Junio - Julio 2014 N° 372-373 Tomo XXVI - Año 47 Boletín Sagrados Corazones - Perú Sumario Editorial Manuel Lozano...................................................................................................................................................... 3 Los Sagrados Corazones en la Iglesia Mi vida a la luz de la Espiritualidad de los SSCC. Srta Nélida Pareja Wong.....................................................4 Seguir al Señor con alegría en esta tierra bendita. Hermann Wendling sscc.............................................. 5 Apasionadas por el ser humano. Edith Paredes sscc................................................................................ 7 Entrevista: “Tengo la suerte de vivir”. Raúl Pariamachi sscc....................................................................... 8 Acompañar la vida desde el Carisma sscc. Ana Lucia Cardona sscc ....................................................... 12 Mi experiencia de ser acompañante y formador sscc “Si cuentan los números”. Lucio Colque sscc..... 13 Damián: reparación y adoración. Raúl Pariamachi sscc........................................................................... 15 Vidas de las Provincias Fiesta de los Sagrados Corazones. Wilber Onofre Huaricallo sscc...................................................... 18 Comunidad de Nuestra Señora de Guadalupe. Atotonilco-México............................................. 19 Colegios SSCC Encuentro de colegios Sagrados Corazones. Sra. Yuliana Rondón........................................................ 20 Dejamos el nido con tus huellas. Diana Garcia M.................................................................................. 22 Recordemos el pasado y reflexionemos sobre nuestro futuro. Lic. Carlos Zevallos Ramos...................... 23 Noticias SSCC................................................................................................................................. 24 Hermanos: Provincia del Perú Hermanas: Provincia del Perú-Brasil-México Laicos: Rama Secular - Sector Perú RESPONSABLES P. Raúl Pariamachi, sscc Hna. Valéria Gomes dos Santos, sscc APORTES Y SUGERENCIAS [email protected] [email protected] www.sscc.pe DIAGRAMACIÓN, DISEÑO Srta. Rosalynn Moreno V. IMPRESIÓN y ADM. WEB Srta. Delia Amado R. CARÁTULA Sr. Vladimir Bermudez REDACCIÓN Hna. Graciela Zúñiga, sscc Hna. María Javier Echecopar, sscc COLABORADORES Hno. Álex Espinoza sscc Hna. Marilene de Souza, sscc Hna. Ma. Antonia Macas, sscc Nuestra Familia Editorial L a experiencia de leer es una aventura que nos lleva al conocimiento de las realidades de la sociedad y del pensamiento humano, pero también nos puede invitar a vivir las profundidades de nuestra propia persona y del sentido de la vida. Este es el caso del presente número, donde tendremos la posibilidad de acceder al testimonio de diferentes personas que nos compartirán su experiencia sobre la espiritualidad de los Sagrados Corazones. En el tiempo presente el tema de la espiritualidad resulta muy atractivo, pero en una acepción más relacionada con un sentimiento de realización individual. Hoy los hombres y mujeres tienen un gran anhelo de vivir experiencias diferentes, en las que el cuerpo y el espíritu se expresen con libertad, una libertad que lamentablemente deja de lado la confrontación con lo que viven o anhelan los demás. La espiritualidad que vamos a encontrar en los testimonios siguientes es la que viene de nuestra experiencia cristiana de vivir “según el Espíritu”, que es la presencia que acompaña en nuestro camino de Iglesia todos los días a nosotros los creyentes, y que nos invita a comunicar su presencia desde nuestra vida hacia el mundo. El Espíritu Santo de Dios, aquel de Pentecostés, del cual tenemos testimonio en los textos bíblicos, imprime una huella indeleble en los cristianos. Es aquel que nos invita a vivir de una manera distinta, a buscar la verdad y a unir nuestro corazón al de los demás. A diferencia de las tendencias de nuestro tiempo, nuestra dinámica espiritual es imposible de realizar, sin esa referencia importante que tiene el otro en nuestra vida, como lugar de encuentro con Cristo. Nuestra Congregación asume la experiencia del Espíritu como un camino de seguimiento de Jesús, desde una manera particular, haciendo nuestros sus sentimientos, desde su corazón. Ese movimiento espiritual que nos invita a centrarnos en el corazón de Jesús y de María, y nos invita también a ver el nuestro y a trabajar, en lo que sale de él. Nuestros fundadores encontraron en esta sintonía con los corazones de Jesús y de María una manera de vivir el Evangelio. Hoy veremos en estas líneas que comparten nuestros hermanas, hermanos y laicos, brotar como flores en nuestra realidad las huellas de esa misma presencia del Espíritu que acompañó primero a la comunidad apostólica, luego a la Iglesia y dentro de ella a nuestra familia sscc hasta el presente. Los invito pues a leer las líneas que siguen como un primer momento de lectura, que sugiero pueda acompañar luego la lectura en nuestras vidas de la presencia de nuestra Espiritualidad. Buen viaje. Manuel Lozano Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 3 Nuestra Familia Los Sagrados Corazones en la Iglesia Mi vida a la luz de la Espiritualidad de los SSCC Srta. Nélida Pareja Wong Directora del Colegio Sagrados Corazones Belén El ámbito propio de la actividad evangelizadora del laico “es el mismo mundo… y otras realidades abiertas a la evangelización, como son el amor, la familia, la educación de los niños y adolescentes, el trabajo profesional y el sufrimiento” Aparecida, 210 ¿Cómo vives y entiendes tu identidad SSCC ? E s difícil para mí responder a esta pregunta, considero que son mis familiares y compañeros de trabajo quienes deberían darla. Yo soy una laica comprometida a vivir la misión y el espíritu de la Congregación de los Sagrados Corazones, es por ello que siempre estoy en busca de las oportunidades de mejora, así como de mis cualidades que pueda poner al servicio de los demás. Tanto en mi hogar como en el servicio que brindo en el Colegio de los Sagrados Corazones Belén, vivo con alegría el ser parte de la familia de los Sagrados Corazones, con compromiso y autenticidad, teniendo como fuente de inspiración la vida de los fundadores y de los hermanos y hermanas de la Congregación, especialmente la de los que al conocerlos personalmente han ido dejando profunda huella en mí. Soy consciente de que a través de la oración, de la adoración contemplativa y de la vivencia de los valores evangélicos transmito estos a mis alumnos y familiares y así participan de los sentimientos de Jesús ante el Padre, para que ellos se comprometan con Jesús en ser parte de su obra, buscando el bien de nuestro prójimo. La labor que realizo, está vinculada tanto a mi vocación como a mi experiencia espiritual y al conocimiento que tengo de Dios. Vivo mi vocación de educadora con sentido de misión, velando por la dignidad y promoción de la persona. Me preocupa siempre y estoy pendiente del que podamos contar con un buen clima institucional basado en el respeto a la persona, la acogida, la vivencia de los valores cristianos, la corrección fraterna y que 4 todos podamos estar dispuestos a llevar la Buena Noticia, viviendo el amor de Dios con sencillez y espíritu de familia. En más de una ocasión he sido mediadora en conflictos y he apoyado a personas que han sufrido algún tipo de maltrato, procurando que sus derechos se respeten y que prime la justicia, para que más adelante, sean portadores de amor y de paz a pesar de las situaciones adversas que puedan haber vivido, anunciando el amor de Dios especialmente a los más necesitados, proyectándome de esta manera a ser parte de la misión evangelizadora y reparadora. Vivo y transmito el valor de la justicia ya que lo considero fundamental para una convivencia pacífica tanto a nivel familiar como laboral. Para mi es grato acompañar a niños y jóvenes en su caminar en busca de su misión en el mundo, por ello es necesario brindarles la compañía, escucha y apoyo que requieren ahora, para que más adelante opten por su plan de vida a la luz del Evangelio. Constantemente me pregunto ¿qué espera, Jesús, de mí? Y le doy gracias a Dios por pertenecer a la familia de los Sagrados Corazones y le pido me permita que el “contemplar, vivir y anunciar el amor de Dios encarnado en Jesús” lo refleje siempre en mis hermanos compartiendo con generosidad todo lo que Dios me ha dado. Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 Nuestra Familia Los Sagrados Corazones en la Iglesia Seguir al Señor con alegría en esta tierra bendita Hermann Wendling sscc A ¿Imamantah lishah liyaashah kanan? ¿Cómo vivo y entiendo mi identidad y misión sscc al servicio de la parroquia de Huaripampa y acompañado desde mi comunidad religiosa? l recibir el encargo de escribir un artículo respondiendo a esta pregunta, vino a mi mente la duda si era primero el vivir o el entender, ya que decimos: “contemplar, vivir, anunciar…” En seguida me acordaba del chiste que me contó una religiosa italiana: los alemanes se ríen tres veces de un chiste: cuando lo escuchan, cuando lo cuentan y cuando lo entienden. De donde se aprende que no entender no impide contar y que existe la esperanza de que un día entendamos. También decían los antiguos: “Primum vivere, deinde philosophari”. Parece que no funcionamos de manera que nuestra práctica sea realización de una teoría previamente esbozada. De ahí que nuestros proyectos personales y comunitarios vayan en una dirección y nuestras prácticas personales y comunitarias en otra. Eso no quiere decir que dude de la utilidad y hasta necesidad de los proyectos personales y comunitarios, solo que me convenzo cada vez más que estos tienen sentido en la medida en que partan de la realidad que vivimos y nos ayuden a entenderla, discernirla y actuar sobre ella. Seguramente las sugerencias que nos manda nuestro provincial al principio de cada año van en este sentido. Casi al mismo tiempo que recibí el encargo para este artículo, me confiaron también un papel en un video sobre nuestro carisma que se iba a realizar el día de la reunión provincial con nuestro gobierno general. Para eso tenía que aprender de memoria una frase de nuestras constituciones, del Artículo 6. Me vino como un regalo del cielo para estructurar este artículo. Ahí se declara: Para que el reinado de Dios se haga presente, buscamos la transformación del corazón humano y procuramos ser agentes de comunión en el mundo. En solidaridad con los pobres trabajamos por una sociedad justa y reconciliada Trataré de aplicar esta declaración a mi vida pastoral y comunitaria en Huaripampa. Para que el reinado de Dios se haga presente El reinado de Dios es el horizonte de nuestra vida religiosa y apostólica. A su servicio están la Iglesia y nuestra Congregación. A juzgar por el número de fiestas religiosas, de hermandades católicas, de misas de fiestas y de aniversarios, de capillas de