• Introducción • Anorexia. Criterios diagnósticos. • Bulimia. Criterios diagnósticos. • Prevención, síntomas y tratamientos médico • Lugares de tratamiento • Presión social • Familia Introducción Dentro del ámbito de los trastornos de la conducta alimentaria la Anorexia Nerviosa y la Bulimia Nerviosa se presentan hoy día como una de las mayores preocupaciones para los especialistas en salud mental. Estos cuadros revisten importancia no sólo por la gravedad de sus síntomas, y por su aparición en edades cada vez más temprana, sino también para alcanzar niveles de incidencia casi epidérmicos. Se ha avanzado notablemente en el conocimiento y en la comprensión de ambos trastornos específicamente en lo que concierne a la identificación y delimitación de los síntomas. Hoy en día la Anorexia y la Bulimia Nerviosa aparecen como entidades netamente diferenciales. Los criterios diagnósticos establecidos para ambos trastornos se fundamentan en las características sintomáticas nucleares, habiéndose descrito subtipos clínicos que determinan subpoblaciones de pacientes distinguibles entre si. Anorexia nerviosa Es una enfermedad de comienzo típico en la adolescencia, en la gran mayoría de los casos, en el sexo femenino. El cuadro comienza a partir de la adopción de una dieta para adelgazar; lenta o rápidamente la dieta se torna cada vez más estricta y el adelgazamiento más acentuado, a pesar de lo cual la joven continúa con su régimen, intentando lograr un peso corporal cada vez más bajo. Comienza a cambiar su persona: se aísla, se muestra irritable, hostil, y se altera progresivamente todo el funcionamiento y la dinámica familiar. Hasta aquí, su vida ha cambiado: no reconoce estar delgada a pesar del bajo peso, realiza mucha actividad física, y en su interior surgen sensaciones contradictorias (de control, de poder, de depresión y otros cambios del estado de ánimo, siempre subordinados a la comida, etc). Ha incorporado comportamientos peculiares: controla cotidianamente su peso y su silueta, cocina para los demás, en ocasiones esconde o tira comida, y ya no ingiere ni siquiera las pequeñas porciones que se sirven en su plato. Cada día queda más claramente expuesto su rechazo a mantener un peso adecuado, y su temor a convertirse en una persona obesa, a pesar de su delgadez. La comida ocupa cada vez más lugar en su vida. Ya ha dejado de salir, de comunicarse, encerrándose en pensamientos depresivos que no comenta con los demás. Con su familia ha recorrido médicos clínicos, psiquiatras, endocrinólogos, gastroenterólogos, ginecólogos, psicólogos, etc., con respuestas solo parciales. Si el cuadro no es específicamente tratado, es probable que muera. Criterios Diagnósticos para la Anorexia Nerviosa • Rechazo a mantener el peso corporal en o por encima del valor considerado como mínimo para la 1 edad o talla. • Miedo intenso a ganar peso o convertirse en una persona obesa, aun estando con peso subnormal. • Alteración de la percepción de su propio cuerpo, peso o silueta, influencia indebida (exagerada) del peso corporal o la silueta en la auto evaluación o negación de la gravedad del bajo peso corporal. • Amenorrea (en post menárquicas) ausencia de tres ciclos consecutivos o menstruación solo secundaria a la estimulación hormonal. Subtipos clínicos para la Anorexia Nerviosa Tipo Restrictivo: durante el episodio actual de Anorexia Nerviosa el paciente no ha incurrido regularmente en conductas de ingesta voraz−purga (vómitos autoinducidos o abuso de laxantes, diuréticos o enemas). Tipo Compulsivo−Purgativo: durante el episodio actual Anorexia Nerviosa la persona presenta regularmente conducta de ingesta voraz−purga. Diagnóstico diferencial Debe hacerse con enfermedades somáticas que producen pérdida de peso y con otros trastornos mentales que presentan alteraciones en la conducta alimentaria. • Enfermedades somáticas: • Gastrointestinales: • Síndrome de mal absorción • Enfermedad inflamatoria(Crohn, colitis ulcerosa) • Endocrinas: • Hipertiroidismo • Diabetes mellitus • Enfermedad de addison • Hipopituitarismo • Neurológicos: • Tumores del sistema nervioso central. • Trastornos mentales: • Depresión • Esquizofrenia Incidencia • 1 de cada 250 adolescentes de la población entre los 12 y los 18 años de edad sufre Anorexia Nerviosa. • Si se consideran la franja de 16 a 18 años la cifra se eleva a 1 de cada 100 adolescentes. Evolución • Si la enfermedad no es tratada, aproximadamente el 10 o 15% de los pacientes puede morir. • Gran número de casos tiende a la cronificación, y/ o a asociar la forma Bulímica de trastornos del comer. • Más