Universidad Nacional de Luján Toxicología de Alimentos LA VITAMINA A Integrantes: Del Castello, Leandro Deza, Ignacio Lignazzi, Yanel Mesa, Sabrina Nievas, Cecilia Profesora: Dra. Marta A. Scuteri 27 de junio de 2007 Introducción La vitamina A, conocida como anti-infecciosa o antixeroftálmica, es esencial para el crecimiento de ciertos tejidos desempeñando un rol específico en el ciclo visual. Los egipcios ya conocían que los tópicos de extractos de hígado curaban la ceguera nocturna y ciertos trastornos visuales. Sin embargo pasaron muchos años hasta que a principios del siglo XX se comprobara la existencia de un factor liposoluble, que resultaba esencial para el crecimiento, mantenimiento de la vida y prevención de la xeroftalmia en la rata. Posteriormente se identificaron dos compuestos con “actividad de vitamina A”: algunos de los pigmentos coloreados de los vegetales (carotenoides) y un principio amarillento presente en el hígado de animales (vitamina A). El cocimiento aumenta la biodisponibilidad de carotenos, pero cuando es excesivo la disminuye notablemente. La biodisponibilidad también aumenta con la presencia de vitamina E y otros antioxidantes. Casi el 90% de la vitamina A del cuerpo se almacena en el hígado. El resto se deposita en la grasa, pulmones y riñones. Nomenclatura y estructura química La vitamina A, es un alcohol poliénico isoprenoide que se conoce también con otros nombres como retinol, axeroftol, biosterol, vitamina antixeroftálmica y vitamina antiinfecciosa. La denominación se aplica genéricamente a todos los compuestos derivados de la beta-ionona, que poseen cualitativamente la actividad biológica del retinol. Este es un alcohol isoprenoide con cinco dobles enlaces conjugados todos de configuración trans. Retinol Del retinol derivan los esteres de retinol (forma en la que se deposita) y, por oxidación el retinal y el ácido retinoico. Ácido Retinoico Los isómeros cis son inestables, y pueden encontrarse en muy pequeñas cantidades en los alimentos y en el organismo; sin embargo, el 11-cis-retinol juega un papel fundamental en el proceso visual. 11-Cis-Retinal Para la actividad biológica es esencial la existencia de un anillo ciclo-hexano con un dimetilo en C1, un metilo en C5, y un doble enlace entre C5 y C6. La introducción de modificaciones en el anillo produce, en general, disminución de la actividad biológica. En los alimentos de origen animal, la vitamina A se presenta, en su mayor proporción, en la parte lipídica como retinol esterificado con el ácido palmítico. En los vegetales y en algunos organismos marinos, encontramos los carotenoides y carotenales, como el ß-caroteno, pigmento amarillo constituido por dos moléculas de retinal unidas en el extremo aldehído de sus cadenas carbonadas. Desde el punto de vista nutricional estos compuestos deben incluirse con la denominación de “provitaminas A” ya que tienen la capacidad de originar retinol en el organismo; para lo cual la molécula debe contener al menos un anillo de beta-ionona con las mismas sustituciones que el retinol. ß-Caroteno Debido al metabolismo ineficiente, el ß-caroteno tiene sólo un sexto del potencial biológico comparado con el del retinol. El licopeno es también un carotenoide que se encuentra en el tomate y la fruta madura y no se convierte en vitamina A pero si tiene función antioxidante. Existe otra categoría de retinoides, de síntesis, que se relacionan estructuralmente con el retinol y que, por sus efectos terapéuticos sobre la diferenciación celular, son utilizados en dermatología y oncología, pero no sustituyen a la vit A en las funciones nutricionales. Absorción y metabolismo La vitamina A preformada contenida en alimentos de origen animal y los carotenoides provitamina A contenidos en fuentes de origen vegetal son liberados de la proteína en el estómago. El retinol esterificado es emulsionado en el intestino por las sales biliares, y posteriormente hidrolizado por la lipasa pancreática. El retinol se absorbe en la fase micelar. Su absorción depende, por lo tanto, de la presencia y absorción de los lípidos y en condiciones normales es elevada (80-90%). Sin embargo está disminuida como consecuencia de cualquier trastorno de las secreciones pancreática o biliar, cuando existen alteraciones de la mucosa intestinal, en la malnutrición proteico-calórica o por la presencia de parásitos. En las células intestinales la mayor parte del retinol es rápidamente esterificado con ácido palmítico, siendo así incorporado a los quilomicrones, y, por vía linfática, pasa al torrente sanguíneo. Los remanentes de los quilomicrones son captados por las células del parénquima hepático, donde el retinol liberado (por una hidrolasa) puede seguir dos caminos: asi no hay deficiencia o llega en grandes cantidades, los ésteres de retinilo se incorporan a las células “estrelladas” en los lipocitos y, uniéndose a una glicoproteína, forman los principales depósitos del organismo. Cuando la capacidad de almacenamiento de estas células se ve excedida