FRANKENS TEIN

Anuncio
FRANKENS
TEIN
Ψ
INTRODUCCION
‘’Frankenstein ‘’ es un libro que en su mayor parte es narrada por el
creador del monstruo, otra parte por el mismo monstruo, y el final por
alguien ajeno.
El creador narra su vida, sus vivencias sus amores, sus odios, etc.; su
creatura maneja algo similar, solo que no experimenta él el amor ni
felicidad, solo los veía, él amaba y quería ser amado, pero por su
deformidad y repugnancia le eran negados, por lo que solo le quedo
sentir odio; el otro narrador solo cuenta con forme le dicen o ve.
La creatura buscaba la felicidad, aun que le era negada, por venganza
contra su propio creador le hizo la vida miserable, por ser el culpable de
su deformidad y repugnancia.
Es una tragedia que recomiendo a quien le gustan las historias que
pasan de paz, armonía y felicidad a un total contraste sombrío, lúgubre,
de odio y melancolía, y viceversa, aun que es mucho mas común y
mencionado el primero.
Ψ
DESARROLLO
Nací en una familia respetada de Ginebra; mi padre fue un servidor publico, su mejor amigo fue
un comerciante de apellido Beaufort , era orgulloso nada conformista. Cuando se hundió en la
quiebra se mudo a Lucerna junto con su hija. Cuando mi padre los localizo fue a su domicilio.
Después de unos meses que Beaufort busco trabajo tuvo una enfermedad que lo obligo a
guardar reposo, en el cual su hija, Caroline Beaufort lo atendió. Al decimo mes murió en sus
brazos dejándola huérfana. Así la hayo mi padre, la llevo a Ginebra y la encargo. Dos años
después se convertiría en su esposa. Pasados dos años nací yo en Nápoles. Mi madre visitaba
casas de indigentes, en una visita encontró una niña rubia mientras mi padre estaba en Milán,
a su regreso mi padre me hallo jugando con esa niña en la casa, mi madre convenció a sus
padres que la dejasen a su cuidado, y así fue como Elizabeth Lavenza se convirtió en mi
hermana, a la que consideraba como mía.
Nos criamos juntos. Yo tenía una sed de conocimiento y ella un amor a la poesía, y así vivimos
en armonía. Nos establecimos en Ginebra al nacer mi hermano siete años menor que yo. Yo
concentraba mi cariño entre unos pocos, entre esos a Henry Clerval. A mis trece años fuimos a
Thonon, donde halle obras de Cornelio Agrippa, después me interese por Paracelso y Alberto
Magno, lo que hizo buscar el cáliz de la vida y la piedra filosofal, me interesaba crear una total
inmortalidad del hombre, pero por decepciones me dedique a las matemáticas y sus ramas de
investigación.
A mis 17 años me fui a estudiar a la universidad de Ingolstadt. Antes de mi partida, Elizabeth se
contagio de escarlatina, se le pidió a mi madre que se alejara, pero desobedeció, cuando
Elizabeth se curo mi madre enfermo y falleció. Un día antes de mi partida, Clerval nos
acompaño, el deseaba ir con migo, pero su padre no se lo concedió. En la universidad conocí
al Sr. Kempre quien se mofo de mí al oír las bases de mis alquimistas. Sentía un desprecio por
la moderna filosofía natural, era muy diferente a la búsqueda de inmortalidad y poder. Una
ocasión que no tenía que hacer entre a una conferencia del Sr. Waldman, el cual me inspiro
una ambición de hacer algo y revelar los misterios de la creación. Cuando fui a la casa de tal
señor, me inspiro para estudiar todas las ramas de la filosofía natural, apoyándome en que mis
alquimistas trabajaron con las herramientas de su época.
Desde aquel dia las ciencias naturales y principalmente la química fueron mi única ocupación.
De ahí me cautivo el funcionamiento del ser humano y de todo ser viviente y la pregunta de
donde surgió la vida, por lo que estudie el cuerpo luego de la muerte, por lo que pasaba días en
camposantos y osarios. Después descubrí de donde surgía la vida y fui capaz de darla; me
determine a crear un ser de gigantes dimensiones, por lo que profane tumbas e hice cosas
repugnantes con animales vivos, descuide a mis seres queridos y era insensible a los
espectáculos naturales que me causaban placer.
Una noche concluí mi tarea, lo trate de crear con cierta belleza, pero era algo repugnante, hui
de el con miedo. A mi regreso me encontré con Clerval, que llego para estudiar. Verlo me puso
feliz, pero temía volver a verlo, o que Clerval lo viera, por lo que caí en una crisis nerviosa,
después una fiebre en la que Clerval cuido de mi y lo oculto a mi padre y Elizabeth. Paso el
tiempo y me recupere, después sentí amor por la vida otra vez. Después Clerval me dio una
carta de Elizabeth.
