Boletín de los Sagrados Corazones - Perú Tomo XXI - Año 42 - N° 310 Abril 2009 Editorial Los amó hasta el extremo p. 3 Padre Damián Damián de Veuster Canonización (carta P. Javier Álvarez-Ossorio, ss.cc. Superior General). Vida de Damián de Veuster Reflexión: La Pascua de Damián Entrevista: Damián a tres voces Damián mi hermano y mi amigo de camino Celebrando a Damián en Arequipa Hacia la Canonización del P. Damián de Veuster p. p. p. p. p. p. p. Vida de las Provincias Recordando a Hubert Comunicándonos con las madres, padres y tutores de nuestros alumnos Su sangre es preciosa ante sus ojos (Homilía por los 50 años de vida religiosa del P. Gastón Garatea ss.cc.) Crónica: Acción de Gracias por los 50 años de vida religiosa del P. Gastón Garatea Yori ss.cc. Saludos Recibidos Noticias hermanas 5 6 8 10 12 13 14 p. 15 p. 16 p. 18 p. 20 p. 21 p. 25 Historia ss.cc. Madre Madeline Dourdoigne Experiencia de Dios de Damián p. 26 p. 27 Rama Secular Experiencia de Dios en la vida laical (3da parte) p. 28 Sagrados Corazones para niños p. 30 Hermanos: Provincia del Perú Hermanas: Provincia del Perú-Brasil-México Laicos: Rama Secular-Sector Perú www.ssccperu.com RESPONSABLES P. Raúl Pariamachi, ss.cc. Hna. Candelaria Núñez, ss.cc. REDACCIÓN Hna. Graciela Zúñiga Sra. Haydeé de la Puente COLABORADORES Hno. Wilber Onofre Hna. Teresa Lazcano DIAGRAMACIÓN Y DISEÑO Srta. Delia Amado CARÁTULA Y WEB Sr. Fredy Caballero B. DIBUJOS Sr. Manuel Lozano APORTES Y SUGERENCIAS Secretaría Hermanos [email protected] Secretaría Hermanas [email protected] S U M A R I O Editorial «LOS AMÓ HASTA EL EXTREMO» El evangelista san Juan relata que antes de la fiesta de la Pascua, sabiendo Jesús que había llegado su hora de pasar de este mundo al Padre, habiendo amado a los suyos, los amó hasta el extremo (cf. Jn 13, 1). La vida entregada de Jesús es la plena revelación del amor misericordioso de Dios, que se acoge como buena noticia en la realización del reinado de Dios. Aquel cuyos ojos se eleven para contemplar el corazón abierto de Jesús en la cruz, será capaz de intuir la radicalidad del amor del Servidor que pasó haciendo el bien, que como el grano de trigo quiso morir para dar vida a otros. El Papa Benedicto XVI acaba de anunciar la fecha de la canonización del Padre Damián de Molokai ss.cc. para el próximo 11 de octubre en la Plaza San Pedro (Roma). Es significativo que el logotipo oficial de la canonización (creado por Fredy Caballero) lleve la frase «Los amó hasta el extremo» (Jn 13, 1), sugiriendo que Damián –a ejemplo de su Señor– amó a sus queridos leprosos hasta el extremo de entregar la vida por ellos. El logotipo muestra a Damián abrazando a una persona, evocando la parábola del buen samaritano que se hace prójimo del hombre herido en el camino. Los hermanos, las hermanas y los laicos de la familia de los Sagrados Corazones tenemos una oportunidad privilegiada de proponer la figura de Damián como un camino de auténtica felicidad en la entrega generosa de la vida a favor de los pobres, enfermos y olvidados. En nuestras propias familias, comunidades, colegios, parroquias y pastorales deberíamos volver la mirada a la vida de Damián, dejándonos tocar por la radicalidad de su opción, dejándonos entusiasmar por su pasión, dejándonos inquietar por su rebeldía. Quizás así encontremos la inspiración necesaria para renovar el compromiso de nuestra vida cristiana, como aquel que supo plasmar admirablemente el carisma de contemplar, vivir y anunciar al mundo el amor de Dios encarnado en Jesús. Con esta edición del Boletín Nuestra Familia quisiéramos sumarnos al camino de la canonización de Damián, ofreciendo información, testimonios y reflexiones sobre la figura de nuestro hermano. En el Perú –como en tantas otras partes del mundo– están surgiendo diversas iniciativas para celebrar este acontecimiento de la Congregación y de la Iglesia. De modo especial saludamos a las obras que llevan el nombre de Damián: el Colegio Padre Damián (Hermanas) en Arequipa, la Parroquia Padre Damián (Hermanos y Hermanas) y el Centro Damián Joven (Hermanos) en Lima. Pienso que la interrogante de Mahatma Gandhi cuando dijo aquella famosa frase de que el mundo de la política y del periodismo cuenta con pocos héroes comparables al Padre Damián y que valía la pena reflexionar sobre la fuente de semejante heroísmo, no puede ser resuelta únicamente diciendo que la fuente de tal heroísmo es la eucaristía o la adoración, sino que la indagación de Gandhi nos remite a las raíces humanas, a la fragua familiar, a la mística evangélica que hacen creíble que un hombre decida darlo todo, que una persona ame a los otros hasta el extremo de dar la vida por ellos. Raúl Pariamachi ss.cc. 4 Padre Damián Tomado del INFO 24 – Hermanos, del 13 de marzo. Damián De Veuster Canonización Roma, 11 de octubre de 2009 Damián será canonizado junto con los beatos Zygmunt Szczesny Felinski, Francisco Coll y Guitart, Rafael Arnáiz Barón y Marie de la Croix (Jeanne) Jugan El impacto y el significado de Damián para la misión de la Congregación hoy M e siento el misionero más feliz del mundo, decía Damián en una de sus cartas desde Molokai. Se trata ciertamente de una «extraña» felicidad, ya que Damián vivió en condiciones muy duras, soportó conflictos agrios con sus compañeros y con sus superiores (a causa de incomprensiones y de su carácter tozudo), luchó interiormente con sus escrúpulos y su consciencia de saberse pecador, y, en fin, sufrió en su propia carne el terrible proceso de degradación que provoca la enfermedad de la lepra hasta morir a causa de ella. Misionero y feliz: tratemos de entender su impacto en nosotros a través de estos dos calificativos de su existencia. Damián se entendía a sí mismo como misionero, en el contexto de la idea de «misión» que tenían entonces la Congregación y la Iglesia. Según sus cartas, Damián se inspiraba en los modelos de dos grandes misioneros: J.M. Vianney (el cura de Ars), en su celo infatigable por «salvar almas», y S. Francisco Javier, en su empeño por llegar a tierras lejanas y hacer nuevos cristianos. La gran aventura de la evangelización de las islas del Pacífico, confiada por la Santa Sede a nuestra Congregación desde tiempos del Fundador, ofrecía un terreno privilegiado para esta imagen heroica y entregada de la misión entendida como preocupación por salvar a tantas personas «paganas» perdidas en los confines del mundo. Esta llamada misionera corresponde al envío del final del Evangelio de Mateo («id por todo el mundo y haced discípulos míos…» Mt 28,19) En este contexto general de misión, Damián mostró un afecto peculiar por las personas a las que servía. Primero con los cristianos de las parroquias de los distritos de Puno y Koala. Hasta el punto de decir, al ser trasladado de una parroquia a otra, que «la separación de mis queridos cristianos me ha resultado más penosa, más dolorosa que la de mis queridos padres, por el afecto tan cordial que sentía hacia mis queridos neófitos canacas…» Este afecto se manifestó poco después con más fuerza aun en el servicio a sus amados leprosos de Molokai, a los que se entregó en cuerpo y alma. Damián se sentía misionero feliz. El escritor Charles Warren Stoddard, amigo y biógrafo de Damián, le escribe después de una visita a Molokai: «Pienso con frecuencia en usted, en su vida extraordinaria. Siempre me ha parecido feliz, más feliz que los que están en el mundo. Tiene derecho a serlo, pues nadie realiza una obra más noble que la suya, y quizás nadie la hace en peores condiciones que usted». El impacto más directo de Damián en la misión de la Congregación ha sido, y sigue siendo, la fascinación que su vida produce en muchos de nosotros, hasta el punto de que bastantes candidatos han entrado en la Congregación movidos por su testimonio. Está claro que muy pocos, o prácticamente ninguno, de los que se han animado a ser religiosos atraídos por Damián han vivido después como él, es decir, en un servicio tan radical a los más pobres y abandonados en tierras lejanas. También es verdad que hoy en día no entendemos la misión en la línea de un proselitismo religioso sospechosamente emparentado con el colonialismo cultural, político o económico (como podría ocurrir en el 5 Padre Damián siglo XIX). Pero aun así, Damián sigue siendo un poderoso estímulo misionero en las dimensiones básicas antes mencionadas: deseo de anunciar el Evangelio, ir hacia los demás (no dejando la fe en una experiencia íntima sin proyección hacia fuera), afecto concreto y eficaz a las personas (sobre todo a las que más sufren) y una experiencia profunda de felicidad que nada puede arrebatar. En ese «corazón» de Damián, la Congregación sigue encontrando inspiración para su misión hoy. Visto «desde fuera», Damián puede aparecer como un gigante de humanidad y de generosidad al servicio a los más pobres y excluidos. Gracias a él se trasformó la mirada del mundo hacia los enfermos de lepra. Muchas personas se han apoyado en su figura para crecer en valores tan humanos como la solidaridad y el empeño por la justicia en favor de los más abandonados. Sin embargo, si de verdad se quiere conocer quién es Damián, hay que intentar asomarse a «su interior», al santuario de su corazón donde se fraguaba esa extraña felicidad de un hombre que se sentía ante todo creyente, sacerdote, hijo de los Sagrados Corazones de Jesús y de María, misionero del Dios de la misericordia y la compasión. Como él mismo decía a menudo, la fuerza necesaria para mantenerse en su misión la encontraba en el misterio de la fe, en la Eucaristía y al pie de la cruz de su Señor. La vitalidad de Damián le viene de dentro, de su corazón, en donde Dios quiso trabajar para ofrecernos una imagen eminente que nos recuerde el corazón misericordioso de su Hijo Jesús. Aunque la misión no se entienda hoy según el modelo del misionero «aventurero y bautizador» del siglo XIX, lo cierto es que adentrándonos en el corazón de Damián podremos crecer en la permanente aventura de servir a los más pobres con generosidad y de seguir al Señor que inspiró la vida de Damián. Pidamos que también nosotros podamos saborear esa inmensa felicidad que nadie puede arrebatar y que surge sencillamente del saber amar sin condiciones ni medida. Fraternalmente en los SS.CC. Javier Álvarez-Ossorio ss.cc. Superior General Oración Dios de misericordia, te damos gracias por Damián, hermano universal, padre de los leprosos, hijo de los Sagrados Corazones. Tú inspiraste en él un amor apasionado por la vida, por la salud y la dignidad de los que halló caídos al borde del camino. Gracias porque, como Jesús, supo amar hasta el extremo. Gracias porque, como María, supo entregarse sin reservas. Gracias Padre, porque en Damián sigues suscitando la santidad y la pasión por tu Reinado. «Pedid por mí todos los días a Dios que pueda perseverar siempre en su santo servicio, que sea un buen misionero y que después de haber trabajado por largo tiempo en la viña del Señor, pueda, en vuestra compañía, ir a contemplarlo para siempre.» . Padre Damián. Carta nº. 16, a sus padres. Honolulú, 22 marzo 1864 6 Padre Damián VIDA DE DAMIAN DE VEUSTER P. Emmanuel de Bézenac, ss.cc. Ecuador - Quito Texto tomado del documento Recursos: para fomentar el espíritu «Damián» y la misión al estilo «Damián» A los 23 años, Damián dejó Bélgica, su patria, para ir de misionero a las islas Hawai (Pacífico Norte). Diez años después, se internó voluntariamente en la isla de Molokai, donde el gobierno segregaba a los leprosos. Organizó para ellos la vida social, les devolvió el sentimiento de su dignidad y los contagió con su fe y esperanza. El 15 de abril de 1889 moría consumido por la lepra 1. Infancia y vocación religiosa José de Veuster, el futuro Padre Damián, nació en 1840 en Bélgica, en una familia profundamente cristiana. Desde pequeño demostró un gran amor a Dios y a los pobres. A los 13 años tuvo que dejar la escuela para ayudar en los trabajos de la finca. Más tarde, cuando tenía 18 años, su padre lo destinó al comercio de granos y lo mandó, fuera de casa, a estudiar el francés. Allí descubre su vocación. Escribe a sus padres: - Quiero ser sacerdote. Poco después, el gobierno de Honolulu, para detener la epidemia de la lepra, decide recluir a los enfermos, a la fuerza, en una cárcel natural de un promontorio pedregoso y azotado por los vientos, en la isla de Molokai. En 1873, el obispo confía a sus sacerdotes su angustia respecto del infierno en que viven los recluidos. Damián exclama: - Heme aquí. Estoy dispuesto a sepultarme vivo con esos pobres infortunados. Sin más tardar los convence de dejarle ingresar a la Congregación de los Sagrados Corazones. Esta Comunidad, nacida durante la Revolución Francesa, tenía la finalidad de llevar el amor del Corazón de Cristo al mundo y así renovarlo. Tiene 33 años, la edad en que Cristo murió en la cruz. La semana siguiente, sin más bienes que la ropa que lleva puesta, desembarca en la isla, de la que solo la muerte le iba a librar 16 años más tarde. 