Diseminación Peritoneal: Un Problema Pendiente en el Cáncer Gástricoque Vale la Pena Explorer Por Santiago González-Moreno ABREVIADO EDITORIAL El cáncer gástrico es una enfermedad que nace en el peritoneo. El efecto prognostico adverso de la diseminación peritoneal de esta enfermedad es conocido, sin importar si consiste de implantes macroscópicos establecidos o células cancerosas aisladas (detectadas por citología del lavado peritoneal) con carcinomatosis peritoneal no evidente. En ambos casos, las guías de tratamiento actual incluyen medidas paleativas terapéuticas basadas en quimioterapia sistémica. En años recientes se ha progresado mucho en los tratamientos adjuvant y neoadjuvant de cáncer gástrico avanzado localizado, lo que lleva a cambios en la práctica. Existen reportes prometedores del manejo del carcinomatosis peritoneal del cáncer gástrico, ambos por Yonemura et al. en Japón y Glehen et al. en Francia.1,2 Los autores de estos estudios concurren que una resección completa de Spanish translation of the abridged editorial of “Peritoneal Dissemination: A Pending Issue in Gastric Cancer Worth Exploring” by González-Moreno, Ann Surg Oncol 16(12): 3217-3218, 2009. DOI: 10.1245/s10434-009-0709-9 Traducción libre por Nilsa Zayas, Editorial Rx, Inc. Traducción supervisada por Hugo Villar, MD, Annals of Surgical Oncology Latin American Advisory Board. toda la enfermedad visible combinado con quimioterapia intraperitoneal hipertérmica (HIPEC, por sus siglas en inglés), ofrecen la oportunidad de sobrevivir a largo plazo en este escenario adverso. Okabe y sus colegas también se han enfrascado en esta tarea. Su studio añade a las expectativas creadas por la mencionada fase II esfuerzos.3 La estrategia evaluada por Okabe et al. consiste de cirugía radical del tumor primario después de una respuesta adecuada de la enfermedad peritoneal a dos ciclos de quimioterapia sistémica con S-1 y cisplatín. Aquellos pacientes con una respuesta peritoneal completa (46% en promedio) mostraron una ventaja en términos de supervivencia sobre aquellos que no respondieron. La resección del residuo de la enfermedad peritonial (de estar presente) o el tratamiento posterior de la cicatriz peritoneal no se persiguió. Ellos reportaron una impresionante media de 43 meses de sobreviviencia en el grupo de pacientes a los que se les practicó una resección RO, al igual que un número pequeño pero real de pacientes que permanecieron libres de la enfermedad despúes de cuatro años. Los datos del estudio de Okabe se suman a los hallazgos de Yonemura y Glehen al subrayar dos hechos importantes: una limpieza quirúrgica completa de toda la enfermedad macroscópica es un requisito absoluto para mejorar las probabilidades de supervivencia, y mientras más limitada la extensión y volumen de la enfermedad peritoneal, más probabilidades hay de que esta meta pueda ser alcanzada. La estrategia de utilizar quimioterapia por inducción como preparación para la resección radical en cáncer gástrico con origen peritoneal ya fue reportado por Yonemura et al. y es una línea reconocida de investigación en este campo.4 Una citología peritoneal negativa es un requisito absoluto para someter a estos paciente a una cirugía citoreductiva y HIPEC, de acuerdo con el trabajo de Yonemura y sus colegas. El efecto de un pronostico desfavorable en una citología peritoneal positiva, a pesar de la presencia o ausencia de implantes peritoneales 2 (estatus p), se enfatiza de nuevo en el estudio de Okabe y sus colegas por la diferencia dramática en la respuesta a la quimioterapia de inducción entre los casos de citología negativa (82%) y los de citología positiva (37%), y ultimadamente ensobrevida. El mensaje parece ser claro de que las células cancerosas libres en la cavidad peritoneal, si presentes, necesitan ser eliminadas específicamente para hacer una diferencia en el resultado para los pacientes de cáncer gástrico con diseminación peritoneal. La diseminación peritoneal del cáncer gástrico es tratable y en algunos pacientes se puede obtener mejores resultados que aquellos provistos cuando se utiliza quimioterapia sistémica solamente. Nuestros enemigos son las invisibles células cancerosas libres así como la diseminación de los implantes macroscópicos. Nuestras herramientas incluyen cirugía radical y quimioterapia para atacar las superficies peritoneales sin olvidar el control sistémico de la enfermedad. Estudios como el de Okabe y sus colegas, aunque en retrospectiva y pequeños en tamaño, tienen su valor al unirse a otros en la exploración de estrategias nuevas que provean una chispa de esperanza que buscan Sugarbaker y Yonemura en el manejo de esta enfermedad tan difícil. 5 Ellos proveen las bases para diseñar una mayor prospectiva de pruebas. Para continuar en esta línea, una serie prospectiva multicéntrica de la fase II explora la combinación de NIPS seguida por cirugía citoreductiva y HIPEC más la subsecuente quimioterapia sistémica se conduce actualmente por el Grupo Español de Cirugía Peritoneal Oncológica (GECOP [Spanish Peritoneal Surgical Oncology Group]), con el objetivo de hacer mayor progreso en el manejo del semillero peritoneal del cáncer gástrico. REFERENCES 1. Yonemura Y, Kawamura T, Bandou E, et al. Treatment of peritoneal dissemination from gastric cancer by peritonectomy and chemohyperthermic peritoneal perfusion. Br J Surg. 2005;92: 370–5. 3 2. Glehen O, Schreiber V, Cotte R, et al. Cytoreductive surgery and intraperitoneal chemohyperthermia for peritoneal carcinomatosis arising from gastric cancer. Arch Surg. 2004;139:20–6. 3. Okabe H, Ueda S, Obama K, et al. Induction chemotherapy with S-1 plus cisplatin followed by surgery for treatment of gastric cancer with peritoneal dissemination. Ann Surg Oncol. DOI: 10.1245/s10434-009-0706-z. 4. Yonemura Y, Bandou E, Sawa T, et al. Neoadjuvant treatment of gastric cancer with peritoneal dissemination. Eur J Surg Oncol. 2006;32:661–5. 5. Sugarbaker PH, Yonemura Y. Palliation with a glimmer of hope: management of resectable gastric cancer with peritoneal carcinomatosis. Hepatogastroenterology. 2001;48:1238–47. To access the full-length article in English, visit Annals of Surgical Oncology. 4