Reunión Dirección Nacional de Extensión Tema – Servicios Docente Asistenciales Fecha: Junio 04 de 2008 Asistentes: Directora Nacional de Extensión – Edna Bonilla Jefe División de Extensión: Claudia Fonseca Docente Asociado Hospital Universitario: Doctor Juan Manuel Arteaga Coordinadora Educación Continua: Paula Castro Luego de presentar la matriz recopilada como resultado de varias reuniones se priorizó que el problema que se refiere a la no remuneración de los docentes que prestan los servicios docente asistenciales es el más coyuntural, y el propósito de la reunión es ver la posición del Hospital Universitario al respecto. El Doctor Arteaga se refiere a la falta de remuneración como algo grave, un docente esta tiempo completo y dedicación exclusiva en los servicios docente asistenciales y se suma que sea funcionario público trabajando para dos entidades simultáneamente por un solo un pago. El que se le bonifique por extensión o se pague con otro salario por la Universidad no se ha reglamentado. Para el caso específico del Hospital Universitario se necesitarán aproximadamente 600 médicos para atender 273 camas, así serán 4 funcionarios por cama con un 70% de asistencial y un 30% administrativo, de esta forma no se alcanzaría a cubrir con los docentes de la facultad solamente, es evidente la contratación inminente de personal externo. Para esto se plantean dos opciones: 1. Crear unidades de gestión de negocios: El Hospital es una fundación de carácter privado sin ánimo de lucro. Cualquiera que sea su razón jurídica, esta institución de naturaleza privada esta condicionada a solicitar personal externo. Por ejemplo: Hay 7 internistas en la facultad y se necesitan 19, los 7 hacen una concesión y contratan la prestación de Servicios Docente Asistenciales y una gerencia que vigila. Los docentes reciben bonificación de la misma sociedad, no del hospital. Lo mejor es repartir el trabajo entre docentes porque se debe responder por la atención de los pacientes y la labor docente. El repartir o asignar tareas entre médicos de una misma especialización requiere una rotación. La sociedad será contratista o concesionario. La contratación se hará a medida que los servicios lo demanden. De esta forma no se fortalece la Extensión por ningún motivo. Para fortalecer Extensión el hospital paga los servicios médicos de los docentes aparte, desde extensión el problema no tiene mucha perspectiva. 2. Construir una cooperativa de trabajo que venda sus servicios al hospital. El Hospital Universitario no se viabiliza teniendo algún vínculo con la Universidad, sumado a los sobrecostos por ser Universitarios (+15% en servicios públicos, insumos y la instancia), cada estudiante vale $5.500 por alumno – diario, lo que significa que la Universidad deberá pagar un monto de $180 millones mensuales, y los Servicios Docente Asistenciales lo solventarían, además son lógicas diferentes en Gerencia a las de la Universidad. Así, la Universidad gerencia los servicios docentes y los administrativos, porque el hospital ve al docente como contratista. El docente es contratado por la Universidad pero su sitio de trabajo es el hospital, vinculado como persona jurídica en la “asociación”. Por otro lado, se debe tener en cuanta que en una “consulta” no se puede desligar las labores de docencia, investigación y extensión, para persuadir su “triple labor” se debe bonificar. Si las unidades de gestión se agrupan como corporaciones de docentes de la Universidad Nacional, entra extensión. De otra manera como el hospital no va a ser una dependencia de la Universidad, extensión se esta metiendo en una figura jurídica que no aplica. El problema con extensión radica en los overheads y topes, por cómo están reglamentados y al hospital no le conviene porque él se mueve como un sistema de libertad moderada. Y la desventaja con las Políticas de Extensión es que introduce una inequidad en costos por especialidad y funciones. La negociación a través de la Universidad preservaría el espíritu universitario, pero el hospital requerirá más personal, liberándose de una carga administrativa gigante. La Universidad supervisará que cumplan las unidades con sus jornadas de trabajo. (Ver Resolución de Rectoría del 2002 – Fondo de Equidad). La única opción para extensión sería que fuera la Universidad la que ofrezca esas unidades, si no se hace así, no se hace viable. Pero realmente que le genera beneficio a las dos partes? - Un overhead del 20% por presencia de estudiantes. El overhead debería ser para la Universidad porque hace servicios docente asistenciales y son médicos con dos sueldos, pero para buscar compromiso se dejará claro en el contrato. - Las contraprestaciones en calidad de servicio y conocimiento. - La universidad evaluaría por medio del reporte del hospital Para el tema de Enfermería se ha pensado que sea personal de planta, puesto que el salario fuera de la universidad es muy bajo y no recompensa el esfuerzo. Solo ciertas actividades