ADMINISTRACION DE BIENES DEL ESTADO BASES PARA UN PROYECTO DE LEY DE BIENES CAT. OPP/CAG/2007-01 AGOSTO DE 2007 BASES PARA UN PROYECTO DE LEY DE BIENES Autores: AG Angel Rodríguez AG Carlos Rios AG Roberto Tomasino AG Maria Nilda Vallina Este documento fue producido por integrantes del Area Temática “Administración de Bienes del Estado” del Observatorio de Políticas Públicas del Cuerpo de Administradores Gubernamentales de la Jefatura de Gabinete de Ministros en el mes de agosto del año 2007. El Observatorio de Políticas Públicas del Cuerpo de Administradores Gubernamentales inició sus actividades en el año 2002 en jurisdicción de la Coordinación General del C.A.G., sus documentos son publicados en el sitio oficial de la Jefatura de Gabinete de Ministros. Sitio Oficial: www.cag.jgm.gov.ar AG V. Daniel Piemonte Coordinador General Cuerpo de Administradores Gubernamentales AG Guillermo J. Alabés Coordinador Ejecutivo Observatorio de Políticas Públicas INDICE 1. Normas y autoridades de aplicación 1.1. 2. Síntesis Normativa 8 Usucapión 2.1. 7 27 Bienes Públicos y Privados del Estado 27 2.1.1. Bienes Públicos del Estado. 28 2.1.2. Bienes privados del estado 37 2.2. 3. Proyectos de ley 38 La inclusión social y los Bienes del Estado 48 3.1. La exclusión / inclusión social 48 3.2. Exclusión social y vivienda 50 3.3. Recursos: Los inmuebles estatales 51 3.4. Oposición a la inclusión social 52 3.5. Las políticas públicas 55 3.6. El Proyecto de Ley de Bienes 57 4. Estados Unidos y la Administración de tierras fiscales en fideicomisos 60 4.1. Introducción 60 4.2. Educación, Cesión y Expansión 61 4.3. La Ley General de Tierras de 1785 y la Ley del Noroeste de 1787 63 4.4. El surgimiento de tierras fiscales en fideicomiso para escuelas 65 4.5. Consolidación de la autoridad estadual sobre las tierras fiscales cedidas en fideicomiso para escuelas públicas 4.6. específicos 66 Expansión del proceso de cesión de tierras fiscales en fideicomiso con fines 67 4.7. Cambios de reglas en la administración y ventas de tierras fiscales en fideicomiso 69 4.8. Lecciones dadas por la historia CAT.OPP/CAG/2007-01 72 2 4.9. 4.10. Situación Actual 73 Conclusiones 79 CAT.OPP/CAG/2007-01 3 Introducción El presente Informe tiene dos objetivos primordiales. Primero, la exposición de antecedentes, causas y hechos que, a nuestro criterio, hacen necesaria e impostergable una puesta al día de las políticas en materia del patrimonio estatal constituido por los bienes muebles e inmuebles del Estado Nacional. Segundo, como complementación y aporte a la formulación, diseño y ejecución de políticas públicas, poner a disposición de las autoridades del PEN un Proyecto de Ley de Bienes Muebles e Inmuebles del Estado Nacional. La política de bienes, se entiende estrechamente interrelacionada con las políticas de educación, salud y vivienda, entre otras, comprensivas de las demandas sociales actuales más relevantes. Ambos objetivos se desarrollaran en sendos documentos, el primero de los cuales tendrá las bases para la construcción del Proyecto de Ley, a modo de una particular exposición de motivos y antecedentes, con introducción de conceptos jurídicos, técnicos y administrativos, complementados con las necesidades incontrastables que muestra la realidad social. Con este primer documento concluye la etapa de observación propiamente dicha que complementaremos con la segunda parte: el documento con el texto del Proyecto de Ley. La Ley Nº 24.156, promulgada el 26 de octubre de 1992, generó disposiciones generales para la administración financiera gubernamental y los sistemas: presupuestario, de crédito público, de tesorería, de contabilidad gubernamental y de control interno y externo. Esta Ley no derogó el Capítulo V “De la Gestión de los bienes del Estado” del Decreto Ley 23.354/1956, previendo para el futuro agregar los sistemas de contrataciones y de administración de bienes. De acuerdo con el Art. 135 de la Ley 24.156, en su momento el PEN presentó al Congreso Nacional un proyecto de Ley de Bienes cuyo trámite caducó en 1996, siendo nuevamente presentado en mayo de ese año, perdiendo estado parlamentario durante el año 1997. Simultáneamente, algunos legisladores, presentaron proyectos para la creación del Sistema de Disposición y Administración de Bienes del Estado Nacional. Entre ellos la Senadora Cristina Fernández de Kirchner, presentó en 1996 un proyecto, que, al igual que los demás perdió estado parlamentario. Definimos al Sistema de Disposición y Administración de Bienes del Estado Nacional como el conjunto de funciones, normas, organismos, sistema de información, recursos y procedimientos que tienen por objeto ingresar, registrar, asignar, conservar, mantener, CAT.OPP/CAG/2007-01 4 proteger, reasignar, dar de baja o disponer de los bienes que integran el patrimonio del Estado Nacional. La organización administrativa del Sistema tiene fundamento metodológico en la centralización de las políticas, normas y procedimientos y en el control de su cumplimiento y en la descentralización operativa. Merecerá atención el Sistema de Información que deberá crearse como un eficaz instrumento de apoyo para la gestión de los bienes estatales, atendiendo la incorporación de tecnologías de información geográfica y la convalidación de los datos a través de la comparación con otras fuentes externas. Será necesario determinar el uso y destino a otorgar a los bienes, teniendo en cuenta como principios rectores la preservación del patrimonio inmobiliario; la puesta en valor de los inmuebles con foco en proyectos de desarrollo local y regional sustentables; la incorporación del valor social y la afectación de los mismos al desarrollo y ejecución de distintas políticas públicas como salud, educación, vivienda, transporte, producción, administración, etc. Si bien hasta el presente los actos y operaciones relacionadas con el patrimonio mobiliario e inmobiliario estatal fueron regulados mediante disposiciones contenidas en diversos ordenamientos, esta fragmentación normativa no es compatible con una administración de los bienes del estado nacional acorde con las tecnologías administrativas disponibles y las demandas actuales de la sociedad. Según el Art. 5º de la Ley Nº 24156, los sistemas integrantes de la administración financiera y control estarán a cargo de un órgano rector. Como uno de los sistemas mencionados por la Ley como faltantes, pero que deben integrar el conjunto, es el de bienes, con el mismo criterio, el sistema de bienes debe estar a cargo de un órgano rector, cuyas atribuciones hoy las tiene el ORGANISMO NACIONAL DE ADMINISTRACIÓN DE BIENES (ONABE). La administración de los bienes estatales debe incluir también los programas de racionalización de espacios físicos, atendiendo las condiciones de trabajo del personal y la optimización de la prestación del servicio al ciudadano. En el Capítulo Primero realizamos la revisión de las disposiciones jurídicas aplicables al registro, administración y disposición de los bienes muebles e inmuebles de propiedad del Estado Nacional. Al mismo tiempo también fueron consideradas las atribuciones y funciones que, en los últimos años fueron teniendo los distintos organismos cuya misión fue la administración de los bienes en sentido amplio. Puede reconocerse que, aunque sin ser el producto de una política específica sobre qué hacer con los bienes, a partir de 2003 en los hechos se produjo un cambio de paradigma en la administración de los bienes ociosos del Estado Nacional. Del mandato de CAT.OPP/CAG/2007-01 5 privatizar y desprenderse de todos los bienes posibles de la década pasada, pasamos a un nuevo imperativo que se basa en la gestión integral de ellos, como quedó expresado en distintos documentos emitidos por el ONABE. No obstante lo plausible del objetivo de esta gestión integral, el ONABE se encontró con distintos escollos, tanto de índole interno como externo, que limitaron su intención primigenia. Particularmente, en cuanto a la preservación del patrimonio, en el Capítulo Segundo tratamos la adquisición de bienes de propiedad del Estado Nacional, los estados provinciales o los estados municipales por parte de personas físicas o jurídicas particulares mediante prescripción adquisitiva o usucapión. En el Capítulo Tercero incursionamos en el uso de los bienes inmuebles estatales como uno de los tantos recursos que se requieren para resolver en nuestra sociedad el problema de la exclusión social. En situaciones variadas y muchas veces limítrofes con las conductas lesivas, hoy muchos de los inmuebles del estado, considerados ociosos y por ende administrados por el ONABE, se encuentran intrusados o en vías de serlo. Estas intrusiones avanzan también, indistintamente, sobre el patrimonio de los privados, generando conflictividad social y la aplicación de diversidad de criterios desde la órbita estatal. Así, mientras que para unos es necesario proteger y mantener los bienes hasta que se les otorgue un destino adecuado, para otros estamentos del Estado, a quienes intrusan inmuebles por necesidad de contar con un espacio vital se les debe proveer de ese u otro lugar alternativo de modo de respetar su dignidad y sus derechos. Esta colisión que podríamos atribuir a situaciones de emergencia social, también tiene entre sus causas la falta de políticas en materia del uso social de los bienes ociosos del Estado y en arraigadas costumbres de la “micropolítica”. Aún sin que se produzca una clara conducta lesiva o esta sea tolerada, la ocupación de tierras e inmuebles repentina y subrepticia termina provocando múltiples perjuicios para las propias familias intrusas ya que generan consecuencias como la degradación del ambiente y la imposibilidad de acceso a la infraestructura. Por último, en el Capítulo Cuarto veremos la creación de fideicomisos específicos con tierras fiscales estatales en los Estados Unidos de Norteamérica, en cuyos estados utilizaron la venta o el alquiler de tierras como una fuente de recursos para la educación pública. CAT.OPP/CAG/2007-01 6 Capítulo Primero 1. Normas1 y autoridades de aplicación La Ley Nº 24.156, promulgada el 26 de octubre de 1992, generó disposiciones generales para la administración financiera gubernamental y los sistemas: presupuestario, de crédito público, de tesorería, de contabilidad gubernamental, los cuales deben estar interrelacionados, y de control interno y externo. Según el Art. 5º de esta Ley, cada uno de estos sistemas estará a cargo de un órgano rector, que dependerá directamente del órgano que ejerza la coordinación de todos ellos. Este órgano coordinador, según el Art. 6º será establecido por el Poder Ejecutivo Nacional (PEN) y tendrá la misión de dirigir y supervisar la implantación y mantenimiento de los sistemas. El Art. 135 de la mencionada Ley determinó que el PEN, debía presentar al Congreso Nacional un proyecto de ley que regule el sistema de contrataciones del Estado y otro que organice la administración de bienes del Estado. Considerando que la Administración Financiera comprende el conjunto de sistemas, órganos, normas y procedimientos administrativos que hacen posible la obtención de los recursos públicos y su aplicación para el cumplimiento de los objetivos del Estado, mediante la Ley 24.156 no se pudo derogar el Capítulo V “De la Gestión de los bienes del Estado” del Decreto Ley 23.354/1956 conocido como la Ley de Contabilidad. De este modo, a la mencionada interrelación entre los sistemas: presupuestario, de crédito público, de tesorería y de contabilidad gubernamental deben agregarse los sistemas de contrataciones y de administración de bienes, no legislados por la Ley 24.156. En cumplimiento del citado Art. 135, el PEN presentó al Congreso Nacional un proyecto de Ley cuyo trámite caducó en 1996, siendo nuevamente presentado en mayo de 1996, perdiendo estado parlamentario durante el año 1997. Trabajando sobre el mismo proyecto de ley como antecedente inmediato, los Senadores Julio San Millán, Carlos Alberto Verna y Ricardo Branda (todos PJ) presentaron nuevamente el proyecto el 27 de marzo de 19962, incorporando algunas de las modificaciones que surgieron de la Comisión de Asuntos Administrativos y Municipales. 1 Las normas citadas en este Capítulo pueden verse en www.infoleg.gov.ar 2 Exp. Senado - 223-S-96. Ruta: Asuntos Administrativos y Municipales; Legislación General. CAT.OPP/CAG/2007-01 7 Con el mismo proyecto del Ejecutivo como antecedente, la Senadora Cristina Fernández de Kirchner presentó un nuevo proyecto el 10 de abril de 1996, el cual incluía una serie de modificaciones, algunas debido tanto a práctica legislativa como a semántica jurídica, junto con otras necesarias para dotar de coherencia al sistema3. El 22 de abril de 1998 tomó estado parlamentario el proyecto de ley presentado por los diputados: Raquel Roberti, Roberto D’Elía, Atilio Viglione y Juan Carlos Passo (UCR)4. Por otra parte el Estado Nacional contó hasta 2003, con la Ley 24.146 que permitía a los gobiernos locales solicitar tierras ociosas (con fines no comerciales) a cambio de condonar tasas e impuestos y pagar sobre el excedente de $300.000.- si el monto del inmueble superaba este valor. A la fecha no existe normativa que la reemplace y se encuentran en tratamiento las solicitudes de gobiernos locales que por diversas razones aún no concluyeron su trámite. Se transcribe a continuación la nómina de las normas consideradas más importantes que constituyen el marco jurídico que, directa o indirectamente, permite el funcionamiento de la administración de los bienes del Estado Nacional. De acuerdo con la pertinencia y/o relevancia que cada una de las normas citadas o parte de ellas, tienen en el contexto de la administración de los bienes, realizamos las transcripciones, descripciones y comentarios que consideramos que aportan a la comprensión del marco jurídico disponible así como a los resultados de su aplicación. 1.1. Síntesis Normativa Decreto Ley 23.354/1956 LEY DE CONTABILIDAD Como ya dijimos, el Capítulo V de esta norma no fue derogado por la citada LEY 24.156. En el PEN, la jurisdicción encargada de la administración de los bienes no afectados al servicio fue el entonces MINISTERIO DE HACIENDA (hoy es el ONABE). Los afectados a un servicio determinado se consideraban concedidos gratuitamente a la respectiva jurisdicción mientras se mantuvieran en uso. Las dependencias usuarias debían prever las partidas presupuestarias necesarias para atender los gastos de mantenimiento y conservación. 3 4 Exp. Sen: 0297-S-96. Ruta: Asuntos Administrativos y Municipales; Legislación General. Exp. Dip: 6258-D-97. Ruta: Legislación General, Obras Públicas y Hacienda. CAT.OPP/CAG/2007-01 8 Por esta Ley el PEN puede conceder el uso precario y gratuito de inmuebles afectados a su jurisdicción y que por razones circunstanciales no tengan destino útil, cuando le sean requeridos por organismos públicos o por instituciones privadas, legalmente constituidas en el país, para el desarrollo de sus actividades de interés general. Toda transferencia de dominio o cambio de destino de los bienes del Estado deberá comunicarse a la CONTADURÍA GENERAL, acompañando los antecedentes que permitan efectuar las pertinentes registraciones, en la forma y oportunidad que determine el PEN. LEY 19.076 Año 1971 TRANSFERENCIAS DE INMUEBLES Esta Ley otorga el marco jurídico para la transferencia a titulo gratuito u oneroso de superficies ubicadas en zonas afectadas a la explotación ferroviaria con cargo de construir obras fijas para el almacenamiento de granos (silos), bajo ciertas condiciones de permanencia de las instalaciones y de transporte de productos por ferrocarril. LEY 21.626 Año 1977 TRIBUNAL DE TASACIONES DE LA NACIÓN Define al TRIBUNAL DE TASACIONES DE LA NACIÓN como ente autárquico en jurisdicción de la SECRETARÍA DE TRANSPORTE Y OBRAS PÚBLICAS DEL MINISTERIO DE ECONOMÍA (hoy depende de la SECRETARÍA DE OBRAS PÚBLICAS), entre cuyas funciones está la de tasar los inmuebles que el Gobierno Nacional, entes descentralizados, autárquicos y empresas del Estado proyecten adquirir o enajenar. DECRETO Nº 2.045/1980 La SECRETARIA DE HACIENDA, dependiente del MINISTERIO DE ECONOMIA, por intermedio de la ADMINISTRACION GENERAL DE INMUEBLES FISCALES, intervendrá, obligatoriamente, en toda medida de gobierno que implique la celebración, ya sea a título oneroso o gratuito, de los siguientes actos con relación a inmuebles estatales: a) Adquisición o enajenación. b) Constitución, transferencia, modificación o extinción de otros derechos reales o personales. LEY 22.423 CAT.OPP/CAG/2007-01 9 Año 1981 VENTA DE INMUEBLES DEL ESTADO Faculta al PEN a vender los inmuebles del dominio privado del Estado Nacional que no sean necesarios para el cumplimiento de sus funciones, por intermedio de la SECRETARÍA DE HACIENDA dependiente del MINISTERIO DE ECONOMÍA, la cual es el organismo centralizador de la gestión del patrimonio inmobiliario estatal (hoy es el ONABE) y tendrá facultades para disponer, tramitar, aprobar y perfeccionar las enajenaciones respectivas. Autoriza la venta directa de inmuebles cuando sus ocupantes los utilicen como vivienda, comercio, industria o para la prestación de servicios públicos a los propietarios de inmuebles linderos con respecto a predios estatales que, encontrándose en zona urbana, su configuración catastral no resulte reglamentaria o hallándose situados en zona rural sus dimensiones no resulten aptas para la explotación económica que se desarrolle predominantemente en el lugar; y a las cooperativas de vivienda u otras entidades sin fines de lucro, que los adquieran con el objeto de construir viviendas para sus asociados. Estableció además que las entidades autárquicas nacionales, empresas o sociedades del Estado, encomendarán a la SECRETARÍA DE HACIENDA (hoy al ONABE), la venta de los inmuebles a ellas afectados que resulten innecesarios para su gestión, la cual imputará los importes que recaudare por dicho concepto a los recursos de la entidad con destino a inversiones patrimoniales. Este régimen será de aplicación optativa para aquellas entidades que posean, por sus estatutos, capacidad para la realización de enajenaciónes inmobiliarias. Por otra parte, con carácter previo a toda tramitación tendiente a la adquisición de inmuebles, los mencionados organismos deberán requerir información a la SECRETARÍA DE ESTADO DE HACIENDA (hoy al ONABE), sobre la existencia de inmuebles disponibles. DECRETO Nº 101/1985 Facultó al Sr. Ministro de Economía a realizar concesiones de uso precario y gratuito de inmuebles fiscales afectados a la jurisdicción del PEN que por razones circunstanciales no tengan destino útil, cuando le sean requeridos por organismos públicos o por instituciones privadas, para el desarrollo de sus actividades de interés general (artículo 53 de la Ley de Contabilidad -DECRETO LEY 23.354/1956-). Hoy esta facultad la tiene el ONABE. CAT.OPP/CAG/2007-01 10 LEY 23.697 Año 1989 LEY DE EMERGENCIA ECONOMICA. VENTA DE INMUEBLES INNECESARIOS En el Capítulo XXVI, artículos 60; 61 y 62, establece que el PEN centralizará, coordinará e impulsará las acciones tendientes a agilizar las ventas de los inmuebles del dominio privado del Estado Nacional, que no sean necesarios para el cumplimiento de sus funciones o gestión. También determina que las entidades autárquicas nacionales, empresas y sociedades del Estado, encomendarán la venta de los inmuebles a ellas afectados, que resulten innecesarios para su gestión a la SECRETARÍA DE HACIENDA, y que, con carácter previo a toda tramitación tendiente a la adquisición de inmuebles, deberán requerir información a esa Secretaría sobre la existencia de bienes disponibles DECRETO Nº 731/1990 INSTITUTO MOVILIZADOR DE ACTIVOS Por este decreto se creó el INSTITUTO MOVILIZADOR DE ACTIVOS, con amplias facultades, entre otras, para vender o realizar bienes muebles e inmuebles pertenecientes a la Administración Pública Nacional. La ADMINISTRACIÓN GENERAL DE INMUEBLES FISCALES pasó a depender del Instituto DECRETO Nº 1.757/1990 Es un Decreto que legisla sobre una multiplicidad de temas, entre los cuales podemos citar la racionalización del gasto público y la reforma administrativa, incluyendo la regulación de la venta de bienes del Estado. Derogó el régimen aprobado por el DECRETO N° 731/1990 en las partes destinadas a regular la venta de los bienes innecesarios del Estado Nacional y, sin perjuicio de ello asignó al MINISTERIO DE OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS competencia exclusiva para disponer la venta de bienes muebles y rezago y de bienes inmuebles que no resultan indispensables para la gestión del servicio o actividad empresarial. DECRETO Nº 2.154/1990 VENTA DIRECTA DE INMUEBLES Estableció que el PEN podrá disponer la venta directa de los inmuebles del dominio privado del Estado a sus actuales ocupantes o a las formas asociativas que los representen. CAT.OPP/CAG/2007-01 11 LEY 23.967 Año 1991 TIERRAS FISCALES. TRANSFERENCIA A PROVINCIAS Establece la transferencia de tierras fiscales a los estados provinciales, para su posterior venta a los actuales ocupantes o para la incorporación a los planes provinciales de vivienda social para familias de recursos insuficientes. Para coordinar el cumplimiento de esta Ley entre el Congreso de la Nación, el PEN y los estados provinciales, se crea una Comisión Bicameral. LEY 23.985 Año 1991 FUERZAS ARMADAS. BIENES INMUEBLES Deberá elevarse anualmente al Ministro de Defensa un informe en el que se detallarán cuáles son los inmuebles que tengan asignados en uso las Fuerzas Armadas que resulten innecesarios o prescindibles para el servicio, pudiendo sugerirse que sean objeto de venta, permuta, locación, concesión de uso u otra forma aplicable de contratación. Luego, la LEY 24.159 extendió estas disposiciones a Gendarmería Nacional y Prefectura Naval Argentina. Asimismo, por LEY 25.393 del año 2001, con carácter excepcional podrán efectuarse contrataciones directas cuando el adquirente de inmuebles fuera una provincia, un municipio, una comuna o un organismo centralizado o descentralizado del Estado Nacional. En este caso se deberá establecer un plazo no inferior a los diez (10) años, a contar desde que se realice la escritura traslativa del dominio a nombre del comprador, plazo en el cual el bien no podrá ser destinado a un fin