Ponencias:

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(I) Ponencia: Los nuevos paisajes urbanos de waterfront y las grandes Exposiciones
Postmodernas
Vicente Bielza de Ory. Catedrático del Deptº de Geografía y Ordenación del Territorio. Univ. de
Zaragoza. Españ[email protected]
(II) Resumen
La promoción privado-pública para la regeneración de los viejos puertos empezó en la costa Este
norteamericana, donde los puertos de Boston y Baltimore llevaban dos décadas de decadencia. La
regeneración de frentes de agua mediante la sustitución de los decadentes usos del suelo portuarioindustriales por los terciarios avanzados, residenciales, comerciales y lúdicos, contando con la
cooperación del Estado, la municipalidad y los promotores privados, inauguró una nueva fórmula
urbanística, utilizada en el viejo continente para salir de la crisis de los años setenta. Concretamente en
los docklands de Londres convergieron en los ochenta las experiencias norteamericanas del promotor
Rouse con las ideas del geógrafo Peter Hall. Desde la batalla de los muelles londinenses hemos
asistido a reconversiones de muchas zonas portuarias europeas (Génova, Barcelona, Marsella, Bilbao,
Valencia...) y luego en algunas suraméricanas (Puerto Madero): se han generado usos del suelo por
parte del terciario avanzado o cuaternario, usos lúdico-turísticos, junto con usos residenciales, que
articulados con nuevas infra e “infoestructuras” han suscitado centralidades alternativas al CBD en las
respectivas ciudades. La experiencia de los water front ha sido recogida por las grandes Exposiciones
postmodernasplanteadas para una sociedad postindustrial y del ocio, cuyas ciudades compiten por una
calidad ambiental y una marca, atractivas para las inversiones del terciario superior y para el turismo.
Para ello, normalmente se han emplazado sobre frentes de agua, water front que han generado usos
“centrales” del suelo, conectados con el resto de la ciudad y con el exterior a partir de nuevas o
mejoradas infraestructuras. Así ocurrió en Sevilla’92, Lisboa ’98, Londres Millenium 2000, Suiza
2002, Barcelona Forum 2004 y Zaragoza 2008. Profundizaremos especialmente en está última,
comparándola con la de Lisboa.
Los objetivos de la ponencia consisten en hacer un balance del impacto de esta fórmula
postindustrial en el urbanismo y en la ordenación del territorio, partiendo del conocimiento directo de
los casos expresados, así como de la bibliografía existente. Estudiaremos también los diez principios
definidos en foros internacionales para el desarrollo sostenible del waterfront y la utilización de esta fórmula,
nacida para la regeneración de espacios industriales obsoletos y adaptada a las grandes exposiciones
postmodernas, como modelo de la ciudad del futuro sobre suelo nuevo (Dubai Waterfront).
(III) LOS NUEVOS PAISAJES URBANOS DE WATERFRONT
EXPOSICIONES POSTMODERNAS
Y LAS GRANDES
Al final de la era industrial la película dramática estadounidense de 1954 On the Waterfront 1 del
director Elia Kazan, sobre la vida de los estibadores en los muelles neoyorquinos, popularizó una
expresión, waterfront o frente de agua, que daría nombre en la era postindustrial: primero, a una
reconversión paisajística de los antiguos muelles, unida a un cambio de funciones hacia el sector
terciario-cuaternario y al uso residencial y después, a ser utilizada en las grandes exposiciones
postmodernas y a constituirse en una fórmula urbanística y territorial de la ciudad del futuro para la
que se han definido en foros internacionales diez principios para su desarrollo sostenible.
1 La planificación postindustrial: la ciudad de waterfront o frente de agua
1
conocida en español como Nido de ratas o La ley del silencio fue protagonizada por Marlon Brando
1
1.1.
La reconversión industrial y los nuevos paisajes
La crisis económica de 1973 afectó principalmente a las áreas industriales obsoletas, provocando
en los suelos y paisajes desindustrializados un cambio de funciones urbanas sobre formas renovadas.
