DEPÓSITOS NEUMATOLÍTICOS También en este caso el agua, junto a otros volátiles especialmente halógenos, es el principal constituyente de las soluciones neumatolíticas. El equilibrio existente en la etapa pegmatítica se desplaza de forma que los feldespatos y los silicatos aluminosos alcalinos y calcialcalinos dejan de ser estables y en su lugar se forman silicatos que incorporan halógenos en su red. Si la concentración de halógeno es muy reducida, el periodo pegmatítico puede pasar directamente, sin periodo neumatolítico, al periodo hidotermal. Durante la etapa neumatolítica se forman depósitos de estaño, wólfram y molibdeno, elementos que pueden formar minerales también en la fase hidrotermal. Depósitos de “greisen” y albititas. Los “greisens” son agregados granobasálticos de cuarzo y moscovita con cantidades accesorias de topacio, turmalina y fluorina, formados por alteración metasomática. Se desarrollan, generalmente, en las cúpulas graníticas, a veces con “stokwork”, y constituyen la roca de caja de importantes criaderos de Sn-W. Normalmente, comienza con una fase de óxidos(casiterita, wolframita) seguida por sulfuros(pirita, calcopirita, pirrotina, arsenopirita, molibdenita, bismutina) y una de más baja temperatura de óxidos-carbonatos(calcita, siderita, óxidos de Fe). 1 Depósitos metasomáticos de contacto. En rocas de carbonatos, por la acción de soluciones hipercríticas se forman los depósitos metasomáticos. Pueden originarse criaderos de todo tipo de metales, excepto de Cr, Sb, y Hg, así como minerales de interés industrial, como wollastonita, talco, magnesita, etc... En el contacto con el intrusivo granítico, se originan silicatos alumínico-cálcicos, granate, anfíboles, vesubiana, wollastonita, etc; rocas que reciben la denominación de “skarns”. Pueden existir de casiterita, tungsteno y óxidos de Fe. En una primera etapa, de poca importancia económica, se produce un metamorfismo de contacto sin participación de soluciones magmáticas, formándose minerales de interés industrial. A continuación, a temperaturas de 750-600ºC, se desarrolla el skarn de alta temperatura, con formación de silicatos cálcicos y magnésicos. En coincidencia con la ebullición del líquido residual hacia los 450-300ºC, se forman skarns de baja temperatura, donde los minerales formados son reemplazados por silicatos hidratados, feldespatos y carbonatos, con precipitación de sulfuros así como la mayor parte de la magnetita en los skarns ferríferos. La extensión y la intensidad o desarrollo del skarn depende de la profundidad y de la permeabilidad y fracturación de las formaciones encajantes. Skarns de Fe. Relacionados con rocas de tipo intermedio o básico. Se desarrollan sobre formaciones calcáreas arrecifales e incluso sobre vulcanitas ricas en calcio. En el se caracterizan una 2 fase silicatada con formación de silicatos cálcicos, una fase oxidante con magnetita y hematites y una fase sulfurada con sulfuros de Fe y Cu, a veces acompañados de Au. Skarns de W. Relacionados con rocas dioríticas. En él la scheelita es el mineral predominante, acompañada por magnetita, pirrotina, pirita, molibdenita, calcopirita, blenda, bismutina, etc. Skarns de Cu. Asociados a plutones de amplia y variada composición, con calcopirita y bornita como minerales principales, y pirita, pirrotina, esfalerita, molibdenita y óxidos de Fe como acompañantes. Skarns de Pb-Zn. Asociados espacialmente a intrusiones menores e incluso a manifestaciones extrusivas. Es frecuente la asociación con skarns con minerales ricos en Fe, Mn, Zn, Na y K, en tanto que con skarns magnésicos y alumínicos suelen ser estériles. Skarns de Sn-W. Se desarrollan en relación con magmas bien diferenciados, generados en la culminación del proceso orogénico. Skarns de Au. Todos los depósitos de skarns contienen algo de Au que es beneficiado como subproducto. La mayoría contienen pequeñas cantidades de Cu-Pb-Zn, y es característico su alto contenido en arsénico, bismuto y teluro, elementos que no suelen abundar en los otros tipos de skarns. 3 Bibliografía: “Geología Económica de los Recursos Minerales”. Fernando Vázquez Guzmán. Fundación Gómez Pardo. Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Minas de Madrid. “Yacimientos Minerales de Rendimiento Económico”. Bateman, A.M.. Edit. Omega. 4