NOMENCLATURA DE HORIZONTES Y CAPAS DE SUELOS. RECONOCIMIENTO DE SUELOS.

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NOMENCLATURA DE HORIZONTES Y CAPAS DE SUELOS.
RECONOCIMIENTO DE SUELOS.
Horizonte de un suelo es una capa de suelo paralela a la superficie terrestre que ha
sido afectado por procesos pedogenéticos.
ANTIGÜA NOMENCLATURA DE HORIZONTES
HORIZONTES PRINCIPALES
Horizontes orgánicos (Horizonte O)
Los horizontes orgánicos se forman por encima de la superficie del suelo y son dominados
por materia orgánica fresca o parcialmente descompuesta.
O1
Es el horizonte orgánico en el que es visible la mayor parte de la materia vegetal en
su forma original. Lo constituyen hojas caídas, frescas, a veces decoloradas, y
pueden hallarse restos de fauna del suelo y sus excrementos, con hifas de hongos.
O2
Es el horizonte orgánico en el que ya no se puede reconocer la mayor parte de la
materia vegetal o animal en su forma original. Con cierto aumento pueden
identificarse esos restos.
Horizontes minerales
Son los formados por materiales predominantemente minerales. Deben tener menos del 20
% de carbono orgánico (en los suelos saturados con agua el límite es de 12 a 18 %).
Comprenden los horizontes A, B, C y R que constituyen el conjunto del solum, material
originario y roca madre del mismo o roca subyacente consolidada.
A
Son los horizontes minerales caracterizados por:
a) Acumulación de materia orgánica formada (o formándose) en superficie;
b) Haber perdido arcilla, hierro o aluminio con el resultado de una concentración
de cuarzo u otros minerales resistentes del tamaño de arena o limo;
c) Estar dominados por algunas de las dos características anteriores, pero
transicional al B o C subyacentes.
Comprende los siguientes horizontes:
A1
Horizonte mineral que se forma en superficie y en el cual el principal rasgo es una
acumulación de materia orgánica humificada íntimamente asociada a la fracción
mineral. Este horizonte generalmente es más oscuro que los restantes horizontes.
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A2
Es el horizonte mineral en el cual el hecho destacable es cierta pérdida de arcilla, de
materia orgánica, de hierro, o de aluminio, por separado y/o en combinación con lo
cual se ve aumentada la proporción de cuarzo u otros minerales resistentes, del
tamaño de limo o arena. Por lo general, es mas claro que el B; más pobre en materia
orgánica que el A1; con menos arcilla que el B, y puede aparecer en superficie.
Suele tener estructura laminar.
A3
Horizonte de transición entre A y B, con dominancia de características propias del
A1 o del A2, pero con ciertas propiedades subordinadas a las del B subyacente.
Suele tener estructura en bloque o granular. Si existiera transición, pero resultara
difícil separar un A3 de un B1 como horizontes individuales, se colocará el símbolo
AB.
Si en lugar de haber transición de propiedades entre el A y el B, existiera un horizonte que
posea características de A2, con inclusiones de B que, constituyan menos del 50 % del
volumen, ese horizonte se señalará «A y B».
AC
Horizonte de transición entre A y C con propiedades de ambos horizontes, pero sin
dominio por parte de ninguno de ellos sobre otro.
B
Son los horizontes en los cuales el rasgo o rasgos dominantes son uno o más de los
siguientes:
a) Una concentración iluvial de arcilla silicatada, hierro, aluminio o humus, solo o
en combinación;
b) Una concentración residual de sesquióxidos o arcillas silicatadas, solos o
mezclados que se han formado por otros medios que no sea disoluciones o
remociones de carbonatos;
c) Revestimientos de sesquióxidos como para dar colores netamente más oscuros,
más intensos, o más rojos que los horizontes supra y subyacentes pero sin
aparente iluviación de hierro y no genéticamente relacionados a los B que
reúnan las exigencias de a) y b)
d) Una alteración de las condiciones originales del material que borre la estructura
original de la roca, que forme arcilla, libere óxidos, y que forme estructura
granular, en bloques, o prismáticos si las texturas fueran tales que un cambio en
la humedad se vea acompañado de cambios en el volumen.
Comprende los siguientes horizontes:
B1
Horizonte de transición entre el B y el A1 o entre el B y el A2, con un dominio de
las características propias del B2 subyacente, pero con ciertas propiedades del A1 o
A2 por encima, y el B2 por debajo, para que haya un B1.
Cualquier horizonte que se deba calificar como B por más de un 50 % de su masa,
pero que tenga inclusiones de un A2, se denominará «B y A».
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B2
Es la parte del B donde sus propiedades no manifiestan ningún carácter que pueda
considerarse transicional con el A ni con el C. Esto no implica que el B2 deba
siempre expresar uniformemente las propiedades diagnósticas del B, ni que debe
estar confinado a la zona de máxima expresión en sentido absoluto.
B3
Horizonte de transición entre el B y el C (o entre el B y el estrato R), cuyas
propiedades sean las del B2 pero asociadas a caracteres propios de un C o un R.
C
Horizonte o capa mineral más o menos similar al material a partir del cual podría
presumirse tuvo origen el solum; esta relativamente poco afectado por la
pedogénesis y carece de las características propias del A o del B. Incluye los
materiales afectados por meteorización fuera de la zona de mayor actividad
biológica, o cementaciones, o acumulaciones de carbonatos o de sales más solubles.
R
Es toda roca continua y coherente, subyacente, tal como un granito, una arenisca,
una caliza, etc.
Símbolos que se usan para indicar diferenciaciones subordinadas
b
Horizonte enterrado.
ca
Acumulación de carbonatos de elementos alcalinos-térreos, por lo general de calcio.
cs
Acumulación de sulfato de calcio
cn
Acumulación de concreciones o de nódulos duros no concrecionarios, enriquecidos
en sesquióxidos, con o sin fósforo
f
Suelo congelado.
p
Arado u otra perturbación por laboreo.
g
Fuerte gleización.
ir
Hierro iluvial.
m
Fuerte cementación, endurecimiento.
sa
Acumulación de sales más solubles que el sulfato de calcio.
si
Cementación con material silícico soluble en álcali, como se define para los
duripanes en la taxonomía.
t
Arcilla iluvial.
h
x
Humus iluvial.
Carácter de fragipan.
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DISCONTINUIDADES LITOLOGICAS
Los números romanos son como prefijos antepuestos a las asignaciones de horizontes o
capas principales, para indicar las discontinuidades litológicas que aparecieran en el solum
o por debajo de él.
SOLUM
El solum ha sido considerado como el suelo genético, que se desarrolla debido a los
factores formadores. Nunca se ha dudado que el A y el B forman parte del solum.
