“Nelson Mandela DD. HH.” Centro de Estudios e Investigación Social Avenida Alberdi N° 338 - Resistencia - Chaco - C.P. 3500 Web site: http://ar.geocities.com/centrodeestudiosnelsonmandela Tel/fax: (54 - 03722) 428475 E mail: [email protected] LA VIGENCIA DE LOS DERECHOS HUMANOS ES UNA EXIGENCIA IDEAL, ETERNA, UNIVERSAL E IRRENUNCIABLE, COMO EXPRESION DE LOS VALORES DE ASCENDENCIA FILOSOFICA, ETICA, MORAL Y JURIDICA NOTA 1 EL NUEVO HOSPITAL PERRANDO-CASTELAN, UN SITIO CLAVE DE MENTIRAS POLITICAS Pasaron muchos años desde que se tomara una de las decisiones políticas más importantes para reestructurar el sistema sanitario en la provincia del Chaco; mientras tanto, el Hospital Perrando-Castelán continúa sin ser integralmente habilitado a pesar del crecimiento constante de la demanda de atención médica en el sector de la salud pública. Las marchas y contramarchas en materia de política sanitaria vinculadas con el Hospital PerrandoCastelán requiere un breve resumen de su propia historia a través de una crónica que comprenda el cronograma de gestiones, la memoria técnica, la planificación, los proyectos y los programas, al cabo del cual posiblemente entendamos que la actual situación de nuestro hospital cabecera de máxima complejidad es una muestra categórica de la mayor locura en el manejo de las cuestiones públicas. La historia del nuevo Hospital Perrando-Castelán explicará las causas por las cuales se pasó de una situación relativamente muy favorable en el año 1995 a un estado de pre-colapso en los años siguientes, con las consecuencias a la vista frente al empobrecimiento general de la población chaqueña y la declinación evidente del sistema de salud pública. Más que un hospital El Perrando-Castelán es más que un hospital porque es el último recurso y la última esperanza para que grandes sectores intenten recuperar la salud perdida; las personas que concurren a este hospital precisamente son las más necesitadas y desprotegidas dado que no cuentan con cobertura sanitaria, de modo que una atención médica insuficiente o ineficiente es lapidaria para estos grupos y sectores. Con el propósito de dotar de un edificio adecuado a las nuevas técnicas de complejidad creciente, desde la década de los años 50 se sucedieron innumerables comisiones “pro construcción de un nuevo Hospital Perrando”; estos esfuerzos tuvieron distintos grados de avances, algunos de los cuales llegaron a originar licitaciones nacionales adjudicadas a fines de los años 60, que al ser anuladas motivaron que debieran pagarse millonarias indemnizaciones a los adjudicatarios. La última etapa se comenzó a gestar a principios de 1982, recorriéndose un largo y sinuoso camino hasta que se concretara la construcción del nuevo Hospital Perrando -Castelán, que actualmente funciona de manera parcial e inadecuada, desaprovechándose la alta complejidad de la que inicialmente fuera dotado, por lo que se debe recurrir a otros subsistemas privados de la ciudad o derivarse los pacientes a otras provincias o a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.- La desgraciada historia del hospital En el mes de marzo de 1982 se tomó la decisión política de producir un profundo e integral cambio en la estructura física del viejo Hospital J. C. Perrando. En mayo de 1982 un equipo técnico provincial elaboró un Plan Maestro con el objetivo de producir la renovación total de áreas críticas y el reciclaje de los antiguos pabellones para ser destinados a áreas no asistenciales. En julio de 1982 se elaboró el proyecto, la licitación y la ejecución de las infraestructuras troncales para abastecer al hospital en funcionamiento y a las nuevas obras que consistían en playa de estacionamiento, tanque, cisterna y red troncal de agua potable, red y sumideros de desagües pluviales, red troncal de desagües cloacales, subestaciones transformadoras y una red troncal subterránea de energía eléctrica. En agosto de 1982 se elaboró un Proyecto que contemplaba la construcción de 25.000 m2 de obra nueva para el área crítica, que se ejecutaría en tres etapas, más una cuarta con refuncionalización de 10.000 m2 de los antiguos pabellones, algunos de los cuales resultaban de alto valor histórico arquitectónico. En octubre de 1982 se licitó la primera etapa de 10.000 m2 con financiación del Fondo de Desarrollo Regional y se preparó la documentación para la segunda etapa. En abril de 1983 se anuló la licitación por lo cual los fondos debieron ser devueltos puesto que al ser recursos con fines específicos