de 1/3 de los casos evolucionan asociando otras enfermedades psiquiátricas. Bulimia nerviosa Esta enfermedad comienza luego de iniciar una dieta para lograr un cuerpo más delgado. En uno de los tantos intentos, quien padece Bulimia logra cumplir con la dieta por un tiempo, hasta que llega el momento en que 2 aparece un impulso incontenible de comer, realizándose una ingesta desmedida de alimentos, a la cual le siguen intensos sentimientos de culpa, y de incapacidad para ejercer algún control. Aquí, poco a poco, comienza un ciclo que ha de terminar siendo permanente: el ocultamiento, las comidas a escondidas, el engaño, se asocian a intentos repetidos de mantener la dieta propuesta. Luego, aparecen la depresión del ánimo, la vergüenza, y con ellas, el gran aliado de la enfermedad: el secreto. Tarde o temprano, surge la idea de intentar métodos que sirvan para eliminar lo ingerido: el vómito autoprovocado, el abuso de laxantes, de diuréticos, el ejercicio físico extremo, u otros. Inmediatamente se agrava el cuadro, por la sumatoria de las consecuencias físicas de estos métodos. El equilibrio se ha quebrado totalmente. Los episodios se repiten uno tras otro, a pesar de intentarse una y mil veces que cada episodio sea el último. La paciente, día a día, se promete no reiterar sus comportamientos anormales, y día a día fracasa en su intento, ya que la enfermedad se realimenta a si misma, perpetuándose. Aumenta la depresión, la culpa y la desvalorización. El paciente se torna inconstante. Toda su vida empieza a estar condicionada por la enfermedad; suspende actividades sociales por su físico, teme ingerir ciertos alimentos por tener la convicción de que no va a lograr contener la ingesta si la inicia, y todo su tiempo, sus relaciones interpersonales, su estado de ánimo, sus afectos, quedan condicionados a su enfermedad. Ya no puede detenerse. Cualquier situación actúa como gatillo disparador de nuevos episodios. Se abren las puertas a otras adicciones como el alcohol, las anfetaminas, etc. Si el cuadro no se trata progresa muchas veces hasta la muerte. Criterios diagnósticos para la Bulimia Nerviosa ♦ Episodios recurrentes de ingesta voraz. • Conductas recurrentes e inapropiadas de compensación con el fin de prevenir la ganancia de peso, tales como la autoinducción al vómito, abuso de laxantes, diuréticos, enemas, u otros medicamentos, ayuno o ejercicio excesivo. • Los episodios de ingesta voraces, de conductas compensatorias ocurren en promedio al menos dos veces por semana durante tres meses. • La auto evaluación es influenciada indebidamente por la silueta y/ o peso corporal. • El trastorno no ocurre exclusivamente durante el curso de la Anorexia Nerviosa. Considerando las variantes clínicas de ambos trastornos, los criterios para diferenciar los subtipos se centran en la ausencia o presencia de ingesta voraz y/ o conductas de purga para la Anorexia Nerviosa; para la Bulimia las distintas conductas compensatorias utilizadas para prevenir o atenuar la repercusión de los episodios de ingesta voraz sobre el peso o silueta corporal pueden determinar los tipos purgativo o no purgativo del trastorno. Subtipos clínicos para la Bulimia Nerviosa Tipo purgativo: durante el episodio actual el individuo ha incurrido regularmente en alguna de estas conductas: autoinducción al vómito, abuso de laxantes, diuréticos y enemas. Tipo no purgativo: durante el período actual el individuo ha empleado otras técnicas compensatorios inapropiadas como ayunos o practicar ejercicio intenso, pero no se ha provocado el vómito ni ha hecho un mal uso de laxantes, diuréticos y enemas durante el episodio. 3 Incidencia • La frecuencia de aparición crece día a día. En otros países, oscila del 9 al 20% de las jóvenes de 14 a 18 años. • Se sabe que entre 1 a 3 de cada 100 adolescentes presentan al menos un episodio semanal de ingesta demedida de alimentos seguida de vómitos o abuso de laxantes Prevención, síntomas y tratamientos médico Es difícil pensar en no tener una enfermedad des este tipo, pero si podemos trabajar con nuestra persona toda (cuerpo y mente) para evitar que las influencias de los medios de comunicación lleguen hasta nosotros en forma perjudicial. En otras palabras, querernos como somos, querer nuestro cuerpo y no buscar ser de otra manera, sino aceptarnos como somos y sentirnos bien así, aunque sea muchas veces difícil, pero seguramente imposible NO. Desde las personas que rodean a la persona enferma, se debe compartir sus cosas, escucharla, acompañarla, e intentar, junto con la ayuda profesional, que es fundamental en