distinto al indicado por el comprador en los documentos de venta. LEY Nº 24.045 Año 1991 REFORMA DEL ESTADO Se creó por esta Ley una cuenta especial en jurisdicción del MINISTERIO DE DEFENSA con el nombre de "Producido de enajenaciones, privatizaciones, rentas y distribución de utilidades de las empresas del área del MINISTERIO DE DEFENSA". En ella se depositará el total de los fondos provenientes de las privatizaciones y enajenaciones de bienes que realice este Ministerio, los cuales serán destinados a atender las necesidades de la reestructuración de las Fuerzas Armadas y de Seguridad cuando estas últimas actúen en CAT.OPP/CAG/2007-01 12 jurisdicción de dicho Ministerio, y del sector de producción para la defensa, no pudiendo ser utilizados para atender gastos corrientes. DECRETO Nº 407/1991 EMERGENCIA ECONOMICA. VENTA DE INMUEBLES FISCALES Ordena a la ADMINISTRACION GENERAL DE INMUEBLES FISCALES que confeccione una nómina de inmuebles desafectados total o parcialmente del servicio y la formulación de un cronograma de ventas inmobiliarias. El plan de ventas debía ejecutarse en un plazo máximo de 90 días; los inmuebles no desafectedos sin razón justificada se tendrían por automáticamente encomendados para su venta a la ADMINISTRACION GENERAL DE INMUEBLES FISCALES en los términos del Artículo 62 de la LEY 23.697, de Emergencia Económica. El COMITÉ DE RACIONALIZACION DEL GASTO PUBLICO creado por DECRETO Nº 1.757/1990 tenía a su cargo la fiscalización de la gestión inmobiliaria enajenatoria. Quedó facultado también para propiciar la disponibilidad automática de bienes raíces cuyas características o configuración no se correspondieran funcionalmente con el destino que le atribuyese el organismo o entidad de revista. El Art. 4º. Establecía : .....”Podrá disponerse la venta de inmuebles en el estado de conservación y ocupación en que se encuentren, y asimismo, cuando adolecieran de deficiencias en su título, configuración catastral o edilicia o inscripción registral, y aun cuando puedan considerarse potencial o actualmente litigiosos en su aspecto dominial, ocupacional o constructivo. En estos casos será condición de venta, la cual deberá ser debidamente publicitada, que el saneamiento dominial, catastral, constructivo, registral o judicial, deberá ser tomado a cargo por quienes resultaren sus adquirentes, con renuncia expresa por su parte a la garantía de evicción y por vicios redhibitorios.” ... Por Art. 11. determinó que mantendría vigencia el régimen normativo sobre ventas de bienes inmuebles innecesarios para el Estado Nacional existente al dictarse el DECRETO Nº 731/1990. Como se desprende de la normativa, la venta de inmuebles formó parte importante en la emergencia para mejorar el financiamiento del Estado. Aunque es dudoso que puedan obtenerse buenos precios de venta cuando se trata de ofrecer todo al mismo tiempo y se incluyen hasta los inmuebles no saneados dominialmente o sujetos a procesos judiciales. No obstante, demuestra la necesidad de la época por obtener recursos financieros. DECRETO Nº 846/1991 CAT.OPP/CAG/2007-01 13 Crea, en el ámbito de la Presidencia de la Nación, la COMISION DE TIERRAS FISCALES – PROGRAMA “ARRAIGO”, cuyas funciones, entre otras, serán: realizar el relevamiento nacional de las tierras fiscales ocupadas por asentamientos irregulares y coordinar su accionar con los entes nacionales, provinciales y/o municipales competentes en la materia. DECRETO Nº 2.137/1991 Según este Decreto, las funciones de fiscalización de la gestión inmobiliaria enajenatoria que ejercía el COMITÉ DE RACIONALIZACION DEL GASTO PUBLICO, creado por el DECRETO Nº 1757/1990 serían ejercidas por un nuevo órgano denominado: COMISION DE VENTA DE INMUEBLES ESTATALES, dependiente del MINISTERIO DE ECONOMIA OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS RESOLUCIÓN Nº 596/1991 FERROCARRILES ARGENTINOS Dispuso dejar sin efecto todas las reservas de inmuebles de propiedad ferroviaria afectados a planes de obras, que a la fecha no hayan tenido efectivo principio de ejecución. RESOLUCIÓN Nº 912/1991 MINISTERIO DE ECONOMÍA Y OBRAS Y SERVICIOS PÚBLICOS Establece que cuando resultare conveniente contar con la tasación de un mismo inmueble por parte de dos o más órganos tasadores habilitados a ese fin de acuerdo a las prescripciones del DECRETO Nº 407/1991, el precio base para el remate o licitación pública se fijará promediando los valores emergentes de los respectivos informes valuatorios. RESOLUCIÓN Nº 558/1992. MINISTERIO DE ECONOMÍA Y OBRAS Y SERVICIOS PÚBLICOS (MEYOSP) Resuelve que, según lo establecido en los DECRETOS Nº. 407/1991 y 2.137/1991, en las ventas inmobiliarias por contratación directa, la resolución aprobatoria previa y fundada que emita el MINISTERIO DE ECONOMÍA Y OBRAS Y SERVICIOS PÚBLICOS o los organismos en que se hubiere delegado la función aprobatoria hará innecesario emitir una nueva resolución aprobatoria, una vez concretada la operación de venta. DECRETO Nº 591/1992 REGLAMENTACIÓN LEY 23.697 CAT.OPP/CAG/2007-01 14 Reglamentó el Art. 1º de la LEY 23.697 para la transferencia de tierras del Estado Nacional destinadas al desarrollo de planes y programas para la radicación definitiva y la regularización dominial a favor de actuales ocupantes y su grupo familiar. El organismo ejecutor fue la COMISION DE TIERRAS FISCALES NACIONALES - PROGRAMA ARRAIGO - RESOLUCIÓN 1.062/1992 MEYOSP Resuelve que la COMISION DE VENTA DE INMUEBLES ESTATALES tendrá atribuciones para representar a FERROCARRILES ARGENTINOS y a FERROCARRILES METROPOLITRANOS S.A. para gestionar la venta de sus inmuebles. LEY N° 24.146 Año 1992 EMERGENCIA ECONOMICA Esta Ley fue modificada por las LEYES 24.383 del año 1994 y 24.768 de 1996. Estableció que el PEN debía disponer, a título gratuito, la transferencia de inmuebles innecesarios a los gobiernos provinciales, municipales y comunales o a las entidades de bien público que lo soliciten para la ejecución de proyectos de interés social y comunitario. Cuando el valor de los inmuebles supere $300.000, la diferencia podrá ser abonada por los beneficiarios. Los bienes inmuebles que estuvieren destinados a vivienda del personal u ocupados por familias de escasos recursos, podían ser transferidos a sus actuales ocupantes en forma onerosa, con facilidades financieras. Estas transferencias únicamente podían ser dispuestas en todos los casos con cargo a ser destinados los inmuebles por sus beneficiarios a programas de rehabilitación y desarrollo urbano, infraestructura de servicios, construcción de viviendas de interés social para familias que las utilicen con carácter de vivienda única y permanente y no poseyeran otros inmuebles, la habilitación de parques o plazas públicas, o de unidades educacionales, culturales, asistenciales o sanitarias, o al desarrollo de actividades deportivas, emprendimientos productivos generados o administrados por municipios, provincias o la Ciudad de Buenos Aires. La autoridad de aplicación de esta ley, fue, inicialmente, la SUBSECRETARÍA DE ADMINISTRACIÓN DE BIENES, dependiente del MINISTERIO DE ECONOMÍA Y OBRAS Y SERVICIOS PÚBLICOS. CAT.OPP/CAG/2007-01 15 DECRETO Nº 776/93 Reglamentó la LEY 24.146, entre otras cuestiones, en cuanto a los requisitos que debían cumplir las familias de bajos recursos y el personal de los organismos que ocupen inmuebles fiscales; la obligatoriedad de aprobar mediante leyes provinciales u ordenanzas municipales las partidas presupuestarias para la ejecución de los proyectos sobre los inmuebles recibidos; y: a) condonar la totalidad de la deuda que por impuestos, gravámenes, tasas, mejoras o contribuciones tuviere el ente propietario del inmueble que se transfiere y, b) conceder a los inmuebles de propiedad de esos entes una zonificación urbana igual o mejor a la que tuvieran los inmuebles que lo circundan. RESOLUCIÓN 825/93 FERROCARRILES ARGENTINOS Permite ceder el uso de inmuebles no entregados a los concesionarios ferroviarios, a las provincias y municipios, a cambio de un canon simbólico. Los inmuebles deberán destinarse a actividades sin fines de lucro. Para el caso de que particulares soliciten mantener y conservar estos inmuebles, podrá otorgarse permiso de uso pero como tenencia onerosa. DECRETO 1.085/94 Determina que “la COMISIÓN DE TIERRAS FISCALES NACIONALES PROGRAMA ARRAIGO tendrá intervención y participación en la tramitación de las solicitudes de inmuebles de propiedad del Estado nacional, desocupados e innecesarios para su gestión, que formulen las provincias, municipios y comunas, para destinarlos a la construcción de viviendas para familias de escasos recursos que fueran ocupantes de otros inmuebles del Estado Nacional”. LEY 24.364 Año 1994 FERROCARRIL TRANSPATAGÓNICO Por esta Ley se encomendó al Estado Nacional, realizar un estudio de prefactibilidad para la construcción y funcionamiento bajo el régimen de concesión, de una línea férrea en la región patagónica, que se interconectará con la red ferroviaria existente al norte, noroeste y nordeste de la República y que atravesando las Provincias de Río Negro, Chubut y Santa Cruz llegue a la Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, CAT.OPP/CAG/2007-01 16 concretando la vinculación física de ésta con el continente, a través del Estrecho de Magallanes, acorde a lo determinado por la LEY 23.212. LEY Nº 24.374 Año 1994 INMUEBLES Esta norma establece un régimen de regularización dominial de inmuebles urbanos que tengan como destino principal el de casa habitación única y permanente, en favor de ocupantes que acrediten la posesión pública, pacífica y continua durante 3 años, con anterioridad al 1/1/1992. DECRETO 1.737/94 REESTRUCTURACION FERROVIARIA Instruyó a la Empresa Ferrocarriles Argentinos para que proceda a la relocalización de las instalaciones y tendido ferroviario de la denominada Terminal Retiro. Para los inmuebles que como consecuencia de la privatización y racionalización del servicio quedasen desafectados, la LEY Nº 23.697 dispuso su enajenación. El artículo 10 del DECRETO Nº 1.143/1991 encomendó al MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS en su carácter de autoridad de aplicación la creación de un fondo integrado con los recursos emergentes de los bienes inmuebles y otros activos de las empresas que actualmente prestan los servicios ferroviarios de pasajeros, para aplicar al pago de los subsidios que se convinieren con los concesionarios. Así, el PEN mantiene como objetivo básico que las obras de restructuración ferroviaria no impliquen una erogación para el Tesoro de la Nación. El DECRETO Nº 602/1992 encomendó a la COMISION VENTA INMUEBLES ESTATALES la confección de un plan maestro de urbanización y propuso optimizar los ingresos provenientes de la venta o concesión de los inmuebles propiedad de la Nación en el área en cuestión, delegándole la competencia para vender o concesionar los inmuebles resultantes del parcelamiento, mediante licitación o subasta pública. La Comisión recibió asistencia técnica para el diseño de un plan de desarrollo, previo concurso de antecedentes realizado con la participación del BANCO INTERNACIONAL DE RECONSTRUCCION Y FOMENTO (BIRF), cuyo resultado fue una propuesta de modificación de la infraestructura ferroviaria existente, tendiente a reubicar el tendido ferroviario con el fin de modernizar y racionalizar la prestación de los servicios, relocalizando el tendido de vías y unificando las terminales de pasajeros, con miras a facilitar la transferencia entre los distintos modos de transporte, la reducción de la contaminación ambiental y una elevación de la estética y del CAT.OPP/CAG/2007-01 17 nivel de vida de los habitantes, la generación de una amplia zona de parques públicos y la refuncionalización de la antigua estación del Ferrocarril Bartolomé Mitre, que se destinaría a usos culturales y recreativos. Estableció pautas de zonificación y uso del suelo, destacándose el destino del 65 % del área desafectada a tierra libre de uso público y 35 % al área privada y encomendó el estudio y la adopción de soluciones inmediatas destinadas a mejorar la circulación vial en la Avenida del Libertador General San Martín entre las Avenidas Ramos Mejía y Callao. Para el transporte de cargas, recomendó trasladar las operaciones fuera de áreas urbanas de alta densidad y el rediseño de la infraestructura, para posibilitar un mejor acceso al puerto. Luego de 13 años, las soluciones para el área están sujetas a otras variables como el problemático acceso al Puerto de Buenos Aires de vehículos pesados y el gran avance de las construcciones de la denominada Villa 31 hacia el noroeste. DECRETO 1.885/94 Reglamenta la LEY 24.374, determinando que las viviendas comprendidas en el régimen de la Ley deben reunir las características contempladas para viviendas económicas a los efectos de la aplicación de planes originados en el Fondo Nacional de la Vivienda, atendiendo a la composición del grupo familiar conviviente. DECRETO 1.383/96 Crea el Ente Nacional de Administración de Bienes Ferroviarios (ENABIEF), como ente autárquico en el ámbito de la SECRETARIA DE OBRAS PUBLICAS Y TRANSPORTE, al que le transfiere, en afectación, los bienes ferroviarios no concesionados; le otorga las facultades dadas por las LEYES 24.146 y 24.383 y la competencia sobre el área Retiro que el DECRETO Nº 602 otorgara a la COMISION VENTA INMUEBLES ESTATALES. DECRETO 1.450/96 MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS Aprobó la estructura organizativa de la Administración Central del citado Departamento de Estado, cuya DIRECCION NACIONAL DE BIENES DEL ESTADO, dependiente de la SECRETARIA DE OBRAS PUBLICAS Y TRANSPORTE debía coordinar las políticas, normas y procedimientos relacionadas con la administración de los bienes físicos del Estado Nacional, mantener el control permanente de la actividad inmobiliaria estatal, incluyendo la implementación del Inventario General de Bienes del Estado Nacional, CAT.OPP/CAG/2007-01 18 aplicar la LEY N° 24.146 y su modificatoria LEY N° 24.383 y proponer la transferencia de inmuebles fiscales de acuerdo con lo establecido en ambas normas. DECISIÓN ADMINISTRATIVA Nº 84/1996 Crea en el ámbito de la DIRECCION NACIONAL DE BIENES DEL ESTADO de la SUBSECRETARIA DE ADMINISTRACION DE BIENES de la SECRETARIA DE HACIENDA del MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS, el Registro Nacional de Bienes Inmuebles Privados del ESTADO NACIONAL. El Programa de Reforma de la Administración Financiera Gubernamental fue diseñado con el objetivo de lograr que la gestión del MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS se realice, en lo que respecta a la administración financiera del Estado, con economicidad, eficiencia y efectividad, generando información oportuna y confiable para la toma de decisiones de gobierno, y realizando de acuerdo a ello la gestión de los recursos públicos en un marco de absoluta transparencia. Este Programa se basa en la creación de diversos sistemas de administración interrelacionados y en los conceptos de centralización normativa y descentralización operativa definidos en él y cuyo Capítulo VII establece las bases para la creación del Sistema de Administración de Bienes del Estado Nacional (SABEN), constituido por el conjunto de principios, normas, recursos y procedimientos que se aplicarán a las operaciones administrativas relacionadas con la adquisición, administración y disposición de los bienes físicos del Estado. La toma del Registro dispuesta en esta Decisión Administrativa se debía realizar en distintas etapas: a) Etapa 1 - Reconocimiento general del universo de Bienes Inmuebles Privados del Estado Nacional b) Etapa 2 - Relevamiento integral de la totalidad de los Bienes Inmuebles Privados del Estado Nacional incorporados a la Etapa 1. c) Etapa 3 - Programa de valorización del patrimonio inmobiliario fiscal incorporado al Registro Nacional de Bienes Inmuebles Privados La CONTADURIA GENERAL DE LA NACION establecería los criterios de valuación y amortización del patrimonio físico del ESTADO NACIONAL de acuerdo con los contenidos de la Etapa 3. No obstante, la DECISIÓN ADMINISTRATIVA Nº 327/1998 canceló la Etapa 3 CAT.OPP/CAG/2007-01 19 LEY 24.855 Año 1997 FONDO FIDUCIARIO FEDERAL DE INFRAESTRUCTURA REGIONAL Entre sus objetivos expresa la generación de la infraestructura económica y social necesaria y prioritaria para la integración territorial, el desarrollo regional y el intercambio comercial y la mejora de oportunidades y condiciones de acceso a la vivienda en los sectores de ingresos medios y medios bajos de la población. En cuanto a las obras, una de las prioridades del fondo fiduciario es la construcción, mejoramiento o adecuación de la infraestructura ferroviaria. MINISTERIO DE DEFENSA DECRETO 719/1997 AutorIza al MINISTERIO DE DEFENSA a efectuar la enajenación de los bienes inmuebles oportunamente asignados al mismo, destinando su producido conforme las previsiones de la LEY 24.045 a la reestructuración de las Fuerzas Armadas. DECRETO Nº 1.090/1997 MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS Instruyó a la SECRETARIA DE TRANSPORTE para desafectar, total o parcialmente, del uso ferroviario las playas de cargas ubicadas dentro del ejido urbano de la Ciudad de Buenos Aires y de otros grandes centros urbanos del país, en tanto no tengan uso operativo justificado, transfiriéndolos al ENTE NACIONAL DE ADMINISTRACION DE BIENES FERROVIARIOS (ENABIEF) para destinarlos a la construcción de centros de trasbordo multimodales de pasajeros; la construcción de parques y plazas públicas y la construcción de viviendas y explotación comercial de locales. Estas desafectaciones se convalidaron por DECRETO Nº 837/1998 LEY 25.069 Año 1998 Regula la transferencia de los inmuebles de propiedad del Estado Nacional afectados al Ente Nacional de Administración de Bienes Ferroviarios (ENABIEF) a los acopiadores y productores de cereales, oleaginosas y cualquier otra especie agrícola de características similares, cuyas inversiones se hayan ejecutado dentro del marco de la LEY 19.076. Determina que la autoridad de aplicación de esta Ley es el ENABIEF (hoy ONABE). CAT.OPP/CAG/2007-01 20 LEY 25.152 Año 1999 REFORMA DEL ESTADO. ADMINISTRACION DE LOS RECURSOS PUBLICOS Establece, entre otras cuestiones, las medidas a las cuales se deberán ajustar los poderes del Estado Nacional para la administración de los recursos públicos; la formulación del Presupuesto General de la Administración Nacional; eficiencia y calidad de la gestión pública; evaluación de calidad del gasto; presupuesto plurianual e información pública y de libre acceso. Además, determina que toda creación de organismo descentralizado, empresa pública de cualquier naturaleza y Fondo Fiduciario integrado total o parcialmente con bienes y/o fondos del ESTADO NACIONAL requerirá del dictado de una Ley. DECRETO Nº 346/1999 Dispone que todo el material de vía de trocha ancha existente transferido al ENTE NACIONAL DE ADMINISTRACION DE BIENES FERROVIARIOS (ENABIEF), dependiente de la SECRETARIA DE TRANSPORTE del MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS, con más el producido por levantamientos de ramales e instalaciones de la misma trocha, queda a disposición del MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS a través de la SECRETARIA DE TRANSPORTE, para ser utilizados en la construcción del FERROCARRIL TRASANDINO DEL SUR y del FERROCARRIL TRANSPATAGONICO. Esta norma inmovilizó material ferroviario en gran parte obsoleto, que aún hoy debe ser dificultosamente custodiado. DECISIÓN ADMINISTRATIVA 56/1999 TRIBUNAL DE TASACIONES DE LA NACION Dispuso que el TRIBUNAL DE TASACIONES DE LA NACIÓN practicara la valuación contable de la totalidad de los Bienes Inmuebles de Dominio Privado a cargo de las Jurisdicciones y Entidades de la Administración Nacional, incluyendo las Instituciones de Seguridad Social y las Universidades Nacionales. Además, las autoridades de aplicación serán la SECRETARIA DE HACIENDA, a través de la CONTADURIA GENERAL DE LA NACION y la SECRETARIA DE OBRAS PUBLICAS, a través del TRIBUNAL DE TASACIONES DE LA NACIÓN. CAT.OPP/CAG/2007-01 21 DECRETO Nº 436/2000 REGLAMENTO PARA LA ADQUISICION, ENAJENACION Y CONTRATACION DE BIENES Y SERVICIOS DEL ESTADO NACIONAL Aprobó la reglamentación de los Artículos 55, 56, 61 y 62 del Capítulo VI de la LEY DE CONTABILIDAD (DECRETO LEY Nº 23.354), vigente en función de lo establecido por el Artículo 137, inciso a) de la LEY 24.156, constituyendo el "REGLAMENTO PARA LA ADQUISICION, ENAJENACION Y CONTRATACION DE BIENES Y SERVICIOS DEL ESTADO NACIONAL". Se rigen por este Reglamento los contratos de compraventa, suministros, servicios, locaciones, alquileres con opción a compra, permutas y concesiones de uso de los bienes del dominio público y privado del ESTADO NACIONAL, que celebren las entidades estatales comprendidas en su ámbito de aplicación. Estableció determinadas pautas de publicidad, difusión y transparencia para los procedimientos de contrataciones: pliegos, licitaciones, procesos y criterios de selección con parámetros de evaluación predefinidos. También las condiciones que deben reunir las contrataciones directas. Se incluyen nuevas modalidades contractuales como las compras informatizadas y las iniciativas privadas DECRETO 443/2000 MINISTERIO DE INFRAESTRUCTURA Y VIVIENDA Disolvió el Ente Nacional de Administración de Bienes Ferroviarios (ENABIEF) y creó el ORGANISMO NACIONAL DE ADMINISTRACIÓN DE BIENES (ONABE) como órgano desconcentrado de la SECRETARÍA DE OBRAS PÚBLICAS, resultado de la unión entre el ENABIEF y la DIRECCIÓN NACIONAL DE BIENES DEL ESTADO (DNBE). DECRETO Nº 1.247/2000 INMUEBLES Prorrogó el plazo de vigencia instituido por el artículo 16° de la LEY 24.146, modificado por las LEYES Nº 24.383 y 24.768, en relación con la presentación de solicitudes de transferencia de inmuebles innecesarios para el cumplimiento de los fines o gestión de la Administración Pública Nacional. El nuevo plazo de vencimiento fue el 31 de diciembre del año 2003, que resultó definitivo al no ser nuevamente prorrogado. DECRETO DELEGADO Nº 1.023/2001 REGIMEN GENERAL DE CONTRATACIONES, CAT.OPP/CAG/2007-01 22 Esta norma derogó los artículos 55 al 63 del DECRETO LEY Nº 23.354 de diciembre de 1956, vigentes en función de lo establecido por el inciso a) del artículo 137 de la LEY Nº 24.156 y sus modificaciones y lo reemplazó por un nuevo régimen. También dispuso que podría utilizarse el procedimiento de contratación directa para las contrataciones entre reparticiones públicas o en las que tenga participación mayoritaria el Estado Nacional, quedando en éstos casos prohibida la subcontratación del objeto. DECRETO 35/2001 INMUEBLES Delegó en el MINISTRO DEL INTERIOR el carácter de autoridad de aplicación de las LEYES 23.985 y 24.159 en todo lo que corresponda a inmuebles que se encuentren asignados en uso y administración a la PREFECTURA NAVAL ARGENTINA y a la GENDARMERÍA NACIONAL ARGENTINA. DECRETO 666/2003 REGIMEN DE CONTRATACIONES DE LA ADMINISTRACION NACIONAL Introdujo modificaciones al Régimen General establecido mediante el DECRETO Nº 1023/2001, expresando que ...