barrios y anexos, el País de Jauja debería vivir ya en el Reino de Dios realizado. De hecho hay mucha religiosidad auténtica. Pero también hay mucha degeneración de la fiesta en ostentación y borrachera. Hay hermandades que aparecen solo para sus fiestas, en otras ha habido duros enfrentamientos de grupos, se han dividido y ahora se repite la misma fiesta. Las estructuras comunitarias tradicionales como las comunidades campesinas o los cuarteles parecen en crisis. Hay barrios donde la gente afirma que existe la solidaridad entre los vecinos y otros donde dicen que cada uno tira para su lado. Canchayllo, viernes santo comida de los 7 platos Buscamos la transformación del corazón humano Todo trabajo para el reinado de Dios tiene como base el esfuerzo por la transformación del propio corazón. La experiencia me enseña que también después de 43 años de religioso soy “simul iustus et peccator”según las palabras de Martín Lutero y que el propio esfuerzo solo tiene sentido si admito que “sola gratia”se realiza mi justificación y santificación. Con agradecimiento recibo el testimonio de entrega a Dios y al prójimo de mis hermanos Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 5 Nuestra Familia Los Sagrados Corazones en la Iglesia de la comunidad religiosa y de las comunidades cristianas que me ayudan a no caer en el desaliento y a mantener la expectativa de ver crecer el Reino de Dios en los corazones de las personas que encuentro en la catequesis, en las celebraciones, en las reuniones, en los encuentros pastorales y sociales, en las fiestas. La experiencia de la propia fragilidad ayuda a tener paciencia con los demás. Hace muchos años leí en una estampita de primera comunión la oración: “Señor Jesús, acéptame como soy y hazme cómo eres tú”. Aquí tenemos el punto de partida y el punto de llegada. Entre los dos hay un largo proceso que podemos acompañar con comprensión, respeto y una mezcla, adaptada a cada persona, de exigencia e indulgencia. Procuramos ser agentes de comunión en el mundo Paccha, comedor popular sscc Una de nuestras principales preocupaciones en cuanto a nuestro trabajo parroquial es, que este esté en función de la construcción de comunidades. También sabemos que hay que empezar a aplicar los buenos principios en la propia casa. Nuestra vida en comunidad es un test si es posible la aceptación mutua, el compartir y poner en práctica visiones comunes entre personas de distintas procedencias, culturas, generaciones y formaciones sobre la base de una vocación y misión comunes. ¿Somos capaces de entender nuestras diferencias como complementarias y no como causas de división, rivalidad y lucha por el poder? Aplicando el principio de “salvar el propósito del hermano” que me ha enseñado Juan Antonio Lucas sscc no puedo dudar fácilmente de la buena intención de mis hermanos, aunque sus expresiones me hagan entrar en sospechas. Nadie quiere aparecer como ingenuo, y la construcción de la comunidad no se puede hacer con la ley del mínimo esfuerzo, pero me parece preferible pecar alguna vez de ingenuo a ir sospechando todo el tiempo de las intenciones y capacidades de los que quieren servir al mismo Señor que yo. En solidaridad con los pobres Esta expresión está en paralelismo con “para que el reinado de Dios se haga presente”. La solidaridad con los pobres y la espera activa del Reino son las dos caras de la misma medalla. No tenemos opción de vivir la solidaridad o no. Conocemos la graduación: por los pobres (todos), con los pobres (algunos), como los pobres (muy pocos). Lo sentiría una ofensa a los pobres si dijera que vivo como los pobres. Ya lo considero un logro si a pesar de ser gringo puedo aportar en algo para que los pobres se sientan bien acogidos en la Iglesia. No dejo de preguntarme si podemos avanzar en lo que ha propuesto, entre otros, Pablo Fontaine: que seamos una Iglesia pobre, fraterna y orante. Me parece que mi aversión contra el uso de la tecnología responde también a cierta flojera, que la difusión del Evangelio y la defensa de los derechos de los pobres se merecen un uso inteligente de los medios modernos y que hay hermanos que hacen mucho bien con la técnica moderna. Pero no deberíamos poner nuestra confianza en la técnica, ni dedicarnos a ella en detrimento del tiempo que dedicamos a visitar enfermos, familias, grupos, obras en favor de los pobres. Si no, parecemos a los padres que abdican de su tarea de educadores a favor del televisor, los juegos electrónicos, el internet. Trabajamos por una sociedad justa y reconciliada Hace algunas semanas asistimos con Rufino a una misa y un acto de memoria en Molinos donde hace 25 años murieron en un enfrentamiento entre el ejército y el MRTA cerca de 74 personas, entre ellos 10 vecinos del lugar que después del enfrentamiento fueron desaparecidos por efectivos del ejército. Varios familiares de estos me comentaron que era la primera vez que la Iglesia, representada por el Obispo, y el Estado, en las personas de los alcaldes, valore su dolor. Considero que mi predicación, mi participación en la catequesis familiar, en la formación de los laicos puede ser un aporte para crear conciencia de que Dios no aprueba el sistema de corrupción, de abuso, de dejadez que sufrimos cada día, para motivar a superar la tentación del “no te metas”, a no contentarse con el rol del espectador, del consumidor, del beneficiado, a no resignarse de que todo está corrupto y no podemos hacer nada. Particularmente me gustaría poder aportar algo para que las familias huancavelicanas, que desde el tiempo del terrorismo vienen inmigrando a nuestros pueblos, puedan sentirse integradas, empezando por la comunidad eclesial. * El título del artículo está tomado de una homilía del Papa Francisco en su reciente peregrinación a Tierra Santa. El subtítulo (en quechua jaujino) se leería en quechua puneño: ¿Imamantaq risaq rishasaq kunan? 6 Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 Los Sagrados Corazones en la Iglesia Nuestra Familia Apasionadas por el ser humano Edith Paredes sscc “Lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado y lo que han palpado nuestras manos, acerca del Verbo de vida.”(1 Juan 1,1) Q uise iniciar con esta cita del evangelio, ya que expresa la experiencia profunda que nos impulsa a los SSCC a entregar la vida. Esta experiencia que ha transformado y trasforma nuestra vida dándole un sentido y una orientación nueva a nuestra existencia. Podemos decir que, en contacto con Jesús, intuimos, captamos y experimentamos que Dios es «amigo de la vida», un «misterio de amor» que quiere y hace posible una vida más digna y dichosa para todos. Nos sentimos «amados» y esto nos entusiasma con la tarea de introducir y hacer presente en la historia de los hombres y mujeres esta experiencia nueva de Dios, una experiencia transformadora, humanizadora, liberadora en la que Jesús soñaba cuando hablaba del «Reinado de Dios». Lo decisivo en la vida de los que hemos experimentado y gozado de este encuentro con Jesús, es su persona, su vida entera, el misterio de un hombre que vive sanando, que acoge, perdona, libera del mal, ama apasionadamente al ser humano por encima de toda ley religiosa o social, entrega su vida hasta la muerte, y sugirie a todos que Dios en su último misterio es así: amor insondable y sólo amor. A partir de esta experiencia sentimos una fuerte invitación a comunicarlo, es por ello que en nuestra comunidad de Arequipa interpeladas por la realidad y atentas a los gemidos de Dios, nos planteamos la necesidad de abrir el Centro de Escucha “Betania”, una misión compartida y asumida con mucho gozo con hermanos y hermanas de otras congregaciones (Misioneras Dominicas y hermanos de San Juan de Dios). La «pasión por la vida» nos impulsa a hacernos presentes allí donde «se produce muerte», para luchar con todas nuestras fuerzas frente a cualquier ataque a la vida. Eso es lo que deseamos y pretendemos que sea “Betania” un espacio de acogida, de creer que es posible que a través de la escucha, el acompañamiento y la formación de la gente, sea la vida, y no la muerte, la que tenga la última palabra. Donde no trasmitimos una doctrina y exigimos una moral o una práctica ritual, sino que evocamos, comunicamos, suscitamos y ayudamos a vivir la experiencia original del encuentro con Jesús a través de escucha activa, que vivida desde la fe, nos enriquece y trasforma la vida, tanto al que escucha como a la persona que es escuchada. Aparentemente podría ser un medio “pobre” para comunicar la vida de Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 Dios, pero creemos que es el mejor medio de acercarnos a Jesús encarnado y al “misterio de la vida” que nos impulsa a acoger cálidamente a cada persona, a estar cercanas a las necesidades más vitales del ser humano (abandono, desesperación, tristeza profunda, marginación, duelos, falsas imágenes de Dios, pérdida de sentido, problemas de pareja, económicos, laborales, familiares, interpersonales, de identidad, abusos, etc.); a ser cobijo para los más olvidados y excluidos (homosexualidad, prostitución, tercera edad); a que puedan liberarse de la soledad y del sufrimiento; lugar donde se crean relaciones más justas y fraternas (cuando logran creer en sí mismas e intentan iniciar y/o establecer relaciones más sanas y liberadoras). Nos sentimos enviadas por nuestra Provincia a ser fermento en la masa, a estar presentes donde la vida la clama ser escuchada. Esta misión es compartida con religiosos, religiosas y laicos que han pasado por esta experiencia de encuentro profundo a través del curso de acompañamiento “Emaús”, donde han podido ser conscientes de las imágenes falsas de Dios, y donde han empezado su gran liberación, liberación compartida en los acompañamientos de escucha personal. En este momento somos un gran equipo que nos ayudamos mutuamente en prestar una escucha activa de calidad, no solo por los instrumentos que hemos aprendido para escuchar, sino sobre todo por la experiencia de Dios, que es la que nos impulsa a entregar nuestra vida al servicio de esta gente que llega al Centro de Escucha. Estamos convencidas que solo se podrá despertar interés en las personas, si ellas logran captar o percibir (en la escucha, en los seminarios, en la acogida y el respeto) que, para nosotras, Dios no es un problema, una dificultad, un estorbo para ser feliz, sino lo mejor que hemos encontrado para vivir a gusto, intensamente, sin miedo, de manera liberada y gozosa. 