los ésteres son volcados a la circulación, siendo los responsables de los fenómenos de toxicidad. bsi los tejidos periféricos lo requieren es transportado a través del sistema circulatorio unido a una proteína específica (Proteína de enlace del retinol o RBP por sus siglas en inglés), sintetizada en hígado. Esta unión tiene la característica de una alfa-globulina y se une a la pre-albúmina para alargar su vida media ya que esto disminuye su filtración glomerular y el catabolismo a nivel renal. La PER es una proteína lábil, sensible a la deficiencia proteica y a la deficiencia de zinc; por ello, la movilización de retinol del hígado depende no sólo de las necesidades del organismo, sino de un correcto aporte de proteínas y zinc. Por consiguiente, en ambas deficiencias nutricionales pueden aparecer trastornos de deficiencia de vit A, aunque su ingesta sea adecuada. Los carotenos se absorben también en la fase micelar, en menor proporción que el retinol (40-50%) por ser menos polares. En la mucosa intestinal aquellos carotenos cuya molécula contiene al menos un ciclohexano con sustituciones similares a las del retinol son transformados, por acción de una dioxigenasa específica, en retinal y luego, por acción de una deshidrogenasa, en retinol, que es esterificado y absorbido por vía linfática. La absorción de los carotenos es muy ineficiente en los alimentos crudos y cuando el contenido de lípidos de la dieta es bajo. La eficacia de conversión en retinol, que es muy variable y en general baja, depende no sólo de la estructura de los carotenoides, sino también de la ingesta proteica. Por ello, cuando la ingesta de carotenos es muy elevada, los que no han sido transformados en retinol en la mucosa intestinal, son absorbidos inalterados unidos a las lipo-proteínas, y se depositan en piel y mucosas a las que confieren un típico color amarillento (HIPERCAROTENOSIS). En la membrana celular, el retinol es tomado por receptores (receptores RBP). Dentro de las células hay proteínas celulares que se ligan con los retinoides (conocidas como CRBP por su sigla en inglés) que dirigen a los retinoides hacia enzimas específicas y hacia el núcleo de la célula. Recientemente se ha descubierto que en el núcleo de las células hay dos conjuntos de tres receptores nucleares (conocidos como RAR y RXR por su sigla en inglés). Estos receptores nucleares son activados por una forma acídica de retinol como el ácido retinoico (RA por sus siglas en inglés).En las células de los órganos y tejidos de todo el organismo el RA es la forma activa de la vitamina A. Se ha demostrado que los receptores nucleares RAR y RXR activan a numerosos genes. Estos receptores actúan como hormonas, tales como los esteroides y las hormonas tiroideas, con las cuales están vinculadas estrechamente. Es a través de este mecanismo que la vitamina A ejerce sus funciones, con la única excepción de la visión. En los animales normales el ácido retinoico constituye una muy pequeña parte de la vitamina A corporal. Es un producto de oxidación irreversible del retinol y el responsable de algunas de sus funciones. El administrado por vía oral es absorbido por vía porta, y circula unido a la albúmina. No se almacena en hígado y es rápidamente metabolizado. Tanto el retinol como el ácido retinoico se eliminan, en parte, como glucurónidos, por vía biliar (20-30%); una pequeña cantidad luego de sufrir modificaciones en la cadena lateral (oxidaciones), origina una gran variedad de compuestos no bien identificados que se eliminan por la orina en pequeñas cantidades. Funciones de la vitamina A La vitamina A es necesaria para el crecimiento normal, la reproducción, el desarrollo fetal normal, la respuesta inmune y para mantener las células de las mucosas, de los epitelios, de la piel y para el funcionamiento de todos los tejidos, incluyendo el esmalte de los dientes. La mayoría de estas funciones dependen, directa o indirectamente, de la diferenciación celular. A través de otro mecanismo mucho más conocido, cumple una función fisiológica fundamental en el ciclo visual. Independientemente de su actividad provitamina A, los carotenoides y su vez la vitamina A poseen un efecto antioxidante protegiendo contra la acción deletérea de los radicales libres, sobre todo a bajas tensiones de oxígeno. Esta propiedad explica sus acciones anticancerígenas a nivel de ciertos tejidos, como el pulmonar y en la prevención del envejecimiento celular y Existe interrelación entre vitamina A y metabolismo proteico. En la deficiencia proteica está alterada la movilización hepática de retinol; a su vez, en la deficiencia de vitamina A está alterado el metabolismo proteico, con disminución del crecimiento, de la fagocitosis y aumento de la susceptibilidad a infecciones. Función en el ciclo visual La retina humana contiene dos sistemas foto-receptores; uno de ellos, especialmente sensible a la luz de baja intensidad, está constituido por bastoncillos; el otro, constituido por conos recibe luz de alta intensidad y los