CLASE 8 – PARASITOLOGÍA – SEMANA 9 INFESTACIONES/VECTORES – 3ERA PARTE FINAL A. GARRAPATAS. Constituyen el grupo de ácaros comúnmente conocidos como ixódidos. Morfológicamente se asemejan a los otros grupos de ácaros con la excepción de las partes en que se divide su cuerpo ya no se llaman gnatosoma e idiosoma, sino que el primero cambia de nombre, y entonces tenemos el capítulo y el idiosoma. El capítulo a su vez está subdivido por la base (basis capituli) y por las piezas bucales. En las piezas bucales se encuentra una nueva estructura, el hipostoma, que es un conjunto de piezas perforadoras con varios dientecillos curvos, cuya función de fijación para la succión de sangre es indiscutible. Parte de las piezas bucales, como en los ácaros, están los quelíceros y los pedipalpos. A la izquierda, garrapata adulta sin alimentarse, derecha, después de la succión de sangre. En ambas el aparato bucal está muy desarrollado, en particular el hipostoma. El capítulo inicia en la base o basis capituli y se continúa con el conjunto de piezas bucales. En las hembras, ninfas y larvas el idiosoma no cubre todo el dorso, pero en los macho el idiosoma lo recubre por completo. También el idiosoma es conocido como escutelo o escudo dorsal y es el que confiere la dureza a cada familia de garrapatas. Las hembras succionan más sangre pues el escudo, que cubre medio dorso, les permite una succión sin resistencia, no así en los machos, en los que el escudo no les permite una succión de sangre hasta llegar al tamaño que una hembra alcanza cuando se alimenta. Al observar una garrapata, a diferencia de los ácaros productores de sarna, las 8 patas están sumamente desarrolladas. En estas hembras, el idiosoma sólo cubre la mitad de la parte dorsal. ORDEN METASTIGMATA: Dentro de este orden hay 2 familias de importancia en salud pública: Ixodidae y Argasidae, también llamadas garrapatas duras y garrapatas suaves respectivamente. En los argásidos, a diferencia de las demás garrapatas, el capítulo no está muy desarrollado ni mucho menos tan proyectado como en los ixódidos. Dos estructuras que presentan los argásidos pero que no están presentes en los ixódidos son: el camerostoma en la región ventral, cuya función se cree que tiene que ver con la reproducción; y en el 1er par de patas está el órgano de Haller, que es un órgano olfatorio. En los ixódidos hay aberturas espiraculares detrás del cuarto par de coxas, mientras que en los argásidos, las aberturas espiraculares están detrás del tercer par de coxas (coxa: segmento que une la pata al cuerpo, véase Insecta) Garrapata suave. Se distiende exageradamente al alimentarse por la elasticidad tegumentaria. En cada etapa del desarrollo (ninfa, larva, adulto) las garrapatas toman sólo un aspirado de sangre del hospedero. La cantidad de sangre ingerida por el macho está limitada por el escudo, que impide la expansión del cuerpo, y es mucho menor que la que toman las hembras, como ya se comentó, pero aun así, al igual que ocurre en las infestaciones por piojos, pulgas y purrujas, también el macho es epidemiológicamente importante como vector biológico; a diferencia de los mosquitos, en los que sólo la hembra se alimenta de sangre. Estas cantidades limitadas de sangre las utiliza el macho para la espermatogénesis y como fuente de energía para el apareamiento. Una vez fijadas e inseminadas, las hembras utilizan las proteínas de la sangre para la reproducción. Efectos de la picadura de garrapata. Lesión macular extensa. Dermatitis por múltiples picaduras de garrapatas suaves. Característica lesión de una picadura de garrapata transmisora de la Enfermedad de Lyme. Redonda, de más de 5 cm de diámetro con una mácula central. Garrapata dura. Se alimenta pero no se expande como las Ixódidas. Una garrapata dura es muy agresiva en sus hábitos alimenticios. No obstante puede algunas veces pasar adheridas hasta 36 horas a su hospedero sin que éste se entere. Forma severa de la Fiebre Manchada de las Montañas