estos casos, restablecer los lazos de la persona enferma con la vida, con sus vínculos, mostrándole que hay oras cosas, otros intereses en la vida, más allá de la figura. Y la comida, y que estos últimos son una mínima parte de un gran y maravilloso todo que es el ser humano, al que hay que valorar, amar y defender. Signos visibles característicos de la bulimia Conductas patológicas: • Preocupación constante por la comida: habla de peso, calorías, dietas...) • Atracones: come de forma compulsiva. • Esconde comida • Miedo a engordar • Evita el hecho de ir a restaurantes o fiestas y reuniones donde se vea socialmente obligado a comer. • Acude al lavabo después de comer. • Vómitos autoprovocados, abusa de laxantes o diuréticos. • Usa fármacos para adelgazar. • Realizan regímenes rigurosos y rígido. • Tiene una conducta adictiva con edulcorantes. Signos fisiológicos: • Inflamación de las parótidas. • Pequeñas rupturas vasculares e la cara o bajo los ojos. • Irritación crónica de la garganta. • Fatiga y dolores musculares. • Inexplicable pérdida de piezas dentales. • Oscilaciones de peso: 5 ó 10 Kg., arriba o abajo. Cambio de actitud: • Modificación del carácter: depresión, sentimientos de culpa u odio a si mismo, tristeza, sensación de descontrol... • Severa autocrítica. 4 • Cambios en la autoestima en relación al peso corporal. Signos visibles característicos de la anorexia Conductas patológicas: • Conducta alimentaria restrictiva o dietas severas: poca cantidad de comida. • Rituales con la comida: contar calorías, descuartizar la comida en trozos pequeños, preparar comidas para otros y comer... • Miedo intenso a engordar: luchando por mantener el peso por debajo de lo normal. • Temor a verse obligado a comer en sociedad. • Hiperactividad: exceso de gimnasia u otros deportes. • Esconder el cuerpo debajo de la ropa holgada. • Negarse a usar bañador y que vean su cuerpo. • En ocasiones, atracones y uso de laxantes o diuréticos. • Abuso de edulcorantes Signos fisiológicos: • Perdida progresiva de peso (con frecuencia sucede en un periodo breve). Falta de menstruación o retraso en su aparición sin causa fisiológica conocida. • Palidez, caída del cabello, sensación de frío y dedos azulados • Debilidad y mareo. Cambio de actitud: • Cambio de carácter: irritabilidad, ira. • Sentimientos depresivos. • Inseguridad en cuanto a sus capacidades. • Sentimientos de culpa y auto desprecio por haber comido o por hacer ayuno. − Aislamiento social Tratamiento de la anorexia En el tratamiento de la anorexia hay que tener en cuenta en nivel de pérdida de peso del sujeto y si hay una gran pérdida, con posible riesgo para la vida, se impone una hospitalización del sujeto. Desde la perspectiva médica el tratamiento consiste en la administración de fármacos básicamente antianoréxicos, ansiolíticos y antidepresivos. Desde el modelo psicodinámico se opta por la psicoterapia cuyo objetivo es resolver los conflictos internos que se suponen a la base del trastorno. Desde una perspectiva cognitivo conductual el tratamiento debe ir dirigido a cubrir los siguientes objetivos: 1. Establecimiento o incremento de la cooperación por parte del paciente(eje., contrato de conducta). 2. Establecimiento de hábitos de comida y peso adecuados (mediante refuerzo diferencial − medio hospitalario o familiar−). 3. Modificar las actitudes hacia la apariencia corporal, la comida y el peso (técnicas de inundación o desensibilización). 5 4. Hacer desaparecer los episodios de bulimia (técnicas de exposición o prevención de respuesta). 5. Modificar el factor sumisión−dependencia (técnicas cognitivas −eje., Terapia Racional Emotiva de Ellis−). 6. Eliminar el miedo al contacto corporal, a las relaciones sexuales (Exposición, desensibilización sistemática). 7. Modificar las relaciones familiares. 8. Mantenimiento de los resultados a largo plazo (seguimiento de 1 ó 2 años). Tratamiento de la bulimia Los integrantes de estos equipos representan disciplinas como la medicina −psiquiatría, nutrición, endocrinología, ginecología−, la sicología, el trabajo social y la enfermería, indispensables en los casos agudos de anorexia. Para casos menos graves, que no necesitan internación, se modifica la modalidad de tratamiento y un psicoterapeuta puede ayudar al paciente a superar la causa psíquica que origina el síndrome, mientras trabaja en conjunto con un nutricionista que ayuda a la persona a idear y llevar a cabo una forma adecuada de recuperar peso. Normalmente la hospitalización de los pacientes con bulimia sólo se necesita cuando hay complicaciones clínicas, de lo