7 Nuestra Familia Los Sagrados Corazones en la Iglesia ENTREVISTA A JOSÉ SERRAND SSCC “Tengo la suerte de vivir” Por Raúl Pariamachi sscc José Serrand en una pequeña entrevista nos habla de su vida, cómo después de conocer la historia de Damián de Molokai decidió ser parte de la Congregación de los Sagrados Corazones. Con algunas anécdotas narra su experiencia y los desafios que ha tenido que enfrentar al llegar a Perú. Trata de demostrarnos que el sacerdote “no deja de ser un ser humano con verdadera vocación y convicción.” José, en estos días cumples 50 años de sacerdote. Cuéntanos cómo entraste a la Congregación. Tenía 10 años, y por la escuela de mi pueblo, donde había menos de 600 habitantes, pasó un sacerdote joven, de buen humor, cantaba lindo, vestido con una linda sotana desconocida para mí. Nos habló de Damián, el maravilloso misionero de Molokai... preciosa historia. Y preguntó si alguien quisiera ser como Damián. Fui el único “zonzo” que levantó la mano. El padre me visitaba cada cuatro meses, me traía libros (lo que era un lujo en esa época) sobre la vida de Damián. A los once años quise ir al seminario. Un domingo pregunté a mi papá si podía ir al seminario, me dijo: “Anda, pero no regreses” (en esa época salir del seminario era una gran vergüenza). El 11 de septiembre, cumpleaños de mi mamá, dos sacerdotes me llevaron en auto a Sarzeau, pequeña ciudad de Bretaña; era la primera vez que veía el mar, la primera vez que por la noche me ponía un pijama. Año 1949. ¿Qué recuerdas de tu tiempo de formación? Cuando entré al seminario tenía doce años. Fui un alumno más que regular en latín, griego y matemáticas; en literatura más o menos; en caligrafía cero; en dibujo doble cero… me gustaba mucho más el deporte. ¿Formación humana, intelectual, cristiana, de joven en camino a la vida religiosa? Bien regular; todo era cumplir a la letra el reglamento de la casa, el silencio, no mirar a las chicas en la calle, alejarse del mundo, confesarse cada semana con su confesor; comíamos poco y mal, era la época después de la guerra, había mucha pobreza. Y una anécdota… Tenía quince años, no me gustaba hacer sacrificios (y nos pedían hacerlo), Una noche en el tercer piso, abriendo la ventana del gran dormitorio (éramos 28 alumnos en el dormitorio) descubrí un montón de manzanas, hermosas, en el jardín. Como todo el mundo dormía o casi, y el religioso vigilante estaba en su 8 José Serrand sscc y su familia (año 1962) cuarto, saqué mi cuchillo, le puse una pita y lo lancé a una manzana, buena puntería, y la recogí. La saboreé solo. Qué rica manzana, super rica. Desperté a mis amigos en “silencio” y empecé la pesca milagrosa y el compartir, en comunidad silenciosa y super feliz. Hum, mala suerte, el superior se estaba paseando de noche rezando su rosario y me vio, me gritó: “te espero en mi cuarto en cinco minutos”. Fui asustado. “José, eres un ladrón, y un ladrón no puede ser sacerdote… mañana te vas a tu casa”. Lloré mucho. Me atreví a hablar con mi confesor, me perdonó y habló con el superior. Aquel me perdonó con una mirada poco cariñosa. Me salvé por culpa de una manzana compartida. A este padre superior lo vi después en el Perú, se había olvidado de mi travesura. ¿Cómo fue tu ordenación sacerdotal? Pasé 32 meses en el servicio militar obligatorio: un día en Francia, cuatro meses en Alemania y 28 meses en Laghouat al borde del Sahara. Era la guerra entre Francia y Argelia. De eso no quisiera hablar. ¿Mis estudios para el sacerdocio durante seis años? No olvidemos que era la época difícil. Una Iglesia “desencarnada” del mundo concreto. Vino la feliz locura de Juan XXIII en 1958: “Abrir las ventanas de la Iglesia al mundo”. Super necesario: la preparación del conJunio - Julio 2014 - N° 372 - 373 Los Sagrados Corazones en la Iglesia Nuestra Familia ¿Qué sucedió a tu llegada al Perú? ¿Ayaviri? Al llegar al Perú me llevaron al colegio para “aprender” castellano, y enseñar a los alumnos sin ninguna preparación personal: educación de la fe y ciencias naturales. Más bien me encantaba enseñar “bailes folklóricos de Europa” que había aprendido en Francia, y hacer deporte con los alumnos de secundaria. Pero soñaba con Ayaviri. En noviembre del año 1965 me hice operar de una apendicitis “falsa” para no tener ningún impedimento para trabajar en Ayaviri. Y aquí estoy todavía, de forma “provisional” en el Colegio, desde hace 49 años. ¡Cómo será la eternidad! José Serrand sscc músico cilio, la realización del concilio y las consecuencias del concilio. Los libros antiguos no servían de mucho y no había libros nuevos. Aunque no lo creas, tenía seis profesores de Biblia y los profesores no estaban al día. En el seminario no teníamos noticias reales del Concilio o poquísimas. Nos decían que no podíamos rezar los salmos en francés, sino en el idioma sagrado: el latín. En el seminario había dos coros: un coro eclesial que cantaba todo en latín con el P. Médard y otro coro que se atrevía a cantar en francés en la comunidad y afuera, en el hospital y la casa de reposo, en navidad y en pascuas, las famosas armonías canónicas con José, era así la época. Fui ordenado de sacerdote a los 27 años. Fuimos los primeros ordenados de Mons. Luciano Metzinger, el nuevo obispo de Ayaviri. Mi familia vino a la ordenación sacerdotal el 27 de junio… bendecir a mis padres, a mis hermanos y hermanas, darles la comunión, me impresionó mucho. El 15 de agosto, en mi pueblo, celebré la misa en latín, de espalda al pueblo, con toda mi familia y mis amigos. ¡Merci! ¿Cuál fue tu primera obediencia? ¿Servicio futuro? El padre provincial me pidió servir en algo para lo que tenía una cierta habilidad: hacer cantar, crear coros y tocar el órgano; me encantaba tocar J. S. Bach. Un par de veces hemos dado conciertos con mi profesor en Chateaudun y en S. Gabriel en París (la misa de Jean Langlais). Lindos recuerdos. El P. Riou me propuso ir a estudiar más música para enseñar. Le dije: “No, por favor. Todo, salvo ser profesor”. Me dejó reflexionar un mes, volvió a proponer la misma obediencia y fue la misma respuesta, entonces me propuso ir al Perú para trabajar con Mons. Metzinger en Ayaviri. Mi respuesta, un sí radical. Ah, la primera carta que recibí de Francia fue de mi profesor Médard: “a mi mejor alumno”. Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 José, ¿cómo has vivido estos años en el Colegio? Enseñar en primaría, en secundaria, sobre todo en cuarto de media, me costó mucho, pero me hizo mucho bien, tuve que abrir los libros actuales, abrirme a los jóvenes. Gracias por aprender algo nuevo de la juventud y tratar de ayudar a los jóvenes y a sus padres, siempre más preocupados por el necesario trabajo, dando poco tiempo a sus hijos. Mejor cuento algunos extras fuera de la educación en los salones. Durante las vacaciones del año, tuve la suerte de vivir tres retiros con profesores que querían vivirlos libremente. Fue en Chilca, en Ricardo Palma, lugares sencillos y experiencias inolvidables. Otra vez, con seis profesores(as) fuimos a dar una ayuda pastoral en Pedro Ruiz Gallo (Chachapoyas) durante once días. Algo raro, dormíamos en el campamento militar. En una época había seis salones en primero de media. Dos años seguidos se quedaban 12 alumnos cada viernes por la tarde para jugar, conversar, cocinar y dormir en dos carpas sencillas en la pequeña cancha de futbol. Pasar 24 horas juntos, con Sergio y José era una locura, pero súper rico, eran 24 horas muy humanas. Descubrir el principio de esta adolescencia tan especial, tan rica; y descubrir a los padres de familia: un mundo muy misterioso para mí. Los papás y las mamás venían para hablar de sus hijos y muy a menudo para hablar de sí mismos, para ser escuchados y acompañados. Otra vez, algo “provisional”, una vez más. En 1979 el P. Armel de primaria se fue por poco tiempo a Francia, se me pidió remplazarlo por seis meses. Prometido. Y me quedé hasta hoy, especialmente para preparar a los chicos y sus familias a la primera comunión… sin crítica, pasar de la formación de antes al después del Concilio no fue fácil. La primera comunión se celebraba en segundo grado y la confirmación en tercer grado. Armel hacía todo, las profesoras vigilaban para que los alumnos se portaran bien. Hoy, las 9 Nuestra Familia Los Sagrados Corazones en la Iglesia profesoras, los padres de familia con el COF, y JESÚS por supuesto, hacen todo, y yo ayudo un poco para que tengamos una primera comunión parecida a una mesa de cuatro patas: comunión consigo, comunión con la familia, comunión con Jesús y comunión con los más necesitados. Gocé mucho acompañando a los jóvenes en el deporte, en Adecore. Una vez, en un campeonato de voley, en el colegio Sophianum, el árbitro me mostró la tarjeta roja y me botó con el entrenador por ser malcriado… qué vergüenza, un religioso ss.cc. para afuera, gozador pero pecador “público”; al salir regalé a las doce jugadoras sus chocolates Sublime prometidos, creo que ganaron. Háblanos de algunas de tus muchas alegrías. Fuera del servicio en el Colegio he tenido también mucha suerte. He tratado de perder mi tiempo con la gente. Muy a menudo me han pedido hacer cosas para las que no me sentía capaz, o por lo menos no me sentía preparado (repito mucho este “sentir”… tal vez necesito ver a varios psiquiatras). Soy célibe por vocación, y me pidieron ayudar a los hogares, sobre todo a las parejas en Lima y fuera de Lima. Soy tartamudo y me han pedido predicar varios retiros a personas adultas, hombres y mujeres, también a futuros religiosos. No estoy hecho para mandar, para ser líder, y me han metido a “superior” varios años. Jesús nos invita a muchas sorpresas. Oh, yo no tengo las manos “blancas”, pero prefiero tener las manos sucias pero no vacías, tratando de ayudar a las y los demás. He tenido mucha suerte; actualmente, creo que Jesús me invita a hablar mucho menos y que mi vida silenciosa sea testimonio de la Buena Noticia de Jesús. Gracias por haber tenido la suerte de ser llamado a servir en la congregación de los SSCC, con su carisma único, suerte de haber encontrado personas adultas, jóvenes, niños a quiénes he ayudado en algo y sobretodo me han ayudado mucho. Suerte por ha- ber tenido una crisis muy fuerte de fe, de vocación. Me atreví a reabrir la Biblia y, casualidad, leí por primera vez en mi vida: “Mira que estoy a la puerta y llamo, si escuchas mi voz y me abres, entraré a tu casa y comeré contigo y tú conmigo” (Ap 3, 20). ¡Gracias Jesús! Qué tal guiño de Jesús. Cada día, al despertarme, escucho las mismas palabras en mi corazón. Gracias por haber podido trabajar también fuera de la Congregación, en forma especial con dos sacerdotes de la “competencia”, con los padres Adolfo Franco (jesuita) y Clemente Sobrado (pasionista). Gracias por otro guiño de Jesús: el 8 de mayo de 1985, regresando de un Encuentro Conyugal en Chaclacayo, choqué muy fuerte, contra un carro de policía. Carro destrozado completamente, me acusaron de manejar “borracho” porque en el carro había una guitarra. Llegando al lugar, el padre Estanislao dio una absolución, seguro que había muerto José. Por la noche llamé a mi tierra, a mi hermana: a la misma hora, el mismo minuto en que choqué, mi mamá Amelia se había ido al cielo. Me reemplazó. Milagro para mí. Cada día le rezo para que me ayude a servir con su sencillez. Gracias, Amelia. Gracias: hace 13 años, cuando me operaron para ponerme tres by pases, en plena operación tuve un problema muy serio, imprevisto. Mi cirujano llamó a Estanislao: “recen mucho, no sé qué hacer con José”. Toda la comunidad recoletana rezó (alumnos, padres de familia, profesores, obreros, todos). En lugar de quedarme 10 días, me quedé 29. Salí del Hospital del Empleado un 11 de septiembre, día del cumpleaños de mamá; ella me persigue, felizmente. ¿Y tus tristezas? Oh, he sufrido como todo el mundo en la vida cotidiana, y el seguir a Jesús para tratar de amar, siempre pasa por la cruz, pero no tengo razón para quejarme. En el servicio, mis errores. En lugar de enseñar hubiera tenido primero que aprender mucho. Me equivoqué Enseñar en primaría, en secundaria, sobre todo en cuarto de media, me costó mucho, pero me hizo mucho bien, tuve que abrir los libros actuales, abrirme a los jóvenes. Gracias por aprender algo nuevo de la juventud y tratar de ayudar a los jóvenes y a sus padres... 