la pequeña venecia y el mundo - Sociedad Mundial del Futuro

“LA PEQUEÑA VENECIA Y EL MUNDO”
Venezuela
con
sus
pasos
conciencia
entonada, a
de
Abril,
la
sentimientos más
terrenales y convencida para luchar como un
collado por su gran porvenir. La ampliación
del vigor natural, adquiere tal brío, en su
herencia terrenal se acrecienta de tal modo,
la metrópolis absorbente de influencias, que
componen lo necesario para sistematizar su
cultura
autóctona,
con
noble
empuje
de
manantial, brota alardeantemente. Lejos de
tentar diquear, esa agua celestial que calma
nuestra sed, sirve para calmar la sed a los
otros y un consejo valioso, de su afán en el
corazón del hogar, decantando su actitud
como caminante de su camino.
Muy obvio es ese alarde masificado de
doctrinas justitia que es y no es y será...
Si hay un denominador común mundialmente
anhelado, es el abrazo cordial, sincero, sin
complejos, del que apacienta las ovejas en su
fama y vigor. La formación de las partes de
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nuestro
cuerpo,
como
palomas
en
cielo
abierto, ha complementado el auge universal,
de ese dogma para el avance ilimitado, que
sorprende, a toda filosofía humana. En la
preera ingenua ha encontrado un bastión en
Nazaret y, cruzado victoriosamente todas las
metamorfosis
de
ocurrencias
del
último
mileniun, estando en el presente, como la fe
que llena los vacíos frustrados por otros
dogmas, en el corazón palpitante de las
muchedumbres y sobre las que están encima
de
ellas.
Mucho
imaginación,
y
el
o
poco
ardor,
cruzándose
sin
ignorar
la
el
significado guardado, de motivo certero para
acalorar manos de abedul, el suspiro sublime
con aliento de ave celeste compañera por
siempre de las pases de Venus y luces al
natural. Apartando la natural erudicción que
aquí se pueda encontrar con optimismo y
aseatear haciendo diana en su monumental
movimiento, es fácil avizorar la carta sin
letra, que naturalmente sigue su curso hasta
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el día más cercano, pareciendo indiferente a
la verdad, verdadera, con polos de imán se
repelen aunque saben de su unión, padre,
hijo y espíritu santo, Amen. Se mira al obrero
haciendo el trabajo, el empleado calculando el
trabajo y el patrono dirigiendo el trabajo,
diciendo que es vertical o piramidal, cuando
debería ser lineal, no somos el del trono.
Las semillas tabernáculas con su destez
en tierra fértil y no fértil va mostrando su
obra diminuta o grandiosa, desde el mismo
instante que se siembra, el amor la irradia
eternamente
si
quisiera,
para
lograr
un
crecimiento en cuerpo, alma y espíritu, su
lozana calva brillara la obra, de altura ó de
bajo fondo se cultiva el diligente con la
diligencia, el sabio con la sabiduría.
Una
sabiduría
cristalina
para
lo
verdadero y lo falso, desde el instante en que
humanamente
se
creó,
para
ser
libre,
armonioso con el entorno y ser feliz, el
principio tentó el poder de la mentira, para
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caer arrastrado con señal, su herencia aún
lleva las señales, padeciendo en carne por los
tiempos, de los tiempos Amen. Pero en el
resurgir está la fuerza real y poderosa, la fe
existe,
con
mucha
fama
e
indiscutible
autoridad. La vida ignorante continua su labor
sin ella, encontrándose con oposición, que la
pesa y sostiene en balanza. A la vuelta de la
vida si se siente y conserva la creación, la fe
verdadera y el espíritu en fama y vigor.
