Grupo Astronomía ASTRONOMÍA DE POSICIÓN. Por: Fernando Franco Blü. En los comienzos, la imagen que se hacía el hombre del cielo estrellado, era como un telón que contenía a todas las estrellas, de forma esférica cubriendo todo el límite de nuestra visión. Esta interpretación del cielo observado a simple vista, es la que responde a nuestra natural intuición. Además es la visión que tenían también los sabios antiguos, sobre el cielo, como la visión Aristotélica de una esfera que contenía a todas las estrellas, postulado de igual forma hasta los tiempos de Copérnico. En la actualidad, se sabe muy bien que las estrellas no están contenidas en una esfera que rodea la Tierra, sino que están todas a muy diferentes distancias. El suponer que todas estuvieran contenidas en una esfera, significa que sus distancias a nosotros es para todas, la misma, cosa, que dista mucho de ser la realidad. Horizonte de Observador: La sensación que tenemos al observar el horizonte, es una línea recta que abarca toda la inmensidad del panorama que estamos observando. Si lográramos distanciarnos suficientemente desde la superficie de la Tierra hacia arriba, veríamos que se empieza a notar la curvatura de la Tierra. Más; en la realidad del Grupo de Astronomía Usach – Por Fernando Franco Blü. 1 panorama que habitualmente observamos, sólo vemos desde la superficie, una línea recta, siempre que el terreno sea plano, como cuando observamos el océano, pues en nuestro país el horizonte se ve delineado por los cortes de los cerros de ambas cordilleras que nos rodean. Ahora, si consideramos el corte de esa esfera imaginaria que rodea a nuestro planeta y que contiene a las estrellas en dos partes: una, la que queda sobre nuestra cabeza a partir de la línea del horizonte y dejamos la otra semiesfera bajo esta, podemos establecer que todas las estrellas que tenemos a la vista son las que se encuentran sobre el horizonte del observador y las que se encuentren bajo el horizonte, serán imposible verlas, pues nos tapará la superficie de la Tierra. Cabe destacar, que la línea de corte para separar ambas semiesferas, de esta que denominaremos Esfera celeste, podemos practicarla pasando dicha línea por el centro de la Tierra, como también podemos pasarla en forma tangente a la superficie de la Tierra, en el punto donde nos encontremos, pues la distancia desde el centro de la Tierra al punto donde nos encontremos, comparada con la distancia a las estrellas, es insignificante. De modo que las estrellas, que se encuentren sobre el horizonte serán visibles al observador, como A que es visible a un observador situado en el horizonte 1, y las estrellas B y C, son invisibles para él. En cambio, un observador situado en el horizonte 2 pude observar las estrellas A y B, sin embargo le resulta imposible poder ver la estrella situada en la posición C. Así, según el punto de la Tierra donde nos encontremos, las estrellas que podemos ver, estarán limitadas por esta línea del horizonte. Grupo de Astronomía Usach – Por Fernando Franco Blü. 2 Cenit y Nadir: Hay dos puntos relevantes de la esfera celeste que necesariamente debemos considerar: uno de ellos es el llamado cenit, que es el punto en la esfera celeste, que queda ubicado exactamente sobre nuestra cabeza. Se puede bajar una perpendicular desde este punto, según una plomada y caería exactamente en el lugar donde estamos parados. Este punto ocupa el centro de la semiesfera celeste que determinamos según nuestra ubicación. Por otro lado, el Nadir, es el punto que queda determinado en posición opuesta al anterior, es decir, se encontraría bajo nuestros pies, en la posición contrapuesta al cenit. Se forma de la prolongación de la línea que une el Cenit, nuestros pies, y pasa hacia abajo, encontrándose al otro lado de la esfera celeste. ¿Cómo influye la ubicación que tengamos en el sitio de observación, en relación a la trayectoria aparente que tendrán las estrellas en el cielo? La observación que podamos realizar desde algún punto de la tierra, de nuestro cielo estrellado, es esencialmente diferente si observamos con atención. La trayectoria que seguirán los astros, será diferente para una persona situada en el polo, para una situada en el ecuador y para una situada como nosotros, en una latitud intermedia. Nos dedicaremos a estudiar