Por enseñarnos a vivir como hermanos. Por enseñarnos a perdonar y reconstruir nuestras relaciones humanas. III Domingo de Adviento 12 Diciembre TE DAMOS GRACIAS, SEÑOR Por enseñarnos cómo amar, y darnos el ejemplo del mayor amor. Por la madre que nos diste, que nos cuida y nos acompaña siempre. Esperamos a Jesús Por tu Palabra tan clara, tan sencilla, tan llena de vida. Por invitarnos a seguirte construyendo el Reino de Dios en la tierra. Por confiar en nosotros e invitarnos a colaborar con tu misión. Por enseñarnos a vivir en comunidad. Por la madre Iglesia, que es nuestra gran familia. Por todo... GRACIAS SEÑOR. acción católica general SECTOR DE NIÑOS www.accioncatolicageneral.es ¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro? E n aquel tiempo, Juan, que había oído en la cárcel las obras del Mesías, le mandó a preguntar por medio de sus discípulos: «¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro?» Jesús les respondió: «Id a anunciar a Juan lo que estáis viendo y oyendo: los ciegos ven, y los inválidos andan; los leprosos quedan limpios, y los sordos oyen; los muertos resucitan, y a los pobres se les anuncia el Evangelio. ¡Y dichoso el que no se escandalice de mí!» Al irse ellos, Jesús se puso a hablar a la gente sobre Juan: «¿Qué salisteis a contemplar en el desierto, una caña sacudida por el viento? ¿0 qué fuisteis a ver, un hombre vestido con lujo? Los que visten con lujo habitan en los palacios. Entonces, ¿a qué salisteis?, ¿a ver a un profeta? Sí, os digo, y más que profeta; él es de quien está escrito: “Yo envío mi mensajero delante de ti, para que prepare el camino ante ti”. Os aseguro que no ha nacido de mujer uno más grande que Juan, el Bautista; aunque el más pe1 11, 2-1 queño en el reino de los cielos es más grande que él». Mateo Y también puede ser que lo que realmente estemos esperando sea... los polvorones, los langostinos, los villancicos, las compras de Navidad, los regalos de Reyes... estar de vacaciones sin ir al colegio. Si esperamos lo segundo... todo eso se acabará el día que volvamos al colegio. Pero si esperamos lo primero... nos durará para siempre... y seremos capaces “en pequeño” de hacer milagros... ayudando y queriendo a los que están cerca de nosotros. Tenemos que pensarlo muy bien... para no estar despistados como le pasaba a Juan. z C omo nos cuenta el Evangelio de hoy, Juan estaba bastante despistado... y mandó a sus discípulos a preguntar a Jesús: “¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro?” Y Jesús les dijo que lo podían comprobar ellos mismos... porque podían ver como “los ciegos ven, y los inválidos andan; los leprosos quedan limpios, y los sordos oyen; los muertos resucitan, y a los pobres se les anuncia el Evangelio”. Les enseñó que estaba haciendo milagros. Juan y sus discípulos no sabían muy bien qué es lo que estaban esperando... y lo mismo nos puede estar pasando a nosotros. Puede ser que lo que estemos esperando es que llegue el Niño Jesús, que la esperanza se haga grande en nuestro corazón, que la alegría llene nuestra casa, nuestro colegio, nuestra parroquia... que esta Navidad nos haga ser mejores personas y mejores amigos de Jesús... En las Navidades nos encontramos con familiares a los que no vemos con frecuencia... ¿A quién tienes muchas ganas de ver? ¿Por qué? z Y a Jesús... ¿le esperas está Navidad? ¿Qué haces para espe- rar a Jesús? z Para ti... ¿porque es importante la venida de Jesús?