SUELO ENTERRADO
Un suelo se considera enterrado si ha sido sepultado por una acumulación más reciente de
50 cm de espesor. También se considera suelo enterrado si la acumulación mide por lo
menos 30 cm y su espesor es, por lo menos, la mitad de todos los horizontes diagnósticos
enterrados.
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NUEVA NOMENCLATURA DE HORIZONTES
Horizontes o capas O
Capas dominadas por material orgánico. Algunas permanecen saturadas con agua durante
periodos prolongados o en alguna oportunidad permanecían saturadas y actualmente han
sido drenadas artificialmente; otras nunca han estado saturadas.
Algunas capas O se componen de mantillo no descompuesto o parcialmente descompuesto,
integrado por hojas, acículas, ramitas, musgos y líquenes depositados sobre la superficie;
pueden aparecer encima de suelos minerales u orgánicos.
Otras capas O están constituidas por material orgánico depositado en forma subácuea y se
ha descompuesto en distintos grados.
La fracción mineral de tal material constituye sólo un pequeño porcentaje del volumen
total y generalmente tiene menos de la mitad del peso. Algunos suelos se componen
totalmente de material designado con horizontes o capas O.
Horizontes A
Horizontes minerales formados en la superficie o por debajo de un horizonte O y que se
caracterizan por tener:

una acumulación de materia orgánica humificada íntimamente asociada a la fracción
mineral y no dominado por propiedades características de los horizontes E o B o

propiedades resultantes del cultivo, pastoreo o alteraciones similares.
Horizontes E
Horizontes minerales en los cuales la principal característica es la pérdida de arcilla
silicatada, hierro, aluminio o alguna combinación de estos componentes, quedando una
concentración de cuarzo u otros minerales resistentes del tamaño arena o limo.
Un horizonte E se diferencia mas comúnmente de un horizonte A suprayacente por su
color más claro y generalmente por su menor contenido de materia orgánica.
Se diferencia de un horizonte B subyacente por sus colores de luminosidad mayor o
intensidad menor, por su textura más gruesa o por una combinación de estas propiedades.
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Horizontes B
Horizontes formados por debajo de un horizonte A, E u O y caracterizado por la
desaparición de la estructura de la roca original en su totalidad o en gran parte y por:






Concentración iluvial de arcilla silicatada, hierro, aluminio, humus, carbonatos, yeso o
sílice, solos o en combinación;
Evidencia de eliminación de carbonatos;
Concentración residual de sesquióxidos;
Revestimientos de sesquióxidos que hacen que el horizonte muestre de manera
manifiesta luminosidad menor, intensidad mayor o matiz más rojo que los horizontes
suprayacentes, sin iluviación aparente de hierro;
Alteración que forma arcilla silicatada o libera óxidos o ambas situaciones y que forma
estructura granular, en bloques o prismática si las variaciones de volumen están
acompañadas por variaciones en el contenido de humedad; o
Cualquier combinación de las propiedades enunciadas.
Horizontes o capas C
Horizontes o capas poco afectados por procesos pedogenéticos y sin las propiedades de los
horizontes O, A, E o B.
El material de las capas C puede ser similar o no al material a partir del cual se formó el
solum. Un horizonte C puede haber sido modificado, aun cuando no existan evidencias de
pedogénesis.
Capa R
Incluyen los mantos rocosos duros; por ejemplo: granito, basalto, cuarcita y caliza o
arenisca endurecida.
Horizontes de transición
Existen dos clases de horizontes de transición.

Horizontes dominados por propiedades de un horizonte principal pero con propiedades
subordinadas de otro horizonte.
Para este caso se emplea como símbolo dos letras mayúsculas, como por ejemplo: AB,
BA, EB, BE, BC. En primer lugar se indica el símbolo del horizonte principal cuyas
propiedades dominan en el horizonte de transición.
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
Horizontes en los cuales aparecen sectores con propiedades reconocibles de dos
horizontes principales.
Las dos letras mayúsculas están separadas por una barra, como por ejemplo E/B, B/E,
B/C. La mayor parte de los sectores individuales de por lo menos uno de los
componentes está rodeado por los otros. El primer símbolo corresponde al horizonte
que ocupa mas volumen.
DISCONTINUIDADES LITOLOGICAS
En los suelos minerales se emplean números arábigos como prefijos para indicar la
presencia de discontinuidades, los que se anteponen a los símbolos A, E, B, C y R.
Diferencias subordinadas dentro de horizontes principales y capas
a - Material orgánico muy descompuesto.
b - Horizonte genético enterrado.
c - Concreciones o nódulos duros no concrecionarios.
e - Material orgánico de descomposición intermedia.
f - Suelo congelado.
g - Gleización intensa.
h - Acumulación iluvial de materia orgánica.
i - Material orgánico ligeramente descompuesto.
k - Acumulación de carbonatos.
m - Cementación o endurecimiento.
n - Acumulación de sodio.
o - Acumulación residual de sesquióxidos.
p - Labranzas u otras alteraciones.
q - Acumulación de sílice.
r - Roca meteorizada o blanda.
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s - Acumulación iluvial de sesquióxidos y materia orgánica.
t - Acumulación de arcilla silicatada.
v - Plintita.
w - Desarrollo de color o estructura.
x - Carácter de fragipan.
y - Acumulación de yeso.
z - Acumulación de sales más solubles que el yeso.
Comparación de los sistemas antiguo y moderno
Los símbolos de horizontes consisten en letras mayúsculas, letras minúsculas y números
arábigos.
a.- Las letras mayúsculas se emplean para designar horizontes principales.
b.- Las letras minúsculas se utilizan como sufijos para indicar características específicas de
un horizonte principal.
c.- Los números arábigos se emplean como sufijos para indicar subdivisiones vertical de un
horizonte y como prefijos para denotar discontinuidades. Esto constituye una modificación
respecto al sistema antiguo. Anteriormente, los números arábigos se utilizaban como
sufijos para indicar una clase de horizonte O, A o B y para indicar subdivisiones verticales
de un horizonte mientras que los números romanos se empleaban como prefijos para
denotar discontinuidades.
Los símbolos empleados para muchas características de horizontes se han modificado.
Horizontes principales y de transición
Sistema antiguo
Sistema actual
O
O1
O2
A
A1
A2
A3
A&B
O
Oi, Oe
Oa, Oe
A
A
E
AB o EB
E/B
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AC
B
B1
B&A
B2
B3
C
R
AC
B
BA o BE
B/E
B o Bw
BC o CB
C
R
Diferencias subordinadas entre horizontes principales
-b
cn
--
a
b
c
e
f
g
h
--
f
g
h
i
ca
m
sa
-p
si
r
ir
t
--x
cs
sa
k
m
n
o
p
q
r
s
t
v
w
x
y
z
materia orgánica muy descompuesta
horizonte enterrado
concreciones o nódulos
materia orgánica en grado intermedio de
descomposición
suelo congelado
gleización intensa
acumulación iluvial de materia orgánica
materia orgánica ligeramente
descompuesta
acumulación de carbonatos
cementación fuerte (irreversible)
acumulación de sodio
acumulación residual de sesquióxidos
labranzas u otras alteraciones
acumulación de sílice
roca meteorizada o blanda
acumulación iluvial de sesquióxidos
acumulación de arcilla
plintita
B color o estructural
carácter de fragipan
acumulación de yeso
acumulación de sales
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INSTRUCCIONES PARA EL USO DE LA FICHA EDAFOLÓGICA
Mosaico - Recorrido - Aerofoto: Se indicará los números correspondientes.
