Grupos religiosos ¿Quiénes son? Según la RAE, la religión es un conjunto de creencias o dogmas acerca de la divinidad, de sentimientos de veneración y temor hacia ella, de normas morales para la conducta individual y social que se expresan mediante diferentes prácticas. Por ende, un grupo religioso es un conjunto de personas vinculadas por sus creencias religiosas. ¿Y la discriminación? Presentación Conceptos básicos • Discriminación • Cultura • Diversidad cultural • Derechos políticos • Grupos en situación de vulnerabilidad Grupos en situación de vulnerabilidad • Pueblos indígenas • Personas Adultas Mayores • Afrodescendientes • Grupos religiosos • Migrantes • Refugiados • Mujeres • Niñas y niños • Personas con discapacidad • Personas con VIH/SIDA • Población LGBTTTI • Jóvenes • Personas que trabajan en el hogar • Población en situación de calle Referencias Las personas con creencias religiosas son discriminadas debido a que la diversidad religiosa, muchas veces, es entendida como un riesgo para la identidad y un factor que debilita a una comunidad. Por ello, las personas que no siguen la religión mayoritaria están expuestas a ser discriminadas en sus creencias y prácticas, ya que son diferentes a las costumbres generalizadas, pues la religión no se reduce a una dimensión meramente espiritual o a una actividad del pensamiento sino que se expresa en el modo de vivir. En lo cotidiano La discriminación religiosa no sólo se da cuando se limita el derecho a practicar los actos de culto o difundir las creencias religiosas; también ocurre cuando por ejemplo, a causa de la religión, una persona no es contratada en un trabajo, es separada de una escuela u organización, es hostigada o señalada en su vida diaria, se le limitan servicios básicos como agua y luz, y, más gravemente, cuando se le expulsa de su propia comunidad. En el ejercicio de sus derechos A lo largo de la historia de la vida política de México, se ha constatado que las creencias religiosas y las iglesias han influido sobre las preferencias electorales de las personas por lo que desde el siglo XIX se ha propugnado por una separación entre el estado y la iglesia. Por otro lado, las modificaciones constitucionales de 1992 devolvieron a los ministros de culto el derecho al voto activo (derecho a votar), sin embargo no ocurrió lo mismo con el derecho al voto pasivo (derecho a ser votado), que sigue restringido a los ministros que no renuncien a su cargo como tales al menos cinco años antes de la fecha en la que quieren contender a un puesto de elección popular. El dato El panorama religioso en el país se ha diversificado. De acuerdo con el INEGI, en 1985 la población que tenía una religión distinta a la católica representaba menos de 1% y se podía identificar con 11 categorías, para 2010, quienes profesan una religión distinta a la católica o no tienen una creencia, son casi 15% de la población y para su clasificación son necesarias más de 250 categorías religiosas. Para la introspección ¿Te has puesto a pensar si tus creencias religiosas influyen de alguna forma en la ejecución de tus derechos civiles, políticos y sociales, por ejemplo, influyen en tu decisión a la hora de votar por un determinado partido político? Lo legal La Ley de Asociaciones religiosas y culto público es el instrumento mediante el cual el Estado Mexicano garantiza a los diversos grupos religiosos los derechos que la Constitución les reconoce; en el artículo 1º menciona que esta Ley se funda en el principio histórico de la separación del Estado y las iglesias, así como en la libertad de creencias religiosas. Por otro lado, en el artículo 2º se establece que no podrán alegarse motivos religiosos para impedir el ejercicio de cualquier trabajo o actividad. Por otro lado, la Constitución mexicana establece en su artículo 24 que toda persona tiene derecho a la libertad de convicciones éticas, de conciencia y de religión, y a tener o adoptar, en su caso, la de su agrado. Esta libertad incluye el derecho de participar, individual o colectivamente, tanto en público como en privado, en las ceremonias, devociones o actos del culto respectivo, siempre que no constituyan un delito o falta penados por la ley. Además la propia Constitución prohíbe, en su artículo 1º, toda discriminación motivada por cuestiones religiosas.