El preso político Mike África, sobre el alto costo del silencio y el 99% Michael Davis Africa :: 21/07/2012 También hay que hacer responsable a las filas del 99% que nunca lucharán por nada excepto empleos que explotan a los demás para el beneficio del 1%. ¡A movernos! El 8 de agosto de 1978, la casa central de la organización MOVE fue atacada en un asalto antes de amanecer por cientos de policías y agentes de la ciudad de Filadelfia. Al amparo de humo, gases lacrimógenos y miles de galones de agua lanzada de cañones de agua, los policías dispararon miles de balas desde todas direcciones. Durante el asalto, un policía murió y varios otros policías y bomberos fueron heridos, todos por fuego policial. Sin embargo, a nosotros, los integrantes de MOVE, nos acusaron del mismo asalto al que habíamos milagrosamente sobrevivido. En un juicio amañado, a todos nos condenaron a pasar desde 30 hasta 100 años en prisión. La sentencia mínima de 30 años se cumplió en agosto de 2008, pero el Consejo de Libertad Condicional nos negó libertad. Desde entonces, hemos recibido la misma respuesta cada año. Si no entienden el papel del Consejo, tomen nota: con su repetida negación, queda perfectamente claro que ellos pretenden terminar lo que los policías y autoridades dejaron pendiente en 1978. Aunque ha habido debate sobre la culpabilidad de los hombres, nunca se ha cuestionada la inocencia de las mujeres de MOVE. Los policías en la escena del asalto, el fiscal, y los tribunales conceden que no hay manera de que ellas pudieran ser culpables de la muerte de esa policía. [Ni siquiera fueron acusadas de portar armas.] Pero todavía están en prisión. Ahí sufrieron doblemente cuando la misma policía echó una bomba sobre la casa de nuestra familia, brutalmente asesinando a nuestros hijos e hijas el 13 de mayo de 1985. En ese infame ataque ordenado por las altas autoridades de la ciudad y difundido en vivo a nivel nacional, la policía asesinó a gente desarmada ––niñas, niños, mujeres y hombres. Ni un solo agente o autoridad ha enfrentado cargos por sus crímenes. Debbie, Janet, y Janine África han pasado los últimos 34 años de sus vidas en prisión por un crimen que no pudieron haber cometido. Sin embargo, el Consejo de Libertad Condicional, por instancias de las autoridades de Filadelfia, sigue negando su salida. Aún peor, el Consejo impone sanciones más duras a las mujeres que a los hombres. No se trata de lo que el Consejo hará la quinta o sexta vez que les toca tomar una decisión. Cualquier persona consciente sabe muy bien que la “decisión” que supuestamente están contemplando ahora en 2012 ya se tomó por las autoridades de Filadelfia en 1978 cuando sobrevivimos su asalto criminal. Entonces no se trata de lo que el Consejo determinará, sino lo que la gente permitirá. Como todas las autoridades públicas, las del Consejo toman sus decisiones en nombre de la gente. No habrá justicia si la gente no actúa. Fíjense en los casos de Trayvon Martin en Sanford, Florida, y Rodney King en Los Ángeles, [donde la rabia de la gente por lo menos ha llevado a los culpables al banquillo de los acusados]. Es la gente que tiene el poder para lahaine.org :: 1 impulsar cambios. Si alguien quiere saber cómo el gobierno puede dar una sentencia de 20 años a Marissa Alexander simplemente por intentar protegerse de la violencia de un marido abusivo en Tampa en 2012, es porque la gente guardó silencio cuando la policía realizó ese asalto militar urbano de gran escala en Filadelfia en 1978. Si alguien quiere saber porque todavía vemos escenas de los impunes asesinatos de Oscar Grant, Sean Bell, Trayvon Martin y de los tratos brutales a un sin fin de negros, latinos y blancos pobres, es porque todos se olvidan de la matanza del 13 de mayo de 1985 y tantas otras atrocidades ––hasta que les toca a ellos. Los que se quedan de brazos cruzados ante la opresión de sus hermanos y hermanas ––guardando silencio mientras los hijos e hijas de los pobres son asesinados o enviados como esclavos a las prisiones que se encuentran a lo largo del país, y negándose a apoyar a los que están resistiendo y luchando–– sólo impulsan al sistema a seguir con su represión, porque a fin de cuentas, la apatía y el silencio de la gente le da permiso. Es indispensable no sólo exigir justicia y hacer responsable al 1%, sino a las filas del 99% que nunca lucharán por nada excepto empleos que explotan a los demás para el beneficio del 1%. Los policías, carceleros, supervisores de libertad, jueces y muchos más que se alimentan del inagotable presupuesto del orden público, vienen directamente de las filas del 99%. Pueden dar de comer a sus familias porque esclavizan a la tuya. El Ejército, que hace valer la hegemonía de los grandes empresarios industriales, se compone de reclutas del 99%. Los trabajadores que ejecutan la hipoteca de tu hogar, que cortan tus servicios de gas, luz y agua a mediados del invierno, que meten químicas venenosas en tu comida y agua bajo órdenes del 1%, vienen del 99%. En fin ¿cuál es la diferencia entre la persona que acepta un empleo como verdugo y el legislador que legaliza la ejecución racista? Intenta explicar ésta a la persona que está por ser ejecutada. Una persona justa se negaría a cumplir una orden injusta. Debemos cerrar filas contra todos los agentes de represión y exigir justicia para todos nuestros hermanos y hermanas. ¡¡Liberen a nuestras hermanas de MOVE!! ¡¡Liberen a todos nuestros soldados!! ¡¡Liberen a todos los y las presos políticos!! ¡A movernos! Michael Davis África La Organización MOVE ¡¡¡Viva John África!!! http://amigosdemumiamx.wordpress.com/2012/07/21/el-preso-politico-mike-africa-sobre-el-alto-costo -del-silencio-y-el-99/#more-594 _______________ http://www.lahaine.org/mundo.php/el-preso-politico-mike-africa-sobre-el-a-99 lahaine.org :: 2