No
solamente
por
los
estériles
creyentes en el tiempo se cae la obra. Es
también, por el caminar repentino, a paso
veloz que conduce al seol, mostrando una
separación y dorso, casi completamente de su
historia y su futuro. Como toda ruleta carnal
significa,
cambiante
por
sin
concepto,
una
contemplación,
revolución
pero
ese
cambio, no avala que esa nueva vuelta que
se inicia con él, no esta junto a la anterior y
comprender en lo interno, sus anécdotas, que
la hagan sencilla de mantenerse con el
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pasado del olvido, rueda rodante fue el origen
del universo, en ella nació la creación del
todo,
que
era
el
normal
e
instantáneo
alimento de la religiosidad antigua, de lo
establecido y hábitos heredados. En la carne
se ilusiona la libertad, centrándose en olvidos
y bienhechores sin basamentos, intolerando
al
desvalio
bruscamente,
ocasionando
la
diferencia abismal de vidas carnales. El río
civilizado, que cae lejos del calor humano,
hizo por la vida material presente, buscando
su oscuro porvenir, hubiesen empeñado sus
creencias
vanas,
así
en
lo
carnal
como
espiritual, hábitos como en las constituciones,
en las leyes humanas como expresiones
corporales. Ese obrar neciamente violento y
terco, es, ha sido, y será, la señal que se
debe
cambiar
en
nuestro
cuerpo,
para
guardarnos de tribulaciones dolorosas, donde
el que cree saber no sabe. De todo ese obrar
ciego,
mudo
y
sordo,
fluyen
esperanzas, como culturas sin vidas.
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nuestras
Fue una crueldad fiel, el cambio de
paraíso del principio, nuestro origen, a la vida
presente, que lucha por libertad, justicia e
igualdad para un mejor porvenir; no pudo
lograr el primer hombre y su edecán, salvar
al mundo justo, sino, que fue arrastrado por
la ley escrita, haciendo rodar la rueda de los
tiempos,
curiosamente
recuerdo
en
este
instante el dicho nadie sabe lo que tiene
hasta que lo pierde, aunque me tengan la
vida escrita.
Escribiendo
como
humano
y
embriagándome de necedad, como hombre
moderno, y creencias al igual que el primer
hombre, desoyendo y haciendo mi curiosidad
material,
aunque
nosotros
hayamos
exagerado más que el primero, tomando los
indebidos y destruyendo lo habido, quizás
exagere, no se preocupen soy exagerado, soy
humano y necio; los humanos deben tener un
punto critico donde reflexionar mejor, si se
puede y permite, más que al primero, para
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dejar de ser un necio biberón, que chupa lo
que construye y no lo que esta creado.
Cambiar el nombre innovar por adaptar, su
secreto es vida, vida que destruimos, cuando
le fijamos el visor a la codicia incansable,
aunque este corriendo por un desierto. El
primer revolucionario del mundo con leyes en
el corazón se mantuvo lejos de lo no escrito,
para salvar la herencia con abrigo de oro de
la destrucción, herencia amnésica e incrédula
de su abrigo que le da calor. El abad dará su
diestra
prometida
al
heredero
por
su
humildad, fe de reyes y hombre de señores.
Mirando los revolucionarios humanos junto
con sus profetas, que no cuidan su bestia
tergiversando lo escrito, sin lupa examinadora
de lo interno, olvidando así, y diciendo sin
querer
queriendo
cambiaremos
todas
las
cosas para un mejor porvenir, conquistando
sus labios gruesos y lengua codiciosa fingida,
la obra sin cimientos de vida vanal. Los
humanos dicen ver para creer, si supieran lo
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que
dicen.
La
altitud
significa,
sufrimiento,
un
precio
que
dolor
nadie
y
quiere
saborear aunque no lograran escapar, ni
siquiera en su último tantear. Hoy tras los
pasos del siglo 21, donde la carne se ve
quemada y aún humeante, con ríos revueltos
por el sol humano que brilla, obligando como
un ruin marchitar la primavera, que parece
veraniega, incorporando los lazos de almas,
con empuje muy superior a la inofensiva
muralla árida y cuerpo de cristal, que no pudo
soportar,
popularizándose
los
labios
con
cánticos malditos, sin saber que vociferar así,
alarga el sufrimiento. Jerusalén, Jerusalén
donde estas, he visto al mundo y no te
encuentro, con lagrimas de río te ha cubierto,
sin importarles la sabiduría en su yacimiento,
hoy ya no existe, pero la fe mueve montaña y
en tu resurgir, te veré en cimiento de
fundamento.