2. Vocación misionera 4. El cielo baja a Molokai Cuatro años más tarde, en 1863, su hermano mayor, religioso de la misma Comunidad y recién ordenado sacerdote, es designado para ir de misionero a las islas Hawai. Pero, habiendo caído enfermo de gravedad, no puede partir. Con la entereza que le caracteriza, Damián escribe al Superior General de su Congregación: - Quiero ir en lugar de mi hermano. Aunque no ha terminado sus estudios, su ofrecimiento es aceptado. 3. La isla maldita Ordenado sacerdote en Honolulu, a los 24 años, el joven misionero toma inmediatamente posesión de un extenso y difícil territorio misionero en el distrito de Puna al oeste de la gran isla Hawai. De inmediato pone manos a la obra, armado del poder de la cruz. Sin más recursos que el amor de Dios, un amor apasionado por la vida, por la salud y la dignidad, venciendo el asco que le causa el horrible hedor de las carnes en putrefacción, hace prioritariamente de sacerdote; hombre vigoroso y de inagotable energía física, hace también de enfermero y médico, de arquitecto e ingeniero; y, con más agrado aún, de peón. Consigue el agua potable, levanta bonitas casas pintadas de blanco, promueve el cultivo de la tierra y organiza la vida social. Monta el orfanato para evitar que los niños fueran explotados. Funda el cementerio pues, antes, los cadáveres de los leprosos yacían donde la muerte los encontraba; y convierte los funerales diarios en fiesta. 7 Padre Damián Se identifica con sus pobres enfermos para devolverles el sentimiento de su dignidad: - Nosotros, los leprosos... - les dice, aunque todavía no lo fuera. En sus prédicas, les habla de su grandeza de hijos de Dios, les comunica la esperanza de una vida mejor: - Nosotros, los leprosos, somos los amigos de Dios; un día gozaremos de un cuerpo nuevo... Poco a poco, bajo su impulso de pastor, el pueblo de los leprosos va organizándose, progresa a nivel material y moral y descubre la dimensión religiosa y espiritual. El secreto de esta entrega y energía inagotables era Jesús al que encontraba en la Eucaristía. - Sin la presencia permanente de nuestro divino Maestro en el altar de nuestras pobres capillas - escribía - no hubiera podido quedarme aquí ni un día. - Mis párpados empiezan a caer; pronto mi cara quedará desfigurada. Me quedo tranquilo y resignado y hasta me siento más feliz en medio de mi gente. 6. Muerte y repercusiones En sus últimas semanas de vida, ya no puede salir a visitar a sus enfermos; pero ahora son ellos que vienen, llenos de desesperación, a asaltar su casa para verle una última vez. El 15 de abril de 1889, lunes de la semana santa, muere a los 49 años, en medio de los llantos de los que lo consideraban como su padre. La noticia se difundió por el mundo entero... Y desde aquel entonces, su ejemplo sigue siendo un incentivo en la lucha contra todas las «lepras», y no cesa de suscitar, entre jóvenes y menos jóvenes, el anhelo de servir con total entrega a los más necesitados Poco a poco, gracias a su acción, la cruz de Cristo produce el más grande de los milagros: el infierno de Molokai se convierte en paraíso, en antesala del cielo. 5. Leproso con los leprosos Once años después de su llegada a Molokai se produjo el acontecimiento que va a trastornar su vida: aparecieron en sus piernas los primeros síntomas de la lepra. A fines de 1884, el examen médico confirmó la presencia del terrible mal. El año siguiente, el rostro es atacado; le quedan cuatro años de vida. Dios quiso que Damián, el buen pastor, se solidarizara del todo con sus ovejas, participando de su misma enfermedad. Igual como Jesús se hizo uno de nosotros, encarnándose en una humanidad pecadora, Damián se volvió un leproso más. Cosa extraordinaria, se siente más feliz que nunca: «Si el Señor está conmigo nada tengo que temer y podré todo, como San Pablo, en Aquel que me conforta... Adiós, queridos padres, separados corporalmente, unámonos a menudo en el espíritu, sobre todo en la oración; no tengan la menor inquietud por mí, pues cuando se sirve a Dios se es siempre feliz..». Carta nº. 19 a sus padres, Sandwich, 23 Agosto 1864. 8 Padre Damián REFLEXIÓN LA PASCUA DE DAMIÁN Hermann Wendling ss.cc. Celebración con el pueblo Prólogo La figura de Damián me acompaña, inspira, motiva desde hace 50 años, desde mis años en la Escuela Popular Católica de Sabershausen, donde leímos un relato sobre el Héroe de Molokai en nuestro libro de lecturas. Además participo desde hace más de 50 años en las celebraciones del Triduo Pascual, desde los tiempos en que se celebraba el rito de San Pío V, antes de su reforma por el Beato Juan XXIII, pero ya reformado por Pío XII. Por eso me atrevo a hacer una reflexión sobre Damián y la Pascua: Damián a la luz de la Pascua, la Pascua ilustrado por Damián. Como hilo conductor sigo las cuatro partes de la Vigilia Pascual. 1. Lucernario La Pascua es el paso de la oscuridad a la luz, del Reino de la Muerte al Reino de la Vida, del pecado a la gracia, de la incredulidad a la fe, de la tristeza a la alegría, del aislamiento a la comunidad, de la pasividad a la misión. Damián vivió 16 años entre los leprosos, no curó ninguno de ellos, ni por un milagro, ni por los diversos tratamientos que fomentó y aplicó a sí mismo. Más bien enterró a la mayoría de los que vivían con él. Pero con su presencia se obró un cambio en la colonia de los leprosos: descubrieron su dignidad de personas, salieron de su abandono, ya no necesitaron ahogar sus penas en vicios, enfrentaron activamente su situación. Lo que más me ilustra el cambio, es la banda de música que daba brillo a las fiestas religiosas. Es como el canto del Gloria en la noche de Pascua después del silencio de la Semana Santa. Ciertamente Damián «no era la luz, sino daba testimonio de la luz» (ver Jn 1,8). Lo hacía creando cercanía con los leprosos, hablando su idioma, comiendo su comida, sufriendo sus heridas, vendándolas y teniéndolas en su cuerpo, puesto como ellos, bajo la sospecha de ser un vicioso, muriendo su muerte. ¡Qué diferencia con el médico de la colonia, que examinaba los leprosos moviendo su ropa y tocando sus cuerpos con un palito! Así como en la Resurrección, el Padre ratifica la práctica y la enseñanza de Jesús, la Iglesia ratifica en la canonización a Damián como seguidor de Jesús. En este contexto podríamos reflexionar también sobre el paso de Damián, de un catolicismo cerrado a cierta amplitud ecuménica. También sobre el paso del paternalismo heredado por la cultura europea de su tiempo, a la fraternidad y el discipulado, en cuanto consideraba a Cristo presente en los leprosos y de esta manera ellos podían ser luz para él, y no solo él para ellos. También podríamos reflexionar sobre la unidad que se da en Damián entre misión y desarrollo, salvación y liberación, religioso y agente de progreso. 2. Celebración de la Palabra En la Vigilia Pascual se nos proclaman las grandes obras de Dios que culminan en la Resurrección de Jesús como inicio de la nueva creación. La lectura que no puede faltar en la Vigilia, es la de Éxodo 14: el paso por el Mar Rojo. En el pasaje que precede la lectura, los israelitas se ven sin salida entre el ejército egipcio y el Mar Rojo. Se arrepienten de no haber quedado en Egipto, sirviendo pero disfrutando de la olla de carne, en lugar de morir en el desierto. Moisés ofrece una tercera posibilidad más allá de la vuelta a Egipto y la muerte en el desierto: «No teman, estén firmes, y verán la salvación que el Señor les otorgará en este día» (Ex 14,13). Y esta salvación consiste en entrar en el mar y encontrar la vida ahí donde amenaza la muerte. ¿No se puede aplicar eso a Damián? Confrontado con el destino de los leprosos, podía optar por declarar demasiado grande la amenaza contra su propio bienestar y volver a la «olla de carne» de la misión en un lugar seguro. O podía unirse a los leprosos en una actitud de resignación de no poder hacer nada más que enterrarlos. Pero optó por la tercera posibilidad: Estar con los leprosos en una actitud de esperanza «contra toda esperanza». «No puedo curar a los leprosos, pero puedo aliviar su pena». Como las mujeres que fueron al sepulcro para ser piadosas con un muerto, se convirtieron en testigos 9 Padre Damián de la victoria de la vida sobre la muerte, Damián fue a un lugar de gente declarada muerta en vida, y se convirtió en testigo de un Dios que despierta la vida donde parece reinar la muerte, y fue testigo en la medida en que fue instrumento de la acción salvadora de Dios. 3. La celebración del bautismo A la liturgia de la Palabra sigue en la Vigilia Pascual la liturgia bautismal, anticipada en la epístola (Rom 6,311). Inicia con la letanía de los santos. Ahí figuran (en el rito reformado) San Francisco Javier y San Juan María Vianney, los santos más venerados por Damián a causa de su celo apostólico y misionero. Como Francisco Javier, Damián deseaba bautizar el mayor número posible de paganos, para que sean «libres de la esclavitud del pecado» (Rom 6,6). Al mismo tiempo, Damián vivía en su persona la realidad del bautismo: «Los que por el bautismo nos incorporamos a Cristo, fuimos incorporados a su muerte. Por el bautismo fuimos sepultados con Él en la muerte, para que ... andemos en una vida nueva» (Rom 6,3s). Este «ser sepultado con Cristo» fue su experiencia de la profesión religiosa, cuando estaba postrado debajo del paño mortuorio antes de pronunciar los votos. Cuando fue a vivir a Molokai, se acordó y se motivó con esta experiencia. La teología de la Vida Religiosa ve en la profesión religiosa una forma de vivir radicalmente el bautismo. Damián, quizás sin entrar mucho en fundamentaciones teológicas, vivió radicalmente la vida religiosa, y por tanto la realidad del bautismo: participó en la muerte y Resurrección de Jesús estando con aquellos con quienes nadie quería estar y como nadie quería servir, vivió por los pobres, con los pobres y como los pobres. 