Análisis Sobre Liderazgo: Reflexiones para su fortalecimiento en el ámbito de la administración Pública. Introducción Son numerosos los modelos organizacionales que representan y personifican a las empresas y a los líderes competitivos y exitosos de hoy. La gerencia venezolana, sobre todo en el sector público ha sido ejercida por ejecutivos con muy poco conocimiento de la administración, avalado por lo aprendido de una manera empírica, sin haber pasado por una formación formal universitaria. Basados en la experiencia, y desde luego debidamente amparados por ser miembros de organizaciones de renombre o grandes amistades, en el poder. Es importante igualmente mencionar que los venezolanos tienen su forma cultural y espontánea de trabajar, dirigir y organizarse, y justamente, esta forma mantiene una relación de armonía con las creencias que sirven de base al sistema local de valores. Navas, (2010). Si bien es cierto que la imagen del líder público venezolano ha ido evolucionando positivamente con el tiempo, no es temerario afirmar, que falta mucho trecho para afirmar que en la actualidad se halla en un estadio ideal o que se equipara con la del líder del sector privado. García, (2008),. Esto hacía que las características de ese liderazgo estuviera signado por la desconfianza, una gestión con objetivos poco claros o imprecisos y una cuestionable preparación académica y profesional. Sin embargo, el autor del artículo que se analiza, le atribuye al proceso de descentralización y a las elecciones de gobernadores y alcaldes, así como a las reformas del estado, una disminución a la brecha histórica entre el liderazgo privado y el público, cuestión ésta que será analizada en este informe, con las críticas debidas y los aportes pertinentes. García, (2008). Por otra parte es cierta la afirmación de que el sector público venezolano se ha venido alimentando de la academia criolla, del mundo empresarial, social, político y castrense; sobre esto último se expondrá un análisis con críticas y aportes, partiendo de la situación actual del país. García, (2008). Igualmente, se comparte la premisa de que un líder eficiente para el sector público, debe caracterizarse por el adecuado manejo de las estrategias, flexibilidad en el manejo conocimiento de herramientas para y ejecución de políticas, la realización y evaluación de proyectos, mayor equidad. García, (2008). Especial mención se hace para el líder como gerente público. Su orientación hacia el logro colectivo con preponderante participación ciudadana; liderazgo democrático, pero sin demagogias, desprovisto de la retórica y la mitomanía politiquera y vacía de contenido. Dotado de sensibilidad, ética y responsabilidad, una gestión incluyente no excluyente ni exclusiva. García, (2008). Desarrollo Venezuela. Su situación actual y liderazgo. Venezuela; su mundo económico y financiero; con repercusión determinante en lo social, dependiente del negocio petrolero y con aparente solidez para enfrentar con éxito los efectos de la crisis internacional, para sorpresa de muchos, sucumbe ante lo adverso y luce débil su capacidad para enfrentarla y lo que es más grave, su situación interna muy particular plantea al liderazgo venezolano escenarios, quizás más inciertos que otros países con economías más débiles y con menores oportunidades para salir a flote. La actual situación interna venezolana muy especial, se caracteriza por una inestabilidad sin precedentes en la era democrática, determinada por un liderazgo político que rige los destinos del país que concentra todos los poderes del estamento estatal. Que distorsiona el rumbo cada vez más incierto, ante la mirada perpleja de una comunidad internacional, que no haya explicación lógica del por qué una nación con tantos recursos presenta los índices socio económicos más bajos del mundo y un futuro comprometido. El riesgo país de Venezuela se ubica en seiscientos cuatro puntos, el segundo más alto del mundo, Aristimuño, Herrera & Asociados (2010), lo cual ilustra la magnitud de la exigencia para los líderes necesarios para enfrentar la crisis venezolana. Siguiendo con el análisis que nos ocupa en este aparte, el índice referido se asocia casi proporcionalmente con el tamaño de la incertidumbre; para la inversión privada interna o nacional y para la externa o extranjera internacional. Dibuja además, unos escenarios sombríos, oscuros e inciertos para lideres y seguidores. Se alimenta el escepticismo y la inseguridad para gestionar las organizaciones ya existentes, pero, lo que es más grave, para crear nuevas que generen la rentabilidad lógica para la prosperidad de sus dueños, trabajadores y colectivos. Señala el autor del escrito analizado, García, (2008), que la eficiencia del líder del sector público, está determinada por el manejo de las estrategias, flexibilidad en la ejecución de políticas, el conocimiento de las herramientas para la formulación y seguimiento de proyectos lo que es común para el sector privado. Considera importante la equidad social y la justicia social y