contrario algunos psiquiatras tratan de reducir con antidepresivos y ansiolíticos la angustia y la compulsión que lleva a los bulímicos a darse atracones. Una aproximación cognitivo−conductual tiene que combinar diferentes estrategias entre las que cabe destacar −Refuerzo positivo de una ingesta adecuada. −Técnicas de autocontrol hacia las conductas de comer. −Desensibilización o exposición en vivo para controlar la ansiedad que el paciente experimenta antes de comer. −Terapia cognitiva −Contrato conductual. Psicoterapia tradicional: Los métodos de terapia tradicionales animan a la paciente a reflexionar acerca de su infancia, sueños y sentimientos expresados para, de ese modo, adquirir una nueva percepción de su conducta actual. Al reconocer el papel de estas influencias subliminales, dice la teoría, la paciente adquiriera una nueva percepción de sus acciones y las cambiará. Modificaciones de la conducta: Esta forma de terapia es quizá antagónica con respecto a la psicoterapia tradicional, porque ignora por completo los sentimientos subyacentes y se centra solo en la conducta cambiante. La modificación de la conducta actúa sobre la basada un principio muy simple: reforzar una conducta deseada mediante premios y castigar o ignorar una conducta no deseada. Por ejemplo, a una anoréxica que alcanza una meta de peso predeterminada se le puede permitir ver una película o dejar de ir a clase un día. Si no logra alcanzar la meta, puede prohibírsele que vea la televisión. Un sistema similar de premios y castigos daría resultado con una paciente bulímica. Terapia conductivista cognitiva: Combina los mejores aspectos de la psicoterapia tradicional y la modificación de la conducta. Este método requiere conocimiento y desafío de las conductas y pensamientos autodestructivos, seguido de apropiados cambios en la conducta. De esta manera la paciente trabaja 6 simultáneamente en las motivaciones interiores y las manifestaciones exteriores. Terapia de grupo:La terapia de grupo parece especialmente valiosa en el tratamiento de la bulimia. Según un estudio reciente, esta terapia era más beneficiosa que los medicamentos o la terapia individual. Puesto que muchas bulímicas creen que son las únicas que se dedican a esas horribles practicas, resulta terapéutico enterarse de que otras personas también hacen esas cosas. Se sabe menos acerca de la terapia de grupo para la anorexia nerviosa. Algunos terapeutas se lamentan que en grupo las anoréxicas compiten fieramente por ver quien consigue mantener el peso más bajo o pasar más tiempo sin comer. Además, la terapia prolongada que necesita muchas anoréxicas provoca que muchos grupos sean inapropiados, puesto que no es usual que un grupo de terapia dure tanto tiempo. Lugares de tratamiento Los lugares en que se ofrecen tratamientos para curar la bulimia y la anorexia representan la fase más importante de esta enfermedad. Aquí damos una lista detenida de lugares o personas a los cuales se puede acudir en la Argentina, en la Capital Federal, en caso de necesitarse un tratamiento contra estas enfermedades para cualquier un individuo: ALUBA−Casa Central Combate de los Pozos 2193 (1245) − Buenos Aires Tel./fax: (54 11) 4306−9786 / 4306−9789 / 4304−8081 ABINT − Avenida Pueyrredón 1777 Tel./fax: (54 11) 4821−6325/7265/4826−5725 (1119) Capital Federal ALUBA−BANFIELD Azara 1820 Tel.: (54 11) 4242−3015 (1828) Banfield − Bs. As. BACE (Centro de tratamiento e investigación sobre Bulimia y Anorexia) Callao 1817 − P.B. Tel.: (54 11) 4815−9015 e−mail: [email protected] Hospital Durand: Servicio de Nutrición, Dra Mónica Katz. Díaz Vélez 5044 Tel.: 4982−8668 Hospital de Clínicas: Cátedra de Nutrición, Dra. María Esther Della Valle. Córdoba 2351 Tel.: 4508−3900 F.U.M.T.A.D.I.P., Fundación Mujer de Trastornos Alimentarios: 7 Asistencia Docencia Investigación y Prevención. Salguero 3056, 2do.C Tel/Fax: (54−11) 4801−2571 E−mail: [email protected] http://fumtadip.com.ar IAN, Instituto Argentino de Neurociencias: Mansilla 3057 Tel.: 4822−6739/ 6501 http://www.iansa.com.ar DAPSE, Centro especializado en desórdenes alimentarios: Tel.: 4801−8850 CENE, Centro de Nutrición y Endocrinología: Dr. Jorge Braguinski. Ayacucho 1547 PB A Tel.: 4801−2599 e−mail: [email protected] Dr. Aldo Cúneo Presidente de la Sociedad Argentina de Obesidad y Trastornos Alimentarios. Tel.: 4779−9075 Acá hacemos una interiorización de algunos de los centros de tratamiento ya mencionados. BACE: Está formado por un equipo interdisciplinario de profesionales, dirigido por la Dra. Edith Szlazer, Médica (UBA) y Licenciada en Psicología (UB), con dedicación exclusiva en trastornos de la alimentación. Especializada en el New York Medical Center y en Bellevue Hospital. Fundadora de BACE con sede en Madrid y Buenos Aires. Ha desarrollado un Programa Médico Especial para el Tratamiento de Bulimia y Anorexia (PROMEBA). Asimismo, es fundadora de la Asociación Argentina de Bulimia y Anorexia. Dentro de BACE el programa PROMEBA se desarrolla con la colaboración de profesionales experimentados en los desórdenes de la alimentación, formado por un staff interdisciplinario de licenciados en psicología, nutrición y sociología. ALUBA: Asociación de Lucha contra Bulimia y Anorexia Fue creada en 1985 Su directora médica es la: Dra. Mabel Bello Exhibe no sólo su condición de pionera y líder en el campo de las Patologías Alimentarias en la Argentina, sino que ha trascendido las fronteras, opera con éxito en Uruguay, y es reconocida en Europa por el alto índice 8 de recuperación de sus tratamientos, razón por la cual los mismos se implementan en Barcelona desde 1995. Además de la labor asistencial que incluye desde su creación más de 7000 consultas y brindar actualmente tratamiento a 2000 pacientes activos dentro del Hospital de Día, merece destacarse su accionar en el campo de la prevención. Se organizan charlas en colegios con la asistencia de padres y alumnos, seminarios, conferencias y presentaciones en diferentes medios de difusión. En el campo de la docencia cabe mencionar el curso anual de postgrado para médicos y psicólogos que se dicta desde 1992 con el auspicio de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Buenos Aires y los cursos para docentes desde 1987. Asimismo, alumnos de distintas universidades realizan pasantías en la Institución. El Departamento de Docencia e Investigación tiene a su cargo la organización de congresos, realiza investigaciones con la participación de distintos especialistas, organiza los cursos regulares y de actualización y es responsable de las estadísticas que a nivel nacional se realizan en los grupos de riesgo. Su lema es: "No olvidemos que un diagnóstico precoz es el primer paso hacia la curación" F.U.M.T.A.D.I.P: Carta de Presentación Buenos Aires, 1997 El grupo de trabajo que constituye F.U.M.T.A.D.I.P. comenzó sus actividades en el año 1981 bajo la denominación de Asistencia Integral del Obeso (AIO), dedicándose a la tarea asistencial de pacientes con Trastornos Alimentarios graves como Anorexia Nerviosa, Bulimia Nerviosa y Obesidades de grado masivo. La metodología de tratamiento es interdisciplinaria con participación de médicos, psicoterapeutas y terapeutas corporales respondiendo a la necesidad de una comprensión amplia del disturbio y, en consecuencia, determinando un planteo terapéutico dirigido a dar cuenta tanto de las alteraciones alimentarias como de sus problemáticas consecuencias. Desde 1995, desde la creación de la Fundación para la Mujer y los Trastornos Alimentarios, Docencia, Investigación y Prevención (FUMTADIP), comenzamos las actividades docentes de postgrado para médicos, psicólogos, nutricionistas dietistas y otros profesionales de la salud, a las que se agregaron supervisiones, cursos intensivos y actividades psicoeducacionales gratuitas a Instituciones Comunitarias. Los resultados de las tareas de investigación, docencia y asistencia fueron publicadas en el libro "Anorexias y Bulimias: las cosas del comer", en el que los integrantes del equipo de trabajo interdisciplinario de la Fundación expresaron sus ideas. Por otra parte, la realización de Talleres y Charlas Informativas en colegios primarios, secundarios y en la actividad universitaria dirigidas a alumnos y sus familias, autoridades y docentes, ha permitido el desarrollo de una labor estructurada en la Prevención de los Trastornos Alimentarios. Lic. Amanda López Molina Presidenta Lic. Nélida Di Rienzo Vicepresidenta Criterios básicos 9 Motor fundamental de FUMTADIP en el estudio y tratamiento de los Trastornos del Comportamiento Alimentario: la interdisciplina. ¿Por qué la interdisciplina? Porque consideramos el campo de lo humano como una trama compleja de relaciones y problemáticas, que en tanto tal, excede a las disciplinas que aisladamente intentan, estudiarlo y abarcarlo. Entendemos la interdisciplina no como una sumatoria, sino como un encuentro diferente, que sostiene singularidades e integra a la vez. La ciencia moderna sostuvo una concepción fragmentaria de la realidad y de lo humano; promoviendo así, la idea de un universo controlado, domesticado y previsible. El paradigma positivista, experimental, basado en la