Olvidemos
el
brillo
del
sol
funesto, sin remordimiento, la perdición no
siempre brillará, su luz no tiene fundamento.
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El pasado se hacia sentir con alarde orquestal
y gozo manifiesto.
Para las generaciones la antigüedad es
como el vinil con sonido molesto, se escucha,
se escucha pero no se hace esfuerzo, muchos
leen,
otros
escriben,
la
mayoría
habla
diariamente, con ánimo de fundamento. Y tan
solo necesito un momento, p’ara lavar las
manos y cuerpo en fuego ardiendo.
Como lograr ese momento, tan solo
obra mi nombre, como lo escuchaste en tu
nacimiento, sin miramiento de lengua y cuero
con
pigmento.
El
río
con
corriente
cosmopolita, va abrazando en su casa, a la
débil oposición del encuentro manifiesto en
sufrimiento, desconociendo todo esfuerzo. El
ayer se manifestaba con voz de mando, de
sus amos y colores de iris, y brillan el orgullo
mundano con razón celestial de lo vivido y
porvenir,
veneran,
veneran
al
iris
senil,
despertando subliminalmente la codicia, de
conciencia
añeja.
Pero
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esa
conciencia,
después
de
testamento
tocar
vivo,
fondo
y
al
asunto
costumbre
del
nacional,
concluyó su obsorción de obra, fundada en
plumaje recorriendo caminos de lienzos y
gotas que caen con trazos diestros.
Existimos recorriendo 80 luces y casi
apagándose, y debe inquietarnos los que no
lo tienen, recuerden el vino añejado mientras
más añejo mejor sabe. Hay que evitar la
consumación con el vino celestial, el suspiro
inimaginable por la venida, la empatía por lo
grandioso, la amistad abierta, son condiciones
naturales de lo nuestro; pero si alcanzamos
mantener el fuego abierto desde adentro,
necesitamos
confesarnos
del
pasado
y
presente constantemente, estando en vela
siempre. Para esa magna obra de oración, los
tiempos de la luna traen la diligencia en vida,
todas las animadas, aún las de tímidas
aparición, son aprovechadas sin distinción. En
hojas de la historia, la fuerza estimula lo
peculiar, la siembra y engrandece, como
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figura altiva del culto moral, sin contar el
carácter único que debe presentar, entre sus
grandes anhelos el aprendizaje y el vigor
imaginativo, con sentimientos que puedan
impulsar obras ilustres, sin mezquindades
torpes,
en
el
corazón
terrenal,
no
hay
presentación de algo en común de lo posible
entender,
el
agua
guardada
con
valor
semejante al puño y letra, encontrados al
trazo por el lienzo. La pauta indica su presa
letra, en codicia soeza, para la imaginación
funcional que combina el pasado, presente y
porvenir en una obra onírica, que lleva poesía
de miel al paladar y cara ataviada en el
firmamento.
Desde
la
imagen
señalada
por
el
hombre, en esa, aún se mantiene su cara
ataviada con luces de neon, jardines nada
natural, voces de ecos infernal, caminar como
caballo
en
competencia
y
sudar
sin
necesariamente trabajar, brillan las diferentes
formas de vida, ahí permanece cierto estilo,
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con marcas que divisan el horizonte original y
puro, desde lo más hogareño del ayer, hasta
inmortales peculiaridades en labores festivas
y juegos; desde el agua al comensal, to0do
empuja a la consolidación de costumbres
grises, que espesan como río revuelto el alma
sin premio.