Fecha: Indicar la del día en que se realizará la observación.
Observación Nº: Se dará un número consecutivo según el sistema adoptado para cada
reconocedor.
Serie - Fase: Nombre de la unidad del suelo de que se trate. Ejemplo:
Serie: Olavarría
Fase: ligeramente erosionada por agua.
Cuando se trata de series tentativas agregar (tent.). Ejemplo: Olavarría (tent.)
Símbolo: El que corresponda a la serie o fase respectiva según leyenda.
Gran Grupo: El correspondiente a la serie.
Clasificación utilitaria: Símbolo o nombre de la clase, subclase y/o unidad de capacidad de
uso agrícola, pastoril o forestal correspondiente a la serie o fase de que se trate. Ejemplo:
IIe-4
Ubicación: Referencia cartográfica o geográfica que permite localizar con precisión el
lugar de la observación.
Paisaje: Elemento de paisaje según terminología geomorfológica o fisiográfica. Agregar el
símbolo que se haya adoptado en la leyenda respectiva. Ejemplo: pampa ondulada central.
Material original: Se anotará el tipo de roca con la mayor precisión posible. Si se conoce,
se indicará con el nombre de la formación geológica. Ejemplo: loess pampeano
Bonaerense.
Vegetación natural o cultivos: Indicar: bosque, selva, sabana, palmar, estepa arbustiva,
estepa herbácea, pajonal, pradera inducida, etc., con las especies dominantes. Para el caso
de suelos cultivados: cultivos del lugar (trigo, maíz, alfalfa, etc.) o rastrojo, monte de
citrus, plantaciones de álamos, etc.
Relieve:
PRONUNCIADO: Son las colinas y sierras con escurrimiento muy rápido.
NORMAL: tierras altas inclinadas con escurrimiento medio y llanuras onduladas.
SUBNORMAL: tierras planas con lento escurrimiento.
CÓNCAVO: tierras deprimidas sin escurrimiento.
Posición: Solo en el caso de relieves normales o pronunciados, marcar la posición
topográfica que ocupa la observación en el paisaje.
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Pendiente (%): Señalar la clase que corresponda, mediante la medición del porcentaje o
gradiente con el clinómetro.
Escurrimiento:
Es la facilidad con que se elimina el agua por derrame sobre la superficie del suelo.
Incluye el avenamiento debido a obras artificiales (desagües).
Se marcará el grado correspondiente:
Grado 0: suelo estancado.
Grado 1: muy lento; el agua permanece largos períodos sobre el suelo.
Grado 2: lento; el agua cubre el suelo por ciertos períodos.
Grado 3: medio; la mayor parte del agua es absorbida por el suelo.
Grado 4: rápido; el agua corre rápidamente y poca penetra en el suelo.
Grado 5: muy rápido; poca capacidad de infiltración en el suelo.
Permeabilidad:
Es la cualidad de un suelo que le permite transmitir a través de él, agua o aire. Se suele
medir cuantitativamente según la cantidad de agua que pasa a través de una sección de
suelo saturado en la unidad de tiempo, bajo determinadas condiciones de temperatura y
presión hidrostática. Para ello se utilizan permeámetros de diversos modelos.
En ausencia de medidas precisas, la permeabilidad de un suelo se puede apreciar mediante
el estudio de la estructura, textura, porosidad, agrietamiento, etc. De los horizontes del
perfil. Sin embargo, es conveniente medirla cuantitativamente y sobre esa base se han
establecido grados.
Cuando se estudia el suelo para establecer su respuesta al riego o al drenaje, es necesario
determinar la permeabilidad de cada horizonte, estableciendo las relaciones entre las
permeabilidades de los distintos horizontes o capas y respecto del perfil en conjunto. En
los demás casos basta con apreciar la percolación según la permeabilidad del horizonte
menos permeable del solum o del substrato inmediato a él.
Grado 1 - Muy lenta a nula: Suelo impermeable o muy poco permeable. Casi no pasa agua
a través de la masa del suelo. Velocidad de percolación es menor de 0,125 cm por hora.
Grado 2 - Lenta: suelo poco permeable. Estos suelos están saturados con agua por un lapso
muy prolongado y aparecen manchados o moteados en casi todo el perfil. Velocidad de
percolación entre 0,125 y 0,5 cm por hora.
Grado 3 - Moderadamente lenta: Estos suelos están saturados con agua por un lapso
prolongado y presentan moteados en alguna parte del perfil. Velocidad de percolación:
entre 0,5 y 2 cm por hora.
Grado 4 - Moderada: suelo permeable. La saturación con agua se limita a pocos días,
siendo por ello óptimo el crecimiento para la mayoría de los cultivos. La mayor parte de
los suelos están libres de moteados en el solum. Velocidad de percolación entre 2 y 6,25
cm por hora.
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Grado 5 - Moderadamente rápida: El suelo presente porosidad no capilar relativamente
alta. No hay moteados. Velocidad de percolación entre 6,25 y 12,5 cm por hora.
Grado 6 - Rápida: suelo muy permeable. El suelo presenta alta porosidad no capilar, con
una velocidad de percolación entre 12,5 y 25 cm por hora.
Grado 7 - Muy rápido: (suelo excesivamente permeable). Estos suelos tienen muy alta
porosidad no capilar. La velocidad de percolación es más de 25 cm por hora.
Peligro de inundaciones:
Riesgo que puede tener un suelo de permanecer bajo agua cierto lapso:
Marcar lo que corresponda:
Clase 1 - inundaciones frecuentes e irregulares.
Clase 2 - frecuente pero regulares en cierta época del año.
Clase 3 - pocas inundaciones o en épocas excepcionales.
Clase 4 - inundaciones raras.
Clase 5 - sin peligro de inundaciones.
Drenaje:
Se refiere a la rapidez y facilidad con que el agua se elimina del suelo, tanto por
escurrimiento o avenamiento, como por pasaje a través del suelo mismo hacia las capas
subterráneas. La evaporación y la transpiración contribuyen también a la eliminación del
agua.
Considerado como una condición propia del suelo, el drenaje se refiere a la frecuencia y
duración de los períodos durante los cuales el suelo se ve libre de saturación de agua.
