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REDVET. Revista electrónica de Veterinaria 1695-7504
2007 Volumen VIII Número 12B
REDVET Rev. electrón. vet. http://www.veterinaria.org/revistas/redvet
Vol. VIII, Nº 12B, Diciembre/2007– http://www.veterinaria.org/revistas/redvet/n121207B.html
¿Un país pobre podrá dar Bienestar a sus Animales?
Parrilla, Guillermo. DVM. Comunidad Campesina de Andrada S/N. Cochabamba –
Bolivia. Email: [email protected]
REDVET: 2007, Vol. VIII Nº 12B
Recibido: 02.08.2006 Referencia: BA003 Aceptado: 04.11.2006 Publicado: 01.12.2007
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Muchas veces en Bolivia lo único que poseen las familias rurales aparte de la tierra son
sus animales. Esto nos lleva al concepto establecido de que el pobre cuida más que
nada los animales que le proveen lo básico de una economía marginal. Como Médico
Veterinario durante muchos años llegué a compartir lo romántico y casi holístico de este
modo de vida al estilo de mi antiguo colega James Herriot, pero al pasar los años ha ido
cambiando mi percepción de esta realidad.
La verdad absoluta es que los animales de producción y especialmente los perros y
gatos en los países en desarrollo están propensos a sufrir actos de negligencia humana.
Las mascotas padecen de la pobreza del mismo modo que lo hacen sus dueños. En un
País como Bolivia con grandes zonas empobrecidas y extensos barrios periurbanos que
se debaten en la miseria, los animales están vulnerables a la desnutrición,
enfermedades y sobre todo al abandono.
El bienestar animal ha sido definido por la Organización Mundial de Sanidad Animal
(OIE) como la manera en que los animales se enfrentan con el medio ambiente y que
incluye su sanidad, sus percepciones, su estado anímico y otros efectos positivos o
negativos que influyen sobre los mecanismos físicos y psíquicos del animal
.Lamentablemente en países del llamado “Tercer Mundo” esta definición cae en saco
roto.
Bolivia es el país con menor ingreso per. capita en América Latina y esto hace difícil el
tratar de introducir cualquier concepto que tenga que ver con el Bienestar Animal,
sumado a esto la corriente de los gobiernos anteriores y actual de modernizar el agro a
como de lugar sin poder llegar a entender que dentro de una economía diversificada la
producción animal especializada solo puede hacer que la miseria del campesino empeore
además de privar de la identidad que a caracterizado ancestralmente a estos pueblos.
¿Un país pobre podrá dar Bienestar a sus animales?
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Entonces ¿cuál es la solución para que el poblador rural pueda mejorar su desarrollo
económico sostenible y si es posible mejorar el Bienestar Animal?
Pues parece que la respuesta esta en la tendencia creciente de los consumidores,
orientada a demandar cambios en las prácticas agrícolas para atender preocupaciones
relativas al bienestar animal, la salud pública y la protección del medio ambiente.
Adicionalmente, el reciente surgimiento de enfermedades como la fiebre aftosa, la
influenza o gripe aviar y la encefalopatía espongiforme bovina (BSE) ha puesto en
evidencia la urgente necesidad de implementar estándares superiores de Bienestar
Animal en aquellos países más vulnerables no solo por no contar con redes de vigilancia
epidemiológicas adecuadas sino también porque con esto desvanece la esperanza de
poder exportar productos de origen animal a países que los demanden.
Inculcar una buena práctica pecuaria a los campesinos debería ser uno de los objetivos
en todo proyecto en que los organismos estatales dirijan a mejorar la producción
animal en el área rural. Esto seguramente no sería difícil ya que la mayoría de los
campesinos saben intuitivamente que un animal que es tratado con mayor sensibilidad y
al cual se le permite desarrollar su comportamiento natural producirá un mejor ingreso
a su familia. El principal factor para que la producción animal a baja escala y
diversificada genere un maltrato a los animales se debe principalmente al deficiente
apoyo que el gobierno provee a los campesinos, es decir un desarrollo rural sistemático
acompañado de servicios veterinarios y no esporádicas campañas de vacunación cada
vez que un brote infeccioso aparece.
Los principales problemas que afectan al Bienestar Animal en países como Bolivia se
podrían identificar como:
Animales de Trabajo: Por generaciones la yunta de arado ha sido la mejor herramienta
del campesino en los valles mesotérmicos Bolivianos, lamentablemente toda una cultura
etnocampesina se ha ido perdiendo. Luego de la nacionalización de las minas en 1952 se
produjo un importante éxodo de mineros a estos valles. Estas familias desvalidas y sin
ningún conocimiento acerca de la crianza animal se dedicaron y lo hacen hasta la fecha a
una producción agropecuaria depredadora en la cual no se respeta la naturaleza y mucho
menos se provee de
una vida aceptable
a los animales. Para
los veterinarios de
estas zonas es muy
común
el
recomendar
para
los bueyes jóvenes
de
trabajo
la
eutanasia
como
única opción para
acabar
con
el
sufrimiento
y
la
miseria a la cual los
lleva
una
sobreexplotación
por parte de sus
propietarios
acompañada
muchas veces a
una dieta de sobras
y rastrojos.
