República Bolivariana de Venezuela Universidad Rafael Urdaneta Facultad de Ciencias Políticas, Administrativas y Sociales Escuela de Derecho R SE E R S HO C E ER S O D VA Perentoriedad de las imposiciones de las medidas de coerción personal D en Venezuela. Trabajo Especial de Grado para optar al Título de Abogado Realizado por la bachiller: María Sara Barrios C.I.: 7.620.868 Tutor académico: Abg. Alberto Jurado. Tutora metodológica: Diana Manzanero Maracaibo, enero de 2012. Introducción Existen en el derecho diferentes medios para llegar a la obtención de la verdad, para ello es importante conseguir una decisión por parte de los S O D A normas y principios Vlas equitativa, y se consiga cumpliendo conEtodas R S el mismo en el artículo 49 de la E R recogidas por el debido proceso, consagrado OS H C Constitución deR laE Republica Bolivariana de Venezuela (1999). DE jueces, pero aunado a esto, es elemental que la decisión o sentencia sea Además es realmente fundamental que la sentencia obtenida pueda ser ejecutada debido a que de nada serviría iniciar una investigación, llevar a cabo un engorroso proceso, si la decisión producto del mismo, no puede ser ejecutada. Por dicha razón han sido creadas las medidas cautelares, las cuales llevan consigo la finalidad de proteger las resultas del litigio. En este sentido en lo atinente a la rama del derecho penal, han sido creadas las llamadas, medidas de coerción personal, las cuales van a recaer directamente sobre la persona del imputado y en ocasiones podrían comprometer la responsabilidad de terceras personas ajenas a la comisión del delito, en aras de proteger intereses jurídicos de las partes. Dichas medidas se encuentran contempladas de manera general en el Código Orgánico Procesal Penal venezolano (2009), además de diversas medidas que partiendo de lo establecido por la referida ley adjetiva regulan situaciones referidas a materias especiales, como por ejemplo la materia de violencia contra la mujer, y la responsabilidad penal del adolescente. Ahora bien como quiera que sean aplicadas las medidas de coerción personal de acuerdo al caso del cual se trate, las mismas se encuentran ligadas al derecho a la libertad individual de las personas, el cual ha sido 1 defendido con gran celo tanto por el ordenamiento jurídico venezolano, como por los pactos, tratados y convenios internacionales referentes a derechos humanos. En este sentido, en la presente investigación se procura describir los requisitos de procedencia de las medidas de coerción personal, establecidos en el ordenamiento jurídico venezolano y estudiar los parámetros que deben seguirse por el juez al momento de su aplicación, con el propósito de estudiar la vigencia de los mismos con respecto a la situación jurídica social S O D VA del país. ER S E R individual, siendo este el derecho fundamental con el cual puede encontrarse S O H EelCestablecimiento de estas medidas de coerción, además ligado íntimamente R E D de otros derechos humanos que podrían restringirse en determinadas De igual modo se estudian los fundamentos del derecho a la libertad circunstancias. Por último se busca analizar la proporcionalidad entre derecho a la libertad, considerado de la manera antes mencionada con el conjunto de derechos e intereses protegidos con la imposición de la medida de privación judicial preventiva de libertad. 2 CAPÍTULO I FUNDAMENTACIÓN Planteamiento y Formulación del Problema S O D VA R SE E R S Todo proceso judicial está constituido por una serie de procedimientos los HO C E y la ejecución de la misma, resolviendo así la controversia planteada por las DER cuales tienen como propósito el dictamen por parte del juez de una sentencia partes, no obstante, durante dicho proceso es posible que alguna de estas realicen actos maliciosos con la finalidad de evadir las potenciales obligaciones derivadas del mismo. Es por ello que existe la posibilidad de solicitar medidas para el aseguramiento del fallo, y de esta manera, una vez terminado el litigio, la sentencia dictada por el juez sea ejecutada y no quede ilusoria la ejecución de la misma, garantizando la tutela judicial efectiva. Estas medidas son las llamadas medidas de coerción personal, las cuales han sido implementadas en el proceso penal, con la finalidad de garantizar el referido derecho a la tutela judicial efectiva establecido en el artículo 26 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999). Dichas medidas están señaladas en el ordenamiento jurídico venezolano en el título VIII, libro primero del Código Orgánico Procesal Penal (2009). Es importante acotar que para aplicar las medidas in comento, el juzgador debe seguir una serie de principios establecidos en la ley adjetiva penal, además de tomar en cuenta y respetar los derechos y garantías consagrados en la Constitución (1999), ya que estas medidas tal y como lo ha señalado Losing citado por García (1998) “llevan consigo la intervención o restricción de derechos fundamentales” (p.228). Dentro de dichos principios se 3 encuentra el de excepcionalidad establecido en el artículo 243 de la ley adjetiva penal, el de proporcionalidad, consagrado en su artículo 244, el de motivación, contenido en el artículo 246 de la misma ley, entre otros. No resulta menos importante señalar que existen limitaciones a la aplicación de las medidas de coerción personal, las cuales tienden a proteger la dignidad del sujeto al cual se le atañe la ejecución de un hecho punible; limitaciones en las que se toma en cuenta su edad, la salud propia y la salud y bienestar de sus hijos. S O D VA De la misma forma, la medida de coerción personal por excelencia, es la ER S E R ésta es considerada por Maldonado el artículo 250 de la ley adjetiva penal; S O CH y constituye una medida cautelar que solo E (2003) como “una excepción R DE privación judicial preventiva de libertad, la cual se encuentra establecida en procederá cuando se den los requisitos que la hace procedente” (p.211), de forma que el juez debe ser cuidadoso en la aplicación de la misma. Es entonces la finalidad de la aplicación de esta medida, según afirma Vásquez (1999), “asegurar que el imputado estará a disposición del juez para ser juzgado, de ahí que no resulte legítimo la desinstitucionalización con otros fines para evitar escándalos probables, anticipar una pena segura o evitar la comisión de nuevos delitos” (p.126), de acuerdo con la autora, se estaría protegiendo a la colectividad en general de daños mayores, que podría ocasionar el presunto autor del delito. Ahora bien, cuando se trata de medidas de coerción personal, se suele pensar que solo se refiere a la medida de privación judicial preventiva de libertad, no obstante, esta medida de coerción personal no es la única considerada como tal, ya que el mismo Código tipifica otras medidas conocidas como medidas cautelares sustitutivas, las cuales sustituyen o suplen la privación judicial preventiva de libertad, pero de igual forma son medidas que coartan el libre desenvolvimiento de la persona investigada por un delito. 4 En este sentido se ha pronunciado la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia venezolano, en sentencia número 1712 de fecha 12 de agosto de 2001, en la cual señala: “Etimológicamente, por medidas de coerción personal, debe entenderse no sólo la privación de libertad personal, sino cualquier tipo de sujeción a que es sometida cualquier persona, por lo que incluso las medidas cautelares sustitutivas, son de esa clase”. Estas medidas se encuentran taxativamente establecidas en el artículo 256 del Código Orgánico Procesal Penal (2009), además en dicho artículo se señala S O D VA la posibilidad de que el juez imponga cualquier otra medida que estime ER S E R En este orden de ideas el juez penal, en el momento de entrar al análisis S O H ECdebe tomar en cuenta una serie de requisitos, con la del caso en concreto R E D finalidad de aplicar de manera correcta la medida de coerción personal, los conveniente. cuales básicamente se dividen por una parte, en la posibilidad de ser juzgado en libertad a través de medidas menos rigurosas y por otra, la medida de privación de libertad, la cual será cumplida por el imputado o acusado en un centro de detención, siendo esta última aplicada en el caso de que se cumplan los requisitos establecidos en la ley y que no exista otra forma de asegurar los derechos de la víctima y la protección de la colectividad en general. Así puede observarse que estas medidas han sido creadas con el propósito de tutelar los derechos de la víctima y de la colectividad, pero de igual manera al aplicar una medida cautelar sustitutiva en lugar de la privativa de libertad, se están protegiendo los derechos del imputado cuando se le otorga una medida menos rigurosa. De esta manera expresa Maldonado (2003) que, “el tribunal no debe decretar la detención judicial preventiva de la libertad de un imputado, si puede obtener la satisfacción de los fines que se persigue con esta medida mediante otros medios sustitutivos menos gravosos y menos perjudiciales y de posible cumplimiento para el imputado” (p.209), es decir, que el juez debe 5 apreciar acertadamente los elementos del caso para dictar una medida cautelar de coerción personal, asegurando tanto los derechos del imputado al no ser sometido a la privación de libertad, así como también a la víctima y la colectividad en general que la medida dictada es suficiente para garantizar las resultas del proceso otorgando una tutela judicial efectiva. Algunos de los presupuestos o requisitos a ser tomados por el juez para dictar la medida de privación de libertad están establecidos en el Código Orgánico Procesal Penal (2009), entre las cuales cabe mencionar, el hecho S O D VA punible que merezca pena privativa de libertad y cuya acción penal no se ER S E R sido autor de un hecho punible, la para estimar que el imputado ha S O CporHla apreciación del caso, que exista peligro de fuga E presunción razonable R E D u obstaculización en la búsqueda de la verdad en el proceso, entre otras. encuentre evidentemente prescrita, los fundados elementos de convicción En ese sentido, las medidas de privación preventiva de libertad dictadas por los jueces, deben estar apegadas a las disposiciones establecidas en la ley, no obstante por tratarse de un derecho constitucional trascendental como es la libertad, los mismos están llamados a imponerla cuando sea estrictamente necesario y no exista otra forma de asegurar la continuación del proceso. Por dicha razón, se hace necesario revisar la suficiencia de los requisitos establecidos en la ley para la imposición de esta medida, con la finalidad constatar si estos guardan la proporcionalidad necesaria con el derecho que se está restringiendo, ya que de no ser así podría existir una proliferación en la imposición de la misma por parte de los jueces penales, menguando su carácter excepcional e instituyéndose como regla al momento de la apreciación de los casos en concreto, pudiéndose presentar un abuso en el dictamen de la misma atentando contra la libertad personal del imputado. De igual modo considerando que los requisitos establecidos en la referida norma adjetiva penal no han sido reformados por un significativo periodo de tiempo, surge la interrogante de si estos se encuentran apegados a los 6 preceptos constitucionales y a las normas que progresivamente tutelan los derechos humanos a nivel internacional. En este sentido, el Estado debe ser, tal y como lo establece la Constitución, el garante de la seguridad y el orden público social, brindándole al ciudadano los caminos eficaces e idóneos para la búsqueda de la justicia, a través de un sistema judicial que permita la tutela de los derechos e intereses de los ciudadanos, así mismo el derecho a preservar su libertad, mientras no existan fundados elementos para restringirla. S O D VA Debido a dichas razones, resulta de gran importancia determinar la ER S E R estudiar si los derechos protegidos adjetiva penal, aunado a ello es relevante S O H C E y los requisitosR para la imposición de dicha medida son proporcionales con el E D derecho humano a la libertad, a través del estudio de todos los requisitos y perentoriedad de la medida de privación de libertad establecida en la ley limitaciones que han sido creadas para la aplicación de la misma, en relación con las normas que lo regulan, sean legales, de rango constitucional y supraconstitucional como el pacto de San José; y como consecuencia de ello, determinar si efectivamente estos requisitos garantizan el carácter excepcional de la medida in comento. Por todo lo antes expuesto, es esencial plantear la siguiente interrogante: ¿Cuál es el grado de perentoriedad en la imposición de las medidas de coerción personal en Venezuela? 