4. La celebración eucarística La Vigilia Pascual termina con la liturgia eucarística, la celebración de la Cena Pascual. Tenemos la declaración de Damián, de que su vida en Molokai, solo era posible gracias a la celebración de la misa y la adoración eucarística. Unido a Jesús, Pan para la vida del mundo, Damián también se convierte en alimento de la esperanza de los que tienen la muerte ante sus ojos. Recibiendo y dando el cuerpo de Cristo sacrificado en la cruz, se entrega a sí mismo curando los cuerpos signados por la muerte. Unido a Jesús que toma el pan, lo bendice (consagra), lo parte y lo da a sus discípulos, Damián toma pan, abrigo, remedios que recibe de muchas partes, los convierte en instrumentos que dignifican a los leprosos y que los da como expresión de la entrega de su propia persona, y al dar y darse se gasta hasta no sentir más sus miembros carcomidas por la lepra. En la forma prevaticana que celebra Damián, la misa terminaba con el envío: «Ite, missa est» (Vayan, envío es). Así se acordaba Damián que era misionero, formador de comunidad alrededor de Jesús Resucitado; en la misa y en la vida de todos los días, en la predicación, la catequesis, la oración, la atención de los enfermos, de los huérfanos, la construcción de edificios comunitarios, los contactos con el mundo fuera de la colonia. En el tiempo pascual la despedida termina con «Aleluya, aleluya». Es el canto de alabanza al Dios de la Vida que libera de la muerte. Según el cardenal Daneels, Damián deseaba morir el día de Pascua, o el Viernes Santo. Pero le tocó realizar su Pascua el lunes santo, dejando que en los Días Mayores la atención de la comunidad se concentre en el Maestro. Con todo, me imagino que en las celebraciones del Triduo Pascual (si mal no recuerdo presididas por el P. Wendelin Moeller) la comunidad de los leprosos veía al lado del Maestro a su discípulo que tantos años lo había representado entre ellos. Epílogo Quizás se espera de mí también que escriba como misionero, que si bien no vivo en un lugar como Molokai, por lo menos está ahí donde cada vez menos gente quiere estar. Se me ocurre que en la Selva Sandina intentamos entre tres hermanos imitar a Damián. Hay quien camina en espíritu misionero hasta los últimos rincones. Hay quien se ocupa de los enfermos sin poder curarlos. Hay quien difunde la fama de la obra por los aires de América y está mal visto por su obispo. Ya que no podemos fundar una banda de música, estamos contentos de parecernos a Damián siendo criticados por autoridades eclesiásticas. Personalmente me siento más como un Pánfilo que no se enfermó. Trasladado a la misión, aprovecho para estudiar idiomas indígenas y obligo a un misionero parecido a Damián (no solo en la terquedad) a traducir los evangelios al idioma de la gente (runa simi). ¡Oh felix culpa! «Un misionero no se debe desalentar, por el poco éxito, al contrario, aunque nos pese debemos llevar la cruz de Jesucristo, no delante de Él, sino detrás de Él, como Simón el Cirineo, hasta la cima del Calvario...». Carta nº. 41, a su hermano Pánfilo, Kohala, Hawaii, Octubre 1867. 10 Padre Damián DAMIÁN A TRES VOCES Por Lucio Colque ss.cc. S eguramente que a muchos hermanos en la Congregación de los Sagrados Corazones, si se les pregunta sobre la vida del Padre Damián, dirán que lo ven como un ejemplo de compromiso cristiano al cual seguir. En muchos casos él ha sido la inspiración para optar por la vida religiosa, dentro de esta familia. Sin embargo, con mucha alegría puedo confesar, y seguro estoy que al igual que muchos de ustedes, lectores personas ajenas a nuestra Congregación, hablan de Damián como motivador de su vida, sea para asumir la vida religiosa sacerdotal o laical, que son llamados al servicio misionero en favor de los sufrientes, pobres y necesitados (nuevas formas de «lepra») de nuestro tiempo. Los hermanos a quienes entrevisté responderán desde su experiencia, sobre lo que representa para cada uno la vida de Damián. Gracias al P. Marcelo Tregouet, ss.cc. al P. Juan María Olivier, ss.cc. y al P. José Serrand, ss.cc. por compartir su vida. Debo advertir que la entrevista la realicé de una manera poco ortodoxa, ya que la hice vía correo electrónico, razón por la cual no podré describir expresiones de asombro, risa, gestos, etc. que forman parte de una entrevista. Marcelo ¿Qué admiras más en Damián de Molokai? Marcelo: Su entrega a los marginados y el hecho de que esa entrega fue sin mirar atrás, sin cálculos y sin medir las consecuencias. Es impactante conocer la fortaleza que mostró frente a las dificultades que se le presentaban a diario. No puedo dejar de destacar su confianza firme en Dios. Juan María: Su vida, que fue una entrega total, radical, a los más desposeídos de su época. José: Que era un hombre común y corriente, un rebelde a la ley y un loco para la vida. Sin embargo, de gran corazón, de pocas palabras y más hechos. Recuerdo que, contra el reglamento, escribe una carta al Superior General para proponerse a reemplazar a su hermano enfermo para ir en misión. Se propone de voluntario para ir a Molokai por tres meses y se quedó 15 años, hasta su muerte… un poco rebelde, pero apasionado por las obras del Señor. Soportó críticas de miembros de la Iglesia, sus superiores, sus hermanos. Él en su actuar firme, dulce, tierno, compasivo con las personas consideradas «asquerosas» físicamente. Era un hombre normal, no un sacerdote «fuera del mundo». Cuántas cosas «íntimas» (por favor, no piensen mal) habrá hecho para dar ánimo a la gente, sin importarle el género, la religión… su locura era ayudar a todos. Su capacidad de celebrar la Eucaristía con alegría, gozo. Su verdadera Adoración religiosa y social, piadosa y humana… sin ser «extraterrestre». Cuánto sueño vivir en secreto una fiesta en Molokai con Damián. Creo que ésa es la Iglesia que Jesús quiere. José «Padre, usted aquí representa para mí a la Congregación, ¿no es cierto? Digamos juntos las oraciones de la Congregación. ¡Qué bueno es morir hijo de los Sagrados Corazones!» P. Damián. 11 Padre Damián En Damián había un eterno lavado de los pies, día a día, como Jesús. Juan María ¿Como influyó Damián en tu vida? Marcelo: Entré en la escuela apostólica cuando tenía once años y creo que desde entonces la vida de Damián ha ido influyendo en la mía, por lo que nos contaban y lo que leíamos de él. Pero en los últimos 15 ó 20 años, seguramente porque lo he ido conociendo mejor (especialmente sus motivaciones), he tomado más conciencia de que Damián tenía que ser para mí un ejemplo, tenía que inspirarme en mi misión y acercamiento al mundo de los pobres. Juan María: En él encontré inspiración. Me dio la vocación misionera y qué mejor lugar que la misma Congregación a la que él perteneció: la Congregación de los Sagrados Corazones. José: Mi sobrino Jean Pierre, de 32 años, como consecuencia de una convivencia con un «amigo» contrajo el VIH en 1987, lo peor. En la mentalidad de esta época difícilmente podía ser vista como una enfermedad más. En mi familia secreto absoluto. En mi corazón de religioso ss.cc. (qué vergüenza) en mi mente, lo juzgué, lo critiqué, lo condené. Dos años después, fui de vacaciones, pasé con él su último mes, conocí también a «su» pareja. Pero rezando alguito, abriendo mi corazón a la Biblia y a Jean Pierre, cambié de mirada, de corazón. Mis visitas fueron con cariño, sin darle ninguna receta, solamente estaba con él, lo amaba, lo acariciaba, hasta por momentos sonreíamos los dos juntos. El Dios de la Misericordia lo acogió el 29 de julio. Después de esta experiencia hasta soñé con quedarme en Francia para acompañar a los enfermos de Sida de esta época, como Jean Pierre. Hoy a pesar de mi salud, trato de visitar a los enfermos, no para predicarles, ni darles recetas baratas, sino por estar a su lado, amarlos. Cada vez que he hecho estas cosas está siempre presente Damián. ¿En el presente, a quienes piensas que Damián querría entregar su vida? Marcelo: Pienso que Damián, en cualquier lugar y circunstancia en que le pusieran sus superiores, sabría encontrarse con los que más necesitarían de él y se entregaría a ellos totalmente. En el Perú no faltan personas que necesitan de Damián: enfermos de todo tipo, personas con discapacidad, hambrientos y personas marginadas por la sociedad. Juan María: A los más desheredados de hoy: los que tienen sida, los que están en las cárceles, los campesinos más perdidos en la sierra y la gente postergada. Según las circunstancias en las cuales Dios lo llame (en concordancia con sus superiores). José: Creo que como Hubert (otro belga, qué casualidad), se dedicaría de lleno a los presos que se pudren años en las cárceles sin ser juzgados y haría lo imposible por su libertad. Aunque, en este momento, creo que se dedicaría más a ayudar a los que salen de la cárcel, ¿Por qué?, salen libres, vagan por la calle; se sienten abandonados, rechazados, no amados, sin casa, sin trabajo, sin familia, sin papeles, sin ningún futuro, con una desesperación terrible. Tal vez es ahí donde se sientan más «encarcelados» que nunca, con unas ganas de volver a la cárcel por un mínimo de vida, qué contrariedad. Puede ser que Damián se dedicaría totalmente a ellos, ¡si viviera en Monterrico! En una frase corta ¿cómo definirías la vida de Damián? Marcelo: En Damián, Jesús, entregó su vida por sus ovejas. Juan María: Una vida de entrega total. José: Damián: próximo y prójimo, hizo que la voz de los sin voz impida dormir a los poderosos. «Vean, pues, que Dios no nos abandona nunca, ni en lo temporal ni en lo espiritual. Tengamos, pues, siempre confianza en El. La santísima Virgen María nos protegerá también en todos los peligros si vivimos siempre como fervientes cristianos. Recemos siempre unos por otros para obtener la gracia de reunirnos de nuevo con Dios en el Cielo...». Carta nº 34, a sus padres. Islas Sandwich, 15 Enero 1867. 12 Padre Damián DAMIAN MI HERMANO Y MI AMIGO DE CAMINO Melva del Mar Vera Profesora Colegio Padre Damián D amián de Veuster el hombre que me cautivó y que se cruzó en mi camino. Conocerle ha sido lo mejor que me ha pasado en la vida; diría ha sido el regalo más hermoso que Dios Padre me ha dado. Conocí a Damián cuando tenía 16 años no solo por la lectura de algunos libros, sino por el testimonio de Madre Carmen María Villegas, ella me hablaba con tanta pasión de la entrega generosa de este hombre que me cautivaba cada vez que escuchaba hablar de él, me preguntaba siempre, si lo que escuchaba era una novela, pero llegó el día que vi la película y conocí a los padres Sagrados Corazones que trabajaban en mi parroquia; hombres sencillos y muy entregados a la gente pobre y humilde; sin darme cuenta, me vi envuelta en el trabajo pastoral de la parroquia, lo único que buscaba era parecerme un poquito a Damián en su compromiso y en su trabajo, por ello mi trabajo siempre fue con la gente pobre y humilde en los barrios más pobres de la parroquia. Estudiar en el colegio que lleva su nombre para mí ha sido muy gratificante, porque ahí fue donde me encontré con mujeres luchadoras y trabajadoras como yo, ya que todas éramos trabajadoras del hogar y estudiar después de una jornada de trabajo, no era fácil. Junto con mis compañeras sentíamos que Damiancito nos daba la fuerza porque le rezábamos con mucha fe, esta fe era alimentada por la lectura bíblica, por la participación en la eucaristía, y por la enseñanza de mis profesoras que eran religiosas. Personalmente me sentía llamada para animar y apoyar a mis compañeras, poco a poco fui como metiéndome en el corazón de Damián y viceversa para comprender su misión y desde su testimonio de vida, amar como el amó, comprender como él comprendió, y aprender de su radicalidad, que lo llevó a entregar su vida por los leprosos. Hablar de él, es hablar de un hombre que ha tenido una voluntad de acero y que de alguna manera me ha contagiado de su perseverancia, de su tenacidad, de su servicio desinteresado, de su solidaridad, y sobre todo de su capacidad de oración, en la cual buscaba siempre la voluntad de Dios Padre. Conocerle fue también preguntarme y cuestionarme sobre mi vocación religiosa, me dejé conducir por su vocación y por el testimonio de las hermanas y hermanos SS.CC.; tuve la oportunidad de discernir mi vocación, indudablemente descubro que Dios Padre me ha regalado la capacidad de servicio y disponibilidad, lo que siempre busco es que sea de calidad, como fue la misión de Damián; sin ser religiosa, vivo contenta sirviendo ahí donde me quiera Dios. Volver a mi centro de estudio como docente ha sido maravilloso para mí, no sé si ha sido voluntad de Dios o es que Damián lo ha querido así, pues siempre me lo encuentro en mi camino. Hace diez años me encontraba sin trabajo, en mis oraciones tengo presente a Carmen María y a Damián. Y lo único que le pedía era trabajo, más no trabajar en mi colegio donde yo había estudiado; sin embargo él se encargó de regresarme a mi familia que amo y que siempre amaré: los Sagrados Corazones; por eso afirmo que Damián siempre estuvo y estará en mi camino por más duro y difícil que sea, él se encarga de interrumpir mi vida y darle sentido siempre, poniéndome personas que necesitan más que yo. Si yo me quejo de que mi zapato tiene hueco, él se encarga de decirme que hay gente que no tiene zapatos y de hecho, mis problemas, son pequeños ante los de la gente. La vida del P. Damián me hizo interesar por la lectura del Evangelio, en este último encuentro que su fidelidad y su capacidad de entrega fue simplemente porque se dejó amar por Jesús, se dejó guiar por el camino hacia Jerusalén que es el de la vida y no el de Emaús que es el de la desesperanza, de la soledad y de la muerte. Él hizo que Molokai fuese esa Jerusalén donde rebrotará la vida y la esperanza para los leprosos y «Ella (la presencia del Señor) se siente, pues, ya en medio de nosotros, lanzados en medio de un mar agitado; no solamente no sentimos miedo, como a menudo sucede a los navegantes, sino que sentimos una alegría inconcebible cuando estamos una media hora juntos: nos cansamos de reír y de hacer bromas.». Carta nº 14, a sus padres. Puerto de Brème, 30 de Octubre 1863. 