únicamente debían ser destinados a la ejecución de esta obra y no podían ser destinado a otros objetivos. En octubre de 1985 la Nación invitó, conjuntamente con otras, a la provincia del Chaco a participar del Programa de Rehabilitación de la Infraestructura de Salud [P.R.I.S.]; esto se produjo en el marco de un acuerdo suscripto entre el gobierno argentino y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo [P.N.U.D.] firmado el 26 de febrero de 1985 y posteriormente aprobado por ley Nº 23.396 del 10 de octubre de 1986. Durante el año 1986 se trabajó en los términos de referencias y el Programa Médico Arquitectónico comenzó a llamarse “Perrando-Castelán” dado que por exigencia del B.I.D. debía ser un hospital polivalente de agudos, integrándose el Hospital Pediátrico. En diciembre de 1986 se autorizó la celebración del Contrato de Préstamo 516/OC-AR; esto se concretó a través de la Resolución Nº 164/86 del Directorio Ejecutivo del BID. En marzo de 1987 se firmó el Convenio de Participación entre la Provincia del Chaco y el Ministerio de Salud Pública y Acción Social de la Nación. En mayo 1987 la Cámara de Diputados de la Provincia del Chaco aprobó el Convenio de Participación por medio de la ley Nº 3254. En julio de 1987 la Presidencia de la Nación emitió el Decreto Nº 1328, aprobando el Contrato de Préstamo celebrado entre la Argentina y el BID. En marzo de 1988 se firmó el Contrato de Préstamo 516/OC-AR entre la Nación Argentina y el BID, por la suma de U$S 125.000.000, monto que significaba la cooperación del banco en un 40% en la ejecución del Programa; la inversión restante debía ser integrada en un 40% por el Tesoro Nacional y el 20% debía ser afrontado por las once provincias participantes del emprendimiento. En agosto de1988 se eximió de impuestos o gravámenes provinciales a la ejecución del Programa enmarcado en el préstamo 516/OC-AR; esto se produjo a través de la ley Provincial Nº 3391, dictada el 17 de Agosto de 1988, que fuera promulgada por el Poder Ejecutivo mediante el Decreto Nº 1118 del 22 de agosto de 1988. En los años 1988 y 1989 se elaboraron las carpetas técnicas para licitar los once hospitales; esto se produjo en la Unidad Formuladora de Proyectos de la UEC, con la activa participación del Departamento Construcciones de la UEP-Chaco, que realizó múltiples aportes a las distintas soluciones funcionales y tecnológicas, en muchos casos en función de las implantaciones y características propias de cada región y en otras como apoyo a los restantes proyectos. Nuestra provincia cumplió con todos los requerimientos contemplados en las instrucciones del BID-UEC y en función del Convenio de Participación de la UEP esta actuó como receptora e interlocutora de los equipos técnicos responsables del Proyecto, articulando las distintas tareas aportadas por los 2 organismos provinciales. Los trabajos fueron múltiples y de distinta índole, entre los que puede mencionarse los siguientes: saneamiento catastral y de dominio del terreno; dotación de infraestructuras {agua, cloaca, energía, desagües pluviales, teléfonos, accesos pavimentados, etc.}, leyes y ordenanzas de acompañamiento y apoyo al Programa y rellenos de terrenos con 80.000 m3 de suelo. El área médica de la UEP participó activamente en la elaboración del programa médico, recabando e interpretando indicadores sociales y de salud de la población. Además, se confeccionaron los programas financieros y de fortalecimiento institucional. El 29 de junio de 1989 se produjo la apertura de los sobres con las ofertas de la licitación internacional. En agosto de 1989 se dispuso una disminución de la superficie cubierta; por requerimiento de UEC-BID el equipo decidió eliminar los servicios no esenciales, produciéndose un recorte del 8% de la obra, por lo cual se construirían 22.450 m2 aunque se mantuvo la complejidad hospitalaria. En diciembre de 1989 la Cámara de Diputados de nuestra provincia sancionó la Ley 3532, de Apoyo y Defensa para la Construcción del Nuevo Hospital Perrando-Castelán. En febrero de 1990 los equipos técnicos de la UEC y las distintas UEP reanalizaron los programas médico, arquitectónico y de ingeniería, como también el financiero y el de fortalecimiento institucional. En julio de 1990 el BID no objetó la preadjudicación de la Licitación Internacional; a partir de esa fecha se esperó el dictado del decreto presidencial para adjudicar la construcción de los Hospitales de las provincias de Chaco, Formosa y Misiones. El 28 de diciembre de 1990 