7 Objetivos de la Investigación. • Objetivo general. Determinar la Perentoriedad en la imposición de las medidas de coerción personal en Venezuela. • S O D VA Objetivos Específicos. ER S E Rde procedencia de la medida de privación S o Describir de los requisitos O CH de libertad establecidos en el Código Orgánico E judicial preventiva R DE Procesal Penal venezolano (2009). o Estudiar los fundamentos del derecho a la libertad individual consagrado como derecho humano. o Analizar la proporcionalidad entre los derechos protegidos con la imposición de la medida de privación judicial preventiva de libertad y el derecho a la libertad. Justificación de la Investigación. El tema de las medidas de coerción personal, es de gran importancia, ya que este vincula derechos fundamentales como la libertad y el carácter excepcional de la privación o limitación de la misma, de allí que al momento de imponer una de estas medidas surge el deber para el juez de apegarse rigurosamente a una serie de principios establecidos en la ley sustantiva penal venezolana y en este sentido es elemental verificar si estos 8 presupuestos efectivamente son suficientes por encontrarse en armonía con la protección a la libertad como derecho fundamental. En este sentido puede constatarse si existe la necesidad de que el juez analice nuevos requisitos para garantizar debidamente el derecho a la libertad, con la finalidad de evitar transgresiones y abusos en la imposición de la misma. Por ello, es trascendental reflexionar acerca de la vigencia y proporcionalidad de los presupuestos legales a los que debe apegarse el juez cuando aplica una medida de esta naturaleza, y por consiguiente S O D VA determinar si esta medida realmente cumple con la finalidad para cual ha ER S E R Desde el punto de vista teórico, esta investigación es importante ya que en S O H ECopiniones doctrinarias de diversos autores patrios y la misma se recogen R E D extranjeros, las cuales podrán ampliar el conocimiento de quienes la sido creada, que es la protección del derecho a la tutela judicial efectiva. consulten sobre los conceptos básicos y principios esenciales que fundamentan el tema en estudio. Desde el punto de vista práctico, el presente trabajo de grado puede ser analizado, cuando exista alguna inquietud sobre el tema de las medidas de coerción personal, entiéndase medida de privación preventiva de libertad y principios generales referidos a las medidas cautelares sustitutivas, de igual manera permitirá a los profesionales del derecho crear parámetros referentes a la imposición de dichos medios de coerción. Desde el punto de vista metodológico, esta investigación sirve de base para otras investigaciones con las cuales se quiera ampliar o cambiar los criterios establecidos en la misma, además en esta han sido aplicadas una serie de normas metodológicas que sirven de herramienta para quienes se dediquen a la investigación jurídica. 9 Delimitación de la Investigación. El presente trabajo de grado se lleva a cabo a través del estudio y análisis de distintos criterios doctrinarios emanados de diversos autores; entre los cuales los más importantes son Maldonado (2003), Vásquez (1999) y García (1998). Aunado a ello fueron estudiadas diversas nomas venezolanas, tales como, Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1.999), S O D VA Código Orgánico Procesal Penal (2009), entre otros. ER S E medidas de coerción personalS en R Venezuela, se realizó en el estado Zulia, O H EC pero sus resultados son de aplicación nacional. La investigación tiene lugar R E D entre los meses de enero de 2011 a diciembre de 2011. En cuanto al ámbito espacial, la perentoriedad de la imposición de las 10 CAPÍTULO II MARCO TEÓRICO Antecedentes de la Investigación En este punto se hace importante traer a colación los antecedentes a la S O D A central se encuentra Veje de data anterior a la realización de esta,Ecuyo R S razón por la cual constituyen E R vinculado a las medidas de coerción personal, OS H C un aporte relevante Epara llevar a cabo el trabajo de grado. DER presente investigación, los cuales no son más que investigaciones jurídicas En este sentido, como primer antecedente se encuentra la investigación, realizada por Brito (2008), la cual lleva por título “La privación judicial preventiva de libertad medida de coerción o pena anticipada”. La misma tuvo como propósito analizar la privación judicial preventiva de la libertad, en el marco de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y del Código Orgánico Procesal Penal. En dicho trabajo de grado se concluyó que la privación judicial preventiva de la libertad, es una medida de coerción, que es dictada mediante auto razonado cuya finalidad es instrumental, ya que pretende garantizar la presencia del imputado durante el proceso, para asegurar la eficacia del mismo. El análisis de la misma es significativo y conforma un aporte de gran ayuda a la investigación, en razón de ser utilizados para su desarrollo textos, textos legales, diccionarios jurídicos, donde de igual modo se explanan posiciones acerca de la medida de privación judicial preventiva de libertad, las cuales sirven de referencia en el estudio de los presupuestos para la aplicación de las mismas. 11 De igual manera, se encuentra como antecedente a este trabajo de grado, el artículo científico realizado por Monagas (2007), el cual se titula “Privación Preventiva de Libertad”; este se encuentra publicado en la revista X Jornadas de Derecho penal de la Universidad Católica Andrés bello, año 2007; la misma se llevo a cabo a través de la técnica de investigación documental, descriptiva y jurídica. El mencionado artículo es importante a los fines de esta investigación debido a que se señalan una serie de principios de carácter básico en la S O D VA materia, además del cúmulo de ideas y criticas explanadas por el autor, ER S E medida de privación de libertadS se R refiere. O H EC De igual manera, sirve como antecedente a esta investigación la tesis de R E D facilitan la interpretación de las normas y principios a estudiar, en lo que a la grado titulada “Las medidas de coerción personal. Su aplicación en el sistema penal venezolano”, la cual fue realizada por Almarza (2005), para optar al título de Abogada de la Universidad Rafael Urdaneta. El objetivo de dicha investigación fue analizar las medidas de coerción personal y su aplicación en el sistema penal venezolano, en virtud de examinar la coexistencia de los derechos de presunción de inocencia y juzgamiento en libertad; las medidas coercitivas de privación preventiva libertad, así como la proporcionalidad en la aplicación de medidas cautelaras. Esta investigación es de tipo propositiva y descriptiva, y en la misma se determina que, la aplicación de medidas coercitivas y la proporcionalidad en la aplicación de medidas cautelares, están sujetas en el proceso penal venezolano a la normativa constitucional y a lo establecido al respecto en el Código Orgánico Procesal Penal (2009). También se verificó en los análisis realizados a sentencias del Tribunal Supremo de Justicia en Sala Constitucional con respeto al tema, que cada una de las mismas fundamenta a su decisión en lo estipulado en las normativas legales indicadas, no permitiendo así la posibilidad de atentar contra los derechos de los encausados en el proceso penal venezolano, a la 12 vez, ratificando en algunos casos la privación preventiva de libertad cuando se consideraba necesario en función de garantizar las resultas de las acciones penales. Este trabajo de grado es importante a los fines del desarrollo de la presente investigación, ya que en la misma se estudian y analizan normas jurídicas, principios, y jurisprudencia emanada del Tribunal Supremo de Justicia venezolano, relacionada con la medida de privación judicial preventiva de libertad, que ayudan a fijar y a aclarar criterios acerca de su tratamiento en el ordenamiento jurídico patrio. S O D VA ER S E Rde las medidas de coerción personal, diferentes perspectivas el tema S O CH doctrinal, legal y jurisprudencial, tanto del analizándolo R de E manera E D ordenamiento jurídico venezolano como de derecho comparado, es por lo En este sentido debido a que dichos antecedentes desarrollan desde que conforman un aporte trascendental en la determinación de la perentoriedad de la imposición de las medidas de privación preventiva de libertad en Venezuela. 13 Bases Teóricas Medidas Cautelares. Las medidas cautelares son según Espasa (1998), “Aquellas que un tribunal puede adoptar al comienzo de un proceso para asegurar la ejecución de la posible sentencia condenatoria” (p.626). En este sentido cabe acotar S O D VA que dichas medidas son implementadas en las distintas ramas del derecho, y ER S E R penal existen las llamadas medidas de ellas. Así por ejemplo en el derecho S O H C E coerción personal, las cuales no son más que aquellas destinadas a R E D asegurar las resultas del proceso. están ajustadas a las situaciones jurídicas que s suscitan en cada una de Medidas de coerción personal en el proceso penal. Expresa García (1998), acerca de estas medidas que “Difícilmente el proceso penal podría realizarse sin la utilización de las medidas de coerción. Como indica Losing, estas medidas coercitivas no son castigos, sino tienen como meta asegurar el fin de la investigación, la averiguación lo más exacta posible de los hechos históricos que deben ser juzgados” (p.298). En otras palabras dichas medidas de coerción personal han sido creadas con la finalidad de garantizar las resultas del proceso. No obstante, la imposición de las medidas in comento no debe llevarse a cabo de manera arbitraria y en ese sentido lo señala Vásquez (1999), “la regulación de las medidas de coerción personal constituyen un indicativo de lo mas o menos democrático que puede ser un procedimiento penal” (p.126). De tal manera que deben ser establecidos una serie de parámetros para la aplicación de las mismas, en razón de que, de alguna manera u otra se está limitando un derecho de gran importancia como lo es el derecho a la libertad. 