La carta mencionaba el deseo de Elizabeth por que le contestara sus cartas y aun mas por
verme, me recordó la unión de Justine Moritz a nuestra familia, como estaban mis hermanos y
mi padre. En cuanto salí lo primero que hice fue presentar a Clerval con mis profesores, lo que
me angustiaba por hacerme recordar los sucesos pasados. Pensé volver a Ginebra, pe rose
prolongo, Clerval y yo dimos un paseo por la ciudad, donde me goze mucho uniéndome a los
campesinos.
Al regreso encontré una carta de mi padre en la que me daba la mala noticia de la muerte de
William, me dijo que lo hallo asfixiado con las huellas de los dedos del asesino, y que Elizabeth
se sentía culpable. Clerval y yo regresamos a Ginebra al regreso vi ala lejanía la silueta del ser
repugnante que cree, me aterraba la idea de que yo haiga creado al asesino de William. Al
llegar a casa me dieron la noticia de que inculparon a Justine Moritz del crimen, de la que toda
la familia sabíamos era inocente.
Para desgracia de Justine, todas las pruebas apuntaban a que ella era culpable, después de oír
pruebas en contra se defendió, y Elizabeth la apoyo. A la mañana siguiente acudí al tribunal,
después el juez afirmo que Justine acepto la culpa. Justine hablo con mi prima y la acompañe.
Justine lo reconoció por que fue torturada, amenazada con la excomulgación y al infierno, al día
siguiente la ejecutaron. Así fue como sucedió a las primeras victimas de mi creación.
Tenia la certeza de que mucho mas estaba por venir, toda alegría y júbilo me martirizaba, solo
la soledad me consolaba. Solo la sed de venganza y temor por mis seres queridos me
obligaban a vivir. Durante una depresión me fui al valle, que me traía un placer mientras me
adentraba.
Al dia siguiente recorri el valle, aquel paisaje ahuyentaba las obsesiones que me dominaban.
Decidi subir hasta la cima, y lo logre casi al medio día le pedí a los espíritus me dieran felicidad
o que me llevaran con ellos, cuando vi la figura de un hombre a lo lejos que subia sin cuidado
donde yo batalle, al estar mas cerca divise al demonio, al que maldije e injurie. El me pidió
cumpliera mi deber como creador, también que le escuchara su historia, a la que me rehusaba
el ser desia ser bueno pero que el mundo lo trataba mal. Y al llegar a su escondite comenzó a
narrar su historia.
‘’fui un ser que solo sentía la necesidad del hambre, sed y abrigo; aprendí que el arroyo daba
agua, vallas alimento, arboles el refugio del sol y fuego calor, aunque podía quemar y preparar
mejor mis alimentos. Llegue a un pueblo donde fui apedreado, entonces hui y llegue a un
cobertizo que arregle para no ser visto, vi que tenia por vecinos a una joven hermosa que
mostraba cierto desanimo, un joven con un desanimo mayor, y un anciano que tocaba un
instrumento agradable. El anciano me inspiro respeto, y la joven despertó en mí el amor.
Siempre observaba a mis vecinos.
Deseaba unirme a ellos, pero no me atrevía al recordar a los feroces pueblerinos, solo trate de
descubrir la razón de sus acciones. Cuando lloraban se alejaban del anciano y eso me
entristecía, pero luego se miraban afectuosamente y me desconcertaba. Hice cosas sin la
intención de perjudicarles, y decidí ayudarles sin que me vieran en la noche, cosa que les
sorprendía. Aprendí que con palabras se expresaban experiencias y provocaban sentimientos y
otras cosas. Aprendí sus nombres la joven era hermana o Ágata, el joven Félix, hermano o hijo.
El anciano solo era padre. Descubrí que en el papel había signos en que se podían pronunciar
palabras, eso me inspiro a aprender el arte del lenguaje.
Un día que parecía normal alguien llamo a la puerta, una mujer cubierta con vestido negro, era
una hermosa árabe, Félix al verla se lleno de felicidad, aun que no se entendían nada, le llamo
Safie. Ella trataba de entender su lengua y yo lo aproveche. Félix le explicaba un libro y me dio
una idea del mundo contemporáneo. Me tomo mucho tiempo entender de gobiernos, leyes y
atrocidades, pero cuando conocí el vicio y el crimen solo sentí vergüenza y repugnancia;
comprendí lo de las clases sociales, lo que me hizo reflexionar sobre mi miserable existencia,
también desee enormemente formar parte de la comunión de mis vecinos.
El nombre del anciano era De Lacey, y antes vivían en Francia, pero por traición del padre de
Safie hacia Félix fueron desterrados, por lo que se fueron a Alemania, donde los encontré.
