Un poco de historia

Un poco de historia
Desde sus orígenes, el hombre ha desarrollado distintas formas de comunicación para expresar y
dar a conocer a sus semejantes sus pensamientos, su experiencia, etc. Sin duda, el lenguaje oral es el
sistema más antiguo. Permite la comunicación de las personas dentro de su ámbito (cara a cara).
Cuando las distancias que debían recorrer los mensajes fueron mayores, se utilizaron señales de
humo, golpes de tambor y mensajeros a caballo para la comunicación.
Otras formas de comunicación fueron las señales de banderas que se realizaban entre los barcos.
El alcance visual aumentó con el uso de telescopios y largavistas.
Durante la Revolución Francesa (1789), a fin de agilizar las comunicaciones se construyeron una serie de
estaciones que poseían un telescopio y unas barras de señales. Cuando era necesario transmitir
información, desde una estación se hacían las señales correspondientes, que eran observadas por la
estación siguiente por medio del telescopio y a su vez reenviadas a la próxima estación.
Estas estaciones dieron origen a la primera línea telegráfica, en la cual los mensajes se iban
transmitiendo de una estación de comunicaciones a otra.
Con el avance de la tecnología se perfeccionaron los medios de comunicación. El uso de la energía
eléctrica dio origen, en 1836, a los telégrafos eléctricos, que transmitían los mensajes por medio de
cables con un sistema llamado código Morse, que mediante señales eléctricas de distinta duración
permite la comunicación telegráfica.
El sistema Morse perdura en las comunicaciones navales, pudiéndose utilizar hasta una linterna
para la emisión de señales.
Décadas más tarde, en 1877, con la evolución de la electrónica se pudo transmitir la voz humana a
través de un par de cables, dando origen al teléfono. La principal desventaja del teléfono era que entre los
dos aparatos que se comunicaban debía existir un cable que los uniera.
Este inconveniente se subsanó algunos años después, en 1895, con la transmisión inalámbrica a
través de ondas de radio. El alcance de estas emisiones era de apenas 1,6 km, pero pocos años después
las señales de radio ya alcanzaban a unir América con Europa.
Este tipo de ondas hoy es utilizado para la transmisión televisiva, la radial, transmisiones vía
satélite, etc.
Historia de las Comunicaciones - Prof. Daniel Duarte - Pág. 1