14 Derecho a la libertad. Según lo señala Monagas (2007), el derecho a la libertad “corresponde a todo ciudadano, del cual no puede ser privado sino en determinadas situaciones permitidas por la Constitución de la República” (p.188). En el mismo sentido lo expresa Vázquez (1999) cuando afirma, “En efecto, si a S O D VA toda persona imputada de la comisión de un delito se le presume inocente ER S E R la privación de su libertad sólo podrá acordarse por excepción”. Queda S O H C de los referidos autores, la transcendencia del E evidenciado del criterio R E D derecho discutido, ya que ambos hacen hincapié en que su privación solo hasta tanto una sentencia condenatoria declare su culpabilidad, es obvio que podrá tener lugar por vía excepcional. De tal manera que, es esencial traer a colación la importancia del derecho a la libertad personal, en razón de que el mismo se encuentra limitado cuando son aplicadas las medidas de coerción personal, y más aun cuando se trata de la medida de privación judicial preventiva de libertad susceptible de ser impuesta en el proceso penal venezolano. Privación judicial preventiva de libertad. Acerca de la medida de prevención preventiva de libertad se han pronunciado diversos autores, entre ellos es pertinente nombrar a García (1998), la cual señala “De esta manera el Código dispone que la detención preventiva es una medida cautelar de carácter excepcional, que solo procederá cuando las demás medidas cautelares fueren insuficientes para asegurar las finalidades del proceso” (p.298). De manera similar se expresa Maldonado (2003), “el presente Código establece como principio la libertad 15 del reo, en consecuencia su detención será una excepción y constituye una medida cautelar que solo procederá cuando se den los requisitos que la hace procedente” (p.211). De esta manera, puede observarse que ambos autores, al referirse a la medida de privación preventiva de libertad hacen especial alusión a la excepcionalidad con la cual debe aplicarse, y el obligatorio cumplimiento de los requisitos para su imposición debido a que se está limitando el derecho a la libertad; y de manera similar es señalado por Longa, citado por García S O D VA (1998), cuando señala “Meta del proceso penal es la búsqueda de la verdad, ER S E R fundamentales” (p.298), por ello su restricción o intervención en los derechos S O H Crigurosamente E imposición debe estar apegada a lo establecido en las normas R E D jurídicas que la regulan. pero no a cualquier precio. Las medidas coercitivas llevan consigo la Sin embargo, en opinión de diversos doctrinarios, la privación de la libertad no ha sido tratada con la excepcionalidad requerida, en tal sentido se pronuncia Vásquez (1999) al señalar, “se deduce la libertad como regla y la detención como excepción, no obstante en el caso de Venezuela, la forma como se ha conducido el proceso penal ha llevado a que tal principio se invierta y la detención para después investigar, se haya convertido en el principio general”. En términos similares se expresa Monagas (2007) exponer: Es sabido que las investigaciones penales se tienden, como primer paso, a detener al sujeto indicado, quien así ve comprometida su libertad en función de los fines de la investigación. Esa ha sido la constante de la fase de investigación del proceso penal en Venezuela, cuya esencial actuación es la privación de libertad. Pareciera que si no se detiene se hace imposible averiguar. Puede afirmarse si reserva, que la historia del proceso penal venezolano no es más que la sucesión de innumerables capítulos con privaciones arbitrarias de la libertad personal (p.187). 16 al En este orden de ideas, la verificación de dicha situación planteada por esta parte de la doctrina, sería de suma gravedad ya que como lo ha señalado el referido autor Monagas (2007), “la prisión preventiva no solamente afecta el derecho a la libertad, sino que, además, quebranta la condición de inocente que se le reconoce al imputado, por la cual éste entra y permanece en el proceso penal con calidad de inocente” (p.187). Según este criterio puede observarse que se afectan grandes aspectos, a saber, el derecho a la libertad, y la presunción de inocencia, que debe gozar toda S O D VA persona. Sin embargo, el autor español Asencio citado por el mismo ER S E R es el resultado del conflicto de La medida preventiva de S libertad O H la libertad- social en el mantenimiento de la intereses individual en C E R seguridad, DEen la eficacia de la persecución de los delitos que, en todo Monagas (2007) ha señala sobre esta medida lo siguiente: caso, y en un Estado democrático, debe solucionarse a través de la consecución de la síntesis de ambos, los cuales son igualmente dignos de protección (p.187). Por el análisis de dichas posiciones doctrinarias, es por lo que se hace primordial señalar la finalidad de la imposición de la medida en estudio, y en este orden de ideas cabe expresar que, Mora citado por Vásquez (1999) se pronuncia sobre ésta y expone que la misma consiste en, “asegurar que el imputado estará a disposición del juez para ser juzgado, de ahí que no resulte legitimo, evitar la desinstitucionalización con otros fines para evitar escándalos probables, anticipar una pena segura, o evitar la comisión de nuevos delitos” (p.126). Una vez más se verifica que gran parte de la doctrina de manera implícita afirma que la finalidad de dicha medida es garantizar la tutela judicial efectiva. Ahora bien, en razón de la importancia en la imposición de la medida de privación judicial preventiva de libertad, es trascendental hacer hincapié en los presupuestos de procedencia que se encuentran taxativamente establecidos en el Código Orgánico Procesal Penal venezolano (2009) y los cuales son de riguroso cumplimiento. 17 Presupuestos de procedencia. Los presupuestos de procedencia de la medida de privación preventiva de libertad se encuentran establecidos a partir del artículo 250 de la referida ley adjetiva penal venezolana, donde se establece que previa verificación de los requisitos el juez de control puede decretar la medida in comento, siendo los mismos: S O D VA R SE E R S 1. Un hecho punible que merezca pena privativa de libertad y cuya acción penal no se encuentre evidentemente prescrita; 2. Fundados elementos de convicción para estimar que el imputado ha sido autor o partícipe en la comisión de un hecho punible; 3. Una presunción razonable, por la apreciación de las circunstancias del caso particular, de peligro de fuga o de obstaculización en la búsqueda de la verdad respecto de un acto concreto de investigación. HO C E ER D En este sentido expresa García (1998), “procederá a solicitud fiscal, hecha ante el juez de control que la decretara siempre que con la solicitud acredite la existencia de un hecho punible que merezca pena corporal y cuya acción no se encuentre evidentemente prescrita” (p.303), de igual modo señala el referido autor que deben existir fundados elementos de convicción contra el imputado de ser autor, coautor o participe en la comisión del hecho punible. Por su parte, Pérez, se refiere al cumplimiento de estos requisitos de la siguiente forma: Por otra parte los requisitos que establece este articulo para la imposición al imputado de la medida cautelar o de coerción personal son acumulativos. Es decir, el Ministerio Público, o el querellante en su caso, deben probar primero, que existe delito y que sea penado con pena privativa de libertad si se pretende la prisión provisional como medida cautelar; segundo que hay elementos de convicción para atribuir participación al imputado en el delito comprobado, y tercero que existe el peligro de que el imputado se fugue o entorpezca la 18 investigación. Por tanto el juez de la causa, debe analizar si están cubiertos esos tres extremos y motivar su decisión al respecto (p.288). Puede observar como el autor menciona en la ultima parte, además de lo establecido en los dos primeros ordinales del artículo 250 del Código de procedimiento Civil (2006), la fuga y el entorpecimiento en la investigación por parte del imputado, es entonces cuando se hace necesario referirse a estos requisitos legales para la imposición de la medida de privación S O D VA preventiva de libertad. Peligro de fuga. R SE E R S HO C E También haR establecido la ley adjetiva penal una serie de elementos que DE debe tomarse en cuenta por parte del Tribunal designado al efecto, para determinar que ciertamente existe el peligro de que el imputado pueda fugarse o ausentarse del proceso parcial o totalmente, y en este sentido Maldonado (2003) se pronuncia acerca de los mismos de la siguiente manera: 1. Arraigo en el país, tomando en cuenta su domicilio o asiento habitual, de familia o de su negocio, las facilidades que se le observan para abandonar el país, por ejemplo, actualizar el pasaporte, obtener pasaporte falso, diligenciar una visa. En este caso la jurisprudencia extranjera nos ha dicho que deben existir datos reales y no presumir; además las facilidades que de acuerdo a ciertas circunstancias demuestren que se va a ocultar. Así mismo cuando el legislador se refirió a su asiento familiar y negocios, quiso decir, que se deben verificar que familiares cercanos del imputado se encuentran dentro del país porque de haber familiares fuera del país se puede presumir la facilidad para evadir la justicia, además de ello en cuanto al negocio debe igualmente el juez tomar en consideración, el tipo de negocio y los ingresos que percibe el imputado que faciliten su salida aun mas del país (p.214). 19 De manera muy explicativa el autor se ha referido al elemento contenido en el ordinal primero del artículo 251 del Código de Procedimiento Civil (2006); de igual manera se menciona el segundo ordinal donde se señala que es importante tomar en cuenta la pena que podría llegar a imponerse en el caso, debido a que el delito debería exceder en su límite máximo de tres años. También se pronuncia Maldonado (2003), sobre la magnitud del daño causado, donde señala que ello “No solo se refiere al delito sino a la repercusión social del hecho causado y los daños materiales y morales que S O D VA produjo” (p.215). Ahora bien en lo atinente al comportamiento del imputado R SE E R S durante el proceso observa lo siguiente: HO C E ER El comportamiento del imputado durante el proceso, o en otro proceso anterior, en la medida que indique su voluntad de someterse a la persecución penal, en este supuesto vemos como en la práctica a imputados le han sido revocadas las medidas cautelares, cuando el juez de control, por cualquier medio ha tenido información que el imputado a quien le dictó medida cautelar se encuentra incurso nuevamente en otro procedimiento por otro delito u otros hechos punibles. D Por último, Maldonado (2006), analiza el quinto elemento que es la conducta predelictual del imputado, y establece “toma mayor importancia cuando el juez al analizar los presupuestos de la medida cautelar sustitutiva, se encuentra con que el imputado está incurso en otro proceso penal o tiene antecedentes penales” (p.217). Por su parte Pérez, expresa “es evidente que ninguna de estas circunstancias debe evaluarse por separado, sino en concordancia las unas con las otras, a fin de determinar si la ocurrencia de una puede anular a la otra”. En conclusión, cualquiera de la circunstancia que sea alegada debe ser bastamente estudiada y razonada por el juez al momento de imponer la medida. 