones que obtuvo por nosotros por su muerte y resurrección, es recibido solamente por fe, y desde el momento en que, arrepentidos de nuestros pecados, confiamos en él como nuestro Salvador personal, pasamos de muerte a vida eterna, justificados de todas las cosas, aceptados ante el Padre de acuerdo ala medida de la - aceptación de su Hijo, que somos amados como Él es amado y que somos uno con Él. En el momento que aceptamos a Cristo como nuestro Salvador, Él viene a morar en el creyente y vivir Su vida de santidad y poder en él.Cristo, su oficio profético: la función principal del profeta era hablar en nombre de Dios. Resaltando: 1) un Dios universal, 2) sus exigencias de justicia, amor y confianza, 3) una relación personal con el hombre, 4) un futuro mesiánico Cristo, su oficio sacerdotal: 1) su obra expiatoria, 2) su obra intercesora Cristo, su oficio real: un reino de gracia, un reino espiritual, un reino tanto presente como futuro “Así que, por eso es mediador de un nuevo pacto, para que interviniendo muerte para la remisión de las transgresiones que había bajo el primer pacto, los llamados reciban la promesa de la herencia eterna.” (Hebreos 9:15) “De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.” (Juan 5:24) “Concluimos, pues, que el hombre es justificado por fe sin las obras de la ley.” (Romanos 3:28) “Porque ¿qué dice la Escritura? Creyó Abraham a Dios, y le fue contado por justicia. Y no solamente con respecto a él se escribió que le fue contada, sino que también con respecto a nosotros a quienes ha de ser contada, esto es, a los que creemos en el que levantó de los muertos a Jesús, Señor nuestro, el cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación.” (Romanos 4:3, 23-25) “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición en los lugares celestiales en Cristo.” (Efesios 1:3) “Yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado a ellos como también a mí me has amado.” (Juan 17:23) “Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.” (Gálatas 2:20) “Y por cuanto sois hijos, Dios envió a vuestros corazones el Espíritu de su Hijo, el cual clama: ¡Abba, Padre! Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero de Dios por medio de Cristo.” (Gálatas 4:6-7) “Porque en Cristo Jesús ni la circuncisión vale algo, ni la incircuncisión, sino la fe que obra por el amor.” (Gálatas 5:6) “Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.” (Hechos 1:8) LA IGLESIA - Creemos que la iglesia está compuesta de todos los que creen verdaderamente en el Señor Jesucristo como Salvador. La iglesia es el cuerpo y la esposa de Cristo. Que cada creyente ya sea judío o gentil, está bautizado en el cuerpo de Cristo por el Espíritu Santo en el mismo momento de creer, y siendo que somos miembros los unos de los otros, somos responsables de mantener la unidad del Espíritu en los lazos de la paz, - - levantándose sobre todo prejuicio social y fanatismo denominacional y amándonos los unos a los otros fervientemente con corazón limpio. Figuras para designar a la iglesia: o Cuerpo de Cristo: destaca la unidad orgánica donde todos y cada uno tiene un papel que cumplir o Templo: destaca la santidad del edificio y la responsabilidad de los que edifican o Labranza de Dios: el trabajo de los hombres no tiene importancia fuera de la colaboración con Dios o Esposa de Cristo: sujeción y fidelidad que le debe a Cristo. Es la esposa fiel que espera el regreso de su esposo o Columna y apoyo de la verdad: es guardián y defensa de la verdad contra todos los enemigos del reino de Dios Misión: la misión en la iglesia primitiva no era tanto por la iglesia sino en la iglesia, allí cada cristiano se transformaba en un testigo, un evangelista, un misionero, en el sentido pleno de la palabra. “Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios, edificados sobre el fundamente de los apóstoles y profetas, siendo la principal pieza del ángulo Jesucristo mismo.” (Efesios 2:19-20) “Y sometió todas las cosas bajo sus pies, y lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia, la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquel que todo llena en todo.” (Efesios 1:22-23) “Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra, a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha. Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne. Grande es este misterio; mas yo digo esto respecto de Cristo y de la iglesia.” (Efesios 5: 2527, 31-32) “Porque por un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo, sean judíos o griegos, sean esclavos o libres; y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu.” (1ª Corintios 12:13) “Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función, así nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros.” (Romanos 12:4-5) “Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis como es digno de la vocación con que fuiste llamados, con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor, solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz.” (Efesios 4:1-3) “Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa, y que no haya entre vosotros divisiones, sino que estéis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer.” (1ª Corintios 1:10) LA SANTIFICACIÓN - - - - - Creemos que todos los creyentes en nuestro Señor Jesucristo son llamados a una vida de separación de las prácticas del pecado, y que deben abstenerse aquellos entretenimientos y hábitos que pueden ocasionar la caída de otros, o que traigan reproche sobre la cruz de Cristo. Los creyentes son creados en Cristo Jesús para buenas obras. “Así que según tengamos oportunidad hagamos bien a otros, y mayormente a los de la familia de la fe” (Gálatas 6:10) – “No améis al mundo, ni las cosas que están e el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.” (1ª Juan 2:15-16) “Así que, ya no juzguemos más los unos a los otros, sino más bien decidid no poner tropiezo u ocasión de caer al hermano.” (Romanos 14:13) “Sino vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne.” (Romanos 13:14) “Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.” (1ª Corintios 10:31) “Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.” (Efesios 2:10) La santificación es al