colores. Los pigmentos visuales que componen ambos sistemas son dos cromo-proteínas, rodopsina e iodopsina respectivamente, que contienen una parte proteica diferente, pero el mismo grupo prostético, el 11-cis-retinal. En la retina, el retinol todo-trans que llega por vía circulatoria, es oxidado por un sistema de deshidrogenasas Zn-dependiente a retinal todo-trans que por acción de una isomerasa, se convierte en 11-cis-retinal (compuesto activo que se combina con la proteína opsina formando la rodopsina). Por acción de los rayos de luz de baja intensidad, la rodopsina de los bastoncillos se descompone en 11-trans-retinal y metarodopsina; ésta última interacciona con una proteína, la transductina, promoviendo la hidrólisis del cGMP y la hiperpolarización de la membrana debido a la entrada de ones sodio, lo cual origina una diferencia de potencial que excita el nervio óptico, originando los impulsos que son recogidos en el cerebro como estímulos visuales. El trans retinal es nuevamente isomerizado a 11-cis-retinal, lo cual permite la regeneración de la rodopsina y continuidad del ciclo. Sin embrago, una parte del retinal se oxida irreversiblemente, siendo necesario un aporte permanente de retinol para evitar el deterioro del proceso de visión crepuscular. Por ello, la deficiencia de vitamina A se manifiesta precozmente por la incapacidad de distinguir los objetos con baja intensidad de luz. Este deterioro funcional (hemeralopatía o ceguera nocturna) se lo utiliza como prueba clínica de deficiencia (test de adaptación a oscuridad). El proceso bioquímico que se produce en los conos es idéntico, pero la iodopsina presenta menor sensibilidad a la luz, por lo cual su alteración no es tan evidente. Diferenciación celular Su mecanismo de acción en el proceso de diferenciación celular se postuló por evidencias en el núcleo de muchas células de receptores para el ácido retinoico y más tarde para el ácido 9-cis-retinoico, que regulan la transcripción genética. Cuando hay deficiencia de vitamina A, las células que secretan mucus en muchos tejidos epiteliales son reemplazadas por células productoras de queratina. Este fenómeno es responsable de la xerosis y la queratinización de la conjuntiva y la córnea, y también de otros tejidos. Respuesta inmunológica Los tejidos epiteliales sanos constituyen una barrera para las infecciones, sin embargo, cuando hay deficiencia de vitamina A, estas células se dañan facilitando la invasión por parte de los agentes patógenos (por ejemplo infecciones respiratorias). La vitamina A parece participar más en los aspectos de mediación celular que en los aspectos humorales de la respuesta inmunológica. Reproducción Estudios efectuados en animales demuestran la participación de la vitamina A en la espermatogénesis en el hombre y en la prevención de necrosis placentaria y absorción fetal en la mujer. Hematopoyesis En la hematopoyesis existe un vínculo entre el hierro la vitamina A. La anemia por deficiencia de hierro responde mejor si se agrega vitamina A al tratamiento con hierro. Aún no se comprende bien el mecanismo de acción. La vit A es necesaria para la liberación de hierro de depósitos, pudiendo causar la deficiencia una anemia ferropénica resistente a la terapia con hierro. Crecimiento Se sabe que la vitamina A participa en el crecimiento normal del sistema músculo esquelético. Varios estudios en terreno han demostrado que la deficiencia severa de vitamina A disminuye el crecimiento de los niños. Comunicación celular Tanto los retinoides como los carotenoides, regulan la comunicación intercelular a través de su participación en la síntesis de una proteína (conexina), que forma canales (conexones) en la membrana citoplasmática. Estos regularían el crecimiento celular, y serían responsables de la acción anticancerígena a nivel de tejidos como la tráquea y la glándula mamaria. Alimentos aportadores El retinol, en mayor parte esterificado, se halla únicamente en la parte lipídica de los alimentos de origen animal: lácteos enteros, hígado, huevo y pescados grasos. El aceite de hígado de bacalao es la fuente más rica en vitamina A, aunque estrictamente no puede ser considerado un alimento. El contenido en los alimentos animales es sumamente variable y depende de la dieta consumida. La vitamina A se elimina en el descremado, por lo cual es recomendable restituir a la leche o producto derivado su contenido original por medio del enriquecimiento. En el caso de Argentina la mayor parte de las leches fluidas comerciales, y reconstituidas de leche en polvo, contienen 200 UI/ml, cantidad que permite con dos vasos diarios de leche cubrir el 50% de la ingesta recomendada. Los vegetales contienen sólo provitaminas o carotenos. Las hortalizas de hoja verde (espinacas, radicheta, lechuga), brócoli, espárragos, coles de Bruselas, zanahoria, zapallo, calabaza, batata, y frutos amarillos y rojos (tomate, ají, damasco, durazno, melón, papaya, mango, mamón) son los principales aportadores. Existen numerosos carotenos que no poseen