20 Peligro de obstaculización. En este punto, también realiza Maldonado (2006) una serie de acotaciones sobre el peligro de obstaculización del proceso, el cual será decidido por el juez basado es graves sospechas, sobre los supuestos previstos en el artículo 252, al cual se refiere el mencionado autor con respecto al primero de ellos expresando que “el imputado destruirá, aculatará o falsificara elementos de convicción en este primer supuesto, el juez debe S O D VA analizar el tipo de delito cometido… así como si se trata de un delito de R SE E R S resultado o de un delito formal” (p.216). Por su parte Pérez, se pronuncia en HO C E ER los siguientes términos: Al analizar las circunstancias que corporifican el peligro de obstaculización, debe tenerse en cuenta, respecto al ordinal 1, el poder económico o político del imputado, que pudiere servirle para influir sobre los funcionarios investigadores, o sobre quienes tengan acceso a las evidencias. Igualmente será necesario determinar si el imputado tiene la facilidad real de acceder a los elementos de convicción (p.290). D El segundo supuesto del peligro de obstaculización, se refiere a que el imputado puede influir para que co-imputados, testigos, victimas o expertos informen falsamente o se comporten de manera desleal o reticente, o inducirá a otro a realizar esos comportamientos, poniendo en peligro la investigación, la verdad de los hechos y la realización de la justicia. En este sentido expresa Maldonado (2006): Vemos nosotros como a menudo la mayoría de las actas policiales, señalan a una persona que por temor a represalias no quiso identificarse cuando informo a la policía se la comisión de un hecho punible, esa situación es aceptable cuando vemos que familiares de las víctimas son amenazadas no solo por el mismo imputado, sino por familiares de este, y lo más grave aún, es cuando se señala que el imputado pertenece a una banda como comúnmente se les llama, o es un azote, en este caso surge gravemente la presunción de que el imputado puede influir para que sus compañeros codelincuentes, declaren falsamente en el hecho, o simplemente ejerzan amenazas 21 contra testigos o familiares que han tenido conocimiento directo del hecho. Las dos situaciones anteriores que han sido planteadas por la ley adjetiva penal patria, deben ser igualmente razonadas por el operador de justicia, a fin de descartar la aplicación de una medida cautelar sustitutiva, y obtener fundamentos suficientes para aplicar la medida de privación judicial preventiva de libertad, cumpliendo con lo establecido en el numeral tercero S O D VA del articulo 250 ejusdem. R SE E R S HO C E MedidasD cautelares ER sustitutivas. Es importante referirse también a las medidas cautelares sustitutivas a la privación preventiva de libertad, estas han sido establecidas en el Código Orgánico Procesal Penal venezolano (2009), en su artículo 256, y las mismas han sido explicadas por Maldonado (2003) de la siguiente manera: La detención domiciliaria: consiste en la reclusión en el propio domicilio del imputado o en otro domicilio, bajo custodia de otra persona, sin vigilancia alguna o con la que disponga el tribunal. Esta medida, conocida con el nombre de otorgamiento de casa por cárcel, es procedente en casos en los cuales el delito imputado no se vincula con las relaciones familiares y cuando por razones de la edad, salud, condiciones personales, el domicilio propio o de un tercero, satisface la garantía exigida por el proceso. También es facultativo del juez que se imponga vigilancia o no. La obligación de someterse al cuidado vigilancia de una persona o institución determinada, quien informará al tribunal regularmente: se trata de una medida sustitutiva que implica el sometimiento del imputado a la custodia y seguimiento de otra persona o institución que deberá velar por el, e informar periódicamente al tribunal. La presentación periódica al tribunal o a la autoridad que el designe: se trata de la obligación impuesta al imputado de presentarse con periodicidad, en los términos que se fijen, ante el propio tribunal o ante una autoridad designada por aquel esta periodicidad no debe 22 constituirse en gravamen que impida las actividades laborales o de otra índole del imputado ni fijarse de acuerdo con el capricho del juez. De esta forma explica el autor los tres primeros ordinales que establecen las medidas cautelares sustitutivas, en los cuales queda evidenciado el cumplimiento de una serie de obligaciones no solo para el imputado sino que también puede llegar a incluir a terceros ajenos a la comisión del delito. En este sentido continua el autor: S O D VA La prohibición de salir sin autorización del país, de la localidad en la cual reside o del ámbito territorial del tribunal, en este caso puede ser garantía suficiente para el logro de los fines de la justicia y de la de los hechos la prohibición d salida del país o de la localidad de residencia del imputado o de un determinado ámbito territorial, todo lo cual deberá ser objeto de razonamiento por el tribunal. La prohibición de concurrir a determinados lugares o reuniones: la imputación de una persona de hechos sin mayor gravedad, que sin embargo han producido particulares consecuencias en lugares o ambientes específicos, puede ser impuesto el alejamiento de estos lugares sin que se exija otra medida cautelar. La prohibición de comunicarse con personas determinadas, siempre que no se afecte el derecho a la defensa: consiste simplemente en imponer al imputado que se abstenga de frecuentar o comunicarse con determinadas personas, siempre y cuando ella se relacione con el hecho punible cometido o con una posible interferencia en el curso del proceso. R SE E R S HO C E ER D Con respecto, a esta última prohibición debe hacerse especial énfasis, en que la misma no puede pasar a un límite tal que afecte el derecho a la defensa del imputado, pudiendo darse la situación de que al mismo se le prohíba comunicarse con personas que podrían ayudarlo a recabar elementos de convicción referidos a su inocencia. Con respecto a los tres últimos ordinales señala Maldonado (2006): El abandono inmediato del domicilio si se trata de agresiones a mujeres o niños, o delitos sexuales, cuando la víctima conviva con el imputado, generalmente esta medida viene dada cuando el delito imputado es 23 contra las buenas costumbres, violación, actos lascivos y delitos contra la mujer y la familia. La prestación de una caución económica adecuada, de posible cumplimiento, por el propio imputado o por otra persona, atendiendo al principio de proporcionalidad, mediante depósito de dinero, valores, fianza de dos o más personas idóneas y garantías reales. Cualquier otra medida preventiva o cautelar que el Tribunal, mediante auto razonado estime procedente y necesario. En este sentido dichas medidas serán impuestas, cuando el fin último perseguido por su aplicación sea la presencia del imputado durante el S O D VA desarrollo de cada fase procesal, y que de igual modo este no constituya un R SE E R S obstáculo en la realización de la investigación para la obtención de la justicia HO C E ER para las partes. D Revisión de las medidas. Con respecto a la revisión de las medidas de coerción personal considera Vásquez (1999), que con el Código Orgánico Procesal Penal se han aumentado las garantías a favor del imputado, y en este sentido señala: La normativa del COPP permite la revisión de esa medida, independientemente de que en su momento haya sido confirmada por la Corte de Apelaciones ante la apelación del imputado o defensor, lo cual resulta justificable pues si ya han cesado o desaparecido las razones que motivaron la detención u otra medida cautelar no hay fundamento alguno para que estas se mantengan. También se pronuncia al respecto Maldonado (2006) señalando “la caución económica que se dicte, bien bajo caución real o fianza personal, en las cuales el imputado se encuentra detenido hasta que cumpla con los requisitos exigidos, la misma sigue constituyendo una medida cautelar con la obligación del juez de revisarla”. 24 Bases Legales. Esta investigación es desarrollada a través del análisis de las siguientes normas jurídicas: Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999). De la Carta Magna venezolana es analizado el artículo 44 referido a la S O D VA inviolabilidad de la libertad personal. De aquí que pueda denotarse la gran ER S E R fundamental, aunado a ello, esta disposición viene complementada con una S O H EC serie de numerales donde se expresa entre otras cosas la excepcionalidad R E D con la cual se restringe este derecho. importancia que le otorga el sistema jurídico venezolano a este derecho Código Orgánico Procesal Penal (2009). Del Código Orgánico Procesal Penal (2009), son analizadas diversas disposiciones referentes a las medidas de coerción personal, así es estudiado el artículo 243, donde se encuentra consagrado el estado de libertad, de la siguiente forma “Toda persona a quien se le impute participación en un hecho punible permanecerá en libertad durante el proceso, con las excepciones establecidas en este código”. De igual manera se señala el carácter excepcional al establecer que solo procede la privación de libertad cuando las demás medidas sean insuficientes. También es objeto de estudio el artículo 244 que establece la Proporcionalidad. El mismo reza “No se podrá ordenan una medida de coerción personal cuando esta parezca desproporcionada en relación con la gravedad del delito, las circunstancias de su comisión y la sanción probable”. 