13 Padre Damián finalmente su encuentro con Dios Padre. Este es el camino donde yo me encontré con Damián: un camino de fe, de esperanza, de vida, de compasión, de generosidad, de sencillez, de humildad y de amor. En este camino encontré a la familia de los Sagrados Corazones, ya sea por el colegio o por las parroquias de Sachaca y de Pachacutec, que eran las islas de Molokai donde los hermanos y hermanas trabajaban por los más humildes y abandonados. No quiero terminar sin reconocer el gran amor que tenía madre Carmen María Villegas a Damián, y que me lo contagió, como también, esa inquietud de conocerle más. Por eso cuando me enteré de la fecha de su canonización, dije no es casualidad que el día de su cumpleaños sea canonizado, realmente las casualidades no existen, su testimonio de amor a Damián ha sido grande y para mí es un regalo de Dios que sea esa fecha. Agradezco a Dios Padre por haberme dado el regalo de haber conocido a Damiancito y con ello agradecer a todas las hermanas y hermanos, porque su testimonio me ha ayudado mucho en mi crecimiento, no solo como persona sino como hija de Dios. CELEBRANDO A DAMIÁN EN AREQUIPA Hermanas -Comunidad de Arequipa L as hermanas de la comunidad de Arequipa y los colegios Sagrados Corazones y Padre Damián, queremos celebrar con sencillez y en familia, la canonización de nuestro hermano Damián de Veuster. Hemos organizado celebraciones Eucarísticas dominicales en nuestra capilla SS.CC (San Juan de Dios) preparada por los equipos de pastoral de nuestros colegios. Tendremos una conferencia de prensa el día 20 de abril, para dar a conocer a la comunidad arequipeña la vida del P. Damián, haciendo memoria de su partida hacia el Padre, el 15 de abril. La comunidad, junto a ambos colegios, (Izq-der.) Lucía,Haydeé, Lidia, Angelina, Otilia y Luz Reyna estamos organizando la Celebración Eucarística de Acción de Gracias del día 10 de octubre que se realizará a las 7.00 pm. en la Basílica Catedral de Arequipa, presidida por el arzobispo Javier Del Rio Alva, concelebrada con posibles hermanos nuestros y amigos sacerdotes. Seguidamente, se realizará una vigilia en el colegio Padre Damián y en nuestra capilla SS.CC, de esta manera, nos uniremos a la celebración de Canonización de Roma a través de pantallas gigantes. También tendremos una verbena días antes, donde participarán los alumnos (as) de Inicial-Primaria de nuestros colegios con un paseo de antorchas, pasacalle y un festival de canciones alusivas a Damián, en la plaza de Yanahuara. Que el testimonio de Damián nos permita encontrarnos en nuestras actividades internas- externas como familia SS.CC y como Iglesia. «Así el sacrificio de mi salud, que Dios ha querido aceptar haciendo fructificar un poco mi ministerio entre los leprosos, lo encuentro después de todo bien ligero e incluso agradable para mí, atreviéndome a decir como san Pablo: ‘-Estoy muerto y mi vida está escondida con Cristo en Dios`. P. Damián. 14 Padre Damián HACIA LA CANONIZACIÓN DEL PADRE DAMIÁN DE VEUSTER Cecilia Uría Passano Sagrados Corazones – Arequipa Nuestro Beato y padre Damián de Molokai (Tremeloo, Bélgica, 3 de enero de 1840, - Molokai, Hawái, Estados Unidos, 15 de abril de 1889). Misionero Católico belga de la Congregación de los Sagrados Corazones, venerado especialmente por los habitantes de Hawai y por todos los cristianos por haber dedicado su vida al cuidado de los leprosos de Molokai en el reino de Hawái, es el patrón espiritual de los leprosos, marginados, incluyendo a los enfermos de SIDA, y del Estado de Hawai. Fue beatificado en 1995 y la santa sede ha anunciado que el 11 de octubre de este año, será canonizado en Roma. En nuestro colegio, en la semana de su muerte y de su beatificación siempre hemos realizado la oración de la formación de los lunes mencionando su labor y pidiéndole su intercesión por toda su familia Sagrados Corazones. En las aulas hemos realizado fichas o ensayos donde explicábamos quién era y comentábamos la misión y nuestra necesidad de imitar su vida. Con algunas de las alumnas más pequeñas, hicimos fichas con juegos como ludo para llegar a Molokai. Sólo a algunos grados de secundaria, le pasamos la película y la comentamos en clases de religión, continuaremos este trabajo con las secciones que faltan. Este año hemos realizado muchas de nuestras oraciones, mencionando en la reflexión la labor del Padre Damián y cómo aplicarla a nuestras vidas. De la misma manera, en las jornadas estamos dando un espacio para comparar la vida de Damián en Molokai y su misión personal con su grupo de amigas. Hemos pasado la película a todo el personal que labora en el colegio en dos turnos para facilitar su participación y comentario desde la realidad de cada uno. Nuestro proyecto para este año es: Dar a conocer a todos nuestros padres la película con un sábado de cine y poderla comentar después. • Participar en todas las actividades programadas en conjunto con el Colegio Padre Damián: Misas dominicales, vigilia, Eucaristía Central, Difusión por medios radiales y televisivos, visitas a los hospitales de la ciudad repartiendo trifoliados y estampitas con nuestras alumnas dando a conocer su labor con los enfermos. • Dar más énfasis en nuestras aulas desde la formación en la fe la vida y obra de nuestro santo. • Realización de concursos de dibujo y canto para terminar en un festival uniendo a los dos colegios. «Ningún sacrificio es demasiado grande si se hace por Cristo». Padre Damián. • «Mi mayor felicidad es servir al Señor en estos pobres hijos enfermos, rechazados por los demás hombres. Me esfuerzo por llevarlos a todos por el camino del cielo. Y a vosotros, mis queridos padres, hermanos y parientes, os hace falta marchar alegremente por este camino, a fin de que tengamos todos la felicidad de encontrarnos en el cielo. Los tesoros, las riquezas, aún la vida corporal, no son nada, si no tratamos de santificar nuestra alma. Rezad mucho por mí.». Carta nr. 86, a sus padres y hermanos. 25 Noviembre 1873 15 Vida de las Provincias RECORDANDO A HUBERT María Isabel Alayza Profesora del Colegio SS.CC. -Recoleta internos (as) que llegaban con desesperanza, impotencia y dolor a hablar con los abogados que apoyaban permanentemente. Se logró liberar a casi 1200 inocentes, cantidad que luego, al formarse la Comisión Ad-hoc se siguió liberando a través de los indultos, llegando cerca de los 1600. El P. Hubert con niños del colegio E l día domingo 22 de marzo en la celebración de la misa, recordamos la partida a la casa del Padre de nuestro amigo Hubert Lanssiers. La celebración fue a las 9:30 a.m. en la capilla del colegio SS. CC. Recoleta. La capilla se llenó de amigos, trabajadores del colegio y sus familiares, padres de familia, alumnos (as), exalumnos (as), el primer ministro Yehude Simon, el ex ministro Gino Costa, ex internos e internas (conocidos como hijos de Hubert) y sus familiares. La misa fue celebrada por el padre José y el padre Juan María, fue muy emotiva y nos recordó a quien fue un hombre luchador, sacerdote y maestro recoletano, capellán de penales, discípulo de Damian de Molokai, amigo leal y defensor de los derechos humanos. Estar en la capilla, me hizo recordar cuando en el año 1992 nos citaron a los padres de familia para hablar de un «gran proyecto» que daría un sentido sólido a los 100 años de la Recoleta, debía ser un proyecto que diera frutos. Fue en esa convocatoria que pudimos escuchar la propuesta y dar ideas. El entusiasmo llenó la capilla, estaba a punto de nacer ORES, Obra Recoletana de Solidaridad, obra abierta a toda la familia recoletana. Fue así que se formó un pool de médicos y abogados (todos ellos padres de familia recoletanos), cada uno de ellos atendía desde su propio consultorio u oficina. En las instalaciones del colegio funcionaba una oficina en la cual se acogían a los familiares de los Una de las actividades que se tenían programadas para el Centenario, fue el cambio de uniformes que se convirtió en un gran gesto de ayuda. Los alumnos llegaron a reunir cerca de 2500 uniformes antiguos, logrando con esto una donación muy importante. Estos gestos unieron a los que daban y a los que recibían, esa solidaridad nos hacía iguales, nos hacía más hermanos. La mayor preocupación de Hubert era recuperar la dignidad humana, él decía que la mejor forma era a través del trabajo. Cuando se rompió el régimen cerrado de veintitrés horas y media de las veinticuatro de encierro, se abrieron los talleres tanto de cerámica como de tallado de hueso y escultura en cacho de astas; fue en ese momento que se decide hacer una Exposición - Venta de Arte, donde se exhibían los mejores trabajos creados por ellos y se les pagaba respectivamente. Se fue haciendo un pequeño fondo para la compra de maquinarias. Otras de las actividades fueron la creación de las bibliotecas, ya que era la mejor forma de despertar las mentes que habían tratado de anularlas. Se crearon bibliotecas a nivel de penales gracias a la colaboración de personas generosas, la gran mayoría una vez más familia recoletana. El nivel inicial del colegio en el año 2003 decidió tomar la obra dentro de su proyección social. Fue muy interesante que los niños más pequeños del colegio y los padres de familia que recién se iniciaban en la familia recoletana, se sensibilizaran ante las necesidades de los internos e internas de nuestro país, cuando realmente suelen ser personas invisibles para nuestra sociedad. A través de este compromiso se promovió la humanización y la sensibilización que 16 Vida de las Provincias continúa siendo una labor que forma tanto a los niños como a los padres. Al partir Hubert, todos nos preguntamos ¿Qué pasará con ORES?; pasó un tiempo de profunda pena y desconcierto, y de pronto, la ayuda de MEDIFARMA (realizadores del libro Homenaje «El guerrero del perdón»), CARITAS, padres de familia, maestros, exalumnos, etc, empezó a llegar nuevamente. La Asociación de Maestros Recoletanos continúa dando un aporte económico mensual de parte de todos los profesores. La Asociación de padres de familia APAFA, apoya constantemente. Se trata de ser coherente con lo que aprendimos de Hubert, seguir ayudando en los penales en las visitas semanales en las que se vive una comunión, todos se reúnen a hablar de sus proyectos, de sus trabajos, de su esperanza; y sobre todo apoyar a los que salen y quedan en libertad, aunque la gran mayoría queda en completa orfandad. Es por eso que el afán de ORES es tratar de cobijar y cubrir las necesidades inmediatas. Dotar de herramientas que es lo que más necesitan al salir para continuar el trabajo que han realizado durante tantos años. Hubert se fue, pero dejó una enseñanza muy grande, un ejemplo de vida, aquello que todos necesitamos. ORES continúa y se afirma como una obra Recoletana en la que podemos participar todos. ORES tiene el camino trazado, un recorrido largo, debemos aprovechar y fortalecerlo principalmente con nuestros alumnos, con nuestra sociedad, y el ejemplo vivo para nuestros alumnos, cuando les hablamos de los testimonios y compromisos que promueven el Padre Damián y el compromiso con los derechos humanos. Hubert se fue, pero están Estanislao, José Serrand, Juan María, Pedro, Gastón, José Kuwae, que son Recoleta, que son ORES. A CTIVIDADES DEL I.E. P ADRE D AMIÁN COMUNICÁNDONOS CON LAS MADRES, PADRES Y TUTORES DE NUESTROS ALUMNOS Jany Juárez Juárez Directora Colegio Padre Damián E l 25 