Ello sucedió en dos tipos de zonas: las minero-industriales del interior y las portuarias, propicias a
intervenciones de water front o frente de agua. En ambos casos el cambio paisajístico fue espectacular,
así en la franja minero-industrial del NE francés-Luxemburgo-Borinage, donde se perdieron entonces
más de cien mil puestos de trabajo, los barbechos industriales ennegrecidos se reconvirtieron en
paisajes verdes con instalaciones de alta tecnología y nuevas áreas residenciales. Otro caso europeo es
el del paisaje negro en torno a Albertville, antigua capital industrial al pie de los Alpes saboyanos, que
se transformó, con ocasión de la olimpiada de invierno de 1992, en una centralidad de servicios y
turismo, gracias al trazado de nuevas infraestructuras viarias que mejoraron el acceso a los Alpes y en
un paisaje verde con la revegetalización de los terrenos negros industriales y de las autovías.
Análogos cambios se producirían en las áreas fabriles norteamericanas, donde se perdieron más de 35
millones de puestos de trabajo como consecuencia de la crisis.
La decadencia de los viejos puertos con el aumento del calado de los cargueros (especialmente de
los petroleros), la competencia de los países emergentes y sus agresivos astilleros, etc., había
comenzado antes de la crisis general del 73, por lo que fue donde más pronto se reaccionó ante la
desindustrialización. Concretamente en la segunda mitad de los setenta el Old Port de Boston
experimenta transformaciones en sus tinglados portuarios, en las lonjas, en las instalaciones
industriales que fueron reconvertidos al sector servicios, al mismo tiempo que se recuperaban viejas
áreas residenciales. El proceso renovador se traslada a Baltimore y a otros lugares fabriles
norteamericanos en los 80’ y luego cruza el Atlántico cambiando el paisaje de los Doklands
londinenses: los edificios postmodernos del Támesis contrastan con los industriales rehabilitados.
Muchos puertos europeos experimentan a finales de dicha década y en los 90’ similares
transformaciones que podemos incardinar en el modelo de water front, que volverá a pasar el Atlántico
con el cambio de milenio para terciarizar puertos sudamericanos como el argentino de Madero.
1.2.
La promoción privado-pública de la regeneración de water front y festival center:
La crisis económica de los setenta lo fue también de los modelos planificatorios estatales2. La
regeneración de los viejos puertos de Boston y Baltimore que llevaban dos décadas de decadencia tuvo
lugar mediante una nueva fórmula urbanística, de carácter mixto privado-pública. Es un mismo
promotor, Rouse, quien en 1976 impulsa la renovación del Old Port en Boston (USA) y en 1980 el
Harbor Place, en Baltimore. En 1983 el “Programa de Subvención federal de desarrollo urbano” cuenta
ya con 1900 proyectos en 929 comunidades de USA, actuando como palanca para una inversión del
sector privado 3,8 veces mayor3. Nueva York y Baltimore (con 50 proyectos cada una) junto con las
grandes ciudades fabriles atrajeron la mayoría de proyectos, que priorizaron los espacios comerciales
(56%), como había ocurrido ya con el festival center, el Faneuil Hall Market Place, en Boston,
respondiendo a la nueva era postindustrial que tiende a asociar comercio y recreación dentro de una
civilización servo-industrial y del ocio. Frente a los centros comerciales, fundamentalmente edificios
únicos más o menos compactos, nacieron en Norteamérica en los 80, los retail-parks o parques de
actividad, donde el negocio del ocio se convirtió, definitivamente, en el factor principal de atracción
comercial. Los nuevos centros son básicamente centros de entretenimiento de grandes dimensiones
con actividades comerciales anexas4.
2
vid. V. Bielza: Introducción a la ordenación del territorio. Un enfoque geográfico. PUZ, Zaragoza, 2008
3
Hall, Peter: Ciudades del mañana. Ed. Serbal, Barcelona, 1996.
4
En 1981 se inauguró el West Edmonton Mall (en Edmonton, Canadá) que ha permanecido desde entonces como uno de los mayores
espacios de entretenimiento del mundo.
2
La participación de promotores, la especialización funcional en servicios avanzados albergados en
altos edificios de oficinas, la ubicación de centros de ocio-comercio, así como una fuerte inversión de
rehabilitación en las viejas áreas residenciales, conforman en adelante las características de los water
front, cuya experiencia será recogida por las Exposiciones Universales.
