PROYECTO DE LEY Artículo 1: Establécese en la Provincia de Tucumán, para las elecciones provinciales (gobernador y vicegobernador, legisladores provinciales, intendentes, concejales, delegados comunales, convencionales constituyentes) la Boleta Única de Sufragio. Artículo 2: Requisitos. A los fines de esta Ley, la Junta Electoral Provincial tendrá a su cargo confeccionar y oficializar un modelo de Boleta Única de Sufragio, que deberá ajustarse a las siguientes disposiciones: 1)La Boleta Única de Sufragio estará dividida en espacios, franjas o columnas de igual dimensión para cada partido o alianza política que hayan oficializado listas de candidatos. 2) Los espacios, franjas o columnas contendrán: a) El nombre del partido o alianza política; b) La sigla, monograma, logotipo, escudo, símbolo, emblema o distintivo que el partido o alianza política haya solicitado utilizar al momento de registrar su lista de candidatos; c) El nombre y apellido completos de los candidatos a cargos unipersonales (gobernador y vicegobernador, intendente, comisionado comunal); d) El nombre y apellido completos de los candidatos titulares y suplentes a legislador por cada sección, debiendo estar resaltados con una tipografía mayor, los primeros tres (3) candidatos titulares. Idéntica disposición regirá para la elección de Convencionales Constituyentes; e) El nombre completo y apellido de los candidatos a concejal municipal; f) Un casillero en blanco próximo a cada tramo de cargo electivo, a efecto de que el elector marque con una cruz, tilde o símbolo similar la opción electoral de su preferencia, g) Un casillero en blanco, de mayores dimensiones que el especificado en el inciso anterior, ubicado en el margen superior derecho del espacio, franja o columna de cada una de las agrupaciones políticas intervinientes, para que el elector marque con una cruz, tilde o símbolo similar la opción electoral de su preferencia por lista completa de candidatos. Cuando una Municipalidad o Comuna convoque a elecciones en forma separada a la fijada para la Provincia, la Boleta Única de Sufragio contendrá el nombre y apellido completos del candidato a intendente o delgado comunal y el de los concejales titulares y suplentes. Artículo 3.- Diseño. La Boleta Única de Sufragio debe ser confeccionada observando los siguientes requisitos en su contenido y diseño: 1) Anverso: a) El año en que la elección se lleva a cabo; b) La individualización de la sección electoral; 2) Reverso: un espacio demarcado para que inserten las firmas las autoridades de mesa y los fiscales de mesa de los partidos o alianzas políticas; 3) La impresión será en idioma español, con letra tipo “Arial”, de tamaño 8 de mínima y 12 de máxima, en papel no transparente con la indicación gráfica de sus pliegues, pudiendo resaltarse en mayor tamaño el nombre y apellido del candidato a: gobernador, primer legislador por sección, primer candidato a convencional constituyente e intendente municipal o delegado comunal, en su caso; 4) Tendrá una dimensión no inferior a los cuatrocientos veinte milímetros (420 mm) de ancho por doscientos noventa y siete milímetros (297 mm) de alto, quedando facultado el Juzgado Electoral a establecer el tamaño máximo de acuerdo con el número de partidos, alianzas o confederaciones políticas que intervengan en la elección; 5) Al doblarse en cuatro partes por los pliegues demarcados, debe pasar fácilmente por la ranura de la urna, 6) Debe estar identificada con un código de barras de manera correlativa y adherida a un talón con igual identificación y contener las exigencias previstas en el inciso 1), subincisos a), b) del presente artículo. Cuando el acto electoral deba realizarse como consecuencia de una reforma constitucional o el ejercicio de los institutos de democracia semidirecta, la Junta Electoral queda facultado para diseñar la boleta de sufragio con una dimensión menor a la prevista en el inciso 4) del presente artículo y con un tamaño de letra mayor al establecido en el inciso 3) del mismo. Artículo 4.