predictibilidad y el control de variables, se disuelve hoy en una realidad compleja y dinámica, en la cual el azar y el acontecimiento adquieren su valor. ¿Qué implica? Implica un proceso dinámico en el cual, a través de las distintas disciplinas (psicología, medicina, nutrición, psicoanálisis, etc.), nos proponemos construir un marco referencial común y una estrategia de abordaje para cada patología. Este proceso dinámico, en el marco de una realidad compleja que incluye de por sí y como variable de cambio y efecto al sujeto −que ya no es entonces mero observador, sino forjador y creador de sentido−, deja de lado concepciones lineales de causalidad, así como modelos estáticos deudores de posiciones reduccionistas, y por demás escasas. Y es entonces desde esta perspectiva, que los conceptos de salud y enfermedad se imbrican y pasan a formar parte de un entramado de relaciones de distinto orden (científico, social, cultural, económico, etc.), es decir, de un proceso que exige un redimensionamiento constante. ¿Por qué la docencia? El formar profesionales en el trabajo interdisciplinario −a través de cursos, seminarios y supervisiones clínicas−, se constituye en herramienta fundamental para contribuir a la prevención de estas patologías; pero también es imprescindible, al momento de situar una posición ética con respecto a los que las padecen. No podemos sumar al padecimiento del consultante, el que padezca además, la iatrogenia profesional. El poder brindar el conocimiento resultante de una larga experiencia clínica en el tratamiento de estas patologías, así como de la constante actualización y formación en las distintas disciplinas intrínsecamente relacionadas con las mismas, implica estar brindando conocimientos alta y seriamente fundamentados. Además de una concepción del trabajo profesional, como una necesaria experiencia, renovada y constante. La interdisciplina implica un saber común que resulta de la interacción e intersección de saberes, en función de comprender y abordar un problema que habrá que entender como multideterminado. ¿Por qué la Investigación? Tal como dijéramos, la Investigación sirve al propósito fundamental de una actualización constante en el conocimiento; pero también, es la vía a través de la cual formulamos y reformulamos nuestras hipótesis, produciendo así un saber dinámico y no cristalizado. 10 ¿Por qué la Prevención? El informar a la comunidad a través de la realización de charlas, talleres y demás actividades, no sólo se constituye en la posibilidad de una detección precoz de estas patologías (íntimamente ligada al pronóstico de las mismas), sino que permite a la vez, un mayor grado de concientización con respecto a criterios de salud en general. Esto último implica un prevenir desde la salud y no desde la enfermedad. Objetivo: Prevención y tratamiento de la Salud Mental en general; y de los Trastornos del Comportamiento Alimentario (Anorexia, Bulimia, BED, Obesidad) y Trastornos Psicológicos de la Mujer y su entorno (Crisis, Ansiedad y Stress, Depresión) en particular. ONG Nº 383: registrada por el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, como Entidad dedicada a la Prevención y Docencia en la Defensa de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes. II) Medios: 1) Investigación: • Actualización permanente sobre casuística y terapéutica a nivel internacional. • Trabajos de relevamiento en el interior del país acerca de las problemáticas que nos ocupan. • Organización de grupos de trabajo y jornadas. • Seguimiento de casos tratados y evaluación de resultados. Formación de bases de datos. 2) Difusión: • Publicaciones. • Conferencias. • Mesas redondas. • Participación en medios de comunicación. • Interacción con instituciones públicas y privadas. 3) Docencia: *Cursos para profesionales. • Cursos anuales. • Cursos intensivos (para profesionales del interior del país) • Cursos semi−intensivos *Seminarios. *Supervisiones clínicas. 4) Prevención: Talleres, charlas, reuniones psicoeducacionales para padres, maestros y comunidad. 