de marzo tuvimos nuestra primera reunión de información a las madres, padres y apoderados de nuestros alumnos. El patio de vóley quedó pequeño para recibir a nuestros padres de familia. Este año el número de alumnos subió; son 750 niños y adolescentes a quienes nos comprometemos a formar humana y cristianamente en la espiritualidad de los Sagrados Corazones. Aquí algunos alcances: Iniciamos, anunciando a todos la buena noticia: nuestro Patrono el Padre Damián será canonizado el 11 de octubre, y aprendiendo de él, de su sentimiento de fraternidad, trabajaremos en conjunto con el colegio de los Sagrados Corazones, con quienes ya hemos tenido dos reuniones de coordinación. Es ésta, una fiesta de la Congregación de los SSCC, de la Iglesia Católica y de todos los que creemos en un mundo más solidario y más humano. Se informa que los dos colegios tendremos actividades externas e internas. Entre las externas hemos pensado en: anunciar la buena noticia a la colectividad, hacer conocer a Damián. Tendremos la celebración Eucarística en la Catedral, una verbena en la Plaza de Armas de Yanahuara, y la vigilia esperando el momento de su canonización. Vida de las Provincias 17 Como actividades internas, concursos de cantos, poemas, oraciones, acrósticos y afiches sobre Damián, con los padres de familia, alumnos y exalumnas. Continuando la reunión con los padres de familia, les transmitimos, que la pastoral es el corazón de nuestra institución, y que deseamos, que el latir de ese corazón dé el impulso a todo nuestro cuerpo institucional. Nos detuvimos también en lo que llamamos ahora la escuela para madres, padres y apoderados de nuestros alumnos, y es que hemos detectado que tenemos varias familias compuestas por los hijos y madres o padres solos, otras con padre y madre, y finalmente otras con los alumnos y la abuelita o la tía o bien la hermana mayor. Y todas son familias. Nuestra coordinadora de tutoría está realizando un estudio para establecer con precisión el tipo de familia que predomina en nuestro colegio para así orientar nuestra acción, buscando la inclusión de todos y el consecuente bienestar de nuestros alumnos. Este año, nuestro Padre Damián nos bendice, hemos iniciado la coeducación en las aulas de inicial de 3, 4 y 5 años. En esta última tenemos la paridad es decir, igual número de niños y niñas y hemos completado el número de vacantes. Para un primer año está bien ¿verdad? Explicábamos a los padres que tal decisión corresponde al criterio de que la escuela debe preparar para la vida y ésta nos ofrece una sociedad mixta. Por tal razón y en coherencia con este pensamiento, nuestras instituciones educativas deberían desde la base, dar la oportunidad para que niños y niñas crezcan como hermanos, aprendiendo uno del otro la psicología y la manera de comportarse de cada cual. Por otro lado, la Congregación de los Sagrados Corazones desde sus opciones está formada por religiosos y religiosas. El Buen Padre y la Buena Madre quisieron darnos este matiz Congreganista. La coeducación es un espacio educativo donde existe igualdad de trato y oportunidades para hombres y mujeres, un espacio compartido en base al respeto, tolerancia y alejado de todo tipo de sexismo. Además de las ventajas en tener a todos sus hijos formados con la misma espiritualidad SSCC y los otros beneficios, de evitar desplazamientos y posiblemente algunos económicos que podrían tener. En el aspecto académico nuestros maestros han recibido en febrero, implementación del Instituto Apoyo para trabajar Matemática para todos. En Inglés hemos pasado de 2 a 4 horas de dictado por semana y esperamos en unos años que nuestros alumnos pasen diplomas internacionales, lo mismo que en Francés. La lengua de Molière es aprendida por nuestros alumnos desde el 1ro de secundaria en la modalidad de taller. El equipo de Sociales, continúa organizando viajes de estudio, los que fueron muy provechosos, el año pasado. Nuestros alumnos pueden participar también del viaje de intercambio cultural a Francia. Este 2009, cinco alumnas y un maestro estuvieron cerca de dos meses y medio en Francia . El Arte tiene un lugar privilegiado en la formación de nuestros alumnos, pues sabemos que el Arte nos humaniza y en estos tiempos de agitación en que la comunicación se torna más difícil, ayuda a nuestros niños y jóvenes a sacar de su interior lo que desean expresarnos. Es por esto, que en Música tendremos diferentes grupos: Música folclórica, de cámara y contemporánea. La próxima semana inauguraremos nuestra sala de artes plásticas. Para setiembre y con la participación de toda la comunidad educativa tenemos previsto el FESTIVAL DE TODOS LOS SENTIDOS. Terminamos nuestra reunión pidiendo un reconocido aplauso para todo el personal de nuestra Institución Educativa por su entrega, diciendo a los padres de familia que todos nuestros proyectos serán viables si ponemos en práctica dos ingredientes: la comunicación y la confianza. Lo primero lleva a lo segundo y que debemos confiar todos en la protección de nuestro patrono, el Padre Damián. Nuestro Señor sabe muy bien lo que más me conviene para mi santificación, y así, con toda mi alma, repito frecuentemente: «¡Señor, hágase tu voluntad!» P. Damián. 18 Vida de las Provincias Homilía por los 50 años de vida religiosa de Gastón Garatea ss.cc. «SU SANGRE ES PRECIOSA ANTE SUS OJOS» (Salmo 72, 14) Raúl Pariamachi ss.cc. Querido Gastón, hermanos y hermanas: Dice un cantautor, cuyos temas gusta escuchar Gastón, que «de vez en cuando la vida nos besa en la boca y a colores se despliega como un atlas, nos pasea por las calles en volandas y nos sentimos en buenas manos…». Se me ocurre dibujar esta celebración como uno de aquellos «de vez en cuando» en que los amigos y las amigas de Gastón nos juntamos para expresarle toda nuestra estima, admiración y gratitud. Queremos hacerlo con alegría, sencillez y cariño, en torno a esta mesa de la palabra y del cuerpo de Cristo, bajo el signo de la comensalidad que distingue la vida de la Congregación. Esta noche hemos entonado el salmo 72, cuyos primeros versos son una súplica a Dios para que confíe su juicio al rey, de modo que gobierne al pueblo con justicia y a los pobres con equidad. Este salmo es una poderosa intercesión del pueblo de Israel por su rey, donde se expresa el anhelo de la paz y el anuncio de la justicia: «Que traigan los montes paz al pueblo, y justicia los collados. Él hará justicia a los humildes del pueblo, salvará a los hijos de los pobres, y aplastará al opresor» (vv. 3-4). En definitiva, se trata de la esperanza en un reinado de justicia, libertad, paz, prosperidad y bienestar. No cabe duda de que el buen gobierno se basará en la práctica de la justicia y de que esta justicia se orientará preferentemente hacia los pobres de la tierra. Se podría decir que el salmo llega a su culmen en los vv. 12-14 donde emerge la figura del rey como aquel que salvará la vida de los pobres de la opresión y la violencia, porque la sangre de los pobres es preciosa ante sus ojos (cf. v. 14). El carácter precioso, inviolable y sagrado de la vida de los pobres tiene su más excelso defensor en el rey que en adelante guiará los destinos del país de acuerdo a los designios de Dios. El pueblo de Israel eleva su súplica para que el gobierno del rey se ajuste a la soberanía de Dios, que el corazón del rey se conforme al corazón de Dios: el defensor de los pobres. Este hermoso salmo se inserta en la esperanza del pueblo en un rey sobre el que reposará el espíritu de Yahvé, quien –como dice Isaías– no decidirá por las apariencias, sino que juzgará con justicia a los débiles y sentenciará con rectitud a los pobres (cf. Is 11, 3-4). El profeta imagina un tiempo en el que el lobo habitará en paz con el cordero, el niño pastoreará al ternero y al león, la vaca y la osa criarán juntas a sus crías, el niño jugará sobre el agujero de la cobra y nadie hará daño a nadie, porque el conocimiento de Dios llenará la tierra. En la medida en que el gobierno del rey es reflejo de la soberanía de Dios, el rey terreno se convierte en símbolo del rey mesías que al final de los tiempos anunciará a los pobres la buena noticia del reinado de Dios. El cumplimiento de esta esperanza mesiánica es retratada por el evangelista san Lucas cuando presenta a Jesús como el mesías enviado a anunciar la buena nueva a los pobres, a proclamar la liberación a los cautivos y la vista a los ciegos, a dar la libertad a los oprimidos y a proclamar un año de gracia del Señor (cf. Lc 4, 18-19). Jesús es aquel en quien se cumplen las Escrituras, aquel que ha derramado su propia sangre porque la sangre de los pobres es preciosa ante sus ojos: el Mesías esperado de todos los tiempos, cuya victoria sobre el pecado, la opresión y la muerte celebramos hoy. El seguimiento de este Jesús –verdadero hombre y verdadero Dios– es la pasión, la alegría y la belleza de la vida cristiana. Como han señalado los obispos en 19 Vida de las Provincias Publicaciones; profesor de teología en el ISET Juan XXIII; asesor de Cáritas del Perú; asesor de la Comunidad «Héctor de Cárdenas»; párroco de Ayaviri; presidente del Instituto de Pastoral Andina; presidente de las Mesas para la lucha contra la pobreza y miembro de la Comisión de la Verdad. Actualmente es asesor de responsabilidad social en la PUCP. (Izq-der.) Mons. Luis Bambarén, Gastón Garatea, Gustavo Gutiérrez, Raúl Pariamachi y Rafael Sánchez-Concha Aparecida, ser discípulos es sentirse atraídos por Jesús, por la sabiduría de sus palabras, la bondad de su trato, el poder de sus milagros; es estar fascinados por la excepcionalidad de aquel que responde al anhelo del corazón; es haber sido conquistados por la causa del reinado de Dios; es decidirse a abrazar su propio estilo de vida, asumir su misma misión y correr su misma suerte. Bien sabemos que la adhesión libre a la persona de Jesús lleva consigo la opción por los pobres, un compromiso de solidaridad con los pobres y de lucha contra la pobreza en la construcción de un mundo más justo para todos. Hermanos y hermanas: La persona que se consagra a Dios en castidad, pobreza y obediencia, desea sinceramente configurarse con la vida solidaria de Jesús. Se comienza así un camino de seguimiento del Maestro que durará toda la vida, en medio de alegrías, dolores y esperanzas; hasta que de pronto se mira hacia atrás y se ve que han pasado los años desde aquel día en que se le dijo «sí» al Señor. Por eso en esta eucaristía de Pascua queremos celebrar las bodas de oro de vida religiosa de Gastón, quien hace 50 años hizo su primera profesión religiosa como hermano de los Sagrados Corazones. Gastón ha sido alumno, profesor y director del Colegio SS.CC. Recoleta, del que ahora es presidente de Directorio; formador de los jóvenes de la Congregación; superior provincial de la Congregación en el Perú; presidente de la Conferencia de Religiosos del Perú; vice-presidente de la Confederación Latinoamericana de Religiosos; colaborador del Instituto Bartolomé de las Casas y del Centro de Estudios y Quienes hemos conocido a Gastón podemos decir que es sobre todo un hombre de buen corazón, que ha sabido ser un compañero de camino, un padre, un hermano, un amigo, alguien con quien siempre se puede contar. Un creyente en el Dios de Jesucristo, un apasionado con la causa del reinado de Dios. Un religioso sensible frente a la vida de los pobres, de los pequeños –como gusta decir–. Un trabajador incansable, con servicios en la Congregación, la Iglesia y la sociedad. Un hombre cultivado, que en los momentos ganados al trabajo gusta de la buena lectura y de la buena música. Querido Gastón: Gracias por todo el bien que nos has hecho, por las incontables sonrisas que has despertado, por las innumerables lágrimas que has secado, por la férrea esperanza que has sembrado en quienes se acercaron a ti en algún momento de su vida. Recuerdo aquella tarde andina de camino a Ayaviri (cuando el cielo serrano mezcla los azules y rojos en el alma), cuando me recordaste que debemos anunciar con nuestra vida a Jesús, y a este Crucificado. Es lo que has hecho en estos 50 años de fidelidad a Cristo, en los que la vida de los pobres ha sido preciosa ante tus ojos. Queremos regalarte entre todos un abrazo inmenso, como inmenso es tu corazón. Esta noche queremos verte feliz, –como diría Serrat– tan feliz como un niño cuando sale de la escuela Participantes de la Celebración 20 Vida de las Provincias C RÓNICA ACCIÓN DE GRACIAS POR LOS 50 AÑOS DE VIDA RELIGIOSA DE P. GASTÓN GARATEA YORI SS.CC. Wilber Onofre ss.cc. «… El espíritu misionero nos hace libres y disponibles para ejercer nuestro servicio apostólico allá donde seamos enviados a llevar y acoger la Buena Nueva». (Const. 