RESUMEN EJECUTIVO DE LA EVALUACION EXTERNA DEL PAJA, CNE-2003. Hasta el surgimiento de los antecesores del PAJA, los programas de atención social enfocados a cubrir personas en condiciones de pobreza extrema, habían dejado de lado a la población jornalera agrícola, debido principalmente a que su alta movilidad dificulta su atención, ya que no se pueden constituir grupos de gestión, los cuales son una parte nodal en los programas sociales establecidos hasta entonces. Debido a lo anterior, en 1988 surge el Programa de Desarrollo Social para los Jornaleros Agrícolas en los Valles de Sinaloa (PRODESJA), el cual desarrolla el primer intento de atención a la población jornalera en pobreza extrema. Para 1990, se pone en marcha el Programa Nacional con Jornaleros Agrícolas (PRONJAG), el cual toma como una característica de esta población, su constante movilidad entre las diversas zonas de cultivo, siguiendo muchas veces rutas migratorias definidas por los patrones de cultivo, debido a esto, una de las principales características que diferencia al PRONJAG con respecto a otros programas sociales que combaten la pobreza extrema, es que organiza su estrategia de intervención en base a una serie de investigaciones (diagnósticos), estructurando sus acciones en función de las características de cada población objetivo en particular en cada región. A partir del año 2001 cambio su nombre a Programa de Atención a Jornaleros Agrícolas (PAJA). En la actualidad, el PAJA tiene presencia en 17 entidades federativas: Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Durango, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Morelos, Nayarit, Oaxaca, Puebla, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas y Veracruz. El Programa otorga diferentes tipos de apoyo según el tipo de zona, las cuales se dividen en: 1) zonas de atracción donde el Programa desarrolla para estas zonas estrategias de atención que aminoran y generan un piso mínimo de necesidades básicas que tienen los migrantes, 2) zonas de expulsión, regiones donde existe principalmente agricultura de subsistencia, y que corresponden a las entidades más atrasadas del país, como Oaxaca y Guerrero, y 3) zonas intermedias, regiones donde coexisten ambos tipos de características. 1. Pertinencia del PAJA El Plan Nacional de Desarrollo establece como uno de sus principales propósitos el combate a la pobreza, y en particular de la pobreza rural. Ello se hace evidente en los objetivos rectores en materia de desarrollo social y humano. En particular, en lo referente al combate de la pobreza es de relevancia el Objetivo rector 1, el cual señala como propósito “mejorar los niveles de educación y bienestar de los mexicanos”. Tres son las estrategias que en materia de combate a la pobreza rural destacan en el PND: a) Diseñar y aplicar programas para disminuir la pobreza y eliminar los factores que provocan su transmisión generacional, que amplíen su acceso a infraestructura básica y brinden a los miembros más desprotegidos de la sociedad oportunidades para tener acceso al desarrollo y a la prosperidad. 1 b) Capacitar y organizar a la población rural para promover su integración al desarrollo productivo del país, y propiciar que sus derechos de propiedad de la tierra se traduzcan en un mejor nivel de vida. c) Impulsar la integración productiva de los sujetos agrarios. Como parte de la estrategia en contra de la pobreza rural, el Programa de Atención a Jornaleros Agrícolas (PAJA) tiene como propósito: “Contribuir al mejoramiento de las condiciones de vida y de trabajo de la población jornalera agrícola, a partir de una atención integral y oportuna a través de procesos de promoción social, de coordinación institucional con los tres órdenes de gobierno y de concertación social con productores, organismos sociales y los mismos beneficiarios y beneficiarias” 1 . Los objetivos del PAJA y sus vertientes de actuación son consistentes con los objetivos y estrategias del PND, y se amoldan de acuerdo con en el siguiente cuadro. Además, las acciones que se toman en el PAJA son consistentes con las recomendaciones del Banco Mundial (2001), respecto de las acciones que se deben tomar en el combate a la pobreza. Estas acciones son: a) Incrementar la seguridad de los pobres, b) Suministrarles facultades, y c) Promover las oportunidades de los mismos. Incrementar la seguridad significa reducir la vulnerabilidad de las personas pobres ante riesgos de enfermedades, de salud, reveses económicos, desastres naturales, etc. En este sentido, el PAJA promueve inversiones en aspectos como apoyos alimenticios, saneamiento ambiental, salud, agua potable y alimentación. Incrementar sus oportunidades significa, entre otras cosas, incrementar sus activos en capital humano; en este sentido el PAJA promueve inversiones en empleo, capacitación y productividad que permiten el mejoramiento de las habilidades de la población jornalera agrícola y de este modo mejoran sus oportunidades. Facilitar las facultades de la gente pobre significa remover las barreras que se alzan en contra de la población, y que les impiden participar en los mercados y en los procesos políticos y sociales que les afectan. En este sentido el PAJA promueve la procuración de justicia. Asimismo, las otras acciones que promueven las oportunidades, como una mejor educación, redundan en una mayor posibilidad de participación de los individuos en los mercados y en los procesos políticos y sociales. El PAJA es un programa focalizado que atiende la problemática económica, social y productiva de un segmento de la población agrícola con ingresos y condiciones de vida sumamente precarias. Al respecto, debe señalarse que los objetivos del PAJA son compatibles con los objetivos establecidos en el PND y recomendaciones del Banco Mundial, en el sentido de que está destinado a reducir los efectos de la pobreza extrema. Adicionalmente, tanto su diseño focalizado como su cobertura de uno de los segmentos mas paupérrimos de la población rural, es consistente con las 1 Reglas de Operación 2003 para el Programa de Atención a los Jornaleros Agrícolas, SEDESOL, Diario Oficial de la Federación, 5 de Marzo de 2003, pp. 3. 2 recomendaciones de la literatura moderna en materia de combate a la pobreza, en el sentido de que este programa toma en cuenta la extensión de la pobreza y el grado diferenciación de la misma. 2. Complementariedad y Duplicidad del PAJA Como consecuencia del análisis llevado a cabo por parte de la Evaluación se observa que el PAJA puede ser susceptible de complementarse de manera mas eficiente con otros programas sociales mediante dos vías: creando vínculos con éstos para poder tener una mayor cobertura; y/o por medio de apoyos diferentes otorgados a los beneficiarios del PAJA focalización. Por otro lado, a raíz del análisis, de la población objetivo, los criterios de selección, los objetivos específicos y los tipos de apoyo, se considera que el PAJA puede ser susceptible de complementariedad con PAR-DICONSA, LICONSA, PAEI, INAPAM, PCS, PDHO, PET, PIE, PIC, PTC, PJM, POP y PM. El resultado de esta complementariedad se presenta el siguiente cuadro, por tipos de apoyos generales del PAJA. Vivienda y Saneamiento Ambiental/ Transitoria y Permanente Agua potable Salud y seguridad social Alimentación y abasto Educación, cultura y recreación LICONSA DICONSA LICONSA INAMP PCS PDHO PCS PDHO PIE PIC PJM PIE PIC PJM Empleo, capacitación y productividad Procur Tránsito ación migratori de o justicia Apoyo a continge ncias Otros tipos de apoyos DICONSA LICONSA PTC PAEI PCS PCS INAMP PCS PDHO PET PIE PIC PJM PIE PIC PJM PIE PIC PJM PM PM PM 5 9 7 PAEI PCS PCS PCS PCS PET PIE PIC PJM PIE PIC PJM PIE PIC PJM PIE PIC PJM 4 4 PM 9 7 PCS PDHO PET PIE PIC PJM POP PM PM 5 5 11 Fuente: Elaboración propia basado en las reglas de operación de los Programas sociales. Los programas sociales que pueden ser susceptibles de complementariedad directa con el PAJA, debido a los proyectos que son llevados a cabo y que pueden apoyar todas las diferentes vertientes del PAJA son: PJM, PIE y el PIC. Las acciones del PAJA con relación al apoyo del tránsito migratorio y a las contingencias, no son susceptibles de tener complementariedad por parte de la mayoría de los demás programas sociales, ya que, con excepción de PJM, PIE, PCS y el PIC, ningún Programa abarca ese tipo de apoyo. 