QUÍMICA INORGÁNICA Estructura y espectroscopia atómica Ph.D. Jovanny Arlés Gómez Castaño Introducción Nuestro mundo macroscópico tiene un comportamiento determinista; o por lo menos así nos lo parece a la luz de los experimentos que los físicos han venido realizando durante siglos con los sistemas que tenían a su alcance: los astros, el planeta tierra, los péndulos, etc. Por ejemplo, un buen jugador de billar es capaz de intuir el impulso inicial que debe imprimir a la bola para lograr la carambola deseada. Un profesor de física quizá no seria tan hábil con el taco, pero es perfectamente capaz de escribir las ecuaciones que regulan su movimiento sobre la mesa de billar. En los dominios de la física clásica solo es cuestión de conocer las condiciones iniciales del sistema físico y las leyes que regulan su evolución, para poder prever su estado en cualquier instante, pasado o futuro. A esto se le denomina COMPORTAMIENTO DETERMINISTA. Introducción Sin embargo, “la relativa sencillez” del mundo físico-clásico se vio profundamente perturbada cuando se descubrieron las intrincadas interioridades del átomo y sus complejas relaciones con el mundo exterior. Introducción En el mundo de los átomos y las moléculas, los fenómenos físicos no son tan sencillos ni tan evidentes, cuando se examinan con nuestras mentes y nuestros ojos acostumbrados a la interpretación determinista del universo. Introducción El mundo macroscópico se explica razonablemente bien con las leyes de la MECANICA CLÁSICA. El mundo de los átomos necesita del concurso de la llamada MECÁNICA CUÁNTICA. Introducción El desafío consiste en averiguar si las dos interpretaciones son mutuamente excluyentes ó , por el contrario, si una de ellas es más general y contiene a la otra como un caso particular aplicable solo en determinadas circunstancias y condiciones. Introducción La mecánica clásica trabaja con una serie de hipótesis y principios fundamentales. La bien conocida ley de Newton es uno de ellos. En la mecánica cuántica existen también unos postulados fundamentales que la gobiernan y que deben conocerse para poder comprender la naturaleza de los átomos y su comportamiento. Estructura y espectroscopia atómica: evidencia de la cuantización de la energía Propiedades de la luz: longitud de onda y frecuencia La longitud de onda, (lambda), corresponde a la distancia pico-pico de una onda. En un punto fijo, la amplitud instantánea de la onda cambia a través de un ciclo completo (los cuatro puntos muestran un medio ciclo). La frecuencia (de la oscilación), (nu), corresponde al número de ciclos por segundo (1 Hz = 1s-1) que ocurren en un punto fijo dado. Estructura y espectroscopia atómica: evidencia de la cuantización de la energía Propiedades de la luz: espectro electromagnético Estructura y espectroscopia atómica: evidencia de la cuantización de la energía Utilización instrumental de las diferentes secciones del espectro Estructura y espectroscopia atómica: evidencia de la cuantización de la energía Propiedades de la luz: número de ondas c cm 1 1 c cm E h E hc Onda que vibra dos veces en un metro, por lo que tiene una longitud de onda de 0,5 m y un número de ondas de 2 m-1. Estructura y espectroscopia atómica: evidencia de la cuantización de la energía Espectroscopia y espectros E h Teoría atómica de Bohr En 1913, Niels Bohr (1885-1962) planteó un modelo atómico que explicaba los inconvenientes que presentaba el modelo atómico de Rutherford. Para esta tarea Bohr se basó en la hipótesis cuántica planteada por Planck. Con una mezcla interesante de mecánica clásica y cuántica Bohr postuló que para un átomo de hidrógeno: 1- que el electrón se mueve alrededor del núcleo describiendo órbitas circulares con un movimiento descrito por la física clásica. 2- El electrón solo tiene un conjunto de órbitas permitidas, denominadas estados estacionarios. 