2 Water front, una nueva fórmula urbanística y territorial
La regeneración de frentes de agua mediante: la sustitución de los decadentes usos del suelo
portuario, con la cooperación del Estado, la municipalidad y los promotores, inauguró una nueva
fórmula urbanística, utilizada en el viejo continente para salir de la crisis de los años 70’. El
intercambio de fórmulas urbanísticas entre las dos orillas del Atlántico que se había inaugurado a
principios del siglo XX con los planes del Gran Londres y el Gran Nueva York se invertirá a finales
del mismo para extenderse después al resto del Viejo continente y universalizarse posteriormente en
casos como el Puerto Madero de Argentina y la ciudad del futuro, Waterfront City de Dubai.
2.1.
La regeneración urbanística de frentes de agua: los docklands
En la década de los 80’, en la rehabilitación de los docklands (muelles) de Londres convergieron
las experiencias norteamericanas del promotor Rouse con las ideas del geógrafo Peter Hall de crear allí
zonas libres de negocios, utilizando la figura de puerto franco (libre) que tanto éxito estaba teniendo
en Hong Kong. El paisaje del Támesis se transformó: primero con los docklands de Londres
reconvertidos a usos comerciales y de servicios, con la integración de los edificios funcionales
postmodernos y las fábricas y chimeneas convertidas al uso del sector terciario; después se introduciría
el ocio y entretenimiento en las proximidades del severo parlamento británico.(Figura 1)
Fig.1.Los docklands de Londres reconvertidos a usos
comerciales, residenciales y de servicios
Fig.2. Valencia, frente del Turia. Al fondo
waterfront marítimo
2.2. Zonas rehabilitadas en los viejos puertos europeos. Puerto Madero en Buenos Aires
Con la recuperación económica tras el proceso conocido de desindustrialización-desurbanizacióncontraurbanización y la apertura plurifuncional de su base económica muchos viejos puertos de
Europa, intransitables a mitad de los 70’, pasaron a ser paisajes atractivos y nuevas centralidades para
sus espacios urbanos a finales del segundo milenio. Hubo reconversiones de muchas zonas portuarias a
usos del suelo para el sector terciario avanzado o cuaternario: comercio de lujo, finanzas, servicios a
las empresas, consultoras, centros tecnológicos, restaurantes y hoteles de lujo, atracciones lúdicas,
centros culturales, museos..., y también nuevos usos residenciales.
Los puertos industriales más sucios, abandonados y criminalizados del Mediterráneo en los años
de la crisis eran Marsella y Génova. Paradigmático es el caso de Génova cuyo ámbito portuario
recuperado la convertió en capital cultural europea a principios del siglo XXI, con sus restaurados
3
palacios renacentistas en torno a la zona del tinglado portuario, transformada en espacio lúdico. Le
Vieux Port de Marsella tardó en reconvertirse una vez perdidas las funciones portuarias que tenía desde
los fenicios, cuando tras “la guerra árabe-israelí de los 6 días” los petroleros aumentaron de tamaño y
tuvieron que atracar en la zona portuaria de Fos a unos kms. al oeste. El histórico alcalde Gastón
Defèrre fracasó en sus amables intentos de sacar del barrio portuario a los okupas (mogrebies y pie
noirs) mientras las nuevas inversiones servoindustriales se iban a la vecina capital provincial , Aix-en
Provençe, tempranamente rehabilitada.
También las ciudades de frente fluvial han experimentado reconversiones semejantes como:
Colonia, con un Rhin que una vez descontaminado de los desechos industriales se ha reconvertido al
uso turístico o París, cuyo centro desde las reformas de Haussman había integrado el Sena, pero que
tuvo que restaurar otros frentes más alejados (Bercy-Tolbiac). Bilbao, con la reconversión de la ribera
del Nervión, cambió las fábricas de Altos Hornos por el uso lúdico-cultural en torno al museo
Guggenheim, quedando arqueología industrial en forma de viejas chimeneas dentro de nuevos parques.