Su historia me conmovió y animo. En un recorrido nocturno encontré prendas y libros que lleve
a mi cobertizo los leí, y me inspiraron un profundo éxtasis. Después recordé los papeles de mi
bolsillo que era su diario de los cuatro meses anteriores a mi creación. Me sentía solo, pensé
que mis vecinos me aceptarían sin importar mi deformidad y repugnancia, deseaba ser
conocido y amado por ellos, era mi máxima ambición. planee como llegar, lo intente hablando
con De Lacey primero, pero llegaron las jóvenes y al verme huyeron y Félix se lanzo contra mi,
mi corazón se lleno de amargura y hui sin ser visto.
Desde el momento de gran ira y dolor le declare la guerra a la humanidad, especialmente a mi
creador, la naturaleza me calmo, pero al recordar el rechazo enfurecí, usted mi creador vino a
mi mente, y en lecciones de geografía aprendí a ubicar países, para llegar a Ginebra donde
dicen sus papeles es su ciudad natal, tuve un duro camino que hice por las noches para no ser
visto. Una ocasión que lo hice por el día, vi una niña que cayo al rio, la salve con mucho
esfuerzo, se desmayo y al llegar un campesino me la quito de los brazos y huyo al bosque corrí
tras el y me tiro con una escopeta, esa fue mi gratificación por salvar una vida, por lo que se
encendió mas mi ira. Cogí un niño para tratar de hacerlo mi compañero, pero me dijo ser hijo
de Frankenstein, por lo que lo mate, tome un objeto que traía fui a un granero donde halle a
una muchacha y le deje el objeto para que fuese inculpada. Usted debe crearme una mujer tan
horrenda como yo para que me ame. ’’
A lo que me negué, pues no quería otro ser tan perverso y diabólico como el. El dijo ser así por
que el mundo así lo trato; por un momento me compadecí de el, pues sí era mi deber hacerlo
feliz. Después me prometió que se irían el y su pareja a los confines de la tierra deshabitados
por el hombre, después de una larga discusión acepte, pues juro que ningún hombre lo volvería
a ver. Al regresar a casa sentí como si no tuviera derecho a disfrutar el cariño de mi familia, lo
que me hizo sentir como vivir en una pesadilla.
En cierto modo me dio un alivio, por lo que mi padre estaba feliz. Pero tenia miedo de que no
me quisiera unir con Elizabeth, a lo que dije que era mi plan de vida, me pregunto si tenia
alguna objeción a unirme lo antes posible, a lo que le dije que quería ir a Inglaterra, a lo que mi
padre accedió, y arreglo que Clerval fuese mi acompañante.
Clerval fue a visitar lugares y yo por mi información. Hubiera disfrutado mi estancia ahí como
Clerval si no tuviera tan repugnante trabajo. Me martirizaba pensar si el demonio se vengara
por mi retraso, así que le dije a Henry que se divirtiera por su lado, que yo recorrería Escocia
solo. Nos despedimos y me fui a una isla muy desolada donde alquile una de las tres chozas
existentes, donde no era molestado, había veces que no quería entrar al laboratorio y otras que
trabajaba día y noche deseando terminar lo antes posible, cosa que mezclaba oscuros
pensamientos.
Una ocasión me senté sin tener que hacer nada, pensando que hace tres años hice una
creatura infernal y que estaba creando otra, la primera me juro que no haría daño, pero la
segunda no, y temía que hiciera como la primera, existía la posibilidad de reproducirse y la
extinción humana, al alzar la vista mire al engendro espiándome por la ventana, trasluciendo
perversidad y perfidia, por lo que despedace lo que le daría su felicidad. El engendro me
amenazo con hacerme desdichado, me dijo ‘’asistiré a tu noche de bodas’’. Cuando fui a tirar
los restos en una barca me quede dormido, me perdí y llegue a un pueblo donde irlandeses
me dijeron odiar a los asesinos, fui tratado y mirado con hostilidad, después me llevaron con el
magistrado del pueblo.
Era acusado de asesinato, se encontró un hombre estrangulado, lo que me recordó a mi
hermano, dijeron que fue vista una embarcación de un solo tripulante antes de ser hallado el
cuerpo y diferentes versiones semejantes. Cuando me llevaron al ataúd vi el cuerpo de Henry,
después a una mazmorra donde me hallo mi padre, le pregunte por Elizabeth y Ernest, que
estaban bien. Tres meses después de mi encarcelamiento fui liberado, pues se probó mi
inocencia. Decidí regresar lo antes posible a Ginebra.