actividad provitamínica A (por ejemplo, el licopeno del tomate) aunque sí actúan como “neutralizantes” de radicales libres. Una de las fuentes vegetales más rica en alfa y beta carotenos la constituye el aceite de palma, típico de zonas tropicales (Brasil) donde paradójicamente existe una elevada prevalencia de deficiencia de vit A. Tanto el retinol como los carotenoides son sensibles a la oxidación, acelerándose ésta por la presencia de luz y compuestos derivados de la oxidación de lípidos. Por ello la cantidad presente en los alimentos varía en función del tiempo y forma de conservación. Ingestas diarias recomendadas Las cifras de ingesta recomendada y el contenido en los alimentos y medicamentos se han expresado, y aún se expresan, en Unidades Internacionales (UI). La UI se estableció en base a la mínima cantidad que producía respuesta biológica en individuos o animales deficientes, cuando no se contaba con métodos químicos de sensibilidad adecuada para su cuantificación. Actualmente se aconseja expresar en Equivalentes de Actividad de Retinol (EqAR). 1UI = 0,3µg retinol 1 EqAR = 1µg retinol = 12µg β-caroteno = 24µg α-caroteno = 24µg β-criptoxantina El criterio usado para establecer la IDR es el depósito adecuado en hígado. La dosis diaria necesaria de vitamina varía según la edad, el sexo de la persona y la etapa de la vida en la que se encuentra la persona. Estos son los niveles de la asignación diaria recomendada para la ingestión oral de la vitamina A con el fin de evitar las deficiencias. Además se adjuntan los niveles máximos de ingesta por debajo de los cuales no existe riesgo de toxicidad crónica. Edad Lactantes 0-6 meses 7-12 meses Niños(años) 1-3 4-8 Varones 9-13 14-18 >19 Mujeres 9-13 14-18 >19 Embarazo <18 19-50 Lactancia <18 19-50 IDR de Vit A (EqAR) Nivel máx de Ingesta tolerable (µg/día)# 400* 500* 600 600 300 400 600 900 600 600 900 1700 2800 3000 600 700 700 1700 2800 3000 750 770 2800 3000 1200 1300 2800 3000 * Ingesta adecuada, de acuerdo a composición de leche materna # Sólo como vitamina A preformada Hipovitaminosis Cómo detectar la deficiencia de vitamina A Como se puede observar en el diagrama siguiente, hay diferentes grados de deficiencia de vitamina A. Existen diferentes exámenes para detectar las diferentes etapas del proceso. Todos miden el estado nutricional de vitamina A en el organismo o lo que generalmente se denomina el nivel de vitamina A. La medición de la ingesta alimentaria de vitamina A durante un período de tiempo dado, habitualmente por día, no mide el nivel pero entrega un índice general apropiado en una población que señala si hay o no un problema de deficiencia de vitamina A. Lesiones oculares de la deficiencia de vitamina A (xeroftalmia) En la época en que la atención estaba centrada en la enfermedad ocular debido a la deficiencia de vitamina A (xeroftalmia), se describieron las diferentes etapas del daño ocular y se eligieron algunas de éstas para ser utilizadas en estudios y encuestas sobre el problema. Utilizando algunos de estos signos oculares, la OMS estableció algunos criterios para diagnosticar un problema de xeroftalmia que pudiera constituir un problema de salud pública. Evaluación de la deficiencia subclínica de vitamina A Sólo con una excepción, estos exámenes son bioquímicos y necesitan equipos de laboratorio caros y sofisticados. La excepción es la técnica histológica llamada citología de impresión conjuntival conocida como CIC por su sigla en inglés. Este examen se basa en el hecho de que en cierta medida la conjuntiva se torna xerótica (seca) y queratinizada antes de llegar a la xerosis etapa X1A. Un simple microscopio de luz, tinturas de laboratorio y bandas de acetato de celulosa para obtener la muestra, son todos los materiales que se necesitan. A pesar de que al principio la prueba demostró ser muy prometedora, se ha encontrado que no se pueden estandarizar los resultados e incluso en manos experimentadas y haciéndole modificaciones no se ha adoptado el examen en forma generalizada. El examen bioquímico que mide el retinol sérico es la prueba que ha sido usada en forma más extensa. Con técnicas como la cromatografía líquida de alta resolución (conocida como HPLC por su sigla en inglés) se pueden obtener estimaciones bastante exactas. Sin embargo, el nivel de retinol sérico no refleja realmente los cambios del nivel de vitamina A porque está en equilibrio con las reservas hepáticas y de algunos otros órganos. El retinol sérico no disminuye en forma apreciable hasta que las reservas del organismo se encuentran prácticamente agotadas. A pesar de esto, se ha encontrado que los valores del retinol sérico de grandes grupos de población son un índice confiable del nivel general de vitamina A y son especialmente útiles para comparar a una población con otra. Actualmente es un hecho ampliamente aceptado que en la presencia de inflamación, infección o trauma, la reacción de la fase aguda produce la caída del retinol sérico, en algunos casos en forma severa. Durante