SISTEMA DE GESTION AMBIENTAL EN EL PUERTO DE BAHIA BLANCA 1 Por Alberto C. Carnevalli. En el Puerto de Bahía Blanca el camino elegido para lograr un desarrollo sustentable con el medio ambiente ha sido la implementación de un sistema de Gestión Integral de Seguridad y Medio Ambiente, donde combinamos los aspectos de seguridad industrial, protección marítima y medio ambiente, ejecutando acciones que se complementan para el logro de nuestros objetivos. No podemos trabajar esas áreas como sectores, sino que es en conjunto cuando se obtienen beneficios técnicos y optimización de recursos. En primer lugar, y en el marco de las actividades ambientales, hay que señalar que en el Puerto de Bahía Blanca se encuentran radicadas industrias con procesos altamente complejos (separación de gases, fabricación de fertilizantes, fabricación de aceites) como así también terminales de acopio y despacho de productos granarios. Esto ha generado que se mantenga un contacto activo con las diferentes autoridades ambientales a efectos de asegurar el funcionamiento sustentable, en este marco se llevan adelante auditorías a las terminales cerealeras bajo los lineamientos de la ley de la provincia de Buenos Aires 12605, tarea que se lleva en conjunto con inspectores del Organismo Provincial de Desarrollo Sostenible y que permiten realizar un seguimiento de los planes de obras acordados y que tiene como objeto mejorar el funcionamiento de las operaciones de esos establecimientos optimizando la utilización de sus recursos que permitan mejorar sus estándares ambientales. Por otra parte un dialogo permanente con la autoridad marítima representada por la Prefectura Naval Argentina ha permitido mejorar los aspectos ambientales de las interfaces buque muelle, generando instalaciones y procedimientos para que las operaciones de los buques se lleven a cabo en un marco de cuidado del medio ambiente, ejemplo de esto es la implementación de los planes Nacionales de Contingencia para derrames de hidrocarburos, retiros controlados de residuos sólidos de los buques, retiros a disposición final a centros habilitados por la normativa vigente de residuos líquidos (slop y /o líquidos de sentina) entre otras actividades. En lo que respecta al impacto que pudieran generar las actividades propias del Consorcio de Gestión del puerto de Bahía Blanca, como lo es el Dragado del canal de acceso de su puerto, se lleva a cabo un plan de Monitoreo en las aguas y sedimentos en diferentes estaciones de la ría, estos estudios forman parte del Plan Integral de Monitoreo donde se analizan la presencia de diferentes elementos constitutivos tanto en agua como en sedimento, evaluado su comportamiento a lo largo de diferentes periodos. Ese seguimiento permite evaluar si las actividades desarrolladas se mantienen en los márgenes de sustentabilidad a través de la remisión de los resultados de estos monitoreos de forma periódica a la Autoridad Ambiental, de más de diez años de registros no se han detectado valores de concentración que superen índices de intervención y/o alerta de acuerdo a la normativa Nacional (ley 24051) o en su comparación con estándares normativos de otros sistemas portuarios de similares características y utilizados referencialmente (tal es el caso de normativas aplicables a Holanda, Canadá o USA). Se entiende por valor de intervención o de alerta aquella concentración dele elemento medido que señala la necesidad de remediar el área o estudiar en detalle la forma de disposición para evitar efectos adversos. Entre los elementos que se analizan para determinar su concentración en sedimentos se estudian: Cadmio, Plomo; Mercurio, Cinc, Cobre, Hidrocarburos, Organoclorados, Organofosforados, etc. Este artículo fue publicado en la Revista Gerencia Ambiental (Año XXI, Noviembre de 2013, Nº 202), habiendo sido expresamente autorizada su reproducción por el autor del mismo Ing. Alberto C. Carnevalli. 