Valencia es un ejemplo mixto en dos sentidos: el frente fluvial del Turia se ha unido al marítimo,
empalmando planificación industrial con postindustrial. Desde mitad del siglo XX, aprovechando el
viejo cauce del Turia, desviado para evitar inundaciones (1957), se configuró un frente fluvial
rehabilitado, que articuló la ciudad, pasando de uso agrícola-industrial a equipamientos en el talweg,
mientras en las terrazas fluviales se levantaban altos edificios residenciales, hoteles y oficinas. A
principios del 2000 el frente marítimo del puerto pasó de un uso portuario-industrial a equipamientos y
ocio. Con ocasión de la Copa del Mundo de navegación a Vela se aceleraron los proyectos
construyendo un puerto deportivo en sustitución del industrial.(Figura 2)
A finales del siglo XX la onda rehabilitadora de viejos puertos vuelve al continente americano,
transformando el gran puerto Madero de Buenos Aires: al uso terciario (restaurantes, universidad
católica, etc.) y residencial de grandes rascacielos, a pocos hectómetros del centro histórico de la Plaza
de mayo y su Casa Rosada, dejando más allá un gran espacio verde y de protección (la Costanera).
.(Figura 3)
Fig. 3. El gran Puerto Madero, en Buenos Aires
Fig. 4. Lisboa 98’: una doble operación urbanística y territorial
2.3. Water front, una estrategia de ordenación y desarrollo territorial
Las operaciones de reconversión de water front no son solo transformaciones urbanísticas, sino
que responden también a una estrategia de ordenación y desarrollo territorial, que afecta a los sistemas
de ciudades e infraestructuras, a la competitividad entre ciudades postindustriales y que se traduce en
la atracción de multinacionales de grandes superficies y ocio. Responde a la Estrategia Territorial
4
Europea5, ETE, 1999: diversificar su base urbana y al mismo tiempo recuperar los cascos históricos y
valorizar su patrimonio para un turismo cultural-urbano, donde el comercio y los servicios avanzados
adquieren un nuevo protagonismo en espacios atractivos que articulados con nuevas infra e
“infoestructuras” han suscitado centralidades alternativas al CBD.
3. Las grandes Exposiciones postmodernas.
Las grandes Exposiciones postmodernas, planteadas para una sociedad postindustrial y del ocio,
cuyas ciudades compiten por una calidad ambiental y una marca, normalmente se han emplazado sobre
frentes de agua, waterfront, que han generado usos “centrales” del suelo, conectados con el resto de la
ciudad y con el exterior, a partir de nuevas o mejoradas infraestructuras, impulsando y renovando el
comercio y el ocio. Así Sevilla’92 sobre la isla de la Cartuja en el Guadalquivir, Lisboa ’98 sobre el
Tajo, Londres Millenium 2000 sobre el frente fluvial de Greenwich, Suiza 2002 sobre el lago
Neuchatel, Barcelona Forum 2004, sobre el frente fluvial del Besós y Zaragoza sobre el frente del Ebro
en el 2008. Los diversos usos del suelo de los sectores terciario y cuaternario dan lugar a nuevas
centralidades, que bien conectadas con el centro y con el exterior, fortalecen las ciudades en que se
asientan, dentro del sistema territorial en que se inscriben.
En el caso del espacio ibérico vamos a contemplar los impactos urbanísticos y territoriales
provocados por las Exposiciones celebradas con diez años de diferencia en dos ciudades de distinto
tamaño y funcionalidad como son Lisboa y Zaragoza, teniendo en cuenta como antecedente la de
Sevilla. En ambas se ha pretendido reforzar la centralidad y conectividad de la metrópoli (nacional o
regional) dentro del sistema ibérico y europeo de ciudades, renovando un water front de un río ibérico
con transformaciones urbanísticas que suscitan un nuevo polo de centralidad dentro de la aglomeración
urbana.
3.1.
Lisboa 98’
Se inscribe en dos contextos: el de las exposiciones universales, bajo el lema “Los océanos, una
herencia para el futuro” y el de las estrategias territoriales y urbanísticas de la capital de un Estado, que
había cambiado sus relaciones exteriores con la pérdida de las colonias y su entrada en la CEE.