Mi padre me decía que no afirmara mi culpa de la muerte de Henry Justine y William, pues
creía que eran delirios, por lo que creyó que estaba trastornado. Antes de llegar a Ginebra
recibí una carta de Elizabeth en la que recordaba nuestra infancia y para saber si amaba a otra
para una unión mas intima, creía que mi antiguo estado de ánimo era por que lamentaba
nuestra unión. Eso me recordó lo que el demonio dijo. Le escribí que le contaría el secreto
después de nuestra noche de bodas. Siete días después llegamos a Ginebra. Mi padre propuso
que nos casáramos lo antes posible, y fijamos la boda para diez días. Terminada la ceremonia
comenzamos nuestra luna de miel en el lago y nos fuimos a una isla.
El día estuve tranquilo, pero la noche estuve alerta; iba por los pasillos mientras Elizabeth
estaba acostada. Oí un grito de su cuarto y corrí para hallarla muerta. Llore, alcé mi cabeza y
mire al monstruo burlándose lo trate de perseguir y lo perdí, fui a Ginebra con mi familia, al
darle la noticia a mi padre enfermo, después falleció, me encerraron en una celda, al salir fui
con un magistrado que dijo no poder ayudarme.
Solo mi deseo de venganza me daba tranquilidad, deje Ginebra para cazar al monstruo. Le jure
a todo lo existente que perseguiría al demonio hasta que uno de los dos muriera. Lo seguí por
el mundo y el me dejaba mensajes incitándome que lo siguiera. Cuando supe que iba por los
océanos glaciares lo seguí con más ansias de acercarme, luego lo perdí, me quede varado en
un islote de hielo, divise un barco y llegue con usted Walton, le pido me prometa que si yo
muero usted lo buscara y lo matara, prométame que si lo ve lo matara, y no lo escuche, el es
muy persuasivo.
Narración De Walton
Frankenstein me regaño cuando le pregunte sobre la creación del ser. Era muy sabio, dijo que
moriría feliz si solo cumplía su misión. Le llevamos a su misión, pero después de un tiempo mis
hombres querían regresar, por lo que Frankenstein los motivo. Decidimos volver a Londres
pero Frankenstein pidió quedarse a lo que no lo dejamos poco después murió. Deje donde
yacían sus restos y después volví y vi a un ser como el de su historia se dio cuenta de mi
presencia e iba a saltar por la ventana, le dije que no se moviera y se regreso al cuerpo inerte y
se lamento y arrepintió de sus actos. Le regañe y me respondió que Frankenstein no sufrió ni la
milésima parte de lo que el sufrió; a el le dolía dañar a sus inocentes victimas, se odiaba a si
mismo, sufría de la soledad y desesperación mientras el trataba de ser feliz, era esclavo a unas
pasiones que no podía resistir. Lo acuse de hipócrita, el me dijo que no era así, que lo bueno le
era una desesperación, soñaba con ser amado y amar, lo bueno que el deseaba le era negado.
Me dijo que yo veía como bondadosos a quienes me hirieron, que yo lo odiaba pero el se
odiaba aun mas. Me dijo que no hará mas desgracias, que pronto se mataria y que se reduciría
a cenizas, que fui el ultimo ser en verlo. ‘’Frankenstein, tu venganza seria saciada si me dejaras
vivir en lugar de matarme, no podrías desearme una desdicha peor a la que siento, mi
arrepentimiento no cesara hasta mi muerte. Pronto moriré y me deleitare en la agonia de las
abrazantes llamas y descansare en paz. Adiós.´´ luego de decir esto salto por la ventana hasta
la balsa y se perdió en la oscuridad y la distancia.
PERSONAJES:
•
Ágata
•
Alfonso Frankenstein
•
Caroline Beaufort
•
Creatura creada por Frankenstein (antagonista)
•
De Lacey
•
Elizabeth Lavenza
•
Félix
•
Henry Clerval
•
Justine Moritz
•
Sfie
•
Víctor Frankenstein
•
William
Ψ
CONCLUSION
A decir verdad el libro es muy aburrido a principio, mis expectativas no fueron del todo
satisfechas; me hubiera gustado que el monstruo fuera quien narrara la mayor parte de la
historia, pues si el libro trata de cómo sufre el monstruo que solo se vio una cuarta parte de
tal, y un énfasis al final, sería mejor.
Me fue aburrido por que no hallo gracia en leer una historia en laque todo es felicidad,
gozo, prosperidad, etc.; era algo predecible lo que sucedería mas adelante. Acepto que
para su tiempo fue novedosa y original, pero ahora para mi es algo clásico y común, si
fuera para mi desgracia seria por no haber conocido esta primero y criticar las nuevas,
pero puede sea bueno por si las nuevas adaptaciones son mejores.
A pesar de que lo vi aburrido debo mencionar mis agradecimientos a la historia, no por
aburrirme, sino por ponerles las bases a las que llegue a conocer y me gustaron.
Ψ
•
Autor: Mary Shelley
•
Titulo: Frankenstein
•
Ediciones leyenda
•
Impreso en: México
•
Edición:2005
•
Paginas: 1 - 193
BIBLIOGRAFIA
Descargar