1 La selección de esos elementos de estudio se relaciona con la actividad antropogénica llevada a cabo en el área portuaria, ya que la existencia de algunos de ellos puede relacionarse con alguna actividad desarrollada. De más de diez años de análisis de resultados de los parámetros mencionados, y la inexistencia de concentraciones de alguno de esos elementos que registren valores de alerta o intervención, se puede reafirmar la correcta implementación de los sistemas de gestión ambiental llevados adelante en la jurisdicción portuaria. En el caso de las empresas de proceso industrial radicadas en puerto, se verifica el cumplimiento de la implementación de las medidas de control de emisión de contaminantes, revisando periódicamente que los distintos parámetros (agua, suelo, aire) no sufran desviaciones de la normativa aplicable en cada caso, evaluado específicamente los diferentes planes de monitoreo implementados y que oportunamente fueran aprobados por la autoridad ambiental interviniente. De esta forma se convalida la vigencia de las autorizaciones ambientales de cada una de las instalaciones. En los aspectos referidos a la seguridad e higiene en el trabajo, el Consorcio de Gestión del Puerto de Bahía Blanca ha certificado su Sistema de Gestión de Seguridad y Salud Ocupacional de acuerdo a los lineamientos de las OHSAS 18001:2007 en su rol de Autoridad Portuaria, en su rol de administración y explotación del Complejo Portuario de Bahía Blanca. Asimismo y en relación a los proyectos a instalarse en jurisdicción portuaria, se les exige la presentación de un Análisis de Riesgo que permita evaluar los diferentes escenarios de posibles accidentes con sus correspondientes consecuencias, todo esto con el objeto de evaluar las acciones de prevención a tomar para minimizar la ocurrencia de los eventos estudiados. La presentación de esos estudios debe contener: Descripción de las actividad a desarrollar Clasificación de productos a manipular Medios de transporte Sistemas de contención y estiba Logística Distancia y efectos provocados a instalaciones vecinas. Este esquema de trabajo permitir dotar de una herramienta necesaria para la toma de decisiones requerida para definir la factibilidad de radicación de los diferentes emprendimientos. Por último y en referencia a los aspectos de Protección Marítima, estos tienen estrecha relación con el cumplimiento de normas internacionales que han requerido que los puertos cumplan los estándares de seguridad regulados por la Organización Marítima Internacional a través del Código de Protección de los Buques y de las Instalaciones Portuarias (Código PBIP), y cuya autoridad de control de implementación en nuestro país es la Prefectura Naval Argentina. El mencionado código establece metodologías de control de accesos a los sitios portuarios donde se realiza la transferencia de las mercaderías como así también la implementación de procedimientos cuyo objetivo tiende a optimizar la operatoria portuaria. La experiencia lograda en los últimos años por nuestro puerto en la aplicación del código mencionado ha permitido que sea el Puerto de Bahía Blanca sede del VII FORO INTERNACIONAL PBIP que se llevó a cabo del 7 al 9 de Noviembre de 2013, con una agenda de actividades que contó con la participación de delegaciones de representantes de seguridad portuaria de varios puertos latinoamericanos. EXPECTATIVAS A FUTURO Sabemos que las actividades portuarias impactan a la comunidad, es por ello que cada vez que se toma la decisión de llevar adelante una obra portuaria, sus ejes de evaluación no solo buscan complementar un desarrollo económico con generación de mayor comercio internacional, sino que esto debe ser dentro de los lineamientos ambientales recomendados para lograr mantener un equilibrio en las líneas de sustentabilidad. En nuestro Puerto, obras de relevancia como las de dragado se llevan a cabo bajo ese concepto, buscando permanentemente perfeccionar todo eje de acciones ambientales, para eso se comparten las metodologías de trabajo con los organismos relacionados a las actividades ambientales (ONG) y autoridades ambientales. Si esa conjunción comunidad – puerto y autoridad ambiental no trabajan en conjunto difícilmente se logren unificar los criterios ambientales, y ese es por sobre todo nuestro principal objetivo. Finalmente reafirmamos el concepto de aplicar políticas integradas de seguridad y medio ambiente, donde la inversión en los recursos de seguridad, medio ambiente y protección marítima favorece su desarrollo sustentable, evitando que una desviación en alguna de esas tres áreas afecte el desarrollo portuario.