25 Según este articulo el juzgador debe analizar los tres elementos referidos de manera acumulativa. Así también es analizado el artículo atinente a la motivación como principio general, el mismo se explana de la siguiente manera, “Las medidas de coerción personal sólo podrán ser decretadas conforme a las disposiciones de este Código, mediante resolución judicial fundada. Esta se ejecutará de modo que perjudique lo menos posible a los afectados”. En otras palabras, la decisión a través de la cual se establezca la coerción S O D VA personal de un imputado debe ser bastamente razonada y además debe ER S E R 250 de la ley adjetiva penal el que En este sentido es el articulo artículo S O CH de procedencia de la imposición de las medidas E consagra los presupuestos R DE cumplir con los requisitos de procedencia que se nombraran a continuación. en estudio, dicho artículo entre otras cosas señala, “El Juez de control, a solicitud del Ministerio Público, podrá decretar la privación preventiva de libertad del imputado siempre que se acredite la existencia de: Un hecho punible que merezca pena privativa de libertad y cuya acción penal no se encuentre evidentemente prescrita; Fundados elementos de convicción para estimar que el imputado ha sido autor o partícipe en la comisión de un hecho punible; y Una presunción razonable, por la apreciación de las circunstancias del caso particular, de peligro de fuga o de obstaculización en la búsqueda de la verdad respecto de un acto concreto de investigación. De modo similar son establecidos en este artículo, el procedimiento a seguir para la imposición de la medida, y las actuaciones que pueden llevar a cabo, tanto el Fiscal del Ministerio Publico, el Tribunal correspondiente como la defensa. Igualmente pudo observarse la presunción de peligro de fuga, la cual se encuentra desarrollada en el artículo 251, donde se constata que para decidir acerca del mismo se tendrán en cuenta las siguientes circunstancias, el arraigo en el país, la pena que podría llegarse a imponer en el caso, la magnitud del daño causado; el comportamiento del imputado durante el proceso, o en otro proceso anterior, en la medida que indique su 26 voluntad de someterse a la persecución penal y La conducta predelictual del imputado. De seguidas, es estudiado el contenido del artículo 252, donde se consagra el peligro de obstaculización, y se señala que para decidir acerca del mismo se tendrá en cuenta, la grave sospecha de que el imputado: destruirá, modificará, ocultará o falsificará elementos de convicción; o Influirá para que coimputados, testigos, victimas o expertos, informen falsamente o se comporten de manera desleal o reticente, o inducirá a otros a realizar S O D VA esos comportamientos, poniendo en peligro la investigación, la verdad de los R SE E R S hechos y la realización de la justicia. HO C E ER Pacto de San José de Costa Rica (1969). D En lo referente a esta convención, es importante hacer mención de su artículo 7, que establece el derecho a la libertad personal, además en su ordinal 1 señala, “toda persona tiene derecho a la libertad y a la seguridad personales”. Aunado a ello en el mismo se consagra de manera similar al artículo 44 de la Constitución de la Republica Bolivariana de Venezuela (1999), la excepcionalidad en la restricción del derecho, además de la serie de principios que deben acatarse cuando se da efectivamente la privación de libertad. 27 Matriz de análisis Categoría de Análisis Subcategorías de análisis Requisitos de la imposición de las medidas de coerción personal establecidos en el Código Penal venezolano (2009). HO C E ER D Perentoriedad en la imposición de las medidas de coerción personal en Venezuela Artículos 244, 246, 250, 251 y 252 del Código Orgánico Procesal Penal (COPP). Artículo 244 COPP: Proporcionalidad de las medidas de coerción personal. Artículo 246 COPP: Motivación de la medida de coerción personal. Artículo 250 COPP: Procedencia de la medida de privación preventiva de libertad. Artículo 251 COPP: Peligro de fuga. Artículo 252 COPP: Peligro de obstaculización en la investigación. S O D VA R SE E R S Unidades de análisis Fundamentos del derecho a la libertad individual consagrado como derecho humano. Artículo 44 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela: inviolabilidad de la libertad personal. Artículo 7 del Pacto de San José de Costa Rica: Derecho a la libertad y seguridad personales. Proporcionalidad entre los derechos protegidos con la imposición de la medida de privación judicial preventiva de libertad y el derecho a la libertad. Artículos 244, 246, 250, 251, 252 y 254 del Código Orgánico Procesal Penal (COPP). Artículo 244 COPP: Proporcionalidad de las medidas de coerción personal. Artículo 246 COPP: Motivación de la medida de coerción personal. Artículo 250 COPP: Procedencia de la medida de privación preventiva de libertad. Artículo 254 COPP: auto de privación judicial preventiva de libertad. Artículo 44 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela: inviolabilidad de la libertad personal. Artículo 7 del Pacto de San José de Costa Rica: Derecho a la libertad y seguridad personales. Barrios (2011) 28 CAPITULO III MARCO METODOLOGICO S O D VA Tipo de Investigación ER S E Rsu fuente es de tipo documental, la cual La presente investigación según S O CesH“un proceso basado en la búsqueda, recuperación, E según Fidias (2004) R DE análisis, critica e interpretación de datos secundarios, es decir, los obtenidos y registrados por otros investigadores en fuentes documentales: impresas, audiovisuales o electrónicas”. Del mismo modo Nava (1996) resalta que se trata de fundamentos ya estudiados al expresar que la investigación documental se entiende por el “proceso de búsqueda y tratamiento de información generada a partir de los estudios hechos sobre un particular, que se han venido aumentando en el transcurso de la historia de la comunidad y que se presentan bajo las más diversas modalidades que la hacen más aun interesante”. En este sentido, puede expresarse que esta investigación se fundamenta principalmente en textos de autores como Maldonado (2003), y García (1.998). De igual manera el artículo científico realizado por Monagas (2007). También es analizado el Código Orgánico Procesal Penal venezolano (2006), así como la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999) y tratados internacionales sobre derechos humanos. Atendiendo al nivel de conocimiento empleado, ésta investigación es de tipo descriptiva, la misma se circunscribe, como lo expresa Fidias (2004) a “la caracterización de un hecho, fenómeno o grupo con el fin de establecer su 29 estructura o comportamiento”. De modo similar es definida por Perdomo (2005) “la investigación descriptiva como su nombre lo indica describe “lo que es”. Comprende el registro, análisis e interpretación de los procesos o fenómenos actuales; su problema es el presente. No explica la relación entre variables”. En este sentido cabe señalar que el presente trabajo de investigación se enmarca en la investigación descriptiva en razón de limitarse a estudiar la perentoriedad de la imposición de las medidas de coerción personal sin cambiar la esencia o características de los mismos. S O D VA ER S E Diseño deR la Investigación. S O H EC DER El diseño de la investigación lo define Fidias (2004) como “la estrategia general que adopta el investigador para responder al problema planteado”. Uno de los diseños de investigación es el de tipo bibliográfico y no experimental, y en este sentido es importante señalar que esta es la aplicada en el presente trabajo de grado. En este orden de ideas, el diseño de investigación de tipo bibliográfico es definido por Finol y Nava (1996) como, “aquellos diseños que se apoyan en el análisis de documentación para extraer conclusiones científicas sobre la temática analizada”. También agrega Perdomo (1983), que el diseño bibliográfico “recoge principalmente datos de libros, revistas, periódicos, etc. De ahí su nombre”. Así pues, se encuentra basada esta investigación en textos documentales, como Maldonado (2003), Longa (2001) y García (1998), de los cuales se extrae la información necesaria para el análisis de los presupuestos para la imposición de la medida de privación preventiva de libertad. 30 Fuente de Información. Las fuentes de información son, según López (2006), “materiales o productos, originales o elaborados, que aportan noticias o testimonios a través de los cuales se accede al conocimiento, cualquiera que éste sea”. En otras palabras son todos aquellos métodos por medio de los cuales se pueden adquirir conocimientos propios en un área. Los datos de que se nutre una investigación se encuentran en las fuentes de información. S O D VA ER S E R Técnica deS Recolección de Información. O H C ERE D Con el propósito de llevar a cabo la investigación es necesario emplear ciertas técnicas de recolección de información, en este sentido, se expresa Hurtado (2000), acerca de estas como, “aquellas que comprenden procedimientos y actividades que le permiten al investigador obtener información necesaria, para dar respuesta a su pregunta de investigación”. En este sentido, esta investigación se realiza a través de la técnica de observación documental, la cual según Arias (2006) es la que “consiste en visualizar o captar mediante la vista, en forma sistemática, cualquier hecho, fenómeno o situación que se produzca en la naturaleza o en la sociedad, en función de unos objetivos de investigación preestablecidos”. Dicho autor se refiere a la forma sistemática debido a que la misma consiste en investigar siguiendo un orden o una cierta organización para obtener como resultado la obtención de la información requerida en un área determinada. 31 Plan de Análisis de la Información. El análisis es definido por Finol y Nava (1996) como “la operación lógica fundamental que consiste en la identificación, examen y explicación de cada uno de los elementos integrantes de una determinada estructura”, de acuerdo con ello, en la presente investigación se llevara a cabo un análisis documental el cual, según las referidas autoras es el que “permite mediante una operación intelectual objetiva, la descripción y sistematización de los S O D VA elementos del contenido, así como otros documentos de similar significado y ER S E documental obtenida, a lo largo delR desarrollo de la investigación. S O H ECorden de ideas, el análisis documental En este mismo R E D valor”. En este sentido el plan es analizar y confrontar toda la información será complementado con la investigación jurídica, la cual es, según García (1980), “el arte de la interpretación y aplicación de los preceptos del derecho vigente”, el mismo autor expresa que “las técnicas de interpretación jurídica son métodos que sirven para darle significado de aplicación a las normas jurídicas”. Aunado a ello, para permitir la realización de una investigación de este tipo, además del uso de otras técnicas se utiliza la hermenéutica jurídica, siendo ésta de acuerdo con Egaña (1984), la que permite “determinar el sentido de las palabras empleadas en la ley; así como el significado del lenguaje jurídico y con una interpretación lógica”, puede observarse que de esta manera podría llegarse a precisar la intención del legislador. En este sentido expresa Egaña (1984), que debe realizarse “una interpretación lógica en la cual se toma como punto de partida la idea o propósito del legislador, como ente racional”, y en razón de ello se procurará descomponer los elementos que integran el pensamiento del legislador para establecer la conexión de las partes que lo comprenden. 32 CAPÍTULO IV ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS Con el propósito de cumplir con el objetivo general de este trabajo de grado, el cual se denomina determinar la perentoriedad de la imposición de S O D VA las medidas de coerción personal en Venezuela, es necesario el desarrollo R SE E R S de los objetivos específicos que han sido planteados de la siguiente manera: HO C E ER D establecidos 1.