“teniendo en cuenta que la contratación directa entre reparticiones públicas puede dar lugar a la perpetuación de monopolios estatales ineficientes y costosos, siendo contrario al principio de transparencia que debe primar en las contrataciones de la Administración Pública Nacional, resulta necesario eliminar la norma que así lo permite.” DECRETO 1.142/2003 MINISTERIO DE PLANIFICACION FEDERAL, INVERSION PUBLICA Y SERVICIOS Aprueba la estructura organizativa del primer nivel operativo del citado Departamento de Estado, estableciendo que corresponde a la SECRETARIA DE OBRAS PÚBLICAS presidir el ORGANISMO NACIONAL DE ADMINISTRACION DE BIENES. DECRETO 204/2004 REGIMEN DE CONTRATACIONES DE LA ADMINISTRACION NACIONAL Facultó la realización de contrataciones directas entre las jurisdicciones y entidades del ESTADO NACIONAL, con organismos provinciales, municipales o del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, como así también con las empresas y sociedades en las que tenga participación mayoritaria el Estado, siempre que tengan por objeto la CAT.OPP/CAG/2007-01 23 prestación de servicios de seguridad, logística o de salud, y con las Universidades Nacionales. DECRETO Nº 835/2004 PROGRAMA ARRAIGO BANCO SOCIAL DE TIERRAS Se crea el Registro denominado "Banco Social de Tierras", en el ámbito de la COMISIÓN DE TIERRAS FISCALES NACIONALES. Se conformará con la información que brinden los órganos de la Administración Pública Nacional, sus empresas y entes descentralizados., sobre inmuebles ociosos de dominio privado del Estado Nacional, distribuidos en todo el territorio nacional, innecesarios para la función y gestión de los organismos en cuya jurisdicción revistan, que puedan ser afectados a fines sociales Hoy, estos inmuebles pueden transformarse en una herramienta social para solucionar el problema de las ocupaciones de tierras que ha conformado, particularmente en las grandes urbes, un escenario complejo, heterogéneo y altamente conflictivo. El Estado debe aportar toda su capacidad y bienes en el mejoramiento de la calidad de vida de las familias de menores recursos, paliando la problemática de la marginación creada por el crecimiento vegetativo de la población y las migraciones internas y externas. Según los propios considerandos del DECRETO, es un dato de la realidad que el acceso a la tierra, a la vivienda digna y al hábitat adecuado es una meta virtualmente inalcanzable para los sectores de menores recursos. Además, la LEY N° 23.302, declara de interés nacional la atención y apoyo a los aborígenes y a las comunidades indígenas existentes en el país, y su defensa y desarrollo para su plena participación en el proceso socioeconómico y cultural de la Nación, respetando sus propios valores y modalidades, disponiéndose la implementación de planes que permitan el acceso a la propiedad de la tierra. DECRETO 1.261/2004 TRANSPORTE FERROVIARIO Por esta norma, el Estado Nacional reasume la prestación de los Servicios Interurbanos de Transporte Ferroviario de Pasajeros de largo recorrido, cuyo trazado sea de carácter interjurisdiccional, suprimidos por DECRETO Nº 1.168/1992, con el objetivo de reposicionar al ferrocarril en el sistema multimodal de transporte. Se instruyó al MINISTERIO DE PLANIFICACION FEDERAL, INVERSION PUBLICA Y SERVICIOS para que a través de la SECRETARIA DE TRANSPORTE determine el uso y CAT.OPP/CAG/2007-01 24 destino del material rodante tractivo y remolcado y de los inmuebles correspondientes a predios ferroviarios y los edificios directamente necesarios para las operaciones ferroviarias, incluyendo los asignados a tareas administrativas y auxiliares contando con la asistencia del ORGANISMO NACIONAL DE ADMINISTRACION DE BIENES, dependiente de la SECRETARIA DE OBRAS PUBLICAS del MINISTERIO DE PLANIFICACION FEDERAL, INVERSION PUBLICA Y SERVICIOS. PROYECTOS DE LEY El día 4 de julio de 2007 la Cámara de Senadores de la Nación sancionó un Proyecto de Ley y lo envió en revisión a la Cámara de Diputados El objeto de este Proyecto es el reordenamiento de la actividad ferroviaria, ubicando como pieza clave de toda la acción a los nuevos criterios de gestión y de rentabilidad, y a la consideración del usuario. Para ello crea dos empresas que funcionarán en la órbita del MINISTERIO DE PLANIFICACION FEDERAL, INVERSION PUBLICA Y SERVICIOS: a) La ADMINISTRACION DE INFRAESTRUCTURAS FERROVIARIAS SOCIEDAD DEL ESTADO, que tendrá a su cargo la administración de la infraestructura ferroviaria actual, la que se construya en el futuro, su mantenimiento y la gestión de los sistemas de control de circulación de trenes. Ello incluye a los bienes necesarios para el cumplimiento de su misión, los bienes ferroviarios concesionados a privados cuando por cualquier causa finalice la concesión, o se resuelva desafectar de la explotación bienes muebles o inmuebles, y el patrimonio ferroviario que se encuentre en jurisdicción del ONABE el que se transferirá a la nueva Empresa. Esta Empresa deberá definir la red ferroviaria nacional primaria y secundaria y las explotaciones colaterales. b) La OPERADORA FERROVIARIA SOCIEDAD DEL ESTADO, que tendrá a su cargo la prestación de los servicios de transporte ferroviario tanto de cargas como de pasajeros, en todas sus formas, que le sean asignados, incluyendo el mantenimiento del material rodante. Deberá Administrar los bienes muebles e inmuebles que le sean asignados por la ADMINISTRACION DE INFRAESTRUCTURAS FERROVIARIAS SOCIEDAD DEL ESTADO para la prestación del servicio de transporte ferroviario. CAT.OPP/CAG/2007-01 25 BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA Legislación sobre ventas inmobiliarias del Estado Nacional. ENABIEF. 1997 La Administración de los inmuebles innecesarios del Estado Nacional. José Luis TESORO. INAP CAT.OPP/CAG/2007-01 26 Capítulo Segundo 2. Usucapión En este Capítulo trataremos la adquisición por prescripción adquisitiva (usucapión) de bienes de propiedad del Estado Nacional o los estados provinciales o los estados municipales por parte de personas físicas o jurídicas particulares mediante prescripción adquisitiva o usucapión. Habida cuenta que el dominio del Estado sobre sus bienes no está sometido a un régimen único se definirá cada tipo de dominio y se analizarán sus notas primordiales, los elementos que concurren a configurar las diferentes formas de propiedad estatal, el objetivo del sometimiento de los bienes a los distintos regímenes y las consecuencias jurídicas de su ocupación por los particulares, el marco normativo actual y diversas propuestas de reforma. La prescripción adquisitiva también reconoce distintas modalidades y, si bien el efecto de una y otra es el mismo, las causas determinantes de la adquisición del dominio poseen modulaciones propias en uno y otro caso. Como queda dicho, existen distintos planteos tendientes a cambiar la legislación vigente en materia de prescripción adquisitiva sobre bienes del Estado, lo que serán objeto de particular estudio en razón de que se considera urgente la adopción de medidas que impidan la pérdida de los derechos del Estado sobre sus bienes en general y, en particular sobre cierta clase de ellos. En este orden, se analizarán distintos proyectos de leyes que ponen de manifiesto la preocupación de los legisladores por introducir modificaciones al estado de cosas imperante. 2.1. Bienes Públicos y Privados del Estado La distinción fundamental que corresponde hacer en esta materia es entre bienes del dominio público y bienes del dominio privado del Estado, pues el régimen jurídico aplicable a ambas categorías es diverso. El artículo 2339 del Código Civil establece al respecto: “ Las cosas son bienes públicos del Estado general que forma la Nación, o de los estados particulares de que ella se compone, según la distribución de los poderes hecha por la Constitución Nacional; o son bienes privados del estado general o de los estados particulares.” CAT.OPP/CAG/2007-01 27 2.1.1. Bienes Públicos del Estado. 2.1.1.1. Definición La siguiente definición de “dominio público” reúne los principales elementos: El conjunto de bienes de propiedad pública del Estado (lato sensu), afectados al uso público, directo o indirecto, de los habitantes y sometidos a un régimen jurídico especial de derecho público, y, por lo tanto, exorbitante del derecho privado, en función de los fines que con ellos se tiende a satisfacer. 2.1.1.2. Régimen Jurídico El régimen del dominio público es único. Todos los bienes del dominio público tienen el mismo régimen jurídico esencial, pero adaptado a las particularidades de cada bien. La característica del uso común, respecto de los bienes del dominio público, se funda en principios básicos aplicables a todos los bienes públicos que se destinan a esos usos. Lo mismo sucede con los usos especiales. El régimen jurídico del dominio público es también de excepción y de interpretación estricta: en su conjunto sólo es aplicable a los bienes dominiales. Los caracteres básicos del régimen jurídico del dominio público son la inalienabilidad y la imprescriptibilidad. Sin embargo, no son atributos exclusivos de los bienes dominiales. Son "efectos", no "causas" de la dominialidad. 2.1.1.3. Inalienabilidad e imprescriptibilidad La inalienabilidad y la imprescriptibilidad no bastan, por sí solas, para considerar que un bien pertenece al dominio público. Existen muchos bienes que, a pesar de su carácter inalienable e imprescriptible, pertenecen al dominio "privado" del Estado o al de los particulares. Lo que define a un bien de público y le imprime sus notas correlativas entre ellas la inalienabilidad y la imprescriptibilidad es su afectación al uso público, directo o indirecto. (CSJN, Fallos, 48:195; ver también, Fallos, 146:288; 147:149; 147:178). Troplong, en el comentario al artículo 2226 del Código Civil Francés, volcado en el comentario al artículo 3952 del Código Civil, dice: "Hay cosas que son imprescriptibles por si mismas, otras que lo son por razón de su destino, y otras por razón de las personas que las poseen. Las cosas imprescriptibles por sí mismas, son aquellas que por su destino CAT.OPP/CAG/2007-01 28 natural pertenecen a todo el mundo, y no son susceptibles de apropiación privada, como la mar, la libertad del hombre, etc. Las cosas imprescriptibles en razón de su destino, son aquellas que por si mismas admiten la propiedad privada; pero que por su destino accidental están retiradas del comercio y afectas al uso público, como los caminos, las calles, etc. , estas cosas mientras están afectas al servicio publico son imprescriptibles. Las cosas que no son prescriptibles en razón de las personas que las poseen son las que pertenecen a personas privilegiadas contra las cuales no corre la prescripción.” Esta última característica nos acerca a la delimitación del objeto de estudio, pues nos adelanta que una parte de los bienes del Estado (los del dominio público) no son susceptibles de adquisición por prescripción adquisitiva. Esto es así, pero ello no implica que, en el terreno de los hechos, no se planteen eventuales entredichos que puedan llegar a los tribunales. La jurista Mirta Liliana Bellotti 5señala que dichos caracteres –inalienabilidad e imprescriptibilidad- son inherentes a los bienes públicos, pertenecientes a la esencia del régimen del dominio publico y que existen por principio, aunque la respectiva legislación los silencie. En ausencia de explícitas disposiciones legales son fruto de la elaboración doctrinal, mediante la coordinación de diversos textos legales. En el derecho argentino la inalienabilidad y la imprescriptibilidad no están previstas expresamente por la ley pero resultan de la aplicación coordinada de diversos textos del Código Civil. La Inalienabilidad halla fundamento legal en la aplicación armónica de los arts. 953, 2336 y 2604 del Código Civil6. La imprescriptibilidad encuentra fundamento legal en nuestro derecho a través de los artículos 2400; 3951; 3952 y 4019 del mismo Código7. 5 Informe presentado en la cátedra de Derecho Reales de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Córdoba, convocada en reunión por el Dr. Luis Moisset de Espanés, para analizar un proyecto de modificación del Código Civil para proteger los bienes de dominio público. 6 Art. 953 CC. “El objeto de los actos jurídicos deben ser cosas que estén en el comercio” Art. 2336CC: “Están en el comercio todas las cosas cuya enajenación no fuere expresamente prohibida o dependiente de una autorización pública” Art. 2604 CC: “El derecho de propiedad se extingue de una manera absoluta por la destrucción o consumo total de la cosa que estaba sometida a él, o cuando la cosa es puesta fuera del comercio.” 7 Art. 2400 CC: “Todas las cosas que están en el comercio son susceptibles de posesión. Los bienes que no fueren cosas, no son susceptibles de posesión”. Art.3951CC: “El Estado general o provincial, y todas las personas jurídicas están sometidas a las mismas prescripciones que los particulares, en cuanto a sus bienes o derechos susceptibles de ser propiedad privada; y pueden igualmente oponer la prescripción”. Art. 3952 CC: “Pueden prescribirse todas las cosas cuyo dominio o posesión puede ser objeto de una adquisición.” Art. 4019 CC: “Todas las acciones son prescriptibles, con excepción de las siguientes: 1) las acciones de reivindicación de la propiedad de una cosa que está fuera del comercio...”. CAT.OPP/CAG/2007-01 29 Bibiloni acertadamente8 intentó llenar el vacío legal de nuestra actual legislación, proponiendo el siguiente texto: “Los bienes de dominio público enumerados en el artículo anterior son inalienables e imprescriptibles”. La Comisión de Reformas al Código Civil aceptó esa sugerencia. El proyecto de Reforma de Unificación de la legislación Civil y Comercial de 1998 en su art. 228 dice textualmente: “Las cosas públicas del Estado son inenajenables, inembargables e imprescriptibles.” La Jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación se ha pronunciado reiteradamente estableciendo el carácter inalienable e imprescriptible de los bienes pertenecientes al dominio publico. 9 En el Derecho Comparado se establecen expresamente estos principios en la Constitución o en el Código Civil. La Constitución de México en el art. 27 regula: “.....el Dominio de la Nación es inalienable e imprescriptible...” El Código Civil Italiano en el art. 823 dispone: “Los bienes que son parte del dominio público son inalienables y no pueden ser objeto de derechos a favor de terceros, sino en los modos y en los límites establecidos por la ley que los regula”. El art. 132 de la Constitución de España establece: “La ley regulará el régimen jurídico de los bienes de dominio público inspirándose en los principios de inalienabilidad, imprescriptibilidad e inembargabilidad como su desafectación”. En la Conclusión del trabajo citado, la mencionada autora expresa que “ Si bien los caracteres de inalienabilidad e imprescriptibilidad de las cosas de dominio público son inherentes a su régimen jurídico y existen aunque la legislación no los establezca expresamente, es muy conveniente regular expresamente principios tan importantes. Las normas deben contener los principios del Derecho a fin de hacerlos evidentes, de manera que con la simple lectura de la ley sean conocidos hasta por el más inexperto. No deben permanecer tácitos en la legislación reservados a los juristas experimentados que luego de una interpretación doctrinaria los hacen salir a la luz. Debe modificarse el Código Civil e incluirse una norma que incorpore los caracteres mencionados. En este sentido, tomando como fuente el art. 823 del Código Civil Italiano, propone agregar al art. 2341 el siguiente párrafo: “Los bienes de dominio público son inalienables e imprescriptibles. No pueden ser objetos de derechos incompatibles con el destino al que fueron afectados.” 8 “Anteproyecto de Reformas al Código Civil” Suprema Corte de Justicia de la Nación. Fallos, tomo 48, página 200. Fallos tomo 146, páginas 289 y 297 y páginas 304 y 315, tomo 147, páginas 180 y 220-221. 9 CAT.OPP/CAG/2007-01 30 2.1.1.4. Elementos del dominio público En cuanto a los elementos del dominio público, cabe distinguir los que se expresan a continuación: a) Elemento subjetivo: se refiere al sujeto que es titular del dominio público. En relación con la titularidad de estos bienes, existen quienes la atribuyen al Estado, como Vélez Sarfield y quienes invisten con ella al pueblo, como Marienhoff o los romanos. Sea como fuere, lo cierto es que los bienes del dominio público no son “res nullius” (cosas de nadie), sino que sus titulares son personas jurídicas públicas y, entre estas, personas estatales. Ello excluye a las personas jurídicas públicas no estatales y a las personas privadas que por delegación, subrogación, concesión o cualquier otra figura jurídica ejercen funciones propias del Estado o en nombre y representación de éste. b) Elemento objetivo: se relaciona con los objetos, bienes o cosas, que integran el dominio público, cuyo régimen legal se está establecido en el Código Civil, o sea que rige por el derecho privado. El dominio público se ejerce sobre cosas idénticas a aquellas sobre los cuales se ejerce la propiedad privada, pues la dominialidad es independiente de las cualidades materiales de los objetos. El art. 2340, que establece qué bienes quedan comprendidos entre los bienes públicos, en su inc. 7º in fine pone de relieve el carácter enunciativo de la enumeración del Código citado, haciendo referencia a “todos aquellos bienes o cosas de los que se valen los entes públicos para el cumplimiento de sus fines “10 En ciertos casos los bienes accesorios de inmuebles dominiales sólo integran el dominio público cuando contribuyen permanente, directa e inmediatamente a que el bien dominial cumpla los fines que motivan su institución. 10 Los bienes públicos así enumerados son: “1 - Los mares territoriales hasta la distancia que determine la legislación especial, independientemente del poder jurisdiccional sobre la zona contigua; “2 - Los mares interiores, bahías, ensenadas, puertos y ancladeros; “3 - Los ríos, sus cauces, las demás aguas que corren por cauces naturales y toda otra agua que tenga o adquiera la aptitud de satisfacer usos de interés general, comprendiéndose las aguas subterráneas, sin perjuicio del ejercicio regular del derecho del propietario del fundo de extraer las aguas subterráneas en la medida de su interés y con sujeción a la reglamentación; “4 - Las playas del mar y las riberas internas de los ríos, entendiéndose por tales la extensión de tierra que las aguas bañan o desocupan durante las altas mareas normales o las crecidas medias ordinarias; “5 - Los lagos navegables y sus lechos; “6 Las islas formadas o que se formen en el mar territorial o en toda clase de río, o en los lagos navegables, cuando ellas no pertenezcan a particulares; “7 - Las calles, plazas, caminos, canales, puentes y cualquier otra obra pública construida para utilidad o comodidad común; “8 - Los documentos oficiales de los poderes del Estado; “9 - Las ruinas y yacimientos arqueológicos y paleontológicos de interés científico.” CAT.OPP/CAG/2007-01 31 El régimen jurídico del dominio público exige que los bienes o las cosas que lo integran físicamente tengan un relativo carácter permanente e irreemplazable; si no es así, no se justifica ese régimen. Por tal motivo las cosas consumibles y las fungibles no integran el dominio público. Integran, pues, el dominio público inmuebles, muebles, semovientes, objetos inmateriales y derechos, y las llamadas universalidades públicas en la medida que reúnan las características enunciadas. Conforme con el artículo 2341 del Código Civil “ Las personas particulares tienen el uso y goce de los bienes públicos del Estado o de los Estados” con sujeción a las normas respectivas. c) Elemento teleológico o finalista: el uso público es determinante de la dominialidad. Dicho uso puede ser directo o inmediato e indirecto o mediato. Parte de la doctrina opina que sólo los bienes destinados al uso directo de la comunidad están dentro del dominio público. Hay quienes sostienen que también los bienes o cosas destinados al uso indirecto a través de un servicio público, integran el concepto de dominio público (CSJN, Fallos, 33:116; 158:358). El citado inciso 7º in fine, del artículo 2340 del Código Civil parece inclinar la balanza a favor de estos últimos. Lo que caracteriza al dominio público no es ni el uso directo, ni la afectación a un servicio público, sino la afectación del bien a utilidad o comodidad común, concepto éste más amplio que aquéllos. d) Elemento normativo: El sometimiento de bienes a un régimen de derecho público, condición sine qua non de la dominialidad pública, sólo puede resultar de una disposición de la autoridad competente, que en nuestro derecho es el Congreso: el carácter dominial de una cosa o de un bien depende de una norma legal, de una ley en sentido formal y no de cualquier acto administrativo. Un acto administrativo no puede ser fuente atributiva del carácter público o privado de una cosa. La Administración sólo podrá "crear" los bienes que integran el dominio público llamado "artificial" (plazas, calles, caminos, cementerios, monumentos, bibliotecas, edificios, etc.); pero la condición jurídica de esos bienes creados, no deriva de acto administrativo alguno, sino de ley. Por ello no hay que confundir "afectación" del bien al uso público, con la "atribución" del carácter público o privado de los bienes. A nivel nacional la afectación puede hacerla el Poder Ejecutivo por acto administrativo; en las provincias puede realizarla la autoridad que la respectiva Constitución disponga. CAT.OPP/CAG/2007-01 32 No habiendo bienes públicos por derecho natural, sino únicamente por declaración legal, el acto estatal que establezca la dominialidad de una cosa, cualquiera sea su origen o índole, es siempre atributivo del carácter público del bien. En el derecho argentino corresponde a la legislación de fondo (nacional) decidir qué bienes son públicos y qué bienes son privados, sin perjuicio de la posibilidad de la legislación local de regular su uso y goce. Aún cuando la determinación de los bienes que han de integrar el dominio público corresponde a la Nación (art. 75, inc. 12, CN), ese dominio pertenece a la Nación o a las provincias, según el territorio en que se encuentre. Ello surge de los artículos 75, incs. 5, 10, 13, 18 y 30, 121, 125, y 126 de la Constitución, de los arts. 2339 y 2340 del Código Civil y de la jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN, Fallos, 126:82; 120:154; 134:293; 154:317). El artículo 124 de la Constitución, reconoce el dominio originario de las provincias respecto de los recursos naturales con tal amplitud que no distingue en cuanto a la calidad de renovables o no renovables: corresponden al dominio provincial todos los recursos naturales de su territorio. En igual sentido, la Ley de Federalización de Hidrocarburos Nº 24.145 dispuso la transferencia del dominio público de los hidrocarburos del Estado Nacional a las provincias en cuyos territorios se encuentren, incluyendo los situados en el mar adyacente a sus costas. El Acuerdo Federal Minero, del 6 de mayo de 1993, ratificado por ley Nº 24.228, reconoció a las autoridades provinciales como administradores del patrimonio minero de sus respectivos estados, consolidándose en el art. 124 de la Constitución, el pleno dominio provincial sobre esos recursos. La Ley 23.696 posibilita la transferencia mediante convenio a jurisdicciones provinciales o municipales de las rutas nacionales de interés provincial y de las redes de distribución de Gas del Estado (anexo I, II). Así, la Nación le transfirió a la provincia de Buenos Aires por un convenio el dominio y jurisdicción de la Ruta Nacional Nº 2. Dicho convenio fue aprobado por Decreto de la Provincia de Buenos Aires Nº 4872/90. Mediante el Decreto Nº 1055/89 se autorizó la cesión a las provincias en cuyo territorio se encuentren de los yacimientos petrolíferos abandonados o de escasas reservas, sin el pago del derecho de explotación (art. 20). CAT.OPP/CAG/2007-01 33 Por el Decreto Nº 942/89 se determinó, a pedido de la Provincia de Río Negro, la transferencia a su favor de los bienes y servicios afectados al servicio público de electricidad en su territorio, y que estaban a cargo de Agua y Energía Eléctrica Sociedad del Estado. El Convenio celebrado en su consecuencia fue ratificado por Decreto Nº 975/90. La Ley Nº 24.093 faculta al Poder Ejecutivo a transferir a las provincias que así lo soliciten, a título gratuito, el dominio o la administración de los puertos. 