ciudadana. Ahora bien, en opinión de quien suscribe este informe, en la actual Venezuela el gobierno nacional ataca, persigue, desmembra la iniciativa privada. Cierra empresas prósperas con tradición de laboriosas y sólidas históricamente reconocidas en el ámbito nacional y externo. El ejecutivo, ente a quien la constitución y leyes de la república le atribuyen la obligación de promover la industria privada y la prosperidad de sus conciudadanos, adelanta una política de expropiaciones y cierre de empresas. La agricultura está deprimida, con la excusa y lema de soberanía alimentaria, expropia fincas y centros productivos agrícolas y pecuarios en la plenitud de su producción. Pasando éstas a ser cementerios y tierras arruinadas e improductivas. Crece el desempleo. Morales Colon (2010). Un país con restricciones económicas y financieras en materia de divisas y financiamiento. Tendencia a centralizar la banca. Limitaciones en las libertades económicas constitucionales. Intolerancia política. A lo anterior se adiciona una concentración política de todos los poderes del estado en la figura presidencial. No hay independencia de poderes públicos. Una realidad poco atractiva para inversionistas nacionales y externos. Estas pudieran ser algunas razones que ilustran la inseguridad política, económica y social que hacen que no haya inversión en el país . Ahora bien, que difícil resulta encontrar líderes que se muevan y sean exitosos en este escenario. Orientación, Valores y ética en el liderazgo. El autor del artículo que se analiza, opina que el líder ideal, tanto para el presente como para el futuro, ha se res un difusor de creencias y valores organizacionales para la obtención de los objetivos organizacionales. Debe poseer la virtud de saber escuchar, trabajar con empatía e identificar el liderazgo informal. Gerenciar el cambio y ante la incertidumbre ser audaz. Todos estos atributos deben ser comunes para el liderazgo público y privado. García, (2008). También le asigna relevante importancia a los valores, los cuales define como creencias, principios intrínsecos, que proporcionan sincronía ética con la organización. García, (2008). Presenta una clasificación de éstos en dos vertientes una final y otra instrumental. Los primeros vinculados a objetivos existenciales y los segundos como medios operativos para la consecución de los valores finales. Le asigna especial importancia a los valores personales, clasificación asociada a los valores finales. En el contenido de la lectura se cuestiona se contrasta el comportamiento ético y de valores descritos en el contexto de la administración pública. Plantea la interrogante si estos valores e implicaciones éticas están presentes en la administración de la cosa pública que ha estado históricamente signada por una imagen de ineficiencia, improductividad, corrupción, nepotismo y clientelismo político. García,(2008). Sin embargo le atribuye a la globalización, adelantos tecnológicos y comunicacionales y otros adelantos organizacionales experimentados en la administración privada, cierta influencia en el cambio que, según el autor, se ven hoy en día. Algunas diferencias y similitudes entre el Liderazgo Público y Privado. Un primer comentario es que en lo público hay que distinguir el líder político del líder administrativo. Aunque teniendo algunas competencias similares, una diferencia importante es que la acción del líder público se dirige al exterior de la organización (gestiona colectividades) mientras que el privado es justo lo contrario, actúa hacia dentro de su organización. Garrigues, (2001) indicó que el tiempo para ambos es distinto, lo que motiva que dispongan de diferente capacidad. El líder en sector público se orienta más al proceso y menos a los resultados, el primero le da mayor peso al cumplimiento de normas y procedimientos, por eso sienten menor autonomía que el privado en la forma de gestionar. He aquí otras similitudes y diferencias: Silva F, (2005). Similitudes: Silva F, (2005). • Cuando en una organización las personas actúan conjuntamente con el líder para la consecución de propósitos comunes, siempre estarán presentes aspectos relativos a la planificación, organización, dirección de personal relaciones laborales y otros componentes típicos de la acción administrativa. • Para la resolución de problemas administrativos, se producen ciertos principios de carácter general que incluyen: División del trabajo, organización de las funciones y responsabilidades, normas de planificación, programación y presupuesto, controles contables y otros aspectos que son útiles para el líder en todas las modalidades de administración y adaptables a las particularidades de cada organización. Diferencias: Silva F, (2005). • El liderazgo en la administración pública trabaja con un conjunto de poderes, organización, personal y métodos que se ocupa de realizar la voluntad del estado. El privado, por su parte, con un sistema que se preocupa de la organización, del personal y los métodos relacionados con la consecución de objetivos