3 2.1. Resultado del levantamiento Los jornaleros indicaron tener apoyo por parte del DICONSA, Programa de Desarrollo Humano (PDHO), PROCAMPO, APOYO A LA PALABRA, ALIANZA PARA EL CAMPO, Programa de Empleo Temporal (PET), Gobierno del Estado, DIF, Secretaría de Educación Pública (SEP), Otros. 2.2. Colaboración Institucional por vertiente Con el objetivo de contribuir al mejoramiento de las condiciones de vida y de trabajo de la población jornalera agrícola, diferentes instituciones públicas (federales, estatales y municipales), privadas y sociales han realizado esfuerzos considerables de atención a la misma. De esta forma tenemos que en materia de: a) Educación, se impulsa a través de acuerdos y convenios con la Secretaría de Educación Pública (SEP), el Consejo Nacional de Fomento Educativo (CONAFE), el Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA), la SEDESOL. b) Salud y seguridad social2, se participa con instituciones como la Secretaría de Salud (SSA), el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF). c) Vivienda y saneamiento ambiental, en conjunto con la SEDESOL, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA), la SSA, el IMSS y diferentes institutos estatales de vivienda. d) Nutrición, a través de convenios y acuerdos con el Programa de Abasto Rural (Diconsa), el Programa de Abasto Social de Leche (Liconsa), el Programa de Tortilla, el DIF, el IMSS y la SSA, así como diferentes universidades e institutos nutricionales. e) Empleo, capacitación y productividad, en colaboración con STPS, la Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo (PROFEDET), la SAGARPA y la SEMARNAT, así como, de diferentes centros educativos que integran el sistema nacional de educación tecnológica (Conalep, Cecatis y Cebetis), se fomenta el desarrollo de proyectos productivos y de bienestar social, así como de acciones de salud y seguridad en el trabajo. 2.3. Coordinación institucional. Debido a la gran complejidad de la problemática que enfrenta la población jornalera agrícola se realizó el Programa Intersectorial de Atención a Jornaleros Agrícolas (PIAJA), con el fin de unificar esfuerzos y generar un esquema integral de 2 En 2002 participo en el Reglamento de la Seguridad Social para el Campo y la creación de una Comisión Nacional de Seguimiento del Nuevo Sistema de Aseguramiento de los Trabajadores Eventuales del Campo, en la que participan instituciones como, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), la SEDESOL, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA) y el IMSS, así como organismos empresariales y de trabajadores. 4 atención. En este Programa participan3 la SSA, STPS, SEP, SEDESOL, CONACULTA; IMSS, INI, INEA, CONAFE, PROFEDET, SRA, DIF, CONADIC, IMJ y CDHDF. A través de las diversas reuniones de trabajo se iniciaron las labores para definir las entidades federativas en las que se impulsará la operación del PIAJA. Además, con el fin de intercambiar información que les sirva para sustentar sus propuestas estatales, se formaron subcomisiones de Salud, Educación y Trabajo y Bienestar Social. Asimismo, se realizan cruces de las coberturas geográficas con los estados, regiones y localidades donde opera el PAJA y participa el PIAJA, con el fin de hacer coincidir sus servicios en nuevas unidades de trabajo. A pesar de que los programas sociales, antes mencionados, permitan generar apoyos específicos a los jornaleros, el PAJA tiene un papel determinante para poder canalizar tales apoyos de estos programas, debido a que una de las características que tiene el PAJA es apoyar a población que se encuentra en constante movilidad, algo que ningún otro Programa social hace. 2.4. Limitantes para los acuerdos y convenios institucionales. Debido a las dificultades que enfrenta la población jornalero agrícola, las instancias públicas federales atienden de manera limitada a dicha población, manifestándose los siguientes problemas4: a) Cobertura limitada. b) Falta infraestructura básica (agua potable, alumbrado, drenaje) para brindar diferentes servicios como los educativos y de salud. c) Escasez de personal operativo. d) Modelos de atención no adecuados para población migrante. e) Recursos limitados para la atención de la población jornalera agrícola. 3. Análisis de la congruencia entre actividades y objetivos del programa. La población beneficiaria por el programa en 2002 era los jornaleros en pobreza extrema y en el 2003 la población beneficiaria son jornaleros en pobreza. De las 17 entidades federativas en las que esta actuando el programa, en 7 de ellas (que representan el 41.17% del total) la proporción de población, con un ingreso de hasta dos salarios mínimos, se localiza por debajo del 50% (Sinaloa, Tamaulipas, Sonora, Jalisco, Chihuahua, Baja California Sur y Baja California). Existe congruencia entre las diferentes actividades realizadas por el Programa y lo que se había estipulado en las Reglas de Operación del programa para el 2003, en lo referente a la asignación de recursos a proyectos o acciones en promoción social e inversión. 3 Segundo Informe Trimestral 2003 (Periodo Enero - Junio) Programa de Atención a Jornaleros Agrícolas. Dirección General Adjunta de Desarrollo de Pueblos y Comunidades Indígenas y de Atención a Jornaleros Agrícolas. 4 Programa Intersectorial de Atención a Jornaleros Agrícolas, 2001 5 El programa ha logrado la coordinación entre las diferentes instituciones y los mismos beneficiarios, a través de las vertientes de concertación social y coordinación institucional, a través de las diferentes aportaciones que cada uno de ellos realiza para la ejecución de los diferentes proyectos y acciones en cada una de las entidades federativas. El Programa muestra coherencia entre las actividades que realiza y los objetivos propuestos en las Reglas de Operación, ya que si se observa cierto grado de participación y cooperación entre los diferentes agentes vinculados a las acciones y proyectos que realiza el programa, incluyendo a los beneficiarios del mismo y a los productores agrícolas; contribuyendo con ello a la creación de procesos participativos, corresponsables y autogestivos. Las Reglas de Operación 2002 clasifica a la población jornalera en: migrantes, asentados o locales. En el 2003 dichas reglas solo los clasifican en: migrantes y locales. En las Reglas de Operación 2003 se establece una condición para obtener la ayuda del programa en este tipo de apoyos: siempre que los resultados demuestren los beneficios que se les han propiciado a los jornaleros agrícolas. En las zonas de expulsión, la construcción, ampliación y rehabilitación de sistemas de agua potable requerirán la