Rocosas, rickettsiosis de alta mortalidad en Costa Rica por el amplio espectro de patologías que hacen con ella diagnósticos diferenciales. Es transmitida por garrapatas. El hipostoma sirve como mecanismo de anclaje eficaz al tejido del hospedero. Además producen una sustancia cementiforme secretada con la saliva. A menos que se tenga cuidado al desalojar la garrapata, el hipostoma se rompe en la piel y produce una reacción hística considerable. Si se aplican algunas gotas de cloroformo o éter en la cabeza de la garrapata, se consigue normalmente que relaje la fijación y puede extraerse fácilmente por tracción perpendicular con pinzas. El aparato digestivo inicia con los quelíceros y pedipalpos, el hipostoma, y en lo sucesivo se ensancha hasta llegar a las glándulas salivales u órganos de Balashov, ya que no son glándulas comunes y corrientes, entre algunas cosas particulares secretan una anticoagulina para que la faringe succione mucha sangre. La faringe es musculosa y efectúa contracciones suctoras tan potentes que la secreción de saliva tiene que ser proporcional, conforme el tiempo transcurre, a la cantidad de saliva ingurgitada, ya que no puede coagular mientras se alimenta pues se bloquearía el mismo conducto faríngeo. No obstante, la alimentación es un proceso que toma tiempo. Por ejemplo, en un sendero montañoso, una persona que no cubra sus extremidades inferiores, puede ser infestado por garrapatas tal que pueden transcurrir de 36 a 72 horas, el hospedero incluso puede bañarse, cambiarse de ropa, y es capaz de no darse cuenta de que tiene una garrapata adherida al cuerpo, según anécdotas y casos relatados por los mismos pacientes, de la misma forma que una mascota persiste con garrapatas adheridas al cuerpo por días. Con la contracción faríngea la sangre pasa al esófago directamente, luego al intestino medio que tiene muchas bolsas ciegas ramificadas o divertículos, sirviendo como órganos de almacenamiento del alimento durante los períodos de ayuno. La infestación por garrapatas es única en su estilo: temporal en algunas especies, permanente en otras, con hospederos intermedios. En las garrapatas duras sólo hay una fase ninfal, pero en las suaves puede haber casi cinco. Las tres fases de las garrapatas “de un solo hospedero” se alimentan del mismo animal. Otras se alimentan en su desarrollo de 2 o 3 fuentes de sangre de distintos animales. La transmisora de la Fiebre Manchada de las Montañas Rocosas (FMMR) es una garrapata de 3 hospederos, incluyendo el humano. Las garrapatas son transmisores responsables (es decir, vectores biológicos) de diversos patógenos humanos, como virus, rickettsias y protozoarios. VECTOR BIOLÓGICO Dermacentor andersoni Amblyoma cajennense Amblyoma maculatum Amblyoma triste Rhipicephalus sanguineus (perros) Rhipicephalus felis (gatos) AGENTE PATÓGENOS Rickettsia rickettsii Rickettsia parkeri Garrapatas duras Rhipicephalus sanguineus Haemaphysalis Amblyoma Rickettsia conorii ENFERMEDAD EN EL HUMANO Fiebre manchada de las montañas rocosas (FMMR): La FMMR es considerada la más severa de las fiebres manchadas, ya que puede ser letal incluso en pacientes jóvenes y previamente sanos. Los casos fatales en general se asocian a ausencia de tratamiento o tratamiento tardío, debido a que no se reconoce la entidad clínica a tiempo. La mortalidad también se vincula con la falta de signos y síntomas considerados característicos de esta infección y la ausencia de historia de contacto con garrapatas. En la era preantibióticos la tasa de mortalidad era del 20-25%, y aún hoy, cuando existen antimicrobianos muy efectivos, la tasa es del 4- 10%; de ahí que la recomendación mundial es considerar siempre una rickettsiosis en caso de fiebre y exantema maculopapular. El tiempo de incubación varía de 3-12 días, con una media de 6-8 días. Un periodo de incubación más corto suele asociarse a infecciones más severas. El cuadro clínico inicia abruptamente con cefalea intensa, mialgias generalizadas, escalofríos, malestar