- Describir los requisitos de la imposición de las medidas de coerción personal en el Código Orgánico Procesal Penal venezolano (2009). La aplicación de la medida de privación judicial preventiva de libertad conlleva el acatamiento por parte de los operadores de justicia de una serie de requisitos de gran importancia, los cuales se ha encargado el legislador patrio de establecer taxativamente en la norma adjetiva penal del ordenamiento jurídico venezolano. En este sentido el Código Orgánico Procesal Penal (2009), regula en su Título VIII, denominado De las Medidas de Coerción Personal, todo lo referente a las mismas, y en especial en lo atinente a la medida de privación en estudio. Es así como al establecer los principios generales, se consagra principalmente el estado de libertad, el cual no es más, que el principio basado en la libertad del individuo mientras dura el proceso penal, siendo esta la regla y la aplicación de las medidas de coerción personal la excepción. Seguidamente es señalado el requisito de la proporcionalidad, en el artículo 244 de la referida ley adjetiva, de la siguiente manera: 33 No se podrá ordenar una medida de coerción personal cuando esta aparezca desproporcionada en relación con la gravedad del delito, las circunstancias de su comisión y la sanción probable. Como puede apreciarse este es un requisito de gran importancia para la aplicación de las medidas de coerción personal en general, ello debido a que en razón del mismo el juez debe someter a estudio el delito que presuntamente ha sido cometido por el individuo, con el fin de verificar si S O D A la privativa para en un caso determinado podría no ser proporcional Vaplicar R E S E una persona por aprovechamientoR de los bienes provenientes del delito, OS H como si podría serlo por homicidio. C E R E D Otro aspecto a tomar en cuenta por el juzgador son las circunstancias la gravedad del mismo es suficiente como para privarlo de libertad, ya que en las cuales fue cometido el delito, se considera entonces que en las mismas tendrían que analizarse una variedad de factores objetivos y subjetivos, con los cuales también podría determinarse la pena aplicable en caso de comprobarse la culpa, todo lo que incidirá en la decisión de imponer o no la medida de coerción personal. De igual manera, se encuentra como principio general la motivación de la medida, el mismo está consagrado en el artículo 246 del Código Orgánico Procesal Penal venezolano (2009), el cual expresa taxativamente lo siguiente: Las medidas de coerción personal solo podrán ser decretadas conforme a las disposiciones de este Código mediante resolución judicial fundada. Esta se ejecutará de modo que perjudique lo menos posible a los afectados. Similar a la gran mayoría de las decisiones judiciales, la resolución por la cual sea impuesta la medida debe sustentarse en una serie de argumentos que expliquen bastamente las razones por las cuales ha de ser la privación judicial preventiva de libertad la vía mas idónea para garantizar las resultas 34 del proceso, aunado a ello en la misma deben constatarse de manera obligatoria requisitos que serán estudiados de seguidas. Como consecuencia de ello cualquier resolución a través de la cual se haga un pronunciamiento acerca de la aplicación de estas medidas de coerción personal, que no sea claramente motivado adolecerá del vicio de inmotivacion, razón por la cual pueden ser intentados recursos en contra de la misma. De tal manera es señalado por Borrego (1999) cuando expresa: “el auto que recae como mera cuestión incidental tiene apelación y revisión… S O D VA independientemente de que prive o no la apelación o a la solicitud de ER S E R 254 ejusdem, el cual señala los Al efecto puede revisarse S el artículo O H el Auto de privación judicial preventiva de Ccontener E requisitos queR debe E D libertad, de la siguiente forma: revisión, el juez evaluara cada tres meses la revisión de la medida…” (p.263). Auto de privación judicial preventiva de libertad. La privación judicial preventiva de libertad solo podrá decretarse por decisión debidamente fundada que deberá contener: 1. Los datos personales del imputado o los que sirvan para identificarlo. 2. Una sucinta enunciación del hecho o hechos que se le atribuyen. 3. La indicación de las razones por las cuales el Tribunal estima que concurren en el caso los presupuestos a que se refieren los artículos 251 o 252. 4. La cita de las disposiciones legales aplicables. Con respecto a los artículos 251 y 252 estos se refieren al peligro de fuga y peligro de obstaculización respectivamente; en este sentido, al no concurrir estos requisitos, el interesado puede apelar la decisión tomada por el Tribunal, sin embargo, el mismo artículo 254 se encarga de precisar la no suspensión en la ejecución de la medida, en caso de ser ejercido el recurso de apelación respectivo, en otras palabras, aunque sea evidente el vicio contenido en la resolución, el individuo quedara privado de libertad hasta que no sea resuelto dicho recurso. 35 Del mismo modo, ha establecido el referido Código, específicamente para la medida de privación judicial preventiva de libertad requisitos de procedencia en su artículo 250, que deben ser considerados por el correspondiente Juez de control, dicho artículo se expresa sobre los mismos de la siguiente manera: Procedencia. El Juez de control, a solicitud del Ministerio Público, podrá decretar la privación preventiva de libertad del imputado siempre que se acredite la existencia de: 1. Un hecho punible que merezca pena privativa de libertad y cuya acción penal no se encuentre evidentemente prescrita; 2. Fundados elementos de convicción para estimar que el imputado ha sido autor o partícipe en la comisión de un hecho punible; 3. Una presunción razonable, por la apreciación de las circunstancias del caso particular, de peligro de fuga o de obstaculización en la búsqueda de la verdad respecto de un acto concreto de investigación. R SE E R S HO C E ER D S O D VA Es lógico que el operador de justicia aplique los principios generales de motivación y proporcionalidad para dar cumplimiento a los requisitos establecidos en los ordinales primero y segundo del citado artículo, ello en razón de que, debe analizarse el delito y las circunstancias en las cuales fue presuntamente cometido para determinar si merece o no pena privativa de libertad, y además es preciso verificar si existen elementos de convicción suficientes, los cuales no son más que indicios y evidencias que lleven al juez a la presunción de que efectivamente se ha verificado el hecho punible. Con respecto al ordinal tercero son señalados los requisitos de peligro de fuga y obstaculización en la búsqueda de la verdad, los cuales como ya se dijo se encuentran estipulados en el Código de Procedimiento Civil venezolano (2009) el cual define el primero de ellos, en su artículo 251, en los siguientes términos: Peligro de fuga. Para decidir acerca del peligro de fuga se tendrán en cuenta, especialmente, las siguientes circunstancias: 36 1. Arraigo en el país, determinado por el domicilio, residencia habitual, asiento de la familia, de sus negocios o trabajo y las facilidades para abandonar definitivamente el país o permanecer oculto; 2. La pena que podría llegar a imponer en el caso; 3. La magnitud del daño causado; 4. El comportamiento del imputado durante el proceso, o en otro proceso anterior en la medida que indique su voluntad de someterse a la persecución penal; 5. La conducta predelictual del imputado. Como puede observarse existen una serie de parámetros a considerar por S O D con el peligro de fuga, así podría indicarse la importancia VA de que el individuo R E Sque tiene residiendo en el mismo, E señale claramente su domicilio, elR tiempo HOdelSpaís, es decir, si ha tramitado o se encuentra si posee facilidad E para salir C ERu otro tipo de autorizaciones para salir al extranjero; también Dvisas tramitando el Juez al momento de fundar la medida de privación preventiva de libertad es elemental demostrar, de ser el caso, que se encuentra laboralmente estable, y su familia, lugar de trabajo de educación están asentados en el mismo domicilio. De igual manera debe tomar en cuenta el juzgador la pena a aplicar al caso concreto, ya que de acuerdo a la magnitud de esta influenciara en mayor o menor grado en el peligro de fuga, y así queda evidenciado en el parágrafo único del mismo artículo 251 cuando expresa: “se presume el peligro de fuga en los casos de hechos punibles con penas privativas de libertad, cuyo término máximo sea igual o superior a diez años”. En este orden de ideas, se presumirá también peligro de fuga, según el parágrafo segundo del artículo ejusdem, cuando exista falsedad, falta de información o actualización del domicilio del imputado. En lo atinente a la magnitud del daño, para determinar la misma el juez debe analizar cuál es el impacto que se produce a la sociedad con la comisión del delito, además debe procurar la reparación de los daños presuntamente causados por el imputado con el hecho punible, sean estos materiales o morales. 37 Ahora bien, pasando al peligro de obstaculización cabe decir que el mismo se encuentra establecido en la norma adjetiva penal venezolana en su artículo 252, el cual expresa lo siguiente: Peligro de obstaculización. Para decidir acerca del peligro de obstaculización para averiguar la verdad se tendrá en cuenta, especialmente, la grave sospecha de que el imputado: 1.- destruirá, modificará, ocultará o falsificará elementos de convicción; 2.- Influirá para que coimputados, testigos, victimas o expertos, informen falsamente o se comporten de manera desleal o reticente, o inducirá a otros a realizar esos comportamientos, poniendo en peligro la investigación, la verdad de los hechos y la realización de la justicia. R SE E R S HO C E cometido DER en el caso S O D VA En este sentido, en lo atinente al primer numeral, el juez deberá valorar el delito concreto, para determinar el grado de susceptibilidad de alteración en los elementos o circunstancia que constituyen el mismo, con la finalidad de verificar si efectivamente para resguardarlos se requiere la privativa de libertad para el individuo. Así puede traerse a colación el ejemplo planteado por Maldonado (2003); el mismo señala: No es lo mismo cuando al imputándose le acredita la comisión del delito de hurto en un lugar al cual no tiene fácil acceso, a la comisión del mismo delito pero donde tiene libre acceso, como tampoco es lo mismo cuando se le acredita la comisión de delito de homicidio culposo al homicidio intencional causado con un arma de fuego o arma blanca, o con veneno, en donde es evidente que al salir en libertad buscara todos los medios para que dichas armas no sean encontradas y borrar cualquier rastro de la comisión del hecho.(p.217). Con respecto al ordinal dos del referido artículo, debe acotarse que para dar cumplimiento al mismo, el juez somete el caso a un análisis subjetivo, es decir, toma en cuenta quien es la persona que presuntamente ha llevado a cabo el hecho punible, su profesión, ello debido a que algunas profesiones u oficios podrían facilitar al imputado el acceso a las pruebas, si es este por 38 ejemplo miembro de algún cuerpo policial. Debe considerar la posible influencia que pueda tener sobre los familiares de las víctimas y sobre los testigos tanto presenciales como referenciales. Y posterior a todo ese examen decidir si aplica o no la medida en cuestión. Así han quedado descritos los requisitos establecidos en el Código Orgánico Procesal Penal venezolano (2009), con respecto a la imposición de la medida de privación judicial preventiva de libertad, puede acotarse entonces, que los mismo no han sido objeto de algún tipo de revisión o S O D VA reforma por parte del legislador patrio, siendo que estos se encuentran ER S E R estática, sino por el contrario, los el cual la sociedad no haSsido O CH a afirmar, que ha dado un cambio drástico y investigadores R seEatreven E D negativo en lo que al sistema penal se refiere. establecidos en la señalada ley adjetiva penal por un tiempo considerable en En este sentido, solo se han pronunciado tanto la jurisprudencia como la doctrina en aplicación y explicación de estos principios, sin realizar ajustes, y sin tener la posibilidad de crear nuevos presupuestos que de alguna manera flexibilicen o impriman el carácter excepcional de la medida en cuestión, con la finalidad de adaptarlos al medio social en el cual serán aplicados, todo ello tomando en cuenta la necesidad del estado de hacer justicia, sin dejar de lado la gran trascendencia del derecho a la libertad del ciudadano. De manera que, es criterio de la investigadora, deberían ser establecidos nuevos presupuestos para la imposición de la medida en estudio, con el fin de que los operadores de justicia se encuentre más actualizados con respecto a la materia y no se realice de manera mecánica la aplicación de una u otra medida de coerción personal, sino que por el contrario, se logre el análisis exhaustivo, tanto subjetivo como objetivo, del caso, ya que no debe dejarse de lado un aspecto relevante del derecho penal, y es que este es sumamente casuístico, y como consecuencia de ello respetar en lo posible el estado de libertad como principio general y como derecho humano. 