empresariales, y la obtención de márgenes adecuados de rentabilidad. • En el liderazgo público existe la idea popular es que la administración gubernamental es burocrática, que se caracteriza por el papeleo, la influencia y la indolencia, y algunos señalan, además, que exige gastos innecesarios, es ineficaz, lenta y tramitadora. La contrapartida a ésta el líder privado o empresarial , que aparentemente es eficaz, rápida en sus tramitaciones y puede exhibir un rendimiento cónsono con la rentabilidad. • El liderazgo público proporciona servicios sociales para toda la colectividad. Muchos de estos servicios son intangibles, por los cuales el público consumidor no paga honorarios. • El objeto del líder gubernamental es prestar servicio a toda la comunidad procurando el bienestar colectivo, salvaguardando sus instituciones y procurando la continuidad de los servicios. • Por el contrario, el privado, se rige por el lucro a obtener, sirve a una parte o sector de la sociedad. • El liderazgo público se caracteriza por una reglamentación rígida, que no puede cambiar la voluntad. La responsabilidad ante el Ejecutivo y la interferencia de éste, los controles y aplicación de las leyes por cortes y tribunales del poder judicial, son características que le dan a la administración pública poco parecido con los negocios privados. • La acción del proceso político tiene una mayor y directa influencia en el líder público, aún cuando las políticas públicas también afectan a la administración privada. • Existe una mayor tendencia en el líder público de cuidar el que sus acciones se ajusten a las prescripciones normativas y legales. En el caso del sector privado, el líder también consulta "códigos y reglamentos" para proceder con distinto fin, no para saber qué es lo que va a hacer, sino para encontrar la forma de hacer lo que se propone sin ser sancionado. En otras palabras, las leyes sirven al liderazgo público para saber: Qué es lo que debe hacer, y al privado: Para qué es lo que no debe hacer. Silva F, (2005). Capital Intelectual en los Sectores Público y Privado. Utilizando las diversas definiciones de Capital intelectual con la finalidad de comprender con mayor facilidad el desarrollo de este informe se observarán algunos de sus elementos presentes tanto en el sector público como en el privado. Brooking, (1997), por ejemplo, lo define como la combinación de activos inmateriales que permiten que una empresa funcione. Hay que acotar que esta definición nace desde la óptica de la empresa privada. La anterior aseveración también es válida para la administración Gubernamental, si se toma en cuenta que la eficiencia en la prestación de los servicios públicos no depende únicamente del manejo de los activos tangibles, sino que, se encuentra directamente relacionada con la eficiencia y la preparación profesional y técnica con los cuales se gestionan. Stewart, (1998), define el capital intelectual como el material intelectual, el conocimiento, la información, la propiedad intelectual y la experiencia, que puede utilizarse para crear valor. Es fuerza cerebral colectiva. Es difícil de identificar y aún más de distribuir eficazmente. Pero quien la encuentra y la explota, triunfa. Asimismo afirma el referido autor que en la nueva era, la riqueza es producto del conocimiento. Este y la información se han convertido en las materias primas fundamentales de la economía y sus productos más importantes. Esta es quizás, la definición más preclara de capital Intelectual, perfectamente adaptable a ambos tipos de administraciones tratadas. García, (2008), en el escrito objeto del presente análisis, concluye en sintonía con los autores citados, en que la formación y la capacitación es una inversión, no un gasto; el tiempo que el personal aproveche para aplicar los conocimientos recién adquiridos es ya una ventaja para la empresa que lo capacitó. Es imperativo mantener al personal y a los mismos directivos formados y capacitados, de manera que puedan apoyarse en ello como ventaja competitiva. No se trata de planificar todos los cursos existentes o contratar especialistas en todas las áreas, sino de definir específicamente las áreas y los temas en que se requiere actualizar, mejorar o implementar. Esto es válido para lo público y para lo privado. Se Buscan Líderes para la Venezuela de hoy y futura. Ya se analizó la realidad del país con las características más relevantes, según la opinión y óptica del autor de este escrito y que plantea el dilema de escoger o buscar líderes que sean capaces de enfrentarse al tétrico y desalentador marco de movilidad descrito para el país presente y futuro. En una referencia de un escrito anterior del propio autor se decía que las dos palancas de la adversidad son la decisión y la acción que deben guiar al buen líder para superarla y transformarla en situaciones prosperas que lo beneficien a él y a sus seguidores. Alvarez de Mon (2003). Lo expresado debe ser la piedra angular del líder venezolano para enfrentar el reto: tener la decisión y accionar en