aportación de las autoridades estatales o municipales o de los beneficiarios. En las Reglas de Operación 2003 se amplían las acciones a realizar en este tipo de apoyo. Ahora no solo se limitan a la aportación de un capital inicial, sino también a la construcción, rehabilitación y equipamiento de locales de abasto. En el 2003 las becas otorgadas para menores que asistan a los servicios educativos, por los proyectos impulsados, se realizan solo en especie. En cambio en el 2002 estas becas eran tanto económicas como en especie. Además en 2003 se introduce una condición para la obtención de los mencionados apoyos: “siempre y cuando los beneficiarios declaren por escrito no recibir apoyos del Programa de Desarrollo Humano Oportunidades De 2002 a 2003 cambia el Programa con el cual se coordinarán esfuerzos para apoyar a los jornaleros agrícolas en la procuración de justicia. En 2002 era el Programa de Identidad Jurídica y en 2003 el Programa de Desarrollo Local (Microrregiones), en su modalidad de Identidad y Certeza Jurídica En 2003, en las entidades federativas de atracción se cambio el término de inmigrante por migrante y locales. En las zonas de carácter intermedio se cambio jornaleros inmigrantes y emigrantes por jornaleros migrantes y locales. En las Reglas de Operación 2003 se necesita, como algunos de los requisitos, que el grupo de jornaleros agrícolas a atender en una unidad de trabajo tengan condiciones de pobreza, y que sean jefes o jefas de familia. En cambio, para 2002 se necesitaba que el grupo a atender tuviera condiciones de extrema pobreza, se daba prioridad a las familias con tradición migratoria, y que fueran preferentemente, jefes de familia. Por lo tanto se podía atender en 2002 a personas que no fueran jefes de familia. 6 En el 2003, en las zonas de atracción se agrega una condición para actuar en albergues y campamentos: “compromiso por escrito, de parte del productor, de participar económicamente y brindar apoyo a las labores de promoción social que se impulsen en beneficio de sus trabajadores y trabajadoras”. En las Reglas de Operación 2003 se pueden observar cambios en los teléfonos a los cuales se pueden realizar quejas y denuncias desde la Ciudad de México. En estas reglas también se omiten las obligaciones que tienen las persona(s) u organización(es) que presente(n) quejas y/o denuncias, lo cual si se especifica en las Reglas de Operación 2002. 4. Análisis de la congruencia entre las Reglas de Operación. De la información recabada del levantamiento podemos saber “A qué se dedica la mayor parte del año la el jefe de familia.” En lo que se refiere a albergue, la mayoría de los jefes de familia, no solos y solos, tienen como ocupación principal durante el año la de jornalero; la segunda ocupación que tienen los jornaleros no solo en los albergues es la de campesino, mientras que para los jefes de familia solos es otro. El apoyo a “Transito Migratorio” estipulado en las Reglas de Operación del Programa de Atención a Jornaleros Agrícolas para el ejercicio del 2003, es muy limitado, por lo que no se esta atendiendo al transito migratorio durante los momentos de este proceso tal como especifican las reglas de operación. La pláticas de capacitación pueden permitir a las personas realizar más rápido su trabajo en el campo, pero no necesariamente contribuyen a alcanzar el objetivo que se plantea en las Reglas de Operación del PAJA para el 2003, el cual es que estas contribuyan a que los jornaleros accedan a actividades mejor remuneradas; es decir, que sí están ayudando a mejorar las habilidades y destrezas de los jornaleros, pero no están ayudando a los jornaleros a acceder a actividades mejor remuneradas. En las mencionadas reglas, en el apartado de “Empleo, capacitación y productividad” se menciona: “En las zonas de atracción se podrán desarrollar talleres y cursos de capacitación para el trabajo y asistencia técnica que mejoren las habilidades y destrezas de los jornaleros, con el fin de que accedan a labores mejor remuneradas...”.5 Las pláticas o campañas realizadas contribuyeron a que una importante proporción de la población beneficiada con ellas realizara más rápido su trabajo6. En las localidades de atracción esta proporción fue de 65% y en las de expulsión fue de 53%.(ver el siguiente cuadro). 5 Reglas de Operación del Programa de Atención a Jornaleros Agrícolas para el ejercicio fiscal 2002, publicadas en el Diario Oficial de la Federación el 15 de marzo de 2002. 6 Es importante precisar que las acciones de promoción social y capacitación no contemplan exclusivamente pláticas y campañas en el ámbito de la capacitación y productividad. 7 De igual manera que cuando se analizó el apartado de “Promoción social y capacitación” en los diferentes albergues, podemos concluir que en las localidades, el que estas pláticas ayuden a las personas a realizar más rápido su trabajo en el campo no necesariamente contribuye a alcanzar el objetivo que se plantea en las Reglas de Operación del PAJA para el 2003, el cual es que estas contribuyan a que los jornaleros accedan a actividades mejor remuneradas; es decir, que sí están ayudando a mejorar las habilidades y destrezas de los jornaleros, pero no están ayudando a los jornaleros a acceder a actividades mejor remuneradas. 5. Cumplimiento de Metas Físicas y Financieras del PAJA En el agregado nacional el programa cumplió con el 90% de las metas físicas establecidas al principio del año. Este efecto pudo ser causado por el recorte de presupuesto y personal. Sin embargo, en inversión existe el 96% de metas cumplidas. Este porcentaje se incrementa debido a que algunos casos no existían proyectos y fueron implementados. En el caso de promoción social las metas físicas se cumplieron en el 89%. El índice de proyectos inexistentes nos indica que la mayoría de las unidades de trabajo cumplieron con realizar el proyecto; sin embargo, en Canal Zacatecas y Playitas los equipamientos de las cisternas en el momento de realizar la encuesta no se habían realizado; asimismo sucedió en la Vega donde no se había realizado un fomento agrícola (Producción de Maíz para la comercialización de la hoja). 6. Transparencia del PAJA De la población entrevistada en las localidades de expulsión, el 33% tuvo problemas para recibir las despensas, mientras que el 67% no tuvo problema alguno. n los albergues, el 13% tuvo problemas para recibir las despensas. En los albergues solo un 23.23% de la población entrevista manifestó que si existía algún comité, comisión o grupo de trabajo, lo cual es muy bajo si se compara con el 73 y 90% de las localidades de atracción y expulsión; y el 27% atracción y expulsión respectivamente. Las diferentes actividades realizadas por los comités, comisiones grupos de trabajo, en albergues y localidades, muestran transparencia ya que, con base en los datos analizados, se efectúan en apego a los establecido en las reglas de operación, es decir que al realizar la identificación de necesidades se supone atienden las necesidades de la población jornalera agrícola en pobreza. Con base en lo anterior se puede afirmar que el Programa esta operando con transparencia en lo referente a proyectos y acciones de inversión en la vertiente de mejoramiento de la vivienda, ya que como requisito para la incorporación a este tipo de proyectos se cumple con lo que se estipula en las Reglas de Operación (dinero, 8 entendido como cuotas de recuperación y la asistencia de los beneficiarios, es decir mano de obra). 