- Diseño para no videntes. La Junta Electoral dispondrá también la confección de plantillas idénticas a las mencionadas en los artículos 2 y 3 de la presente Ley, en papel transparente y alfabeto Braille, fáciles de colocar por sobre la Boleta Única y con ranuras sobre los casilleros, para que las personas discapacitadas visuales puedan ejercer su opción electoral. Habrá ejemplares de este tipo en todos los centros de votación, para los electores que las soliciten. Artículo 5.- Sorteo. La Junta Electoral determinará el orden de precedencia de los espacios, franjas o columnas de cada Partido o alianza política que cuente con listas de candidatos oficializadas mediante un sorteo público. Todos los partidos, alianzas o confederaciones políticas formarán parte del sorteo. Si resueltas las cuestiones recursivas alguna fuerza política quedase fuera del proceso, se realizará el corrimiento respectivo, en el orden correlativo, a fin de evitar espacios en blanco. Artículo 6.- Aprobación de las boletas. Elaborado el modelo de Boleta Única de Sufragio, la Junta Electoral lo pondrá en conocimiento y consideración de los apoderados de los partidos o alianzas políticas y fijará una audiencia a los fines de receptar las observaciones que formulen las fuerzas políticas participantes, las que son resueltas previa vista al observado. No existiendo observaciones o resueltas las formuladas, aprobará el modelo propuesto y mandará a imprimir la Boleta Única de Sufragio oficializada, que será la única válida para la emisión del voto. Artículo 7.- Publicidad. La Junta Electoral publicar en el Boletín Oficial de la Provincia de Tucumán y en un diario de circulación masiva de la Provincia, los facsímiles de la Boleta Única de Sufragio con las cuales se sufragará. Artículo 8.- Impresión. La impresión de las Boletas Únicas de Sufragio, del afiche con la publicación de las listas completas de candidatos propuestos por los partidos o alianzas políticas que integran la Boleta Única de Sufragio y las actas de escrutinio y cómputo, estará a cargo exclusivo de la Junta Electoral el que adoptará las medidas de seguridad para garantizar la autenticidad de dicha documentación. Artículo 9.- Cantidad. Se imprimirán Boletas Únicas de Sufragio en una cantidad igual al número de electores correspondientes al padrón electoral, con más un diez por ciento (10%) adicional para reposición. En cada mesa electoral debe haber igual número de Boletas Únicas de Sufragio que de electores habilitados, cifra a la que se le adicionará el porcentaje establecido en el párrafo anterior para reposición. Artículo 10.- Plazo para la impresión. La Boleta Única de Sufragio debe estar impresa con una antelación no menor a los quince (15) días del acto electoral. Artículo 11.- Vigencia.La presente ley será de aplicación a partir de las elecciones provinciales a realizarse en el año 2011. Artículo 12. Incorpóranse las presentes disposiciones a la Ley Electoral Provincial, la que quedará modificada por la presente. Artículo 13. De forma.- EXPOSICIÓN DE MOTIVOS Señor Presidente: Uno de los problemas estructurales que afectan al sistema electoral vigente, con capacidad de afectar directamente la transparencia y legitimidad de todo el sistema democrático, se relaciona con la utilización de diversas boletas electorales partidarias cuya distribución se mantiene a cargo de los propios partidos políticos. Estos problemas de nuestro sistema electoral dañan sensiblemente el sistema de partidos políticos. Una democracia no puede impulsar el segundo olvidándose del primero. Ambos sistemas se encuentran íntimamente entrelazados al punto de poder afirmar que, una democracia plural, solo responde a un sistema plural de partidos políticos como consecuencia, a su vez, de un sistema electoral que los promueva y permita su desarrollo. Cabría expresar que las boletas partidarias de las cuales se nutre nuestro actual sistema electoral, constituyen un anacronismo. En este sentido, un reciente informe de la Cámara Nacional Electoral pone de manifiesto con respecto al proceso electoral del mes de octubre de 2007 que, “no