Algunas ideas acerca del uso de los CAS para la enseñanza del Cálculo Diferencial en varias variables Gerardo Rodríguez Universidad de Salamanca 1. Introducción Durante los últimos 20 años, los diferentes CAS (Computer Algebra System) se han utilizado en España como un complemento docente para la enseñanza de las matemáticas en las escuelas de ingeniería. Sin embargo, en general, este uso no se ha visto acompañado de los necesarios cambios en los métodos de enseñanza para obtener mayores beneficios de estas herramientas. Lo que sucede habitualmente es que los profesores usan el ordenador para hacer lo mismo que hacen con lápiz y papel. El verdadero propósito de los CAS (es decir, ofrecer una herramienta para hacer y aprender matemáticas) es reemplazado por una situación en la que los estudiantes pueden convertirse en expertos en el uso de un determinado CAS pero sin entender las matemáticas que están haciendo. El propósito de este capítulo es mostrar un uso más integrado y armónico de un CAS (Maple, Mathematica o cualquier otro) dentro de nuestra práctica docente cotidiana. El ejemplo elegido para mostrar las posibilidades de uso de un CAS es un curso de Cálculo Diferencial en Varias Variables. La propuesta es el resultado de nuestra experiencia como profesores de matemáticas en las escuelas de ingeniería de diferentes universidades españolas donde usamos Mathematica o Maple. 2. El punto de partida En las Escuelas de Ingeniería, el curso de Cálculo Diferencial en Varias Variables suele explicarse tras un cuatrimestre de Cálculo en una variable. Los contenidos habituales de un curso de estas características son: Nociones básicas en R2 y R3, Límites, Derivadas parciales y direccionales, Funciones Homogéneas, Regla de la cadena, Derivación de funciones implícitas, Funciones Inversas, Fórmula de Taylor, Máximos y mínimos y método de los Multiplicadores de Lagrange. Habitualmente se destinan a este apartado 30 horas de clase (teóricas y prácticas) y se considera que el número de horas de trabajo del alumno debe ser el mismo. Los objetivos principales de esta material son conseguir que los alumnos sean capaces de entender razonablemente los conceptos impartidos, que adquieran un manejo básico de los cálculos que aparecen en las diferentes situaciones prácticas que se pueden presentar dentro de los distintas especialidades de ingeniería y, además, que conozcan cuándo y cómo deben usar un CAS para resolver un determinado problema matemático. Finalmente, es preciso decir que los alumnos a los que se dirige el curso ya poseen un conocimiento básico del CAS que se va a utilizar (Mathematica o Maple, según la Universidad). Finally, it should be stressed that students should gain a basic knowledge of the CAS to be used (Mathematica or Maple, depending on the University). Además, dada la pérdida de horas en el tiempo dedicado a la enseñanza de estos contenidos, es necesario un cambio metodológico si se quieren alcanzar los objetivos expuestos anteriormente. 3. El material Para llevar a cabo nuestra propuesta metodológica, hemos elaborado el material docente adecuado para un curso de Cálculo en Varias Variables. Este material consiste en un libro de texto en el que se incluyen de manera sistemática los conceptos teóricos utilizados y una colección de problemas resueltos y propuestos (véase García, A., López, A., Romero, S., Rodríguez, G., de la Villa, A., 2002), junto con un CD en el que se incluyen problemas resueltos con la ayuda de un CAS. Una descripción del material contenido en el CD referente al Cálculo Diferencial en Varias Variables se presenta más adelante a la vez que se explica la estrategia seguida en su creación. Hay que hacer constar que el CD contiene dos directorios que desarrollan los mismos contenidos: unos desarrollados con Maple y el otro con Mathematica. De acuerdo con esto, los ejemplos que siguen utilizan uno de los dos sistemas. El material docente elaborado puede ser usado por el profesor en función de las necesidades docentes. Puede ser utilizado como material de clase o como una guía para el trabajo personal de los alumnos, de acuerdo con las características de los estudiantes y el tiempo real disponible para desarrollar los diferentes apartados. Además, este material viene a paliar la escasez de material docente para la enseñanza del Cálculo en varias variables, al menos en español, si se compara con la gran variedad de libros existentes para la enseñanza del Cálculo en Una Variable. 