7. Problemas Administrativos del PAJA Muchos de los problemas administrativos del PAJA que limitan la operación e implementación de proyectos de promoción social e inversión por parte del programa ya se habían detectado en las evaluaciones externas de 2002 y 2003 del mismo (falta de pago, pago extemporáneo, inexistencia de personal de base, carencia de recursos financieros, etc.), sin embargo resulta preocupante tanto la permanencia como el agravamiento de las dificultades administrativas que enfrenta el programa, así como el surgimiento de nuevos problemas, entre los que se encuentran: A) Carencia de recursos financieros y gran variabilidad de los mismos. B) Falta de personalidad jurídica de las delegaciones estatales del programa, Burocratismo en el proceso de asignación de recursos, y en al menos un caso, dependencia financiera de la Delegación estatal del programa de la Secretaria de Finanzas Estatal. C) Inexistencia de Personal de Base y Salarios Raquíticos del personal de campo y oficinas de las delegaciones estatales del programa. D) Liberación extemporánea de recursos financieros para el desarrollo de proyectos de inversión y promoción social. E) Asignación ineficiente de recursos financieros y de personal entre las diferentes Delegaciones Estatales. F) Problemas de Información Asimétrica entre las Delegaciones Estatales y las Oficinas Centrales del PAJA. De lo anterior, puede afirmarse que en el programa existen fuertes problemas administrativos que impiden un funcionamiento eficiente del programa PAJA, y que en algunos de ellos: Carencia de recursos financieros y variabilidad de los mismos, Inexistencia de Personal de Base y Salarios Raquíticos del personal de campo y oficinas de las delegaciones estatales del programa, y Asignación ineficiente de recursos financieros y de personal, se presente una tendencia al deterioro que en un futuro cercano podría limitar severamente la capacidad del PAJA para mejorar la situación económica y social de los jornaleros agrícolas en México. 8. COBERTURA Y FOCALIZACIÓN DEL PAJA 8.2. Análisis de Cobertura Territorial del Programa de Atención a Jornaleros Agrícolas (PAJA) En el año 2003 la vertiente de Inversión abarcó los 17 estados que mencionan las Reglas de Operación del PAJA, cumpliendo con la cobertura del Programa a nivel estatal. Por parte de la vertiente de Promoción Social, el Programa ha actuado en 18 estados, los programados para su cobertura y adicionalmente Coahuila. La cobertura del Programa se ha extendido hasta este estado debido a la existencia de unidades de trabajo ubicadas cerca de la zona de la laguna de Santiaguillo, la cual es parte de la delimitación geográfica con Durango, por lo que el estado de Durango otorgó apoyos en esta vertiente a 8 localidades de Coahuila. 9 8.2.1. Cobertura del PAJA a Nivel Municipal y por Localidad Existen 12 estados que cubren menos del 25% del total de los municipios. Sin embargo, al realizar el análisis de las localidades7 se observa que la cobertura a este nivel se reduce de manera importante, esto puede explicarse por la gran cantidad de localidades existentes en cada entidad. La cobertura del PAJA revela que el promedio de localidades atendidas es del 0.8%, 1,063 localidades (ver cuadro 2) con respecto a un total de 132,774 localidades existentes. Cabe señalar que se eliminó la cobertura en localidades que se atendían en el estado de Coahuila, ya que el PAJA atendía sólo a 8 de 4,211 localidades, lo que representa 0.2%. 8.2.2. Municipios donde se Encuentran Jornaleros Como parte de la cobertura del PAJA en municipios con población jornalera, existen demasiados municipios con alto número de jornaleros que no son atendidos por el PAJA. Además, la atención de jornaleros por parte de la mayoría de los estados no se encuentra focalizada a atender a municipios con alto número de jornaleros (lo que sería optimo en cuestión costo-beneficio). Sólo en algunos estados si existe una buena cobertura en función del número de trabajadores jornaleros. 8.3. Población Beneficiaria del PAJA Para el año 2003 se pretendió atender a 575,995 jornaleros agrícolas reduciendo su cobertura con respecto al año pasado en 195,369 jornaleros agrícolas. Sin embargo, la meta de cobertura alcanzada para dicho año fue de 528,302 beneficiarios, 27% menos que el año 2002. En el 2003 la ENE indica la existencia de 3,728,209 trabajadores agropecuarios, de los que 1,927,164 son jornaleros y peones. En lo que respecta a la cobertura del PAJA, puede observarse que se atendió al 15.44% de los trabajadores agropecuarios y 29.8% de los jornaleros y peones. 8.4.1. Temporalidad de las Unidades de Trabajo Las unidades de trabajo del Programa de Atención a Jornaleros Agrícolas actúan en función de la temporada de cultivo de los albergues y localidades. Por ejemplo, en el caso de los albergues, al no tener temporada de trabajo no necesitan de jornaleros y por lo tanto la operación del Programa no puede ser llevada ahí; en el caso de algunas localidades puede existir migración por parte de la mayoría de los jornaleros y por lo tanto el programa puede dejar de operar en esa localidad. Cabe mencionar que la temporalidad está ligada muchas veces a factores externos al control del Programa como el clima, las decisiones del productor o diversos fenómenos naturales. 7 Se toma en cuenta a las localidades, debido a que en la base de datos que fue otorgada por el PAJA en septiembre las unidades de trabajo están vinculadas a una localidad en específico; sin embargo cabe recalcar que no significa que una localidad no pueda contener más de dos unidades de trabajo. 10 En el 2003, el 86.6% de las Unidades de trabajo operaron todo el año esto es aproximadamente 1,140 de 1316. Los meses en que menos unidades de trabajo operaron fueron julio y agosto. (Ver cuadro 8 y/o 8.1) Se observa en la gráfica 17 que en los casos de Oaxaca y Tamaulipas todas las unidades de trabajo existentes en las entidades trabajaron todo el año. En el caso de Guerrero el 99.7 de las unidades de trabajo operó todo el año, el 0.3% dejó de operar en los meses de junio, julio y agosto. (Ver cuadro 8 en anexo). Gráfica 17 Tem poralidad de las Unidades de Trabajo Porcentaje de Unidades Activas al Año 100% 90% 80% Activas 70% 60% Inactivas 50% 40% 30% 20% Son Chih Mich Jal Nay BCS Sin Coah Total SLP Dgo Mor Ver BC Pue Hgo Gro TAMP Oax 10% 0% Fuente: Elaboración propia con información del cierre de ejercicio del Programa, 2003. (Cuadro 8.1 en anexo) 8.4.2. Promedio de Unidades de Trabajo que Atendieron a Determinada Población En el 2003 existieron 569 unidades de trabajo que atendieron a la población migrante en zonas de expulsión, es decir, el 43.2% del total; en el caso de la población local en localidades de atracción, el programa utilizó en el 2003 a 381 unidades de trabajo (29%) en 2003, y para la población migrante en zonas albergues o campamentos operaron 366 unidades (27.8%). Entre los estados que cuentan con una proporción mayor del 50% de unidades de trabajo que atienden a población local en localidades de atracción (tipo 1) se encuentran Tamaulipas con 27 unidades (100% del estado), Michoacán con 39 unidades de trabajo de 44. Otros estados que operan unidades de trabajo para la población tipo 1, son Morelos, Baja California y Nayarit; el primero atiende con el 76.2% del total de sus unidades de trabajo (48); el segundo estado dedica 32 unidades de 51 (62.7%) y el tercero 66 unidades de 116, siendo, este último, el que más unidades de trabajo dedica a la atención de esta población (ver gráfica 19). Otras entidades que están en la categoría de más del 50% son Baja California Sur y Chihuahua; el primero atiende a la población del tipo 1 con 12 unidades de trabajo de 26 (46.2%) y el segundo con 15 unidades (41.7%). 