CAPRICORNIO: El signo es representado por un Chivo. El símbolo representa a un chivo primitivo con cuernos retorcidos y cola de pescado rizada. El mito babilónico lo identifica con el monstruo Kusarikku, que aterrorizaba con su doble figura de carnero y pez. También a la transformación del dios Pan, (cuya madre le abandonó a causa de su fealdad) en cabra o pez antropomórficos tras su inmersión en el Nilo. En la Edad Media se transformaría en el macho cabrío tan utilizado por los cristianos para representar al demonio. En Grecia se identificó con Cronos (Saturno para los romanos), hijo de Urano (el cielo) y de Gea (la tierra). Urano odiaba a sus hijos y los encerró en el Tártaro (el centro de la tierra) y Cronos se rebeló contra su padre cortándole los genitales con una hoz, echándolos al mar y liberando así a sus hermanos. El mito representa el décimo trabajo de Hércules que consistía en descender al Infierno para liberar a Prometeo que se encontraba allí por haber robado el fuego del cielo. CAPRICORNIO El símbolo de Capricornio es el macho cabrío, uno de los emblemas más antiguos del libertinaje, la lujuria y la fertilidad; el daimon sigue una dirección descendente, y el espíritu, vivificado por la revelación de la luz de los cielos, se dispone a padecer su iniciación en la esclavitud en el nombre del padre. Para Homero, el planeta Saturno tiene dos Titanes que presiden su poder. El Daimon de Capricornio reside en el ciclo de que el hijo derroca al padre y posteriormente será derrocado por su propio hijo. El tema mítico que se encuentra en el signo es la confrontación entre padre e hijo. El viejo rey debe morir, el nuevo debe nacer, entre ambos debe tener lugar una lucha y, en el mismo momento de la muerte, ambos se revelan como uno. La primera parte de la vida de Capricornio está marcada por la prisión, la limitación y la esclavitud y este tema puede representarse bajo la forma de un trabajo con el padre, de un matrimonio con la mujer a quien se ha dejado encinta o de cualquier otro tipo de obligación que parezca interminable. Capricornio siempre se decepciona del padre personal porque el padre que quiere es nada menos que divino. La moralidad y la inmoralidad, la ley y la ilegalidad parecen participar de los opuestos polares de Capricornio. El hijo debe afrontar el castigo del padre para terminar encontrando que el padre está dentro de sí mismo y el padre, el viejo rey, debe hacer frente a la rebelión del hijo para terminar encontrándose con su propio espíritu juvenil, que pensaba haber perdido tiempo atrás. La iniciación del hijo por parte del padre es una experiencia interna predestinada que supone dejar de considerar al padre como perseguidor, por su insistencia en que el joven acepte las reglas y condiciones del mundo y llegar a verlo como un padre compasivo y un alma inmortal, parece ser el sendero arquetípico de Saturno. El joven no quiere aceptar las condiciones ni considera necesaria la preparación, no acepta la demora. Para él todo debe suceder instantánea y espontáneamente. La aceptación de la responsabilidad terrenal y la limitación también forman parte del proceso que conduce de hijo a padre. La confianza de Capricornio es insignificante a menos que esté seguro frente a su desesperación, por ese motivo el fracaso es un aspecto que forma parte del paisaje interno de Capricornio. Cronos y Rea, dos dioses de la tierra, engendrados en Gaya por Urano, el dios del cielo. Cronos, repudiado por su fealdad, fue desterrado a Tártaros pero Gaya persuadió a sus hijos para que se rebelaran contra su padre, y armó a Cronos, el más joven de los siete, con una afilada hoz, símbolo de la luna y del poder de la diosa. Cronos cogió los genitales de su padre con la mano izquierda y los cortó con la hoz, arrojándolos a continuación al mar. La sangre que fluía de la herida fue a parar a Gaya, la tierra, y dio a luz a las Erinias. El viejo rey Cronos, sabiendo perfectamente que deberá enfrentarse al mismo destino que su propio padre, se come a sus hijos para protegerse de la amenaza que representan para él, pero el hijo oculto se rebela contra él y termina matándole. Cronos es derrocado por el joven Zeus.