mi hijo es superdotado - consulta de pediatría dr. berciano

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Puede que mi hijo sea superdotado. ¿Qué se debe hacer en
estos casos?
Diagnosticar la precocidad de un niño permite a los padres y a los profesores adaptarse a sus
particularidades para seguir su plenitud de la mejor manera. El tratamiento de un niño precoz es
una decisión pluridisciplinar.
¿Qué es la precocidad?
Un niño precoz es un niño cuyo desarrollo intelectual es más rápido que el que se observa en la media de
los niños de su edad. Es decir, que para su edad está adelantado a nivel intelectual. Su inteligencia
presenta particularidades en el proceso de comprensión y aprendizaje. Hay varias maneras de llamar a
los niños precoces: niño intelectualmente precoz, niño "dotado" o "superdotado", niño de "alto potencial" o
niño de "cociente intelectual elevado".
¿Por qué hay que detectar una precocidad?
La precocidad es una particularidad del niño. Su modo de actuar y su inteligencia lo distinguen de los
niños de su entorno. Por lo tanto, tiene necesidades específicas. Detectar la precocidad permite a los
padres y a los profesores adaptarse a sus particularidades para planificar su escolaridad, sus actividades,
etc. Una precocidad no identificada lleva a menudo a problemas entre el niño y sus padres, sus
profesores y, de manera más general, su entorno (como son los amigos).
La escuela, que se adapta a las necesidades de la mayoría de los niños, no satisface siempre las de un
niño precoz. De ahí que se observe, paradójicamente, un alto índice de fracaso escolar en estos niños.
Asimismo, cabe destacar que el desarrollo precoz del niño sólo afecta a sus capacidades intelectuales.
Sigue manteniendo las capacidades físicas de su edad (motricidad, grafismo...). Este desequilibrio entre
intelecto y físico puede originar dificultades, como sufrimiento para el niño e incomprensión por parte del
entorno. Ser consciente de este problema y saber actuar en consecuencia es determinante para
garantizar el desarrollo armónico de su hijo.
¿Hay muchos niños precoces? ¿Es un fenómeno frecuente?
En la práctica, se estima que la precocidad afecta a una media de uno o dos niños por clase.
¿Cómo puedo saber si mi hijo es precoz?
Determinados signos pueden llevarle a pensar que su hijo es precoz y a consultar a un psicólogo para
que lo confirme. Con frecuencia, un niño precoz está adelantado en el aprendizaje. Es de naturaleza
particularmente curiosa. Hace muchas preguntas y no se conforma con respuestas simplistas y evasivas.
El niño precoz no se lanza normalmente en un campo sin estar seguro de dominarlo. Por ello, se observa
a menudo a niños precoces que empiezan a hablar tarde pero perfectamente. La comparación con otros
niños de su edad puede llevarle a plantearse si su hijo es precoz. El profesor, atento a la evolución en el
aprendizaje, puede sospechar la precocidad y alertarle.
¿Cómo puedo asegurarme de que mi hijo es precoz?
La precocidad se apoya en resultados de tests del cociente intelectual (QI), realizados exclusivamente por
un profesional competente. En general, se habla de precocidad a partir de un QI de 125, lo que
corresponde al 5% de la población; un QI superior a 132 corresponde al 2% de la población y, superior a
145, al 0,1% de la población. Sólo los tests de inteligencia pueden confirmar la precocidad.
¿Cuándo y quién realiza el diagnóstico?
A partir de los tres años, los psicólogos pueden realizar test al niño. Los resultados sólo son indicativos y
deben confirmarse más adelante. Los tests de QI y de personalidad debe realizarlos un psicólogo
competente que conozca las particularidades de estos niños. No todos los psicólogos realizan estos tests.
La decisión de realizar un seguimiento de su hijo por parte de un especialista debe ser meditada y
discutida. Pueden intervenir en esta decisión el pediatra, el psicólogo e incluso el médico escolar.
Consulte a su médico antes de pedir hora para su hijo.
¿Cómo se desarrollan los tests?
El examen comienza normalmente con una entrevista de media hora a una hora con los padres para
comprender el historial del niño, el desarrollo desde su nacimiento, sus relaciones con los demás, etc.
Este examen va seguido de tests individuales de nivel intelectual. El objetivo es evaluar la comprensión y
las competencias verbales, la capacidad de observación, de atención, de aprendizaje y de organización
en el tiempo y el espacio, así como la personalidad del niño. Dura aproximadamente una hora.
Tras la entrevista, se realiza un informe detallado con la puntuación de los distintos tests, que se le
facilitará o se le enviará a casa. En él dispondrá del significado de estos resultados y de consejos útiles.
Guarde bien el reconocimiento y consúltelo con frecuencia, especialmente durante las etapas importantes
del aprendizaje de su hijo.
Hay numerosas asociaciones en las que podrá encontrar información útil y práctica. Atención: algunos
centros que proponen tests de QI gratuitos no tienen validez científica alguna. Algunas instituciones
utilizan la preocupación de los padres para aprovecharse. Infórmese sobre los centros competentes y
avalados más cercanos.
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