6) H ermanos, Hermanas, laicos y amigos de la Congregación de los Sagrados Corazones, estuvimos reunidos en el templo «La Recoleta» ss.cc. Plaza Francia, el día lunes 13 de abril a las 7.00 pm, para celebrar en una Eucaristía de acción de gracias a Dios, por las «Bodas de Oro» de vida religiosa de nuestro querido hermano P. Gastón Garatea. La llegada de hermanos, hermanas ss.cc, familiares y amigos del Padre Gastón, empezó desde una hora antes del inicio de la celebración Eucarística. Nos alegramos ver a amigos de camino de P. Gastón, muy conocidos en la vida de la Iglesia peruana, como: P. Gustavo Gutiérrez, Mons. Luis Bambarén, Mons. Jesús Mateo Calderón, Mons. Albano Quinn, y el P. Jorge Álvarez; eso por nombrar algunos de los ilustres asistentes. De manera desapercibida estuvo presente el primer ministro Yehude Simon y otras personalidades de la política peruana. También estuvieron presentes ex-compañeros y compañeras de trabajo de diferentes instituciones en las que trabajó nuestro hermano Gastón. Reunidos todos llenos de alegría y de gratitud hacia Dios por su servicio, a los más necesitados (los pequeños), se dio inicio a la Celebración Eucarística precedida por el homenajeado y concelebrada con todos los sacerdotes asistentes. Se notaba en los gestos de las personas presentes el gozo de ver a P. Gastón cumplir largos años de servicio, en favor de los pobres, de los que sufren injusticias de todo tipo, de los excluidos de nuestra sociedad, de los que reclaman por sus derechos y por una vida digna. No se podía agradecer a Dios de otra manera que en la Celebración Eucarística y, mostrando a nuestro hermano Gastón mucho cariño y reconocimiento, por sus inmensas obras en medio del pueblo de Dios, al que ha sido llamado para servir hace 50 años. Nuestro superior provincial P. Raúl Pariamachi, en su homilía, hacía un hermoso recorrido, a manera de testimonio, por los incontables servicios del P. Gastón, ya sea en la Congregación, en la Iglesia peruana y latinoamericana y en el Estado peruano, con trabajos específicos a favor de los pobres. Resaltó, también su calidad humana-cristiana, con un corazón sensible, entregado y apasionado para con los pobres. Ya casi al final de la Celebración Eucarística, el P. Gastón agradeció primeramente, a Dios y luego a los asistentes por los 50 años de vida religiosa dentro de la Congregación de los Sagrados Corazones con estás palabras. «…agradezco a Dios y a ustedes, mis amigos y amigas, les agradezco porque me ayudarán a agradecer a Dios por mi vida y mis servicios… Cada vez siento que me estoy volviendo pequeño porque la realidad exige más. Ayúdenme a seguir trabajando por aquellos que nos necesitan… Les pido que recen por mi vida y mi servicio…» Terminada la Eucaristía, los invitados se trasladaron al patio del convento La Recoleta, para un agasajo, más que eso, para saludar personalmente con abrazos, con palabras y con gestos hermosos de cariño y reconocimiento. En medio de este saludo, se presentó en PowerPoint, el recorrido de la vida del P. Gastón, desde los primeros años de su vida religiosa hasta estos últimos días. Para muchos que tuvimos la oportunidad de participar en este precioso gesto de agradecimiento a Dios por la vida religiosa de P. Gastón, será un recuerdo inolvidable, ya que pudimos unirnos al sentir y al gozo de aquel que entrega su vida a favor del pueblo de Dios. P. Gastón, te agradecemos por tu testimonio de vida como religioso y como luchador incansable por la dignidad del hombre. Te agradecemos por compartir tu vida con nosotros, tus hermanos y hermanas de Congregación. Te animamos para que sigas trabajando y luchando por lo que crees justo para una vida digna de aquellos que nos necesitan, los pobres, nuestros hermanos pequeños, como sueles decir. ¡¡felicidades!! Vida de las Provincias 21 SALUDOS RECIBIDOS Para Gastón Garatea: Creo que no exagero si digo que Gastón es uno de los hermanos con más «relevancia social» en toda la Congregación. Esto se debe a su carácter de figura pública y de referente moral, fruto sobre todo de su militancia activa y eficaz en favor de los pobres, de la justicia y de la verdad. La celebración de sus 50 años de vida religiosa nos desvela la fuente escondida de un compromiso tan apasionado y convencido: una vocación enraizada en la fe, la escucha del Señor entregado y glorioso, el Espíritu de un Dios que sólo se deja conocer en el ejercicio de la misericordia. 50 años de vida religiosa es decir 50 años de discipulado, de atenta escuela ante cuyo Maestro sólo cabe decir: «pobres siervos somos, hemos hecho lo que teníamos que hacer». Esa es la grandeza del discípulo. 50 años de vida religiosa son también 50 años de camino como hermano de sus hermanos. A estas alturas de la vida, Gastón, te toca más que nunca ser «padre» de tus hermanos más jóvenes. El desafío de la comunión entre generaciones dentro de nuestra familia, es exigente y difícil, pero igualmente apasionante y necesario, tanto para «contaminar» a los que vienen detrás con el veneno de los mejores deseos evangélicos, como para reconocer en los «hijos» la permanente novedad del Dios vivo y recreador. Gracias, Gastón, por tu vida, tu fe, tu servicio, por llevarnos tan lejos en la lucha por un mundo mejor para los más pequeños. Que Dios te P. Javier Álvarez-Ossorio, ss.cc. sostenga, te bendiga y sea siempre tu alegría. Superior General Un hermano, un amigo y un líder Querido Gastón: me quiero unir a la memoria de lo que ha sido tu historia que, en parte, es también la mía. Tú sabes el aprecio que siempre te he tenido y que con ocasión de tus cincuenta años de vida religiosa se hacen en mí: gratitud al Señor por lo que has sido y sigues siendo como hermano y amigo, y reconocimiento a tu entrega generosa y muchas veces difícil en las actividades y servicios que te ha tocado iniciar, conducir, liderar. Creo que la Iglesia, la Congregación y tu propia Patria pueden sentir por ti, con razones justificadas, un sano orgullo, «porque es justo que lo tengan» como canta Atahualpa Yupanqui. Dentro de tu amplia gama de actividades, compromisos, servicios... creo que resalta tu evangélica predilección por los pobres y sufrientes, a los que has dedicado tu servicio, largos y exigentes años. Gracias Gastón, aunque no te sientas tan cómodo por esta celebración de tus 50 años de Vida Religiosa, recibe mi afecto, mi gratitud y mi alegría de seguir caminando contigo en la misma vocación que ambos hemos recibido y compartido. Que los Corazones de Jesús y de María te sigan acompañando «jusqu´au but du chemin» (hasta el final del camino). Un abrazo de Javier Cerda F. ss.cc. 22 Vida de las Provincias Gastón: Al celebrar las Bodas de Oro de Vida Religiosa de nuestro querido hermano Gastón, no podemos dejar de sentir todo lo que él significa para nosotros, para nuestra Familia de los SS.CC., para nuestra Iglesia y para nuestro Perú. Su persona, tan polifacética y carismática es un regalo del Amor de Dios, lo ha dotado de una sensibilidad exquisita y un gran corazón, una mente brillante, un don de gentes extraordinario y un humor travieso y juquetón. Gastón, el popular y conocido Gastón, es el amigo fiel y cercano, el profundo trasmisor de la bondad de Dios y de su preferencia por los pequeños, el atrevido y audaz defensor de los pobres, el incansable sembrador de la verdad, la justicia y la paz, el hermano entrañable a toda prueba. La Congregación tiene mucho que agradecer a Gastón y creo que todavía más las Hermanas. Siempre ha estado a nuestro lado, en las buenas y en las malas, para abrir nuestros horizontes e invitarnos a ir siempre más allá, para cuestionarnos y sacarnos de nuestras estrecheces y mezquindades, para ayudarnos a dar una respuesta más adecuada a las urgencias de nuestra Iglesia Latinoamericana, para levantarnos el ánimo y enseñarnos a reírnos de nuestras grandezas perdidas… para enseñarnos a soñar con una Congregación de Hermanos y Hermanas más unidos y comprometidos con la realidad. ¡Cómo no agradecer a Dios el tener como hermano y amigo a Gastón…! Marcela de Taboada SS.CC. Querido Gastón: Hace más de 40 años que nos conocemos. A lo largo de este tiempo hemos sido compañeros de ruta. En ese caminar me he enriquecido con tu testimonio de hombre de fe y he admirado tu disponibilidad para aceptar, sin titubeos, responsabilidades cuando se trataba de servir a los más pobres del país. Permíteme que, a nivel personal, te agradezca tu amistad, siempre solidaria, en las duras y las maduras. A muchos has ayudado a no desmayar en el camino de la esperanza. A mí entre ellos. Me uno con alegría a la acción de gracias con motivo de tus 50 años de vida religiosa. Gustavo Gutiérrez Saludos al P. Gastón: Una de las enseñanzas que aprendí de Gastón es preguntar siempre por el sentido de las cosas; sus cincuenta años de religioso son ocasión para practicarla. ¿Qué celebramos? Que en una sociedad en la cual la palabra perdió valor, prevalece lo provisional y la falta de compromiso, un hermano nuestro ha sido fiel a la llamada del Señor; ha sido capaz de superar los problemas del entorno y la fragilidad humana, y sigue feliz en la familia que escogió. ¿Por qué celebramos en la comunidad Héctor de Cárdenas? Por dos razones: junto con Héctor y los dos José Luis (González y Ramírez), Gastón ha sido y es una persona fundamental para que encontremos la presencia a la vez feliz y cuestionante del Señor en nuestras vidas de cada día, y colaboremos en la construcción del Reino. Y la segunda, porque ha sido fiel a cada uno de nosotros, y a nuestro esfuerzo de ser comunidad. ¡Gracias, Gastón! ¡Celebramos contigo! Juan Borea Odría OP 23 Vida de las Provincias Querido Gastón: En estos días de celebración de tu vida religiosa, la «memoria del corazón» fluye, por cierto, con mucha facilidad. Cuatro de nosotros llegamos a Los Perales en 1960 y tú habías llegado dos años antes. Desde entonces se fue creando entre tu grupo y el nuestro una fraterna amistad, consolidada después en el tiempo, a partir de los años de formación conjunta y de los múltiples encuentros de Congregación que nos ha tocado compartir. Hemos coincidido tantas veces en preocupaciones y anhelos por el mundo, por la Iglesia, por la Congregación. También en el empeño por dar lo mejor de nosotros, a pesar de nuestra fragilidad y de nuestros límites. Pero el Señor sabe que lo hemos buscado y lo seguimos buscando con renovado afán en esta edad de nuestras vidas. Tú has estado siempre ahí, fiel en esa búsqueda, sensible a lo humano como Jesús, dando vida y protegiéndola, acompañando a tu pueblo, construyendo verdad y justicia en el nombre de nuestro Dios. Por tu vida, por tu testimonio, gracias Gastón. Un gran abrazo de tu hermano, Enrique Moreno Laval ss.cc. Querido «padre Gastón», como te dicen en el Sur Andino Gracias por haberme permitido a mí y a mi comunidad a lo largo de estos años, ser testigo de tu pasión por Dios y los pobres. Recuerdo cómo te apretaba el corazón la situación de tu querido país y nos escribías en aquellos días en una carta «me duele mi Perú». Y desde allí verte en esa búsqueda constante por la justicia y la verdad, siempre en función de la realidad, sin dejar que nadie se entretenga en discursos ideológicos que no atiendan la real necesidad de la mayoría y en especial de los más pobres. Como solías decir no me «interesa» hablar de la pobreza, sino de los pobres. También te he visto disfrutar y gozar con gestos tan sencillos de estos pobres que se acercaban a ti, o en una asamblea levantaban su