se comunicó al Gobierno de la Provincia del Chaco que se anuló el proceso licitatorio. En enero de 1991 el Ministerio de Economía de la Nación produjo una modificación en la conformación de la matriz de la contrapartida nacional, invirtiéndose los porcentajes correspondientes a Nación y Provincia; esto provocó el retiro de nueve de las once provincias que formaban parte del emprendimiento, quedando en el Programa solamente Córdoba y Neuquén. En febrero de 1991 el gobierno chaqueño suscribió el Acta Compromiso ratificando la decisión de participar en el Programa, asumiendo el compromiso de aportar el 40% del total de las inversiones para la obra civil y la compra del equipamiento médico, con la salvedad que consistió en dividir el emprendimiento en etapas, contemplándose en la primera aproximadamente la mitad de la obra, o sea 13.000 m2. Por la mecánica de construcción adoptada se tendría que seguir utilizando las antiguas instalaciones del Hospital Perrando. En los meses de febrero y marzo de 1991 se reelaboró el Programa Médico-Arquitectónico, decidiéndose la vuelta al Proyecto del año 1983, ajustándose a las nuevas exigencias de la práctica médica. A requerimientos del BID, la provincia se hizo cargo del Anteproyecto y la UEC completó las instalaciones. En mayo de 1991 se aprobó el Acta Compromiso suscripto por el Gobernador a través de la Ley provincial Nº 3664, la que fue promulgada por Decreto Nº 690 del 16 de junio de dicho año. El 7 de octubre de 1991 se produjo la apertura de preclasificación de las empresas. El 30 de enero de 1992 se concretó la apertura de la Licitación Internacional. El 16 de junio de 1992 se materializó la preadjudicación de la obra por Disposición Nº 10 de la UEC. Comienzo de la obra Luego de las tediosas tramitaciones, el 16 de agosto de 1992 se comenzó la ejecución 3 de la obra. Luego, por pedido del gobierno de la Provincia del Chaco durante los años 1.993, 1.994 y 1.995 se produjeron varias ampliaciones de obra que llevaron la superficie construida de 14.000 m2 a casi 21.000 m2; los servicios incorporados fueron los siguientes: centro quirúrgico, neonatología abierta, 112 camas de internación indiferenciada, tratamiento de residuos patológicos, etc. Las ampliaciones fueron positivas ya que el hospital se fue completando, pero esto provocó que se alargaran los plazos de obra. La contratista presentó reclamos por mayores costos debido al marcado aumento de los precios de los insumos y equipos, planteos que fueron denegados como consecuencia de las pautas de la Ley de Convertibilidad vigente en esa época. Recepción provisoria y parcial En diciembre de 1995 se produjo la recepción provisoria de las áreas de cocina , lavadero y anatomía patológica; la habilitación se concretó en noviembre de 1996 motorizada por una fuerte presión del personal debido a las heridas recibidas por uno de ellos como consecuencia de un siniestro que se produjo en la vieja estructura que se encontraba, en un estado verdaderamente deplorable. En abril de 1996 se firmó el contrato para la provisión e instalación de equipamiento medico y mobiliario con el mejor oferente de la licitación internacional convocada con ese propósito , valorizándose los bienes y servicios en aproximadamente U$S 9.000.000, adjudicándose la operatoria a la firma francesa Developpement S.A, que luego entró en convocatoria y finalmente quebró antes de comenzar a entregar los equipos y el mobiliario. La Provincia fue relevada de pagar la contrapartida del equipamiento a su cargo; la Nación asumió el financiamiento del 60% de la obra y el B.I.D. el 40% restante. A fines del año 1996 se produjo la recepción provisoria de la obra básica mientras continuaban los trabajos en las ampliaciones; que avanzaban cada vez con mayor dificultad debido al desfasaje que existían entre los precios fijados durante el año 1992 y los costos vigentes en el año 1997 y 1998. En enero de 1998 el contrato fue cedido al segundo oferente que resultó ser Hospitalia Intenacional, subsidiaria de Siemens. En septiembre de 1999 se transfirió el contrato a Incico S.A., que completó la obra de ampliación y ejecutó las obras de premontaje del equipamiento médico. Entre enero y marzo del año 2000 se transfirió la obra a Hospitalia , que terminó de instalar el equipamiento en el mes de abril, quedando el hospital en condiciones de ser inmediatamente habilitado en toda la estructura construída . En abril de 2000 se puso en marcha el horno pirolítico para eliminar residuos patológicos. En