mismo tiempo una dádiva y una meta. Dios es santo y exige que también lo sea todo lo que está asociado con él. Es tanto un acto(en el sentido de posición o relación) y un proceso (en el sentido de cualidad moral) el ES nos va perfeccionando moralmente porque nos ha separado para Dios Ser santo es mucho más que no hacer mal, es la separación en consagración para el servicio a Dios. Santificación es la operación bondadosa y continua del ES, mediante la cual toma al pecador justificado y lo liberta de la corrupción del pecado, renovándolo a la imagen de Dios y capacitándolo para hacer su voluntad No es una opción, es la consecuencia natural de la salvación. Es obra de Dios, pero acompañada por la actividad inteligente y voluntaria del creyente, llevando al ser entero a la obediencia a Cristo. Pero se logra en el seno de la comunidad. Es en ella, con la ayuda, la orientación que el ES imparte a sus miembros que se torna alcanzable. El modelo y la norma suprema de santidad es Jesucristo. Dios tiene el propósito de que su pueblo llegue a conformarse a la imagen de su hijo. “sed pues vosotros perfectos, como vuestro padre celestial es perfecto” Creemos en la evangelización del mundo que es la misión suprema del pueblo de Dios y consiste en predicar el Evangelio a toda criatura. Que debe hacerse énfasis sobre la evangelización de los niños. “Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.” (Marcos 16:15) “Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación; que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación.” (2ª Corintios 5:18-19) “Así, no es la voluntad de vuestro Padre que está en los cielos, que se pierda uno de estos pequeños.” (Mateo 18:14) SEGUNDA VENIDA - Creemos en el retorno personal de nuestro Señor y Salvador Jesucristo; que la segunda venida de nuestro Señor Jesucristo es la esperanza bienaventurada que nos es propuesta, la cual hemos de estar aguardando constantemente. “Nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo.” (Filipenses 3:20). “Los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo.” (Hechos 1:11) “Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.” (1ª Tesalonicenses 4:16-17) “No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere, y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis.” (Juan 14:1-3) “Aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo.” (Tito 2:13) “Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo; el cual transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya, por el poder con el que puede también sujetar a sí mismo todas las cosas.” (Filipenses 3:20-21) LA RESURRECCIÓN - Creemos que las almas de los que han confiado en el Señor Jesucristo para su salvación, en la muerte pasan inmediatamente a Su presencia, y allí permanecen en bienaventuranza consciente hasta la resurrección del cuerpo en su venida, cuando el alma y el cuerpo reunido, estarán con Él para siempre en gloria. “Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.” (Lucas 23:43) “Pero confiamos, y más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y presentes al Señor.” (2ª Corintios 5:8) “Aconteció que murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham; y murió también el rico, y fue sepultado. Y en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio de lejos a Abraham, y a Lázaro en su seno. Entonces él, dando voces, dijo: Padre Abraham, ten misericordia de mí, y envía a Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua, y refresque mi lengua; porque estoy atormentado en esta llama. Pero Abraham le dijo. - Hijo, acuérdate que recibiste tus bienes en tu vida, y Lázaro también males; pero ahora éste es consolado aquí, y tú atormentado. (Lucas 16:22-25) “Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor.” (Filipenses 1:23) “Por lo cual os decimos esto en palabra de Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron. Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor. Por tanto, alentaos unos a otros con estas palabras.” (1ª Tesalonicenses 4:15-18) Creemos que las almas de los perdidos permanecen, después de la muerte, en la miseria hasta el juicio final del Gran Trono Blanco, cuando alma y cuerpo reunidos en la resurrección, serán echados “al lago de fuego” que es la “muerte segunda”, los cuales sufrirán pena de eterna perdición, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder (2ª Tesalonicenses 1:9) “Aconteció que murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham; y murió también el rico, y fue sepultado. Y en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio de lejos a Abraham, y a Lázaro en su seno. Entonces le dijo: Te ruego, pues, padre, que le envíes a la casa de mi padre, porque tengo cinco hermanos, para que les testifique, a fin de que no vengan ellos también a este lugar de tormento.” (Lucas 16:22-23, 27-28) “Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio.” (Hebreos 9:27) “Pero los otros muertos no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años. Esta es la primera resurrección. Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él, de delante del cual huyeron la tierra y el cielo, y ningún lugar se encontró para ellos. Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras. Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras. Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda. Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego.” (Apocalipsis 20:5, 11-15) “Y vosotros que sois atribulados, daros reposo con nosotros, cuando se manifieste el Señor Jesucristo desde el cielo con los ángeles de su poder, en llama de fuego, para dar retribución a los que no conocieron a Dios, no obedecen al evangelio de nuestro Señor Jesucristo; los cuales sufrirán pena de eterna perdición, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder.” (2ª Tesalonicenses 1:7-9) Creemos en la realidad y personalidad de Satanás, “la serpiente antigua, que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero” (Apocalipsis 12:9) “Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.” (Efesios 6:11-12) “Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar.” (1ª Pedro 5:8) “Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos.” (Apocalipsis 20:10)