4. La propuesta metodológica La propuesta metodológica se articula mediante la integración de clases tradicionales de teoría y problemas (con la introducción de los diferentes conceptos y la realización de ejercicios de pizarra) junto con las clases de laboratorio en las que se usará Mathematica para reforzar los conceptos teóricos y resolver problemas. Por eso presentamos una propuesta metodológica consistente en que los estudiantes dediquen aproximadamente la tercera parte del tiempo de trabajo en la asignatura (tanto en horas de clase como de trabajo personal) al uso reglado de Mathematica, siguiendo las instrucciones del profesor, de acuerdo con los siguientes objetivos: 4.1. Mejorar la visualización La posibilidad de obtener, de modo inmediato, la representación gráfica de una superficie permite abordar el estudio de una función de dos variables de una forma más intuitiva, haciendo conjeturas sobre las propiedades de la función, extremos, acotación, etc. Así, las siguientes figuras, obtenidas con una instrucción elemental de Maple, ilustran conceptos como el de la no derivabilidad y los extremos relativos. También las capacidades gráficas pueden ser utilizadas por el profesor para realizar presentaciones que ayuden a la introducción de diferentes conceptos matemáticos. No obstante, hay que señalar que, con frecuencia, se necesita un gran número de instrucciones para la realización de gráficas “brillantes” y el profesor debe valorar el coste de su realización. 4.2. Experimentación La posibilidad de realizar cálculos complicados con rapidez y precisión permite introducir nuevas estrategias en la resolución de problemas, contrastando las técnicas numéricas, analíticas y gráficas. Así, por ejemplo, con un CAS es sencillo poder conocer las variables que pueden ser elegidas como dependientes en el teorema de la función implícita. Para ello, supuesto que se verifican el resto de las hipótesis de dicho teorema, sólo es necesario comprobar si el determinante de la matriz jacobiana es nulo o no, lo cual se reduce a un cálculo automático por muy complicado que sea el sistema de funciones implícitas. También, para poder tener una primera impresión acerca de la existencia de límite de una función se puede hacer una gráfica o bien construir una tabla de valores de dicha función barriendo puntos cercanos al límite. Por ejemplo, para estudiar la existencia del límite de la función f ( x, y) xy en el x y2 2 origen de coordenadas, la instrucción de Mathematica TableForm[Table[f[a + j h, b + k h], {j, 1, n}, {k, 1, n}]] con a=b=0, h=0.001, k=0.001, n=5 genera la siguiente tabla: 0.5 0.4 0.3 0.235294 0.192308 0.4 0.5 0.461538 0.4 0.344828 0.3 0.461538 0.5 0.48 0.441176 0.235294 0.4 0.48 0.5 0.487805 0.192308 0.344828 0.441176 0.487805 0.5 La dispersión de los datos nos permite sospechar que el límite no existe, cosa que podemos probar usando la estrategia de encontrar dos subconjuntos sobre los que el límite es diferente, por ejemplo, y = x e y =2x. Como parte de la estrategia docente, ante cualquier problema debemos incentivar que el alumno experimente en sentido general. Hay que evitar la pereza en el uso de diferentes ensayos, ya que los procesos mecánicos los realiza el ordenador. 4.3. Liberación del trabajo mecánico. No debemos renunciar a que los estudiantes dominen técnicas básicas de cálculo. Una vez que se ha comprobado que el alumno ha asimilado los conceptos y es capaz de hacer manualmente “operaciones” en casos de cálculos no excesivamente complicados, puede entonces usar un CAS como calculadora avanzada, para cálculos laboriosos. Así, por ejemplo, el cálculo de derivadas parciales de funciones compuestas sólo exige hallar las matrices jacobianas de las funciones componentes multiplicándolas posteriormente en el orden adecuado. La obtención de la diferencial de la función compuesta de dos funciones f : R 5 R 6 y g : R 6 R 4 con funciones componentes que no sean lineales, por ejemplo, exige un ímprobo esfuerzo “a mano”, pero se puede automatizar usando un CAS. Creemos que un CAS, entendido como “calculadora avanzada” puede ser usado en la mayoría de los tópicos de cálculo diferencial. También es innegable su utilidad en cálculos intermedios, relativos a conceptos que se han analizado con anterioridad y que son necesarios en una etapa posterior del aprendizaje. Por ejemplo, las hipótesis de existencia de función inversa pueden ser analizadas usando un CAS, pues son cálculos rutinarios los que involucran la comprobación de dichas hipótesis. De esta manera, la utilización de un CAS permite ahorrar el tiempo que se dedica a cálculos rutinarios, dedicándolo a modelar problemas que involucran situaciones reales tratando de interpretar, en cada paso del proceso, los resultados obtenidos. Como ejemplo, consideremos los siguientes problemas: (extraídos del libro