general y fiebre que puede alcanzar 3940º C en los primeros dos días. Estos síntomas inespecíficos pueden ir acompañados de desórdenes digestivos como náusea, vómito, diarrea, anorexia y tos, los cuales con frecuencia confunden el diagnóstico con una enterocolitis, un abdomen agudo o una neumonía. El exantema (rash) aparece en el tercer día después del inicio de los síntomas, como una lesión macular de 1-5mm, y representa el foco de la infección vascular acompañada de vasodilatación. Las lesiones pueden progresar para convertirse en maculopapulares por el edema en el endotelio vascular dañado y desarrollarse en una lesión petequial purpúrica equimótica, necrótica o gangrenosa en las formas severas de la enfermedad. Fiebre botonosa: Fiebre leve o moderada que se caracteriza por una lesión primaria (mancha negra) en el sitio de la picadura. Se trata de una úlcera con centro negro y bordes Garrapatas duras Garrapatas de ganado ovino y caprino. Garrapatas duras y suaves Ornithodoros Coxiella burnettii Borrelia Garrapata suave Dermacentor Rhipicephalus Amblyoma Haemophysalis Ixodes Fransicella tularensis Garrapatas duras Dermacentor Ixodes Virus de la Encefalitis Powasan Género Flavivirus Garrapatas duras Dermacentor Ixodes Haemophysalis Virus de Fiebre Hemorrágica de Omsk (FHO) rojos. De 5 a 10 días después aparecen bruscamente fiebre con escalofríos que duran unos días a 2 semanas. Hacia el cuarto o quinto día surgen en palmas y plantas un exantema de diseminación centrípeta que dura de 6 a 7 días. Fiebre Q: Fiebre de inicio agudo tras un período de incubación de 2 a 3 semanas. Hay escalofríos, cefalea (retroorbicular) debilidad, malestar y sudoración. Tos con neumonitis, dolor torácico que se complica con endocarditis y hepatitis. Fiebre recurrente: Es una enfermedad por espiroquetas sistémica caracterizada por episodios febriles que duran 2 a 9 días y luego desaparecen por unos 2 a 4 días, y luego se repite la crisis. Se producen erupciones petequiales. Tularemia: Es una enfermedad bacteriana zoonótica con diversas manifestaciones clínicas que dependen de la vía de introducción y de la virulencia de la cepa. Numerosos animales salvajes, en especial los conejos, las liebres, las ratas, los castores y algunos animales domésticos. En general, la cepa Jellison A se perpetúa en el ciclo conejogarrapata y es la más virulenta. Puede haber inflamación, ulceración de la piel y ganglios en el sitio de inoculación. Encefalitis clínicamente similar a las transmitidas por mosquitos. Se adquiere por la picadura directa o por el consumo de productos animales como leche no pasteurizada de vacas y cabras infestadas. Fiebre hemorrágica con afectación del SNC que pasa al humano por la picadura de roedores infestados. Género Flavivirus Garrapatas duras Boophilus Rhipicephalus Hyalomma Ixodes Haemophysalis Dermacentor Virus de Fiebre Hemorrágica de Crimea-Congo (FHCC) Género Nairovirus (Bunyaviridae) Garrapatas duras Dermacentor Haemophysalis Virus de la Fiebre por garrapatas del Colorado Garrapatas duras Ixodes dammini Género Orbivirus Borrelia burgdorferi Garrapata dura Fiebre hemorrágica grave de comienzo súbito con fiebre, escalofríos y dolores intensos en extremidades y dolor lumbar. Todo el cuerpo se cubre con erupción fina y hemorragias generalizadas con afectación del SNC. El humano adquiere la infección de la picadura de garrapatas de ganado vacuno y ovino. Estas garrapatas son de 1, 2 y hasta 3 hospederos. Fiebre con mialgias generalizadas intensas de larga evolución (hasta 120 días). El humano adquiere la infección al ser picado por una garrapata proveniente de una rata o ratón infectado. Enfermedad de Lyme: Existen tres etapas de la enfermedad de Lyme: En la etapa 1 se puede presentar una lesión en forma de mancha roja y plana o ligeramente elevada en el sitio de la picadura de la garrapata, a menudo con un área clara en el centro. Esta lesión puede ser bastante grande y expandirse en tamaño. Esta erupción se