esta fase el retinol sérico no refleja el nivel de vitamina A del organismo. La RBP sérica es más fácil de medir que el retinol sérico y su uso se está generalizando. Sin embargo, también disminuye en la reacción de la fase aguda. Se ha observado que el retinol de la leche materna es útil para evaluar el nivel de vitamina A de la nodriza y podría ser valioso para comparar diferentes grupos. Tiene la ventaja en relación con otros exámenes bioquímicos de no necesitar muestras de sangre. Las pruebas de respuesta relativa a una dosis (RDR) y la respuesta modificada relativa a una dosis (MRDR) evalúan indirectamente el nivel de reservas de vitamina A en el hígado, lo que bajo la mayoría de los condiciones son un mejor reflejo del nivel de vitamina A que el retinol sérico. Estas pruebas se usan como pruebas de investigación, al igual que el examen de dilución de isótopo estable de aplicación reciente. Enfermedades oculares debidas a deficiencia de vitamina A Xeroftalmia El término xeroftalmia se usa para incluir todos los signos y síntomas que afectan al ojo y que se pueden atribuir a la deficiencia de vitamina A. En general, el listado se hace en el orden de aparición de los signos y síntomas a medida que aumenta la intensidad de la deficiencia. Ceguera nocturna Como se vio anteriormente los bastoncillos de la retina necesitan vitamina A para cumplir su función de visión nocturna. Existen instrumentos para probar la función de los bastoncillos, pero requieren de la cooperación del individuo y no son apropiados para usar en niños pequeños, en quienes la deficiencia de vitamina A es común. En terreno se usa un método simple para obtener una idea del nivel de vitamina A de una comunidad. En áreas en que la deficiencia de vitamina A es común existen una o más frases en el idioma local para la incapacidad de ver bien en la noche. Esta información y otras preguntas sobre la visión nocturna de un niño se formulan en un cuestionario corto. Xerosis conjuntival En casos extremos de sequedad, engrosamiento, y plegamiento de la conjuntiva este cuadro es evidente. Sin embargo, los casos en que estos signos son menos severos son más comunes y es más difícil asegurar si la conjuntiva está anormal. Por consiguiente, se decidió excluir este signo en las evaluaciones en terreno. Desgraciadamente, aún se usa algunas veces en algunos estudios y los resultados no son confiables. Mancha de Bitot La lesión consiste en un apilamiento local de material queratinizado en la superficie de la conjuntiva. Normalmente está presente en el lado temporal (externo) de la conjuntiva y en el área normalmente no cubierta por los unta párpados. La mancha de Bitot es rara en lactantes y el tipo que responde bien al tratamiento con vitamina A es el que se observa más comúnmente en preescolares mayores. Después de esa edad, en niños mayores y adultos, las manchas de Bitot habitualmente no se deben a deficiencia de vitamina A, por lo que no deberían ser usadas como indicadores de deficiencia de esta vitamina. Xerosis de la córnea Esto significa el estado de sequedad de la córnea al igual que la sequedad de la conjuntiva. Esta etapa de nebulosidad en sí es breve e infrecuente. El tratamiento oportuno con vitamina A en esta etapa curará completamente la lesión del ojo. Queratomalacia Esta es la etapa final de la xeroftalmia y producirá la disolución o destrucción parcial o extensa o total de la córnea. Habitualmente compromete a los dos ojos pero el compromiso no es necesariamente igual en ambos ojos. La ceguera es inevitable y tiene una alta mortalidad. En cualquier comunidad la queratomalacia es muy poco frecuente y casi siempre son los niños pequeños los afectados. Deformación cicatrizal de la córnea La córnea puede ser dañada por lesiones y muchos tipos de infecciones al igual que por la xeroftalmia. En los sobrevivientes de queratomalacia pueden quedar cicatrices de tamaño variable en una o ambas córneas. Habitualmente las cicatrices están ubicadas en la parte central inferior de la córnea. Cicatrices bilaterales de la córnea en un niño anémico y en una posición de las “6 horas”. Estas lesiones inactivas son más comunes que la queratomalacia activa y se pueden usar en los estudios teniendo cuidado. No todos los signos oculares aparecen necesariamente en el orden en que se han entregado y la queratomalacia en los niños muy pequeños puede aparecer rápidamente sin evidencia alguna de xerosis. El fondo xeroftálmico es muy raro y no es útil para los estudios. Malformaciones congénitas Estudios realizados en diferentes especies animales han demostrado que tanto la deficiencia como el exceso de vitamina A durante las etapas iniciales de la gestación pueden producir malformaciones congénitas en diferentes sistemas del organismo. En contraste con esto, en los seres humanos no hay evidencia concluyente de que las malformaciones del feto se puedan deber a falta o exceso de vitamina A. No obstante, se restringe la cantidad de vitamina A que se puede administrar en forma