5) Tratamiento III) Staff profesional: 11 El mismo está compuesto por Médicos (Psiquiatras, Clínicos, de Familia), Psicólogos, Nutricionistas y Profesores de distintas disciplinas Artísticas. IV) Actividades: * Investigación: Presentación de casos clínicos y trabajos en diferentes Congresos y Jornadas. * Difusión: −Publicación del libro Anorexias y bulimias − Las cosas del comer. Autores: Dr. Víctor Hugo Lofrano y cols. Editorial Fumtadip. El lema de esta asociación es: Trabajamos por la vida Presión social Antiguamente la anorexia y la bulimia eran infrecuentes, hasta el extremo de que se consideraban curiosidades médicas. En el siglo XVI las mujeres que seguían un ayuno voluntario eran utilizadas como entretenimiento para un público que acudía a ver a las artistas hambrientas que podían vivir sin comer. En los años setenta, llegó la cultura de la delgadez, que impuso un prototipo femenino que no se correspondía con el modelo natural y anatómico de la mayoría de las mujeres, por lo que era prácticamente inalcanzable. En la actualidad, el problema ha disparado todas las alarmas, y ha alcanzado la categoría de cuestión de salud pública, tanto por la cantidad de jóvenes implicados como por las repercusiones que estas enfermedades tienen en el futuro de una buena parte de las generaciones venideras. Sabemos que las pautas culturales han determinado que la delgadez sea sinónimo de éxito social. Muchos de nuestros jóvenes luchan para conseguir el físico ideal motivados por medios de comunicación, moda, presión de las industrias dedicadas a la fabricación de productos light, asociación de estar en forma a estar delgado. Muchos creen que el mundo es de los delgados. Otros, por un peso natural que excede el estándar de delgadez que la sociedad impone, se deprime y se autocritican sintiéndose fracasados o desvalorizados. Actualmente la bulimia y la anorexia nerviosa, se han convertido en un verdadero flagelo para la juventud. Interiorizando el caso de los medios de comunicación, en especial la televisión, venden la idea que estar delgado va asociado a felicidad, éxito laboral, éxito en las relaciones sociales, belleza, juventud y una mejor calidad de vida. Ahora, ¿cómo es que se asocian estos objetivos con la disminución de peso? La imagen que dan los anuncios publicitarios, las series irreales de televisión sobre la mujer es de superwoman: tiene que tener un cuerpo perfecto, una carrera profesional perfecta, un matrimonio perfecto y ser la madre ideal. Todo ello, ligado a la asociación de que este éxito se debe a estar delgado. Por otro lado, en la cultura occidental se asocia como lo delgado es belloy variedad de medios de comunicación presentan con mucha frecuencia: fotografías e imágenes de hombres y mujeres jóvenes, atractivos y delgados; dietas y planes de ejercicio que nos permitan moldear nuestros cuerpos según el patrón de esas figuras idealizadas inalcanzables Es fácil ver como esta presión social puede dar lugar a que algunas mujeres jóvenes hagan una dieta excesiva y eventualmente desarrollen anorexia. Otro factor de estos trastornos que se puede señalar refiere a la situación frente a tiendas de moda, cuando los adolescentes la ropa de no le entra, o transpira dentro de un probador mientas se fuerza a que se estire el pantalón; se impulsa nuevamente el deseo de adelgazar, temiendo el hecho de no poder 12 vestirse como todos. (*) Pero tal vez, el factor más importante sea, quizás, nuestro propio miedo: miedo a que otros nos vean distintos, feos, a ser discriminados, a que nos hagan sentir mal. (*) En estos casos se puede mostrar claramente la presión ejercida las tiendas de moda. • Cuando una delgadísima argentina de 26 años entró recientemente a una tienda de Buenos Aires buscando una chaqueta y descubrió que sólo entraba en un Extra Grande, compró la prenda pero juró no volver nunca más. No voy a comprar nada más allí, me hicieron sentir gorda, dijo la indignada compradora de no más de 53 kilos de peso y 1,7 metro de altura, y cuenta que algunas de sus amigas, apenas rellenitas, están virtualmente proscriptas de las galerías comerciales y compran en tiendas de tallas especiales. • Los talles no sólo son chicos, son diminutos, no tienen en cuenta la forma de las caderas de las mujeres ni nada, son un pedazo de tela, dijo Mariana Fortín, una estudiante de 18 años que está bajo tratamiento por su anorexia desde hace ocho meses. Los argentinos están orgullosos de su apariencia, que refleja una mezcla de italianos, españoles, europeos del este, árabes e indígenas. Muchos de los 36 millones de habitantes del país con el mayor ingreso per cápita de América Latina simplemente cuidan de sus bellas figuras. Pero el narcisismo puede volverse obsesivo. Ahora, los médicos y los padres de las adolescentes con anorexia y bulimia acusan a las tiendas de moda de ser ahorrativas con las telas mentirosas con los talles, forzando a su clientas a usar ropa cada vez más pequeña. Argentina tiene, después de Japón, la mayor incidencia mundial de anorexia y bulimia, enfermedades alimentarias que afectan a alrededor de siete millones de mujeres y un millón