ahora, como serían estas trayectorias aparentes en la esfera celeste para estos tres observadores en que hemos separado los posibles caminos o trayectorias de las estrellas. Grupo de Astronomía Usach – Por Fernando Franco Blü. 3 a) Para una persona situada en el Polo: Una persona que esté situada en el polo, observará que el cenit coincide con el llamado Polo Sur celeste (Visto desde nuestro hemisferio), por lo tanto, la línea que baja desde el cenit , hasta los pies del observador, coincide exactamente con el eje de rotación de la Tierra. De modo, que la tierra al rotar, hará que un punto de la esfera celeste, describa en esta esfera, una circunferencia, paralela a la línea del horizonte. Si suponemos que la estrella se aleja un cierto ángulo , desde la línea que une el cenit con nuestros pies, y la Luna, se aleja desde ese mismo eje, un ángulo , veremos a ambos astros, describir una circunferencia completa en la esfera celeste. Estas circunferencias serán concéntricas con el cenit como centro. Obviamente, para un observador situado en el polo, resulta imposible ver todas las estrellas que se encuentran bajo su horizonte, es decir, puede ver sólo la mitad del cielo. Grupo de Astronomía Usach – Por Fernando Franco Blü. 4 b) Para una persona, situada en el Ecuador: Debemos considerar a este observador, como una persona privilegiada, ya que debido al movimiento de rotación de esta, puede tener acceso a todo el cielo a través del año. De hecho, pueblo precolombinos existentes en Ecuador tenían un bóxervatorio, justo en la línea del Ecuador, par tener acceso a todo el cielo. El nombre de esta ciudad era CATEQUILLA. De hecho, el cenit, coincidirá en todo momento con el Ecuador Terrestre, proyectado hacia la esfera celeste, es decir, el Ecuador celeste. Así que un observador situado en el Ecuador, verá que las estrellas siguen trayectorias que describen exactamente una semicircunferencia, marcando ángulos rectos en su salida y puesta, es decir con la línea del horizonte. De esta manera, el observador situado en esta latitud, puede observar todo el cielo estrellado a medida que va transcurriendo el año. c) Para una persona situada en una latitud intermedia como nosotros: Para una persona situada en una latitud como la nuestra, que se puede llamar intermedia entre el polo y el ecuador, la trayectoria que ve este observador de las estrellas, debido al plano del Ecuador inclinado en que está situado, es una trayectoria inclinada. La trayectoria que les puede apreciar a las estrellas, es un Grupo de Astronomía Usach – Por Fernando Franco Blü. 5 arco de circunferencia que estará tan inclinado como sea el valor de la latitud en la que se encuentre. Por supuesto que esta es la perspectiva más común, que tenemos los habitantes de la Tierra, acerca de las trayectorias que presentan las estrellas, debido a que la población se sitúa más bien en su mayoría en latitudes intermedias entre el polo y el ecuador. Una estrella o cualquier punto en el cielo, describirá entonces un arco que estará inclinado, dependiendo de la latitud donde nos encontremos. Estrellas Circumpolares: En la figura de más arriba, queda de manifiesto que la estrella ahí representada no se va a poner bajo el horizonte. Es decir, va a describir siempre una circunferencia sobre el horizonte, de modo que se puede ver a toda hora, siempre que las condiciones de ausencia de luz lo permitan. Así, también podemos encontrar, estrellas Grupo de Astronomía Usach – Por Fernando Franco Blü. 6 que describen circunferencias, bajo el horizonte del observador. En este último caso también se llaman circumpolares, pero del otro hemisferio. Estas, nunca es posible verlas desde el hemisferio del observador y por lo tanto para él, no salen nunca. ¿Cómo se mueve el Sol en la esfera Celeste? Baste decir respecto del movimiento de traslación de la tierra alrededor del Sol, que éste, como cualquier otra estrella, describe un arco de circunferencia en el cielo, cuya trayectoria quedará también definida por la latitud en que se encuentre nuestro observador. La tierra en su movimiento anual en órbita alrededor del Sol, que es una trayectoria muy cercana a una circunferencia, permitirá en distintos periodos del año ver al Sol seguir aparentemente, diversas trayectorias por el cielo. Si supusiéramos que el eje de