5. PERCEPCION DE LOS BENEFICIARIOS El Colegio de México

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5. PERCEPCION DE LOS BENEFICIARIOS
En esta sección se presentan los resultados sobre percepción de los beneficiarios del Programa
Opciones Productivas encontrados en las evaluaciones externas de 2002, 2003 y 2004, no
obstante, se debe precisar que las tres evaluaciones mencionadas utilizaron metodologías e
indicadores diferentes sobre la percepción de los beneficiarios, por lo cual los resultados no son
comparables entre diferentes años.
En la evaluación 2002 se señala que en la operación del Programa de Crédito a la Palabra existía
una importante presencia de los presidentes municipales en la operación del programa, ya que
su posición era muy importante en la distribución, la recuperación y el uso de los recursos
recuperados, lo que provocaba que se desvirtuara la función del Programa.
También en la evaluación 2002, se señala que el Programa inició su operación con gran retraso,
ya que el levantamiento de encuestas se realizó en los primeros días de noviembre, y el
Programa no había operado ni en Oaxaca, ni en Veracruz, que son dos de las entidades más
importantes, de las seis que se seleccionaron para la realización de la evaluación.
En la evaluación 2003 se señala que entre ocho y nueve de cada 10 beneficiarios del Programa
opinan haber recibido un trato digno y respetuoso por parte de promotores, técnicos y
funcionarios de la Sedesol y haber recibido información clara y oportuna sobre el apoyo cuando
lo solicitaron. Pero cerca de la mitad expresan que el apoyo no les llegó a tiempo, lo cual se
explica pues los recursos del Programa OP del 2003 se entregaron a los solicitantes en los
últimos meses del año, particularmente los de las vertientes de Crédito Social, Crédito para
Mujeres y AFE.
En cuanto a la apreciación sobre la suficiencia o insuficiencia del crédito otorgado por el
Programa, en esta misma evaluación 2003, menos de la mitad de los beneficiarios de Crédito
Social, Crédito para Mujeres y AFE, opina que es suficiente. En cambio 9 de cada 10
beneficiarios de Apoyo a la Palabra cree que es insuficiente. Y es que la diferencia en cuanto a
monto de apoyo para esta última vertiente y las demás, es muy grande, ya que mientras los
beneficiarios de AP reciben 500 pesos por hectárea pudiendo solicitar apoyo hasta para tres
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hectáreas, los de las otras vertientes mencionadas obtienen hasta 15 mil pesos por persona, o
150 mil pesos por grupo de 10 personas según reglas de operación del 2003.
En la evaluación 2003, se señala que en cuanto a la tramitación del apoyo, poco más de la mitad
de los beneficiarios del Programa opina que fue fácil, mientras que 1 de cada 10 percibió que la
tramitación fue muy complicada. En cuanto a la calidad del trabajo del promotor, más de dos
terceras partes de los beneficiarios del Programa lo califican de bueno y apenas uno de cada 10
lo juzga regular. En este Programa los promotores no son principalmente residentes de la
Sedesol, sino personal de las dependencias ejecutoras, y en el caso de AP, son servidores del
municipio y las comisarías quienes promueven, llevan el control de los padrones de
beneficiarios y de las recuperaciones del apoyo.
En la evaluación 2003, se señala que en resumen los beneficiarios del POP están
razonablemente satisfechos con el trato y la información aportada por el Programa dado que casi
9 de cada 10 tuvo una opinión favorable; poco más de la mitad considera que los trámites para
recibir el apoyo son fáciles y regulares de hacer; tres de cada cuatro considera bueno el trabajo
del promotor o residente. También hay una buena valoración general del AFE. Por tanto, puede
afirmarse que hay un buen nivel de satisfacción en estos aspectos. En cambio, alrededor de la
mitad de los beneficiarios aprecia que el apoyo fue inoportuno, pues entre el 70 y el 80% de los
entrevistados dijo haber recibido los recursos en los últimos tres meses del año 2003. Y 5 de
cada 10 beneficiarios de las vertientes de CS, CPM y AFE, opina que el recurso es insuficiente,
y en el caso de AP la mayoría dice que no es suficiente. De manera que en estos aspectos la
muestra refleja insatisfacción por parte de los beneficiarios.
En la evaluación externa 2003 se señala que entre ocho y nueve de cada 10 beneficiarios del
Programa opinan haber recibido un trato digno y respetuoso por parte de promotores, técnicos y
funcionarios de la SEDESOL y haber recibido información clara y oportuna sobre el apoyo
cuando lo solicitaron. También se señala que casi la mitad de los beneficiarios señalan que el
apoyo no les llegó a tiempo, pues los recursos se entregaron a los solicitantes en los últimos
meses del año, particularmente los de las modalidades de Crédito Social y Crédito Productivo
para Mujeres. En cuanto a la apreciación sobre la suficiencia o insuficiencia del crédito
otorgado por el Programa, menos de la mitad de los beneficiarios de Crédito Social y Crédito
Productivo para Mujeres opina que es suficiente.
En la evaluación externa 2003 se señala que entre 6 y 7 de cada 10 beneficiarios de las
modalidades de Crédito Social, Crédito Productivo para Mujeres y Apoyo a la Palabra opinan
que el Programa es Bueno; y solamente lo califican como Muy Bueno poco más de 2 de cada 10
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beneficiarios de Crédito Social, 18% de Crédito productivo para Mujeres y 1 de cada 10 de
Apoyo a la Palabra.
En la evaluación externa 2004, se encontró que los beneficiarios tienden a tener una mejor
opinión que los no beneficiarios respecto a la utilidad de los programas sociales para ayudarles a
salir de la pobreza (40.3% versus 29.3% en el caso del rango 0.3-0.7). Sin embargo, la mayoría
de los entrevistados sigue teniendo una percepción poco favorable de la utilidad de estos
programas para salir de la pobreza. Así, el 47.5% de los beneficiarios considera que es falso que
programas de SEDESOL ayuden a salir de la pobreza, mientras que el 56.9% de los no
beneficiarios tienen esa misma opinión. Los resultados arrojados por los beneficiarios de Apoyo
a la Palabra refuerza el sentimiento de que los programas sociales contribuyen poco al bienestar
en el largo plazo.
Asimismo, en la evaluación externa 2004, al comparar a los beneficiarios de Apoyo a la Palabra
versus los No Beneficiarios de esta modalidad confirman y refuerza los resultados anteriores,
pues el 42.9% de los beneficiarios creen que los programas permiten salir a la gente de la
pobreza, en tanto que el 44% considera que esa afirmación es falsa o totalmente falsa. En
contraste, los no beneficiarios siguen teniendo una mala percepción de la utilidad de estos
programas para ayudar a salir de la pobreza: 31% considera que eso es cierto o totalmente cierto,
mientras que 54.6% considera que eso es falso o totalmente falso.
Con respecto al efecto de largo plazo de los programas sociales, en la evaluación externa 2004,
se menciona que la mayoría de los beneficiarios de Apoyo a la Palabra también consideran que
el efecto de los programas sociales es “Poco”, y que inclusive, un porcentaje de los beneficiarios
menor que antes considera que esos programas ayudan “Mucho o Bastante” (pasa de 36.5% a
33.3% en un caso y de 36.1 a 33.2% en el otro), mientras que un porcentaje más alto piensa que
esos programas ayudan “Poco” (el porcentaje de beneficiarios que escogió esta opción pasó de
54.3% a 57.8% en un caso y de 54.2 a 58.9% en el otro).
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