julio del mismo año se habilitó los servicios de obstetricia , neonatología cerrada y 112 camas de internación de tocoginecología. Entrega del hospital El 30 de octubre de 2000 el Ministerio de Salud de la Nación envió a la Provincia del Chaco la Nota N° 986 a través de la cual hacía conocer a nuestro gobierno que debía instrumentarse inmediatamente la transferencia del Hospital Perrando-Castelán, para lo cual envió el Acta que debía suscribir el ex Ministro del área Dr. Jorge Humberto Romero, con un detalle del inventario del equipamiento médico y mobiliario .En la nota se comunicaba al gobierno de nuestra provincia que a partir del 1° de noviembre de 2000 correspondía al Chaco solventar la totalidad de los gastos que en concepto de seguros y 4 vigilancia generaba el equipamiento; también se informó que en junio del mismo año se había producido el vencimiento del período de garantía técnica que aseguraba el correcto funcionamiento del equipamiento y que para prorrogar la cobertura hasta el mes de setiembre del 2001 debía abonarse una suma aproximada de $ 580.000. Concluía la nota nacional señalando la urgencia en la toma de decisiones por parte de nuestra provincia en materia de transferencia del Hospital; para rematar, comunicaba que si antes del día 7 de noviembre del año 2000 no se firmaba el Acta de transferencia los pagos de las obligaciones pendientes quedarían a cargo exclusivo de la Provincia del Chaco. El texto del Acta de recepción nunca fue suscripta por el Ministro de Salud. La negativa del gobernador Rozas En respuesta al contenido de la Nota 986 el ex Ministro de salud Publica del Chaco Dr. Jorge Humberto Romero envió a la Directora Ejecutiva de la UJC del Ministerio de Salud de la Nación una comunicación que fuera fechada el 27 de noviembre de 2000; ante la circunstancia concreta de que debía recepcionarse el Hospital, el Ministro informó que «es decisión del Sr. Gobernador de la provincia no recibir, por ahora la Obra Civil y el Equipamiento del Nuevo Hospital Perrando-Castelán hasta tanto no podamos tener algún grado de certeza sobre los fondos». En esta oportunidad es cuando por primera vez se personalizó en la figura del Gobernador la responsabilidad de haber tomado la decisión política de no abrir el nuevo hospital pese a que se encontraba en condiciones de ser habilitado, tanto en sus instalaciones como en equipamiento y mobiliario, con el personal entrenado para operar y manejar la aparatología médica, frente a una realidad de demanda creciente de la asistencia de enfermos en el sistema de salud pública y la situación de pre-colapso que ya atravesaba el viejo hospital Perrando, que presentaba un fuerte déficit asistencial y operativo, con sus instalaciones muy deterioradas. Recepción del Nuevo Hospital Perrando-Castelán El 22 de noviembre de 2001 el Ministro de Salud de la Provincia del Chaco suscribió el Acta de entrega-recepción de las instalaciones y equipos correspondientes al Hospital Julio C. Perrando. En el Acta se asentó expresamente que la Nación entregaba a la provincia del Chaco las instalaciones, equipamientos y mobiliarios a los fines de su uso conforme al destino para el que fuera construido el nuevo hospital Perrando-Castelán; sin embargo, desde la fecha en que se produjera la recepción, a entera conformidad del ex-Ministro de salud Dr. Jorge Humberto Romero, no se habilitó el hospital argumentando los funcionarios varios motivos para justificar lo injustificable. En cualquier caso esta breve primer reseña refleja el nivel de extrema alienación e indolencia de los funcionarios públicos involucrados con la actual situación de la salud pública en nuestra provincia y, particularmente, la odiosa, perversa e incomprensible decisión de aquéllos de mantener cerrado un hospital de la complejidad del Perrando-Castelán, pese a que se encuentra en condiciones de ponerse en funcionamiento en pocos meses aún cuando se está en un verdadero estado de abandono y desprotección, sometido a graves deterioros por falta de uso y mantenimiento. Ninguna duda tenemos que en el esquema trazado ganaron las mentiras políticas y los que especularon con la salud/enfermedad de los chaqueños; desde ahora se debiera actuar con seriedad y con verdadera sensibilidad con el objetivo de recomponer nuestro sistema de salud pública, abriéndose planificadamente las puertas del nuevo hospital en beneficio de los sectores más humildes y desprotegidos. RESISTENCIA, CHACO, REPUBLICA ARGENTINA, AÑO 2003, 22 DE OCTUBRE 5 6