2.1.1.5. Clasificación del dominio publico En razón de la formación de los bienes el dominio público puede ser natural o artificial. El natural recae sobre aquellos bienes que se encuentran en la naturaleza y sobre los cuales no es posible la intervención de la mano del hombre. (playas de mar, ríos, arroyos). El artificial está constituido por bienes que son creados por la acción humana (calles, caminos, puentes etc.). En el dominio público natural, la ubicación dentro del dominio público que efectúa la ley, implica su afectación de pleno derecho, v.gr., una isla o un río. Tratándose de bienes del dominio público natural, su carácter proviene de una decisión, adoptada por la misma ley en función de los poderes que la Constitución depositó en el Congreso de la Nación, y conservan tal carácter aunque la Administración decida darles un tratamiento, uso o explotación económica, concediéndolos a particulares. Así, las islas son bienes del dominio público independiente del uso que se les asigne o confiera. El Código Civil ha reservado las islas para el patrimonio público estatal, no obstante la jurisprudencia ha admitido por costumbre contra legem la posibilidad de su usucapión (CSJN, JA, 1942-I-1015). En los bienes del dominio público artificial, además de la calificación de la ley nacional, de la cual deriva su condición jurídica, es necesario un acto de afectación de parte de la Administración (nacional, provincial o municipal), v.gr., un buque de guerra, una plaza, etcétera. 2.1.1.6. Afectación. Afectar es consagrar un bien al dominio público. Desafectar, por el contrario, es sustraerlo de su destino al uso público. La desafectación de un bien del dominio público, en principio debe efectuarse por un acto de derecho público. Así, la Procuración del Tesoro ha establecido: La desafectación no requiere necesariamente el dictado de una ley formal sino que puede realizarse mediante simple acto administrativo, siempre que éste exprese la CAT.OPP/CAG/2007-01 34 inequívoca voluntad de liberarlo del vínculo de inenajenabilidad que lo liga al Estado (PTN, Dictámenes, 59:176; 68:8). Excepcionalmente, puede desafectarse el bien por hechos, pero en tal caso es necesaria la ratificación, mediante acto administrativo (del voto en disidencia del doctor Barbera Guzzo, SC Mendoza, 4/11/75, "Heredia de Chambón, Modesta A. c/Provincia de Mendoza", JA, 1976-III-81). Los requisitos que dan validez a la afectación son: a) El asentimiento expreso (en caso de ley o acto administrativo) o implícito, que preste la autoridad administrativa competente. Cuando se trata de dominio público natural, respecto del cual la determinación de su condición jurídica importa su afectación, la autoridad competente será el Congreso, dado que le corresponde dicha determinación. Lo mismo sucede para la desafectación, ya que implicando el cambio de su condición jurídica, sólo puede hacerla la mencionada autoridad. En el caso de un bien del dominio público artificial, como la afectación no es lo mismo que la determinación de su calidad jurídica de cosa pública, ella puede provenir del Congreso Nacional, de las legislaturas provinciales o de los órganos municipales. La desafectación, a su vez, pueden declararla las mismas autoridades administrativas que realizaron la afectación. b) El título traslativo de dominio en poder del Estado de un bien que se afecta. Sin embargo, a los estados se los considera propietarios, sin necesidad de un título traslativo de propiedad ni de posesión, de todos aquellos bienes que en virtud de lo regulado por ley nacional integran el dominio público, y c) A los efectos de la incorporación de un bien al dominio público la afectación debe ser actual, debiendo el bien estar real y efectivamente afectado al uso o servicio público. "La mera adquisición de un inmueble y la declaración de que allí se realizará la obra que va a estar afectada al uso público, no implica afectación, y, por lo tanto, el bien no se encuentra incorporado al dominio público: es simplemente un bien privado del Estado" (SC Mendoza, 4/11/75 "Heredia de Chambón, Modesta A. c/Provincia de Mendoza", JA, 1976-III-81). 2.1.1.7. Desafectación tácita. La desafectación tácita se presenta cuando los bienes del dominio público dejan de poseer tal carácter, no por cambiar su calificación, sino porque la cesación de esa calidad se debe a un hecho exterior de la naturaleza o a una transformación en su estado externo, debido a obras realizadas por autoridad competente. Por ejemplo, un río que por causas naturales se seca o es desecado por obras de la autoridad. CAT.OPP/CAG/2007-01 35 "No puede hablarse de desafectación tácita para designar actos irregulares que supongan hacer caso omiso de la legislación de fondo, como ocurre con las enajenaciones directas decididas sin previa desafectación ordenada por el órgano del Estado correspondiente (en el caso de bienes del dominio público del Estado, una ley especial) o con la admisión de actos de los particulares que avancen sobre el dominio público estatal (caso de allanamiento del Estado en los juicios de prescripción veinteñal o treintañal)... La reforma del Código Civil por la ley 17.711, no bastó para alterar la calificación jurídica de los bienes en el art. 2340, inc. 6º, de dicho cuerpo legal" (C1ªCivCom BBlanca, 22/5/81, "Provincia de Buenos Aires c/Díaz, Juan y otro", RepED, 16-374). 2.1.1.8. Uso público El uso del dominio público puede ser común o especial. Cada uno de esos usos presenta características propias. 2.1.1.9. Uso común. Es el uso que pueden realizar todas las personas en forma directa, individual o colectivamente, por su sola condición de tales, sujetándose a la obligación de observar las disposiciones reglamentarias dictadas por la autoridad competente. Podemos mencionar como ejemplos el tránsito por las vías y lugares públicos, la contemplación o admiración de monumentos, la consulta de libros en las bibliotecas públicas, etcétera. El uso común se caracteriza por ser: a) Libre. No está sujeto a ninguna autorización administrativa previa; el único límite que puede imponérsele es el que resulte del ejercicio de la policía administrativa. b) Gratuito. El principio general es que el uso común de los bienes dominiales es gratuito; sin perjuicio de ello, en ciertos casos es oneroso, como, por ejemplo, cuando se cobra un peaje por tránsito en los caminos construidos o que se hayan otorgado en explotación, administración, reparación, ampliación, conservación o mantenimiento de los ya existentes, a través de un contrato de concesión de obra pública; o cuando se exige una suma de dinero para tener acceso a algunos paseos públicos, por ejemplo al jardín zoológico. La onerosidad del uso debe emanar de un texto legal (PTN, Dictámenes, 86:214). c) Impersonal. El uso común se distingue del uso especial por el carácter impersonal del usuario. Cuando el usuario tiene cualquier status jurídico personal, se está en presencia de un uso especial. d) Ilimitado. Existe el uso común, mientras el bien permanezca afectado al dominio público. CAT.OPP/CAG/2007-01 36 La mayor parte de la doctrina nacional y extranjera establece que el uso común de los bienes dominiales constituye un interés simple de los particulares. Nosotros consideramos que la tripartición entre derecho subjetivo, interés legítimo e interés simple, está superada y por ende el particular posee un derecho subjetivo al uso común de los bienes públicos. Tal apreciación contribuye a una acabada protección de los bienes dominiales. De igual modo, vincula la responsabilidad del Estado, como lo señalara la Corte Suprema de Justicia: "El uso y goce de los bienes del dominio público por parte de los particulares importa para el Estado la obligación de colocarlos en condiciones de ser utilizados sin riesgos" (CSJN, 1/12/92, "Pose, José D. v. Prov. del Chubut y otra", JA, 1994II-262 y 1996-II-síntesis). 2.1.1.10. Uso especial. Uso especial es aquel que sólo pueden realizar las personas que hayan adquirido la respectiva facultad, de conformidad con el ordenamiento jurídico vigente. En tal sentido ha expresado la jurisprudencia: "a diferencia de lo que acontece con el uso común o general, el uso especial sobre una porción del dominio público no satisface, en forma inmediata y principal, necesidades colectivas, ni tiene por objeto el desarrollo de la personalidad humana con referencia al ámbito de la libertad; en otras palabras, no se trata de un derecho que corresponda al hombre en su calidad de tal. Teniendo por finalidad acrecentar su esfera de acción y su poderío económico, la adquisición de este derecho supone, indispensablemente, un acto expreso del Estado..." (CS Tucumán, 29/10/82, "Huerta, Manuel y otros c/Municipalidad de San Miguel de Tucumán", ED, 104-667). El uso especial se caracteriza por ser: a) Reglado. Sólo pueden adquirir un derecho privativo de los bienes del dominio público, los que hayan reunido los requisitos fijados por la autoridad estatal. b) Oneroso. El uso privativo o especial de los bienes dominiales es oneroso. Tal carácter surge del acto administrativo que otorga el permiso o la concesión. El canon que paga el usuario es la justa contrapartida por el beneficio patrimonial que se le otorga. c) Personal. Es la diferencia subjetiva fundamental con el uso común. d) Limitado. Es una regla de buena política administrativa que los bienes del dominio público, que se conceden en uso privativo, lo sean por un período determinado de tiempo. 2.1.2. Bienes privados del estado El artículo 2342 del Código Civil enumera los bienes privados del Estado general o de los estados particulares: CAT.OPP/CAG/2007-01 37 “1 - Todas las tierras que estando situadas dentro de los límites territoriales de la República, carecen de otro dueño; “2 - Las minas de oro, plata, cobre, piedras preciosas y sustancias fósiles, no obstante el dominio de las corporaciones o particulares sobre la superficie de la tierra; “3 - Los bienes vacantes o mostrencos, y los de las personas que mueren sin tener herederos, según las disposiciones de este Código; “4 - Los muros, plazas de guerra, puentes, ferrocarriles y toda construcción hecha por el Estado o por los Estados, y todos los bienes adquiridos por el Estado o por los Estados por cualquier título; “5 - Las embarcaciones que diesen en las costas de los mares o ríos de la República, sus fragmentos y los objetos de su cargamento, siendo de enemigos o de corsarios. 2.2. Proyectos de ley EXPEDIENTE NUMERO 297/96 S-96-0297:FERNANDEZ DE KIRCHNER TEXTO ORIGINAL 27/03/1996 PROYECTO DE LEY ESTABLECIENDO EL SISTEMA DE DISPOSICION Y ADMINISTRACION DE BIENES DEL ESTADO NACIONAL - Este proyecto implicaría la creación de una nueva categoría de bienes imprescriptibles, que vendría a sumarse a la de los bienes del dominio público del Estado: la de los inmuebles del dominio privado del Estado, que quedarían equiparados a aquellos en esta materia. En efecto, los dos artículos cuya modificación propugna se refieren a “los bienes o derechos susceptibles de ser propiedad privada”. Lo propuesto estaría en línea con las prerrogativas que otros regímenes otorgan al Estado teniendo en miras sus fines vinculados con el bien común. En este sentido, sería equiparable a las cláusulas exorbitantes –o, mejor dicho, régimen exorbitante, entendido como un entorno objetivo a la voluntad de las partes- en los contratos administrativos. La protección de los bienes del dominio privado del Estado de la prescripción adquisitiva sería la consecuencia de la presunción de que esos bienes están afectados a un fin público o propio de la Administración, coadyuvando al desempeño eficiente de la Administración y al logro de los resultados requeridos por la sociedad, como lo expresa el Decreto Nº 1023/01 en relación con el objeto de las contrataciones públicas, y ese CAT.OPP/CAG/2007-01 38 sería el fundamento para darles un especial resguardo o, en otros términos, someterlos a un régimen exorbitante del derecho privado. El artículo 45 –Usucapión-, perteneciente al Capitulo VIII del proyecto propone la reforma de los artículos 3951 y 3952 del Código Civil, propiciando las siguientes redacciones: ”Artículo 3.951: El Estado nacional o las provincias y sus entes autárquicos u organismos descentralizados que tengan personalidad jurídica propia, están sometidos a las mismas prescripciones que los particulares en cuanto a sus bienes o derechos susceptibles de ser propiedad privada. Sin embargo, no están sujetos a la pérdida del derecho sobre sus bienes inmuebles por prescripción adquisitiva. Pueden, igualmente oponer la prescripción ganada.” ”Articulo 3.952: Pueden prescribirse todas las cosas cuyo dominio o posesión pueden ser objeto de una adquisición, con excepción de los bienes inmuebles pertenecientes al Estado nacional o las provincias y sus entes autárquicos u organismos descentralizados, que tengan personalidad jurídica propia, a que alude el artículo anterior”. EXPEDIENTE NUMERO 613/07 S-613/07: JORGE M. CAPITANICH. TEXTO ORIGINAL. Año 2007 PROYECTO DE LEY SUSPENSIÓN DE PLAZOS PARA ADQUISICIÓN POR PRESCRIPCION ADQUISITIVA DE BIENES DE DOMINIO PRIVADO DEL ESTADO NACIONAL. Este proyecto, al igual que el anterior, tiene por objeto la protección de los bienes inmuebles del dominio privado del Estado de las pretensiones de particulares que puedan intentar adquirirlos invocando la prescripción adquisitiva. Su alcance es menos amplio, pues en lugar de eliminar con carácter general y perpetuo la posibilidad de usucapión de dichos inmuebles, propicia un mecanismo transitorio (suspensión por 5 años del plazo de prescripción y del tratamiento judicial de las causas que se tramiten a tal fin) que permita al Estado la adopción de los recaudos pertinentes para la protección de su patrimonio. Se transcribe a continuación el articulado del proyecto: ARTICULO 1º. Suspéndase por cinco (5) años: a) el plazo establecido en el artículo 4015 del Código Civil para obtener la prescripción adquisitiva de los bienes de dominio CAT.OPP/CAG/2007-01 39 privado del Estado Nacional; y b) el tratamiento en sede judicial de los juicios por prescripción adquisitiva de los bienes de dominio privado del Estado Nacional. ARTICULO 2º. Durante el período citado en el artículo anterior, la Autoridad de Aplicación arbitrará las acciones necesarias para reformular los mecanismos de información de los bienes de dominio privado del Estado Nacional y coordinar con los organismos de catastro y con los registros de la propiedad inmueble de los gobiernos provinciales y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a fin de posibilitar la administración y el resguardo de los mismos. ARTICULO 3º. El Organismo Nacional de Administración de Bienes (ONABE) dependiente de la Secretaría de Obras Públicas del Ministerio de Planificación Federal Inversión Pública y Servicios, será la Autoridad de Aplicación de la presente Ley. ARTICULO 4º. Invítase a las provincias y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a adherir a la presente. ARTICULO 5º. Comuníquese al Poder Ejecutivo. En los fundamentos invocados por el legislador que presenta este proyecto se comienza por recordar la clásica división de los bienes del Estado en dominio público y dominio privado, y se alude a la afectación o desafectación de los primeros, que tiene lugar mediante un acto de las autoridades administrativas competentes que los tienen bajo su guarda y administración. Se remarca a la imprescriptibilidad como una de las características más importantes que diferencian a los bienes públicos de los bienes privados del Estado y se destaca que “ se trata de un principio por el cual es que resulta inimaginable que un particular adquiera por prescripción un camino público o el cauce de un arroyo, por ejemplo.” Después de enumerar los bienes públicos según el Art.2340 y los bienes privados según el artículo 2342 del Código Civil, pone de manifiesto que, a diferencia de los bienes públicos, los del dominio privado del Estado Nacional no son imprescriptibles, pueden adquirirse por prescripción adquisitiva o usucapión. Recuerda que “la prescripción adquisitiva es un modo de adquirir el dominio poseyendo un bien inmueble durante un tiempo determinado y cumplimentando las condiciones fijadas por la Ley, transformando la posesión continuada (ejercicio de un poder de hecho sobre una cosa determinada), en derecho (propiedad)” y transcribe el artículo 4015 de dicho Código, según el cual la prescripción se cumple luego de transcurridos veinte años de posesión pública, pacífica e ininterrumpida, no siendo CAT.OPP/CAG/2007-01 40 necesario título válido ni buena fe por parte del poseedor, de donde surge “que la parte accionante deba acreditar la existencia de los dos requisitos necesarios para la procedencia de la prescripción que invoca: la posesión y el tiempo.” Seguidamente pone de manifiesto que “esta forma excepcional de adquirir dominio está siendo ejercida sobre varios bienes de dominio privado del Estado Nacional, por lo que resulta necesario adoptar medidas que permitan salvaguardarlos.” En este sentido advierte que, “si bien estos inmuebles poseen restricciones para el uso público, no dejan de ser patrimonio de toda la sociedad, siendo el Estado más que titular de dominio, el administrador de los bienes de los ciudadanos. Por lo tanto, la apropiación de un particular de un inmueble del Estado Nacional, atenta contra el interés general.” En todo caso (se afirma) “es el mismo Congreso Nacional, representando a toda la sociedad, quien luego de analizar la situación particular de cada bien y sopesando las necesidades sociales e individuales, quien puede decidir el destino de esos inmuebles, incluso mediante donaciones sin cargo a particulares. Puntualiza que, por otro lado, es necesario tener en cuenta que, en su gran mayoría estas acciones incoadas en contra del Estado Nacional desvirtúan el espíritu previsto por el Código Civil, no siendo realizadas por las personas que hicieran posesión de los bienes originariamente sino por terceros mediante la cesión de los derechos, existiendo por otro lado casos en que se realizaron demandas por prescripción adquisitiva de inmuebles ubicados en lugares declarados como patrimonio histórico.” Agrega el presentante del proyecto que, “además del costo económico ocasionado por la pérdida del bien (en algunos casos de millones de pesos) y por el pago de los honorarios a los abogados litigantes-, es grave además el perjuicio ocasionado a la conciencia colectiva de la comunidad, que ve cómo unos pocos se apropian de bienes que deberían ser utilizados para el desarrollo de políticas de Estado y el beneficio de todos los argentinos.” Para concluir, manifiesta que “la suspensión de los plazos por cinco (5) años, permitirá al ONABE contar con el tiempo suficiente para terminar con el proceso ya iniciado de reformulación de los mecanismos de información de los bienes y trabajar en coordinación con los organismos provinciales de catastro y registros de la propiedad inmueble, a fin de adecuarlos para una óptima gestión de bienes del Estado Nacional.” Finalmente destaca que “el logro de estos objetivos permitirá desarrollar acciones preventivas con relación a los bienes objeto de esta presentación, tales