denomina eritema migrans. Para que corresponda a enfermedad de Lyme la lesión macular debe medir 5 o más cm de diámetro. Sin tratamiento, puede durar 4 semanas o más. Durante la diseminación de la enfermedad se pueden ir presentando los siguientes síntomas y signos conforme avanza: malestar, fatiga, fiebre, cefalalgia, meningitis aséptica, encefalitis, ataxia cerebelosa, neuritis craneal y parálisis facial. Se clasifica dentro de las meningopolineuritis. Las opciones de tratamiento comunes abarcan doxiciclina, ceftriaxona, cefuroxima, amoxicilina, azitromicina. Los analgésicos, como el ibuprofeno, se recetan algunas veces para la rigidez articular. B. MOSCAS PICADORAS: B.1. Tábanos: Es un grupo de insectos incluidos dentro del Orden Díptera. El primer grupo a estudiar se encuentra incluido dentro del Suborden Brachycera y la Familia Tabanidae. Es un grupo grande de moscas cosmopolitas comúnmente conocidas como tábanos o moscas de los caballos. Los adultos en general son moscas grandes y corpulentas, con cabeza grande más ancha que el tórax con ojos compuestos. En los machos se encuentran muy juntos (holópticos), en las hembras están bien separados (dicópticos). Asimismo machos y hembras están adaptados para cortar, con labro-hipofaringe, dos mandíbulas muy desarrolladas con borde en sierra y dos maxilas estiletiformes, es decir en forma de hojas de bisturí. Están adaptadas para volar a grandes velocidades en forma de enjambre (aunque el nombre correcto sería “nube” en la literatura se les sigue denominando enjambre, pero esta palabra se ha propuesto más para referirse a insectos que conviven en comunidad como los que forman colmenas, que a su vez implica cierta idea de “vida en comunidad”) dispuestas a perseguir al vuelo caballos, ganados y toda clase de mamíferos, elefantes, venados, incluido el hombre. El sonido del enjambre usualmente alerta a los animales de oído agudo, lo cuales se disponen a correr en manada debido a que el sonido de las alas de todas ellas puede asemejarse al sonido de los truenos a una distancia no muy lejana. Los que han presenciado este fenómeno súbito lo comparan también con el sonido de un enjambre de abejas o avispas, de una inundación que se aproxima o de una erupción en las cercanías e inclusive sonidos de tipo “retumbos” que llaman mucho la atención, incluyendo el hecho de no saber a ciencia cierta de qué punto cardinal procede el ruido. En el aire y con el viento a su favor, el enjambre o nube de estas moscas alcanza velocidades de hasta 120 km/hora, lo cual es muy difícil de superar sobre todo para los herbívoros ungulados que normalmente son sorprendidos durante un descanso en los pastizales o en las cercanías de fuentes de agua cuando se detienen para beber y no pueden superar la velocidad de la nube de insectos que se acerca extremadamente rápido. El fin principal de estas moscas es alimentarse de la sangre de sus presas, sin que medie la perturbación o irritabilidad. El comportamiento de estas moscas no ha sido completamente estudiado pero se maneja la teoría de que la formación de la nube en persecución obedece a señales internas que les hace levantar el vuelo cuando están hambrientas. Una vez que se alimentan, ellas mismas alzan nuevamente el vuelo y no vuelven a formar el enjambre hasta que, luego de unos cuantos días, de nuevo se activan las señales si ocupan más proteínas sanguíneas para su proseguir su desarrollo, sobre todo para completar la metamorfosis que es holometábola. Estos hechos marcan la diferencia entre el comportamiento defensivo o de dominancia de los himenópteros en que media estrictamente la proyección del aguijón y la subsecuente liberación de feromonas, siendo la caza por alimento lo único que tienen en común. Ambos sexos están adaptados para cazar manadas de lento avance. El problema de Tabanidae es de índole veterinario, pero si el ataque ocurre contra grupos de personas, es de manejo médico. Hasta la fecha se han reportado pocos casos fatales por