39 2. Estudiar los fundamentos del derecho a la libertad individual consagrado como derecho humano. La libertad es uno de los derechos que ha sido protegido con mayor celo por parte de las constituciones o máximas normas de los diversos ordenamientos jurídicos desde la revolución francesa. De hecho la Constitución de la Republica Bolivariana de Venezuela establece un marcado S O D VA respeto a la libertad personal, pero también consagra excepciones, en las ER S E suprimido, según sea la normaS de R ley que se aplique. O H C la aplicación de la medida de privación preventiva de Econ Es evidenteR que E D cuales, ese derecho constitucional le puede ser restringido, limitado o libertad, se está de cualquier manera restringiendo o limitando el derecho a la libertad personal, el cual es un derecho inherente al hombre en su condición de tal, hay que entenderlo como la facultad que tiene el hombre de actuar dentro de las limitaciones impuestas por la convivencia social. Este derecho se encuentra establecido en el artículo 44 de la Constitución de la Republica Bolivariana de Venezuela (1999), donde se expresa que la libertad personal es inviolable, y aunado a ello en su ordinal primero se consagra el carácter excepcional de la privación de libertad, cuando señala “será juzgada en libertad, excepto por las razones determinadas por la ley y apreciadas por el juez o jueza en cada caso”. De modo similar es afirmado por Monagas (2007) cuando expresa que “el derecho a la libertad corresponde a todo ciudadano, del cual no puede ser privado sino en determinadas situaciones permitidas por la Constitución de la República”. (p.188). Puede verificarse entonces la importancia del derecho a la libertad en la referida Carta Magna, ya que este ha sido incluido en su Título III, llamado De los derechos Humanos y Garantías, y de los deberes, donde de acuerdo con la redacción del mismo se busca la protección de este derecho 40 imprimiéndole el carácter fundamental que merece, ahora bien, puede tomarse en cuenta que dicha protección priva ante los particulares y además de ello ante cualquier autoridad del Estado. De igual manera le otorga trascendencia el Código Orgánico Procesal Penal venezolano (2006), en su artículo 243 donde se establece el Estado de Libertad, de la siguiente “Toda persona a quien se le impute la participación en un hecho punible permanecerá en libertad durante el proceso, salvo la excepciones establecidas en este Código”. También señala dicho artículo S O D VA que solo procederá la privación de libertad cuando las demás medidas sean ER S E R de la aplicación de la privación de una vez más el carácter excepcional S O CHde que para restringir un derecho de tal magnitud libertad, y elloR enE razón E D deben ostentarse bastos argumentos que justifiquen suficientemente el limite insuficientes para asegurar las finalidades del proceso. Queda en evidencia al goce de este derecho fundamental. A su vez, el Tribunal Supremo de Justicia venezolano, se ha pronunciado otorgando mayor relevancia al derecho a la libertad, y a la excepcionalidad con la que el mismo podría ser restringido; así la Sala de Casación Penal, con ponencia del magistrado Angulo Fontiveros, de fecha 16 de Noviembre del año 2004, constata lo siguiente: “... En este sentido, quienes aquí deciden consideran que es preciso recordar que es criterio reiterado de esta Sala, señalar que la Libertad consagrada en la Constitución Venezolana es la Regla y la Privación de Libertad o la extinción de ella durante el proceso constituyen una medida excepcional, todo de conformidad con lo previsto en el artículo 44 del citado texto constitucional y el artículo 9 del Código Orgánico Procesal Penal. En consecuencia, la posibilidad de que con ocasión de un proceso penal, pueda imponérsele al imputado, medidas de coerción personal restrictivas o limitativas de la libertad personal en lugar de la prisión preventiva, aparece prevista en diferentes instrumentos de carácter internacional”. 41 En este sentido es relevante expresar, que la protección del derecho a la libertad ha sido consagrada no solo en nuestro ordenamiento jurídico, sino que la misma tiene su origen en las fuertes luchas a nivel de derecho internacional, donde con el transcurrir de los años y el avance de la sociedad han logrado establecerse en tratados, pactos convenios y otro instrumentos jurídicos internacionales, los cuales adquieren un rango supraconstitucional por encontrarse referidos al resguardo de derechos fundamentales. En este orden de ideas, se hace indispensable nombrar el artículo 7 del S O D VA Pacto de San José de Costa Rica, el cual señala “Todo individuo tiene ER S E R las medidas no privativas de libertad, al establecer las Reglas Mínimas sobre S O H al desarrollo del contenido del artículo 9 del Cdirigidas E mas específicamente R E D Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, prevén: derecho a la libertad y seguridad personales”. A su vez las Naciones Unidas “Regla 2.3: a fin de asegurar una mayor flexibilidad, compatible con el tipo y la gravedad del delito, la personalidad y los antecedentes del delincuente y la protección de la sociedad, y evitar la aplicación innecesaria de la pena de prisión, el sistema de Justicia Penal establecerá una amplia serie de medidas no privativas de libertad, desde la fase anterior al Juicio hasta la fase Posterior a la sentencia. El número y el tipo de las medidas no Privativas de Libertad disponibles deben estar determinadas de manera tal que sea posible fijar de manera coherente las penas. Regla 5.1: En el procedimiento Penal solo se recurrirá a la Prisión Preventiva como último recurso.... Regla 6.2: Las medidas sustitutivas de la Prisión Preventiva se aplicaran lo antes posible....” De igual manera el derecho a la libertad se encuentra íntimamente vinculado a la presunción de inocencia y la excepcionalidad con la que este puede ser restringido. De tal manera se constata en el artículo 49 numeral 2 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que reza “El debido proceso se aplicará a todas 42 las actuaciones judiciales y administrativas, en consecuencia… 2. Toda persona se presume inocente mientras no se pruebe lo contrario”. Al respecto se pronuncia Vásquez (1999), expresando “En efecto, si a toda persona imputada de la comisión de un delito se le presume inocente hasta tanto una sentencia condenatoria declare su culpabilidad, es obvio que la privación de su libertad sólo podrá acordarse por excepción”. Se observa entonces como se encuentran íntimamente relacionados al derecho a la libertad el principio de presunción de inocencia y la excepcionalidad en la aplicación de medidas privativas de libertad. S O D VA ER S E Ren principio debido a que mediante estas proceso de responsabilidad penal, S O CHa una persona de la libertad, esta facultad del E medidas puede privarse R DE En principio la libertad individual solo puede ser restringida, mediante un hombre en sociedad que le permite hacer lo que quiere, movilizarse de un punto a otro, pensar y expresar sus pensamientos y general, ser dueño absoluto de sus actos, es de derecho natural, fundamentalmente, y de derecho político en los sistemas que reconocen y respetan la libre determinación. 3.- Analizar la proporcionalidad entre los derechos protegidos con la imposición de la medida de privación judicial preventiva de libertad y el derecho a la libertad. Desarrollados como han sido los requisitos para la aplicación de la medida de privación judicial preventiva de libertad al igual que los fundamentos de derecho a la libertad como derecho humano, se hace imprescindible analizar en este objetivo, la existencia efectiva de proporcionalidad entre los intereses protegidos con la aplicación de la medida in comento y la restricción del derecho a la libertad de la persona. A tal fin debe precisarse cuál es la finalidad de la imposición de las medidas de esta naturaleza, y la misma no es otra que garantizar las 43 finalidades del proceso, en este sentido se pronuncia Mora citado por Vásquez (1999), cuando expresa “la única finalidad de la detención preventiva es asegurar que el imputado estará a disposición del Juez para ser juzgado, de ahí que no resulte legitimo evitar la desinstitucionalización con otros fines para evitar escándalos probables, anticipar una pena segura o evitar la comisión de nuevos delitos”.(p.126). Por su parte, Losing citado por García (1998) expresa “estas medidas coercitivas no son castigos, sino tienen como meta asegurar el fin de la S O D VA investigación, la averiguación lo más exacta posible de los hechos históricos ER S E Rexpresa García (1998) “es indispensable verdad…”. (p.298). De modo similar S O CHa disposición dentro de la jurisdicción para el E que el imputado este R E D cumplimiento de los distintos actos de las diligencias preliminares necesarias, que deben ser juzgados. Meta del proceso penal es la búsqueda de la tales como declaraciones y reconocimientos” (p.334). Puede observarse que ambos autores señalan la importancia de proteger el proceso íntegramente, para lograr que a través de la presencia y participación de las partes, se logre la obtención de una sentencia justa y ejecutable. En este sentido cuando se aseguran las resultas del proceso de igual manera se están protegiendo el derecho a la justicia establecido en el artículo 26 de la Constitución de la Republica Bolivariana de Venezuela (1999), cuando expresa “Toda persona Artículo 26. Toda persona tiene derecho de acceso a los órganos de administración de justicia para hacer valer sus derechos e intereses, incluso los colectivos o difusos, a la tutela efectiva de los mismos y a obtener con prontitud la decisión correspondiente”. A través de la protección de dicho derecho la victima vera de alguna manera satisfecha la lesión jurídica que le ha sido causada. En el mismo orden de ideas, se pronuncia la jurisprudencia venezolana acerca de la finalidad de la aplicación de la medida de privación judicial preventiva de libertad, en sentencia 44 la Sala Constitucional en jurisprudencia de fecha 11 de Mayo del año 2005, (Caso ParamilitaresPogioli) con ponencia del Magistrado Cabrera Romero: “…se deduce no solo la obligación de consagrar en los sistemas procesales penales, medidas dirigidas para evitar la privación de Libertad durante el Proceso, sino que al mismo tiempo se ratifique el fin procesal de las medidas de coerción personal, pues es obvio que cuando el legislador en el marco internacional se refiere al establecimiento de garantías, precisa que estas estarían dirigidas a asegurar la comparecencia al juicio; por lo tanto, se descarta el fin sustantivo de aplicar la medida con el objeto de lograr la reparación por el daño causado. Por otra parte, es importante recordar que solo se exigirá la comprobación plena de la culpabilidad del presunto o presuntos autores o participes del hecho objeto del proceso penal, al momento de dictar una sentencia condenatoria, donde se imponga una pena definitiva que lo prive de libertad por un tiempo determinado...” R SE E R S HO C E ER D S O D VA De igual manera se logra la protección de intereses sociales, ya que si efectivamente el imputado es el autor del hecho punible podría representar peligro tanto para las víctimas en particular como para la sociedad en general. Constituiría entonces una protección y a la vez seguridad jurídica para un grupo determinado de personas, que el imputado permanezca privado de libertad mientras transcurre el proceso y se constate su inocencia o se compruebe su culpabilidad. En este sentido, podría afirmarse que considerados así, se estarían protegiendo los intereses con la aplicación de la medida judicial preventiva de libertad, razón por la cual se encontraría perfectamente justificada la aplicación de la misma, sin embargo, y tal como es señalado por Maldonado (2003), “la detención se sitúa entre el deber estatal de perseguir eficazmente el delito, por un lado, y el deber estatal de asegurar el ámbito de la libertad del ciudadano”.