como suscribir convenios de resguardo, intimaciones, perturbación de la tenencia en los casos de CAT.OPP/CAG/2007-01 41 ocupaciones ilegítimas y en los casos que ya se encuentren sustanciados ante la justicia, contar con elementos pertinentes para la defensa en juicio de los intereses que debemos proteger”. EXPEDIENTE NUMERO Nº 589 00589S05 GERARDO R. MORALES. TEXTO ORIGINAL. Año 2005 PROYECTO DE LEY ESTABLECIENDO EL SISTEMA DE DISPOSICION Y ADMINISTRACION DE BIENES DEL ESTADO NACIONAL Este proyecto, a diferencia de los anteriores, no propone la introducción de modificaciones a la legislación de fondo ni a las normas procedimentales, sino que se dirige a la protección de los bienes del dominio privado del Estado mediante la modificación de la Ley Nº 14.159, para que los intereses públicos sean mejor defendidos en los juicios de usucapión promovidos por particulares contra el Estado. Se transcriben a continuación las principales disposiciones del texto original Artículo 1º Modifícase el inciso d) del artículo 24 de la ley 14.159, el que quedará redactado de la siguiente manera: Inciso d) En caso de haber interés fiscal comprometido, el juicio se entenderá con el representante legal de la Nación, de la provincia o de la municipalidad a quien afecte la demanda. Previo a la aprobación del plano para prescribir, el Registro Inmobiliario deberá solicitar información sobre el inmueble a usucapir a los siguientes organismos: I) A la Comisión Nacional de Museos y de Monumentos y Lugares Históricos a los efectos de que informe si el bien se encuentra comprendido dentro de algún régimen de protección especial, como ser la ley 12.665; o si está incluido en zona declarada por la UNESCO como patrimonio natural y cultural de la humanidad II) A los organismos indicados en los artículos 5º y 55 de la ley 25.473 a los efectos de que informen si se encuentra comprendido dentro de zonas de yacimientos arqueológicos o paleontológicos. CAT.OPP/CAG/2007-01 42 III) A los organismos provinciales competentes en materia hidráulica a los efectos de que informen si se encuentra comprendido en los bienes del dominio público enunciados en los incisos 1), 2), 3), 4), 5) y 6) del artículo 2.340 del Código Civil; o si por su ubicación puede ser perjudicial o entrañar riesgo para los poseedores. IV) A la Administración de Parques Nacionales a los efectos de que informe si se encuentra comprendido dentro de un parque o reserva natural. V) A la Contaduría General de la Nación, al Organismo Nacional de Administración de Bienes del Estado (ONABE) y al organismo que detente el uso del inmueble, de acuerdo a lo establecido en artículo 51 del decreto ley 23.354/56, o en su caso a los respectivos entes provinciales o municipales, a los efectos de ser notificados del trámite iniciado e informar asimismo sobre situación de dominio y de uso del bien. Dichos informes deberán acompañar al plano, referenciándose además en la carátula del mismo, tornando totalmente nulo al trámite la falta de cumplimiento de lo dispuesto Se reseñan a continuación los fundamentos más importantes invocados por el legislador jujeño presentante del proyecto: La ley 14.159 de catastro nacional y prescripción adquisitiva de inmuebles data de más de cincuenta años atrás (1952). El título VI legisla específicamente sobre la prescripción adquisitiva de inmuebles por la posesión continuada de los mismos (artículos 4.015 y concordantes del Código Civil) estableciendo requisitos cuya acreditación es obligatoria a partir de ese momento en la promoción de juicios tendientes a obtener la propiedad por prescripción adquisitiva. El espíritu de esta ley fue regularizar y otorgar títulos de propiedad a primitivos ocupantes de inmuebles, muchos de ellos descendientes de aborígenes y de los primeros pobladores de nuestra patria. Pero después de cincuenta y dos años resulta que se está desvirtuando el principio de justicia y equidad que inspiró a los legisladores cuyo objetivo era perfeccionar títulos de los primitivos poseedores de las tierras. CAT.OPP/CAG/2007-01 43 Actualmente estamos viendo la avidez de algunos por acumular tierras y convertirse en latifundistas. Con ese propósito poseen las tierras, muchas veces en dimensiones que es imposible decir que se puedan ejercer actos posesorios idóneos. Así, por la escasez de requisitos de la ley 14.159, se la utiliza para adquirir grandes extensiones de tierra, presentando el plano para prescribir, el certificado de dominio, algún pago de impuestos, es decir cumpliendo con requisitos mínimos de la ley, por lo que los juicios generalmente terminan con una sentencia favorable ya que en sede judicial se aplica una interpretación literal de estos requisitos, entendiendo muchos jueces que en el cumplimiento de los mismos se agota la prueba de la existencia del animus domini necesario para prescribir. Pero lo realmente grave del tema es que se está poseyendo (con el propósito de prescribir) monumentos y lugares históricos, yacimientos arqueológicos y paleontológicos, bienes del dominio público comprendidos en el artículo 2.340 del Código Civil (como, por ejemplo, ríos, sus cauces, lagos navegables y sus lechos), parques y reservas naturales e inmuebles que se encuentran dentro de las zonas declaradas patrimonio de la humanidad. En cuanto a los monumentos y lugares históricos, la ley 12.665 creó una Comisión Nacional de Museos y de Monumentos y Lugares Históricos, dependiente actualmente del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, la cual ejerce la superintendencia inmediata sobre los museos, monumentos y lugares históricos nacionales, y en concurrencia con las respectivas autoridades de las instituciones que se acojan a la presente ley, cuando se trate de museos, monumentos y lugares históricos provinciales o municipales. Atento a que conforme al artículo 4º de la ley 12.665 esta comisión debe confeccionar y actualizar periódicamente una lista de monumentos históricos del país, resulta conveniente que en todo juicio de prescripción adquisitiva, la comisión verifique si la zona a usucapir no se encuentra comprendida entre los lugares históricos, cuya preservación le compete, en cuyo caso la demanda no prosperará, bajo pena de nulidad. Respecto a los yacimientos arqueológicos y paleontológicos, la ley 25.743 de protección del patrimonio arqueológico y paleontológico tiene por objeto la preservación, protección y tutela del patrimonio arqueológico y paleontológico como parte integrante del patrimonio cultural de la Nación. De acuerdo al artículo 2º forman parte del patrimonio arqueológico las cosas muebles e inmuebles o vestigios de cualquier naturaleza que se encuentren en la superficie, subsuelo o sumergidos en aguas jurisdiccionales que puedan proporcionar información sobre los CAT.OPP/CAG/2007-01 44 grupos socioculturales que habitaron el país desde épocas precolombinas hasta épocas históricas recientes. Forman parte del patrimonio paleontológico los organismos o parte de organismos o indicios de la actividad vital de organismos que vivieron en el pasado geológico y toda concentración natural de fósiles en un cuerpo de roca o sedimentos expuestos en la superficie o situados en el subsuelo o bajo las aguas jurisdiccionales. Conforme artículo 5º de esta ley, el Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano, dependiente de la Secretaría de Cultura de la Nación, será el organismo nacional competente que tendrá a su cargo la tutela del patrimonio arqueológico. La Secretaría de Ciencia y Tecnología será la autoridad de aplicación en materia paleontológica conforme al artículo 55 de la ley. Por ello, también resulta conveniente dar intervención previa a estos dos organismos, a fin que dictaminen si los bienes inmuebles que se pretenden usucapir no forman parte del patrimonio arqueológico o paleontológico, en cuyo caso la demanda no prosperará, bajo pena de nulidad. En cuanto a los parques y reservas nacionales, la ley 12.103 –y sus sucesivas modificaciones–, que creó la Administración de Parques Nacionales, es la que ejerce la administración y contralor de los parques y reservas nacionales, a la que también debe darse participación Un tema que merece especial atención es el de los lugares declarados por la UNESCO patrimonio natural o cultural de la humanidad. Actualmente, en la República Argentina constituyen patrimonio natural de la humanidad los siguientes: Talampaya, en La Rioja; valle de la Luna o Ischigualasto, en San Juan; Parque Nacional Los Glaciares, en Santa Cruz; Parque Nacional Iguazú, en Misiones; península Valdés, en Chubut; cuya protección es una obligación moral de todos los argentinos. Además, constituyen patrimonio cultural de la humanidad, a saber: el Camino de las Estancias Jesuíticas, en Córdoba; la Manzana de la Compañía de Jesús, en Córdoba; las Misiones Jesuíticas Guaraníes, en Misiones, y las cuevas de las Manos, en Santa Cruz. Y en Jujuy tenemos un patrimonio cultural y natural (único en la Argentina que reúne el doble carácter) declarado como tal por la UNESCO: se trata de la Quebrada de Humahuaca. Sobre este particular, se pueden citar numerosos expedientes radicados en juzgados de la provincia de Jujuy que recogen acciones iniciadas por particulares con el objeto de usucapir inmuebles comprendidos dentro de las características citadas. Así, por ejemplo, en CAT.OPP/CAG/2007-01 45 el expediente B.-104.865 caratulado “Genoveva Robles de Ruiz c/Estado provincial s/prescripción adquisitiva”, el actor intenta ser reconocido como titular de dominio de un inmueble que representa una porción del conocido Pucará de Tilcara, yacimiento arqueológico cuyo origen se remonta a los inicios de nuestra era; y redescubierto y revitalizado por el doctor Di Benedetto a fines del siglo XIX. Por el expediente B.-104.899 tramita otra prescripción, sobre una fracción diferente del mismo pucará. En el expediente B.-123.751, que resulta aún más paradójico, caratulado “Martina Quispe c/N. N. s/prescripción adquisitiva”, la actora promueve el reconocimiento de su titularidad de dominio sobre casi 60 hectáreas conocidas como el Amarillo de Yacoraité, las que comprenden el cerro, el río y un yacimiento arqueológico y paleontológico. Además, en zona declarada por la UNESCO como patrimonio cultural y natural de la humanidad. Lo expuesto tendría ribetes insólitos (confrontando los hechos con legislación, jurisprudencia y doctrina sobre prescripción adquisitiva en nuestro país) si no fuera porque existen antecedentes de expedientes similares tramitados que llegaron a buen término para el actor, en el que los intereses públicos no se advierten de la situación hasta que ésta ya está con sentencia, con el consabido perjuicio. Este proyecto intenta remediar este estado de situación, generando la obligación de remitir informes a los organismos con competencia en la materia. Concluye el legislador presentante que esta iniciativa intenta complementar el instituto de la usucapión para casos específicos de inmuebles ubicados en zonas de protección especial. También dedica un párrafo a los bienes del dominio público del Estado: “En cuanto a los bienes del dominio público enunciados en el artículo 2.340 del Código Civil, es necesario prestar especial atención a los ríos, los lagos, lagunas, ya que se ha observado que se inician juicios tendientes a obtener títulos de propiedad sobre las márgenes de los mismos, lo que además de ser imprescriptibles, entrañan un peligro para los poseedores, sobre todo cuando se trata de ríos que naturalmente cambian su cauce o por crecidas producen estragos en las viviendas existentes sobre dichos márgenes Por tal motivo, también resulta conveniente dar intervención a los organismos provinciales que tienen competencia en materia hidráulica, a los efectos de que se expidan sobre el particular.” CAT.OPP/CAG/2007-01 46 En relación con la recomendación citada en el párrafo final de los fundamentos del proyecto que acabamos de analizar en punto que antecede, viene al caso comentar sobre la demanda por usucapión de un fundo rural dentro del parque Nacional Río Pilcomayo en Formosa:11 La parte actora invocó una posesión pacífica, pública e ininterrumpida de sesenta años y acompañó documentación que pretendía avalar dicha posesión. La administración de Parques Nacionales contestó la demanda argumentando que las tierras fiscales de que se trataba en el caso eran de dominio público, por lo tanto son inalienables e imprescriptibles. Además reconvino por desalojo. Manifestó también que no hubo desafectación al dominio público, y que el Estado siguió con su jurisdicción sobre las tierras reclamando siempre el pago de cánones que se adeudaban y a su vez la actora siempre reclamaba la suspensión de esos cánones, lo que implicaría reconocer en el estado la posesión. En el Fallo se concluyó por rechazar la demanda, dado que para usucapir es necesario ser poseedor y la actora en sus reiterados actos se consideró tenedora, al reclamar fehacientemente se rebajara y extinguiera el pago de cánones. Al margen de ésto, se dejó en claro en los Considerandos que, al no haberse desafectado el bien, se está a lo dispuesto por el Art. 2340 CC y concordantes. 11 Comentario al Caso Parque Nacional Rio Pilcomayo. Facultad de Ciencias Económicas. Material Académico. Dominio Público y Dominio Privado (Dr. Alejandro Taraborrelli) CAT.OPP/CAG/2007-01 47 Capítulo Tercero: 3. La inclusión social y los Bienes del Estado La discusión sobre el proyecto de Ley de Bienes del Estado comprenderá la forma en que el patrimonio fiscal será administrado y la manera de como se dispondrá de él. Sobre este último aspecto, el presente capítulo pretende hacer hincapié en el uso de los bienes inmuebles estatales como uno de los tantos recursos que se requerirán para resolver en nuestra sociedad el problema de la exclusión social. 3.1. La exclusión / inclusión social La inclusión social o su contracara la exclusión social se puede describir, según la Comunidad Económica Europea (1993), como la imposibilidad o la no habilitación para acceder a los derechos sociales sin ayuda, sufrimiento de la autoestima, inadecuación de las capacidades para cumplir con las obligaciones, riesgo de estar relegado por largo tiempo a sobrevivir del asistencialismo y estigmatización.12 Dentro de la normativa nacional, los considerandos del Decreto 1506/2004 expresan que el gobierno nacional “considera prioritario consolidar las tareas realizadas para la inclusión social de la población más vulnerable, con eje en la persona y en la familia, como unidad decisiva para el desarrollo social y económico de nuestro país.” En la misma norma se establecen dos objetivos centrales en materia de empleo: a) promover una verdadera cultura del trabajo entre aquellos beneficiarios con condiciones de empleabilidad promoviendo su inserción o reinserción laboral y b) disminuir la vulnerabilidad de las familias que se ubican en una situación estructuralmente más desventajosa, de tal modo que la sola mejora del ingreso no mejora sus perspectivas de desarrollo humano. La gravedad de la exclusión social surge palmaria del segundo objetivo “la sola mejora del ingreso no mejora sus perspectivas de desarrollo humano”, por ello las acciones gubernamentales que se requieren para superarla deberán contar, además de la coordinación necesaria, con el compromiso de todas las áreas del gobierno. Este 12 En Bernardo Kliksberg .-“Inequidad en América Latina: Un tema Clave” publicado en la Revista APORTES para el Estado y la Administración Gubernamental Nº 13 – La Cuestión Social -Otoño 1999 CAT.OPP/CAG/2007-01 48 compromiso debería reflejarse en la asignación generosa, por parte de cada una de las áreas, de recursos humanos, físicos y financieros; todo ello en pos de una clara consigna: garantizar a los sectores excluidos ingresos adecuados, nutrición y salud apropiadas, educación de calidad, puestos de trabajo, vivienda, acceso a créditos para producir, protección contra la delincuencia. El ingreso medio mensual per capita de la población de nuestro país, según datos del INDEC, nos permite tener un indicio sobre la población que debe ser alcanzada por los programas de inclusión social: Deciles 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 73 158 227 300 381 476 599 774 1059 2201 Ingreso medio mensual per cápita (en $) Primer Trimestre de 2007 Fuente: INDEC 13 Extensa y conocida es la lista de dificultades que trae aparejada la exclusión social, por ello preferimos enfocar en los resultados positivos que traen los procesos de inclusión, siguiendo el análisis que hace Kliksberg14cuando examina los impactos de los niveles de equidad e inequidad sobre el crecimiento de las naciones, señalaremos las interrelaciones que entre ellas se presentan: a) “la elasticidad de la pobreza ante el crecimiento se reduce cuando la desigualdad es mayor” b) “reducir las desigualdades crea condiciones propicias para aumentar significativamente la inversión destinada a formar capital humano” c) “una estrategia de mejoramiento de la equidad puede impactar muy favorablemente en las tasas de ahorro nacional” d) “el mejoramiento de la equidad tiene efectos positivos sobre las posibilidades de desarrollo tecnológico” e) “la mejor equidad creará condiciones más favorables para fortalecer y desarrollar el capital social que comprende aspectos como los valores compartidos, el grado de asociatividad de una sociedad, sus capacidades para promover concertaciones, sinergias, construir redes, el clima de confianza mutua entre sus componentes, las normas sociales, las instituciones” 13 14 Diario LA NACIÓN 21/06/2007 Idem op. citado CAT.OPP/CAG/2007-01 49 f) “los altos niveles de inequidad afectan duramente la tan buscada gobernabilidad en las sociedades democráticas” 3.2. Exclusión social y vivienda Una de las imágenes de la exclusión social es sin duda el hábitat de las personas excluidas, la cuestión de las villas, de los Núcleo Habitacional Transitorio (NHT), de los asentamientos a la vera de las vías de los ferrocarriles urbanos, entre otros similares, es uno de los temas de cada día. Sólo en la Ciudad de Buenos Aires15 con una población de alrededor de los 3.000.000 de habitantes, los que habitan en estas precarias condiciones suman unas 150.000 personas. Según el Instituto de la Vivienda de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (IVC) 16 , “en la Ciudad de Buenos Aires coexisten más de 85.000 familias con situación habitacional deficitaria. Durante el período comprendido entre 1991 y 2001...... aumentó 100,3% la cantidad de personas que habitan en villas de emergencia y núcleos habitacionales transitorios, mientras que el total de la población residente en la Ciudad de Buenos Aires disminuyó un 6% aproximadamente, lo que da cuenta de un fuerte proceso de concentración de riqueza acompañado de niveles crecientes de exclusión social. Por otra parte, la agudización de la crisis ha incorporado al proceso de empobrecimiento y exclusión a sectores medios que hasta ese momento contaban con capacidad de ahorro.” Según datos de la Revista del Consejo Nacional de la Vivienda 17 “los asentamientos precarios se caracterizan por presentar una ocupación del espacio de manera espontánea, no planificada, dando como resultado un trazado irregular e intrincado.” En la Ciudad de Buenos Aires, continúa, “Se reconocen, en cuanto al estado de construcción de las viviendas, tres situaciones distintas: 1. No recuperable: el 30% de las viviendas están construidas con chapa y cartón con un alto grado de deterioro y obsolescencia 2. Precarias: el 65% posee muros de ladrillo de canto, cimientos muy precarios y techo de chapa de zinc sobre tirantes de madera. 3. Consolidadas: el 5% presenta una estructura portante sólida y se encuentra generalmente en los bordes de las manzanas.” 15 Dato de la Coordinadora de Villas del GCBA – Diario LA NACIÓN 30/07/2006 .www.buenosairesgov.ar/areas/planeamiento_obras/vivienda/sit_habitacional.php?menu_id =7538 16 CAT.OPP/CAG/2007-01 50 Respecto a la calidad del suelo, donde se asientan las villas, la mencionada Revista señala que “el 95% de las construcciones se encuentra en zonas de bañados, terrenos de relleno, compuestos mayormente por materiales de desechos domiciliarios y escombros, dando un suelo poco estable y de baja resistencia. La escasa profundidad de la napa freática produce anegamiento de los pozos negros y un medio ambiente insalubre.” Siempre según los datos de la CMV18, “la conformación de la población de las villas y N.H.T., ha variado sustancialmente a partir de la década del 90. Actualmente, no está constituida mayoritariamente por migrantes rurales sino por trabajadores urbanos desplazados del sistema laboral formal, así como también por la migración producida desde los países limítrofes. Su agrupamiento territorial tiene como base común la generación de acciones que sustentan estrategias de supervivencia, generalmente consolidadas en torno de lazos de parentesco y origen. El perfil laboral de la población se caracteriza por la nula o escasa calificación, por lo que resulta precaria la condición de empleo de la mayoría de los habitantes. Como resultado, mientras que para Capital Federal y Gran Buenos Aires la tasa de desocupación ronda el 18%, en las villas se ubica en el 61% de la P.E.A. En cuanto a la estructura de ingresos, el 38,8% de las familias presenta un ingreso menor a $ 300.