puede dejar de señalarse los inconvenientes con que se enfrentaron muchos votantes, debido principalmente a nuestro sistema de múltiples boletas, es decir, una por cada uno de los partidos o alianzas intervinientes, lo que trae como consecuencia su proliferación y las dificultades que puede tener el elector en el momento de emitir su voto”. Dicho informe concluye: “Creemos que ha llegado el momento de mencionar y reflexionar sobre otro de los sistemas de votación, el de boleta única suministrada por el tribunal electoral, en la cual el votante marca la opción elegida y que, por otra parte, es el que se utiliza en nuestro país para los electores privados de libertad y para los argentinos residentes en el exterior”. 1 1 Cámara Nacional Electoral, Datos sobre el sistema de partidos, noviembre 2007, presentación. Sin resaltar en el original. Si comparamos a la Argentina con el resto de los países de América Latina, a excepción de Uruguay que mantiene un sistema similar a la “ley de lemas”, el resto de los países de la región –con diversas modalidades– han adoptado algún sistema de Boleta Única. En Bolivia está vigente una “papeleta única de sufragio” (art. 125, Código Electoral), Brasil (art. 103, Ley Nr. 4.737); Colombia donde se utiliza “una sola papeleta” para la elección de candidatos a las “corporaciones públicas” (art. 123, Código Electoral, Decreto Nr. 2.241/86), y desde la Ley 85 de 1916 se aplica el sistema de papeletas para votar; Costa Rica (art. 27, Código Electoral, Ley Nr. 1.536); Ecuador (art. 59, Ley Electoral Nr. 59); El Salvador (art. 238, Código Electoral, Decreto Nr. 417); Guatemala (art. 218, Ley electoral y de partidos políticos, Decreto-Ley Nr. 1-85); Honduras (arts. 121 y ss, Ley Electoral y de las Organizaciones Políticas, Decreto Nr. 44/04); México (arts. 252 y ss, Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales); y Nicaragua (arts. 131 y ss., Leyes Nr. 43 y 56 de 1988). En Chile la emisión del sufragio se hace mediante “cédulas electorales” (art. 22, Ley Orgánica Constitucional Nr. 18.700, sobre votaciones populares y escrutinios); en Perú se las llama “cédulas de sufragio” (art. 159, Ley Orgánica de Elecciones, Ley Nr. 26.859). En Panamá se utiliza una “boleta única de votación” (art. 247, Código Electoral); mientras que en Paraguay se denominan “boletines únicos” (art. 170, Código Electoral, Ley Nr. 834). El sistema de Boleta Única encuentra un referente en el sistema australiano el cual emplea una “papeleta oficial uniforme” en el que se imprimen las opciones electorales por cargo. Los votantes registran su elección en privado, marcando con una cruz alineada al nombre del partido o alianza. Este sistema fue adoptado por primera vez en Australia en 1856. El Estado de New York comenzó a utilizar este sistema en 1889. El sistema australiano –de amplia recepción como vemos en América Latina- baja exponencialmente los costos de impresión de boletas, impide que los partidos distribuyan papeletas influyendo en la decisión del elector o promoviendo el voto cadena, y rompe con los efectos negativos de la “sábana horizontal”. La implementación de una Boleta Única impide, además, la práctica ilegal pero habitual, en nuestro país, del robo de boletas. La impresión de los talonarios de Boletas Únicas, en el presente proyecto pasa a ser responsabilidad del Estado quien debe garantizar su distribución y existencia en cada una de las mesas electorales. Esta nueva modalidad no solo permite bajar los costos que significa la multiplicidad de boletas electorales sino que, agrega transparencia al comicio, al evitar que cada partido político participante deba custodiar y proveer sus boletas. De esta forma se espera conjurar una práctica de gran notoriedad en la última elección nacional, como fue el robo sistemático de boletas electorales. El número de Boletas Únicas impresas debe coincidir con el número de electores empadronados . Se trata de una medida de seguridad tendiente a evitar la multiplicidad de Boletas Únicas y la consiguiente distorsión en la manifestación del voto. Para los