Clase 0: Suelo muy pobremente drenado o mal drenado. El agua se elimina tan lentamente
que la capa freática permanece sobre o muy cerca de su superficie la mayor parte del
tiempo. Estos suelos suelen ocupar las depresiones, bajos y planos aluviales
semipantanosos y las charcas o manchones y lagunas temporarias. Presentan evidencias de
gleización en casi todo el perfil. Estos suelos son tan húmedos en su estado natural, que
imposibilitan realizar cultivos importantes (excepto arroz), sin proceder a drenar
artificialmente, sin regular el nivel freático o sin usar caballones.
Clase 1: Suelo pobremente drenado. El agua sale tan lentamente que lo mantiene mojado
gran parte del tiempo. Esto puede ser debido a un nivel freático alto y/o a un horizonte o
capa de permeabilidad lenta a muy lenta y/o a infiltraciones. En áreas de praderas los
suelos de esta clase suelen tener enlames superficiales grises y/u horizontes superficiales
engrosados con evidencias de gleización debajo de ellos. La cantidad de agua que
permanece dentro y sobre estos suelos imposibilita el crecimiento de cultivos importantes
en la mayoría de los años bajo condiciones naturales. Para mejorar estos suelos, es
necesario un drenaje artificial, si bien no siempre es suficiente para convertirlos en tierras
de cultivos.
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Clase 2: Suelo imperfectamente drenado. El agua se elimina algo lentamente, lo que lo
mantiene mojado por lapsos importantes pero no siempre. Este suelo tiene por lo general
algún horizonte de permeabilidad lenta y/o una capa freática alta, y/o sufre infiltraciones.
En áreas de praderas los suelos de esta clase suelen tener horizontes A oscuros y espesos,
con leves a moderados síntomas de hidromorfismo inmediatamente por debajo del
horizonte A. En suelos planosólicos la base del horizonte A ya puede ser débilmente
moteada. Por lo general el crecimiento de varios cultivos de importancia se ve restringido
si no se aplica drenaje artificial.
Clase 3: Suelo moderadamente bien drenado. El agua sale con alguna lentitud, lo cual
puede mantenerlo mojado por pequeños pero significativos lapsos. Suelen tener algún
horizonte o capa de permeabilidad moderadamente lenta y/o un nivel freático
relativamente alto, y/o cierta infiltración. Los suelos de esta clase suelen ser zonales,
aunque pueden presentar algunos moteados en los horizontes B y/o C. Los cultivos
perennes y con raíces profundas pueden sufrir algo con el exceso temporario de humedad,
pero los anuales de enraizamiento poco profundo por lo común no se ven afectados
significativamente.
Clase 4: Suelo bien drenado. Presenta las condiciones óptimas de drenaje natural: por una
parte retiene, después de las lluvias o el riego, una cantidad óptima de agua para el
crecimiento de los cultivos y, por otra parte, el exceso de agua se retira con facilidad, pero
no con rapidez. Son suelos de texturas no extremas con algún horizonte de permeabilidad
moderada, están libres de moteados u otros síntomas de hidromorfismo dentro del solum.
Esta clase de drenaje es considerada característica para los representantes modales de los
grandes grupos «zonales».
Clase 5: Suelo algo excesivamente drenado. El agua se retira con rapidez y que tiene una
capacidad de retención de humedad algo deficiente como para asegurar un buen
crecimiento de los cultivos importantes sin riego adicional. Por lo general son suelos
arenosos, con poca diferenciación de horizontes y permeabilidad rápida; algunos litosoles
poseen drenaje de esta clase. El suelo no muestra ni moteados ni nivel freático cercano a la
superficie. Sólo determinados cultivos soportan un suelo algo excesivamente drenado,
como el maní y los citrus; por lo general los rendimientos de los cultivos son bajos en la
mayoría de los años si no se aplica riego suplementario.
Clase 6: Suelo excesivamente drenado. El agua se retira con demasiada rapidez debido a su
alta porosidad, y/o por ser escarpados, (o sea que presentan permeabilidad rápida o muy
rápida y/o escurrimiento muy rápido). Este suelo prácticamente no retiene humedad y la
mayor parte de las precipitaciones se pierden en tal proporción, que estos suelos resultan
ineptos para los cultivos comunes, si no se aplica riego.
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Erosión: Si se observa indicios, marcar el tipo de erosión (hídrica o eólica) y la clase
respectiva, en la casilla correspondiente:
Erosión hídrica: Resulta del arrastre y abrasión provocados por el escurrimiento del agua
sobre el suelo, cuando la vegetación no sea suficiente para evitar el impacto directo del
agua y la consecuente separación de las partículas del suelo.
Clase 0: sin erosión hídrica.
Clase 1: ligera; el suelo ha perdido menos de 5 cm (o menos del 25 %) de su capa superior.
Clase 2: moderada; pérdidas de 5 a 10 cm (del 25 al 50 %) de la capa superior. Se observa
canalículos.
Clase 3: severa; pérdidas de 10 a 20 cm (más del 50 %) de sus horizontes superiores. Hay
canales o pequeñas cárcavas.
Clase 4: grave; suelo truncado en su mayor parte. Cárcavas o zanjas profundas.
Clase 5: muy grave; paisaje totalmente cortado por cárcavas y hondonadas profundas, con
aspecto de «bad-lands».
Si hubiera áreas engrosadas por deposición acumulada de los suelos erosionados,
indicar «Clase X» en la primera casilla.
Eólica:
Clase 0: sin desagregación por el viento.
Clase 1: ligera; escasa alteración de la estructura. No hay signos en el área.
Clase 2: moderada; acentuada alteración de la estructura. Algunos montículos.
Clase 3: severa; pronunciada alteración. Muchos montículos y algunos médanos.
Clase 4: grave: el suelo está prácticamente removido. Muchos médanos activos y hoyas
medanosas.
Clase 5: muy grave: paisaje de dunas y médanos.
Distribución de la humedad: Señalar si es uniforme o no dentro del perfil, y el estado de
humedad correspondiente al solum.
Cobertura vegetal: porcentaje de suelo cubierto por vegetación herbácea natural.
Profundidad de la napa: Anotar la profundidad en metros de la capa freática y/o del agua
subterránea, si se conoce el dato. En caso contrario es suficiente anotar «profunda».
Sales o álcalis: Marcar cuál de ellos está presente y la clase de salinidad o alcalinidad.
Clase 0 - Suelo libre de sales y de álcalis. Ningún cultivo se ve afectado.
Clase 1 - Suelo poco afectado por sales o álcalis. Menos del 5 % del área tiene suelos
sódicos. Cultivos sensibles perjudicados
Clase 2 - Suelo moderadamente afectado. Entre el 5 % y el 35 % del área tiene suelos
sádicos. Cultivos inhibidos.