voz, o lograban gestionar sus recursos con justicia y derecho. Caminabas en medio del pueblo gozando como un niño y como un padre, sintiéndose ellos niños contigo, queridos y sostenidos con tu presencia. Te enojabas, los reñías pero no dejabas de estar con ellos y desde ellos; esto siempre lo han sabido. Por eso creo que ha sido mística y política, esa apuesta que has hecho, al estilo de Jesús, de animar la creación de «mesas donde todos/as tengan un lugar». Gracias por estos 50 años de «terca» y tierna predicación del evangelio. Hna. María Julia Ardito OP Querido Gastón: Con gozo me uno a tu acción de gracias por estos 50 años de vida religiosa. Un tiempo largo que se concentra en la experiencia única y siempre actual del Amor de Dios derramado en nuestros corazones y en todo el universo. Que tu vida puesta en Sus manos siga siendo un signo que invite al mundo a volver la mirada hacia Jesús, Nuestro Señor, hombre tierno, pequeño y vulnerable en quien Dios nos mostró su Plenitud. Que hoy Él siga llenándote de ese Espíritu que ama a los sencillos y que, bajo la forma de la Sabiduría, «en todas las edades, entra en las almas santas y forma en ellas amigos de Dios y profetas» (Sb 7,27). Hna. María José Caram 24 vVida de las Provincias Querido Gastón: Parece mentira que ya hayan transcurrido 50 años de nuestra profesión religiosa, tú en Lima y yo en Santiago, el mismo día 12 de Abril. Compartirás conmigo la misma alegría de cincuenta años llenos de vida y profunda felicidad. Un tiempo aparentemente largo, lleno de recuerdos que nos invitan a una sincera acción de gracias a Dios y a la Congregación. Podríamos llenar varias páginas de recuerdos de los siete años vividos en Los Perales. Tendríamos que traer a la memoria a tantos hermanos que nos enseñaron a mirar y a conocer a Jesús desde su corazón. Nos faltará tiempo para hacerlo en el encuentro que estamos esperando realizar aquí, en Santiago. Ya hablaremos de nuestro buen maestro Esteban, que nos acompaña hasta el día de hoy con su sabiduría, cariño y santidad; de nuestro común amigo Pablo, que nos sigue regalando con su amistad a toda prueba; de Sergio, Beltrán, Mario, Cristián y tantos más. Por ahora, recibe este saludo y cuenta con mi oración de acción de gracias ese día 12, fiesta de la Pascua del Señor, aniversario de nuestra profesión. Recibe un abrazo con el afecto y amistad de siempre. José Vicente ss.cc. La fidelidad de Dios en Gastón L a fidelidad de Dios se manifiesta entre nosotros en este jubileo de Gastón. Tiempo de gracia y ocasión para unirnos a él en su oración agradecida al Padre por las maravillas que ha obrado. Desde el Colegio de la Recoleta, Los Perales, Ramón Zavala, Ayaviri, Cocharcas de Villa, la CLAR y la CONFER, el ISET, Montemar y Wilson, Plaza Francia y Monterrico, junto a los Hermanitos y Hermanitas, los Penales y Hospitales, el CEP, el IBC y el IPA, las Mesas de Concertación, la CVR, el Directorio del Colegio y la PUCP. Un itinerario que el Señor me he permitido seguir y compartir de cerca y de lejos. Quisiera agradecer los tiempos serenos de meditación de la Palabra en medio del clima eucarístico que siempre ha cuidado. Su profunda convicción en el Amor gratuito y misericordioso de Dios. Por recordar siempre nuestra condición de discípulos del Señor Jesús. La centralidad de la opción por los pobres en su vida. El diálogo permanente con las personas marginadas en nuestro país y su discernimiento de la voluntad del Dios de la Vida en cada coyuntura que le ha tocado enfrentar. Generoso oyente, siempre desafiando, abriendo horizontes y reclamando posturas evangélicas claras. Invitándonos a considerar el cuidado de lo humano en todo. El tiempo compartido nos permite hoy encontrarnos y evocar, aludir, escucharnos. Gracias por la fidelidad de tu amistad y tu estar allí siempre. Y ahora un vaso de buen vino compartido, una guitarra y una canción de Serrat…»de aldea en aldea, el viento lo lleva siguiendo el sendero…». Pablo Espinoza Vida de las Provincias 25 Es difícil expresar lo que la amistad de Gastón ha significado en mi vida. Lo conocí hacia finales de los años 60, tiempos de intensa búsqueda eclesial conjunta para ir dando respuestas actualizadas a los signos de los tiempos que nos urgían y se presentaban evidentes en la pobreza e inequidad de nuestro país. Juntos hemos compartido el dinamismo e impulso de Vaticano II y Medellín, hecho vida en el Perú gracias al compromiso de los Obispos presididos por el Cardenal Landázuri. Aprendido del profetismo del Magisterio Latinoamericano, participado de la renovación de la Vida Religiosa propiciada por la CLAR, de la Publicación y florecimiento de la Teología de Liberación. Nos ha ayudado mucho el relacionarnos con tantas personas comprometidas en la Defensa de la Vida, la Dignidad y los Derechos Humanos, con CEAS y otros grupos que buscábamos construir paz con justicia social. Muy importantes también en mi vida los años que compartí con Gastón en la Prelatura de Ayaviri: Años intensos en medio del accionar de Sendero Luminoso y de las Fuerzas Armadas en Puno. Años especialmente fraternos con muchos hermanos y hermanas de la ciudad y del campo, comunión impulsada por la presencia y la orientación de Mons. Francisco d’Alteroche y después de Mons. Juan Godayol. Unidad enriquecida por la diversidad y alimentada por la vivencia de la Eucaristía: vida entregada, vida repartida generosa y gratuitamente en esa región amenazada por la violencia y marginada por el país. He aprendido de Gastón a cultivar la solidaridad, a cuidarnos unos a otros, a sentirnos responsables del hermano, a alegrarnos con los pequeños o grandes logros de los demás. Hemos aprendido de los sencillos, hemos contemplado gestos de mucho amor y ternura en medio del mayor dolor. Mi amistad con Gastón ha sido escuela de evangelio. .A su lado he compartido serenidad, alegría, fraternidad, gozo, capacidad de riesgo, sensibilidad y comprensión, iniciativa, novedad para crear respuestas a las nuevas necesidades. Gastón, me alegro mucho de poder participar en los 50 años de tu entrega sacerdotal. Gracias por tu respuesta fiel a la acción del Espíritu en tu vida y en tu misión. Gracias por tu creatividad y audacia para comprometerte a favor de la Lucha contra la Pobreza, por la Verdad y Reconciliación en nuestro país. Gracias por tu amistad discreta e incondicional. Por tu gran Amor a ese Corazón Traspasado que te da fuerzas para descubrir y visibilizar el Amor a lo largo de tu vida. Por mostrarnos en lo sencillo y cotidiano la experiencia pascual, que la muerte no es la palabra definitiva. Margarita Recavarren rscj Noticias Hermanas • Teresa Lazcano y Candy Núñez, viajaron a México para visitar a las hermanas de la Zona y participar del Encuentro de la Asamblea Zonal de las Hermanas que se realizará del 14 al 22 de abril. • Del 23 al 24 del presente, se llevará a cabo el Encuentro de Directoras y Promotoras de los cuatro Colegios SS.CC. de las hermanas en la Casa de Espiritualidad «Hermasie Paget» para tratar el plan global educativo. • El viernes 24 a las 7 pm. se dará inicio al Retiro Pastoral Juvenil Vocacional, en el que participarán todos los jóvenes de las comunidades juveniles donde se encuentran los hermanos y hermanas: Laderas, Ensenada, Reina de la Paz, Belén, Recoleta, Plaza Francia y Canto Grande. Culminará el domingo 26 después del almuerzo. Este retiro es organizado por la comisión de Pastoral Juvenil Vocacional de Hermanos, Hermanas y Laicos SS.CC. • Nuestra hermana María Elena Arizaca, estará viajando el jueves 23 del presente al Brasil para incorporarse a la comunidad «Padre Damián» de Alvorada. Colegio SS.CC. Recoleta Bachillerato Internacional ALUMNA PREMIADA. La alumna Danika Yamamoto Honma del 1er. año de Bachillerato, ha ganado la Beca a la excelencia que otorga la Asociación Cultural Peruano- Británica, por haber obtenido la más alta calificación en el examen FCE. El premio consiste en un mes de estadía en Londres con el objetivo de que practique el idioma inglés. Primer encuentro de Escuela para Padres El pasado sábado 28 de marzo se empezó con las nuevas familias del colegio. Asistieron cerca de 150 padres y madres quienes participaron con mucho entusiasmo de la reunión que trató sobre la Espiritualidad Sagrados Corazones. La bienvenida estuvo a cargo del P. Pedro Vidarte, Subdirector de Pastoral del colegio; la reflexión: Lo que significa el amor de Dios, representado en los Corazones de Jesús y María, estuvo a cargo del padre José Serrand. 26 Historia ss.cc. MADRE MADELEINE DOURDOIGNE Superiora del Colegio SS.CC. Belén de 1915 a 1949. Hace 60 años partió a la Casa del Padre. Sr. Jorge Luis Castro Corresponsal Colegio de los SSCC. Belén. «Única, excepcional», así se refirió Madre Rosa Victoria Checa (1) a Madre Madeleine Dourdoigne en la entrevista que le hicimos en setiembre del año pasado. Sin duda Madre Madeleine, dejó una huella profunda en quienes tuvieron la suerte de conocerla. Madre Madeleine había nacido en Normandía y llegó como Superiora de Belén en 1915 sucediendo en el cargo a Madre Therese Rigal. De una extraordinaria calidad humana, sabía combinar la bondad con el respeto a la autoridad, pero estando siempre abierta a escuchar a todos. Fue además Visitadora de las Casas de la Congregación en América. A lo largo de esos inolvidables años compartió el gobierno del Colegio con Madre Margarita y con Madre Anne Saulnier, conocida como Madre Regina. Por esos años el uniforme de diario consistía en un vestido azul de lana con cuello blanco, correa de cuero azul, guantes blancos y sombrero azul para las salidas a la calle, velo blanco para la iglesia, mandil negro para las clases y los recreos. Ataviadas de esa manera, las alumnas del Colegio de los SS. CC. Belén acudían todos los sábados a una ceremonia corta, pero formal donde se hacía entrega de las notas semanales. A esa ceremonia acudía siempre Madre Madeleine. Madre Madeleine fue una de las religiosas que a lo largo de toda su vida constituyó un ejemplo de vida y entrega a los demás. A lo largo de extensos 34 años ocupó el difícil puesto de Superiora con una dedicación y amor verdaderamente ejemplares. Ella no hacía distinciones entre las personas por su posición social, saludaba y trataba por igual a los presidentes, embajadores y funcionarios como a los hombres y mujeres del pueblo que la visitaban. Siempre sencilla, no le molestaba efectuar labores menudas si era necesario. Uno de los momentos más recordados por sus exalumnas, fue quizá el día en que se conoció en Lima la noticia de la liberación de París por las fuerzas aliadas, el 23 de agosto de 1944 y Madre Madeleine fue saludada por sus alumnas entonando la Marsellesa. De ello dejó testimonio la alumna Teresa Torres Llosa en el anuario de su Promoción correspondiente a aquel año (2). Relata también que, muy emocionada, Madre Madeleine concedió un recreo muy largo al final del cual la Marsellesa volvió a ser cantada con entusiasmo. A Madre Madeleine correspondió el honor de celebrar los 100 años de fundación del Colegio en 1948. En esa ocasión recibió del Papa Pío XII, la bendición Pro Eclesia acompañada de saludos y felicitaciones (3). Muy querida por sus alumnas y por todas las religiosas, Madre Madeleine falleció sorpresivamente en la casa de Chancay el 11 de febrero de 1949, cuando aún tenía la fortaleza para seguir dirigiendo el Colegio por muchos años más. Su desaparición física, enlutó a la Institución y sumió en la más honda tristeza a toda la Comunidad Belenista «trocándose las imágenes gozosas de las fiestas centenarias en tristes escenas de luto y de congoja» (El Comercio. Beatriz Cisneros, febrero de 1949). En los archivos del Colegio se guardan numerosas fotografías que dan testimonio de cuánto se quiso a Madre Madeleine. A su entierro acudieron personas de todas las clases sociales llegando a formar una compacta multitud. Su pérdida fue muy dura para sus Hermanas de Congregación. Formaban la Comunidad de los Sagrados Corazones en ese momento, las siguientes religiosas: M. Regina Solnier, M. Enriqueta Aguayo, M. Antoinette Barranger, M. Clarise Batard, M. Gerardina Carvallo, M. Virginie Cochet, M. Irene Maurin, M. Delia Metge, M. Avelina Rosenthal, M. Lola Lancho, M. María Paz Cobián, M. Lucinda Camacho, M. María Victoria Fernández, M. Hermasia Herrera, M. Margarita del Carmen Saenz, y las jóvenes M. Rosa Victoria Checa, M. Bernarda Ballón, M. Mercedes Rotalde, y M. Paul Henriette Guislain (4), quienes se unieron en oración para pedir por su alma y para agradecer al Señor por haber tenido a alguien tan excepcional a su lado. Vino como Superiora de Belén y Provincial del Perú Madre Helène Anguet. En 1948 Madre Madeleine había concedido al diario El Comercio una entrevista con motivo de los 100 años de fundación. Al enterarse de su fallecimiento el Decano no podía dejar de dedicarle una nota sobre la base de una comunicación que le entregó la Congregación donde se leía: «Se le encontraba siempre igual ya sea que se tratase de recibir la visita de un alto dignatario como de Historia ss.cc. contestar el saludo de alguna persona del servicio. Sabía unir el celo y autoridad de la más cumplida Superiora con la mas dulce bondad que la hacia accesible en todo momento: unía una gran prudencia y discreción con un trato abierto y lleno de naturalidad que se traducía en rasgos de sencillez como el de tocar la campana del aseo, cuando la religiosa encargada de hacerlo estaba ausente...» (El Comercio,26 de febrero de 1949). Que sirvan estas líneas para recordar a Madre Madeleine Duordoigne y que elevando una oración por su eterno descanso, su memoria y ejemplo nos inspire siempre a seguir viviendo día a día la Misión de Contemplar, Vivir y Anunciar el Amor de Dios revelado en Jesús y plenamente compartido por María. 