3- Un electrón solo puede “saltar” de una órbita permitida a otra. Teoría atómica de Bohr De acuerdo con ésta teoría, para que una órbita sea estable debe cumplirse la condición de que la fuerza centrífuga ejercida por el electrón en su movimiento deberá ser igual a las fuerzas combinadas de atracción entre el núcleo y el electrón. me 2 e2 2 r r (1) Obsérvese que la expresión solo considera la fuerza de atracción eléctrica y desprecia la fuerza gravitatoria (debido a su pequeña magnitud). La ecuación anterior también puede ser escrita de la forma 2 e me 2 r (2) Teoría atómica de Bohr El paso siguiente corresponde al cálculo de la energía de un electrón que se mueve en una de las órbitas de Bohr. Para llevar a cabo dicho cálculo debemos tener en cuenta que la energía total de un sistema corresponde a la suma de la energía cinética y la energía potencial. ET EC EP (3) donde, y 1 EC me 2 2 e2 e 2 EP 2 dr r r (4) r (5) Teoría atómica de Bohr Así la energía total será: 2 1 e ET me 2 2 r (6) Reemplazando (2) en (6) tenemos que 1 e2 e2 1 e2 ET 2 r r 2 r (7) De esta forma bastaría solo con especificar el radio de la órbita para poder calcular su energía. Note además que de acuerdo a esta expresión cualquier valor de r sería aceptable, es decir, todas las energías serían posibles. A este respecto, Bohr hizo una nueva suposición: el momento angular del sistema, igual a me r , solamente puede tener ciertos valores discretos o cuantos. Como consecuencia solo ciertas orbitas electrónicas son permitidas. De acuerdo con la teoría, la unidad cuántica de momento angular es h/2 (donde h es una constante, llamada constante de Planck). En términos matemáticos, la suposición de Bohr era Teoría atómica de Bohr h me r n 2 (8) con n = 1,2,3… (todos los números enteros hasta el ). Despejando de la ecuación obtenemos h n 2 1 m r e (9) Sustituyendo el valor de en la ecuación (2) (condición para que una órbita sea estable) tenemos que: h me n 2 2 2 1 e m r r e (10) Teoría atómica de Bohr Que reordenado obtendríamos me n2 h2 e2 2 2 2 4 me r r (11) o lo que es lo mismo n2 h2 r 2 4 me e2 (12) Si calculamos la primera orbita (n = 1) encontramos el valor del radio de Bohr (r = 0,529 Å) h2 r 2 0,52917725 A 2 4 me e (13) Teoría atómica de Bohr De este modo, se puede ahora calcular la energía asociada con cada órbita permitida, sustituyendo el valor de “r” de la ecuación 12 en la expresión de energía (7), resultando 2 2 me e4 E n2 h2 (14) 1 E RH 2 n (15) o donde 2 me e RH h2 2 4 (16) y e2 1 hartree ao (17) El espectro del átomo de hidrógeno Átomo hidrogenoide: átomo (o ión) conteniendo un solo electrón. Ejemplos: H, He+, Li2+, O7+ Átomo polielectrónico: átomo (o ión) con más de un electrón. Ejemplo: todos los átomos neutros distintos al hidrógeno El espectro del átomo de hidrógeno 1 1 RH 2 2 n1 n2 (18) RH 109677cm1 El espectro del átomo de hidrógeno La ecuación empírica de Rydberg se puede obtener directamente de la teoria de Bohr de la siguiente forma: La energía de transición (EH) de cualquier salto electrónico el átomo de hidrógeno es la diferencia de energía entre un estado inicial I y un estado final II. O sea, EH EII EI (19) o de la ecuación 14 2 2 me e4 2 2 me e4 2 2 me e4 1 1 EH 2 2 2 2 2 2 2 nII h nI h h nII nI (20) El espectro del átomo de hidrógeno Sustituyendo EH por la frecuencia luminosa equivalente de la ecuación E h (21) se obtiene 2 2 me e4 1 1 H 2 2 3 h nII nI (22) La necesidad de modificar la teoría de Bohr Ondas electrónicas: dualidad ondapartícula En 1924, el físico frances Luis de Broglie sugirío que los electrones se mueven como ondas semejantes a las ondas luminosas. Las unidades más pequeñas de luz (cuantos de luz) se llaman fotones. La ecuación de Einstein que establece la relación entre masa y energía, da la masa de un fotón 2 E mc (23) Según la ecuación (21) la energía y la frecuencia de la luz se relacionan por la ecuación E