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Clase 3 - Suelo fuertemente afectado. Pocas plantas sobrevivirán. Más del 35 % del área
son suelos sódicos.
Pedregosidad o Rocosidad: Indicar cual de éstos rasgos está presente, si es significativo y
el grado correspondiente.
Pedregosidad superficial:
Es la proporción relativa de piedras sueltas de más de 25 cm de diámetro dentro del suelo o
sobre él.
Grado 0 - No existen piedras de más de 25 cm de diámetro o son tan escasas que cubren
menos del 0,01 % de la superficie.
Grado 1 - Cierta cantidad de piedras que interfieren la labranza; cubren de 0,01 a 0,1 % de
la superficie.
Grado 2 - Cantidad suficiente para impedir las labores. Ocupan de 0,1 a 3 % de la
superficie.
Grado 3 - Idem. Sólo puede trabajarse con máquinas muy liviana. Ocupan del 3 al 15 % de
la superficie.
Grado 4 - Cantidad tal de piedras que impiden todo tipo de labores agrícolas. Ocupan del
15 al 90 % de la superficie.
Grado 5 - El 90 % de la superficie está cubierta de piedras.
Si la pedregosidad se debiera a trozos de tosca calcárea, indicarlo además en las
«Observaciones».
Rocosidad superficial:
Porcentaje de manto rocoso, expuesto, tanto en lo que se refiere a afloramiento de roca
firme, cuanto a manchones de suelo somero, con roca demasiado cerca de la superficie
para poder aprovecharlo.
Grado 0 - Sin afloramientos rocosos, o roca firme en menos del 2 % de la superficie.
Grado 1 - Escasos afloramientos que pueden interferir la labranza; cubren del 2 al 10 % de
la superficie.
Grado 2 - Los afloramientos de roca sólo permiten el trabajo para forrajes o pasturas.
Cubren del 10 al 25 %.
Grado 3 - Solo puede trabajarse con maquinaria liviana. Aflora roca firme entre el 25 y 50
% de la superficie.
Grado 4 - Afloramiento de roca firme en tal proporción que hacen impracticable el uso de
cualquier tipo de maquinaria. Los aforamientos rocosos cubren del 50 al 90 % del área.
Grado 5 - Tierras en las cuales más del 90 % de la superficie está constituida por
afloramientos de roca firme.
36
Uso de la tierra: Colocar el símbolo que corresponde según el o los usos actuales.
A: Tierras dedicadas en la actualidad exclusivamente a la agricultura; áreas de chacras.
P: Tierras dedicadas en la actualidad exclusivamente a la explotación ganadera mediante
pasturas implantadas.
F: Tierras dedicadas exclusivamente a montes frutales.
H: Tierras dedicadas exclusivamente a la horticultura y/o granja.
B: Tierras bajo bosques naturales o matorrales.
S: Tierras dedicadas a la producción silvícola.
X: Tierras improductivas, incultas o vírgenes.
M: Áreas misceláneas (ejidos urbanos, playas ferroviarias, estaciones, establecimientos
industriales, etc.)
37
CARACTERES INTERNOS DEL PERFIL
Horizonte: Símbolo de acuerdo con la nomenclatura adoptada.
Profundidad: Medida en centímetros desde la superficie, correspondiente al techo y base
del horizonte. O1 y O2 con signo negativo medidos hacia arriba.
Límite:
a) tipo
Abrupto: pasaje brusco en menos de 2,5 cm.
Claro: entre 2,5 cm y 7,5 cm.
Gradual: entre 7,5 cm y 12,5 cm.
Difuso: más de 12,5 cm.
b) forma
Suave: plano horizontal
Ondulado: concavidades más anchas que profundas.
Irregular: concavidades más profundas que anchas.
Quebrada: límite interrumpido
Color: notación Munsell en seco (S) y en húmedo (H).
La forma más conveniente de medir un color es mediante su comparación con una
carta-patrón de colores. La que se usa generalmente para los suelos es un extracto de la
carta de colores Munsell e incluye alrededor de una quinta parte de ella.
La tabla de colores Munsell para suelos, consiste de 175 cuadritos coloreados,
sistemáticamente montados por hue, value y croma (matiz, luminosidad e intensidad), las
tres variables simples que se combinan para dar todos los colores. El hue es el color
dominante del espectro y está relacionado con la longitud de onda dominante de la luz. El
value se refiere a la relativa iluminación del color y es función (aproximadamente la raíz
cuadrada) de la cantidad total de luz, que refleja la muestra. El croma (a veces llamado
también saturación) es la pureza relativa o intensidad del color del espectro y aumenta con
la disminución del grisado.
En cada tarjeta de la tabla de Munsell se hallan agrupados todos los colores de un
mismo hue, el cual se designa mediante un símbolo impreso en el ángulo superior derecho
de la hoja correspondiente; este símbolo está formado por una combinación de un número
y una o dos letras. Dentro de cada hoja los colores están dispuestos verticalmente según
saltos visualmente iguales, y son sucesivamente más claros hacia arriba; su value aumenta
en ese sentido. El croma incrementa horizontalmente hacia la derecha; los colores son más
grises hacia la izquierda.
La nomenclatura del color de un suelo consiste en el nombre del color y la
correspondiente notación Munsell o símbolo del color. El primero se usa para las
publicaciones generales. En descripciones oficiales, correlaciones, comparaciones
internacionales, etc., se debe usar la notación Munsell acompañada del nombre del color.
38
La notación Munsell consiste en una combinación de números y letras que forman
el símbolo del color. Se arma mediante la anotación del hue, seguida primero del value, y
finalmente del croma. El símbolo del hue es una abreviatura en inglés del color del
espectro precedido de un número entre 0 y 10. Dentro de cada rango el color es más
amarillo y menos rojo a medida que el número crece. La mitad del rango es el 5; el 0 de un
rango coincide con el 10 del hue más rojo que le siga, de modo que, por ejemplo, 5 YR
está en el medio del hue amarillo - rojo, el cual se extiende desde 10 R (es decir 0 YR)
hasta 10 YR (o sea 0Y). La notación del value consiste en un número desde 0 (para el
negro absoluto) hasta 10 (para el blanco puro). Se indica como el numerador de un
quebrado. El croma se anota como un denominador, es decir, después de la barra. Consiste
en un número que comienza con 0 para los grises neutros y aumenta a intervalos regulares
hasta alrededor de 20, aunque cormas tan altos no existen en suelos.
Los colores acromáticos absolutos (grises, blancos y negros puros) tienen croma 0 y
por lo tanto no tienen hue. Para éstos se usará como símbolo inicial la letra N (neutro), en
lugar de la combinación de número y letra que se ha visto antes para el hue.
La notación de un color se escribe correctamente comenzando con el símbolo del
hue y luego, dejando un espacio, el value y el croma separados por una barra de quebrado.
Para la notación de un color intermedio se pueden usar decimales.