Desde el punto de vista territorial con la Expo y proyectos anexos se intentó mejorar su
conectividad con España y resto de Europa, para lo que, dentro del plan de autovías portuguesas,
construidas con ayuda de la U E, se aceleró la autopista de Madrid-Lisboa que terminaba en el gran
“ponte Vasco de Gama”, y la estación intermodal de Santiago Calatrava de 1994, próximo al nuevo
puente, lo que reforzaría la centralidad del nuevo espacio rehabilitado.(Figura 4)
La Expo’98 como operación urbanística partió de la recuperación de los degradados suelos
portuario-industriales y de sus depauperados entornos residenciales. La experiencia de Sevilla y sus
problemas de utilización post-expo incitaron a dos etapas: la 1ª se centró en las 60 ha ocupadas por la
Expo y accesos que se terminó justo para la inauguración de la misma. En esos momentos todavía
había obras y paisaje mixto degradado en su entorno. La 2ª fase afectaba a 330 ha a urbanizar y
edificar en una docena de años para configurar una nueva centralidad al NE de la ciudad con un uso
mixto terciario-cuaternario y residencial. El objetivo se ha cumplido antes de lo previsto y hoy la
estación del metro de Oriente (Expo) permite el enlace con el centro tradicional que arranca de la
Baixa. El nuevo paisaje está dominado por las torres-rascacielos de oficinas, hoteles y viviendas sobre
el espacio de ocio, los equipamientos comerciales y los edificios de la Expo.
3.2.
Zaragoza 2008
5
COMITÉ DE DESARROLLO TERRITORIAL. UNIÓN EUROPEA, Estrategia Territorial Europea. Hacia un desarrollo equilibrado y sostenible de
la UE (ETE), Luxemburgo, 1999, 89 pp.
5
La Exposición de Zaragoza se inscribe en la línea de las “Expos” anteriores, con especial
referencia a Lisboa, ya que ambas exposiciones se apoyan en el agua:”Agua y desarrollo sostenible”
es el lema de la zaragozana y el diseño de su “Torre del agua” y de otros elementos arquitectónicos
guarda gran semejanza con los lisboetas. Por otra parte hay que considerar las estrategias urbanísticoterritoriales de una metrópoli regional, que siendo la quinta ciudad de España (667.034 hab., 2007),
ocupa una situación privilegiada en el centro del NE peninsular que podía rentabilizarse mejor en la
era postindustrial, mejorando sus infraestructuras, y que a pesar de contar con un emplazamiento junto
al Ebro, desde su fundación romana como Cesaraugusta (siglo I), creció en la era industrial de forma
compacta, alejando sus áreas residenciales del río.
La primera industrialización de Zaragoza en la segunda mitad del XIX se apoyó en el ferrocarril,
por lo que el suelo industrial y los barrios obreros nacieron en torno a las estaciones ferroviarias,
separados del casco histórico y del ensanche. La ciudad residencial burguesa siguió creciendo en la
primera mitad del XX de forma compacta hacia el sur, alejándose del río Ebro. Los planes urbanísticos
de entonces se hacen a espaldas del Ebro, mientras este río y sus afluentes, Gállego y Huerva, con sus
carreteras paralelas se convierten en ejes industriales a partir del Plan de desarrollo industrial 1964-68.
El Plan urbanístico de 1968, crea una nueva ciudad en la orilla izquierda del Ebro para absorber la
duplicación de la población provocada por el polo de desarrollo, con una actuación urbanística urgente
(ACTUR), pero el río sigue sin integrarse en la ciudad a pesar de la posterior multiplicación de
puentes. A finales de los setenta la ciudad burguesa y los barrios obreros llegan a soldarse
internamente, dejando algunos problemas pendientes, pero las circunvalaciones perimetrales se
demoran en su realización.
La tardía periurbanización que se genera a partir de 1981 sobre la autovía de Logroño con la
ubicación de GM en Figueruelas a 30 km. del centro y del primer hiper, Alcampo, a 12 km, inicia un
proceso postindustrial en el que hay que planificar e integrar los nuevos suelos del periurbano
expansionados por los ejes viarios paralelos a la red fluvial y al mismo tiempo cambiar los usos del
suelo industrial obsoleto del interior de la ciudad y junto a los ríos, integrándolos en la vida urbana.
Del PGOU de 1968 a los de 1986 y 2002 hay un cambio en el tratamiento del agua y de las riberas del
Ebro y de sus afluentes. La contemplación del ciclo hidrológico en su integridad y la incorporación de
los ríos Ebro, Gállego y Huerva junto con el Canal en la consideración de las estrategias urbanísticas y
ambientales aparecen claras en el PGOU del 2002.