El desgano que apremia fundir lo creado
con lo evolucionado, hasta transformarlo en
la
conquista
libertinos,
emperdenia
cuya
riqueza
e
de
pueblos
intelectualidad
cultural, de fuerza abrazando armas, pueden
lograr suplir las necesidades, en ausencia del
valor
espiritual
tanto
individual
como
colectivo. Y su entorno armónico con sus
hazañas políticas del crono.
En la época de las hazañas, inventos,
aparecen
narraciones
de
noticias
sensacionales y gratas composiciones. La
cronología estimula el curso de los tiempos en
busca de lo nuevo, acrecentando el cauce del
río
pasado
y
logrando
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manifestaciones
políticas con discursos clásicos, y pinturas
codiciadas como el oro señorial. Los escribas
del pasado, ponen las miradas en geos que se
logran
ver,
sorpresivamente
exagerando
muchas veces lo real sin ser trascendental.
En
su
mercancía
dedal
con
del
tiempo
estilismo
fija
su
fenomenal,
apreciándose el glamor litoral con barcos
atravesando
el
mar;
en
plenas
aguas
profundas se estremece, como los gritos de
deida marina, una bestia salitre, y estrellas
de manjar, llevan consigo el viento polar,
mostrando el camino navegal dense pasos
fluvial, bajo la enseñanza marinera, y junto al
polo sur siempre aliado de las aguas, que
gustan
de
fondo
sin
poder
tocar,
una
imaginación con sentido pubertal capaz de lo
onírico y mapa del tesoro soltar, con atuendo
infantil hubo maquinado, una sonrisa con
estrella fantasmal.
Finalmente,
las
estrellas
brillan
su
merodear como la vegetación de Sabana
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Grande o Gran Sabana. Párense ahí, con ojos
de águila los amantes de lo único poder vivir,
al natural.
El paisaje señorial, con quebrada de
jaspe, aves y su edecán abismal, y el siempre
verde que no podrás evitar, conjugados en un
ultranivel verdadero, que alegran los ojos;
todo ello parece un paraíso celestial, aunque
nos podemos quedar cortos al obsesionar tal
imaginación, todo esta concebido para el
deleite sin igual.
Esa belleza nos anuncia que es una
naturaleza fuera de serie, si la comparamos
con otras partes del mundi. Esta tierra feroz
en brillo por su diversidad de aves, piedra de
jaspe con color rojo al brillo del sol celeste,
lagunas, sus verdes y muchas cosas más.
Merecemos
tanta
bondad;
la
podremos
conservar, o será al transcurrir del tiempo
ceder a la conquista y asir la codicia de sus
aguas,
terrenos,
plantas,
aves,
etc,
seguiremos el lema humano, tomando lo
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indebido y destruyendo lo habido, y el futuro,
observando
su
turno,
si
podrá
llegar
a
hacerse realidad.
Hemos tenidos generaciones unas más
destructoras que otras en su obrar para
alcanzar las brillantes pero, si sumamos ese
salvajismo (derroche del oro negro, la bauxita
exquisita, exótica fauna, líquidos en carrera
infinita) que nos quedará para el presente y
futuro en nuestra tierra. Por casi 2.000 años
la hemos labrado y que nos ha quedado,
desiertos, desiertos, como el Gran Zahara,
obrar y tocar sin sentido, arando en paisajes
casi convertidos en arenas.
Arenas
que
pueden
convertirse
en
movedizas para protestar por sus ultrajes
continuos sin pena ni gloria que la lleguen a
calmar, en su enfadado futuro sin ropa que la
abrigue en total. El futuro anda por calzadas
en frutos desnudos dañando a los otros, por
la indiferencia a las letras sin formas. A quien
vociferar el demo vocifera la crestado, el
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crestado dice yo no fui, la magna llena de ira
dice, no puedo moverme porque me pegaron
con
letras,,letras
de
luz
hobbesiana
del
interés peculiar los iluminará, no todos los
terraquios tiene semejantes fuerzas, y en lo
referente
al
uso
de
la
gracia,
quienes
exageran ese interés peculiar, pueden ser
muy
predominantes
y
amenazantes.
