Igualdad de género

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UNIVERSIDAD DEL SUR. (MAESTRIA EN CONSTITUCIONAL Y AMPARO).
EDUCACIÓN, PARA MÁS IGUALDAD ENTRE GENERO.
NO HAY QUE PENSAR IGUAL, PERO SI HAY QUE PENSAR EN UN MISMO OBJETIVO.
Para cambiar el mundo, empieza por ti mismo.
EDUCACIÓN, PARA MÁS IGUALDAD ENTRE GENERO.
INTRODUCCIÓN.
Con el presente trabajo se pretende demostrar el gran esfuerzo que ha resultado ser la
igualdad de géneros, en todos los aspectos de la sociedad, esfuerzo que no solo ha hecho
nuestro país, si no en medida de creencias ideológicas, religiosas, etc.; otros países han tenido
una lucha frontal contra la igualdad de oportunidades sin distingo de genero, lucha que
trasciende las fronteras locales, nacionales e internacionales, y desdibuja asimismo las
fronteras entre el aula y el mundo. Es importante destacar que para que haya igualdad de
géneros y se tengan las mismas oportunidades no solo basta la educación dentro de un aula
(aunque si es muy importante), pues hay que decir que el mayor cambio que se debe de hacer
o sufrir en la educación que recibimos, reside en nuestros hogares, en la forma de cómo
percibimos el mundo, pues el proceso de transmisión de conocimiento y recepción del mismo,
llega de todas partes, por lo que para que exista esos cambios, debe de haber entonces, un
cambio en nuestro entorno, o sea en nuestra forma de vida.
Con el presente se intenta demostrar que la consolidación y el desarrollo en la igualdad
de géneros para el país, ira de la mano de la transformación de pensamiento en hombres de
mujeres, que ni uno genero ni otro, se crea superior al de a lado, así como revertir el machismo
y feminismo que crece en las personas, y que lejos de acerarnos a una igualdad, no esta
separando en diferentes ideologías, por lo que no podremos avanzar en el temas, pues el fin no
seria ir juntos, si no cada quien por su lado, y así no se puede avanzar.
Si bien este tema demanda la concurrencia de diversas disciplinas y su exploración
desde distintos ángulos o puntos de vista, dada su amplitud y complejidad comprende
dimensiones generales que se constituyen en fértiles puntos de partida para tratar acerca de la
educación para la igualdad de géneros. Por lo que se hará un esfuerzo para ser concretos,
precisos y concisos, para explicar el punto a donde quiero llegar.
NO HAY QUE PENSAR IGUAL, PERO SI HAY QUE PENSAR EN UN MISMO OBJETIVO.
Para trascender y obligar a un cambio ideológico dirigido hacia la igualdad de genero,
se necesita enfocar nuestros esfuerzos a incluir la perspectiva de género en la educación y
enfocar la mirada a las construcciones culturales, sociales e históricas que, sobre el dato
biológico del sexo, determinan normativamente lo masculino y lo femenino; es decir, las
representaciones simbólicas de la diferencia sexual que aluden a las diferencias sociales entre
los sexos, por lo que solo por este punto de vista se nos ha pretendido dar una educación
distinta, no solo en nuestros hogares, en donde la mujer aparentemente tiene mas actividades
correspondientes a su sexo, y el hombre simplemente no tiene, si no que en el ámbito
profesional también se han diferenciado trabajos que pueden y deben ser desempeñados por
hombres y otros por mujeres, y ahora también han etiquetado trabajos para aquellas personas
que no están de acuerdo con su genero. Ahora bien, pienso que son las construcciones de
género que condicionan la existencia de una valoración para varones y mujeres en las
relaciones de poder que entre ellos se establecen y dan lugar a mecanismos de subordinación
y exclusión en perjuicio de la población femenina, y que ha desencadenado una ola de la
corriente feminista que ahora no quiere hacer nada por los del otro genero. Desde este enfoque
es posible desentrañar la relación existente entre estas construcciones y el aprendizaje de los
valores que son necesarios para un verdadero cambio en la ideología humana, durante sus
experiencias educativas.