11 8.4.3. Promedio de Población Atendida por Unidad de Trabajo Se observa que cada unidad de trabajo a nivel estatal atiende en promedio a 375 personas migrantes en zonas de expulsión; en lo concerniente a la población local en localidades de atracción se puede ver que en promedio cada unidad de trabajo atiende a 408 personas de este tipo; por último, las unidades de trabajo ubicadas para la atención de población migrante en albergues o campamentos atienden en promedio a 419 personas con las características antes mencionadas. Por lo tanto, a nivel general, los lugares donde se tiene mejor focalizado a los jornaleros agrícolas es en las unidades de trabajo que atienden a la población migrante en albergues o campamentos. En general, los estados que más población jornalera atendieron, son Sinaloa con 1,257 jornaleros por unidad de trabajo; Guerrero con 769 jornaleros. Por otro lado, los estados que menos jornaleros atendieron por unidad de trabajo son Nayarit y Chihuahua, el primero atendió a 126 jornaleros y el segundo a 136 jornaleros. 8.4.4. Análisis de marginación de las localidades Atendidas por el PAJA en Zonas de Expulsión. La proporción total de las unidades de trabajo ubicadas en localidades de expulsión es de 55% para las localidades con grado de marginación muy alto, del 39% con grado de marginación alto y 0.6% para localidades con grado de marginación medio bajo o muy bajo. Esto significa que de las 528 localidades de expulsión atendidas por el PAJA, 290 son de muy alta marginación, 206 son de alta y 32 son de medio, bajo y muy baja marginación (ver cuadro 11 en anexo). Por esta razón, el programa en las zonas de expulsión esta focalizado hacia las localidades con alto y muy alto grado de marginación. 8.5. Distribución de los recursos El programa asigna su presupuesto con base en el Índice de Distribución Presupuestal (IDP), que permite asignar los montos de financiamiento a cada representación en las entidades federativas de acuerdo con criterios que reflejan las necesidades de las poblaciones atendidas, las estrategias de coordinación y concertación, así como la capacidad operativa. 8.5.1 Recursos para Proyectos de Inversión y Promoción por Unidad de Trabajo El presente análisis hace referencia a los recursos federales recibidos por el programa. Para realizar proyectos de promoción social en zonas de atracción se destinan 27,578 pesos de recursos federales por unidad de trabajo. Asimismo, en zonas de expulsión se destinaron 19,559 pesos por unidad de trabajo. Y en las zonas intermedias, el gasto federal por unidad de trabajo es de 18,110 pesos en proyectos de este tipo. En lo que respecta a los proyectos de inversión, de los recursos federales se destinan 96,704 pesos a zonas de atracción, a zonas intermedias 62,419 pesos y a zonas de expulsión 73,475 pesos. (Ver Gráfica 27). 12 8.5.2. Proyectos de Inversión y Promoción Social del Programa El Programa de Atención a Jornaleros Agrícolas lleva a cabo dos vertientes: 1) Inversión y 2) Promoción Social. Como parte de estas vertientes se llevan a cabo seis ámbitos de acción: Vivienda y Saneamiento Ambiental; Salud y Seguridad Social; Alimentación y Abasto; Educación, Cultura y Recreación; Empleo, Capacitación y Producción; y Procuración de Justicia El Programa en el 2003 llevó a cabo 966 proyectos de inversión y 7,896 proyectos de promoción social. De los estados que llevaron a cabo la mayor cantidad de proyectos de inversión se encuentran Baja California, Hidalgo y Morelos, en el primer estado los proyectos fueron realizados en su mayoría en el ámbito de acción relacionado con Educación, Cultura y Recreación con 63 proyectos. Hidalgo tuvo 50 proyectos de inversión en Vivienda y Saneamiento Ambiental, y Morelos tuvo 39 proyectos de inversión en ese mismo ámbito y 37 en el de Educación, Cultura y Recreación. (Cuadro 14). 8.5.4. Índice de Cobertura Albergue El índice de cobertura en albergue indica que el 80% de las personas entrevistadas fueron apoyadas por el PAJA. En localidad de atracción el índice de cobertura fue del 94% y en localidad de expulsión resultó ser del 94%. Esto nos indica que le programa ha beneficiado a la mayoría de los jornaleros entrevistados. Localidad de Atracción El índice de cobertura en las unidades de trabajo de localidades de atracción es en su mayoría del 100%, sólo en el Canal de Zacatecas (83%), Cinco de Mayo (83%) y Playitas (95%). Localidades de Expulsión Sólo tres unidades de trabajo en localidades de expulsión no tuvieron el 100% de cobertura: Achichipil (50%), Alaquich (67%) y Castadho (89%). 9. Eficacia del PAJA No existe una vertiente que demuestre tener grandes dificultades en cuanto al uso de recursos, debido a que en el caso de promoción social existe un índice global de 0.915 y el índice de proyectos de inversión es de 0.985, mayor al primero. Se observa un alto grado de correlación del gasto realizado con el autorizado, lo cual sugiere una alta eficacia a nivel agregado en el manejo de los recursos. 13 El índice de menor eficacia dentro ambas vertientes se encuentra en Jalisco con el 0.821 para Promoción Social y de 0.906 para Inversión, mientras que el más alto valor del índice total (inversión y Promoción Social) (1) se registra en Baja California Sur, Durango, Hidalgo, Michoacán y Morelos. 10. Eficiencia del PAJA Dentro de las zonas de atracción se observa que Chihuahua y Baja California Sur son los estados que presentaron un mayor gasto por jornalero en proyectos de inversión, 3,554 y 2,268 respectivamente. Dentro de estos estados los que más eficientemente canalizaron sus recursos fueron Baja California y Morelos que otorgaron 896 y 946 pesos por jornalero respectivamente. De las zonas de expulsión, Guerrero es el estado que más eficientemente utilizó sus recursos en la zona, ya que gasto 347 pesos por jornalero, caso contrario de Oaxaca el cual gastó 1,083 pesos. Esto a pesar de haber gastado casi lo mismo en proyectos de inversión, 8.4 mil Guerrero y 8.9 mil pesos Oaxaca. En el caso de las zonas intermedias el estado de Puebla tuvo el mayor gasto por jornalero, 17,775 pesos por jornalero atendido lo cual implica una cantidad demasiado elevada. Por otro lado, Hidalgo y San Luis Potosí son los que más eficientemente gastaron su dinero por jornalero debido a que lograron abarcar una mayor población. 