segura durante el embarazo y la lactancia. Deficiencia secundaria de vitamina A La deficiencia secundaria o endógena de vitamina A ocurre no por falta de vitamina en la dieta sino debido a la falla de uno de los muchos pasos de su utilización por parte del organismo. El siguiente Cuadro muestra cómo se puede producir este tipo de deficiencia. Afortunadamente en la mayoría de los casos esta deficiencia aparece en forma más bien lenta y generalmente no avanza más allá de la etapa de ceguera nocturna o manchas de Bitot, momento en que todavía el tratamiento es eficaz. Sin embargo, el tratamiento debe mantenerse durante toda la vida salvo que la persona padezca alguna enfermedad subyacente que se pueda curar. Cuadro: Causas secundarias o endógenas de deficiencia de vitamina A Se han observado otro tipo de enfermedades relacionadas con la deficiencia como pueden ser: Queratinización de las mucosas que recubren vías respiratorias, digestivas y urinarias, de la piel y del epitelio de los ojos, fenómeno que reduce la función de barrera de estas membranas como protectoras del cuerpo contra infecciones, por lo tanto la carencia de vitamina A aumenta la susceptibilidad a infecciones bacterianas, virales o parasitarias Incrementa la probabilidad de sufrir dolencias en las articulaciones ya que dificulta la regeneración de los huesos. También puede aparecer sensibilidad a infecciones como el sarampión que suele relacionarse con mala absorción, desnutrición importante crónica y pérdida de peso por una enfermedad debilitante como el cáncer. Pérdida del apetito, inhibición del crecimiento, anormalidades esqueléticas, queratinización de las yemas gustativas y pérdida del sentido del gusto. Alteraciones cutáneas, como la hiperqueratosis folicular, donde la piel se torna seca, áspera y escamosa, se la llama “piel de sapo” o “carne de ganso”. Al principio pueden afectarse muslos y antebrazos pero en etapas avanzadas se afecta todo el cuerpo. La deficiencia de vitamina A aumenta la susceptibilidad al cáncer. Los epitelios involucrados son: el respiratorio, la glándula mamaria, la vejiga urinaria y la piel. Cuando se aporta el requerimiento de vitamina A, la progresión de las células premalignas a células de características malignas invasoras se hace más lenta, se detiene y hasta se revierte en animales de experimentación. Acciones que se realizan para controlar la deficiencia de vitamina A Se están realizando tres tipos principales de intervenciones. Se ha investigado y puesto en práctica cada una de ellas durante las últimas décadas en muchas partes del mundo. Cada una tiene sus características particulares, sus ventajas y desventajas. Con frecuencia se está usando más de una intervención a la vez. Además, se debe recordar que las comunidades humanas no son como los animales de laboratorio, capaces de un control estricto. Hay muchas variables desconocidas e incontrolables. Por consiguiente, no se puede atribuir el mejoramiento o el deterioro del nivel de vitamina A directa o exclusivamente a una intervención. Modificación de la Dieta La gran mayoría de las poblaciones del mundo vive en un medio que es capaz de satisfacer todos sus requerimientos nutricionales, incluidos los de vitamina A, sin necesidad de suplementación alguna. En el caso de la vitamina A, el conocimiento de sus fuentes y el ordenamiento de la vida familiar deberían asegurar un nivel normal de vitamina A. Por ejemplo, los huertos familiares o de las escuelas no sólo pueden satisfacer las necesidades de vitamina A de la familia, sino que también pueden contribuir a elevar el estatus de las mujeres. Tales programas son difíciles de poner en marcha y mantener. La duda que ha surgido recientemente acerca de la biodisponibilidad de los carotenoides provitamina A contenidos en las hojas de los vegetales verdes y otras fuentes sugiere que es posible que se necesite algo de vitamina A preformada de origen animal. Recientemente se logró modificar el contenido de -caroteno del arroz y se están realizando grandes esfuerzos para poner este “arroz dorado” a disposición de la población más extensa posible. Fortificación Agregar un nutriente a un alimento implica que una proporción significativa de una población es incapaz de obtener sus requerimientos diarios sólo de los alimentos que consume Evidencia reciente sugiere que éste es perfectamente el caso en muchas comunidades del mundo en desarrollo. Los alimentos que se usan en países en vías de desarrollo que pueden ser fortificados comprenden trigo, arroz y otros granos, té, productos lácteos, margarina, aceites comestibles, formulas alimentarias y productos especiales. También se están agregando otros micronutrientes como el hierro y el zinc. Para iniciar y mantener un programa de fortificación exitoso se requiere una gran cantidad de cooperación. Varios estudios han demostrado que en el marco de una investigación se puede mejorar significativamente el nivel de vitamina A de una población completa. Suplementación Para evitar los trastornos