El
mando debe construirse de tal forma que,
ojeen a estos últimos, sus dotes y aptitudes
lo
hacen
ver
más
chances
en
las
familiaridades y otros en las carreras, además
de otras formas.
En nuestro corazón y nuestro amor hay
sitios para todos, a los tribunos corresponde
respectar
esas
pluralidades,
conciliar
sus
corazones, balanzarlos y hacer de nuestra
existencia
de
vida
colectiva
una
obra
tolerante e integradora que sume en lugar de
restar, y recordar siempre que los crestados
se pierden por la exageración del mirar
individual, sin poder olvidar al pequeño maná,
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una masa con amasado glorioso como el
pequeño hermoso de verso orquideal.
Quise
amasar
este
essair
humilde,
amasados con versos para un Abril y cerrar
enojoso, por no merecer tanta gloria para un
pequeño hermoso que despierta con la voz y
el voto glorioso. En el mundo furioso nos
observan
con
codicia,
con
distancia,
solidaridad, critica, etc, y a pesar de todo
buscan el mismo tono, lograr ser feliz en este
mundo
sin
fin,
en
amor
y
verdad.
Si
primorosamente no deseamos, ni queremos
de verdad seguir mirando los círculos viciosos
del pasado reloj, disfrazado en libros de
nuestra historia, como espíritu desastroso,
similar
al
agua
vengativa
de
riachuelos
lluviosos, donde turba lo onírico del lar,
barriendo sus rocas amuralladas, acechando
siempre las torres de concreto y juntándose
lo creado en desierto, para acabar la faena.
Irrumpiendo el fantasma al inclemente sol,
donde hay que aprender la gran lección, para
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caminar andando en caminos cada vez más
rectos,
sólidos
y
seguros
en
el
tiempo
apremiante, con apremio se piensa en esta
pequeña Venecia, así no llegue a premiar,
llegue a las puertas de clases dar, con
galardón me confortáis.
Si todos trabajáis, participando unido a
la democracia, integrando y logrando así, la
suprema armonía, nuestra pequeña Venecia y
el
mundo
en
su
futuro
2.020,
con
su
preparación y estudio sacaran el 2.020. La
preparación y estudio de la estrella con brillo
tenue liberal, se sonroja al ver el brillo de los
astros reyes que la conforman, para su juicio
letrado, de cuartillas y luces del firmamento
mostrado. La estrella con su tenue brillo
liberal en el firmamento no busca fama, ni
gloria, solo busca con humildad iluminar el
sitio en oscuridad. Al centro de la oscuridad
me gustaría iluminar junto a los astros reyes,
para poder llegar.
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RESUMEN
La pequeña Venecia en su Abril tiene sus sueños 2.020 y más
haciéndolos realidad, caminando sus caminos escritos en letras, sin
exagerar los intereses propios en comunión con la oración, ejemplo
que el mundo quisiera seguir con extremo fundamento en cimientos.
The small Venecia in its April has its dreams 2.020, and but,
making them reality, their roadswritten in letters walking, without
exaggerating the own interests in communion with the sentece,
example that wanted to continue with end foundation in foundations
in the world.
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BIBLIOGRAFIA
-
Raúl Peña Hurtado – Luis Rafael Yépez. Lengua y Literatura.
-
Ramón García – Pelayo y Gross. Pequeño Larousse Ilustrado.
20
VOCABULARIO
Abril: F. IG. Primera juventud; PL. años de juventud.
Abedul: Árbol blanco.
Profetas: Legisladores políticos.
Lai justitia: Justicia.
Crestados: Gobiernos, mandos.
Carrera: Competencias.
Familiar: Cooperación.
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