APRENDIZAJE POR CENTROS DE INTERÉS DESDE UN ENFOQUE GLOBALIZADOR El niño en edad preescolar trae consigo una estructura cognitiva desarrollada a través de las formas de representar sus acciones mediante el lenguaje; materializado por el proceso físico y mental donde intervienen la percepción, observación, experimentación, de los elementos concretos y físicos que el entorno cultural y social le ofrecen, acompañado del juego en sus categorías simbólico y de roles; para lo cual utiliza sus esquemas mentales previos, que le permiten organizarlos y reestructurarlos, en la medida en que se conviertan en conocimientos de su realidad, para poder intervenir en ella y llegar a transformarla; obteniéndose así un aprendizaje significativo y funcional. Por tal motivo, el docente facilita este aprendizaje siempre partiendo de la información que tiene sobre los conocimientos previos del niño, ya que no está para imponer ciertas ideas o para formar ciertos hábitos en él, sino que esta allí para facilitar, crear, construir ambientes de aprendizaje, reflexionando en torno a la comprensión de las estructuras profundas del conocimiento, presentando actividades que atraigan su interés en la línea de sus necesidades, en el cual los contenidos en secuencias de complejidad adopte un enfoque globalizador ya que, permite incentivar por una parte al docente imprimiéndole una actitud interdisciplinaria, para organizar los contenidos de manera gradual e integral en unidades didácticas, relacionadas con su realidad vivencial, dotadas de gran significación para el niño, teniendo en cuenta su nivel de desarrollo; y por otro lado confronta a éste a asumir una actitud reflexiva, puesto que, su actividad mental está sujeta realizar relaciones y conexiones en torno a un tema de su realidad, planteándose problemas y soluciones para resolverlos, mediante tareas ubicadas a partir d sus experiencias anteriores con el nuevo conocimiento; por ende, le agrega intencionalidad al aprendizaje, puesto que, al construir dicho conocimiento en la secuencia descrita anteriormente, sus esquemas mentales se modifican constantemente, se hacen más complejos, adquiriendo amplitud de significación y diversidad de conocimientos, es decir, que estos construidos desde un enfoque globalizador, partiendo de una situación real, y por lo tanto compleja, las relaciones que se pueden establecer entre las experiencias anteriores y el nuevo contenido puede ser mayor, incrementando el número de vínculos en la significatividad del aprendizaje, que será superior y tendrá más posibilidades de aplicación en situaciones diversas. Esto se lleva a cabo promoviendo la creación de centros de interés como método globalizado que dirigen los aprendizajes en edad preescolar, en el cual involucra al docente de manera crítica e investigativo, al organizar los contenidos y actividades de forma integral, vital y significativa para el niño por lo que están orientados en la línea de sus intereses y necesidades; desde sus intereses porque el niño está ligado a apropiarse del medio natural y social de manera concreta y afectiva y desde sus necesidades, porque es éste un ser vital que necesita alimentarse, luchar contra la intemperie, defenderse contra los enemigos varios, actuar trabajando solidariamente, descansar, recrearse y mejorar, desenvolviéndose en armonía total con las áreas de su personalidad intelectual, emocional y social. Esto atribuye a los niños a encontrar sentido a las actividades de enseñanza-aprendizaje, estar motivado para aprender y sentir interés por realizar el esfuerzo que supone la construcción de significados. Cuanto mayor sea el interés y motivación, así será la consecución del aprendizaje, por ello el método centros de interés permite acrecentar las potencias del niño de manera gradual e integral, conforme a las demandas que las situaciones sociales lo involucren, ya que dispone de un proceso didáctico congruente con su proceso evolutivo, social, cognitivo y físico, ajustable a los fines de la enseñanza contemporánea. 1. Planteamiento y formulación del problema Hasta hace una década la mayoría de las instituciones educativas estaban regidas bajo el enfoque curricular tradicionalista, el cual proporcionaba las disciplinas clásicas para proyectar un hombre que debía dejar de ser niño lo antes posible y enfrentar la vida superando dificultades. Era expuesta por un maestro, protagonista de la enseñanza, transmisor de conocimientos, dictador de clases, reproductor de saberes, severo, exigente, castigador, rígido, autoritario; en relación vertical con un alumno receptivo, memorístico, atento, copista, imitador, quien llegaba a una escuela vacío de conocimientos y los recibía desde el exterior para formarse en la erudición de un mundo siempre igual. Esa era la metodología con la cual se levantaban los niños del futuro: lineal, sin incentivar a los estudiantes a la investigación y afines, era un conocimiento que se daba y moría en el acto. A pesar de que el gobierno con la instauración de nuevas leyes y decretos logro incitó a innovar nuevas metodologías a las instituciones educativas, son todavía muchas tanto públicas como privadas que ejercen un currículo tradicionalista, ignorando que existen metodologías nuevas con las cuales los logros perfilan un potencial abierto y dinámico para los hombres del mañana. El Instituto Blanca Nieves del barrio la Campiña, es una institución que ofrece a la comunidad la prestación del servicio académico en los grados de preescolar y primaria. Cuenta con una población de 130 estudiantes, procedentes de familias de estrato medio-bajo; donde la gran mayoría vive en el barrio la Campiña y sus alrededores. Este instituto como entidad educadora presenta en el grado preescolar, específicamente en la práctica pedagógica el desarrollo de los programas desde la perspectiva de un currículo tradicionalista, donde el conocimiento esta compartido en área y asignaturas sin significación. Esto se debe a que no surgen de los intereses y necesidades del niño y no es frecuente que al niño se le permitan realizar actividades para interactuar en grupo, pues