casos de robo, hurto o pérdida del talonario de Boletas Únicas se prevé la impresión de talonarios de Boletas Únicas suplementarias en un número no mayor al 5% del número de electores registrados en el padrón nacional. En el sentido, en Bolivia las “papeletas de sufragio” se imprimen “en cantidad exactamente igual al número de ciudadanos inscritos en cada mesa” (art. 133 c), Código Electoral). Algo similar ocurre en México donde los presidentes de los consejos distritales entregan a cada presidente de mesa directiva de casilla las boletas para cada elección “en número igual al de los electores que figuren en la lista nominal de electores” (art. 255 d), Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales). En Chile, por su lado, las cédulas para la emisión de los sufragios se realizan “en número igual al de los electores que deben sufragar, más un diez por ciento” (art. 55 4), Ley Orgánica Constitucional Nr. 18.700, sobre votaciones populares y escrutinios). En El Salvador la cantidad de “papeletas” se hacen “de acuerdo al total de ciudadanos que aparece en el Registro Electoral, más el uno por ciento de las mismas para reposición” (art. 240, Código Electoral, Decreto Nr. 417). Por último, el presente proyecto tiene en cuenta facilidades para el voto de los no videntes. En efecto, tomando el antecedente de la legislación chilena se prevé que se confeccionarán plantillas facsímiles de cada Boleta Única en material transparente y alfabeto Braille, que llevarán una ranura en el lugar destinado al casillero para ejercer la opción electoral, que sirva para marcar la preferencia que se desee, sobreponiendo la plantilla a la Boleta Única. El ejemplo dentro del ámbito nacional es el de la provincia de Córdoba, digno de ser tenido en cuenta porque en los comicios provinciales de 2011, Córdoba podría estrenar su nuevo sistema electoral aprobado por la Legislatura en diciembre de 2008, el que entre sus principales reformas contempla la eliminación de las boletas partidarias y su reemplazo por una boleta única con todos los candidatos de todos los partidos que participan en la elección. Es en esta papeleta donde el elector marcará con una cruz al postulante que quiere votar. Además de suprimir las boletas partidarias, el nuevo Código Electoral cordobés prohibe las sumatorias de votos, por las cuales distintos partidos postulaban a través de boletas distintas, al mismo candidato para un cargo ejecutivo; que en realidad era un sistema de lemas encubierto. Con la reforma, también quedaron prohibidas las dobles candidaturas, o sea que una persona sea candidata a más de un cargo en la misma elección: nadie podrá postularse, por ejemplo, a gobernador y encabezar la boleta legislativa. Estamos convencidos que la boleta única implica un sustancial cambio en la modalidad de votar. En lugar de que cada partido lleve su boleta al cuarto oscuro, se propone que se imprima una sola gran papeleta con todos los candidatos para un mismo cargo de todos los partidos. El presidente de mesa la entregaría a cada votante a fin de que en el cuarto oscuro marque con una cruz el postulante de su preferencia y lo introduzca en la urna. El sistema de boleta única, aplicado en todos los países de América Latina –a excepción de Uruguay- y recientemente adoptado por la provincia de Córdoba, tiene numerosas ventajas: transparenta el sistema, fortalece la decisión ciudadana y elimina casi todas las distorsiones del sufragio, implica el fin de las listas colectoras, del acople, evita el robo de las boletas, el “voto cadena”, hace más rápido el escrutinio final , contempla la utilización del sistema braille y la facilitación gráfica de los no alfabetizados. Por eso, presentamos este proyecto y esperamos que no sólo represente un testimonio de la oposición, sino que lo podamos discutir con el oficialismo porque todos queremos que, luego del proceso electoral, la población se quede con una sensación positiva, sabiendo que su voto fue cuidado como el símbolo más importante de la democracia. Saludamos al Sr. Presidente, Dr. Ricardo A. BUSSI