García, A., López, A., Romero, S., Rodríguez, G., de la Villa, A., 2002): La temperatura de una placa en un punto cualquiera (x,y) viene dada por la función T(x,y) = 25 + 4x2 – 4xy+y2. Una alarma térmica, situada sobre los puntos de la circunferencia x2 + y2 = 25 se dispara a temperaturas superiores a 180ºC o inferiores a 20ºC. ¿Se disparará la alarma? Para resolver este problema, los estudiantes necesitan optimizar T(x,y) con la restricción x2 + y2 = 25 . Podemos usar por tanto el método de los multiplicadores de Lagrange. Realizando los cálculos con el ordenador se obtienen los puntos {-2 5 , 5 }, {2 5 ,- 5 },{- 5 ,-2 5 }, { 5 ,2 5 } como posibles soluciones. Los estudiantes deben evaluar la función T en esos puntos para encontrar los valores extremos e interpretar el resultado. Puesto que el máximo de esos valores es menor que 180 y el mínimo es mayor que 20, debemos concluir que no se disparará la alarma. Además, las capacidades de cálculo simbólico de un CAS permiten trabajar de forma eficiente con expresiones formales, como las relativas a las propiedades de los operadores diferenciales. Por ejemplo, es trivial, usando Mathematica, probar que div(grad f )= f. Después de haber cargado el paquete Calculus`VectorAnalysis` la entrada Div[Grad[f[x,y,z],Cartesian[x,y,z]]]Laplacian[f[x,y,z],Cartesian[x,y,z]] devuelve 0 como salida. Es posible también establecer propiedades generales en un problema real, como muestra el siguiente ejemplo (tomado de Marsden, J. and Weinstein, A., 1985): El volumen V, presión P, y temperatura T de un gas están relacionados por la ecuación Van der Waals P RT a 2 , donde a, b, R son positivos. R es la constante universal V b V de los gases, b representa las moléculas de gas en estado líquido (b<<V) y a representa V2 la presión interna producida por la interacción de las moléculas. Demostrar que 1 P V T . P V T Los estudiantes, usando el teorema de las funciones implícitas, pueden probar que cualquiera par de variables V, P, o T pueden ser consideradas como variables 1 independientes y comprobar que T P V P V T En este caso, el CAS se utiliza para comprobar las hipótesis del teorema de las funciones implícitas y para realizar los cálculos simbólicos necesarios. 4.4. Distinción entre procesos algorítmicos y no algorítmicos. La utilización de un CASno es la panacea que permite resolver todos los problemas de contenido matemático que se nos presentan. En este sentido, es importante que los estudiantes distingan los procesos que son algorítmicos de los que no lo son. Cuando un proceso se puede “algoritmizar”, debemos incentivar al alumno a que realice un procedimiento sencillo consistente en traducir al lenguaje del CAS el proceso matemático. Dentro de los procesos algorítmicos es conveniente distinguir dos tipos: Algoritmos con respuesta segura. En este tipo de algoritmos siempre se consigue información. Por ejemplo, puede ser muy sencillo para un alumno hacer un procedimiento con Maple que devuelva el plano tangente en un punto a una superficie definida implícitamente por una ecuación del tipo F(x,y,z)=0. Basta conocer la definición y escribir las instrucciones para hallar el vector gradiente y la ecuación del plano tangente. Una posible solución es: > Tang_Plane:=proc(F,a,b,c) local gr; gr:=subs({x=a,y=b,z=c}, linalg[grad](F(x,y,z),[x,y,z])); simplify(gr[1]*(x-a)+gr[2]*(y-b)+gr[3]*(z-c)=0) end: Para usar este procedimiento en problemas posteriores, el estudiante deberá previamente verificar que se satisfacen las hipótesis del teorema de la función implícita. También puede mejorar el procedimiento, incluyendo, en el interior del mismo, las instrucciones necesarias para ver si se verifican dichas hipótesis y haciendo que devuelva un mensaje de error en caso contrario. Así mismo, puede añadir una instrucción para que se dibuje la superficie junto con el plano tangente. La tendencia general del estudiante es ir mejorando el procedimiento hasta conseguir que sea lo más completo posible. Algoritmos que pueden presentar dificultades de cálculo. En este tipo de algoritmos la respuesta viene condicionada a procesos intermedios que pueden ser irrealizables por problemas tales como la imposibilidad de resolución de una ecuación, requerimientos excesivos del sistema, etc. Así por ejemplo, para el cálculo de extremos condicionados, el algoritmo de los multiplicadores de Lagrange, requiere en uno de sus apartados la resolución de un sistema de ecuaciones, lo cual no siempre está garantizado. De hecho, es inmediato poner ejemplos en los que Mathematica no puede resolver o no encuentra todas las posibles soluciones del sistema planteado. También hay procesos no algorítmicos, como por ejemplo el cálculo de límites. Para estos procesos, el uso interactivo de un CAS ha de ser controlado. Podemos diseñar alternativas utilizando criterios negativos, como el cálculo de límites reiterados o límites según ciertos subconjuntos, o algún criterio positivo como puede ser el paso a polares, que debe ser usado cuidadosamente (véase el apartado siguiente). Así la función f(x,y), después del cambio a polares x = a + r cos , y = b + r sin , se transforma en la función F(r, ). Si esta función tiene límite uniforme en la variable cuando r0, entonces existe el límite de f(x,y) en el punto (a, b). 