Facultad de Medicina FALLECIMIENTO DE DOÑA CELIA SEGURA Autor Administrator 13/10/2015 Facultad de Medicina lamenta el fallecimiento de Doña Celia Segura, una mujer líder en su comunidad de Amaicha del Valle y quien fuera Pachamama, oportunidad en la que su participación en el desarrollo del Programa de Acción Afirmativa de esta Facultad resultó fundamental. Compartimos la carta y los términos de la misma, que nuestro ex Decano, el Dr. Mateo Martínez enviara al diario La Gaceta con motivo de su fallecimiento. Carta del Dr. Mateo Martínez al diario La Gaceta LA GACETA informó sobre la muerte de Celia Segura y lamenté no haber acompañado su partida. Dice que presintió su muerte y tomó recaudos. No extraña que pidiera coplas y bailes rodeada de gente; reseñó el cuidado de sus hijos y resaltó su imagen con ropas típicas, vincha y guardas; todo un símbolo de paz y dulzura contrastante con una personalidad esforzada que trabajaba por el bienestar del pueblo, su economía y el rescate de conocimientos fitoterápicos. Mas considero necesario señalar otra faceta suya. En 2012 la Facultad de Medicina creó un Programa de Acción Afirmativa para posibilitar el ingreso a medicina de jóvenes Calchaquíes. Sus fundamentos eran claros: al ingresar a primer año la carrera reproducía patrones pre-existentes que excluían comunidades con barreras o pautas diferentes de los grupos dominantes. Amparados en valores como bien común, justicia compensatoria, igualdad entre las personas y reconociendo diversidad y multiculturalismo como demandas legítimas de grupos y minorías étnicas, se deseaba incrementar oportunidades educativas para quienes tienen 400 años de exclusión. También se quería contribuir a educar a la institución y la sociedad con la presencia del ausente histórico, con la palabra del callado que se haría escuchar en aulas y laboratorios, enfrentando prejuicios y estereotipos de mentes, discursos y prácticas universitarias. Teóricamente estaba todo claro, más se sabe que de la idea al hecho hay largo trecho. Ese proyecto innovador, complejo y costoso exigía agotadores consensos con caciques, intendentes y delegados de Salta, Tucumán, Catamarca; esfuerzo que hubiere sido estéril sin el acompañamiento y la fuerza espiritual de la Pachamama; su apoyo fue simplemente crucial; sin ella, eso no se hacía. Lo comprendía todo y para valorarla mejor vaya una anécdota: era abril de 2013 y se inauguraba el programa, Doña Celia conmovió diciendo: “estamos emocionados y agradecidos porque han abierto su corazón y pedimos a otras carreras que hagan lo mismo; y ustedes jóvenes recíbanse y vuelvan a la comunidad a darnos su saber; estudien mucho que no queremos ser atendidos por malos médicos, porque no cualquiera es médico, porque el que estudia medicina es porque tiene un gran corazón y gran amor al prójimo, porque es una carrera para dar amor”. En 40 años de universitario conocí muchos educadores pero ningún autor ni tratado que expresara con esa sencillez, claridad y fuerza moral, la responsabilidad de estudiar por la salud y bienestar de la gente. Eso también es doña Celia; y no creo casual que eligiera el 12 de octubre para sus funerales.Demetrio Mateo Martínez [email protected] http://www.fm.unt.edu.ar Potenciado por Joomla! Generado: 7 September, 2016, 11:24