Texto de Juan Clavero Salvador, Biólogo y geógrafo, Profesor de Secundaria y miembro de Ecologistas en Acción-Cádiz

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Edificio Constitución 1812
(Antiguo Cuartel de “La Bomba”)
Paseo Carlos III, nº 3. 11003 – Cádiz
Tel. 956015651. Fax. 956015891
http://www.uca.es/solidaria
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El papel social y ciudadano de las asociaciones ecologistas
Juan Clavero – Ecologistas en Acción
Vivimos en un país con escasa conciencia del valor de lo público y con una
tendencia atávica a culpar de todo a los gobernantes y a pedir que las
administraciones públicas solucionen todos los problemas existentes. Esto ha
generado pasividad ante los temas públicos y desafectación de la política
entendida como la gestión de los asuntos de la sociedad. En este contexto las
ONGs han tenido un difícil papel, exigiendo a sus miembros una gran dosis de
activismo e imaginación para hacer llegar sus mensajes al máximo de
ciudadanos e intentar movilizarlos para que se produzcan cambios sustanciales
que lleven a la solución de los problemas sociales y ambientales.
Las asociaciones ecologistas andaluzas surgen en la década de los 70 del siglo
pasado como una reacción de grupos concienciados por el creciente deterioro
del medio ambiente. A diferencia de otros países del centro y norte de Europa,
este movimiento tuvo desde el principio un fuerte componente de conciencia
social, pues no es posible solucionar los problemas del planeta si no se
solucionan las situaciones de miseria e injusticia existentes tanto dentro como
fuera de nuestro país. A los temas más “naturalísticos”, como la defensa de los
espacios naturales, la recuperación de especies en peligro de extinción, estudio
de la biodiversidad…, se unen otros como la lucha contra la contaminación y
contra el cambio climático, la promoción de una movilidad sostenible, la
oposición al militarismo y a las guerras, la defensa de la agroecología y la
soberanía alimentaria, o la oposición a la especulación urbanística y la
denuncia de la corrupción política que conlleva.
Las ONGs se han encontrado a veces con la incomprensión de la sociedad,
pero a pesar de ello han desarrollado una función social imprescindible en una
sociedad cortoplacista, poco dada a plantear alternativas a largo plazo y
dominada por una clase política que intenta monopolizar todo lo que implique
gestión de asuntos públicos.
Durante los años en que se desarrolló la burbuja inmobiliaria, los ecologistas
nos hemos enfrentado casi en solitario a los especuladores urbanísticos y a los
políticos corruptos que han proliferado al calor del dinero fácil en todas las
administraciones, y especialmente en los ayuntamientos. Estos todopoderosos
capos no entendían, y ahí ha estado su debilidad, que no todos los ciudadanos
tienen un precio, que hay gente dispuesta a luchar por razones éticas, por una
sociedad más justa y solidaria… y el tiempo nos ha dado la razón.
Vivimos en una sociedad insostenible, que camina a ritmo acelerado hacia su
autodestrucción. Los ecologistas pretendemos cambiar este mundo y este
modelo económico. Nos llaman utópicos, pero los que no tienen ningún sentido
de la realidad son los que pretenden que el mundo siga con un 20% de la
población acaparando el 80% de la riqueza, con más de 1.000 millones de
Juan Clavero Salvador, Biólogo y geógrafo, Profesor de Secundaria y miembro
de Ecologistas en Acción-Cádiz
VIII JORNADAS ÉTICA PROFESIONAL Y COMPROMISO SOCIAL
EN CC DEL MAR Y AMBIENTALES
CASEM – 8, 9 Y 10 DE OCTUBRE 2013 - UCA
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hambrientos, con una destrucción irreversible de los recursos naturales que
sustentan nuestra propia supervivencia, con una modificación del clima o una
pérdida de biodiversidad que imposibilitarán el desarrollo de los ciclos naturales
y de las actividades económicas que sustentan a la humanidad.
Se está demostrando en esta situación de crisis generalizada del modelo
económico y social que es más necesario que nunca potenciar el tejido
asociativo para dar a la sociedad civil un poder de presión y actuación que
impida que los que han generado esta crisis salgan ganando, y que la inmensa
mayoría salgamos perdiendo los derechos laborales, sociales, ambientales…
Tras la explosión del 15-M, que supuso un aldabonazo a una democracia
rancia y a una clase política que se creía todopoderosa, la presencia de
jóvenes en los movimientos sociales ha decaído, probablemente condicionados
por la angustia que supone la búsqueda de una salida laboral y personal a esta
debacle.
Si los ciudadanos no toman conciencia de que tienen que asumir participar en
la gestión de los asuntos públicos, que no se puede seguir delegando en una
clase política que está anquilosada en un modelo partidista que no permite ni la
democracia en sus propias filas ni la participación social, todo volverá a ser lo
mismo… o peor.
Además, los que tenemos la suerte de tener una formación técnica o científica
en temas ambientales, tenemos el derecho de utilizarla para ejercer nuestra
actividad profesional pero también el deber de poner esos conocimientos al
servicio de la sociedad para asesorar y ayudar a buscar salidas sostenibles a
las grandes encrucijadas en las que está atrapada la humanidad.
Quien no lucha por una utopía, puede estar condenado a sufrir la más dolorosa
de las realidades.
Juan Clavero Salvador, Biólogo y geógrafo, Profesor de Secundaria y miembro
de Ecologistas en Acción-Cádiz
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