10 Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 Los Sagrados Corazones en la Iglesia mucho, me faltó mirar a Jesús en su vida: 30 años vivió con la gente, 3 años predicó y en 3 días dio los sacramentos… y todavía solemos actuar al revés. Por ejemplo, cómo me atreví a dar los “mismos” Encuentros Conyugales o los “mismos” Cursillos de Cristiandad en Huánuco, Huancayo, Chiclayo, Tarapoto, etc., siendo otras realidades y otras vidas. Ah, José. Una cruz imprevista muy fuerte: desde los 12 años que dejé mi pueblo, dejé mi familia, siempre he llorado… soy muy sentimental. Mi última tristeza, muy dolorosa: no poder viajar a mi tierra este año, para celebrar mis 50 años de sacerdocio, y sobre todo, volver a abrazar a mi familia de carne, amigos y amigas de infancia, porque mi “bobo” (corazón) no puede soportar tantas horas de avión y un viaje largo. Siento que debo tratar de cambiar más para ser más tolerante con los demás y tener más paciencia conmigo y aceptar mi realidad. De buen humor, José, ánimo. Dinos lo que esperas ahora. Aceptar mis circunstancias, una forma de servir diferente, sonreír, amar y ser amado, admirar y ayudar a nuestra congregación de los Sagrados Corazones en América Latina… tratar de no molestar a los demás. “Amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a sí mismo”. Es importante aprender a amarse, realmente, pero sin caer en el “egocentrismo”, que es bastante común. Para mí, el amor es primero buscar el bien del “tú” y después del “yo”: es “tu-yo”, es darse. En mi Nuestra Familia vida, le hablé demasiado a Jesús. Se suele decir que un pobre es “aquel que escucha siempre y a quien nadie escucha”. En este sentido, creo que Jesús es el más pobre de los pobres, y no le ayudé, no le escuché suficientemente. El mes pasado tuvimos la visita de nuestro superior general: no vino un poder sino una autoridad para servir y ayudarnos a servir y fue una visita fraternal, familiar, humana… qué suerte la nuestra. Finalmente, ¿cómo te sientes con tus 77 años de vida, 58 de religioso y 50 de sacerdote? Otro mundo, otra época, otra Iglesia, otra vida. TENGO LA SUERTE DE VIVIR. Paso más tiempo en la cama que de costumbre. Qué rico una “siesta”. Más que pasar mucho tiempo en la TV, me gusta escuchar música clásica, suave. Alguien dijo: “si no hay un abuelito en la casa, hay que alquilarlo”, puede ser mi caso hoy en el Colegio, donde todavía puedo dar de mi tiempo a personas adultas y a los niños, en forma diferente. Todavía puedo visitar a enfermos de la “gran familia de la Recoleta”, sin darles recetas, sino cariño, miradas, sonrisas; estar con ellos. Sí, tengo mucha suerte. Hoy, más que nunca, me doy cuenta de que para vivir se necesita la importancia de “la sístole y la diástole” (lo sé más que nunca por mi corazón hoy), es decir: amor a Dios y a los demás. Deseo envejecer con una gran arruga: la sonrisa de amar y ser amado, feliz. Gracias a la vida. La suerte de vivir. Muchas gracias a ti, José, por tu cariño y servicio. El 26 de junio celebramos con mucha alegría la fiesta de los Sagrados Corazones y hemos agradecido a Dios por los 50 años de vida sacerdotal del P. José, testimonio vivo de su amor. Que los Sagrados Corazones de Jesús y de María nos bendigan, acompañen e iluminen en nuestro caminar. Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 11 Los Sagrados Corazones en la Iglesia Nuestra Familia Acompañar la vida desde el Carisma sscc Ana Lucia Cardona sscc A compañar la vida es una tarea, un arte, que como el artista, implica pararse frente a un lienzo en blanco y con mucha delicadeza, teniendo claro lo que quiere hacer con ese cuadro, empezar a plasmar la obra desde un camino de idas y vueltas en procesos de borrar y volver a hacer, de empezar con paciencia cada vez que las pinceladas no dan la forma que se quiere; es un camino de misterio en donde se percibe la belleza de la creación sólo al toque de la última pincelada dando como resultado un hermoso cuadro, una hermosa obra de arte realizada durante un largo tiempo. Para mí en este momento de mi vida y después de tener la experiencia de acompañar a tantas y diferentes personas, por casi treinta y cuatro años en la educación, es ahora un precioso regalo que la Congregación me da el ser testigo del amor tierno y misericordioso con mis hermanas novicias. vueltas y de dar los toques o pinceladas precisas para sacar su obra adelante, confiando que su amor todo lo puede y va dando un sentido nuevo a la vida para embellecerla y sacar una obra de arte preciosa. Siento que lo más fuerte en mí es vivirme desde el espíritu y con un corazón de escucha y de paz acoger el misterio de la vida desde las cuatro edades en paralelo con las cuatro edades del Señor que proponen las Constituciones. Es ser capaz de vivirme en el aquí y el ahora, de enfrentarme a los nuevos retos del mundo cambiante de hoy dándole un nuevo sentido a la vida y apostar por la ternura, la compasión y el amor misericordioso, generoso, alegre y sincero. Es vivir la experiencia del pintor, de meterme en la aventura de ser testigo o pincel de Dios como el mejor artista, que va haciendo en la vida o lienzo de cada novicia la obra que con paciencia y caminando juntas en la búsqueda sincera de lo que este artista Dios quiere realizar para cada una, en el proceso de idas y Es ir construyendo en la vida diaria la fraternidad. Es dejar que las hermanas se vivan desde lo que ellas son con transparencia y sean cada día más felices. Es permitirles que se equivoquen y desde la equivocación hacer camino, es ayudarles a empoderarse a sí mismas y animarlas a vivir su llamado con un corazón generoso y lleno de alegría mirando a Jesús y a los testigos de la Congregación para apostar por seguirlo siempre con pasión y entrega. Visita a las instalaciones de Plaza Francia El día 24 de junio, 30 alumnos (delegados de la pastoral de cada salón) del colegio SSCC–Recoleta, acompañados de tres profesores, visitaron las instalaciones de la Plaza Francia (convento, e Iglesia), como parte de su interés por conocer los ambientes donde se inició la presencia de los hermanos en el Perú; el primer local del Colegio sscc Recoleta; como la Pontificia Universidad Católica del Perú, el itinerario fue ralizado por el P. Juan Luis Schuester sscc. Al día siguiente los alumnos hicieron la réplica a sus compañeros de aulas, por el día de los Sagrados Corazones. 12 Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 Los Sagrados Corazones en la Iglesia Nuestra Familia Mi experiencia de ser acompañante y formador sscc “Si cuentan los números” 1 Lucio Colque sscc “La pastoral vocacional, que es responsabilidad de todo el pueblo de Dios, comienza en la familia y continúa en la comunidad cristiana, debe dirigirse a los niños y especialmente a los jóvenes para ayudarlos a descubrir el sentido de la vida y el proyecto que Dios tenga para cada uno, acompañándolos en su proceso de discernimiento” (DA 314). E n esta etapa de mi vida me siento como dice la frase de un poema de Antonio Machado: “Caminante no hay camino... Se hace camino al andar”. Los cambios en mi vida desde que soy sacerdote han sido rápidos. Actualmente vivo y entiendo mi ser Sagrados Corazones como: Acompañante de comunidades juveniles, “promotor vocacional” y formador en la casa de “postulantado”. Mi vida transita en ser asesor de la Pastoral Juvenil, otro hermano va asumiendo este servicio, en Plaza Francia, una pastoral que inicié sin muchas ideas en 2008; para dedicar más a la coordinación de la pastoral vocacional y la formación inicial de la Congregación en el Perú. Puedo decir con alegría, que gracias a Dios los servicios que realizo me dan grandes satisfacciones que se sobreponen a los siempre inesperados momentos tristes; que forman parte de la vida. En las Comunidades Juveniles Una de las primeras cosas que debo reconocer en la formación y acompañamiento de comunidades juveniles, reactivadas el 2008, es que no tenía idea de nada, no sabía hacia donde caminar con esta propuesta. Ahora me doy cuenta de cuales fueron esas limitaciones. Primero, no haber pasado por la experiencia de vivir en una comunidad juvenil. Segundo, no manejar muchos conceptos teóricos, pedagógicos metodológicos de pastoral juvenil; solo la experiencia de haber sido hasta ese momento, catequista de confirmación. Tercero, no saber cómo acompañarlos como es debido: próximo, empático pero a la vez manteniendo una identidad religiosa. Cuando inicié creo que lo único que sentí es la necesidad de dar a los jóvenes un lugar en la parroquia donde pudieran crecer humana y espiritualmente, que tengan un espacio vital donde puedan sentirse queridos, valorados, felices. Hasta entonces el único espacio que tenían en la parroquia, era para atender las catequesis. Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 En todo momento conté con el apoyo de los hermanos de mi comunidad, una iniciativa personal pasó a ser atendida y estructurada por todos. Cuando observo y hablo con los jóvenes en sus comunidades percibo una familia, donde se comparte penas y alegrías; éxitos y fracasos, confianza en Dios y dudas de fe. En todo caso, dicen algunos: “me siento más a gusto que en mi casa…me siento libre para hablar… que pena que solo nos veamos los fines de semana”. Entiendo que esas palabras tiene un trasfondo de queja y lamento, de aquello que no encuentran en sus casas. Desde la comunidad nuestra apuesta por los jóvenes, era que no se piense en ellos, sino como sujetos útiles para la parroquia de quienes podamos disponer para todo tipo de trabajos parroquiales y sacramentales. Creemos que “La pastoral juvenil tiene que ser un lugar de conocimiento y crecimiento en la fe encarnada en la realidad juvenil, más que ser un nivel intelectual y sacramental, tiene ser existencial, que contribuya a que el joven, desde la comunidad y su identidad con Cristo, vaya diseñando y viviendo su proyecto de vida”.2 En la Pastoral Vocacional Tengo presente que suscitar vocaciones para nuestra Congregación no es la tarea de un hermano. Nuestras Constituciones en los números 68 y 69 nos señalan que: “La promoción vocacional se basa en la convicción firme que tenemos los hermanos de la validez de nuestro carisma. Es una responsabilidad de todos los hermanos de la Congregación…” por eso como Provincia hemos hablado y tomado acuerdos en dos capítulos provinciales: el 13º Capítulo Provincial del 2006, en los números 10 al 19 y el nº15º Capítulo 13 Nuestra Familia Los Sagrados Corazones en la Iglesia la vida religiosa y sacerdotal. Frente a esta experiencia tengo presente lo que dice el Papa Francisco: “a pesar de la escasez vocacional, hoy se tiene más clara conciencia de la necesidad de una mejor selección de los candidatos al sacerdocio. No se pueden llenar los seminarios con cualquier tipo de motivaciones, y menos si éstas se relacionan con inseguridades afectivas, búsquedas de formas de poder, glorias humanas o bienestar económico” (EG 107). Provincial del 2012 en número 5 con sus 12 numerales. Como responsable de la Pastoral Vocacional intento ser quien coordine, recuerde y motive a los hermanos, para que desde las comunidades y obras apostólicas esta labor forme parte del apostolado y testimonio personal. Estoy convencido que solo así podremos crear una cultura vocacional en la Provincia. “Si no construimos una autentica cultura vocacional, nuestra propuesta será mucho menos recibida y acogida en su valor. Es como si estuviese suspendida en el vacío”. 