Los objetivos ambientales y urbanísticos que se persiguieron con la Expo 2008 y proyectos anejos
tendieron a resolver los problemas pendientes, relativos a la integración del río en la ciudad y la
soldadura de los espacios residenciales mal comunicados. Pero además se consiguieron otras mejoras
territoriales.
La Expo integró y aceleró proyectos anteriores de carácter medioambiental y urbanístico que se
habían diseñado para la integración definitiva del Ebro, de sus afluentes (Huerva, Gállego) y del Canal
Imperial en la vida urbana (Proyecto de Riberas del Ebro) y para mejorar la conexión del entorno
metropolitano de Zaragoza y con los sistemas de ciudades e infraestructuras: los cinturones
autoviarios, el trazado del tren de alta velocidad (AVE), la estación intermodal y la Plataforma
logística de Zaragoza (PLAZA).
La Exposición universal de Zaragoza del 2008 se levantó en el meandro de Ranillas del Ebro con
arreglo al modelo de waterfront, concebida como nueva centralidad urbana, presidida por la Torre del
Agua, rodeada por un parque metropolitano, soldando sectores residenciales de diferentes orígenes y
cerrando junto con esta nueva polaridad los cinturones autoviarios III y IV, que mejoran la
conectividad periférica de los barrios y del entorno metropolitano.(Figura 5)
El primer objetivo urbanístico de integrar el río en la ciudad era un desarrollo lógico del Proyecto
de Riberas del Ebro, aprobado en el 2001, en el que se apostaba por la recuperación de las riberas,
6
mediante la mejora de la accesibilidad y el acercamiento de usos compatibles. La integración del río en
la ciudad se llevó a cabo mediante una “cuña verde” de entrada de la naturaleza en la ciudad. El
conjunto del meandro y su entorno se convirtieron en un parque metropolitano de nueva generación,
con unas 120 ha de espacios libres, además de las 25 ha dedicadas al recinto de la Expo. En conjunto el
paisaje urbano de las riberas del Ebro ha mejorado considerablemente con la Expo y se ha conseguido
integrar al río en la vida urbana y que los zaragozanos paseen por sus márgenes.
El segundo gran objetivo fue crear una nueva centralidad a un par de kilómetros del centro urbano,
soldando suelos hasta ahora separados, mediante nuevas infraestructuras viarias. La incorporación del
meandro de Ranillas -situado a poco más de dos km al oeste del centro- a la ciudad se hizo
empalmando suelos vecinos que procedían de usos inherentes a los estadios preindustrial (casco
histórico), industrial (los de la antigua fábrica Química al sur y los del ACTUR al este) y
postindustrial (los del barrio del AVE al sur de los de la Química). El problema mayor se encontraba
en el empalme con la orilla meridional del Ebro, donde hubo un suelo de uso intensamente fabril
durante la primera mitad del siglo XX6 y que ya había sido reconvertido en residencial, a partir de los
ochenta –barrio de la Almozara- pero sin integrar del todo en el conjunto urbano por falta de puentes y
por la limitación que suponían hacia el sur el ferrocarril y la autovía A-68, para enlazar con el barrio de
las Delicias. La doble barrera que separaba el barrio de la Química, ampliado con los terrenos de la
fábrica abandonada por la fuerza vecinal se estaba superando antes de la Expo con el soterramiento del
ferrocarril y la conversión de la autovía en urbana.
Fig. 5 Exposición de Zaragoza del 2008 en el frente del Ebro
Fig. 6 El nuevo suelo industrial y logístico
La unión directa de las dos nuevas centralidades constituidas con la Expo y la nueva estación
intermodal para el tren de alta velocidad (AVE), los trenes convencionales y los autobuses
interurbanos además de solucionar la soldadura de los barrios ACTUR-Almozara-Delicias, potenciaba
las sinergias del conjunto ya que el meandro de Ranillas queda a un km de la nueva estación
intermodal. Para ello se construyeron dos nuevos puentes: el Pabellón Puente y el del Tercer Milenio.