11. Análisis Costo-Beneficio del PAJA A menudo el análisis costo-beneficio no puede realizarse con estricto apego a lo que postula la teoría debido a la falta de evidencia estadística elaborada en forma ad hoc. En tales circunstancias, deberá recurrirse a variables aproximadas (proxies). Asimismo, la carencia de datos estadísticamente confiables a menudo restringe las inferencias del análisis a deducciones cualitativas. A continuación, se trata de aproximar una estimación de la relación C/B de las vertientes y actividades del PAJA. Uno de los principios fundamentales del análisis de costo-beneficio es la asignación eficiente de los recursos financieros, técnicos, de infraestructura (capital físico) y humanos involucrados en el programa. El Programa PAJA distribuyó sus recursos en dos vertientes, la de inversión y la de programa social. Los índices que eficiencia por entidad federativa revelan que Baja California Sur fue la más eficiente en el rubro de inversión, mientras que Oaxaca lo fue en programa social. Es obvio que el PAJA puede, a partir de la experiencia particular de cada uno de estos dos casos, trazar un plan estratégico financiero, de habilitación y capacitación técnica y humana, que permita generalizar las bondades de estas dos experiencias y así dinamizar a los otros estados en aras de mejorar sus indicadores de eficiencia. Los estados con los más bajos índices de eficiencia en la vertiente de inversión fueron Nayarit (0.5) y San Luis Potosí (0.58). Si bien estos dos estados no son los que captan más trabajadores huéspedes en la modalidad de jornaleros, lo cierto es que es 14 motivo de preocupación que muestren indicadores muy bajos. Incluso, ninguno de los dos cumplió tampoco con sus metas en el rubro de programa social. En la vertiente de programa social, Hidalgo y San Luis tienen los índices de eficiencia más magros, cada uno con 0.7. Estos dos estados se caracterizan por contar con regiones con problemas de alta vulnerabilidad social. Es necesario introducir los ajustes requeridos para aumentar la eficiencia en este rubro. La investigación por unidad de trabajo dio como resultado el hecho de que las unidades de trabajo que más gasto en inversión realizan son las que se hayan en las localidades de albergue Isabeles y la Retama, así como la localidad de atracción de jornaleros Canal Zacatecas. La localidad de expulsión que más gasto de inversión realiza es Aquixcuatitla. Por otra parte, la distribución del gasto total sigue el mismo patrón geográfico que la del gasto en inversión. Es decir, el gasto se realiza preponderantemente en las localidades albergue y atracción. Los índices de salud que revelan la mayor eficiencia se encuentran en Campo San Isidro (Sinaloa), Cuautepanga (Veracruz), Isabeles (Sinaloa) y Campamento los Caballos (Baja California). El índice más bajo en salud lo tiene Salitrillos (San Luis Potosí). Las localidades de albergue y expulsión son las que ostentan el mayor índice de salud, mientras que el más bajo corresponde a una localidad de atracción (Ver cuadro 5). Los índices de educación infantil que revelan la mayor eficiencia se encuentran en tres localidades de expulsión, a saber: Pochotitla (Hidalgo), Cuautepanga (Veracruz) y Aquixcuatitla (Hidalgo) con 0.97, 0.96 y 0.93 respectivamente. Así mismo, la Vega (Veracruz) con un índice de 0.94 es la zona de expulsión con el mayor índice de educación infantil. El índice más bajo corresponde a dos localidades de albergue, Isabeles (0.53) y La Retama (0.55), ambas en Sinaloa Los resultados del análisis de correlación señalan que los coeficientes de correlación entre la vertiente en inversión y los índices de alimentación e infraestructura para las entidades visitadas, son negativos. La excepción es el Estado de Hidalgo únicamente para el coeficiente de correlación entre el gasto total y el índice de infraestructura. Esto parece indicar que os estados comprendidos en la muestra presentan coeficientes de correlación negativos, mientras que en las otras entidades el PAJA debe tener coeficientes de correlación positivos, a juzgar por los resultados. Por otra parte, los coeficientes de correlación con respecto al índice de educación también son negativos en las entidades visitadas, lo cual coincide con el resultado agregado8. Por el contrario, la correlación con el índice de salud es negativo es negativo en Hidalgo y Veracruz pero positivo en los otros estadios visitados. Para el caso del índice de salud los coeficientes de correlación son parcialmente consistentes con el análisis agregado. Finalmente de correlación entre el gasto social y los índices de salud y educación por tipo de unidad de trabajo, son en su mayoría negativos, con la excepción 8 El coeficiente de correlación negativo de la educación se ve influenciado por la necesidad de interactuar con el sector educativo, de tal forma que dicha correlación no puede ser explicada únicamente por las acciones del PAJA. Ya que la educación depende de la disposición del Sector Educativo para llegar a la población y de que los beneficiarios dispongan de tiempo y recursos financieros. 15 del coeficiente de salud para las unidades de expulsión. Esto significa que un aumento en el gasto en salud y en educación no mejora necesariamente estos indicadores en ningún tipo de las localidades, excepto en el caso de las de expulsión. 12.- Determinación del grado de cumplimiento de los objetivos del PAJA Se analizo el grado en el cual el PAJA cumple con los resultados esperados del programa empleando los datos generados en el trabajo de campo en albergues, y localidades de expulsión y atracción atendidos por el programa. Los resultados fueron los siguientes: 12.1) Con respecto a la Hipótesis de que el Programa permite el acceso de los jornaleros a labores mejor remuneradas en las zonas de atracción, y a talleres de capacitación para el trabajo y a proyectos económicos en zonas de expulsión, los resultados presentados indican que no hay evidencia estadísticamente robusta que confirme la hipótesis de que los cursos o pláticas de capacitación para el trabajo sean un factor determinante en la diferencia de ingreso de la población jornalera que recibe el apoyo y el ingreso de la población que no lo recibe, ambos en localidades de expulsión. 12.2) Con respecto a la Hipótesis de que el programa permite el aumento de alternativas productivas y de servicios en zonas de expulsión para desincentivar la decisión de migrar, los resultados indican que las diferencias migratorias presentadas en localidades de expulsión están fuertemente asociadas a las características socioeconómicas y laborales de la población jornalera, encontrándose diferencias de diferentes magnitudes en función de tales características. En general, la decisión de ausentarse por más de un mes de su pueblo esta asociada de manera más importante con variables tales como recibir pláticas de capacitación, contar con seguro social, tener niños menores de seis años y recibir apoyos alimenticios, siendo la de tener hijos menores de seis años, la que tiene mayor ponderación para dicha situación migratoria. 12.3) Al analizar la información relevante para probar la hipótesis de Aumento en el número de años de escolaridad de los hijos de los jornaleros en albergues, con respecto a años anteriores, se encontró que no hay evidencia estadística robusta que sustente la hipótesis planteada, en el sentido de que existe una diferencia entre el índice de escolaridad de los niños entre 6 y 14 años de las familias que respondieron ser beneficiarias del programa y el índice de escolaridad para los que respondieron que no tienen apoyo. 12.4) Con respecto a la hipótesis acerca de que el programa permite incrementar el acceso a la prevención y cuidado de la salud de los Jornaleros Agrícolas, puede afirmarse que los jornaleros que se encuentran en localidades de expulsión presentan un mayor índice de salud cuando no carecen de seguro social que cuando carecen de él, mientras que albergue y localidad de atracción, parece no importar que carezcan o no de seguro social. 12.5) Al analizar la hipótesis de la operación del programa permite incrementar el acceso de los hijos de los Jornaleros Agrícolas a alimentos (como la leche) y a dietas balanceadas que el promedio de días de consumo de leche no difiere significativamente 16 entre los diferentes tipo de unidad de trabajo. La frecuencia de consumo de huevo a la semana es ligeramente inferior para las localidades de expulsión. Además se encontró que el porcentaje de consumo y la frecuencia promedio en días a la semana de leche, huevo y carne constituyen una línea basal para las siguientes evaluaciones. 