3 Estoy en mi tercer año de acompañante vocacional a jóvenes. Asumí con alegría el encargo de los hermanos de la Provincia. Encuentro satisfacción de ayudar a los jóvenes, a descubrir en sus vidas el llamado que Dios les hace; que descubran cuál es su vocación y misión en la Iglesia. Sin embargo, debo reconocer que también tiene sus momentos tristes cuando por ejemplo: luego de aproximadamente un año de acompañamiento, logran confirmar tanto el acompañante como el joven que esta es su vocación; o que está listo para entrar a la casa y se retracta a “último minuto”. Esto sucedió con dos jóvenes el año pasado. Suscitó en mí interrogantes: ¿Qué pasó? ¿Qué cosas no pude descubrir en el acompañamiento? Ya contaba con ellos en la casa de formación. Como dice el libro de Cencini: “no cuentan los números”, debería estar feliz solo con el hecho de haber acompañado en su madurez vocacional a esos jóvenes, pero la tristeza es inevitable. Cada joven que opta por la vida religiosa cuenta y cuenta a veces por 10, ya que es el número más o menos con quienes interactuamos y acompañamos durante el año. En la formación inicial, “postulantado” En marzo de este año inicié como formador, estoy agradecido por la confianza que ponen en mí los hermanos, incluso conociendo mis limitaciones para este cargo. Disfruto mucho los momentos comunitarios: Reuniones, comidas, deporte, celebraciones litúrgicas y sobre todo la cercanía y amistad que tenemos unos con otros. Hasta el momento todo es nove doso para mí, intento guiarme en todo momento por el plan provincial de formación inicial y el proyecto comunitario. Me hubiera gustado iniciar aprendiendo de un formador en la casa, pero las circunstancias no lo permitieron. Desde el equipo de formación (tenemos reuniones mensuales) me dicen dónde hay que poner énfasis en la formación de los jóvenes según la etapa. Hago lo que me dicen, sin que haya alguien que me diga si lo hago bien o mal. Espero no engañarme, pero considero que las cosas van bien en la casa de formación. Siento que Dios es quien realmente va formando a quienes ha llamado. Yo por mi parte, desde lo que soy y conozco de la formación, hago mi mejor esfuerzo para poner los cimientos de la vida religiosa y sacerdotal en los jóvenes postulantes. La tristeza de los números pasa pronto porque la invitación de Jesús: “vengan y verán” (Jn 1, 39), sigue suscitando jóvenes que quieren emprender la aventura de continuar la misión de Jesús desde 1 Cf. A. Cencini, “No cuentan los números” (2012). A manera de respuesta al libro donde Cencini expresa que lo que importa hoy más que el número de vocaciones en la Iglesia es fomentar una cultura vocacional, que es la única que puede convertirse en terreno fecundo, donde cada vocación puede ser acogida, valorada y amada. 2 Cf. Orientaciones para una pastoral Juvenil Latinoamericana. CELAM, Nº 173, 2013. 3 A. Cencini, “No cuentan los números” (2012) p. 21. 14 Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 Los Sagrados Corazones en la Iglesia Nuestra Familia Damián: reparación y adoración Raúl Pariamachi sscc Damián no era un sacerdote aséptico, era un hombre, a la vez tierno y recio, que imprimió la huella de sus botas en el lodo de la historia. P. Hubert Lanssiers sscc D amián mismo es un milagro”, dijo Teresa de Calcuta. No es posible descubrir la historia de Damián sin conmoverse hasta las entrañas. No es posible tocar sus manos tan heridas por la lepra y quedarnos indiferentes ante el sufrimiento de los pobres. No es posible mirar su rostro desfigurado como el Crucificado, sin atisbar el pozo espiritual de su amor hasta el extremo. Damián inspira, inquieta, interpela… La comunión de destino con el Maestro La historia de Damián en la isla de Molokai puede ser vista como un paradigma de la fecunda relación entre la reparación y la adoración en nuestra tradición espiritual. Casi espontáneamente evoco el ora et labora de san Benito, el padre de nuestra regla de vida. En el retiro anual de mi provincia, una benedictina nos decía, usando las metáforas del alma y del cuerpo: “el alma de mi trabajo es la oración, el cuerpo de mi oración es el trabajo”. Al respecto, me llama la atención lo que Damián escribió en una de sus cartas, cuando trabajaba como sacerdote joven en Kohala. “Desgraciadamente, ¿qué es la vida del misionero sino un tejido de penas y miserias? Uno se pasa todo el tiempo en ingratas tareas como Marta y está muy poco tiempo a los pies del Señor como María Magdalena. ¡Felices los misioneros que solo tienen que ocuparse de su ministerio! Nosotros, en cambio, tenemos que ocuparnos de los aspectos materiales de nuestros puestos de misión, cosa que nos causa muchas preocupaciones…” (24.Octubre.1865). No cabe duda de que Damián hizo un camino de conversión siendo misionero en Hawái. Damián no solo tuvo que vencer sus prejuicios sobre la salud, la conducta sexual y las creencias religiosas de los hawaianos, sino que también se enfrentó con su propio genio. Un árbol es el símbolo de su recorrido. Las primeras noches en Kalawao durmió bajo un pandano porque no podía evitar sentir repugnancia por los habitantes de la isla; dieciséis años más tarde sería enterrado bajo el mismo árbol, como señal de su deseo de quedarse para siempre con sus entrañables leprosos. Digo todo esto porque me parece que Damián aprendió también a integrar tanto el trabajo como la Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 oración en su ministerio; siguiendo su lectura alegórica diríamos que comprendió vivencialmente que en definitiva Marta y María son una sola: “como tengo a nuestro Señor cerca de mí, siempre estoy alegre y contento, y trabajo con entusiasmo por la felicidad de mis queridos leprosos” (08.Diciembre.1881). En realidad cuando hablo de reparación y adoración pretendo llamar la atención acerca de un aspecto clave de nuestra identidad religiosa. La vinculación estrecha entre trabajo y oración aparece en toda su plenitud en las cartas de Damián; como en aquella que escribe cuando la lepra comenzaba a atacar su cuerpo: “sin la presencia constante de nuestro divino Maestro en mi pobre capilla, nunca habría podido perseverar en la unión de mi destino al de los leprosos de Molokai” (26.Agosto.1886). La comunión de destino con el Maestro es comunión de destino con los leprosos. Me he hecho leproso con los leprosos Bastaría comparar las referencias a la reparación en el capítulo preliminar (1817) con el capítulo primero (1990) de las Constituciones para darse cuenta de la evolución. En el capítulo preliminar se habla de la adoración del Santísimo como forma de reparar “las injurias hechas a los Sagrados Corazones de Jesús y de María por los innumerables crímenes de los pecadores” (art. 3). En cambio en el capítulo primero se habla más bien de la reparación como comunión con Jesús en la identificación con su actitud reparadora y en la colaboración con quienes trabajan por construir un mundo de justicia y de amor, signo del reino de Dios (cf. art. 4). Digamos que el sentido de la reparación se explicita como servicio al cuerpo herido de Cristo en el mundo. 15 Nuestra Familia Los Sagrados Corazones en la Iglesia En realidad, un repaso a la historia de la reparación permite apreciar sus aristas. Es el caso de los padres de la Iglesia, quienes presentan la reparación como la acción de Cristo para restaurar la imagen de Dios en el ser humano. Más tarde se destacará que el cristiano es invitado a participar de la obra reparadora de Jesús en la Iglesia y el mundo. Las palabras del Crucifijo de San Damián: “Francisco, repara mi Iglesia”, hicieron que el Pobre de Asís uniera su corazón a la pasión del Señor, abriéndose la herida del amor que se hará visible en los estigmas al final de su vida. En su libro “Reparar el mundo”, el rabino Emil Ludwig Fackenheim subraya que el acontecimiento inexplicable del Holocausto (con sus seis millones de muertos judíos) es no solo una piedra de escándalo para el mundo contemporáneo, sino también el lugar originario y originante de una humanidad nueva que solo puede pervivir reconciliándose consigo misma y con el propio Dios. El rito de Tikkun hatzot rememora que el llanto de Dios a la medianoche por sus hijos muertos es el despertar de la comunidad para reparar lo que está roto en la tierra. En alusión a la tarea divino-humana de “reparar el mundo” (tikkun olam), el autor dice que la reparación es el fundamento del presente y del futuro. No deja de sorprender el potencial semántico que posee el simbolismo de la reparación para la recuperación de las víctimas en el mundo. La parábola viva de Damián es una participación en la obra reparadora de Jesús. Los enfermos de lepra que habían sido capturados y recluidos en Molokai llegaron a ser la pasión de su vida. En su primer año en la isla escribió que se había hecho leproso con los leprosos; el último año de su vida dirá que muere de la misma manera y de la misma enfermedad que sus ovejas en aflicción (1889). Damián se preocupó de que sus amigos tuvieran vivienda, dignidad, comida, alegría, vestido, consuelo y sepultura; su presencia es signo de que Dios no se ha olvidado de los pobres. Al respecto el papa Francisco ha recordado que cuando san Pablo se acercó a los Apóstoles de Jerusalén para discernir si había corrido en vano (Ga 2, 2), el criterio clave de autenticidad que recibió consistía en que no se olvidara de los pobres (Ga 2, 10). Este criterio que sirvió también para que las comunidades paulinas no se dejaran devorar por el estilo de 16 vida individualista de los paganos, tiene enorme validez en nuestros tiempos. El Papa dice que “la belleza misma del Evangelio no siempre puede ser adecuadamente manifestada