de hombres en todo el mundo. Expertos estiman que una de cada diez adolescentes argentinas sufre algún desarreglo alimenticio. Entonces, podemos resumir: En la aparición de los trastornos alimenticios bulimia y anorexia influyen dos importantes factores: • Factores socioculturales: es la presión por parte de la sociedad, de los medios de comunicación, el anhelo de delgadez. • Factores individuales, como son los cambios corporales que obligan a fijar la atención sobre el propio cuerpo. Es este el momento en que el adolescente compara su imagen corporal con el modelo estético corporal presente en su medio social. Familia El entorno familiar se puede señalar como otro de los importantes factores en el desarrollo de la bulimia y anorexia en los adolescentes. La familia actúa como filtro para los más jóvenes y pequeños de la casa de toda la presión social que de fuera recibe, y también porque en ella es donde se cuaja los valores y donde pueden aparecer los perjuicios. La familia (los padres) pueden así proteger a los niños hasta que puedan ser críticos e interpretar la realidad por sí solos. Es necesario y de entender que los padres enseñen a los niños a que "tomen medidas" a la hora de comer; a comer sin glotonería pero no por cuestiones de peso sino por cuestiones de educación y del saber estar. En los casos en que las madres que han padecido trastornos en el comportamiento alimentario sería de gran 13 ayuda que estas distingan y separen entre sus vidas y las patologías que han sufrido y las de sus hijos que pueden ser muy distintas. Los padres son también los responsables de la alimentación de sus hijos. Son también los encargados de que, en la medida de lo posible, se respeten unas normas en cuanto a las comidas. No sólo por disciplina, orden o tradición sino para un buen desarrollo del niño o adolescente. Los factores negativos dentro de la familia, posiblemente tanto hereditarios como ambientales, desempeñan una función importante en la provocación y perpetuación de los trastornos del comer. Un estudio encontró que el 40% de las niñas entre las edades de 9 y 10 años están tratando de perder peso, generalmente por recomendación de las madres. Algunos estudios han encontrado que las madres de los anoréxicos tienden a estar sobreinvolucradas en la vida de sus hijos, mientras que las madres de los bulímicos son críticas y distantes. Aunque las madres pueden tener una influencia grande sobre sus hijos en lo que respecta a los trastornos del comer, los padres y los hermanos excesivamente críticos también pueden desempeñar un papel importante en el desarrollo de anorexia en las niñas. Los estudios reportan que las personas con cualquiera de los trastornos del comer tienen mayor probabilidad de tener padres que sufren de alcoholismo o abuso de sustancias que la población en general. Parece que existe entre las mujeres con trastornos del comer una incidencia mayor de abuso sexual; los estudios han reportado tasas de abuso sexual de hasta un 35% en las mujeres con bulimia. Las personas con bulimia también tienen una mayor probabilidad que las personas con otros trastornos psiquiátricos de tener un padre obeso o de haber sido ellas mismas obesas en la niñez. Los llamados grupos de padres ayudan a la familia de los enfermos a comprender la enfermedad de las hijas, porque comparten sus experiencias con otros personas con la misma situación. Al principio los padres buscan información sobre la enfermedad de las hijas y buscan soluciones a determinadas conductas, y los otros padres pueden ayudar con sus experiencias. El objetivo básico de estos grupos es formar a los padres para que sean elementos terapéuticos. Terapia de familia Muchos terapeutas recomiendan la terapia de familia como parte del tratamiento contra la anorexia nerviosa, porque las anoréxicas con frecuencia son mas jóvenes que las bulímicas y todavía viven con sus familias. La terapia de familia simplemente permite al terapeuta observar los patrones trastornados que ayudaron a dar origen al trastorno de la ingesta. Bibliografía • "El cuerpo como delito: anorexia, bulimia, cultura y sociedad", Toro − Josep, Ed. Ariel • ALUBA: Asociación de Lucha contra Bulimia y Anorexia, www.aluba.org • Asociación Adolescentes x la vida, www.adolescentesxlavida.com • Anorexia y bulimia: El radical rechazo de uno mismo, Alicia Santoyo, México. • Aspectos básicos de los trastornos de la conducta alimentaria, Dr. Héctor Jorge, Argentina. • Universidad Nacional de Quilmes. Seminario de trastornos de la conducta alimentaria Bulimia y Anorexia, 19 de julio de 20003. • 14