se realizan individualmente, así mismo el ambiente educativo y especialmente el de la clase transcurre en la rutina de actividades donde el niño no explora su medio sino que los docentes los limitan con acciones habituales rezar, cantar, sentarse, entregar las tareas y luego estimularlos con recurso que las docentes frecuentemente las elaboran láminas, carteleras, títeres, cantos, dibujos en el tablero y el resto es obtenido de los propios alumnos, piedras, botones, etc. A través de estos medios observan superficialmente la realidad y los docentes explican el tema brevemente; realizan algunas preguntas a los niños, todos no responden, algunos por repetición de los primeros, otros, voluntariamente y en ese desarrollo de la clase no todos están atentos. Algunas veces se recurre al juego libre con material didáctico. Las clases se planifican en el parcelador con unidades impuestas por una programación escogida a libre juicio de los docentes, no es evaluado ni revisado por las directivas, por tanto, el quehacer pedagógico está sujeto a una metodología donde el docente cumple una función de dictar la clase a unos estudiantes que la reciben. Los recursos didácticos más utilizados son el discurso, el tablero acrílico, el cuaderno y el texto guía, no se dispone de material didáctico suficiente que le sirva de herramienta en la planeación y ejecución de su metodología. Estas carencias se viven diariamente en el aula de clases, siendo manifestadas en síntomas como la falta de atención, desmotivación, indisciplina hacia las actividades académicas. Como consecuencia el proceso de aprendizaje de los niños se torna preocupante, ya que se ha demostrado pedagógicamente que el niño, especialmente en edad preescolar, necesita observar, manipular material concreto que lo lleve a relacionar sus preconceptos con el nuevo concepto que le presenta el docente. Lo anterior promueve los siguientes interrogantes ¿cómo cambiar la metodología tradicionalista, imponiendo un nuevo currículo que permita la actualización sin tener resultados desfavorables? ¿En qué medida los centros de interés motivarían el aprendizaje en los estudiantes?, ¿Qué recursos serían necesarios para implementar esta forma de trabajo académico?, ¿Cómo los centros de interés contribuyen a la cualificación de la práctica del maestro?, ¿Cómo cualificar a los docentes para la utilización de los centros de interés? Planteando esta situación el Instituto Blanca Nieves dejaría de ser un espacio vacío para el aprendizaje, para convertirse en uno donde el estudiante tenga la posibilidad de manipular y experimentar a través de acciones motivadoras y dinámicas. Además, favorecería la formación de contenidos que le brinden un aprendizaje placentero, que lo enriquezcan personal y socialmente, preparándolo para la vida, convirtiéndose así el estudiante protagonista de la materialización de sus intereses y necesidades. Por tanto, el Instituto Blanca Nieves será para el niño el espacio que le brinde momentos de aprendizaje significativo y creativo. 1.1 Objetivo general Generar el aprendizaje por centros de interés desde un enfoque globalizador en el Instituto Blanca Nieves. 1.2 Objetivos específicos 1.3 Evaluar el nivel educativo de los estudiantes con el método actual. Fomentar y estimular en los docentes la participación en la organización de los proyectos educativos. Ejecutar los proyectos instaurados en el PEI del Instituto. Proponer los posibles temas a exponer como proyectos a desarrollar. Evaluar y comparar el nivel académico alcanzado con la exposición del nuevo currículo. Justificación Para concebir un programa que no sea aburrido y lento para los niños, y que sin embargo tenga valor como iniciación al patrimonio intelectual y moral de la humanidad, es conveniente por una parte preguntarnos qué es lo que es importante que el niño ignore, y por otra parte, cuáles son los conocimientos para los cuales el niño tiene más atracción. En los centros de interés el objetivo es crear un vínculo común entre todas las materias, hacerlas converger o divergir de un mismo centro; es el niño hacia lo que todo se dirige, es del niño de lo que todo irradia, y este es el hilo que permite a su espíritu orientarse y, además, de este modo, buscar el elemento afectivo primordial, el interés del niño. El propósito del método de proyectos en la enseñanza es el de integrar las actividades dentro de la escuela con las que se desarrollan fuera de ella. El alumno inscrito en el método de proyectos tiene más posibilidades de resistir al olvido, puesto que esta conformado unos objetivos significativos. Por ello la construcción de proyectos de centros de interés despierta el aprendizaje significativo en los niños ya que como tal, un proyecto es una investigación en profundidad de un tópico que vale la pena estudiarse. La investigación puede ser llevada a cabo, normalmente por un grupo pequeño de niños dentro de una clase, a veces la clase entera y en ciertas ocasiones por un niño solo. La característica clave de un proyecto es que es un esfuerzo investigativo deliberadamente enfocado en encontrar respuesta para preguntas sobre un tópico, hechas por los niños, el maestro-maestra, junto con los niños. La meta de un proyecto no es solo buscar respuestas correctas, sino también aprender más sobre un tópico. Los proyectos de trabajo son una forma de currículo escolar globalizado, en la que la función del proyecto es crear estrategias de organización de conocimientos a través de centros de interés, con la intención de favorecer el aprendizaje de los estudiantes. Por ello los proyectos de trabajo enfocado hacia la globalización de los centros de interés saltan como la respuesta a la necesidad de evolución de los sistemas de educación rígidos. Por estas razones se considera la implementación de proyectos de trabajo para lograr un aprendizaje por centros de interés en el Instituto Blanca Nieves, ya que se aportaran elementos y necesidades que lo harán progresar, además de modificar el currículo actual de escuela tradicional a formar parte de una metodología de escuela activa que se acomoda a lo actual.