hv Combinando las ecuaciones (23 y 21), se obtiene hv m 2 c (24) Ondas electrónicas: dualidad ondapartícula El momento p de un fotón es p mv mc (25) Sustituyendo la masa de un fotón según la ecuación (24), se obtiene hv p c (26) Puesto que la frecuencia , longitud de onda , y velocidad c, están relacionadas por la expresión c (27) Ondas electrónicas: dualidad ondapartícula Se deduce h p (28) Esta ecuación da la longitud de onda de las ondas luminosas o electrónicas. Para un electrón que se mueve en una órbita circular de Bohr, debe haber un número entero de longitudes de onda para que halla una onda estacionaria, osea n 2 r (29) Sustituyendo el valor de de la ecuación (28) se obtiene, h n 2 r p (30) o h n 2 rp momento angular (31) El principio de incertidumbre de Heisenberg h px 4 h 0,66262 x 10 33 J .s Cuanto mayor sea la precisión con que se intente medir una de esta variables, es decir, cuanto menor sea la indeterminación de su medida mayor será la indeterminación en la medida simultanea de la otra variable complementaria. El principio de incertidumbre de Heisenberg Puede demostrarse que un electrón sometido a 12 eV tiene una velocidad de 2,05 x 106 m/s. suponiendo que la precisión (incertidumbre) de este valor es 1,5 porciento. ¿con qué precisión podemos medir la posición del electrón de forma simultánea con la velocidad? p mv 9,11 x 1031 kg 2,05 x 106 m / s 1,87 x 10 24 kg m s 1 p 0,015 x1,87 x 1024 kg m s 1 2,80 x 1026 kg m s 1 6,63 x 1034 kg m 2 s 1 9 x h / 4p 1,89 x 10 m 1890 pm 26 1 4 x 3,14 x 2,80 x 10 kg m s Que es aproximadamente 10 veces el diámetro atómico. Con esta medida del momento del electrón sencillamente no existe manera de fijar su posición con ninguna precisión El principio de incertidumbre de Heisenberg Una bola de billar de 200 g de masa se mueve rectilíneamente a lo largo de la mesa de billar. Si mediante fotografías es posible medir su posición con una precisión del orden de la longitud de onda de la luz utilizada ( = 5000 Å), calcular la indeterminación de la medida simultánea de su velocidad. 0,66262 x 1033 kg m2 s 1 28 1 (mv) h / 4x 1,05 x 10 kg m s 4 x 5 x 107 m (mv) 1,05 x 1028 kg m s 1 v 5, 27 x 1028 m s 1 m 0, 2 kg Se aprecia que con los ordenes de magnitud que se manejan en los sistemas macroscópicos, las restricciones cuánticas no tienen importancia práctica. La indeterminación de la medida de la velocidad de la bola de billar, a causa de la propia precisión de los instrumentos habitualmente empleados, es mucho mayor que la indeterminación de ±5,2 x 10 -28 m s-1. El principio de incertidumbre de Heisenberg Una bola de billar de 200 g de masa se mueve rectilíneamente a lo largo de la mesa de billar. Si mediante fotografías es posible medir su posición con una precisión del orden de la longitud de onda de la luz utilizada ( = 5000 Å), calcular la indeterminación de la medida simultánea de su velocidad. 0,66262 x 1033 kg m2 s 1 28 1 (mv) h / 4x 1,05 x 10 kg m s 4 x 5 x 107 m (mv) 1,05 x 1028 kg m s 1 v 5, 27 x 1028 m s 1 m 0, 2 kg Se aprecia que con los ordenes de magnitud que se manejan en los sistemas macroscópicos, las restricciones cuánticas no tienen importancia práctica. La indeterminación de la medida de la velocidad de la bola de billar, a causa de la propia precisión de los instrumentos habitualmente empleados, es mucho mayor que la indeterminación de ±5,2 x 10 -28 m s-1. La ecuación de Schrödinger En 1926, el físico austriaco Erwin Schrödinger estableció la ecuación que relaciona la energía de un sistema con el movimiento ondulatorio. H E H = el operador Hamiltoniano E = energía del electrón = la función de onda Las funciones de onda que son soluciones de la ecuación de Schrödinger se llaman funciones propias; las energías E que resultan de sus soluciones se llaman valores propios. El operador Hamiltoniano incluye derivadas que operan sobre la función de onda. Cuando