sofocación, pero en su mayoría predominan situaciones de ataque que pueden resultar desesperantes, ya que los tábanos son sumamente insistentes y la cantidad de insectos que bien pueden cubrir a un individuo no se retirarán hasta que hayan picado, por lo que espantarlos con las manos, ramas o rodar por el suelo son medidas prácticamente inútiles para deshacerse de ellos, como lo hacen las moscas domésticas. Un grupo de tábanos infestantes en una región particular del cuerpo pueden dejar heridas sangrantes confluentes que requieren de suturaciones, antiinflamatorios, analgésicos y antibióticos. El papel como vectores biológicos de estos insectos no ha sido informado hasta la fecha. El otro suborden que debe estudiarse es Cyclorrhapha, Familia Muscidae. En ella encontramos moscas exclusivamente de bosques tropicales y zonas rurales de América Central de los géneros Stomoxys (mosca de los establos) y Haematobia (mosca de los cuernos), pero su comportamiento es menos violento que el de los tábanos y por lo general, los ganaderos saben que huyen del humo y no forman “nubes” propiamente dichas, sino que se desplazan en grupos de unos cuantos individuos. Tábano macho (ojos compuestos muy juntos, holópticos, casi ocupan toda la cabeza), con aparato bucal cortador – perforador bastante desarrollado. Tábano, vista dorsal. Picaduras por tábanos con inflamación local. Ataque regional de varios tábanos que requiere atención médica. Finalmente, integrando la materia vista ya en clase, sólo falta mencionar dos géneros más de moscas que se lanzan sobre sus víctimas con el propósito de picar: a) Las moscas tsé-tsé, del género Glossina sp. que son transmisoras del Tripomastigoto metacíclico de la Enfermedad del Sueño o Tripanosomiasis Africana, causada por los parásitos hematófagos: Trypanosoma brusei gambiense y Trypanosoma brusei rhodesiense. b) Las moscas del género Crhysops sp. transmisoras de la Microfilaria Loa loa endémica en toda la costa occidental del continente africano. Esta filaria produce el alojamiento de la filaria en el globo ocular. Los afectados refieren ver pasar por el campo visual el gusano, que los enceguece temporalmente. C. MOSCAS NO PICADORAS PRODUCTORAS DE MIASIS (GUSANERAS). Las Miasis son infestaciones de órganos, tejidos o cavidades del hombre o animales vertebrados dadas por LARVAS de moscas. Las Miasis pueden ser primarias, cuando las fases larvarias realizan una infestación temporal obligatoria en el hospedero, y secundarias cuando hacen parasitismo facultativo o accidental, caso en que por ejemplo son ingeridas en alimentos sin que se dé un establecimiento real de la larva dentro del tracto digestivo. Pueden ser además furunculares, cuando las larvas se alojan generalmente de forma individual en forúnculos producidos en la piel, como es el caso de Dermatobia hominis o “gusaneras”, generalmente vistas cuando ocurre infestación de heridas abiertas, siendo en estos casos muchas las formas larvarias que se localizan dentro de la piel produciendo la Miasis o gusanera. Algunos ejemplos de gusaneras son las producidas por larvas de las especies Cochliomyia hominivorax y Cochliomyia macellaria. C.1. MIASIS PRIMARIAS. Dermatobia hominis: es una mosca relativamente grande perteneciente a la familia Cuterebridae. Mide unos 4 cm de longitud. Posee cabeza grande y amarillenta con un aparato bucal atrofiado. El tórax es de color café, y el abdomen de color azul metálico. LARVA: son blanquecinas y dejan ver lateralmente y principalmente en la región anterior gran cantidad de espinas esclerosadas y oscuras. Larva de Dermatobia hominis. Observe el color blanco característico de la especie y los anillos de espinas esclerosadas. Esta larva proviene de un huevecillo que la mosca depositó en la piel del hospedero y consiguió alojarse en alguna herida, raspón o microfisura hasta alcanzar el tamaño mostrado. La función de las espinas es evitar ser sacada, ya que todos los anillos contienen espinas que crecen en sentido