4.5. Fomentar el espíritu crítico. Es indudable que un CAS facilita enormemente la tarea de comprobación de resultados, dada la facilidad para usar métodos alternativos. Pero los estudiantes no deben tener fe ciega en los resultados, intermedios y finales, que la máquina ofrece, sino que deben mantener en todo momento el control de la situación en el sentido de que dichos resultados deben ser compatibles con el contexto del problema que se esté resolviendo en cada caso. Conviene señalar que un uso poco cuidadoso de un CAS puede dar lugar a errores con los que el estudiante esté poco habituado, como los derivados de asignaciones previas en una misma sesión de trabajo. Por otra parte, las limitaciones que presenta el CAS pueden ayudarnos a fomentar en los estudiantes la capacidad crítica, presentando situaciones de cálculo en las que la respuesta del CAS no es la esperada. Por ejemplo, la salida esperada de la instrucción de Maple > mtaylor(sin(x*y)/(x*y), [x=0, y=0],10); debe ser 1 x2 y2 x4 y4 x2 y2 pero lo que proporciona es 1 . 6 120 6 Además el “poco cuidado” que con frecuencia tienen los estudiantes con los cálculos formales se puede ver agravado por la utilización de un CAS. En este sentido, hay que señalar que nunca se combate lo suficiente la fe ciega que el estudiante genera en los resultados que ofrece el programa sin más. Lamentablemente, con demasiada frecuencia, el estudiante atribuye al ordenador un argumento de autoridad que éste no posee. Por ejemplo, un CAS puede obtener un resultado erróneo por un fallo de programa o por considerar condiciones sobre las variables que no tiene presentes el usuario (véase Alonso, F., García, F., Hoya, S., Rodríguez, G., de la Villa, A., 2001). Por ejemplo si al calcular el límite de la siguiente función en el punto (1,1) 3 x- 3x 2 x3 - 4 y 6 y 2 - 4 y 3 y 4 f(x, y) -2 3 x - 3 x 2 x3 4 y - 6 y 2 4 y 3 -y4 Se realiza el cambio a coordenadas polares mencionado anteriormente, donde a=b=1, el resultado que se obtiene es F (r , ) cos( ) 3 r sin ( ) 4 . cos( ) 3 r sin ( ) 4 Mathematica y Maple obtienen como resultado 1 cuando r 0. Esto implica que el límite no depende de , pero eso es claramente falso, puesto que si =/2, entonces el límite es –1. En consecuencia el límite doble no existe. Es preciso, por consiguiente, hacer ver a nuestros alumnos la necesidad de controlar los resultados. 5. Conclusiones El propósito de este artículo es proponer una forma de usar el software matemático como una herramienta pedagógica. La propuesta se ha centrado en el uso de de los CAS en un curso de Cálculo Diferencial en Varias Variables, proponiendo diferentes posibilidades: utilización de las capacidades gráficas de los CAS, la posibilidad de experimentación se ve incrementada notablemente, se produce una importante liberación del trabajo mecánico, permite diferenciar claramente los procesos algorítmicos de los que no lo son y permite fomentar el espíritu crítico acerca de los resultados obtenidos. Hay que señalar, además, que es necesario, en determinadas ocasiones, un cambio de mentalidad en los profesores que imparten la asignatura. Es evidente que el paquete de software elegido no es importante para el uso propuesto y que las mismas ideas y estrategias pueden llevarse a cabo usando otros paquetes de Cálculo Simbólico. Las posibilidades de uso de las nuevas tecnologías no se limitan a la enseñanza presencial. El material elaborado puede ser utilizado también en escenarios virtuales. En ese caso el material elaborado debe ser complementado con el diseño de los oportunos tutoriales que faciliten su uso. REFERENCIAS - Alonso, F., García, A., García, F., Hoya, S., Rodríguez, G., de la Villa, A , 2001, "Some unexpected results using Computer Algebra Systems ", The International Journal of Computer Algebra in Mathematics Education, 8, 239-252. - García, A., López, A., Romero, S., Rodríguez, G., de la Villa, A., 2002, Cálculo II. Teoría y problemas de funciones de varias variables. Clagsa. - Marsden, J. And Weinstein, A., 1985, Calculus III. Springer-Verlag.