La comparación del color del suelo con el de la tabla se hace apoyando
directamente una porción de muestra sobre el cuadrito que se compara.
El color del suelo cambia con su contenido de humedad; a veces el cambio es
bastante grande, en otros casos cambia poco. Por lo general los colores en húmedo son más
oscuros, desde 1/2 hasta 3 unidades en value y pueden cambiar desde - 1/2 hasta 2
unidades de croma. Pocas veces difieren en hue. Las mayores diferencias en el value se
observan en los horizontes con contenidos moderados en materia orgánica.
Las apreciaciones del color deben hacerse en dos condiciones: con el suelo seco al
aire y a la capacidad de campo. Para esta última se humedece la muestra y se lee el color
en cuanto la película de humedad haya desaparecido. El color en seco se tomará de
superficies recién partidas de la muestra seca al aire.
39
Textura:
Se refiere a las proporciones porcentuales de las agrupaciones por tamaños, de los
granos individuales en una masa de arcilla, de limo y de las arenas de menos de 2 mm de
diámetro.
Clase textural apreciada al tacto. Consultar el triángulo textural. Se recomienda usar estas
abreviaturas:
Franco: Fr; Arenoso: Ar.; Arcilloso: arc.; Limoso: lim.
Las definiciones de las clases texturales son las siguientes:
Arenosos:
Son los materiales que contiene 85 % o más de arena; el porcentaje de limo, más de
1,5 veces el porcentaje de arcilla, no deberá exceder de 15.
Areno grueso:
con 25% o más de arena muy gruesa y gruesa, y menos del 50 % de
cualquier otro tamaño de arena.
Arenoso:
con 25 % o más de arena muy gruesa, gruesa y media, y menos del
50 % de arena fina o muy fina.
Arenoso fino:
con 50 % o más de arena fina, menos del 25 % de arena muy gruesa,
gruesa y, media y menos del 50 % de arena muy fina.
Arenosos muy fino: con 50 % o más de arena muy fina.
Areno-francos:
Son los materiales que contienen en su límite superior de 85 a 90 % de arena, y el
porcentaje de lima más 1,5 veces el porcentaje de arcilla, no será menor de 15; en su límite
inferior contienen no menos de 70 a 85 % de arena y el porcentaje de limo más dos veces
el porcentaje de arcilla, no excederá de 30.
Areno-fanco grueso:
con 25 % o más de arena muy gruesa y gruesa y menos del
50 % de cualquier otro tamaño de arenas.
Areno-franco:
con 25 % o más de arena muy gruesa, gruesa y media, y
menos del 50 % de arena fina o muy fina.
Areno-franco fino:
con 50 % o más de arena fina o menos del 25 % de arena
muy gruesa, gruesa y media, y menos del 50 % de arena muy
fina.
Areno-franco muy fino:
con 50 % o más de arena muy fina.
40
Franco-arenosos:
Son los materiales que contienen ya sea: 20 % o menos de arcilla, y cuyo porcentaje
del limo más dos veces el porcentaje de arcilla, excede de 30, y 52 % o más de arena; o
bien, menos del 7 % de arcilla, menos del 50 % de limo, y entre 43 y 52 % de arena.
Franco arenoso grueso:
con 25 % o más de arena muy gruesa y gruesa, y
menos del 50 % de cualquier otro tamaño de arenas.
Franco arenoso:
con 30 % o más de arena muy gruesa, gruesa y media,
pero con menos del 25 % de muy gruesa, y menos del
30 % de arena muy fina y fina.
Franco arenoso fino:
con 30 % o más de arena fina y menos del 30 % de
arena muy fina o entre 15 y 30 % de arena muy
gruesa, gruesa y media.
Franco arenoso muy fino:
con 30 % o más de arena muy fina o más del 40 % de
arena fina y muy fina, de la cual por lo menos la mitad
deberá ser arena muy fina, y menos del 15 % de arena
muy gruesa, gruesa y media.
Francos:
Son los materiales que contienen del 7 al 27 % de arcilla, del 28 al 50 % de limo, y
menos del 52 % de arenas.
Franco limosos:
Son los materiales que contienen 50 % o más de limo y del 12 al 27 % de arcilla, o
del 50 % al 80 % de limo y menos del 12 % de arcilla.
Limosos:
Son los materiales que contienen 80 % o más de limo y menos del 12 % de arcilla.
Franco arcillo arenosos:
Son los materiales que contienen del 20 al 35 % de arcilla, menos del 28 % de limo
y 45 % o más de arena.
Franco arcillosos:
Son los materiales que contienen del 27 al 40 % de arcilla y del 20 al 45 % de
arenas.
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Franco arcillo limosos:
Son los materiales que contienen del 27 al 40 % de arcilla y menos del 20 % de
arenas.
Arcillo arenosos:
Son los materiales que contienen 35 % o más de arcilla y 45 % o más de arenas.
Arcillo limosos:
Son los materiales que contienen 40 % o más de arcilla y 40 % o más de limo.
Arcillosos:
Son los materiales que contienen 40 % o más de arcilla, menos del 45 % de arenas,
y menos del 40 % de limo.
42
Estructura:
Constitución física del material del suelo, manifestada por el tamaño, la forma y el
ordenamiento de las partículas sólidas y los espacios vacíos.
La estructura no consiste solamente en la agregación de las partículas primarias en
individuos compuestos, sino también en la agregación de estos últimos en unidades
mayores.
Un agregado es un individuo natural, separado de los agregados vecinos por
superficies naturales de debilidad que se reconocen por ser huecos, grietas y/o por la
existencia de barnices.
Existen distintos niveles de la estructura. El nivel inferior sería la estructura básica,
es decir la ordenación de los granos minerales (el esqueleto), la masa coloidal y soluble (el
plasma), y los espacios vacíos dentro del esqueleto y del plasma. El siguiente nivel es la
estructura elemental que es la estructura básica alterada por procesos pedológicos. Las
alteraciones pueden consistir en arcilla iluvial. Formación de poros por actividad biológica,
etc. Los materiales apedales, es decir los materiales del suelo sin agregados, tienen una
estructura básica y casi siempre también, una estructura elemental.
Los materiales pedales, es decir los que presentan agregados, tienen por lo menos
un nivel estructural más alto que las estructuras básica y elemental. Estos son agregados
primarios, los más simples, no divisibles en agregados menores, y constituyen la estructura
primaria. Los agregados primarios a su ves pueden estar agrupados en agregados
compuestos (secundario o terciarios), en niveles más altos de la organización, y que
constituyen la estructura secundaria o terciaria. No se conocen más de tres niveles de
estructuras con agregados.
En el campo se describe únicamente la macroestructura, que es la que se ve a ojo
desnudo o con lupa de pocos aumentos. La microestructura, que sería la estructura
elemental y básica de los materiales, sólo se puede describir en cortes delgados.