nuestro planeta, coincide con la perpendicular al plano de la órbita de la Tierra en torno al Sol, y que determina el llamado plano que contiene a la Eclíptica (Trayectoria aparente del Sol en la esfera Celeste), nos encontraríamos que el Sol, se vería desde los puntos indicados en el principio de este capítulo en: a) Polos: El Sol describiría círculos concéntricos y paralelos al plano de su órbita . Grupo de Astronomía Usach – Por Fernando Franco Blü. 7 El Sol, se vería desde el Ecuador, describiendo un arco perpendicular a la línea del horizonte en todo momento. Para una latitud intermedia como la nuestra, la posición del Sol obedecería a unos arcos de circunferencia inclinados, respecto de la horizontal, alcanzando en algún periodo el Sol, su máxima altura, y otro en que es mínima esta altura. Culturas antiguas, ya ocupaban esta regularidad del Sol, incluso para construir grandes observatorios. El Ecuador Celeste: Este es uno de los círculos máximos que se hacen necesario definir, para luego referir a él, unos sistemas de Coordenadas. Es tan simple como afirmar que es el Ecuador terrestre, proyectado hacia la esfera celeste, hasta que la corte. Lo importante, es que este círculo máximo llamado Ecuador Celeste, coincide con la línea del horizonte en los polos, es vertical para una persona situada en el Ecuador y tiene una inclinación intermedia, para una persona que viva en un lugar de latitud intermedia Grupo de Astronomía Usach – Por Fernando Franco Blü. 8 Es importante destacar, que siempre el ángulo formado entre el círculo del ecuador celeste y el cenit, corresponde a la latitud del lugar, donde se encuentre el observador. La Eclíptica: Este es otro de los círculos máximos que tienen mucha importancia para la posterior definición de coordenadas. Se puede definir como la trayectoria aparente del Sol en la esfera celeste. Pero; en realidad es la Tierra la que se mueve en su órbita, para definir esa aparente trayectoria del Sol. Comencemos primero, haciendo las cosas más fáciles y quitándole el ángulo de inclinación del eje terrestre, para que sea este eje, perpendicular a la órbita de la Tierra. Si fuera así, tal como muestra la figura de arriba, el eje de visión desde la Tierra, generaría la línea media, producto de las sucesivas posiciones del Sol en la esfera celeste. Esta línea, formada sumando todas las posiciones consecutivas del Sol en un año, recibe el nombre de Eclíptica. Pero para hacer el problema más realista, consideremos ahora, el ángulo de inclinación que tiene la Tierra, respecto de un eje perpendicular a su órbita alrededor del Sol, Grupo de Astronomía Usach – Por Fernando Franco Blü. 9 de aproximadamente 23,45º. También recordemos que ese ángulo es fijo respecto de toda una órbita alrededor del Sol. Si consideramos la Tierra en dos de sus posiciones respecto del Sol, a través del año, podemos apreciar que en el punto 1, (de la figura de abajo), la tierra se encuentra orientada en la posición opuesta al Sol. Entonces, el Sol queda ubicado por debajo del Ecuador Celeste y si lo proyectamos por el cielo, quedará ubicado en la posición 1’. En la posición 2, la Tierra está inclinada hacia el Sol. En tal caso, la eclíptica queda sobre el Ecuador celeste. Estos dos círculos máximos, tienes dos puntos de intersección, uno de los cuales se denomina Punto Aries, o Punto vernal, o Equinoccio Vernal, que corresponde al origen del sistema de coordenadas Ecuatoriales. Grupo de Astronomía Usach – Por Fernando Franco Blü. 10 Las Constelaciones en la esfera Celeste: De acuerdo a las creencias que datan de muchos cientos de años atrás, las estrellas es suponían a igual distancia, contenidas en una esfera, tal como dijimos al comienzo, más; por razones de índole práctico, se mantiene esa configuración con el objeto de ubicar más fácilmente esta asociación de estrellas en el cielo y objetos interesantes en su sector. Es así, como un conjunto de estrellas, que rodean a la trayectoria aparente del Sol en la esfera celeste, constituyen los 12 sectores donde se reparten las constelaciones del zodíaco. Dependiendo de la época del año en que se encuentre un hemisferio, se darán consecutivamente, las posibilidades de ver, en distintas épocas del año, variadas estrellas y objetos. Grupo de Astronomía Usach – Por Fernando Franco Blü. 11