Sobre este último pasa el último tramo del Rabal que da acceso desde la Expo a la estación multimodal
de Delicias y que cierra por el norte el tercer cinturón viario, la Z-30, proyectada hace más de un
cuarto de siglo.
Una de los más importantes efectos urbanístico-territoriales post-Expo ha sido completar el
sistema viario básico con el cierre de los cinturones Tercero y Cuarto. La terminación del Cuarto
cinturón, se llevó a cabo en la ronda Este -entre la carretera de Castellón (A-68) y la autovía de
6
Industria química nacida a finales del XIX, aprovechando el ferrocarril, casi tangente al Ebro y junto al que fue creciendo
el Barrio de la Química, cuyos vecinos acabaron expulsando a la industria
7
Barcelona (A-2)- con un nuevo viaducto de 400 metros sobre el Ebro y un falso túnel de 660 m bajo el
barrio de Santa Isabel.
Otras actuaciones destacables en materia de comunicaciones son las de modernización y
ampliación del aeropuerto al suroeste de la ciudad, pensando en la recepción de visitantes de la Expo,
pero sobre todo en su nueva función, al desarrollarse en los últimos años en sus inmediaciones la
plataforma logística de Zaragoza, PLAZA, aprovechando un espacio donde se conectan los tres
modos: el aeroportuario, el ferroviario del AVE -con una proyectada 2ª Estación- y el autoviario (A-II
Madrid- Barcelona y A-68 vasco-aragonesa).
La realización de los proyectos anteriores junto con el tren de Alta Velocidad y la mejora del
aeropuerto ha favorecido la mayor integración de la metrópoli zaragozana en el sistema español y
europeo de ciudades. Todo ello potencia la capacidad logístico-comercial de Zaragoza y su
periferia.Como consecuencia de la Expo 2008 y de los proyectos impulsados o terminados en conexión
con la misma en el decenio 1998-2008 se ha duplicado el suelo urbano de Zaragoza y su entorno
metropolitano. El nuevo suelo industrial, servo-industrial y logístico se ha creado predominantemente
en los ejes menos dinámicos en la era industrial: el norte, el suroeste y el sureste, hasta alcanzar 30 km
de periurbanización continua en el corredor N-S, paralelo a los ríos Gállego y Huerva. Sin embargo el
corredor del Ebro, E-W, desde Alfajarín a Figueruelas, donde está la planta de automóviles de GM, la
fábrica más potente de Aragón, totalizan un continuum industrial-residencial de más de 50 km. (Figura
6)El cuadrante suroccidental metropolitano es el que más ha crecido en los últimos años, gracias a la
pieza aeroportuaria que comprende el aeropuerto, notablemente mejorado con ocasión de la Expo, la
Base Aérea, la Feria de Muestras y la Plataforma Logística de Zaragoza (PLAZA). La inauguración de
la última gran superficie, Plaza Imperial, junto a PLAZA, en la Cª de Madrid, bajo la fórmula de
festival center o centro de ocio y comercio, está generando otra nueva centralidad.
4. Los principios del waterfront y la ciudad del futuro
La convergencia de las operaciones de waterfront con exposiciones universales y congresos
internacionales ha desembocado por parte de arquitectos y urbanistas en unos principios para el
desarrollo sostenible de las áreas afectadas. El éxito conseguido por waterfront como fórmula
urbanística y de desarrollo territorial ha pasado de ser empleada en la regeneración de espacios
industriales obsoletos y para la génesis de nuevas centralidades a utilizarse como modelo para la
ciudad del futuro sobre suelo nuevo, como está ocurriendo en Dubai Waterfront.
4.1. Diez principios para el desarrollo sostenible de las áreas de “waterfront” urbano.
El presente enunciado de los títulos de los 10 Principios para el Desarrollo Sostenible de los
“Waterfront” Urbanos, corresponde a la actualización efectuada en 2008 con motivo de la celebración
de la Exposición Internacional de Zaragoza. Por primera vez fueron aprobados los 10 Principios en la
“Global Conference on the Urban Future” (URBAN 21) celebrada en Berlín en el año 2000, con
ocasión de la Expo 2000 World Exhibition, previamente desarrollados por Wasserstadt GMBH de
Berlín, en colaboración con el Centro Internazionale Città d´Aqua de Venecia7.