por nosotros, pero hay un signo que no debe faltar jamás: la opción por los últimos, por aquellos que la sociedad descarta y desecha” (Evangelii gaudium, n. 195). ¡La belleza del Evangelio resplandeció en Molokai! Sin el Santísimo yo no hubiera podido Entiendo que en las Constituciones la adoración está caracterizada al menos por tres elementos esenciales: eucaristía, comunión y reparación. Podría parecer obvio que la adoración es eucarística; no obstante, precisamente un modo de evitar su deformación es reubicarla siempre en su humus eucarístico. Las Constituciones dicen que en nuestra vida religiosa apostólica “la adoración se enraíza en la celebración de la Eucaristía y es un tiempo de contemplación con Jesús resucitado” (art. 53). La adoración no se reduce a una devoción privada sino que se orienta al cuerpo místico de Cristo. La médula de la adoración consiste en que entramos en comunión con Jesús, que participamos de sus sentimientos ante el Padre y ante el mundo (cf. art. 5). La adoración es una parte esencial de la herencia de nuestra Congregación y de su misión reparadora en la Iglesia justamente porque nuestra reparación es comunión con Jesús, es participar de la misión de Jesús resucitado que nos envía a anunciar la buena noticia, es reconocer nuestra condición de pecadores, es sentirnos solidarios con las víctimas de la inequidad y la violencia, es colaborar para construir un mundo de justicia y de armonía. Cada vez que nos sentamos a los pies del Señor se dilata nuestro corazón, para hacer nuestras las actitudes que lo llevaron a tener su corazón traspasado en la cruz. Hemos visto cómo Damián reconoce que sin la presencia de Cristo en su capilla no hubiera podido unir su propio destino al destino de sus leprosos. En otra de sus cartas señaló: “sin el Santísimo Sacramento una situación como la mía no se podría aguantar” (08.Diciembre.1881). Delante del Santísimo se sabe reparado por la presencia de Jesús, aceptando las consecuencias de su servicio en su propia carne con el estigma de la lepra: “es al pie del altar donde Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 Nuestra Familia Los Sagrados Corazones en la Iglesia con frecuencia me confieso y donde busco alivio a mis penas” (26.Noviembre.1885). Resulta oportuno enfatizar que Damián transmitió la práctica de la adoración en Molokai. En una carta comunica al superior general que se ha establecido la adoración perpetua en las capillas de la leprosería: “es verdad que resulta bastante difícil mantener la continuidad de las horas ya que las enfermedades impiden a veces a los miembros de la Adoración venir a la iglesia la media hora; sin embargo, resulta edificante verles en adoración, a la hora que les corresponde, en el lecho del dolor de sus humildes cabañas” (04. Febrero.1879). De hecho, esta práctica en Molokai es un hermoso ejemplo de cómo la adoración eucarística sigue el doble movimiento del amar y ser amados: ser reparados para reparar el mundo desde el amor de Dios encarnado en Jesús. El relato evangélico de Damián se traduce en la llamada a redescubrir el valor de la adoración reparadora en nuestra vida. Muchas veces hemos acumulado motivos para sospechar de la deformación “cosista” de la eucaristía y la adoración. Al mismo tiempo, navegamos en una época propicia para recuperar el sentido de la adoración. Felizmente podemos contar con el testimonio radical de Damián, que tendría que ser releído a la luz de la buena teología de nuestras Constituciones. Recientemente se nos ha recordado que somos ministros de la adoración reparadora (38° Capítulo General). “Compartiendo nuestras Olimpiadas Deportivas” Sr. David Pacheco / Presidente de COPAFA Colegio Sagrados Corazones Arequipa E n estas dos fechas, en que como integrantes del Comité de Padres de Familia (COPAFA) tuvimos la gran oportunidad de organizar y celebrar los “X Juegos Deportivos de Confraternidad Sagrados Corazones 2014”; ha sido la mejor ocasión de conocer cuánta convicción y cuánto amor sentimos los padres de familia por el Alma Mater de nuestras hijas. Identificarnos con el quehacer educativo más de cerca y la vocación de trabajo y servicio de todo el personal, fue invalorable. LA COPAFA alentó en todo momento a nuestros padres para que conformen sus equipos deportivos y también disfrutamos juntos de la preparación, de las coreografías de presentación para el “Concurso de Danzas del Perú”, en la fecha inaugural. Sin duda alguna estas actividades sirvieron para fomentar no solamente el baile, sino la sana competencia, la identificación con nuestra Patria, la búsqueda de la confraternidad, y sobre todo la unión como padres de familia. El ejemplo que nuestras hijas reciben de nosotros en el compromiso, la dedicación, el esfuerzo que pusimos en la participación de estas actividades, es un tesoro que ellas guardarán en su corazón, como sello indeleble que iluminará su caminar en su vida futura. “Dos corazones, una sola familia”, fue el lema que como padres de familia buscamos siempre la integración y el trabajo en equipo, compartiendo la misión de nuestro querido colegio “vivir, en nuestra institución, una experiencia comunitaria del amor de Dios, en un ambiente cordial de familia”, haciendo nuestras las actitudes de los Sagrados Corazones de Jesús y de María. Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 17 Nuestra Familia Vida de las Provincias Fiesta de los Sagrados Corazones Wilber Onofre Huaricallo sscc E l día 27 de junio, como todos los años, los hermanos y las hermanas nos hemos reunido, esta vez en la casa de jornadas del colegio SSCC Recoleta, por motivo de la fiesta de los Sagrados Corazones, para compartir nuestras vida comunitaria, apostólica y espiritual, a manera de testimonio, desde el corazón de Jesús y de María, Iniciamos dicho encuentro a las 9 a.m. con una breve oración dirigida por nuestra hermana Juana Gómez-Loayza. Para continuar el pequeño programa del día, vimos el mensaje del papa Francisco a la Vida Religiosa. El pequeño video, nos introdujo para lo que sería el compartir en pequeños grupos nuestra vida como SSCC. Creo que como seguidores de Jesús tenemos la necesidad de hacer un alto para hacer una medición de la cercanía de nuestro corazón hacia el corazón de nuestro buen Maestro. Este encuentro fue para reafir- mar que el corazón de Jesús es símbolo del amor y de la cercanía, de manera particular con aquellos que necesitan experimentar el amor de Dios. El corazón de Jesús, para nosotros como consagrados, significa el amor en su máxima expresión; amor hecho palabras y obras; significa impulso generoso a la donación de sí mismo hasta la muerte. Nuestra vida como religiosos SSCC tiene sus luces y sombras, sin embargo el ser amados nos dignifica, nos alienta y nos exige corresponder con el mismo amor. En cada momento el corazón de Jesús llama nuestra atención a través de nuestros hermanos de comunidad y por medio de las personas tan sencillas que nos encontramos día a día en nuestra pastoral. Es así que podemos decir, en buen sentido de la palabra que, ser amados no es fácil, ya que interpela, cuestiona y exige a amar con la misma radicalidad e intensidad. Después del compartir en grupos, tuvimos un pequeño refrigerio, luego pasamos a la capilla para celebrar la alegría de ser amados, reunidos y motivados por medio la eucaristía presidido por nuestro hermano José. Y como es de costumbre no se podía terminar mejor que con un buen almuerzo. Después todos regresamos a nuestras comunidades para seguir con más fuerza nuestros trabajos cotidianos, que no es otra cosa que seguir anunciando el amor de Dios encarnado en Jesús. Los corazones de Jesús y de María nos acompañen siempre. En este compartir, implícitamente nos hemos preguntado: ¿cómo podemos hacer visible ese amor de Dios manifestado en Jesús? Una de las vías para visibilizar ese amor es, según nuestro compartir en grupos, a través de nuestra propia vida. Es decir, nuestras palabras y obras tienen que estar bañadas de ese amor y cercanía de Jesús 18 Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 Vida de las Provincias Nuestra Familia Comunidad de Nuestra Señora de Guadalupe Atotonilco - México D urante el mes de mayo nuestra comunidad, formada por siete hermanas ha vivido acontecimientos importantes. En la vida diaria muy pocas veces estamos todas, por tareas diversas, este mes fue diferente: Martha Elizabeth (Liz) acompañó a su mamá y papá, que se encuentran delicados de salud, (del 8 al 22). Graciela viajó al Perú al encuentro de Formadoras del 26 de abril al 14 de mayo. Celebramos a nuestras mamás el día 10 de mayo con una visita relámpago a cada una de ellas, ya que al día siguiente tuvimos las confirmaciones de un grupo de adolescentes en la parroquia de Santiago Apóstol, luego compartimos una alegre comida con Don Juan Pedro Juárez Meléndez obispo de Tula, y con Don Emilio, (párroco). Del 26 al 30 de mayo como cada año, tuvimos una semana de estudio de vida religiosa de nuestra diócesis, nos reunimos alrededor de 28 hnas. de 13 congregaciones diferentes con el tema “Teología desde la experiencia de las mujeres” que nos impartió la teóloga Mariana Gómez y su esposo el teólogo Reynaú Omán Santiago Marroquín, ambos del Centro de Estudios Ecuménicos; esta experiencia fue muy enriquecedora ya que como diócesis tratamos de caminar con un plan de formación común que anime nuestra vida Consagrada como mujeres que hacen y construyen historia en esta realidad que vive hoy nuestro país. Descubrimos grandes desafíos y tareas que nos llevan y comprometen a seguir reflexionando en esta línea y sobre todo a unir fuerzas para continuar revitalizándonos y fortaleciendo las relaciones intercongregacionales. La semana pasada en la casa del Migrante en Bojay tuvimos un incidente con un grupo de migrantes que eran extorsionados por las bandas delictivas que operan en todo el trayecto de “La bestia”, gracias al apoyo de la policía municipal y estatal se logró normalizar la situación. Con tristeza seguimos constatando la realidad de vulnerabilidad que viven nuestros hnos. migrantes, y con preocupación vemos, que el paso de mujeres y niños ha aumentado considerablemente. Comunidad de Huaripampa RETIRO COMUNITARIO. Los días 9, 10 y 11 de junio, la comunidad se retiró a Matahuasi y animada por el P. Eusebio Pascual, operario diocesano y director espiritual del seminario arquidiocesano, reflexionó sobre el ministerio apostólico tal como lo presenta San Pablo. SEMANA DE LOS SAGRADOS CORAZONES. Tres días antes a las fiestas de los Sagrados Corazones, la comunidad organizó encuentros sobre la presencia de la congregación en los cinco continentes. La fiesta del Sagrado Corazón fue solemnizado con un almuerzo de la comunidad con los sacerdotes y las religiosas de la vicaría, la presentación del video “Una historia que contar…” (a las 6.40 p.m.), la eucaristía y un agasajo. NOVEDOSOS BILLETES. El responsable de la catequesis de confirmación se ha convertido en emisor de una moneda válida en el ámbito de la confirmación. El confirmando que participa en la misa entera recibe 10 Damianes, si llega en la mitad, son 5. A fin de año habrá una feria donde el ya confirmado podrá adquirir productos con sus Damianes. Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 19 Nuestra Familia Colegios SSCC Encuentro de colegios Sagrados Corazones Sra. Yuliana Rondón Directora del colegio Padre Damián - Arequipa acuerdo a los proyectos para este año, compartiendo de esta manera una serie de experiencias que han enriquecido enormemente a todas las demás instituciones. Todo esto se ha llevado en un clima de mucha confianza, observándose claramente la sencillez en la acogida de todo lo compartido. D el 21 al 23 de mayo de este año, nos reunimos las promotoras, directoras y coordinadoras académicas de los colegios Sagrados Corazones de Lima y Arequipa, para analizar los pasos dados y planificar los que daremos, en el desarrollo del Plan Global de Educación SSCC hasta diciembre del 2017. Del mismo modo, proyectarnos a la implementación de la Pedagogía del Cuidado y la Reconciliación (PCR) en Belén, Reina de la Paz, Sagrados Corazones y su continuidad en Padre Damián (donde se inició en el año 2011, como centro piloto). Contamos con el monitoreo y acompañamiento de la Hermana Sara Banda y la Hermana Valéria Gomes dos Santos, Provincial de la Congregación. En este encuentro tuvimos la presencia de Freddy Velandia, representante de la Fundación para la Reconciliación, quien monitoreará la PCR en los cuatro colegios e hizo una presentación general y muy motivadora con las pautas para la implementación. En el camino del Plan Global de Educación, iniciado en el año 2007, hemos ido enfrentando varios desafíos, en pos de lograr realizar nuestra misión evangelizadora desde las aulas de clase, desde el currículo de cada área académica y consolidando los colegios en pastoral. Los aspectos de formación, capacitación, vivencia SSCC el trabajo en equipo, la alegría en las celebraciones de la fe, entre otros han sido pilares de los proyectos ejecutados. A partir del 2013, luego de una evaluación de los avances logrados, replanteamos acciones y metas hasta el 2017. Un gran aliado para nuestras metas es la PCR y también estaremos juntos en este proyecto. Lazos de integración, ampliamente estrechados La dinámica de trabajo desarrollada, permitió que cada colegio presentara las actividades realizadas de 20 Hemos obtenido una amplia gama de opciones que podemos adaptar a cada colegio desde sus propias y peculiares características. Considero que cada colegio tiene claro las diferencias que existen entre uno y otro, pero existe un principio definido para todos y es que nos encaminamos hacia un mismo horizonte, acompañados entre sí y enlazados por los grandes proyectos que venimos ejecutando. A raíz de lo sustancioso que resultó compartir nuestro trabajo, ha surgido entre todos los asistentes, una necesidad de mantener la comunicación permanente, de intercambiar constantemente lo que vamos haciendo y recibir comentarios o sugerencias en un clima de fraternidad. Monitores para dinamizar el trabajo. Con los retos asumidos por cada institución es necesario poder contar con un equipo que dinamice las acciones que vamos desarrollando. En el caso de la PCR, Freddy Velandia visitó ya los cuatro colegios e inició la institucionalización del proyecto en centros que todavía no están desarrollándolo; de esta manera se convierte en el monitor. En cuanto a nuestro Plan Global de Educación, el impulso desde Lima está a cargo de Carmen Navarro y desde Arequipa a cargo de Sara Guillén, quienes han conformado un equipo muy dinámico y unido. Formándonos permanentemente: Tuvimos la gran suerte de participar de una ponencia a cargo de la Hermana Candy Núñez acerca de la Justicia Restaurativa, en la que pudimos analizar algunos casos en los que se producen faltas a los acuerdos de convivencia, llegando a la necesidad de trascender más allá de la sanción que se pudiera estipular en los reglamentos internos, para llegar a la restauración de la falta y potenciar a la persona por encima de los actos. Obtuvimos de esta forma, una posibilidad para llevar la teoría que se nos presentó, a la práctica en situaciones concretas. Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 Colegios SSCC ejecución de las mismas. Una de esas actividades es el ECUDEART 2014, que congregará a ochenta alumnos y alumnas de tercero a quinto de secundaria, de los cuatro colegios (veinte de cada uno), en la ciudad de Lima, para poder integrar a nuestro alumnado a través del arte, el deporte y sobre todo el carisma Sagrados Corazones. Este evento se realizará del 18 al 22 de setiembre y nos lanzamos ya a su preparación con mucha alegría. También contamos con la participación de Freddy Velandia, quien nos presentó un marco teórico y muy reflexivo acerca de la PCR, llevándonos a profundizar acerca del cuidado, la ética del cuidado y el rol de la educación para generar ambientes de paz que se irradien a toda la sociedad. Planeando juntos (as): En el afán de avanzar juntos y contagiar la necesidad de trabajar en equipo a todas nuestras comunidades educativas, hemos planificado varias actividades a nivel de Arequipa y Lima, que nos van a permitir integrarnos más, generar más espacios de intercambio desde la propia organización hasta la N Nuestra Familia Luego de este encuentro, tenemos un ánimo excelente, nos sentimos acompañados (as) el uno del otro y convencidos que a la luz del evangelio, iremos formando a nuestros niños y niñas, a nuestro jóvenes, con principios sólidos en un actuar autónomo. ¡Estamos de aniversario! uestro querido Colegio Sagrados Corazones Belén cumplió 166 años, y a través de sencillas, pero significativas actividades celebramos su aniversario. Iniciamos nuestras celebraciones el lunes 23 con la oración de la mañana a cargo de los alumnos de 1ro. “C” de secundaria, contando con la participación activa de los alumnos y profesores, coincidentemente tuvimos la presencia de Padres de Familia ganadores del campeonato de fulbito de ADECORE, quienes ratificaron su confianza en nosotros y agradeciendo al colegio por la educación que brindamos a sus hijos. Quisimos darle un toque artístico a las celebraciones por lo que desarrollamos la creación de banner alusivos a los nombres de las promociones del colegio, donde a través de una imagen y una frase nuestros alumnos de secundaria tuvieron un espacio de reflexión, expresión y de compañerismo alentados y acompañados por sus profesores. Asimismo los alumnos de la Promoción “Corazón de María” elaboró la tradicional alfombra de flores, que refleja el agradecimiento y la identificación de nuestros alumnos a su colegio por los años vividos como parte la familia Sagrados Corazones. Sin embargo, el martes 24 tuvo un sello muy especial, los alumnos realizaron de manera voluntaria la adoración al Santísimo, con este acto reconocimos que han tomado conciencia de la presencia actual y viva de Dios en sus vida, reflejando la imagen de una fe realmente madura y el modelo de un auténtico evangelizador. El día miércoles 25 lo vivimos con algarabía gracias al bailetón organizado por el consejo estudiantil, hubo energía, dinamismo y entusiasmo en las promociones. El día jueves 26 participamos de la celebración eucarística en la capilla grande. Estuvieron presentes las religiosas de la Congregación, las autoridades del colegio, los docentes y alumnos para celebrar juntos como la gran familia belenista que somos. La reflexión fue en torno al evangelio de Mateo (11,25-30) que nos invita a llevar a nuestro de corazón el ser pacientes y humildes como nos enseñó Jesús misericordioso. Hemos cerrado la semana con la celebración eucarística porque el Colegio Belén quiere agradecer a Dios la alegría y cariño de nuestros alumnos, el esfuerzo diario y la dedicación de sus maestros, el aliento de los padres de familia y en especial el afecto y sencillez de las religiosas. Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 21 Nuestra Familia Colegios SSCC Dejamos el nido con tus huellas Diana García M. Alumna de 5° de secundaria del Colegio sscc Belén Q ué es lo primero que se me viene a la mente cuando pienso en la palabra “Colegio”? Probablemente retroceda algunos años atrás y me dé cuenta que esta palabra de tan solo tres silbas, una palabra tan pequeña para tan importante concepto, ha adquirido distintos significados a través del tiempo. Tal cuando era pequeña no me gustaba; tal vez hasta pensaba en cuándo iba a terminar y me limitaba a esperar que den las tres de la tarde para correr a mi hogar y encontrarme con mi mama, papá, tíos, abuelitos… Tal vez. Más adelante miles de frases asaltaron mi mente; No quiero ir, estoy cansada, me olvide de la tarea, tengo frío, tengo hambre… Pero ahora, cuando pienso que pronto me despediré de mi Colegio, de mi segundo hogar, y que nunca volveré; no puedo evitar desvanecerme de emoción. El colegio se define como aquel centro destinado a la enseñanza de Inicial, primaria y secundaria. No, es mucho más que eso. Para mi “Colegio” es amistad, es familia. Es haber pasado doce años de mi vida acostumbrándome a mis amigos, profesores, al ambiente, a todo. Es haber cambiado, evolucionado, haberme equivocado y sobre todo aprendido. Y qué mejor lugar que el Colegio Belén para haberme enseñado todo esto y más. Con este argumento intentaré explicar cómo es que se me ocurrió el diseño de esta alfombra. Resulta, pues, que cuando pienso en dejar aquella parte de mi vida que me permitió desarrollarme plenamente desde que era pequeña; pienso que estoy dejando el nido. Pero no sin antes reconocer aquellos valores que siempre han estado presentes en este pequeño hogar. Si los quisiera enumerar serían muchos como para que no entren en una sola página, sin embargo algunos ejemplos de estos, son el amor de Dios y los hermanos/as, la solidaridad y la amistad, que estoy segura siempre me acompañaran. Está hecho. Estoy casi al 100% de estar preparada para salir y seguir adelante. Sin embargo, el ave ya sabe volar, y estoy segura que todos seguiremos adelante y nos convertiremos en grandes personas capaces de poner en práctica todo lo que nos han enseñado. Por eso te digo gracias, Belén, por haberme brindado tantas oportunidades, por haberme acogido con tanto amor y cariño. Y, finalmente gracias por ser el mejor. Video de la Provincia SSCC - Perú El video presenta la historia de los hermanos en el país desde 1885 y su apostolado actual en el ámbito parroquial, educativo y juvenil. Link: http://www.ssccperu.com/ver-videos.php 22 Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 Colegios SSCC Nuestra Familia Recordemos el pasado y reflexionemos sobre nuestro futuro M Lic. Carlos Zevallos Ramos Asesor de Ciencias Sociales SSCC Belén e parece oportuno hacer unas reflexiones ante la conmemoración inminente de los 193 años del inicio de nuestra vida republicana, sobre algunos puntos válidos para