- mensuales.” Más allá que nuestra Constitución Nacional establece que todo habitante de la Nación tiene derecho a una vivienda digna, y sin entrar en discusiones jurídicas19, que no se materialice este anhelo constitucional no sólo afecta al que no cuenta con un techo digno, sino al conjunto de la sociedad. En efecto, las denominadas villas esconden entre gente trabajadora toda clase de negocios delictivos, siendo quizás el más significativo el de la droga. Las políticas de inclusión social, abarcan muchos aspectos y requieren de muchos recursos, pero sin duda la vivienda es, después de la alimentación, el elemento indispensable que se le debe asegurar a todos los habitantes de nuestro país. 3.3. Recursos: Los inmuebles estatales Resulta una verdad de perogrullo que para hacer viviendas hace falta el espacio geográfico donde ubicarlas y para ello, el Estado Nacional cuenta con tierras fiscales, en 17 Revista C. N. Vivienda Nº 9 Mayo 2003 http://www.cnvivienda.org.ar/nuevo/notas/CiudadBA_9.pdf Revista Consejo Nacional de la Vivienda Nº 9 Mayo 2003 http://www.cnvivienda.org.ar/nuevo/notas/CiudadBA_9.pdf 18 CAT.OPP/CAG/2007-01 51 cantidad y de calidad, dentro o vecinas a las grandes ciudades argentinas. Esto último es importante, ya que asegura contar con el recurso, cualquiera sea la respuesta a la discusión si las viviendas para las personas comprendidas en los programas de inclusión social debe estar en el corazón de las grandes ciudades o en las afueras. Los ejemplos de inmuebles nacionales son abundantes, las ex playas de carga ferroviarias, como Retiro, Palermo, Caballito, Liniers, Alianza, Haedo, Lanús, que hoy son utilizadas solo parcialmente por los concesionarios ferroviarios; predios del Ministerio de Defensa, como los ubicados en Campo de Mayo, Villa Martelli, Morón, El Palomar; las tierras del INTA Castelar, del IFONA y del ex Consejo Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia. 3.4. Oposición a la inclusión social Sin pretender entrar en la discusión sobre las variables socio-políticas que comprende la problemática de la exclusión social, nos detendremos en uno de los aspectos señalados por Carlos Acuña: “el empoderamiento e inclusión de los excluidos no son neutros con respecto a la distribución de poder en la sociedad. Esto implica que otros actores (los ya incluidos) pierden relativa influencia sobre las decisiones y distribución de recursos.” El mismo autor destaca que: “Un primer problema es que la historia muestra que los procesos de empoderamiento e inclusión socio-política conllevan importantes arcos de oposición: ¿quiénes son los opositores a estos procesos?, ¿cuáles son sus intereses?, ¿con qué recursos y capacidades cuentan?, ¿qué incentivos pueden tener los afectados por el empoderamiento de los excluidos para aceptarlo? Estas son preguntas clave para comprender un primer obstáculo para el éxito de estos procesos. Diagnósticos sobre las características y posibles cursos de acción por parte de actores sociales dominantes, algunos de los actores políticos y la burocracia, parecen ineludibles a la hora de diseñar e implementar estrategias de empoderamiento y desarrollo inclusivo.”20 Para el caso particular de los inmuebles estatales, como uno de los recursos a distribuir, entre los actores opositores al proceso de inclusión podemos señalar: 19 Ver Capítulo Séptimo: Derechos constitucionales. ¿de propiedad o a la propiedad? del Informe sobre Administración de Bienes del Estado –2005- Observatorio de Políticas Públicas. Administradores Gubernamentales 20 Carlos H. Acuña .- Precondiciones y Riesgos Socio-Políticos que enfrentan Procesos de Empoderamiento y Desarrollo Inclusivo -Contenidos esquemáticos de la presentación en el Taller Internacional sobre Participación y Empoderamiento para un Desarrollo Inclusivo, Lima 9 al 11 de julio de 2001 CAT.OPP/CAG/2007-01 52 a) La clase media, que se niega a cualquier ayuda a los sectores excluidos y les reclaman trabajo y esfuerzo, como si vivir en las condiciones que muchos habitan y sin servicios mínimos, no fuera ya un esfuerzo. Por una cuestión de justificada envidia, la clase media, rechaza que se le otorguen a los excluidos viviendas dentro de las ciudades. Cuando decimos justificada envidia, nos referimos a que buena parte de la clase media y baja debe desplazarse desde sus lugares de residencia a sus trabajos en un deficiente sistema de trasporte. El sentir de la clase media, en nuestra opinión, queda expresado en la respuesta que alguien dio a la pregunta21 “Uds recibirían, para quedarse en un terreno lindero a su hogar, a la gente de la villa el cartón que se incendio” (en febrero 2007): “la demagógica Rosario Lufrano de Telefe se quejaba porque nadie los quería como vecinos, según ella no entendía por qué, la gente argumentaba la seguridad de la zona y que nadie quiere una villa, digo yo porque no se los lleva a vivir con ella al country, me parece que los periodistas en su mayoría son unos hipócritas, en las villas habrán gente decente y trabajadora, pero una gran parte todos sabemos que no lo es, no será culpa de ellos, pero esto es así, no seamos hipócritas también, la realidad no es discriminar, estoy de acuerdo en que les vendan o alquilen viviendas baratas a (los argentinos) que las necesiten, pero no en capital o bs.as., sino en las provincias despobladas, y de paso que les den trabajo, especialmente en el sur del país.- basta de villas miserias, que son el foco de la delincuencia y la droga, salven e los pibes que son inocentes.-“ La clase media no es un actor menor ya que, como señala Carlos Acuña “el inicio y sostén del proceso de empoderamiento e inclusión demanda la acción de actores ya incluidos, que permitan restarle estabilidad al viejo “equilibrio excluyente”. Si bien el arco de alianzas necesarias para sostener este proceso es contingente a las características propias de cada sociedad, se pueden identificar tres elementos centrales para el éxito o fracaso de este tipo de alianzas: a) la relación entre los beneficiarios del empoderamiento y las clases medias; b) el papel de los medios de comunicación (creando “ambientes” ideológico/culturales más o menos propicios a la integración socio-política); y c) el papel de los actores internacionales ..... (por su capacidad de actuar no sólo aportando recursos para alivianar el costo doméstico de estos procesos, sino también legitimando como necesarios/inevitables estos procesos frente a los opositores –particularmente frente a los actores socio-económico dominantes-)“22 b) los grupos asociados a la droga y a los delitos, que mantienen cautivos a los propios excluidos impidiendo acciones que conduzcan a modificar el actual hábitat donde puedan desarrollar sus actividades ilícitas. En mayo de 2002, refiriéndose a los sucesos que 21 22 De la página web de Yahoo: en Yahoo respuestas Carlos H. Acuña – Trabajo citado CAT.OPP/CAG/2007-01 53 culminaron con la presidencia del Dr. De la Rua, leíamos en Clarín: “Algunos los llaman "los hijos de los comedores populares". Otros, directamente, "el lumpenaje de la falopa" o "los guachitos". Son los nuevos jóvenes del conurbano. Hijos de la desocupación perpetua, la exclusión, la miseria, la falta de futuro. Y súbditos de la droga. ………………….. Por aquellos días de descontrol y furia, el propio intendente de La Matanza, Alberto Ballestrini, aseguró que en los saqueos "intervinieron narcos y ''pendejos'' que se refugian en las villas y trabajan para ellos. (...)” 23 c) Los sectores inmobiliarios, que pretenden adquirir los inmuebles estatales ubicados en las cercanías de los lugares de más alto valor inmobiliario, para volcarlos al mercado en el cual sólo pueden participar empresas o clases altas. Además, dentro del sector inmobiliario aparece, como lo ha señalado el Director Ejecutivo del ONABE para el caso de la Villa 31, “un negocio inmobiliario marginal, donde hay todo tipo de alquileres, alquileres de locales, de vivienda, la villa ha cambiado totalmente. Una buena parte de la villa es un espacio de negocios hoy, donde unos vivos sacan ganancias de la desgracia de muchos”.24 d) La necesidad de los excluidos de contar con una porción de tierra, hace que aparezcan personajes que los incentiven a ocupar un pedazo de tierra fiscal desprotegido por dinero o un voto. Como se señala en el documento “Pobreza urbana: estrategia orientada a la acción para los gobiernos e instituciones municipales de América Latina y el Caribe”25, refiriéndose al caso del Estado de Michoacán (México), “uno de los puntos más cuestionados fue la forma en que se asignó una parte importante de los terrenos incorporados al área urbana. Dominaron los criterios políticos antes que los socioeconómicos y grupos ligados al PRI, Partido Revolucionario Institucional, Antorcha Campesina y el Partido Cardenista se adjudicaron una buena parte de las reservas (Fausto Brito, 2000:96). La estrategia fue la invasión de predios y la presión política con marchas, toma de oficinas para que los funcionarios les asignaran la posesión de los mismos. El resultado fue que se dejaron de lado las solicitudes de la población de escasos recursos y se privilegió a los grupos ligados a las organizaciones políticas afines al gobierno. Los beneficiarios no fueron, pues, la población de menores recursos (Universidad de Guadalajara, 1997).” Como puede observarse las acciones que deben encararse para superar la exclusión social, superan ampliamente el dictado de una Ley de Administración y Disposición de 23 24 El rol de las "bandas de la droga" – Diario Clarín – 19 de mayo de 2002 Pagina Web del Organismo Nacional de Bienes – Comunicado de prensa del 3 de julio de 2006. CAT.OPP/CAG/2007-01 54 Bienes del Estado, pero reiteramos que el presente trabajo pretende introducir la problemática de la exclusión social en la discusión de la norma y por otra parte incorporar este concepto en el análisis de la legislación de otros países: cómo entienden la exclusión social y qué soluciones han encarado. 3.5. Las políticas públicas "No hay ninguna política integral para estos asentamientos, ni de la ciudad ni nuestra. Estamos trabajando en el tema", asegura Fernando Suárez, Director Ejecutivo del Organismo Nacional de Administración de Bienes.26 En nuestro país, varias experiencias a favor del acceso a la vivienda digna, se han discontinuado o se encuentran debilitadas, como ejemplo de este último caso puede verse la falta de colaboración para concretar el Banco Social de Tierras, creado en el año 200427, que sólo requería de los organismos de la ADMINISTRACION PUBLICA NACIONAL, sus empresas y entes descentralizados, o todo otro ente donde el ESTADO NACIONAL tenga participación total o mayoritaria de capital o en la formación de las decisiones societarias, información sobre inmuebles de dominio privado del ESTADO NACIONAL, en los plazos y condiciones que luego se determinaron. En el ya citado documento del proyecto “Pobreza urbana: estrategia orientada a la acción para los gobiernos e instituciones municipales de América Latina y el Caribe”, Nora Clichevsky, refiriéndose al caso argentino, señala respecto al Banco Social de Tierras que mientras éste “busca centralizar los datos existentes....... de los inmuebles que permanecen ociosos y sería como una herramienta para solucionar el problema de las ocupaciones” ilegales, “el proyecto del Organismo Nacional de Administración de Bienes –ONABE, por fuera del Banco Social de Tierras, es transformar casi 60.000 has. de suelo pertenecientes a los ferrocarriles en proyectos urbanos de gran escala, vendiendo tierra para conjuntos de vivienda a sectores medios y/o altos.” Esta afirmación, cierta o no, muestra a las claras la necesidad de definir los lineamientos generales en materia de disposición de los bienes del estado. 25 “Pobreza urbana: estrategia orientada a la acción para los gobiernos e instituciones municipales de América Latina y el Caribe” preparado por la Nora Clichevsky en el marco del proyecto CEPAL - Año 2006 26 Del artículo “Crecen las villas paralelas a las vías” Diario LA NACION – 14/02/2007 27 Ver Informes sobre Administración de Bienes del Estado –2005 y 2006- Observatorio de Políticas Públicas. Administradores Gubernamentales CAT.OPP/CAG/2007-01 55 Retornando al caso del Banco Social de Tierras, en el Presupuesto Nacional 2007, en la Política Presupuestaria de la JURISDICCION 56, MINISTERIO DE PLANIFICACION FEDERAL, INVERSION PUBLICA Y SERVICIOS puede observarse que ya no se hace mención al Banco Social de Tierras. Si bien respecto al tema expresa: “……en el transcurso del ejercicio 2006 se procedió a la creación de la Subsecretaría de Tierras para el Hábitat Social cuyo objetivo fundamental es colaborar en la formulación de políticas de tierras, la detección de terrenos aptos para el desarrollo de programas de viviendas y equipamiento social, y en coordinación con el Organismo Nacional de Administración de Bienes (ONAB) en la identificación de inmuebles del Estado Nacional que puedan ser afectados a fines sociales y todo tipo de políticas orientadas a la satisfacción de las necesidades de hábitat de los ciudadanos. .................................................................................................................................................... Resolver la transferencia de inmuebles innecesarios y/u ociosos a favor de estados provinciales, municipales y comunales y de entidades de bien público que hubiesen ingresado las solicitudes respectivas con anterioridad al 31 de diciembre de 2003. Esta actividad se desenvuelve en el marco de la Ley N° 24.146 destinando dichos activos a la ejecución de proyectos que cubran demandas en materia de vivienda, salud, educación, recreación, etc., y las tierras improductivas a la concreción de planes habitacionales y el desarrollo de emprendimientos productivos generadores de fuentes de trabajo y de impacto en las economías regionales, entre otros.” Siguiendo con el análisis de las referencias al Banco Social de Tierras dentro del Presupuesto Nacional 2007, pueden encontrarse entre las ACCIONES PARA LA PROVISION DE TIERRAS PARA EL HABITAT SOCIAL, cuya UNIDAD EJECUTORA es la SUBSECRETARIA DE TIERRAS PARA EL HABITAT SOCIAL (Servicio Administrativo Financiero 354) las siguientes: - Provisión de tierras para desarrollar programas de viviendas sociales; - Realización de mensuras y subdivisiones de grandes extensiones de tierra; - Otorgamiento de las escrituras traslativas de dominio; - Realización de planos y procesos de prescripción adquisitiva; - Asesoramiento jurídico en conflicto de intereses relacionados con la tenencia de la tierra Pero si bien una de las enumeradas acciones contempla la provisión de tierras, cuando se indaga en las metas de la Subsecretaría de Tierras para el Hábitat Social, no se establecen metas concretas figurando tan solo la concreción de 1500 escrituras para la Normalización de la Situación Dominial. en concordancia con otra problemática: “disminuir el CAT.OPP/CAG/2007-01 56 déficit existente o las causas desfavorables para el bienestar de la población que sufren más de 5 millones de personas que no cuentan con el título de propiedad de sus tierras.” 3.6. El Proyecto de Ley de Bienes El proyecto de ley de bienes deberá resolver la puja de intereses en el destino de las tierras fiscales: espacios verdes, su venta, su uso para vivienda social. En el Capítulo Primero del Informe sobre Administración de Bienes del Estado correspondiente al año 2005 de este Observatorio28 se describió el desequilibrio entre los espacios verdes de la Ciudad de Buenos Aires y los partidos vecinos: “Hoy, los Partidos del Gran Buenos Aires, con más de 9 millones de habitantes, sólo disponen de unas 800 hectáreas de espacios verdes parquizados, correspondiéndole a cada habitante 0,90 m2., incluyendo los “Bosques de Ezeiza” y el Parque Pereyra Iraola, cuando los valores internacionales indican como mínimo adecuado para los grandes centros urbanos, una relación de entre 10 y 15 m2/habitante.” Respecto a la venta de estas tierras, si el objetivo es hacer bajar los valores inmobiliarios la realidad ha demostrado su fracaso, si en cambio la venta fuera con fines recaudatorios los montos que ingresan en el Tesoro son poco significativos respecto al Presupuesto General de Gastos y Recursos de la Nación. En el periodo 2003-2007 solamente se vendieron inmuebles del patrimonio nacional en el extranjero (Río de Janeiro29, Montevideo), quedando pendiente tan solo definir la venta de un predio perteneciente a la estación de pasajeros del ex ferrocarril Belgrano en la Ciudad de Santa Fe. Finalmente estas tierras estatales podrían constituirse en un recurso preciado para resolver el problema de la exclusión social. En el Capítulo Cuarto del Informe sobre Administración de Bienes del Estado correspondiente al año 2006 se desarrollo el tema de las “BARRERAS PARA EL USO SOCIAL DE LAS TIERRAS FISCALES” refiriéndonos a la decisión del Gobierno de privatizar una serie de inmuebles de propiedad estatal que se encontraban ocupados por pobladores de escasos recursos. En este capitulo se pretende señalar la necesidad de establecer y mantener acciones proactivas sobre las tierras fiscales 28 Informe sobre Administración de Bienes del Estado –2005- Observatorio de Políticas Públicas. Administradores Gubernamentales 29 ver Punto 2.9 Explotaciones / Uso social de los bienes del Informe sobre Administración de Bienes del Estado –2006- Observatorio de Políticas Públicas. Administradores Gubernamentales CAT.OPP/CAG/2007-01 57 para destinarlas a la construcción de vivienda de interés social, y para ello resulta de interés ver el caso de la legislación de Colombia. Si bien en el ya mencionado Informe sobre Administración de Bienes del Estado del año 200530, se analizó el caso de esta República, que a partir del año 2003 encaró un Programa de Renovación de la Administración Pública, dentro del cual se contemplaba el Programa para la Gestión Eficiente de Activos Públicos – PROGA –, ahora nuevamente analizaremos su legislación pero desde la óptica de la inclusión social. La Ley colombiana 708 del año 2001, dispone en su artículo 1º que “Las entidades públicas del orden nacional, de carácter no financiero, que hagan parte de cualquiera de las Ramas del Poder Público, así como los órganos autónomos e independientes, deberán transferir a título gratuito al Instituto Nacional de Vivienda de Interés Social y Reforma Urbana, INURBE, en el término y con la progresividad que establezca el Gobierno Nacional los bienes inmuebles fiscales de su propiedad, o la porción de ellos con vocación para la construcción o el desarrollo de proyectos de vivienda de interés social de conformidad con el reglamento que expida el Gobierno Nacional, y sin perjuicio de lo establecido en los planes de ordenamiento territorial.” Asimismo, en el parágrafo 1º del mismo artículo establece la responsabilidad de todas las áreas de gobierno en la concreción y aporte de recursos financieros para concretar la transferencia: “En todo caso la entidad que transfiera bienes inmuebles fiscales en virtud de lo aquí previsto, deberá sufragar todos los costos necesarios para realizar la transferencia al INURBE, y obtener el paz y salvo correspondiente a los impuestos, tasas, contribuciones, y valorización, que recaigan sobre el inmueble que transfieren, situación que deberá verificar el Instituto Nacional de Vivienda de Interés Social y Reforma Urbana, Inurbe, antes de registrar cada resolución contentiva de título traslaticio de dominio de las referidas en la presente ley.” En cuanto a cómo estos inmuebles llegan a los sectores carenciados, la Ley dispone en su artículo 4º que “El INURBE entregará los inmuebles que le sean transferidos en virtud de la presente ley de, así como aquellos de su propiedad que cumplan con las condiciones señaladas en el artículo 1º de esta ley, en calidad de subsidio en terrenos, …” La Ley 708, es clara respecto al destino del resto de las tierras estatales, en el artículo 8º establece que “Los bienes inmuebles fiscales de propiedad de las entidades públicas del orden nacional, de carácter no financiero, que hagan parte de cualquiera de las Ramas del Poder Público, así como de los órganos autónomos e independientes, que no tengan vocación para la construcción de vivienda de interés social, y además que no los requieran para el desarrollo de sus funciones, y no se encuentren dentro de los planes de 30 Ver Capítulo Sexto: Análisis Comparado del Informe sobre Administración de Bienes del Estado. 2005- Observatorio de Políticas Públicas. Administradores Gubernamentales CAT.OPP/CAG/2007-01 58 enajenación onerosa que deberán tener las entidades, deben ser transferidos a título gratuito a otras entidades públicas conforme a sus necesidades, de acuerdo con el reglamento que expida el Gobierno Nacional, con excepción de aquellos ocupados ilegalmente antes del 28 de julio de 1988 con vivienda de interés social, los cuales deberán ser cedidos a sus ocupantes, en virtud de lo establecido en el artículo 58 de la Ley 9a. 1 de 1989.” En el 2005, se pretende hacer más eficiente el proceso y mediante el Artículo 69 de la Ley 962 se establece la Racionalización del Trámite de Transferencias de Bienes Fiscales en virtud de la Ley 708 de 2001, fijando que “Las entidades del orden nacional a que hace referencia el artículo 1º de la Ley 708 de 2001, podrán transferir directamente a los municipios y distritos los bienes inmuebles fiscales, o la porción de ellos con vocación para la construcción o el desarrollo de proyectos de vivienda de interés social, previa suscripción de un convenio entre el Fondo Nacional de Vivienda y la entidad territorial, mediante el cual se conserva el objeto de asignar dichos inmuebles, como Subsidio Familiar de Vivienda en especie por parte del Fondo y que la preservación del predio estará a cargo de la entidad receptora del inmueble.” CAT.OPP/CAG/2007-01 59 Capítulo Cuarto: 4. Estados Unidos y la Administración de tierras fiscales en fideicomisos31 4.1. Introducción Al finalizar la Guerra de la Independencia de EE.UU se abrió la puerta a un vasto flujo de inmigrantes que se asentaron en las montañas Apalaches y en el oeste Americano. Los ciento cuarenta siguientes años fueron testigos del asentamiento de europeos, asiáticos y africanos en el continente americano y de la transformación de posesión de las tierras que pasó de manos de las civilizaciones aborígenes a los nuevos estados organizados y del rápido crecimiento de ciudades, pueblos y asentamientos, cada uno claramente dividido en ejidos urbanos, secciones y cuarto de secciones establecidos por la normativa legal federal de Estados Unidos. En diferentes momentos el gobierno federal obtuvo los títulos de posesión de más del ochenta por ciento de las tierras de los Estados Unidos. En la actualidad menos del treinta por ciento de las mismas permanecen bajo la propiedad federal, siendo el cincuenta por ciento restante transferidas al sector privado y a instituciones de los distintos Estados como parte del afianzamiento de las fronteras de la Unión. Entre los millones de acres (2,5 acres equivalen a una hectárea) transferidos desde la propiedad federal, en ese período, se encuentran más de ochenta millones de acres de “tierras fiscales en fideicomisos específicos” (tierras que fueron otorgadas a los Estados recientemente organizados para el sostén de la educación pública). Estas tierras concedidas a los nuevos estados, y los propósitos que inspiraron su cesión, están íntimamente ligados en los comienzos históricos con la implacable expansión hacia el oeste que devino en la era del Destino Manifiesto de los Estados Unidos. 