¿Por qué existe esta rivalidad? A mi parecer el principal punto al que debe de hacer
referencia, es a nuestro sentido de pertenecía a un grupo, que depende en correlación a
nuestros ideales o creencias, pero también creo que este punto de partida se da en el proceso
de socialización que tiene lugar en la escuela, cargado de poder de simbolización, está
condicionado por el cruce de variables contextuales como son la pertenencia a un determinado
grupo o clase social, raza y sexo, así como las condiciones geopolíticas y el ciclo de vida en
que se encuentran los individuos. Si bien puede resultar más sencillo desenmascarar el mito de
la igualdad en la educación cuando se hace referencia a otras variables, como la clase social,
que al género de los individuos, se impone en la educación democrática la tarea de identificar y
transformar
las
prácticas
institucionales
y
las
actitudes
que
generan
y
legitiman
comportamientos discriminatorios por razones de pertenencia al sexo femenino o masculino;
más aún cuando éstos se cristalizan en representaciones de la realidad social, en valoraciones
y en la normatividad jurídica y social que regula la convivencia humana.
La delgada línea existente entre la igualdad de derechos y las condiciones de hecho
que obstaculizan la participación plena de las mujeres en la sociedad, da cuenta clara de la
discriminación basada en el sexo de las personas. Se llama sexismo a la discriminación por
personas de un sexo por considerarlo inferior al otro. El sexismo tiene variantes como el
machismo, el hembrismo y otros1.
Para intentar explicar estas diferencias entre hombres y mujeres, que trascienden mas
alla de la realidad biológica y que además determinan sus funciones en la reproducción
humana, el vocablo sexo resulta insuficiente. De ahí que la categoría de género surge en las
ciencias sociales para dar cuenta del conjunto de símbolos, valores, representaciones y
prácticas que cada cultura asocia con el hecho de ser hombre y mujer. Este concepto introduce
1 http://es.wikipedia.org/wiki/Sexismo
una distinción entre el sexo biológico, con el cual nacemos, y el género, que culturalmente se
nos asigna y adquirimos; es decir, nacemos hembra y varón (sexos biológicos), y la cultura nos
transforma en mujer y hombre (géneros sociales).
Bajo este ultimo concepto, nos damos cuenta que desde las definiciones mas básicas
empieza a vez distinciones géneros, una distinción social, mas allá de la distinción que nos da
la naturaleza a través de la biología, pero para abundar mas, tendremos a adentrarnos mas al
tema; ahora bien el sexismo comporta consecuencias negativas para todos los individuos,
varones y mujeres, porque limita las expectativas de comportamiento social y de ciudadanía
que existen para cada uno de ellos en un momento y lugar determinados, me explico, desde
siempre se nos a limitado en nuestras funciones, de acuerdo a nuestro sexo, lo cual a mi
parecer a mermado grandes talentos, en todas y cada una de las áreas en donde haya
distinción de genero para trabajar.
En México, al igual que en otros países del mundo, lose a establecido en sus
constituciones, artículos defensores de la igualdad de géneros, en México es un derecho
elevado a garantía individual, establecido en el artículo cuarto de la carta magna del país, por lo
que los mecanismos de exclusión y/o discriminación por razones de sexo en la educación ya no
se sitúan en el acceso al sistema ni en su estructura formal, al menos en lo que toca a la
cobertura de la educación básica que actualmente atiende de forma paritaria a niños y niñas;
Ahora, el debate sobre la igualdad de derechos y oportunidades en la educación se centra en la
calidad y modalidades de la enseñanza, en el como se debe de enseñar a niños y niñas que no
existe distinción por su genero, si no mas bien prepararlos para una competencia, en donde lo
único que será valorado, será la capacidad de cada uno de las personas involucradas, o sea, el
trabajo para el mas capacitado.
Tanto los contenidos de la educación como la forma de transmitirlos, los cuales
moldean la concepción que hombres y mujeres tienen de la realidad social, de sus normas de
funcionamiento, de los valores y principios que organizan la convivencia humana, están
permeados por el sistema de género. Este sistema, que norma, regula y jerarquiza las
relaciones entre los sexos, determina la manera en que las personas se representan a sí
mismas, el desarrollo de sus motivaciones y las expectativas que tienen sobre su vida futura,
en las que se incluye la ciudadanía. Así, como afirma Steven G. Smith, la distinción de género
se entromete en el proyecto democrático como una mancha oscura 2.
Por lo que ahora es importante analizar el discurso explicito y el oculto sobre la
educación de igualdad de géneros que se nos ha ido inculcando en nuestra educación, pues
2 Steven G. Smith - 1992
asi podríamos identificar desde que nivel de escolaridad, se le da un papel primario al genero
masculino, y el secundario a la mujer, pues en este caso no se trata de discutir las diferencias
biológicas, sino la interpretación y el significado que culturalmente se ha dado a las mismas,
particularmente en el terreno de la educación y en los procesos de socialización que ahí tienen
lugar, aclarando que a mi parecer no tiene la culpa de esta distinción, solo los medios
educativos, si no también madres, hermanas, hijas, y en si toda mujer que se sienta
desplazada por un hombre, no por sus capacidades si no por su genero, así como los hombres
que nos negamos y nos es insoportable, que una mujer este sufriendo este cambio.