12.6) Al verificar la hipótesis de que el programa mejora las condiciones físicas y salubres en que habitan los jornaleros agrícolas en las zonas de atracción, se estimo un modelo microeconometrico que reflejan de manera importante las condiciones físicas y salubres en cada una de las unidades de trabajo consideradas (localidad de atracción y localidad de expulsión). Para determinar los resultados obtenidos en dicho modelo, se elaboró un ejercicio con el que se midieron impactos marginales que tiene cada una de las variables consideradas sobre la variable explicativa. Los resultados del ejercicio soportan la hipótesis inicial. 12.7) Al probar la hipótesis de que la intervención del programa mejora las condiciones de infraestructura básica (vivienda) en las zonas de expulsión, se encontro que el mayor apoyo se dio en mejoramiento de techo con un 33% de los encuestados que respondieron a este cuestionamiento o que tienen información acerca de si se dio o no este tipo de apoyo. Para el caso de mejoramiento de casa, el porcentaje de los que respondieron a esta pregunta y no fueron apoyados es del 100%, resultado muy similar al que se obtuvo para el caso de mejoramiento de paredes. 12.8) Al verificar la hipótesis de ue la intervención del programa mejora el acceso de la población jornalera a formas de abasto alternativas y protección del ingreso, se observo una mayor frecuencia en el caso de tienda Diconsa y Organización para compras en común, para el caso de localidad, tanto de atracción como expulsión, no así para el caso de albergue, donde las opciones de Diconsa y unidad Móvil de ventas son las más conocidas para la población jornalera. No obstante, resalta el hecho de que la frecuencia en que la población jornalera conoce estas opciones re relativamente baja, ya que en ninguno de los casos se supera el 20% de la población con conocimiento de estas alternativas, de lo cual se puede inferir que si se comparan los promedios de personas que tienen conocimiento de estas formas de abasto, contra los que resulten de no tener conocimiento, resulta evidente que el desconocimiento predomina. 12.9) Al estudiar la hipótesis de que la intervención del programa permite el incremento de las actividades lúdicas de los hijos de los jornaleros y deportivas de los jóvenes y adultos, se encontró una línea basal para futuras evaluaciones, ya que se sabe de antemano la proporción de personas que dedican algo de su tiempo a actividades deportivas, muy baja para el caso de los hijos de los jornaleros y, en ese sentido, cabría preguntarse si la organización de este tipo de actividades ayudaran a que los hijos de los jornaleros incrementen su actividad lúdica y deportiva. 12.10) Al analizar el incremento del derecho de las madres trabajadoras (jornaleras) a la protección social de sus hijos, se encontró que la cobertura de los niños de las madres jornaleras se cubre en un alto porcentaje, por lo que una línea basal para posteriores evaluaciones podría presentarse dado que se conocen de antemano, a través de esta evaluación, cuales son las opciones de salud con que cuenta este tipo de población, el sentido de preguntarse en que medida resultan adecuadas y si realmente representan un incremento del derecho de las madres trabajadoras jornaleras a la protección social de sus hijos. 17 12.11) Al estudiar la hipótesis de Mejoramiento en las condiciones de identidad y certeza jurídica así como el respeto a sus derechos humanos y civiles debido a la operación del programa, se desprende que cuando la población jornalera cuenta documentos avalan su identidad jurídica, el Programa de Jornaleros ha ofrecido apoyo para el trámite de dicha documentación en aproximadamente en el 10% de los casos, considerando únicamente la credencial de elector y la CURP. 12.12) Al probar la hipótesis de mejoramiento de las condiciones de tránsito migratorio, se encontró tomando en cuenta las razones que motivan a esta población a emigrar fuera de su lugar de origen, destaca el hecho de que la causa principal la constituye la falta de oportunidades de empleo en su lugar de origen, es decir, ya del total de jornaleros en zonas de atracción que salieron en el año de su lugar de origen, el 71% lo hizo porque no tiene empleo. 2003-2004. Ahora bien, del total de la población que emigró en el año por falta de empleo, el 30% recibió algún tipo de apoyo por parte del Programa de Jornaleros. Finalmente, la línea basal para este ultimo caso esta dada en determinar si el apoyo que se ha dado a la población beneficiaria del programa en términos de mejores condiciones de transito migratorio, es adecuada y resulta suficiente dado que se conocen las condiciones migratorias actuales de esta población y los apoyos que recibieron el año pasado para incrementar sus condiciones migratorias. 13. Grado de satisfacción de la población objetivo del Programa, respecto de proyectos y acciones de inversión y de promoción social recibidos a través del Programa. En los diferentes albergues se pregunto a la población beneficiaria: ¿Usted considera que el Programa de Jornaleros o la promotora le han ayudado a vivir mejor en el albergue? Como se puede observar en el siguiente cuadro el 50.89% de los entrevistados contestó “si”, y el 49.11% “no”. Si No Total Total % N % N % N 114 50.89 110 49.11 224 100.00 Mientras que en las diferentes localidades al realizar la misma pregunta a los beneficiarios del programa la información obtenida fue: Tipo Unidad de Trabajo Loc Atracción Loc Expulsión Si N 133 160 % 73 85 No N 48 28 % 26 15 NR N % 1 1 1 1 Total N 182 189 Total % 100 100 18 Como se puede apreciar en el cuadro, las localidades de expulsión destacan por mostrar un alto porcentaje (85%) de los beneficiarios que consideran que el programa les ha ayudado a vivir mejor, a través de las acciones de inversión y programas de promoción social. Por otro lado, el porcentaje de población en localidades de atracción que coincide con esta respuesta es del 73%. Con base en los resultados del análisis, puede afirmarse que los apoyos otorgados, a través de los proyectos de inversión y de promoción social, tanto en los albergues como en los diferentes localidades, han sido de gran ayuda para un importante sector de la población, también existe otra gran cantidad de beneficiarios, especialmente en los albergues, para los cuales dichos apoyos no han sido suficientes ya que estos no les han ayudado a vivir mejor; es decir, no muestran un alto grado de satisfacción con las diferentes acciones y proyectos realizados por el programa. 