31 Documento original: Trust Lands in the American West: A legal overview and Policy Assessment por Peter W.Culp, Diane B. Conradi y Cynthia C Tuel – Lincoln Institute of Land Policy – Sonora Institute – Año 2005 CAT.OPP/CAG/2007-01 60 4.2. Educación, Cesión y Expansión Una vez finalizada la Guerra de la Independencia, una de las primeras tareas que enfrentó el Congreso Norteamericano, luego de la Declaración de la Independencia, fue enfrentarse a la desenfrenada especulación inmobiliaria en los territorios del oeste y la expansión de los asentamientos de pobladores de raza blanca en esos territorios. Sin un sistema que regularizará el proceso de reclamo de tierras y organizará los gobiernos territoriales, con cada nuevo asentamiento se incrementaba la posibilidad de que alguna o todas las poblaciones recientemente asentadas pudieran eventualmente desprenderse para formar un estado independiente fuera del control de la Unión. Mientras la rápida expansión hacia el oeste era vista como esencial para asegurar las nuevas reivindicaciones nacionales de la frontera oeste, el Congreso estaba crecientemente preocupado de cómo desarrollar la política de los asentamientos en los nuevos territorios, de cómo financiar los gobiernos que inevitablemente era necesario crear para esos territorios, y lo más importante de todo: como asegurar que los nuevos territorios apoyaran los valores democráticos por los cuales se había realizado la Guerra Revolucionaria. Estas preocupaciones se volvieron agudas cuando se acercaban el fin de la revolución en septiembre de 1783, cuando el Congreso enfrentaba una gran deuda por la guerra que limitaba fuertemente los medios de financiación de la Nación. Entre los líderes revolucionarios norteamericanos existía un fuerte sentimiento que impartir educación pública en los territorios era un elemento esencial para asegurar el futuro democrático de la nación en expansión. En aquellos tiempos, las oportunidades educacionales sólo alcanzaban a la clase alta, sin embargo el concepto de la educación pública había sido un tema importante en el asentamiento de las colonias americanas desde un principio. Ya por el año 1.600, unas cuantas colonias habían requerido leyes de creación de un sistema público de educación y algunas de las constituciones de los primeros estados habían establecido cláusulas que requerían la educación pública de todos sus ciudadanos. Este tema fue adoptado con gran fervor por los revolucionarios norteamericanos, quienes creían que una ciudadanía bien educada era esencial para proteger la libertad y asegurar que los ciudadanos de la República estarían bien preparados para ejercer las libertades básicas de religión, prensa, asamblea, debido proceso de las leyes y el juicio por jurados. Los primeros programas federales que eventualmente condujeron a la creación de fideicomisos específicos con tierras fiscales estatales esencialmente provinieron de la CAT.OPP/CAG/2007-01 61 tensión generada por la creencia en la necesidad (o al menos la inevitable) de la expansión hacia el oeste, y en la creencia de que un pueblo libre tendría la necesidad de tener una “población instruida”. Thomas Jefferson, figura popular y líder político de aquella época, era uno de los propulsores de esta idea; y continuamente pregonaba su concepto de “democracia agraria” que la definía como una sociedad que lograría su fortaleza a través de granjeros bien instruidos, cuyo compromiso con la tierra logrará fundar una sociedad igualitaria y libre. Muchos revolucionarios (Jefferson incluido) creían igualmente esencial que este sistema educativo debería ser gestionado por el gobierno a fin de controlar las influencias sectarias. Sin embargo, veían un rol limitado para el nuevo gobierno federal, por lo que ellos creían que la educación debería estar bajo el control de cada estado y no depender del control federal. Mientras los estados del este tenían una base de tierras y propiedad que podría proveer de recursos impositivos para financiar la educación pública, en los territorios del oeste estos recursos eran simplemente inexistentes. Para las comunidades nacientes en estos territorios, estaba claro que los nuevos gobiernos estaduales o el gobierno federal debían subsidiar los servicios públicos básicos hasta que una base económica y suficiente población se hubiese establecido en los mismos. Sin embargo, hasta que las tierras pasaran a manos de las comunidades o fueran entregadas por el gobierno federal, las mismas estaban exceptuadas de pagar impuestos en los nuevos estados creados. Esto generaba otro punto de preocupación en la era posterior a la Revolución, el principio de que “los nuevos estados” debían unirse a la Unión en un pie de igualdad con los que habían ingresado con anterioridad. Sin ninguna garantía de un apropiado grado de igualdad e independencia, los líderes de aquella época consideraron que había serios riesgos de rebeliones internas o cambios de lealtades dentro los nuevos territorios que podría llevar a la fragmentación de la nación. Una solución a los problemas de deuda, especulación, expansión, educación y pie de igualdad finalmente apareció cuando el Congreso Norteamericano negoció la cesión de los reclamos de las tierras de las colonias del oeste a favor del gobierno federal. Con la cesión de las tierras del oeste, el Congreso Norteamericano no sólo puso fin a la caótica especulación sino que también garantizó que el gobierno siempre dispusiera de un recurso abundante como eran las tierras, en caso de guerras, recesiones y otros tipos de problemas que pudieran afectar a las finanzas públicas. La administración de estas tierras podía proveer la solución a la organización de asentamientos y a la formación de los nuevos CAT.OPP/CAG/2007-01 62 estados, a la solución de la educación pública y de otros servicios esenciales para sus ciudadanos, y para el repago de la deuda nacional. En los años siguientes, el Congreso Norteamericano promulgó la Ley General de Tierras de 1785 y la Ley del Noroeste de 1787, que establecían las políticas que gobernarían el traspaso de las tierras públicas y la creación de nuevos estados. Estas leyes también crearon el sistema de fideicomisos de tierras fiscales para el sostenimiento de la educación pública y de otras instituciones públicas esenciales para los nuevos estados. La concesión de tierras para sostener la educación pública no era un concepto nuevo. Las tierras cedidas a instituciones educativas era una práctica heredada de Europa, cuyos antecedentes se remontaban al imperio Romano, la antigua Grecia y hasta los distintos reinos de Egipto. También este tipo de práctica se pueden encontrar durante el reinado de Enrique V en Inglaterra y durante los años 1600 y 1700 las colonias americanas habían proveído tierras para distintas instituciones educativas desde universidades hasta escuelas primarias. Muchos de estos estados también utilizaron la venta o el alquiler de tierras como una fuente de recursos para la educación pública. Aunque en las trece colonias originales no existían tierras concedidas para la educación pública, los gobiernos coloniales y posteriormente los estados de Connecticut, Massachusetts, New York, New Hampshire, New Jersey, Pennsylvania, North Carolina, y Georgia hicieron importantes donaciones de tierras para sostener la educación pública. Estas primeras donaciones de tierras generaron una variedad de fondos permanentes para las escuelas que eran financiados por la venta o alquiler de tierras fiscales. Se reservaron tierras fiscales en cada ejido urbano para apoyar la educación pública o se donaban tierras fiscales para apoyar instituciones educacionales específicas. Dados estos antecedentes, la innovación que produjeron las dos leyes mencionadas, no se refieren al concepto de financiar la educación pública con la donación en fideicomiso de tierras fiscales, sino lo que establecieron fue la sistematización de esta práctica a una escala masiva. 4.3. La Ley General de Tierras de 1785 y la Ley del Noroeste de 1787 La Ley General de Tierras estableció el sistema de parcelamiento cuadricular. Este sistema ideado por parte del gobierno federal fue la creación del proceso de parcelamiento y venta de tierras; la ley también establecía el proceso de escrituración y los antecedentes necesarios para generar la posesión de las tierras de dominio público (tierras fiscales). También definió las primeras reservas de tierras fiscales para los nuevos estados. Previó CAT.OPP/CAG/2007-01 63 que la sección 16 de cada ejido urbano (una milla cuadrada -2,6 Km2 - adyacente al centro de la localidad de 36 millas cuadradas) sería reservada “para el mantenimiento de las escuelas públicas de esa comunidad”. El sistema de parcelamiento cuadricular, combinado con la reserva de una sección céntrica para el financiamiento de las escuelas, era un concepto que claramente definía el sistema de gobernabilidad de las colonias y el sentimiento revolucionario relacionado con la educación pública influenciado por la era del racionalismo y por el concepto de democracia agraria. Este sistema de organización de la tierra y de la educación generó la idea de la comunidad local como unidad básica de gobierno, con poblaciones orientadas alrededor de pequeñas comunidades agrarias que proveerían de una educación democrática a sus ciudadanos, con comunidades racionalmente distribuidas a lo largo del territorio bajo un sistema lógico y matemático de parcelamiento cuadricular. En palabras de la Corte Suprema de Estados Unidos, “el Congreso, al reservar la misma sección céntrica en cada localidad de cada nuevo Estado que se sumará al sistema federal, tenía como objetivo promocionar el buen gobierno y la felicidad de la población por la difusión de la religión, la moral y el conocimiento. Por lo tanto a través de la uniformidad de la asociación local, buscaba plasmar en el corazón de cada nueva comunidad los mismos sentimientos de respeto a la sabiduría, a la previsión, al arte de gobernar ya existentes en los estados más antiguos”. La Ley de Noroeste, promulgada en 1787, creó un sistema de gobiernos territoriales y un proceso de transición para convertir a los territorios en nuevos estados. También introdujo la visión de tierras baratas, la igualdad territorial, y la educación pública que eran consideradas críticas para el éxito de los nuevos asentamientos del oeste. El artículo tercero de la Ley establecía que “la religión, la moral y el conocimiento son necesarios para el buen gobierno y la felicidad de la población, y por lo tanto las escuelas y los recursos educativos deberán siempre ser impulsados,” y el artículo quinto establecía que el Congreso debería admitir cada nuevo estado en “un pie de igualdad” con los existentes. Bajo los términos de esta Ley, luego del asentamiento en nuevas regiones, éstas deberían ser organizadas por una ley del Congreso en territorios estadounidenses, con un gobernador territorial elegido por el Presidente. Una vez que la población alcanzará los 5.000 adultos masculinos, el Territorio podría elegir un legislador y enviarlo al Congreso Norteamericano como delegado sin poder de voto. Cuando la población alcanzará los 60.000 adultos masculinos, el Territorio podría pedir al Congreso su admisión en la Unión. Si la petición era aceptada, el Congreso debía aprobar una ley autorizando una convención constituyente en el nuevo estado, y la constitución propuesta estaba sujeta a un CAT.OPP/CAG/2007-01 64 referéndum popular en el territorio. Si el resultado era exitoso, la constitución estadual debería ser enviada al Congreso Norteamericano para su ratificación, y recién entonces el nuevo estado sería admitido en la Unión. Al momento de la admisión, el nuevo estado también recibiría tierras fiscales en fideicomiso para financiar sus escuelas públicas, así como otras tierras fiscales adicionales, también en fideicomiso para financiar otras instituciones. 4.4. El surgimiento de tierras fiscales en fideicomiso para escuelas El proceso de admisión de un nuevo estado definido en la Ley del Noroeste nunca fue seguido estrictamente por el Congreso Norteamericano. Esto fue particularmente cierto en los años que siguieron a la Guerra Civil, cuando la admisión de nuevos estados fue un proceso que políticamente estaba cargado de conflictos sobre la esclavitud y del deseo tanto del Norte como del Sur por mantener un balance igualitario entre estados libres y estados esclavistas. Antes de 1803, dieciséis estados integraban la Unión, junto a las trece colonias originales estaban Vermont, Tennessee, y Kentucky, que se forjaron a través de la cesión de tierras de las colonias a través de distintos mecanismos. Como no había tierras fiscales federales en estos estados, ninguno de ellos recibió cesión de tierras fiscales en fideicomiso para financiar escuelas. Ohio, en 1803, fue el primer estado de “dominio público” admitido en la Unión, y el primer estado en recibir tierras fiscales en fideicomiso para financiar sus escuelas (la sección 16 prevista en la Ley General de Tierras). Después de Ohio, virtualmente cada nuevo estado admitido en la Unión recibió una gran cantidad de tierras fiscales en fideicomiso en el momento de su admisión. Hubo sólo tres excepciones: Maine, que fue creado por tierras cedidas por Massachussets como parte del “Compromiso de Missouri” de 1820 (que negoció la admisión de Maine como un estado libre a cambio de la admisión de Missouri como un estado esclavista); Texas, que fue anexado como un estado soberano existente en 1848, después de su exitosa guerra de independencia contra México (y por lo tanto tenía soberanía sobre sus tierras) y West Virginia que se forjó su independencia del ya existente Estado de Virginia y admitido como un estado libre durante la Guerra Civil. CAT.OPP/CAG/2007-01 65 4.5. Consolidación de la autoridad estadual sobre las tierras fiscales cedidas en fideicomiso para escuelas públicas Mientras el Congreso Norteamericano mantenía un apoyo constante a la práctica de ceder tierras fiscales a los estados, la doctrina bajo la cual esto ocurría evolucionó significativamente con el transcurso del tiempo. Por ejemplo, aunque actualmente nos referimos a las tierras fiscales que fueron cedidas a los estados como “tierras fiscales en fideicomiso con fines específicos”, bajo el concepto original de la Ley General de Tierras y la Ley del Noroeste, la sección 16 en cada pueblo debería ser reservada para mantener las escuelas de esa localidad. Como el proceso de ingreso de nuevos estados a la Unión siguió su curso, la poca practicidad de este concepto, dado en gran parte por las limitaciones que el sistema de parcelamiento cuadricular tenía en sí mismo, se volvió recurrente. Esto se debía a que las localidades en las tierras del oeste se habían desarrollado relacionadas con los ríos, tierras fértiles, pasajes montañosos, rutas, ferrocarriles y fuertes del ejército y no con límites artificiales como fijaba la ley. Por eso, no siempre existían gobiernos locales relacionados con cada pueblo que permitiera administrar las tierras fiscales en fideicomiso, y cuando estos gobiernos existían frecuentemente carecían de los recursos y capacidades para administrar dichas tierras. Sin embargo, mientras algunas tierras fiscales podían ser alquiladas para la agricultura u otro fin comercial, otras no se encontraban en las proximidades de los centros poblacionales. Debido a esta causa, muchas de estas tierras no proveían de recursos económicos significativos para financiar las escuelas en una comunidad, y por lo tanto, en algunos casos, las tierras eran entregadas a los maestros para su explotación, en lugar de pagarles un sueldo hasta que hubiese suficientes ingresos por impuestos que pudieran cubrir el pago del sueldo del maestro. En respuesta a este problema, el Congreso Norteamericano fue variando la política de ceder tierras fiscales en el centro de las localidades para su administración local, para posteriormente centralizar la administración de las tierras fiscales en manos del gobierno estadual y distribuir los beneficios obtenidos a las escuelas de cada localidad. Finalmente, en la concesión de tierras a Michigan en 1836, el Congreso Norteamericano simplemente otorgó tierras fiscales en fideicomiso al Estado para financiar las escuelas. Para mediados del siglo XIX el Congreso Norteamericano abandonó el concepto de otorgar tierras fiscales para financiar las escuelas en los ejidos urbanos y siguió CAT.OPP/CAG/2007-01 66 el sistema utilizado para Michigan, simplemente otorgando tierras al estado, para ser administradas por él para financiar las escuelas de todo el estado. 4.6. Expansión del proceso de cesión de tierras fiscales en fideicomiso con fines específicos La superficie de las tierras cedidas se incrementó significativamente con el transcurso del tiempo. Desde 1803 a 1853, el Congreso admitió en la Unión catorce nuevos estados, cada uno de los cuales recibió la sección 16 de cada localidad. Sin embargo, con la admisión de California en 1850 y la de Oregón en 1859, el Congreso comenzó a ceder dos secciones (la 16 y la 36) en cada localidad del nuevo estado incorporado. Con la admisión de Utah, la cesión abarcó las secciones 2, 16, 32 y 36. El Congreso continuó con esta política con la admisión de Arizona y Nuevo México en 1910. La causa de estos incrementos en las cantidades de tierras fiscales cedidas tiene que ver con una cuestión práctica. Cuando se admitió a los primeros estados (los del medio este y los del sur), los estados administraron las tierras vendiéndolas o alquilándolas para la agricultura. Sin embargo, cuando se procedió a la admisión de estados que se encontraban al oeste del meridiano 100º, la calidad de las tierras fiscales cedidas varió significativamente pasando de una llanura rica en el este a tierras áridas y secas en el oeste. Por esto razón, las tierras del oeste tenían un bajo valor para la agricultura y la organización de actividades ganaderas, mineras o forestales aún no había florecido. A raíz de esta situación, se consideró que estos estados necesitarían de mayor cantidad de tierras fiscales en fideicomiso para poder financiar a sus escuelas y otras instituciones de servicios esenciales. Una estimación realizada por la Comisión de Tierras de Washington, calculó que el valor de una sección de tierra era de alrededor de u$s 800 y suponiendo que la misma pudiese ser vendida y ese dinero reinvertido se podría obtener una renta de sólo u$s 48 por año que era equivalente al sueldo de un mes de un maestro. La cesión de tierras fiscales para financiar escuelas fue acompañada también por la cesión de grandes superficies de tierras fiscales para financiar otras instituciones públicas. Por ejemplo en 1841, se otorgaron 200.000 has de tierras fiscales a cada estado para distintas instituciones públicas. Posteriormente por la Ley de Institutos Agrícolas de 1862 se concedieron tierras fiscales, a todos los estados que no se habían rebelado contra la Unión, para financiar escuelas agrícolas y mecánicas (cuando la Guerra Civil terminó este beneficio se extendió a los estados restantes). Otros programas de cesión de tierras fiscales fueron CAT.OPP/CAG/2007-01 67 utilizados para financiar mejoras en la infraestructura de los estados, por ejemplo ferrocarriles. El tamaño de las cesiones aumentó con el tiempo. En el momento de admitir a los Estados Nuevo México y Arizona, ambos recibieron enormes cantidades de tierras fiscales en fideicomiso para: universidades ( 80.000 Has.), edificios públicos (40.000 Has), asilos psiquiátricos (40.000 Has), escuelas y asilos de ciegos, sordos y mudos (40.000 Has), hospital para discapacitados mineros (20.000 Has), escuelas primarias (80.000 Has), cárceles y reformatorios (40.000 Has), escuelas de agricultura y mecánicas (60.000 Has), escuelas mineras (60.000 Has), institutos militares (40.000 Has), y 400.000 has para el pago de bonos municipales. Muchos estados recibieron otras tierras fiscales para financiar sus funciones territoriales de gobierno. También se cedieron tierras fiscales a todos los estados (incluidos los del este) para financiar universidades. Aparte de estas cesiones adicionales, el Congreso llevó a la práctica el permitirle a los estados seleccionar “tierras a cambio” dentro de las fronteras estaduales de las del gobierno federal cuando las tierras originales que les correspondían en una determinada localidad se encontraren ocupadas por colonos privados, cesiones a ferrocarriles hechas por el Estado Federal u otro tipo de reservas federales. En un comienzo no podían ser tomadas como “tierras a cambio” tierras federales que ya tuvieran un destino específico. En la ley ómnibus de 1889 que aprobó las constituciones de Dakota del Norte, Dakota del Sur, Montana, y Washington y la de 1896 de Utah no se podía compensar tierras tomando para los estados las tierras federales previstas para reservas de comunidades indígenas. Sin embargo, al final del proceso de cesión de tierras el Congreso permitió entregar como “tierras a cambio” incluso áreas que estaban reservadas para propósitos federales. Esto se puede comprobar en los casos de Oklahoma, Arizona y Nuevo México que recibieron como “tierras a cambio” incluso aquellas que eran para las reservaciones indias. Al menos inicialmente, este canje de tierras no fue la panacea para los estados. Un ejemplo de esa realidad, fue el estado de Washington que recibió tierras fiscales muy alejadas de los ríos navegables o de las líneas ferroviarias por lo que no eran factibles de ser utilizadas, en el corto plazo para la tala de árboles o para la agricultura. Por lo tanto estas tierras proveían de muy pocos recursos para financiar la educación y otras instituciones estatales en los primeros años de la cesión. Washington liquidó rápidamente las tierras que tenían algún valor comercial a los pocos años de la creación del estado. Solamente dejó en alquiler y procedió a vender la CAT.OPP/CAG/2007-01 68 madera de las tierras más accesibles y que generaron los principales recursos que se volcaron al fideicomiso del estado. Para aquellos estados que siguieron conservando las tierras fiscales en fideicomiso hasta la actualidad, la selección de “tierras a cambio” que en su momento no había sido la óptima les ha producido significativos dividendos ya que en el intercambio de tierras les permitió obtener grandes superficies en vez de tener parcelas aisladas en los ejidos urbanos. Además, hoy las tierras ya no se encuentran en lugares inaccesibles o remotos como lo eran en el momento de la cesión. Si tomamos el caso de Arizona, por ejemplo, se quedó con enormes superficies en todo el estado a cambio de las parcelas que debía recibir originalmente. Como Arizona creció esas tierras tiene actualmente un alto valor. El Departamento de Tierras del Estado hoy controla más del treinta por ciento de las tierras disponibles para desarrollo urbano en el condado de Maricopa, que es el de mayor desarrollo del Estado. Una estimación rápida realizada de una superficie de 8.000 has., que se encuentra ubicada al norte de Phoenix (capital del estado), permitirá generar por alquiler y venta de tierras una suma aproximada a los cuarenta mil millones de dólares para el fondo fiduciario estadual en los próximos cien años. El Congreso Norteamericano continuó con este enfoque de cesión de tierras en fideicomiso a los estados hasta ceder los derechos mineros sobre las tierras ya cedidas. Al principio estos derechos habían sido excluidos de la cesión de tierras lo que fue apoyado por la doctrina establecida por la Corte Suprema pero por la Ley Jones de 1927, el Congreso decidió ceder los derechos mineros a los estados en todas las tierras cedidas. 