se ejecuta el Hamiltoniano sobre la función de ondas se obtienen valores constantes (Energía) que son múltiplos de la misma función de onda. La ecuación de Schrödinger El operador Hamiltoniano 2 2 2 2 h Ze H 2 2 2 2 8 m x y z 4 0 x 2 y 2 z 2 La ecuación de Schrödinger El operador Hamiltoniano 2 2 2 2 h Ze H 2 2 2 2 8 m x y z 4 0 x 2 y 2 z 2 Esta parte del operador describe la energía cinética del electrón Esta parte del operador describe la energía potencial del electrón, el resultado de la atracción electrostática entre el electrón y el núcleo. Es comunmente designada como V. La ecuación de Schrödinger Debido que cada función de onda, , corresponde con un orbital atómico, no hay límite hay límite en el número de soluciones de la ecuación de Schrödinger para un átomo. Cada describe las propiedades de onda de un electrón determinado en un orbital particular. La probabilidad de encontrar un electrón en un punto del espacio es proporcional a 2. Un número de condiciones son requeridas para una solución físicamente realista de . La ecuación de Schrödinger La función de onda debe corresponder a No pueden existir dos probabilidades para un solo valor un electrón en alguna posición del espacio La función de onda y su primera derivada La probabilidad debe ser definida en todas deben ser continuas. las posiciones en el espació y no puede cambiar abruptamente de un punto al siguiente. La función de onda debe aproximarse a Para distancias grandes del núcleo, la cero cuando r se aproxima al infinito. probabilidad debe ser cada vez más pequeña A d 1 * A todo el espacio todo el espacio A *B d 0 La probabilidad total de un electrón de estar en algún punto del espacio = 1. Esto es lo que se denomina Normalización de la función de onda. Todos los orbitales en una átomo deben ser ortogonales a los otros. En algunos casos, esto significa que los orbitales deben ser perpendiculares, como en el caso de los orbitales px, pz y py. La ecuación de Schrödinger Formulación cuántica de los átomos hidrogenoides En el sistema internacional de medidas, la fuerza de atracción entre dos cargas q+ y q-, situadas a una distancia r una de la otra, se expresa como: 1 q q F 2 4 0 r donde 40 es una constante universal denominada permitividad del vacío cuyo valor es: 1,11264 x 10-10 C2N-1m-2. La ecuación de Schrödinger Formulación cuántica de los átomos hidrogenoides En el caso de un átomo hidrogenoide: se supone al núcleo fijo y localizado en el origen de un sistema de coordenadas de referencia con una carga +Ze. El electrón, con una carga –e y situado a una distancia r del núcleo, está sometido a la atracción culómbica de éste. La energía potencial del electrón debida a la interacción con el núcleo es de la forma: 1 Ze V 4 0 r 2 La ecuación de Schrödinger Formulación cuántica de los átomos hidrogenoides Cuando éste operador es aplicado a una función de onda, 2 2 h 2 2 2 2 2 V x, y , z ( x , y , z ) E ( x , y , z ) y z 8 m x donde Ze Ze V 4 0 r 4 0 x 2 y 2 z 2 2 2 La ecuación de Schrödinger Formulación cuántica de los átomos hidrogenoides Con lo que reordenando se obtiene que 2 2 2 2 h Ze E 2 2 2 2 8 m x y z 4 0 La ecuación de Schrödinger Formulación cuántica de los átomos hidrogenoides Puesto que el campo de fuerzas culombicas entre el núcleo y el electrón es de simetría esférica (solo depende de la distancia r), resulta muy conveniente hacer un cambio de coordenadas cartesianas a esféricas. x r sen cos y r sen sen z r cos La ecuación de Schrödinger Formulación cuántica de los átomos hidrogenoides En coordenadas esféricas, la ecuación de Schrödinger se escribe de la siguiente forma: h 1 2 1 2 Ze2 sen E sen r 2 2 2 8 m r sen r r sen 4 0 r Con esta formulación se puede demostrar que las funciones de onda, soluciones de la ecuación de Schrödinger, se puede escribir de la manera siguiente: R r Y , La ecuación de Schrödinger Formulación