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Animales de Carga: Bolivia es el país con mayor número de llamas en el mundo. Estos
camélidos han sido utilizados desde antes de la colonia como animales para transportar
carga. Para el transporte de productos se emplean grupos de llamas o caravanas que
efectúan travesías de corta duración de dos a seis días o de larga duración de varios
meses, a través de senderos tortuosos en las cordilleras y en diferentes pisos ecológicos.
El objetivo primordial de estos viajes es intercambiar con otros campesinos productos que
no existen en las regiones de destino, y que son indispensables para el sostenimiento de
la familia del productor de llamas. La mayoría de los productores utilizan machos
castrados de 3 años de edad .La castración es cruenta y se la efectúa a la edad de uno a
dos años por aplastamiento de los testículos generalmente utilizando dos piedras. El
promedio de carga por animal en el altiplano es de 30 a 40 kg. A veces se los somete a
pesos mayores (hasta de 50 Kg.) esto representa el 50 % aproximado del peso del
animal, no debiendo exceder nunca el 40% del peso corporal. El viaje de retorno es más
debilitante que el de ida, tanto por el difícil ascenso al que se somete a los animales como
por el desgaste acumulado, que puede agudizarse por la falta de forraje.
Transporte y Sacrificio: Tal vez la peor práctica en contra del Bienestar Animal sea la
forma en que los animales son abatidos y llevados a los mataderos. No existe ningún
organismo que controle específicamente su transporte pudiendo estos caminar distancias
superiores a los 50 Km. o más antes de morir o permanecer hacinados y sin agua
durante 2 o 3 días en vehículos que no reúnen ninguna condición para este propósito.
Los animales son atados a los techos de los
automóviles resultando con lesiones y un
aumento considerable en su fatiga. El sacrificio
se realiza de la forma más precaria, incluso en
los mataderos Municipales donde se cuenta con
veterinarios de planta que permiten las más
salvajes atrocidades.
faeneo. Ninguna norma hace mención a
instalaciones para el ingreso, recepción y
manejo de los animales antes y durante
su sacrificio.
Una vez que llegan a los mataderos son
bajados de los camiones sin ninguna
consideración. Los animales son sacrifi-cados
uno detrás de otro sin tomar en cuenta la
crueldad que esto representa en el último
instante de su vida .No se conoce en Bolivia
ningún reglamento que incorpore aspectos de
Bienestar Animal en los establecimientos de
La insensibilización de los bovinos
mediante el uso de pistolas de émbolo
cautivo no se permite debido a la
creencia que el cerebro del animal se
daña y no es apto luego para el consumo
humano.
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No solo la pobreza es culpable
En este país la tendencia de los grandes capitales pecuarios hacia una producción intensiva
especialmente en el área avícola hace que el bienestar de estos animales se vea afectado,
no solo por el hecho de que los productores tratan de sacar la mayor ganancia posible sino
que la falta de reglamentos y normas vigentes en el país permiten que las densidades de
animales en los corrales supere lo razonable. Incluso es común en la universidades el de
enseñar a”optimizar” las explotaciones sin considerar que con esto se afecta la calidad de
vida de los animales.
Muchos países en desarrollo como es el caso de Bolivia tienen grandes extensiones de tierra
y una mano de obra relativamente barata. Esta podría ser una ventaja competitiva en lo
que al comercio pecuario internacional se refiere, especialmente si ellos apuntan al alto
valor de los productos orgánicos y además que cumplen las normas de Bienestar Animal
establecidas en países desarrollados.
Experiencias en otros países nos enseñan que implementar granjas de producción intensivas
no provee
de
seguridad alimentaria a los países en desarrollo y además pueden
incrementar el desempleo. Los productos animales que de este tipo de explotación se
obtienen son demasiado caros para la gente pobre y las granjas gigantes a menudo
destruyen la estructura laboral y la estabilidad de las sociedades que tienen como principal
pilar económico la producción animal.
Para llegar a soluciones sobre el bienestar animal en países en desarrollo sería inapropiado
llegar a asimilar normas internacionales ya establecidas en países desarrollados. Estas
normas deben ser solamente una guía y cada país deberá implementar regulaciones
basándose en sus exigencias particulares. Los gobiernos de turno deberían dejar de usar el
Bienestar Animal como una herramienta de la demagogia y crear organismos con base
científica y sensibilidad “humana” y trabajar en el ámbito de la comunicación considerando
que los ciudadanos de este país no tienen en cuenta el Bienestar Animal al comprar.
Por último es vital como eslabón clave que los Médicos Veterinarios dediquen su profesión
al Bienestar Animal y lleguen a trabajar con un código de ética cuyo propósito sea el de dar
una vida decente a los animales , tratando de encontrar estrategias que puedan satisfacer
la demanda mundial de alimentos pero sin comprometer la conciencia que todo profesional
debe tener.
Bibliografía
Comisión Europea (2004). – Global conference on animalwelfare: an OIE initiative.
Proceedings. París, 23-25 de febrero de 2004. Oficina de Publicaciones Oficiales de las
Comunidades Europeas, Luxemburgo, 333 págs.
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