serían contratadas como externas y bonificadas con bajo monto. En el tema de Residentes, serán los médicos hospitalarios que trabajan por turnos. Se plantea también la posibilidad de que al hospital le da lo mismo contratar los servicios de la Universidad y el overhead podría mantenerse pensando en que la contraprestación del hospital para el docente es que su triple labor no implicaría desplazamiento y tiene toda la infraestructura a la mano. Compromiso: 1. Evaluar que ventaja tiene que al docente lo contrate el Hospital por la Universidad y no el Hospital por la Unidad de Gestión. Reunión Decanatura de Medicina Tema – Servicios Docente Asistenciales Fecha: Junio 06 de 2008 Asistentes: Decano de Medicina – Dr. Carlos Julio Pacheco Director Unidad de Gestión de Proyectos de Medicina – Pío Iván Gómez Asesora Vicerrectoría de Sede – Juanita Montoya Secretario Académico de Medicina – Álvaro Casallas Gómez Oficina Jurídica de Sede. Jefe División de Extensión: Claudia Fonseca Coordinadora Educación Continua: Paula Castro El Profesor Gómez hace un reporte de su revisión de otros modelos, a lo que anota que en el caso del Hospital de San Ignacio el hospital contrata parcialmente a los docentes, bajo un modelo de contratación exclusiva. Por una contratación directa, el docente es contratado por una suma irrisoria y se bonifica por el Hospital. En el caso del Hospital de Antioquia, un alto porcentaje de docentes están vinculados a asociaciones con las cuales contratan con el hospital. Una opción sería entonces que el Hospital Universitario tenga una planta operativa baja y comprar servicios, la universidad por medio de extensión los vendería. Pero ninguna de los dos modelos es viable porque por rentabilidad es mejor para los docentes trabajar en el hospital tiempo completo y su prioridad serían las asociaciones, lo que produciría descuido en sus actividades académicas y/o baja de calidad. El Profesor Casallas muestra su experiencia en el Hospital de San Juan, con tendencia a las asociaciones, los estudiantes y residentes tuvieron acompañamiento todo el tiempo. Por otro lado, si los docentes no reciben una remuneración con una figura como Extensión, no tendrá el docente un estímulo equitativo. La ponderación se haría con respecto a cada modalidad, por departamento. Los cargos administrativos y los departamentos deben llegar a equidades y autocontrol de grupos, la idea es no contratar docentes sino los servicios que ellos presten. La Ingeniera Fonseca anota que la facultad ofrece servicios bajo tarifas de mercado pero el hospital quitaría un porcentaje para la bonificación y a donde llegan las transferencias?, se debe buscar una equidad en la entrada de facturación. Así las ventajas para los docentes están en su triple labor y el no desplazamiento y en lo económico se referiría a las facturaciones y transferencias. El Doctor Pacheco interviene diciendo que el centro está en que la figura no es manejarlo por Extensión, es difícil equilibrar tarifas y topes porque los niveles son diferentes y el descuento de extensión alteraría el tope del mercado. No es factible el descuento por extensión y la Universidad debe mirar desde la minucia de los servicios sin transferencia y liberar los topes. Por otro lado en el tema de los horarios: el profesor tendría que cumplir un horario y la universidad no tiene mecanismos de control para hacer obligatoria su asistencia; esto debido a que los docentes no sienten su obligación docente asistencial, en esa medida el horario se convierte en un gran problema de manejo de personal. Ahora bien, el sistema de cooperativas es el deseable y así sería más factible controlarlo. Debería ser una prestación de servicios por grupo, de lo contrario intervendrán intereses económicos personales y no se pueden permitir los desfases de mercado dentro de la Universidad (pensarlo así es un error). El hospital debe ser autónomo y pagar, y que la docencia sea una actividad anexa, porque el problema radica en querer separar horarios y diferenciar entre docentes y médicos; el control de la Universidad sobre eso es muy precario y eso no va a cambiar. Manejarlo por departamentos con modelos de subcontratación del Hospital a la Universidad (Extensión), donde el contrato se haga con las especificidades necesarias y las facultades determine el pago interno mediante SAR. Además la figura de Gerente o Director debe tener suficiente poder para intervenir en los tiempos y su cumplimiento, porque los docentes no respetan horarios. El Profesor Gómez dice que de seguir ese modelo sugerido de asociaciones se esta sacrificando la docencia en la Universidad y se pierde la medición de calidad de la misma. Además que no se esta contando con los intereses de los docentes, si cada uno tiene un consultorio fuera no estarían interesados en un proyecto de hospital así. Compromiso: Pasar la propuesta a los decanos para que ellos digan los pro y contra del modelo discutido y cuáles serían sus alcances.