causadas por un consumo deficiente de vitamina A, se realizan diferentes técnicas de suplementación. Las modalidades son: Restauración: recompensar las pérdidas de vitaminas sufridas por el alimento en su proceso de elaboración. Enriquecimiento: añadir cierta cantidad de vitaminas a un alimento que ya las contiene, hasta cantidades superiores a lo natural (en Dinamarca se añade vitamina A a las margarinas.). Vitaminación: consiste en añadir vitaminas que se consideren indispensables para la salud y cuyas carencias son frecuentes, a alimentos de gran consumo y que naturalmente no contienen dicha vitamina (vitamina A al té y azúcar en la India; arroz enriquecido con carotenos). Como principio general se recomienda que los nutrientes se obtengan, incluidas las vitaminas, a partir de una dieta variada y equilibrada. Sin embargo el consumo excesivo de suplementos vitamínicos puede ocasionar problemas de salud. Se citara el caso de EEUU, donde se estima que una tercera parte de la población consume regularmente suplementos vitamínicos y lo hace en cantidades que superan 10 veces la ingesta recomendadas. La popularidad del uso de elevadas cantidades de vitaminas se basa en ideas erróneas de que la ingesta excesiva ayuda a prevenir procesos que van desde el resfriado común hasta el cáncer. Causas de deficiencia 1) Dietas que no aportan la ingesta recomendada: Ante la necesidad de disminuir la ingesta energética se reduce la ración alimenticia. Es imprescindible la suplementación cuando los regímenes duran más de 2-3 meses 2) Aumento en el consumo de alimentos refinados que solo aportan calorías vacías 3) Hábitos de vida que aumentan las necesidades de ciertas vitaminas: Fumar y la polución de las ciudades aumentan la necesidad de vitamina A 4) Interacciones vitaminas-fármacos: mecanismos de acción: - obstaculizando la absorción de vitaminas. - Movilizan el depósito en el organismo. - Impiden la acumulación en tejidos de depósito. 5) Pérdidas en procesos de conservación y transformación de los alimentos. Las vitaminas son extremadamente frágiles. En cada fase de la alimentación pueden perderse vitaminas debido a la luz, calor, oxígeno, alteración del Ph del medio. Hipervitaminosis A Las vitaminas a dosis elevadas pueden ser perjudiciales o incluso mortales. Sobredosis de vitaminas liposolubles pueden ser perjudiciales ya que se almacenan en la grasa. La Vitamina A es la potencialmente más tóxica, aunque las intoxicaciones derivadas de la ingestión de una dosis alta de origen alimentario son excepcionales. De existir la hipervitaminosis, el origen es el consumo inadecuado de suplementos. La hipervitaminosis se da cuando la ingesta de vitamina A es por lo menos 10 veces mayor a la recomendación. También se considera que existirán efectos adversos por toxicidad si existe una ingesta diaria de 3-6 mg de retinol durante dos años consecutivamente. Esto puede ocurrir tras una automedicación excesiva. Existen dos tipos de toxicidad por vitamina A: Aguda: provocada por un consumo excesivo de vitamina A en un período corto de tiempo Crónica: se presenta cuando el exceso de la vitamina se presenta a lo largo de un período prolongado. En los bebés, la ingesta súbita de un exceso de vitamina A puede desarrollar una fontanela prominente ("punto blando" en la cabeza) y síntomas semejantes a un tumor cerebral. A este grupo de síntomas se le llama pseudo tumor cerebral e incluye fontanela abultada, papiledema (hinchazón del disco óptico) y visión doble. También es común que se presente vómito y somnolencia. Los síntomas en adultos son menos específicos; se puede presentar dolor de cabeza, cambios visuales y alteración de la conciencia que sugieren la presencia de pseudo tumor cerebral. Entre otros síntomas pueden estar náuseas, vómitos, mareos y visión borrosa. Desórdenes del sistema nervioso central. La toxicidad crónica por vitamina A es común que presente dolor óseo e hinchazón de los huesos, asociados a menudo con altos niveles de calcio en la sangre. Otros síntomas son pérdida de cabello, colesterol elevado, daño hepático y problemas visuales. Los síntomas son frecuentemente sutiles y pueden incluir fatiga, malestar y náuseas. En los niños, la hipervitaminosis A puede provocar cráneo tabees (un reblandecimiento anormal de los huesos del cráneo). Son comunes los síntomas de irritabilidad, disminución del apetito, prurito cutáneo y poco aumento de peso. Además, puede haber cambios en la piel con seborrea (piel y cabello extremadamente grasosos) y agrietamiento de las comisuras labiales. Un consumo excesivo de vitamina A en embarazadas produce teratogénesis (malformaciones en el feto) es por esto que los suplementos de vitamina A para embarazadas no contienen mas de 10000 UI. Estos defectos en el nacimiento se dan usualmente cuando el suplemento que contiene altas dosis de retinol o ester de retinilo, es ingerido diariamente por varios días o semanas, durante el primer trimestre de embarazo. Las anomalías más frecuentes se tienen a la