4.7. Cambios de reglas en la administración y ventas de tierras fiscales en fideicomiso Las reglas y las restricciones aplicables a las tierras fiscales en fideicomiso variaron significativamente con el transcurso del tiempo. En las primeras cesiones de tierras a los estados, el Congreso supuso que las tierras en fideicomiso para financiar escuelas serían alquiladas para generar ingresos pero que no serían vendidas. Sin embargo, la experiencia de los estados con el alquiler demostró tener fallas. En 1827, Ohio pidió permiso para vender las tierras por lo que el Congreso aprobó legislación retroactiva que permitía a todos los estados la posibilidad de enajenar las tierras cedidas en fiducia. Con esto el Congreso dejó que los estados administrarán las tierras cedidas como mejor les pareciera. CAT.OPP/CAG/2007-01 69 El Estado de Indiana sirve como un excelente ejemplo de la administración de uno de los primeros fondos fiduciarios. En su Constitución aprobada en 1816 contenía sólo una mención al fondo fiduciario de tierras para las escuelas “si la sección 16 de cualquier localidad fuese vendida o cedida, otra porción de tierra equivalente debía ser cedida a los habitantes de esa localidad para financiar las escuelas” En esta redacción se nota claramente la falta de requerimientos sobre la venta o disposición de las tierras, de las obligaciones fiduciarias o de otros principios comúnmente asociados con los fondos fiduciarios de tierras. La mayoría de las primeras cesiones de tierras en fiducia sólo contenían cláusulas similares a la mencionada. La mayoría de los primeros estados a los que se les entregaron tierras en fiducia procedieron rápidamente a su venta. Esto trajo como resultado que los potenciales beneficios que se podría haber obtenido de la renta de las tierras se perdieron debido a la incompetencia, falta de una política definida y a la corrupción generando sólo recursos ínfimos para las escuelas. Para 1830, los estados estaban muy preocupados con la sustentabilidad de este enfoque en la administración de las tierras fiscales fiduciarias. Una de las primeras innovaciones para resolver este problema apareció con la admisión del Estado de Michigan en 1837. Aunque las cesiones previas de tierras fiscales establecían que las mismas se realizaban para financiar la educación pública, en la Constitución de Michigan se adoptaron las primeras restricciones específicas en el uso de los recursos provenientes de estas tierras. Se requería que el Estado debía establecer procedimientos para las ventas de tierras y el producido de esas ventas pasaría a un fondo permanente. Este fondo debía ser invertido y los intereses de estas inversiones más los ingresos por alquiler de tierras serían utilizados para financiar las actividades escolares. Esto servía para un doble objetivo, primero desalentar las ventas rápidas de tierras con el objeto de lograr beneficios en el corto plazo (dado que se podían disponer solamente de los intereses generados con el dinero obtenido de las ventas) y segundo que el producido por las ventas no estuviese inmediatamente disponible (asegurando que cuando las tierras fuesen vendidas, el estado continuaría beneficiándose con la inversión de esos recursos a perpetuidad). Después de la Constitución de Michigan, todos los estados que ingresaron posteriormente a la Unión adoptaron el concepto de fondo permanente; Luisiana que fue admitida veinticinco años antes, modificó su Constitución para crear el fondo permanente. Como se verá más adelante, el Congreso Norteamericano siguió con este concepto CAT.OPP/CAG/2007-01 70 incorporando el requerimiento de un fondo permanente en la Ley de Incorporación del Estado de Colorado y lo hizo extensivo a todas las cesiones de tierras fiscales posteriores. Esta innovación fue rápidamente complementada con complejas restricciones incluidas en las constituciones estaduales para la venta y alquiler de tierras en fiducia. Algunos estados comenzaron a establecer requerimientos de precios mínimos para la venta, de valor de mercado y todas debían realizarse por remate público. Paulatinamente los estados fueron adoptando un enfoque cada vez más conservador en la administración de las tierras fiscales en fideicomiso que se reflejó también en la política que se adoptó el gobierno federal en el manejo de sus propias tierras fiscales. A medida que transcurrió el siglo XIX, el Congreso fue cambiando su política de disposición rápida de las tierras para fortalecer el principio de “destino manifiesto” hacia una política de retención de tierras fiscales y de la administración de las mismas a largo plazo para múltiples propósitos. Con esta modificación de la política, el Congreso reservó las tierras fiscales para bosques, parques y otros usos públicos. Las restricciones impuestas a los fondos fiduciarios estaduales siguieron la misma dirección con limitaciones tales como prohibición de ventas de tierras fiscales estaduales y un fuerte énfasis en el alquiler y licencias en las plantaciones de bosques para obtención de madera, pastura para ganado, agricultura y otros usos sustentables. Es importante destacar, que muchas de estas limitaciones fueron impuestas por los propios estados ya que para mediados del siglo XIX las restricciones que se habían aprobado en cada estado eran mucho más fuertes que las que había establecido el Congreso Norteamericano en las leyes de admisión de nuevos estados. Una visión equivocada es que el Congreso Norteamericano desarrolló estas restricciones sobre los fondos fiduciarios de tierras fiscales para que los estados no mal vendieran las tierras, pero de hecho el objetivo era asegurarle a los estados los beneficios que recibirían de sus fondos fiduciarios a largo plazo ya que el Congreso Nacional siguió con su política de cesión de tierras a los estados a pesar de estas restricciones impuestas a la administración de tierras fiscales. La primera restricción del Congreso apareció en la Ley de admisión de Colorado en 1875, que contenía requerimientos para establecer un fondo estadual permanente, la venta de tierras por licitación pública y fijación de precios mínimos para toda venta de tierras. Todos los estados que fueron admitidos posteriormente estuvieron sujetos a similares requerimientos. Sin embargo estas restricciones no impidieron que varios estados continuarán con un programa de rápida venta de tierras. El Estado de Oregon vendió la mayor parte de las tierras fiscales de su fondo fiduciario basándose en el concepto de que CAT.OPP/CAG/2007-01 71 las tierras en manos privadas generarían mayores ingresos para el Estado a través de impuestos que si permanecían bajo la propiedad estatal. Esta política se discontinuó luego del descubrimiento de una amplia red de corrupción y fraude determinada por una serie de investigaciones realizadas entre 1872 y 1913 que produjo el encarcelamiento de veintiún funcionarios de alto nivel estaduales y federales. Si tomamos la perspectiva del valor actual de las tierras y los recursos que las mismas generan, es razonable pensar que hubiese sido preferible dar en alquiler las tierras a los maestros más que darles un salario. Sin embargo varias de las políticas que hubiesen beneficiado a los actuales estudiantes hubiesen perjudicado a las primeras generaciones de alumnos. El desarrollo del proceso de cesión de tierras en fiducias continuó con las Leyes de Admisión de Nuevo México y Arizona. Estas Leyes establecieron detalladas condiciones sobre la administración y disposición de los fondos fiduciarios de tierras y sobre la administración de los recursos derivados de ellos. Incluían que la venta o alquiler de tierras debía hacerse por licitación pública, excepciones para los alquileres de corto plazo, el alquiler de tierras relacionadas con la minería y condiciones para establecer el fondo permanente. También establecía que cualquiera que dispusiera de tierras violando estos requerimientos sería responsable de estas anomalías ante el Fiscal General de Estados Unidos. 4.8. Lecciones dadas por la historia Debido al proceso acumulativo que caracterizó al programa federal de cesión de tierras a los estados, existen substanciales diferencias en los enfoques que le dieron los distintos estados al tema. Estas diferencias van desde requerimientos de si las tierras deben ser vendidas en licitación pública hasta sutiles variaciones en las formas, que implican que las mismas no pueden ser analizadas en la Justicia. Por ejemplo, existen muchas variaciones en las formas de describir el propósito que tienen las tierras cedidas a los estados que generan sutiles implicancias sobre como se deben administrar las tierras y quien se debe beneficiar con los recursos que de ellas se obtienen. En la Ley de admisión de Ohio las tierras fueron cedidas para “el uso de las escuelas”. En cambio en el caso de Oklahoma se indicaba que las tierras cedidas eran para “el uso y beneficio de las escuelas primarias”, mientras que en la Ley de admisión de Colorado se establecía que la cesión era “para financiar las escuelas primarias”. Esta frase también fue utilizada en otras leyes de admisión de nuevos estados. CAT.OPP/CAG/2007-01 72 Estas diferencias dejaban librados a los estados a desarrollar su propia política sobre la forma de administrar las tierras cedidas en fideicomiso. Ninguna ley de admisión establecía una forma específica de administrar los fideicomisos, aunque varios estados adoptaron el sistema de crear “una comisión de tierras” dirigida por funcionarios de alto nivel. Otros estados prefirieron comisiones dirigidas por funcionarios elegidos por el gobernador y otras por funcionarios elegidos por votación popular. Estas diferencias en las leyes de admisión y en las constituciones estaduales se tradujeron en una significativa diversidad de programas de administración de las tierras fiscales en fideicomiso. Sin embargo como la historia lo ha demostrado, todos estos fondos tienen un origen común y por lo tanto comparten muchas características similares. Tal vez las más importante en el concepto de responsabilidad fiduciaria en si misma. 4.9. Situación Actual A continuación se realiza un estudio de distintas variables de la administración de las tierras fiscales en fideicomiso a fin analizar el resultado de esta política pública en los distintos estados y ver que grado de participación tienen los recursos obtenidos en la financiación de la educación pública en cada estado. Como se puede observar en el Gráfico Nº 1, el Estado de Arizona con 9,3 millones de acres (3,72 millones de hectáreas) y Nuevo México con 9 millones de acres (3,6 millones de hectáreas) tienen por lejos las mayores superficies de tierras fiscales en fideicomiso, siguiéndolos Montana con 5.1 millones de acres (2 millones de hectáreas). Entre los tres estados tienen aproximadamente el 50% de las tierras fiscales en fideicomiso de todos los estados de la Unión. De hecho, nueve de los once estados del oeste - Arizona, Colorado, Idaho, Montana, Nuevo México, Oregon, Utah, Washington, y Wyoming – poseen 40 millones de acres (16,5 millones de hectáreas) que representan aproximadamente el ochenta y cinco por ciento de las tierras fiscales estaduales existentes en Estados Unidos. CAT.OPP/CAG/2007-01 73 Gráfico Nº 1: Superficie en acres de los fondos fiduciarios de tierras en los distintos estados Notas: 1- Todos los datos han sido extractados de los informes anuales del año 2004 excepto los estados de Colorado, Minnesota, Dakota del Norte, Utah y Washington que los datos fueron tomados de los informes del año 2003 2- Fondo Fiduciario de tierras para escuelas primarias 3- Otros fondos fiduciarios de tierras para otras instituciones públicas 4- Abreviaturas de los estados AZ: Arizona; CA: California; CO: Colorado; ID: Idaho; NE: Nebraska; NV: Nevada; NM:Nuevo México; ND: North Dakota; OR: Oregon; SD: South Dakota; WI: Wisconsin; MN: Minnesota; TX: Texas; UT: Utah; MT: Montana OK: Oklahoma WA: Washington WY: Wyoming CAT.OPP/CAG/2007-01 74 Gráfico Nº 2- Ingresos Brutos Anuales por las Tierras Fiscales en Fideicomiso Año 2003 (en u$s) Si comparamos el Gráfico Nº 1 con el Gráfico Nº 2 nos encontramos que, no en todos los casos existe una relación directa entre los ingresos brutos generados por las tierras fiscales en fideicomiso y la superficie de tierras fiscales de cada estado, es decir que no existe un ingreso uniforme por acre de superficie en fideicomiso. Esto se debe a que las actividades desarrolladas con las tierras fiscales en fideicomiso son muy variables y se pueden clasificar en: • Superficiales: alquiler de tierras fiscales para agricultura, pastoreo de ganado, comercio, industria, áreas residenciales y derechos de paso para instalaciones de empresas de servicios públicos tales como gasoductos, electroductos, cableados subterráneos de empresas de telecomunicaciones, etc. • Subterráneos: regalías por petróleo, gas, carbón y otros minerales. • Ventas de tierras fiscales. Si tomamos el caso de Texas, los altos ingresos por la administración de sus tierras fiscales tienen origen en las regalías obtenidas por la explotación de gas y petróleo de esas tierras. La mayoría de los estados obtiene la mayor parte de sus ingresos de una pequeña porción de todo su portfolio de tierras fiscales en fideicomiso. Analizando el origen de los CAT.OPP/CAG/2007-01 75 ingresos nos encontramos con que los Estados de Idaho, Montana, Oregon y Washington los obtienen fundamentalmente de las tierras con bosques de madera de alta calidad, mientras que Montana, Nuevo México, Texas, Utah, y Wyoming los obtienen de sus reservas de gas y petróleo. Para los casos de Colorado, Montana, Nuevo México, y Utah dependen también de las regalías carboníferas y de otros. Por último Arizona y Utah también obtienen recursos de importancia por los nuevos desarrollos de áreas comerciales y residenciales dentro de cada estado. Gráfico Nº 3 – Balance de los fondos permanentes de los fondos fiduciarios Año 2003 (en u$s) Virtualmente, todos los estados que continúan poseyendo tierras fiscales en fideicomiso cuentan con algún tipo de mecanismo de “fondo permanente” para retener los producidos de las ventas de tierras fiscales o las regalías obtenidas de los recursos no renovables (tales como petróleo, gas y otros minerales) y además para proteger el “corpus” o “core” de sus fondos fiduciarios. Estos recursos son generalmente invertidos en una combinación de bonos de alta calificación según las empresas evaluadoras de riesgo (Standard and Poor´s, A.M. Best) aunque algunos estados permiten que un porcentaje de los fondos sean invertidos en acciones de empresas de primera línea. En algunos estados estos fondos son utilizados para garantizar bonos de escuelas, préstamos y otros beneficiarios de la deuda pública. CAT.OPP/CAG/2007-01 76 Algunos de estos fondos tienen actualmente varios miles de millones de dólares tal como se puede observar en el Gráfico Nº 3. Texas y Nuevo México, que ganan cientos de millones anuales de las regalías petroleras y gasíferas, tiene los fondos permanentes más grandes (Nuevo México tiene un fondo equivalente a 7.600 millones de dólares y Texas a casi 20.000 millones de dólares. De los estados no productores de gas y petróleo, Arizona tiene el fondo permanente más grande que totaliza 1.300 millones y que está creciendo rápidamente debido a la venta de tierras fiscales de alto valor. Los fondos que se distribuyen a los beneficiarios (las escuelas públicas) son la suma los intereses generados de los fondos permanentes y aquellos ingresos obtenidos de las actividades de características renovables, es decir alquileres de tierras fiscales para agricultura, pastoreo de ganado, comercio, industria, áreas residenciales y derechos de paso para instalaciones de empresas de servicios públicos. Estos ingresos en varios estados, principalmente en aquellos con muy pocas tierras fiscales, no representan una porción significativa del presupuesto educativo estadual. Sin embargo en unos pocos estados los fondos distribuidos llegan a varios cientos de millones de dólares anuales. La tabla Nº 1 brinda una idea rápida de la importancia relativa de estos recursos respecto el presupuesto anual de las escuelas primarias de cada estado. Si analizamos el contenido de la misma, vale la pena hacer notar que en muchos estados, los recursos distribuidos no son significativos para financiar la educación pública primaria dados los altos valores de los presupuestos educativos. Sin embargo, en el Estado de Nuevo México representan el 14,33% del presupuesto anual de las escuelas primarias, seguido por Dakota del Norte con 7,50% y Montana con 4,66%. Un caso especial es el Estado de Texas que distribuye anualmente unos 880 millones de dólares, siendo por lejos en valor absoluto el mayor aporte de todos los estados, pero estos recursos representan solo el 2,37% del presupuesto anual de las escuelas primarias del Estado de Texas. CAT.OPP/CAG/2007-01 77 Tabla Nº 1 – Distribución de Recursos vs. Presupuesto Educación Pública Primaria por Estado (en u$s) Nota: * Datos de recursos distribuidos en el año 2003. Para el resto de los Estados los datos corresponden al año 2004. Los presupuestos educativos corresponden al año 2003 CAT.OPP/CAG/2007-01 78 Tabla Nº 2 – Recursos Obtenidos vs. Presupuesto del Ente Administrador de algunos de los estados analizados Estado Recursos Gastos del Ente Porcentaje del Obtenidos Administrador Gasto de (en mill. de u$s) (en mill. de u$s) Administración 226,38 13,50 5,96% Colorado* 31,00 3,40 10,96% Idazo 55,10 13,00 23,59% Montana 56,26 8,80 15,64% 381,00 14,00 3,67% Oregon* 42,79 5,00 11,68% Utah* 25,82 9,40 36,40% Washington* 89,00 24,20 27,19% Arizona Nuevo México Nota: Los datos corresponden al año 2004 salvo para los Estados señalados con * cuyos recursos obtenidos corresponden al año 2003 Una de las premisas de esta política pública de fondos fiduciarios de tierras fiscales es que los Entes Administradores se financien con parte de los recursos distribuidos de la administración de los fondos sin tener que apelar al presupuesto anual de cada estado. En la Tabla Nº 2, se han tomado algunos estados y se comparan el presupuesto del ente administrador y los recursos distribuidos anualmente a los beneficiarios a fin de analizar la eficiencia de cada ente administrador. El menos eficiente es el ente del estado de Washington con un gasto del 27,19% de los recursos distribuidos mientras que en Nuevo México se obtiene la mayor eficiencia con solo una participación del 3,67%. 4.10. Conclusiones Del estudio de la política en el manejo de las tierras fiscales en fideicomiso en los distintos estados de Estados Unidos de América se desprenden algunas conclusiones que se mencionan a continuación: 1. Persistencia y continuidad en una política pública determinada: la decisión tomada hace más de 200 años de financiar la educación pública y de otros servicios CAT.OPP/CAG/2007-01 79 esenciales para los ciudadanos con los recursos obtenidos por la administración de tierras fiscales. 2. Mejora continua de la política pública adoptada: Ante los fracasos en las administraciones iniciales en algunos estados desde el Congreso Norteamericano se buscó siempre mejorar los procedimientos y poner limitaciones a la discrecionalidad de los funcionarios antes que proceder al cambio de política. 3. Preservación de los recursos para las generaciones futuras: Al crear los “fondos permanentes” y permitir disponer sólo de los intereses generados por los mismos y de los ingresos obtenidos por las actividades que se podrían denominar renovables se preserva la existencia de recursos para las generaciones futuras ya que los fondos permanentes son a perpetuidad. 4. Adopción de la política pública nacional por parte de los estados: A pesar que algunos estados prácticamente remataron el patrimonio de tierras fiscales cedido por el Gobierno Nacional, otros estados, ya sea por condicionamientos impuestos por el Congreso Norteamericano o por decisión propia continuaron y mejoraron la política originalmente establecida. 5. Limitación en los presupuestos de los entes de administración: En este caso los valores de eficiencia obtenidos son muy dispares, sin embargo es necesario destacar la limitación que estos organismos no pueden recurrir al presupuesto del estado ni pueden utilizar para la administración los recursos obtenidos por venta de tierras o por actividades no renovables ya que éstas deben se depositadas en los fondos permanentes. CAT.OPP/CAG/2007-01 80
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