cuántica de los átomos hidrogenoides Es decir, las funciones de onda se componen del producto de dos funciones de onda más simples R r Y , Parte radial de la función de onda. Solo depende de la coordenada radial r Parte angular de la función de onda. Solo depende de las coordenadas angulares y La ecuación de Schrödinger La parte radial de la función de onda El valor de IRnl(r)I2 da la probabilidad de encontrar al electrón a cualquier distancia r del núcleo a través de la función de probabilidad radial 4r2R2., con el factor 4r2 como resultado de integrar sobre todos los ángulos. Los dos números cuánticos n y l están asociados con la parte radial de la función de onda: n se llama número cuántico principal y define el radio medio para el movimiento del electrón; nlml , solo puede ser una función propia para los números enteros n = 1 ,2, 3 … El momento angular del electrón queda determinado por el número cuántico l; nlml ., solo puede ser una función propia para l = 0, 1, 2, 3, … hasta n - 1. La ecuación de Schrödinger La parte angular de la función de onda Las funciones angulares y determinan como la probabilidad cambia de punto a punto a una distancia dada del centro del átomo; en otras palabras, ellas dan la forma de los orbitales y la orientación de ellos en el espacio. Los números cuánticos l y ml están asociados con la parte angular de la función de onda. Ml se llama número cuántico magnético y define los valores posibles que puede tomar la componente del momento angular del electrón bajo un campo magnético. nlml ., solo puede ser una función propia para ml = + l, l - 1, l - 2, …, hasta –l. La ecuación de Schrödinger Superficies nodales Un nodo es una superficie donde la función de onda es cero cuando ella cambia de signo (con a r = a0, en el orbital 2s); esto requiere que = 0, y la probabilidad de encontrar al electrón en ese punto es también igual a cero. La ecuación de Schrödinger Superficies nodales Los nodos angulares resultan cuando Y(, ) = 0 y su representación gráfica corresponde a planos o conos. Los nodos angulares pueden ser determinados en términos de y , pero pueden ser más facilmente visualizados si Y se expresa en coordenadas cartesianas (x, y, z). Los nodos radiales, o nodos esféricos, resultan cuando R(r) = 0 y le dán al átomo una apariencia de capas. Estos nodos ocurren cuando la función radial cambia de signo; se representan en las gráficas de función radial por R(r) = 0 y en los gráficos de probabilidad radial por 4r2R2 = 0. Los orbitales 1s, 2s, y 3d (los orbitales de menor energía de cada forma) no tienen nodos radiales y el número de nodos se incrementa a medida que n se incrementa. El número de nodos radiales para un orbital determinado es siempre igual a n – l – 1. Átomos polielectrónicos El formulismo matemático necesario para tratar un átomo polielectrónico es muy complejo en comparación con el utilizado para los átomos hidrogenoides. En un átomo con un solo electrón, en el que se considera al núcleo fijo en el origen de coordenadas, la ecuación de Schrödinger depende de las tres coordenadas, cartesianas o esféricas, del electrón. En un átomo polielectrónico de N electrones, la correspondiente ecuación de Schrödinger contiene 3N coordenadas, tres por cada uno de los electrones presentes en el átomo. La ecuación de Schrödinger de un átomo polielectrónico debe tener en cuenta la atracción coulombica del núcleo hacia todos y cada uno de los electrones, así como las repulsiones de cada uno de los electrones hacia todos los restantes. La complejidad de un sistema de esta naturaleza hace inviable la solución analítica de las ecuaciones de Schrödinger correspondientes a estos átomos. No puede resolverse analíticamente la ecuación de Schrödinger ni siquiera para el átomo de helio. Átomos polielectrónicos Aunque los orbitales para un átomo polielectrónico nos son exactamente iguales que