27 Notas 1. En setiembre del año pasado Madre Rosa Victoria Checa nos concedió una entrevista personal para referir aspectos de la historia del Colegio de los SS.CC. Belén. 2. Anuario de la Promoción 1944. Documento existente en el Archivo de la Congregación. 3. Libro del Centenario del Colegio de los SS.CC. Belén 1848-1948. Archivo de la Congregación. 4. La relación de las Madres SS.CC. de 1949 sido tomada de la Comunicación Oficial enviada por la Congregación al Ministerio de Educación. Este documento se conserva en los Archivos de la Congregación. Fuentes - El Comercio. Edición del 26 de febrero de 1949. - Colegio de los SS.CC. Belén. Libro del Centenario. - Anuario de la Promoción 1944 del Colegio de los SS.CC. Belén. 28 Rama Secular ss.cc. Tercera parte: EXPERIENCIA DE DIOS EN LA VIDA LAICAL, APROXIMACIONES A LA PRÁCTICA Para terminar esta secuencia de temas relacionado a la experiencia de Dios, en esta oportunidad nos aproximaremos a esbozar algunas propuestas que podrían germinar en el futuro y que nos permitan seguir madurando nuestro compromiso laical y dentro de este, la reflexión de una identidad eclesial más definida y más comprometida. Algunas de estas propuestas ya se realizan de alguna manera dentro de algunos espacios o propuestas pastorales, por lo tanto, la mención es tan sólo resaltar la importancia de mantener o hacer más presente esta práctica, en función de una mayor promoción de la vida laical. ORACIÓN Y VIDA LAICAL. Generalmente la experiencia de oración es un aspecto del compromiso laical que generalmente es tomado con muy poca seriedad. Sin embargo, es conocido que muchos laicos tienen en la vida diaria, experiencias de oración apoyadas en esta circunstancia. Es muy poco probable que encontremos laicos sumergidos en experiencias de oración que los alejen de su realidad. Una de las constantes de esta oración laical es la cercanía con lo que cotidianamente viven. ¿Es posible hablar de una mística de la oración laical? Quizás tengamos que decir a favor de esta posibilidad que las conversaciones con varios laicos sobre el tema está marcada por una necesidad de «orar la realidad» para poder actuar comprometidamente: ora la madre de familia preparando la lonchera de sus hijos o el trabajador yendo al trabajo, que reza un padrenuestro con la intención de hacer un buen día con sus compañeros, el maestro cuando prepara su clase, el empresario cuando tiene que tomar alguna decisión que involucra el crecimiento de su empresa, el padre de familia cuando intenta comunicarse efectivamente con su esposa y sus hijos, en fin, las circunstancias de la vida laical tienen siempre estos «picos» que ocurren a diario en nuestras vidas. Quizás haya que decir a favor que lo que ocurre no es solamente una intención de conseguir una «protección divina» o un «favor de Dios» para la acción, es algo más que eso. Podríamos decir que cuando un laico reza en medio de la acción es que se está ofreciendo a sí mismo como ofrenda, que está tratando de atraer con su acción la atención de Dios sobre esa realidad en la que intenta intervenir. Lo que muchas veces vemos es como Dios obra en estas situaciones construyendo nuevas posibilidades de las cuales nos invitan a renovar nuestro compromiso y nuestro testimonio. La oración es estonces más que «en la acción» una oración «acerca de la acción»; la actitud más básica es la confianza en la voluntad de Dios y el estilo de la acción es la de una que pretende desde lo que somos, entregar algo a los demás, ese algo puede ser unas palabras, un esfuerzo, algo que tenemos que desprendernos. Es esta oración la que hacemos los laicos, la que lleva más allá nuestro día a día, y convierte una acción en Evangelio. En este sentido, cuando hablamos de la oración laical, podríamos ensayar algunas necesidades o retos para hacer de esta una verdadera escuela o camino de oración: - - - Urge profundizar los temas de esta práctica. Esta experiencia de oración puede también terminar en el vacío o mecanizarse para satisfacer nuestra conciencia. Necesitamos darle a esta experiencia un fondo formativo, que nos lleve a la reflexión bíblica y a la práctica sacramental. Llevar esos motivos de oración a la experiencia comunitaria. Es importante llevar lo que vamos cultivando personalmente a la oración comunitaria. Es en nuestras comunidades donde recogemos nuevos caminos para continuar profundizando nuestra oración y nuestra vida. Confiar en la presencia del Espíritu en la oración comunitaria que nos dará las claves para continuar con nuestro esfuerzo para vivir en el mundo desde el corazón de la Iglesia. Madurar nuestro proyecto personal a la luz de esta experiencia de oración. No podemos separar este camino de oración de un proyecto personal que responda a ella. Somos conscientes que cada experiencia de oración nos descubre un lado nuevo de nuestra experiencia con el Señor, y que nuestra vida tiende con esta experiencia a buscar que estar más cerca de su presencia. Por lo tanto, lo más importante en este aspecto es revisar cómo estamos haciendo que toda nuestra vida nos conduzca a una comunión más cercana a Dios. Para esto los laicos podemos someter a revisión nuestro proyecto personal de vida, tema que trataremos de abordar en próximos artículos, y que es una herramienta para madurar nuestro compromiso. 29 Rama Secular ss.cc. PROFUNDIDAD DE NUESTRAS RELACIONES HUMANAS. Es curioso citar este tópico dentro de un tema como este, sin embargo, creo que para hablar de la experiencia de Dios dentro de nuestra vida laical, hay que pasar necesariamente por él. Para nosotros los laicos, el relacionarnos con los demás es una manera de comprometernos con Jesucristo. La vida laical es un camino de búsqueda de la voluntad de Dios en compañía de Jesucristo, nuestro prójimo. En medio del mundo, un tejido infinito de intereses y de voluntades se despliega día a día delante de nuestros ojos, y no podemos ser ajenos a ese reto. Relacionarnos con los demás, es no sólo una manera de vivir nuestra vida cotidiana, sino también nuestro principal campo de evangelización. Los laicos, a diferencia de otros estados de vida, tenemos poca oportunidad de abordar las plazas, o ser reconocidos públicamente. Nuestro principal escenario es el de la relación con el que comparte mi mesa, mi trabajo, mi casa, el barrio. A ellos llevo yo lo mejor de mi amor por Dios, ellos son mi prójimo. No hay más que pensar cómo vivo yo esas relaciones, cual es mi responsabilidad con cada uno de ellos. Los laicos estamos llamados a cultivar finamente estos espacios de relación con los demás, no por interés propio, ni por el afán de ser reconocidos como buenos. Las relaciones son para nosotros un medio para hacer presente el Reino de Dios; cada conexión con un corazón humano es una oportunidad de hacer crecer esta fraternidad humana que Dios quiere, por lo tanto nuestro trabajo personal debe llevarnos a preocuparnos y a ser cada día más cuidadosos en nuestras relaciones. De todos los espacios, el familiar resulta el más urgente de compromiso. Estamos llamados a construir relaciones familiares que hablen de humanidad, de respeto por el otro, de corresponsabilidad. Las familias necesitan refrescarse con personas que vivan comprometidas con el diálogo, la búsqueda de mayor trato afectivo y también de un mayor compromiso por la madurez humana. Los que somos padres y madres, tenemos en este espacio una gran oportunidad para servir al Señor, siendo amigos de nuestros cónyuges y familiares más próximos, acogiendo el perdón y la conversión como una herramienta para construir cada día mejores relaciones. También nuestros hijos son una oportunidad de cultivar el Amor de Dios a través de nuestra preocupación por ellos, en las buenas y en las malas. En los espacios de trabajo o de relaciones interpersonales, estamos llamados a construir verdaderas relaciones de amistad. La fraternidad es uno de los frutos que habla por si sola de lo mucho que Dios nos ama. No necesitamos convertirnos en guías de los demás, el mundo necesita amigos sinceros, personas que reconozcan que todos somos importantes y valiosos, y que hemos sido invitados a este mundo para lograr entre todos una gran familia. Convertir esto en realidad ya es un buen logro. Lo demás está sin duda en las manos de Dios. Las relaciones humanas son esta perspectiva, toda una búsqueda de Dios en el otro, de lo que me quiere decir cada persona, del valor que tiene su palabra y su acción. Dejar de lado lo que los demás nos dicen, es dejar de escuchar a Dios, por lo tanto, debemos sentirnos llamados a convertirnos constantemente en nuestras relaciones humanas. La comunidad, la corrección fraterna y el compartir en esto son las escuelas más efectivas de fraternidad que tenemos en nuestra experiencia creyente. Hasta aquí algunas pistas que venimos encontrando en nuestro caminar, esperamos que hayan despertado nuevas preguntas. Como siempre, abrimos el diálogo a aquellos que quieran compartir algo de lo que hemos expresado, pueden escribirnos a [email protected] . Muchas gracias. Noticias de la Comunidad Héctor de Cárdenas Almuerzo de Integración: El domingo 1º de marzo la Comunidad se dio cita para un almuerzo de integración en la casa de la familia Lugon en Chaclacayo. Comunos de todas las edades compartieron dinámicas, juegos, cantos y conversas además del almuerzo, que estuvo precedido por la Eucaristía celebrada por Rafael Sánchez-Concha. Misa de Niños: Luego de la primera experiencia, el sábado 7 de marzo se realizó la segunda «misa de niños» en la CHC, esta vez presidida por Rafael SánchezConcha quien, por cierto, se ha comprometido a colaborar una vez al mes (los terceros sábados) para mantener este espacio de formación en la fe de los pequeños. La siguiente está prevista para el sábado 18 de abril. Equipo de Animadores: E l equipo que asumirá la preparación a la Confirmación está en pleno «taller de verano» para capacitar a sus animadores. La preparación tiene previsto culminar a tiempo para la participación de varios de ellos en el Retiro de Espiritualidad SS.CC. Asamblea Anual: El domingo 5 de abril, Domingo de Ramos, se realizará la Asamblea Anual de la Comunidad. Luego de evaluar el año y trabajar algunos temas de fondo, está previsto elegir a las autoridades que se encargarán de la marcha de la Comunidad durante el año 2009. En la Eucaristía final, los Miembros Plenos renovarán sus promesas ante la Comunidad.