cualquier circunstancia histórica posterior al 28 de julio de 1821 y oportunas, en mi opinión, para el momento que atraviesa la República Peruana, en el contexto social globalizado que nos toca vivir actualmente. Traer a la memoria colectiva el sentido de estas fiestas cívicas, implica naturalmente, remontarnos casi a doscientos años (primer levantamiento por la libertad del país fue de Francisco Antonio de Zela 1811) atrás e intentar comprender los ideales políticos que inspiraban a los peruanos desde entonces, los precursores y los actores de la Independencia del Perú, en los cuales primaba el espíritu de la ilustración del siglo de las luces, buscando para todos los ciudadanos el reconocimiento de su dignidad como seres humanos y el abandono de la minoría de edad de la razón, que consistía para el espíritu ilustrado, la capacidad de pensar por sí mismos operada en el hombre por la educación y la autonomía. No voy a profundizar en la ideología de la ilustración, ni en los matices que adquirió en suelo peruano, ahí está el caso de tantos nombres ilustres como por ejemplo el reconocido Hipólito Unanue. Sólo quiero hacer notar que todos ellos se inspiraron en el ideal ilustrado queriendo hacer realidad en el Perú. Es más nuestros tatarabuelos o nuestros abuelos pensaban que sería el mejor legado que podrían dejarnos a las generaciones sucesivas. Todos hemos oído contar en nuestras familias e incluso en la escuela los ecos en hijos y nietos de los sucesos de Ayacucho o de Junín o los anteriores, como es el 28 de julio, en los cuales se narraba con orgullo y admiración, el espíritu patriótico con el cual esas generaciones arriesgaron su vida por el Perú. En estos 193 años transcurridos, la visión de la vida y esos ideales ilustrados han evolucionado. Con rapidez vertiginosa, diría yo, en las últimas décadas del siglo XX. Los principios éticos del honor, la justicia, el bien común, la valentía, la honestidad, la veracidad, parecieran haber sido sustituidos en la vida pública y en la privada por otros móviles y fines para la acción y la vida humana. Ideologías nacidas en un clima agnóstico e individualista han persuadido a muchos que la utilidad y el interés son los móviles válidos para el hombre moderno. Los ciudadanos, hoy día debemos de invertir en nosotros mismos y en la educación de los demás, especialmente en la niñez, adolescencia y juventud, en energía moral para poder construir así con valentía el propio espacio familiar y social. Por algo somos libres como nos lo recuerda nuestro Himno Nacional y que lo seamos siempre, pero no sólo con autonomía política y jurídica, sino libres con libertad moral que nos guiará a una paz interior. Ser libres moralmente requiere, como es bien sabido, un compromiso serio con los principios del código ético para el obrar humano. Y conmemoraciones como las Fiestas Patrias, con tantos ejemplos heroicos de virtudes son una oportunidad para estimular ese compromiso nuestro. Asimismo, al experimentar con viveza las raíces comunes que nos unen a los peruanos y al contemplar una vez más nuestra historia de la cual tanto podemos aprender y sentirnos orgullosos, ello es ocasión para llenarnos de esperanza en el mañana. Podemos estar a la altura moral que las circunstancias actuales nos demandan y hemos de fomentar alrededor nuestro el optimismo, dándonos cuenta, una vez más, que poseemos un riquísimo legado cultural, que hemos de mostrar al mundo con orgullo, también como fuente de riqueza turística para el país. Que vivimos asimismo en una nación con extraordinario potencial natural sin explotar aún. Que poseemos un capital humano con enorme energía por su composición juvenil, requerida de educación y oportunidades de trabajo. Que constituimos una nación, noble y digna, que exige de nosotros el empeño por impulsar el cambio social y el desarrollo económico, objetivos comunes que deben unirnos a todos los peruanos hoy, mañana y siempre. ¡Viva el Perú! Gracias Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 23 Noticias SSCC Nuestra Familia Visita del Gobierno General al Colegio SSCC Recoleta El martes 13 de mayo, el colegio recibió la visita del P. Javier Álvarez-Ossorio Ramos y del P. Pancratius Olak Kraeng, Superior General y Consejero General de la Congregación de los Sagrados Corazones respectivamente, quienes llegaron a Lima para realizar la visita oficial del gobierno general a la provincia del Perú. Encuentro con docentes, personal administrativo y de apoyo Durante su visita, recorrieron las instalaciones del colegio y sostuvieron un encuentro especial con todos los docentes, personal administrativo y de apoyo, con quienes compartieron un almuerzo de bienvenida que contó, además, con la participación de los elencos de canto y baile de nuestros alumnos de primaria y secundaria, quienes nos deleitaron con su talento Almuerzo de bienvenida COMUNIDAD WILSON • El 30 de mayo toda la comunidad participamos de un paseo al norte chico, visitamos las ruinas de Caral cerca a Supe. Al pasar por Huacho visitamos la tumba de nuestro obispo Pablo Ramírez, en la cripta de la catedral. • Durante el mes de junio, Raúl estuvo en Bogotá participando en el curso de doctorado de teología en el ITEPAL –UPB. • El Proyecto de la Iglesia que “acoge, escucha y acompaña” va avanzando lentamente: El curso de Teología a distancia está por terminar los dos primeros módulos, cuenta con 35 inscritos y la participación de más de 25, se realiza todos los jueves en la noche con un profesor. 24 • Hace tres semanas estamos recibiendo algunas llamadas para el centro de escucha que atiende en el convento de la Recoleta, en un espacio que adecuamos para este fin. • El 27 de junio, día del corazón de Jesús, se inauguró la capilla al Santísimo en la Iglesia de la Recoleta. • Por el momento, encontramos dificultad en los Institutos Superiores cercanos a Plaza Francia para que los jóvenes participen en nuestras actividades programadas. Participantes del curso de teología Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 Noticias SSCC Nuestra Familia COLEGIO REINA DE LA PAZ COLEGIO SSCC BELÉN CELEBRACIÓN SAGRADOS CORAZONES SEMANA DEL COLEGIO - NIVEL PRIMARIA La semana del 23 al 26 de junio, los alumnos y toda la comunidad educativa participamos de la fiesta de los Sagrados Corazones, se trabajaron diversas actividades con el tema “Hacer Nuestros Los Sentimientos del Corazón de Jesús y del Corazón de María” iniciamos con la elaboración de los altares en cada aula y la visita del Santísimo, también alumnas y alumnos elaboraron rompecabezas, vitrales, pancartas, vídeos y culminamos con la celebración eucarística, un compartir en las aulas y el bailetón. La semana del 23 al 27 del presente el Colegio de “Los Sagrados Corazones Belén” estuvo de fiesta, ya que cumplió 166 años de Fundación y lo vivimos en un clima de oración, creatividad y alegría . Por ello, se organizaron diferentes actividades : • Lunes 23: oración al corazón de Jesús y María . patio del nivel • Martes 24: Los alumnos del nivel primaria, con mucha fe y devoción visitaron al Santísimo en la capilla, ofrecieron sus compromisos y deseos. • Miércoles 25: los niños elaboraron paneles relacionados a la familia Sagrados Corazones. La creatividad de estos trabajos fue expuesta en el Hall del nivel. Así mismo, se planificó una Celebración de la Palabra en la capilla Sagrados Corazones. • Jueves 26: los alumnos del COES organizaron el tradicional bailetón, donde nuestros niños disfrutaron con alegría bailando al ritmo de música variada. Oración a Nuestra Señora de la Paz Virgen y Reina de la Paz Madre de los pobres y sencillos esperanza de los que sufren soledad Señora del Amor y de la Alianza. Tú nos diste a Jesús, Príncipe de la Paz Él que nos regaló con su Eucaristía y nos consagró a su Amor Redentor. Enséñanos a vivir con sencillez las exigencias del Evangelio, a servir con alegría a todos los hombres, nuestros hermanos, a mostrarnos serenas en la Cruz, y fieles a nuestro espíritu de Adoradoras. Danos tu generosidad, tu pobreza y tu humildad, danos tu amor al trabajo, a la justicia, a la verdad. Concédenos el ser mensajeras de paz, en nuestra Comunidad, en nuestra familia y en nuestra Patria. Para poder llegar a mostrar al mundo nuestra misión de ser corredentoras del Amor, Hijas del Corazón de tu Hijo y de tu Inmaculado Corazón. Guarda hoy en ese corazón pobre, silencioso y disponible, a esta familia tuya, que quiere ser artesana de paz, de alegría y de amor en tu Iglesia. Amén. Junio - Julio 2014 - N° 372 - 373 25 150 años de la llegada del P. Damián a las islas Hawái Damián y su vivencia de nuestro carisma SSCC. … En 1887 Damián expresa en sus cartas una entrega alegre, amante y generosa a los leprosos que le han sido confiados. “Querido hermano: … Como sabes, hace tiempo que la Divina providencia me escogió para morir víctima de repugnante enfermedad que es la lepra. Espero quedar eternamente agradecido a Dios por esta merced. Me parece que esta enfermedad abreviará y aun estrechará el camino que me ha de llevar a nuestra deseada patria. Con esta esperanza acepto esta enfermedad como mi cruz especial. Procuro llevarla como Simón el de Cirene, tras las huellas de nuestro divino Maestro. Ayúdame con tus oraciones para que tenga la fuerza de perseverar hasta que llegue a la cima del Calvario”. (Molokai, Kalawao, 9 de noviembre de 1887, al Padre Pánfilo). “Continuo siendo el único sacerdote en Molokai. El padre columbano, y últimamente el padre Wendelin Molers son los únicos hermanos que he visto desde hace dieciséis meses. Por tener tanto que hacer, el tiempo se me hace muy corto; la alegría y el contento del corazón que me prodigan los Sagrados Corazones hace que me crea ser el misionero más feliz del mundo. Así el sacrificio de mi salud, que Dios ha querido aceptar haciendo fructificar un poco mi ministerio entre los leprosos, lo encuentro después de todo muy ligero e incluso agradable para mí, atreviéndome a decir como San Pablo: “Estoy muerto y mi vida está escondida con Cristo en Dios”. (Molokai, Kalawao, 8 de diciembre de 1887, al Padre Pánfilo). “Sigo preocupándome de mis asuntos y todavía en todo momento al cuidado de mis leprosos. Después de todo no estoy tan mal, aunque la lepra me trabaja deprisa. Mi rostro ha empezado a deteriorarse, mis orejas se han agrandado, mi nariz se ha obstruido y mi mano derecha está dañada. Las hinchazones son ya claramente visibles. Los dolores me han disminuido notablemente, pero el aspecto externo ahora es el más afectado”. (Molokai, Kalawao, 8 de diciembre de 1887, a E. Clifford). Damián en sus Cartas – Norberto Zulaica ss.cc. pp. 28-29 ¿QUÉ NOS DICE LA VIDA DE DAMIÁN HOY? (para reflexionar) Damián reconocer haber recibido su misión de Dios, a través de la Congregación. La vive con agradecimiento y alegría, la entrega con verdadero amor. ¿Reconozco que mi misión personal me viene de Dios a través de la Congregación? ¿Se descubre en ella mi pertenencia a los Sagrados Corazones?