La descripción de la macroestructura en materiales pedales se realizará según la
forma y el ordenamiento de los agregados (tipos de estructura), el tamaño (clase de
estructura) y el distinto grado de resistencia (grado de estructura), comenzándose por el
más alto nivel de organización pues los agregados de más alto nivel son los que se
observan con mayor claridad. En los materiales apedales se describirá únicamente el tipo
de la estructura elemental.
43
Estructuras de materiales pedales
Tipos de estructura
Agregados de forma poliédrica (A)
Migajosa (A1) Agregados compuestos; una agregación de gránulos muy finos,
relativamente bien acomodados entre ellos. La porosidad entre los gránulos y dentro de ella
es alta.
Semimigajosa (A2) Agregados compuestos; una agregación de gránulos muy finos,
relativamente bien acomodados entre ellos. La porosidad entre los gránulos y dentro de
ellos, es algo menor.
Granular (A3) Agregados simples; poliedros regulares esferoides con superficies planas o
curvas que tienen poca o ninguna acomodación a la forma de los agregados vecinos.
Bloques subangulares (A4) Agregados generalmente simples; a veces, compuestos por
bloques o gránulos. Poliedros o bloques irregulares con caras aplanadas y planas, con
muchos vértices redondeados; caras o curvas moldeadas por las caras de los agregados
vecinos.
Bloques angulares irregulares (A5) Agregados generalmente simples; a veces, compuestos
por bloques o gránulos. Poliedros o bloques irregulares con caras aplanadas o de forma
concoidal; la mayoría de los vértices son agudos. Cara o vértices moldeados por las caras o
vértices moldeados por las caras y los vértices de los agregados vecinos.
Bloques angulares regulares (A6) Agregados generalmente simples; a veces, compuestos
por bloques angulares. Poliedros regulares o cubos con caras planas y vértices agudos.
Caras y vértices moldeados por las caras y los vértices de los agregados vecinos.
Bloques aplanados (A7) Agregados simples o compuestos de bloques. Poliedros regulares
con su dimensión vertical limitada. La dimensión horizontal no es más de dos veces la
dimensión vertical. Caras horizontales generalmente planas o algo concoides y moldeadas
por las caras de los agregados adyacentes.
Bloques cuneiformes (A8) Agregados simples o compuestos de bloques. Poliedros o
bloques cuneiformes, con caras aplanadas y vértices agudos. Caras horizontales inclinadas
y a veces algo concoidales. Caras y vértices moldeados por las caras y los vértices de los
agregados vecinos.
Agregados de forma prismática (P)
Agregados prismáticos, con sus dimensiones horizontales limitadas y considerablemente
menores que la vertical. Partículas ordenadas alrededor de un eje vertical.
44
Prismas simples irregulares (P1) Superficies rugosas, más o menos moldeadas por las
superficies de los agregados adyacentes. Vértices angulosos o redondeados. Caras basales
irregulares o aguzadas, dando formas piramidales.
Prismas simples regulares (P2) Caras verticales y horizontales aplanadas o curvadas,
moldeadas por las caras de los agregados que los rodean. Vértices bien definidos y
angulosos. Caras horizontales a veces algo concoidales.
Prismas compuestos irregulares (P3) Agregados compuestos de bloques y/o prismas.
Superficies verticales desiguales y rugosas, más o menos moldeados por las superficies de
los agregados adyacentes. Caras basales irregulares o aguzadas dando formas piramidales.
Prismas compuestos regulares (P4) Agregados compuestos de bloques, bloques aplanados
y/o prismas. Caras verticales y horizontales aplanadas o curvadas, moldeadas por las caras
de los agregados adyacentes. Vértices bien definidos y angulosos. Caras horizontales a
veces concoidales.
Semicolumnar (P5) Agregados compuestos de bloques, bloques aplanados y/o prismas.
Caras y vértices bien definidos, algo redondeados en la parte superior. Plano superior bien
definido, pero apenas redondeado. Parte superior compacta, casi sin macroporos,
compuesta de bloques y bloques aplanados.
Columnar (P6) Agregados compuestos de bloques, bloques aplanados y/o prismas. Caras y
vértices bien definidos, algo redondeados, particularmente en la parte superior. Cara
superior bien definida y redondeada. Parte superior compacta, sin macroporos.
Agregados laminares o platiforme (L)
Agregados simples o compuestos; cuando son compuestos, generalmente son agregaciones
de láminas o, menos frecuentemente, de bloques. Agregados con su dimensión vertical
limitada y visiblemente menor que las otras dos; las dimensiones horizontales son mas de
dos veces la dimensión vertical. Partículas ordenadas en un plano horizontal; caras
principalmente horizontales.
45
Clases de estructura
Para cada uno de los tipos y subtipos que se han definido, se reconocen cinco clases
de acuerdo con el tamaño de los agregados. Sus respectivos nombres y límites en
milímetros se dan a continuación:
Tipos y subtipos
Abreviaturas:
Agregados
Migajosa
poliédricos Semimigajosa
Granular
Bloques
(5 tipos)
Prismas
Agregados
(4 tipos)
prismáticos Semicolumnar
Columnar
Agregados
Laminar o
laminares
Platiforme
Muy fina
mf
Fina
fi
Media
me
Gruesa
gr
Muy gruesa
mg
<1
1-2
2-5
5 - 10
> 10
<5
5 - 10
10 - 20
20 - 50
> 50
< 10
10 - 20
20 - 50
50 - 100
> 100
<1
1-2
2-5
5 - 10
> 10
46
Grado de estructura
El grado de estructura expresa la cohesión del agregado, o sea la resistencia que
ofrece a ser desecho por presión. En la práctica se determina principalmente mediante la
apreciación de la resistencia o permanencia de los agregados, y la proporción entre
material agregado y desagregado que resulta cuando los agregados son dislocados o
comprimidos débilmente. El grado de estructura varía con la humedad del suelo; se debe
tratar de describirlo cuando el suelo está más bien seco o a la capacidad de campo. No
obstante, se debe especificar en lo posible el estado de humedad en el momento de la
descripción y las diferencias importantes que se hayan observado en la estructura bajo
distintas condiciones de humedad.
Los términos que se usan para expresar el grado de estructura, son los siguientes:
Débil: Agregados poco definidos, pobremente formados, apenas observables in situ.
Cuando se los perturba, el material se rompe en una mezcla de unos pocos agregados
enteros, muchos rotos y una gran parte de material sin agregación. Abreviatura: de.
Moderada: Agregados precisos y bien formados, moderadamente durables y evidentes aunque no muy claros - en el suelo no desplazado. Cuando se los perturba, se rompe en una
mezcla de muchos agregados enteros bien netos y precisos, algunos rotos, y un poco de
material desagregado. Abreviatura: mo.