1. Asegurar la calidad del agua y el medio ambiente.
2. Desarrollar la relación entre los “waterfronts” y la estructura urbana.
3. Respetar la identidad del lugar.
4. Promover la diversidad de actividades, tanto en tierra como en el agua.
5. Garantizar el acceso público al waterfront.
6. Facilitar la colaboración entre el sector público y el privado.
7. La participación pública como elemento de sostenibilidad.
Los 10 Principios fueron presentados en 2004 en la “9ª Mostra Internazionale di Architettura de la Biennale de Venecia”, en la sesión
dedicada a los nuevos “waterfronts”, que estuvo al cuidado de RETE, asociación para la colaboración entre puertos y ciudades.
7
8
8. La recuperación de los “waterfronts” son proyectos a largo plazo
9. La revitalización de los “waterfronts” es un proceso continuo.
10. Las operaciones de los “waterfronts” proporcionan beneficios a través de redes internacionales
de conocimiento.
En estos principios se recogen las experiencias aparecidas desde su comienzo en Boston, como el
6º de la colaboración privado-pública o el 3º en que para respetar la identidad del lugar dice que “la
preservación del pasado industrial es un elemento fundamental en la recuperación sostenible de estos
espacios”; o el 4º de diversificación de actividades, “ofreciendo una variedad de funciones culturales,
comerciales y residenciales”, o el 2º de integración en las estructuras urbanas, junto con unas garantías
para el desarrollo sostenible como el 1º referente a la calidad del agua y del medio ambiente. Algunos
organismos y entidades de carácter internacional han venido adoptando estos principios como
referencia para la concepción y diseño de actuaciones en áreas de “waterfront”.
4.2. Las ciudades del futuro: Waterfront City, Dubai
El Dubai Waterfront es un enorme proyecto que se esta construyendo en la costa oeste de Dubái a
base de canales e islas artificiales con un total de 130 km² (el doble de tamaño que la isla de Hong
Kong) alargando 70 kilómetros la línea de la costa. El eje central discurrirá a lo largo del litoral,
extendiéndose hacia el interior para ofrecer una gama de zonas residenciales, distritos comerciales y
áreas industriales, con atracciones turísticas y servicios de ocio. Las Palm Islands, las islas artificiales
más grandes del mundo, en forma de arco, de palmera, evocando de alguna manera el Edén islámico,
producirán un espacio residencial alrededor de la Palm Jebel Ali. En total se proyecta para una
población de millón y medio de personas. El objetivo del proyecto es "crear un destino de categoría
mundial para residentes, visitantes y negocios en la ciudad con el crecimiento más rápido del mundo".
Localizado cerca del nuevo Dubai World Central International Airport, y con acceso directo a AbuDabi, la ciudad será pluri-accesible a escala local e internacional.
La conexión entre Festival Centre y Retail Park se produce en the Festival Centre Retail Park,
también conocida como Power Centre, situado centralmente en el Dubai Festival City (DFC) incluye
un gran hipermercado con una mitad dedicada a la alimentación, 450 tiendas y servicios y más de 90
restaurantes y cafés.
(IV) Bibliografía
Bielza de Ory, V.: Introducción a la ordenación del territorio. Un enfoque geográfico. PUZ, Zaragoza, 2008
COMITÉ DE DESARROLLO TERRITORIAL. UNIÓN EUROPEA, Estrategia Territorial Europea. Hacia un desarrollo equilibrado y
sostenible de la UE (ETE), Luxemburgo, 1999, 89 pp.
De la Cal, Gorría y otros: Directrices de Ordenación Territorial del Espacio Metropolitano de Zaragoza.DGA.
Zaragoza, 1996
Hall, P. Ciudades del mañana. Historia del urbanismo en el siglo XX, Ed. Serbal, Barcelona, 1996
López, Á.; L. Castellano, A.; Díez, C. y Escalona, A.: Carácter y localización de las nuevas empresas en el área
metropolitana de Zaragoza (1997-2000)" Univ. Zaragoza. 2.001
Monclús Fraga,F.J.: Exposiciones internacionales y urbanismo. El proyecto Expo Zaragoza. Ed.Univ. Politécnica de
Catalunya, Barcelona, 2006, 214 p.
9
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