Introducir la perspectiva de género en el análisis y la transformación de las acciones
educativas, además de remitir a la estructura formal de los sistemas educativos y a los
programas formales, conduce necesariamente a identificar desigualdades sociales entre
hombres y mujeres que se expresan y se mantienen en una variedad de aprendizajes que
tienen lugar en las interacciones que se producen cotidianamente en el espacio escolar. Son
múltiples y complejos los elementos, las situaciones y los procesos que configuran las prácticas
educativas, susceptibles de dar cuenta de cómo actúa el sistema de género en ellos.
Integrar la categoría relacional de género en el análisis y la reflexión de las prácticas
educativas significa también adentrarse en la dimensión ética de la educación, es decir, en el
terreno del aprendizaje y la construcción de valores de una cultura de igualdad de generos. Se
impone, por un lado, revisar críticamente la fundamentación pedagógica y el funcionamiento de
las instituciones educativas, para eliminar los sesgos sexistas que se filtran de diversas
maneras en las dimensiones cognitivas, afectivas y actitudes diarias que conforman los
procesos educativos, en cuyo desarrollo se juega el aprendizaje y la construcción de valores
igualitarios entre las personas. De esta manera se podrá aportar al tránsito de la igualdad
formal a la igualdad real de hombres y mujeres en nuestra sociedad. Por otro lado, es menester
investigar cómo la diferenciación sexual de los individuos y las desigualdades que conlleva
intervienen en la conceptualización, el desarrollo y la práctica de cada uno de los valores,
objetivos y finalidades de la educación para la democracia.
El sexismo en la educación hace un profundo daño en aquellas personas que lo
perciben de esta manera, pues bloquea el crecimiento de talentos y limita el crecimiento no
solo de nuestro paía si no también de la humanidad. El predominio de los valores masculinos y
el silencio y menosprecio de los femeninos, así como la idea de las mujeres, de que pueden y
son las indicadas para desempeñar cualquier trabajo, no por el hecho de sus capacidades, si
no por el hecho de ser mujeres, crea un fuerte desequilibrio e iniquidad en el desarrollo de las
sociedades. No basta con legislar cambios de conducta para lograr la igualdad; es necesario
proceder desde la educación, toda vez que no es posible legislar cambios de actitud.
CONSIDERACIÓN.
Por lo anterior mente mencionado, se considera que se debe de eliminar el sexismo en
la educación, pues esto significa o supone preparar el campo y aportar para transformaciones
sociales y culturales profundas, puesto que implica la construcción de una democracia
cotidiana vital, la apertura de los individuos hacia nuevas posibilidades y el cuestionamiento de
las concepciones, sobre todo lo social. Hombres y mujeres, niños y niñas, a través del
aprendizaje podrán interiorizar nuevas maneras de percibir y de saber, construir nuevos valores
y desarrollar una ciudadanía democrática.
Esto llevara a la mejor utilización del esfuerzo humano, el cual será medido de acuerdo
a las capacidades y preparación de cada persona, sin distingo de genero, dando el gran paso
para crecer como país, no solo en lo social o cultural, si no también en lo económico, pues al
tener a la persona indicada, en el puesto indicado, sin importarnos el sexo, nos hará crecer y
mucho.
BIBLIOGRAFIA.-
Jacques Delors, La educación encierra un tesoro, informe a la UNESCO de la Comisión
Internacional sobre la Educación para el siglo XXI, UNESCO, México, 1996.
Hierro, Graciela, "Género y educación", La Ventana, Revista de Estudios de Género, núm. 2,
diciembre de 1995, editada por el Centro de Estudios de Género de la Universidad de
Guadalajara.
Usos, dificultades y posibilidades de la categoría de género", La Ventana, Revista de Estudios
de Género, núm. 1, Centro de Estudios de Género de la Universidad de Guadalajara,
Guadalajara, julio de 1995.
Las mujeres y las políticas públicas", Documentos de trabajo, núm. 18, Fundación Friedrich
Ebert, México, 1989.
PAGINAS EN INTERNET.
http://educacionparalaciudadania.wordpress.com/category/las-relaciones-humanashombres-y-mujeres-s-b1/.
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