consecuencia. Nada sencillo, pero labor loable y objeto del mayor reconocimiento. Surge la necesidad de que se de paso a una nueva generación de líderes gerenciales que puedan enfrentar las características en la actualidad de un escenario turbulento en donde se manifiestan grandes amenazas, pero también oportunidades. Fernández, M (2009) enuncia, que cuando se habla del liderazgo en Venezuela, debemos iniciar con el liderazgo político que actualmente condiciona todas las interacciones de las organizaciones a nivel interno y externo, si consideramos para ello todas las leyes que están obstaculizando el crecimiento empresarial, con políticas poco reales, existiendo un desface, cuando en el resto del mundo se desarrollan e implementan estrategias para el mejor uso de los adelantos tecnológicos, el conocimiento y la información. Actualmente las organizaciones venezolanas enfrentan a una gran incertidumbre, en la cual surgen diversas amenazas para las organizaciones, entre las cuales se mencionan, Fernández, M (2009): a) Política macroeconómica sostenida en medidas radicales tales como: Control Cambiario, Políticas Fiscales, expropiaciones, inseguridad jurídica que asfixian a la empresa y generan caos a la hora de tomar decisiones, situación desconcertante para muchos lideres, quienes trabajan en un entorno en extremos cambiante y fuera de su círculo de control, Fernández, M (2009). b) Ingreso al país de Capital Intelectual extranjero, es decir muchas empresas transnacionales depositan su confianza en gente de la corporación de fuera, lo que ocasiona desmotivación del personal existente y un liderazgo con poco conocimiento del entorno político, económico y social venezolano. Fernández, M (2009). c) Fuga de capital intelectual de gran valía, actualmente en Venezuela son muchos los jóvenes profesionales que ven una salida acertada a la incertidumbre, en países que ofrecen oportunidades profesionales y de crecimiento para estos, así como una remuneración bastante atractiva. Fernández, M (2009). d) La alta tasa de desempleo, ocasiona que al existir una alta demanda por empleo y la oferta sea menor, y más aún se acrecienta con el cierre de empresas y las expropiaciones. Esto permite que los incentivos económicos de las empresas no estén acorde con la preparación de muchos candidatos, lo que genera desmotivación. Fernández, M (2009). Otro autor comenta sobre las fortalezas. Bellatrix, Y (2008). Dice al respecto que el los lideres Venezolanos tienden ser personas entusiastas, dinámicas que buscan el logro de los objetivos, están abiertos a las posibilidades de mejorar siempre y cuando se les den las herramientas. Afirma igualmente que aprovechan sus experiencias y las adecuan a los cambios del entorno, su accionar es alegre y esto los ayuda para las relaciones interpersonales, tienen habilidades técnicas, habilidades de conocimientos. Bellatrix, Y (2008). Ahora bien es interesante conocer la opinión de otro estudioso del caso venezolano, Madrigal, A (2009), al referirse a las debilidades para enfrentar la crisis que el líder criollo no aprovecha el hecho de que Los planes del estado van dirigidos hacia un sector específico y muchas veces las empresas que deben aprovechar esta situación no cuentan con líderes preparados para lograr el máximo rendimiento de esta situación. Que privilegian la actividad que gravita el negocio petrolero y se descuidad otras oportunidades. A manera de conclusión Se pudiera inferir entonces, que las empresas venezolanas requieren de un liderazgo gerencial proactivo, dinámico, participativo, creativo, innovador, estratega, que conlleve a la organización a su desarrollo, a cumplir con su misión, visión, objetivos establecidos, sabiendo aprovechar adecuadamente todos los recursos que componen a la empresa. Debe estar preparado par enfrentar cambios diametrales, sin caer en la improvisación. Es imperativo que el líder posea las facultades necesarias para establecer las estrategias que deriven del análisis periódico y sostenido de las debilidades y priorizar planes en torno a las oportunidades. Apuntalar las fortalezas, realizar alianzas estratégicas y utilizar recursos nacionales. Ser motivador, dar esperanzas, vender sueños e ideas. Unir a sus seguidores en sus problemas comunes, fortalecedor de las instituciones. Mantener las instituciones, luchar por sus principios y por lo que se cree. Ser fuerte en la contingencia, ser creativo y estar siempre dispuesto. Referencias de Apoyo García, (2008), Liderazgo: Reflexiones para su fortalecimiento en el ámbito de la administración Pública. http://www.monografias.com/trabajos66/administracion-publicaprivada/administracion-publica-privada.shtml . Conexión Enero 2011 Mora, V (2010). WWW.gestiopolis.com/canales/ger/nueva-generacion-de-lideresgerenciales-2.htm. Conexión 2 Enero 2011. http://www.gestiopolis.com/canales8/ger/alcance-del-liderazgo-gerencialvenezolano.htm. Conexión Enero 2011 . Barcelata, H (2010). “La crisis financiera en http//www.eumed.net/ce/2010a/ .Conexión Enero 2011. los Estados Unidos”