hidrocefalia, encefalocele, anomalías del tracto urinario y deformidades esqueléticas. Se presenta igualmente un aumento de la presión intracraneana, tanto en la forma aguda como en la forma crónica de la enfermedad. Síntomas Fontanelas prominentes (en los bebés) Dolor óseo o hinchazón Cráneo tabees (en los bebés y niños) Cambios en el cabello y la piel pérdida del cabello seborrea agrietamiento de las comisuras labiales Irritabilidad Disminución del apetito Poco aumento de peso (en los bebés y niños) Vómitos Somnolencia Anorexia Poca fuerza muscular Amenorrea (cese del periodo menstrual) Signos y exámenes Niveles de vitamina A en el suero Antecedentes de ingestión aguda de vitamina A o de ingestión durante largo tiempo por sobre los niveles recomendados Calcificación perióstica (en las manos) Niveles elevados de calcio en la sangre Creatinina sérica elevada que sugiere daño renal Tratamiento El tratamiento comprende simplemente la suspensión del consumo de vitamina A en exceso. Expectativas (pronóstico) El resultado más probable es la recuperación completa. Complicaciones Retraso en el desarrollo Niveles de calcio excesivamente altos Deterioro renal debido al exceso de calcio Osteoporosis Daño hepático Interacciones con drogas Acitretina (Soriatane®) puede aumentar el riesgo de toxicidad de la vitamina A. Los suplementos de la vitamina A no se deben tomar de forma simultánea con AllTrans-Retinoic Acid (ATRA, Vesanoid® debido al riesgo de toxicidad. Un mayor riesgo de toxicidad de vitamina A puede ocurrir con la warfarina (Coumadin®). Bexarotina (Targentin®) puede aumentar el riesgo de toxicidad de vitamina A. La colestiramina (Questran®) y el colestipol (Colestid®) pueden disminuir la efectividad de la vitamina A al reducir la absorción de esta vitamina liposoluble. Los anticonceptivos orales aumentan los niveles de vitamina A en el plasma. Etretinato (Tegison®) puede aumentar el riesgo de toxicidad de vitamina A. Los suplementos de vitamina A no se deben suministrar de forma simultánea con isotretinoina (Accutane®, Amnesteen® debido al riesgo de toxicidad. La vitamina A puede reducir los índices de seroconversión del virus/vacuna del sarampión. Se ha informado que el aceite mineral reduce la absorción de todas las vitaminas liposolubles. Con uso ocasional, el efecto en los niveles de la vitamina A no parece ser significativo. La neomicina puede interferir en la absorción de la vitamina A, aunque no se ha descubierto que esta interacción sea clínicamente significativa. El orlistat disminuye la absorción de las vitaminas liposolubles, aunque los estudios indican que la vitamina A no se ve muy afectada por el orlistat como otras vitaminas liposolubles. No obstante, el fabricante del orlistat recomienda que todos los pacientes tomen un suplemento de multivitamina que contenga todas las vitaminas liposolubles (incluso las vitaminas A, D, E y K a menos que se contraindique de otra manera), separando el tiempo de la dosis por al menos 2 horas del orlistat. Los pacientes que toman tetraciclinas, especialmente minociclina (Minocin®), más la vitamina A, están en riesgo de desarrollar hipertensión intracraneal benigna (pseudo tumor cerebral), la cual puede ocurrir con las tetraciclinas y la intoxicación por vitamina A. Por lo tanto, se deben evitar altas dosis de vitamina A en personas que toman tetraciclinas crómicas. Otros ejemplos de tetraciclinas incluyen demeclociclina (Declomycin®) y tetraciclina (Achromycin®). Los suplementos de vitamina A no se deben tomar simultáneamente con Tretinoina (Vesabiob®, Avita®, Renova®, Retin-A®, Micro, Altinac® debido al riesgo de toxicidad. Conclusiones La ingesta de vitaminas debe cumplir los siguientes objetivos: 1) Evitar la enfermedad carencial y mantener una tasa satisfactoria de crecimiento y desarrollo. 2) Mantener una salud óptima, considerando el máximo desarrollo de las funciones físicas, psíquicas y sociales, y así lograr la prevención de enfermedades degenerativas y alcanzar el status vitamínico óptimo 3) No producir efectos toxicológicos, por lo que se debe respetar la ingesta recomendada sin abuso de suplementos El mayor aporte vitamínico de la dieta se puede realizar: Modificando la dieta, escogiendo determinadas combinaciones de alimentos. Ingiriendo alimentos manipulados, enriquecidos en vitaminas Por medio de suplementos, solos o combinados Se deben vigilar los problemas de toxicidad potencial. No se deben suministrar vitaminas sin consultar al médico previamente. Bibliografía y referencias Vitaminas y minerales en nutrición- María Luz Pita Martín de Portela. 1997. Toxicología de los alimentos. Linder, Ernst. Editorial Acribia. 1993. Sanidad alimentaria. Roberts, Howard R. Editorial Acribia 1985. Introduction to food toxicology. Takayuki Shibamoto & Leonard F. Bjeldanes. Academic Press, Inc. 1993. Ford MD, Clinical Toxicology. 1st ed. Philadelphia, Pa: WB Saunders; 2001:297 Guía de SIGHT AND LIFE- sobre la Vitamina A en los Estados de Salud y Enfermedad por Donald S. McLaren, (2002)