14. Determinación de los Beneficios Económicos y Sociales del PAJA En esta capitulo se analiza el grado en el cual el PAJA cumple con los resultados esperados del programa empleando los datos generados en el trabajo de campo en albergues, y localidades de expulsión y atracción atendidos por el programa (grupo de tratamiento), así como la información generada albergue privado, localidad expulsora y localidad de atracción no atendidas por el programa (grupo de control). Para evaluar o cuantificar los efectos económicos y sociales del programa PAJA sobre la población beneficiaria, se consideró un modelo econométrico que permite medir efectos de tratamiento. El modelo se basa en la metodología de Heckman (2002) sobre efectos de tratamiento, la cual permite medir el impacto de la intervención del programa, medido tanto en términos de diferencias de ingreso como diferencial en las condiciones de vida. El modelo de evaluación del impacto de PAJA sobre la población beneficiaria establece que para cada persona (i), existen dos estados posibles: Yi0 y Yi1, que corresponden a los resultados potenciales de pertenecer al grupo de tratamiento, es decir, de habitar en un albergue o localidad cubierta por el programa, o de residir en una localidad o albergue que no esta cubierta por el programa: Di=1 Grupo de tratamiento o piloto Di=0 Grupo de control Entonces, se considera el modelo de Neyman-Fisher-Cox-Rubin que está dado por: Y=DY1+(1-D)Y0 Donde D, representa la decisión de tratamiento observada, es decir, D(z)=1 denota el pertenecer el grupo de control o ser beneficiario del programa y D(z)=0 para el caso de no ser beneficiario del programa, donde la variable D* es una variable latente que genera D(z),de acuerdo a la siguiente regla: D(Z)=1{D*(Z)>=0}=1{Z(θ)+ UD>=0} 19 Donde 1{A}, es una función indicadora que toma el valor de 1 si A es verdadera y de 0 en caso contrario. En los diferentes casos considerados en este apartado Y0, Y1 representan los niveles que registran los grupos de control y el grupo piloto respectivamente con respecto a los niveles de ingreso, o un índice de condiciones de vida, asociados a la intervención del programa. El análisis intentó encontrar los efectos del PAJA sobre los niveles de ingreso y sobre las condiciones de vida de los jornaleros agrícolas. Los resultados iniciales señalan que no hay un diferencial de ingresos significativamente significativo entre los ingresos de los jornaleros agrícolas en unidades de trabajo adscritas al programa y el ingreso de los jornaleros en unidades fuera del trabajo. Por lo anterior se desarrollara un análisis sobre los diferenciales de condiciones de vida de los jornaleros a fin de encontrar si este es estadísticamente significativo. 15. Efectos No Esperados del PAJA Se puede señalar que existen efectos no esperados de la intervención del programa, y que estos en su mayoría son positivos. El hecho de que el programa independientemente de sus objetivos originales contribuya tanto al desarrollo de proyectos productivos autosostenibles (con tasas de recuperación muy superiores a las inicialmente esperadas), como el aumento del reconocimiento social en sus comunidades de los jornaleros agrícolas, y la disminución de la violencia registrada en sus albergues, representa una importante contribución del PAJA al incremento del capital social de las comunidades de jornaleros agrícolas. Por otro lado, los efectos no esperados negativos son pocos y existen estrategias que pueden reducir su impacto. El aumento de las divisiones étnicas entre las diferentes comunidades indígenas reportado en San Luis Potosí no impactara en forma importante un funcionamiento eficiente del programa si dicha delegación estatal sigue políticas y proyectos de atención específicos por etnia. Adicionalmente, el alto grado de dependencia de las instituciones estatales y de los agricultores del programa para operar acciones a favor de los jornaleros agrícolas reportado en Sinaloa, ya se esta combatiendo con una estrategia de transferir responsabilidades e información, y de capacitar a los demás agentes involucrados. 16. Comparación del programa con otras alternativas similares a fin de determinar opciones óptimas para el logro de los objetivos planteados. En parte de la normatividad del PAJA se puede encontrar que se dan beneficios discriminando por tipo de actividad laboral, ya que centra su atención en la población jornalera agrícola entendida como el núcleo familiar rural en pobreza extrema cuyo jefe de familia es asalariado en actividades agrícolas o cuando el monto básico del ingreso familiar provenga de esta fuente9. 9 Reglas de Operación del Programa de Atención a Jornaleros Agrícolas para el ejercicio fiscal 2003. Diario Oficial de la Federación, 5 de marzo de 2003. 20 El PAJA beneficia sólo a jornaleros agrícolas y se caracteriza por: 1) 2) 3) El Programa otorga diferentes apoyos, según el tipo de zona, las que se dividen en: 1) zonas de atracción, regiones donde se explotan cultivos intensivos en mano de obra, que atraen jornaleros tanto locales como migrantes. El Programa desarrolla para estas zonas estrategias de atención que generan un piso mínimo de satisfacción de necesidades básicas de los migrantes. Ejemplo de ellas son: Sinaloa, Baja California y Sonora entre otras. 2) zonas de expulsión, regiones donde existe principalmente agricultura de subsistencia, lo cual propicia que las familias se vean obligadas a migrar, para completar u obtener mejores ingresos, ya sea a las ciudades o a las regiones de agricultura de exportación. Estas zonas se corresponden con las entidades más atrasadas del país, como Oaxaca y Guerrero. 3) zonas intermedias, regiones donde coexisten ambos tipos de características. Integralidad. Dentro del enfoque integral de atención a los jornaleros agrícolas que realiza el PAJA, el programa busca vincular las acciones de otras instituciones con el fin de complementar las acciones que ofrece el mismo. Migración. Una de las principales limitantes para el desarrollo de una estrategia consistente es la migración que llevan a cabo los jornaleros y con ello la ausencia de oportunidades de empleo en sus comunidades de origen, lo que obliga a los jornaleros a buscar alternativas de sobrevivencia en otros lugares, recurriendo a procesos migratorios, convirtiéndose en jornaleros pendulares10 o en jornaleros golondrinos11. Cabe señalar que no se tienen evaluaciones de los impactos de otros programas sociales al realizar determinadas actividades, y esto no permite tener un punto de referencia para indagar en forma objetiva cuales son las alternativas óptimas. Sin embargo, se considera que los programas sociales antes mencionados pueden contribuir a dar apoyo similar al del PAJA. 17. Resultados del PAJA sobre el Bienestar, la Equidad, la Igualdad y la no Discriminación de las Mujeres. El PAJA fue diseñado como un programa integral para mejorar el bienestar de las familias jornalera agrícolas. Dentro de su operación el programa ha prestado servicios altamente valuados por las mujeres jornaleras como el acceso de las familias jornaleras a los servicios médicos en los albergues adscritos al programa, y la entrega de despensas. Por lo anterior, puede afirmarse que el programa podría mejorar su impacto sobre las condiciones de bienestar, equidad, igualdad y no discriminación en las mujeres, y con base en los resultados anteriores y el éxito de muchos proyectos productivos 10 Salen de sus lugares de origen y al cabo de un determinado tiempo regresan a ellas. Transitan por rutas definidas por la temporalidad y los patrones de cultivo, entrelazando los ciclos productivos de diversos cultivos con el propósito de obtener un salario la mayor parte del año. Suele ser el preámbulo de un asentamiento definitivo. 11 21 operados por mujeres, ese considera que el PAJA debería impulsar y concertar las siguientes políticas: a) Acceso de las familias jornaleras a servicios médicos en localidades b) Programar las platicas en los albergues con una mayor participación femenina c) Aumentar la oferta de recursos crediticios para que las mujeres jornaleras puedan emprender proyectos productivos autosostenibles que les permitan un mayor grado de empoderamiento al interior de sus comunidades. 22