los orbitales del hidrógeno, es de suponer que el número de orbitales y sus dependencias angulares serán iguales. De esta manera, los orbitales del hidrógeno se utilizan para describir la estructura electrónica de un átomo con más de un electrón. El procedimiento consiste simplemente en asignar a cada electrón de un átomo, una serie de cuatro números cuánticos n, l, ml y ms teniendo presente que no puede haber dos electrones que tengan los cuatro números cuánticos iguales. Esta es la expresión del principio de exclusión de Pauli. Con este procedimiento, lo que se hace realmente es llenar los orbitales del hidrógeno con el número adecuado de electrones del átomo que se considera (principio de aufbau o de construcción). Átomos polielectrónicos En cada orbital se puede poner un electrón. Puesto que un electrón puede tener ms igual a +1/2 o -1/2, se pueden tener dos electrones con los mismos números cuánticos orbitales. El número total de electrones que se pueden acomodar depende del tipo de orbital. Tipo de orbital Números cuánticos orbitales Número total de orbitales Número total de electrones s l = 0; mI = 0 1 2 p l = 1; mI = 1, 0, -1 3 6 d l = 2; mI = 2, 1, 0, -1, -2 5 10 f l = 3; mI = 3, 2, 1, 0, -1, -2, -3 7 12 La ecuación de Schrödinger Regla de Hund de máxima multiplicidad Esta regla expresa que los electrones deben ser ubicados en los orbitales de tal forma que originen el máximo espín total (s) posible (o el máximo número de espines paralelos). Debido a al repulsión electrónica, dos electrones en el mismo orbital tienen una energía mayor que dos electrones en diferentes orbitales. Ejemplo: cuando hay de 1 a 6 electrones en los orbitales p: Átomos polielectrónicos Regla de Hund de máxima multiplicidad Esta regla es una consecuencia de la energía requerida para aparear los electrones en el mismo orbital. Cuando dos electrones ocupan la misma parte de la forma alrededor del átomo, hechos se repelen uno al otro, debido a sus mutuas cargas negativas, con una energía de repulsión culómbica, c, por par de electrones. Como resultado, esta fuerza repulsiva favorece a los electrones en diferentes orbitales (diferentes regiones del espacio) sobre electrones ubicados en el mismo orbital. Adicionalmente existe una energía de intercambio, e, la cual probienen de consideraciones netamente mecanico-cuánticas. Esta energía depende del número de posibles intercambios entre dos electrones con la misma energía y el mismo espín. Átomos polielectrónicos Regla de Hund de máxima multiplicidad Por ejemplo: la configuración electrónica del carbono es 1s22s22p2. Las tres posibilidades que surgen de esta configuración son: Átomos polielectrónicos Regla de Hund de máxima multiplicidad Por ejemplo: la configuración electrónica del carbono es 1s22s22p2. Las tres posibilidades que surgen de esta configuración son: En el primer arreglo involucra a c, debido a que es el único que aparea a los dos electrones en el mismo orbital Átomos polielectrónicos Regla de Hund de máxima multiplicidad Por ejemplo: la configuración electrónica del carbono es 1s22s22p2. Las tres posibilidades que surgen de esta configuración son: En el primer arreglo involucra a c, debido a que es el único que aparea a los dos electrones en el mismo orbital La energía de este arreglo electrónico es más alta que la de los otros dos arreglos por c, como resultado de la repulsión e- - e-. Átomos polielectrónicos Regla de Hund de máxima multiplicidad Por ejemplo: la configuración electrónica del carbono es 1s22s22p2. Las tres posibilidades que surgen de esta configuración son: En los primeros dos arreglos existe solo una forma de organizar a los electrones para obtener el mismo diagrama, debido a que hay un solo electrón que posee un espín + y otro espín -. Átomos polielectrónicos Regla de Hund de máxima multiplicidad Por ejemplo: la configuración electrónica del carbono