(p.218). Por ello nace la disyuntiva consistente en si existe o no proporcionalidad entre el resguardo de todos los intereses señalados con la medida in comento, y la protección del derecho a la libertad, en razón de que nace la 45 interrogante de si efectivamente ostenta las resultas del proceso, la trascendencia tal como para privar a un individuo, que goza de la presunción de inocencia en la comisión de un hecho punible, de su libertad, siendo ésta un derecho fundamental, y por consiguiente consagrado en los tratados internacionales de derechos humanos, en la Constitución de la Republica Bolivariana (1999) y demás normas del ordenamiento jurídico venezolano. Con respecto a los tratados y convenios, como ya ha sido expresado la prisión preventiva, aparece prevista en diferentes instrumentos de carácter S O D VA internacional. En este sentido, es pertinente traer a colación lo establecido en R SE E R S el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, el cual dispone en su HO C E ER artículo 9 lo siguiente: D “La prisión preventiva de las personas que hayan de ser juzgadas no debe ser la Regla General, pero su libertad podrá estar subordinada a garantías que aseguren la comparecencia del acusado en el acto del Juicio, o en cualquier otro momento de las diligencias procesales y, en su caso, para la ejecución del fallo”. En el mismo sentido, la Convención Americana Sobre Derechos Humanos, al referirse al Derecho a la Libertad Personal en su artículo 7.5 establece que: “Toda persona detenida o retenida debe ser llevada, sin demora, ante un juez u otro funcionario autorizado por la ley para ejercer funciones judiciales y tendrá derecho a ser Juzgada dentro de un plazo razonable o a ser puesta en libertad, sin perjuicio de que continué el proceso. Su libertad podrá estar condicionada a garantías que aseguren su comparecencia en el Juicio”. Visto desde esta óptica, es difícil afirmar que se violenta el derecho a la libertad, cuando se imponen la medida privativa en lugar de ello, diversos actores han optado por afirmar que constituye no una violación sino una 46 restricción del referido derecho. Tal como lo expresa García (1998), “también se consagran excepciones, en las cuales, ese derecho constitucional le puede ser restringido, limitado o suprimido, según sea la norma de ley que se aplique”. (p.304). A este respecto opina la investigadora, que si bien es cierto el derecho a la libertad es de gran trascendencia, no es menos cierto que es ocasiones es necesaria la restricción del mismo, y ello en razón de ser trascendental la protección de derechos que importan al colectivo en general. S O D VA En este mismo orden de ideas, se considera que este derecho se ER S E Rtaxativamente establecidas como en el su restricción a través de normas S O H C E caso de las medidas de coerción personal, ya que las mismas se encuentran R E D inmersas en el Código Orgánico Procesal Penal venezolano (2009), y fueron encuentra legítimamente restringido, cuando se fundamenta suficientemente instauradas en la búsqueda del resguardo de las resultas del proceso, ello con la intención de obtener la verdad procesal, y la justa satisfacción de los derechos de las víctimas y de la sociedad en general. En consecuencia, para garantizar las resultas del proceso, evitar la fuga del imputado o la obstaculización por parte del mismo en la investigación debe existir perentoriedad en la aplicación de los presupuestos establecidos para la imposición de las medidas de coerción personal. En tal sentido, lo establece el artículo 13 del Código Orgánico Procesal Penal “El proceso debe establecer la verdad de los hechos por las vías jurídicas, y la justicia en la aplicación del derecho, y a esta finalidad deberá atenerse el juez al adoptar su decisión”. De allí que se hace primordial dicha perentoriedad en la aplicación de los requisitos taxativamente establecidos para la aplicación de la medida in comento, ya que estas deben ser impuestas y de hecho son impuestas legítimamente, cuando se cumplen con los presupuestos establecidos al efecto y son aplicados en el tiempo que expresa la ley adjetiva penal venezolana, con el fin último de garantizar el derecho a la defensa. 47 En síntesis, se evidencia la trascendental perentoriedad, con la cual deben ser aplicados los presupuestos establecidos en el ordenamiento jurídico venezolano para la imposición de las medidas de coerción personal, atendiendo principalmente al peligro de fuga y al peligro de obstaculización, y muy especialmente a la realidad jurídico social palpable en la Republica Bolivariana de Venezuela. R SE E R S HO C E ER D S O D VA 48 Conclusiones Los precedentes objetivos, han sido desarrollados con la finalidad de dar respuesta al problema de investigación planteado que consiste Determinar la perentoriedad de los presupuestos legales establecidos para la imposición de las medidas de coerción personal, producto de dicho análisis los investigadores llegan a las siguientes conclusiones: Con respecto al objetivo primero este se enfoco describir los requisitos de S O D VA procedencia de la medida de privación judicial preventiva de libertad ER S E R para la imposición de la medida en establecidos nuevos presupuestos S O H C E estudio, con el fin de que los operadores de justicia se encuentre más R E D actualizados con respecto a la materia y no se realice de manera mecánica establecidos en la ley adjetiva penal, en el cual se concluyen, deberían ser la aplicación de una u otra medida de coerción personal, sino que por el contrario, se logre el análisis exhaustivo, tanto subjetivo como objetivo, del caso. Se señala que no debe dejarse de lado un aspecto relevante del derecho penal, y es que este es sumamente casuístico, y como consecuencia de ello respetar en lo posible el estado de libertad como principio general y como derecho humano. Ahora bien en lo atinente al segundo objetivo, en este se propuso estudiar los fundamentos del derecho a la libertad individual consagrado como derecho humano, y en el mismo se llega a la conclusión de que la libertad es un derecho fundamental inviolable, que se encuentra establecido en la Constitución de la Republica Bolivariana de Venezuela (1999), en los tratados internacionales sobre derechos humanos, como el pacto de San José, y demás leyes del ordenamiento jurídico venezolano, como el Código Orgánico Procesal Penal (2009), en el cual se encuentra como principio general al momento de interponer las medidas de privación de libertad, el estado de libertad. 49 Por último, el tercer objetivo procuro analizar la proporcionalidad entre los derechos protegidos con la imposición de la medida de privación judicial preventiva de libertad y el derecho a la libertad, y en este se dedujo que este se encuentra suficientemente legítimamente restringido, su a restricción través cuando de se normas fundamenta taxativamente establecidas. Además se concluyo que estas fueron instauradas en la búsqueda del resguardo de las resultas del proceso, ello con la intención de obtener la verdad procesal, y la justa satisfacción de los derechos de las S O D VA víctimas y de la sociedad en general. ER S E R para la aplicación de la medida in requisitos taxativamente establecidos S O CHvan dirigidas a proteger el proceso y con ello el E comento, ya que estas R E D derecho a la defensa inherente a las partes, y deben ser impuestas y de De allí que se hace primordial la perentoriedad en la aplicación de los hecho son impuestas legítimamente, cuando se cumplen presupuestos establecidos al efecto y son aplicados en expresa la ley adjetiva penal venezolana. 50 con los el tiempo que Recomendaciones Una vez finalizada la investigación que se circunscribió en determinar la perentoriedad en la imposición de las medidas de coerción personal en Venezuela, y expuestos como han sido los resultados y conclusiones de la misma, es necesario también, llevar a cabo una de recomendaciones consideradas la investigadora, que deben ser aplicadas en el área. Principalmente se dirige la sugerencia a la Asamblea Nacional como S O D VA órgano legislador para que a través de la creación de normas jurídicas ER S E Rsean adaptadas a la realidad social que coerción personal, y de esta forma S O CH E se vive en el país. R E D De igual manera se recomienda muy respetuosamente a los Magistrados regulen taxativamente todo lo referente a la imposición de las medidas de del Tribunal Supremo de Justicia venezolano, que se pronuncien acerca de la materia, y establezcan a través de la vía jurisprudencial principios de interpretación de las normas jurídicas contenidas en el Código Orgánico Procesal Penal (2009), para lograr la proporcionalidad que debe estar presente al momento de la imposición de las medidas. Por último, se recomienda a los distintos institutos universitarios, así como también al colegio de abogados, sean llevados a cabo foros, talleres, charlas, con la finalidad de realizar análisis y discusiones con respecto a las medidas de coerción personal, tomando en cuenta lo establecido en el ordenamiento jurídico venezolano y demás tratados y principios internacionales que regulan la materia. 51 Referencias bibliográficas Asamblea Nacional. Código Orgánico Procesal Penal venezolano. Gaceta Oficial 5.930. 04 de septiembre de 2009. Asamblea Nacional Constituyente. Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Gaceta Oficial número 36.800. 30 de diciembre de 1999. Autores Venezolanos (2000). Diccionario Jurídico venezolano, Caracas Venezuela. Ediciones vitales C.A. S O D VA García, C. (1998), Código Orgánico Procesal Penal, Venezuela. Fundación Marmol & Marmol. ER S E RProcesal Penal comentado y concordado. Longa, J. (2001), Código Orgánico S O Caracas, Venezuela. 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