contrario a la dirección de salida, de tal forma que retirar una larva de estas sólo haría que las espinas se claven en el tejido blando en el momento de retirarla pues están dispuestas en la dirección opuesta a la dirección de salida del forúnculo. De esta forma, no es conveniente introducir ningún artefacto en el orificio que se ve en la superficie de la piel para tratar de jalarla hacia arriba. El paciente sentirá un intenso dolor (10/10) y puede no salir completa, generando infecciones bacterianas secundarias. Cada larva se debe retirar por un método quirúrgico que asegure la remoción completa de la larva. Con las herramientas dadas en esta clase, cualquier futuro profesional la puede reconocer por su color, sus anillos y su gran tamaño. También puede enviarse a laboratorio de microbiología o patología clínica para su respetiva identificación. Igual a la anterior pero en un estadío larvario más avanzado. Sin embargo la morfología se mantiene: color blanquecino con anillos reforzados con espinas quitinosas oscuras, que hacen el diagnóstico de la Miasis correspondiente. En el lenguaje popular, también son llamadas tórsalos y tradicionalmente hay muchos “remedios” caseros para extraerlos sin que se claven las espinas durante la retirada de la larva, como lo es la costumbre de poner un pedazo de carne encima del orificio del forúnculo. Según esta práctica, la larva se moverá de la piel del hospedero hacia el trozo de carne sin eyectar las espinas cuando va saliendo en busca de oxígeno y cavará un túnel en el señuelo, con lo cual se cree, saldría sin dolor. Posteriormente el orificio que deja en el paciente se esteriliza con un trozo de metal incandescente. Por eso es necesario, educar a la población acerca de la necesidad de visitar el centro médico más cercano para que reciba un tratamiento de calidad ante cualquier orificio con enrojecimiento y tumoración dolorosa que presente en la piel. Muchos pacientes van a referir sentir que algo se mueve en el interior de la lesión, y así inicia la investigación epidemiológica durante la entrevista para orientar el caso. Adulto de Dermatobia hominis: en la cabeza el aparato bucal está atrofiado en su mayor parte. El tórax es café y el abdomen azul metálico. Forúnculo de una Miasis típica. La abertura central es mantenida por la larva para poder respirar. Cochliomyia hominivorax: Mosca perteneciente a los califóridos. Este grupo de moscas los hemos vistos en días soleados. Se caracterizan porque son de colores metálicos vistosos y por lo general se colocan varios especímenes en una fila y se mantiene volando en un mismo lugar haciendo un leve zumbido, de vez en cuando bajan o suben pero casi siempre se mantiene todas volando a un mismo nivel. A diferencia del adulto de Dermatobia hominis estas moscas tienen cabeza, tórax y abdomen de resplandecientes colores metálicos. LARVA: Tienen 3 estadíos larvales. La L3 mide 2 cm de largo, más pequeña que Dermatobia, resaltan mucho lo que son los cordones traqueales fuertemente pigmentados y oscuros, y en el extremo que asoma a la salida del forúnculo tiene 10 o más aberturas o hendiduras que son los espiráculos respiratorio rectos y paralelos entre sí. Observe las diferencias entre las especies de Miasis. En esta larva de Cochliomyia hominivorax no aparecen anillos con espinas negras esclerosadas, pero las flechas señalan los 2 cordones traqueales pigmentados que se ven a través del tegumento a simple vista, esa característica es diagnóstica de esta Miasis. En cuanto a tamaño y grosor, la larva es más pequeña que la clásica larva de Dermatobia hominis. Mosca califórida adulta, completamente revestida de tonos metálicos. Usualmente se las encuentra volando en fila y casi estáticas reflejando la luz del sol al amanecer. En un acercamiento al microscopio se pueden ver las hendiduras paralelas entre sí que forman los espiráculos respiratorios. Si están presentes, la larva corresponde a la de un califórido, es un criterio diagnóstico.