es 1s22s22p2. Las tres posibilidades que surgen de esta configuración son: En tercer arreglo existen dos posibles maneras en las cuales los electrones pueden ser acomodados. Átomos polielectrónicos Regla de Hund de máxima multiplicidad Por ejemplo: la configuración electrónica del carbono es 1s22s22p2. Las tres posibilidades que surgen de esta configuración son: En tercer arreglo existen dos posibles maneras en las cuales los electrones pueden ser acomodados. Entre mayor sea el número de posibles intercambios menor será la energía. Átomos polielectrónicos Regla de Hund de máxima multiplicidad Energía total de apareamiento tot = c + e Átomos polielectrónicos Apantallamiento Cada electrón actúa como un escudo para los electrones más lejanos al núcleo, reduciendo así la fuerza de atracción entre el núcleo y los electrones distantes. A medida que el número atómico crece, los electrones son atraídos hacia el núcleo con mayor fuerza y las energías de los orbitales se vuelven más negativas; sin embargo estos cambios en energía son irregulares debido al apantallamiento de los electrones más externos por los electrones internos. Como resultado el orden energético creciente de los orbitales a medida que aumenta el número cuántico n se conserva solo para números atómicos bajos y para los electrones más internos de un átomo. Para los orbitales más externos, el incremento en la diferencia energética entre niveles con el mismo número n pero con diferente número l forja al solapamiento de niveles de energía con n = 3 y n = 4, y como consecuencia el orbital 4s se llena antes que el orbital 3d. Igualmente ocurre con el orbital 5s que se encuentra antes que el 4d, el 6s que está antes que 5d, el 4f antes de 5d, y el orbital 5f antes que 6d. Átomos polielectrónicos Apantallamiento Átomos polielectrónicos Apantallamiento J. C. Slater formuló un conjunto de reglas simples que sirven como una guía inicial para evaluar el efecto pantalla del resto de los electrones hacia un electrón determinado, en un átomo polielectrónico. El definió la carga nuclear efectiva Z* como una medida de la atracción nuclear para un electrón. Z* puede ser calculada a través de la expresión Z* = Z – S, donde Z en la carga nuclear y S es una constante de apantallamiento. Átomos polielectrónicos Apantallamiento Algunas de las reglas de slater de apantallamiento: Para electrones de valencia ns o np a) Electrones en los mismos grupos ns, np contribuyen con 0,35, excepto el 1s, donde el valor 0.3 es mejor. b) Electrones in los grupos n-1 contribuyen con 0,85. c) Electrones en el grupo n-2 o inferiores contribuyen con 1,00. Para electrones de valencia nf a) Los electrones en el mismo grupo nd o nf contribuyen con 0,35. b) Electrones en grupos inferiores contribuyen con 1,00. Átomos polielectrónicos Apantallamiento Cargas nucleares efectivas para los primeros seis números atómicos n 1 2 2 1 H 1 2 He 1,69 3 Li 2,69 1,28 4 Be 3,28 1,91 5 B 4,68 2,58 2,42 6 C 5,67 3,22 3,14 Z Átomos polielectrónicos Potenciales de ionización y electroafinidades El potencial de ionización (I) de un átomo, es la mínima energía necesaria para arracar totalmente un electrón del átomo. Este proceso se puede escribir como: atomo I (energia) ion monopositivo + eLa electroafinidad (EA) de un átomo es la energía desprendida (o necesaria, si el átomo tiene EA negativa) cuando se añade un electrón a un átomo para formar un ión negativo: atomo e- ion mononegativo + EA(energia) Lecturas recomendadas • Atkins P. Química Física. Octava edición. Pags. 243 – 359. • Shriver and Atkins. Química inorgánica. Cuarta edición. Pags. 10 – 23. • Housecroft C. E. y Sharpe A. G. Química Inorgánica. Segunda edición. Pags. 3-17. • Huheey James E. Química Inorgánica. Principios de estructrua y reactividad. Cuarta edición. Pags. 10-21. • Miessler Gary L. Inorganic Chemistry. Tercera edición. Pags. 15-50.