Fuerte: Agregados muy durables y evidentes en el suelo sin perturbar, que se adhieren
débilmente a los demás agregados, soportan el desplazamiento y quedan separados cuando
el suelo es desplazado. Cuando se remueve el material del perfil, consiste casi en su
totalidad agregados enteros, e incluye unos pocos agregados rotos y poco o nada de
material desagregado. Abreviatura: fu.
Estructura de materiales apedales.
Estructura esponjosa (E): El material del suelo tiene macroporos (que no son poros
texturales) que lo atraviesan en todas las direcciones y que pueden o no estar
intercomunicados.
Estructura estratificada (S): El material del suelo consiste en una acumulación de láminas
con material de texturas diferentes. La estratificación puede o no estar parcialmente
mezclada por actividad biológica.
Estructura de grano simple (G): El material del suelo consiste probablemente de un
esqueleto de granos y plasma coloidal, sin estratificar; fuera de los poros texturales no hay
macroporos. La masa del suelo puede ser coherente o no; si es coherente se sita como
estructura masiva (M).
Al describir la estructura se anotan el tipo, clase y grado de estructura (en ese
orden), de todos los niveles estructurales observados. Si, por ejemplo, el nivel estructural
47
más alto de un horizonte consiste en prismas irregulares y el nivel inferior en bloques
angulares, se describirá el tipo, el grado y la clase de los dos niveles del siguiente modo:
Prismas compuestos irregulares, medios, moderados, que rompen en bloques angulares
irregulares, medios, moderados.
En la ficha edafológica, a los efectos de abreviar la notación, se pueden utilizar los
símbolos y abreviaturas respectivos, colocados en forma de fracción; como numerador la
estructura del más alto nivel y como denominador la estructura de los niveles inferiores.
Si un horizonte tuviera estructura de más de un tipo, se anotan éstas separadas por
el signo +. Por ejemplo: A3 + A4. Cuando dentro de un horizonte la estructura cambie
gradualmente hacia abajo, se usará el signo ; por ejemplo: E  G.
Consistencia:
Consistencia del material que se expresan por su grado de cohesión y adherencia, o por la
resistencia a la deformación o ruptura.
S - En seco:
Se caracteriza por la rigidez, fragilidad, máxima resistencia, mayor o menor tendencia a
molerse en polvo o en fragmentos de aristas más bien agudas, e incapacidad del material
roto por recuperar su coherencia cuando se lo vuelve a juntar.
Grado 0 - Suelto: no coherente.
Grado 1 - Blando: frágil, se desmenuza con débil presión.
Grado 2 - Ligeramente duro: poco resistente, se rompe fácil entre pulgar e índice.
Grado 3 - Duro: moderadamente resistente, se rompe con las manos.
Grado 4 - Muy duro: muy resistente, se rompe con dificultad con las manos.
Grado 5 - Extremadamente duro: no se puede romper con las manos.
H - En húmedo:
Se caracterizan por tener una tendencia a romperse en porciones mas pequeña en lugar de
pulverizarse; por sufrir una cierta deformación antes de romperse; por carecer de fragilidad
y por la capacidad del material después de la perturbación, para hacerse nuevamente
coherente cuando se lo comprime.
Grado 0 - Suelto: no coherente.
Grado 1 - Muy friable: se rompe bajo muy débil presión. Al comprimir se hace coherente.
Grado 2 - Firme: se rompe entre pulgar e índice con moderada presión.
Grado 3 - Muy firme: se rompe con fuerte presión de ambas manos.
Grado 4 - Extremadamente firme: sólo puede partirse poco a poco con muy fuerte presión.
48
M - En mojado (plasticidad y adhesividad)
Plasticidad: propiedad de cambiar de forma cuando se aplica una cierta presión, y mantener
la forma impresa cuando se deja de presionar.
Grado 0 - No plástico: no se pueden formar hilos.
Grado 1 - Ligeramente plástico: se pueden formar hilos; fácilmente deformable.
Grado 2 - Plástico: se pueden formar hilos; moderadamente deformable.
Grado 3 - Muy plástico: se requiere mucha presión para deformar la masa.
Adhesividad: cualidad de pegarse o adherirse a otros objetos.
Grado 0 - No adhesivo: no se adhiere a las yemas de los dedos.
Grado 1 - Ligeramente adhesivo: se adhiere pero deja los dedos limpios.
Grado 2 - Adhesivo: se adhiere y se estira algo o queda pegado a cada dedo.
Grado 3 - Muy adhesivo: se adhiere fuertemente y se estira al separar los dedos.
pH: Anotar el valor obtenido a campo con el indicador universal.
Carbonatos libres (CO3=): Indicar la reacción con HCl en la masa del suelo:
Sin reacción: 0
Reacción débil: +
Reacción moderada: ++
Reacción fuerte o violenta: +++
Concreciones: Señalar en presencia, abundancia y/o composición.
De calcáreo: ca
De hierro: fe
no se observa: 0
De manganeso: mn
escasas: +
De sílice: si
abundantes: ++
Las concreciones de calcáreo se descubren con HCl (ácido clorhídrico); las de manganeso
con agua oxigenada; las de hierro férrico con KSCN (sulfocianuro de potasio).
Barnices: Anotar su presencia o abundancia y el tipo de revestimientos o films (clayskins,
slickensides, etc.). De ser posible se dará su color por Munsell.
Moteados: Indicar su presencia anotando el color (por Munsell), la abundancia, el contraste
y el tamaño de los moteados, con estas abreviaturas:
Abundancia: e - escasos: ocupa menos del 2 % de la cara del horizonte.
c - comunes: ocupan del 2 al 20 %.
a - abundantes: ocupan más del 20 %.
Contraste:
d - débil: moteado poco evidente (colores parecidos a la matriz).
p - preciso: moteado evidente cuyo color se distingue de la matriz.
s - sobresaliente: color del moteado muy distinto, que lo hace resaltar de la
matriz.
49
Tamaño:
f - fino: motas de menos de 5 mm de diámetro.
m - medio: motas de 5 a 15 mm.
g - grueso: motas de más de 15 mm.
Ejemplo: e d m 5YR 4/4
Puede hacerse una apreciación menos detallada: «moteados débiles y abundantes»,
«escasas motas finas», etc.
Raíces: Señalar su presencia con abreviaturas o símbolos.
No presentes: 0; escasas: R; comunes: RR; abundantes: RRR.
Formaciones especiales: Indicar si hay eflorescencias, pseudomicelios, krotovinas, lenguas,
grietas, lombrices, larvas, hormigas, etc.; también si el horizonte constituye un pan
(fragipan, claypan, duripan) o si está cementado.
Observaciones: Señalar cualquier rasgo destacable que no quedara indicado en la ficha. Si
hay tosca, anotar profundidad, y si se trata de un manto continuo o si hay afloramientos.
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BIBLIOGRAFÍA
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