FOLCLORE ESPAÑOL ÍNDICE Folclore Andaluz........................................... Pág. 1 Folclore Aragonés......................................... Pág. 1 Folclore Asturiano......................................... Pág. 1 Folclore Balear.............................................. Pág. 1 Folclore Vasco............................................... Pág. 2 Folclore Canario............................................ Pág. 2 Folclore Cántabro.......................................... Pág. 3 Folclore Castellano − Manchego.................... Pág. 3 Folclore Castellano − Leonés......................... Pág. 3 Folclore Catalán............................................. Pág. 4 Folclore Valenciano....................................... Pág. 4 Folclore Extremeño........................................ Pág. 5 Folclore Gallego............................................. Pág. 5 Folclore Madrileño......................................... Pág. 5 Folclore Murciano.......................................... Pág. 5 Folclore Navarro............................................ Pág. 6 Flamenco........................................................ Pág. 7 FOLCLORE ANDALUZ Andalucía posee un folclore que hunde sus raíces en la historia, destacando entre las diversas manifestaciones el cante y el baile flamenco, que tienen su origen en el triángulo Lucena−Sevilla−Cádiz. Existen cuatro grandes grupos de cante flamenco: la siguiriya, la soleá, la toná y el tango. De estos sones se deriva una rica variedad de cantes emparentados entre sí. FOLCLORE ARAGONÉS Posee un folclore muy variado, aunque la jota es el canto de baile que se ha ido imponiendo, en su forma 1 actual, a lo largo del siglo XX. Este baile ha traspasado las fronteras regionales y se ha introducido en el folclore de regiones vecinas, en muchos casos, con variantes propias. FOLCLORE ASTURIANO Asturias cuenta con uno de los folclores más antiguos, ricos y sugestivos de España. El corri−corri es posiblemente la danza más antigua. Se trata de una danza ritual de origen prehistórico y que procede de Cabrales, actualmente se baila entre seis mujeres y un hombre, que simulan con sus saltos y quiebros los eternos ritos del amor. Son también muy antiguas el pericote, la danza prima y las tradicionales danzas de vaqueiros, bailadas al son de una payecha, especie de sartén que golpea con una llave de grandes dimensiones. La gaita y el tamboril son −como en Galicia− instrumentos muy arraigados en toda la región asturiana. FOLCLORE BALEAR Las danzas y canciones tradicionales poseen una gran personalidad. Los más típicos son el bolero balear y la jota, con su variantes los copeos y las maitexes. En Menorca se cantan los fandangos menorquines, y en Ibiza, los bailes típicos de sa curta y sa llarga. Existe también, desde la década de 1960, una nueva música popular (María del Mar Bonet, Música Nostra, Uc y Raels) que, con sonidos actuales y en la lengua autóctona, recoge y recrea formas musicales tradicionales. 1. FOLCLORE VASCO El folclore vasco es de una personalidad acusadísima. La mayor parte de sus competiciones lúdicas tienen su origen en el trabajo tradicional del campo como los aizkolariak (cortadores de troncos), los arijasotzaileak (levantadores de piedras), los segalariak (cortadores de hierba), los gizon proba (arrastre de piedras), los soka tira (tiro de la cuerda) y los idi proba (arrastre de piedras con bueyes), entre otros. Las canciones (como Gernikako Arbola, Agur Jaunak o Boga Boga) y las danzas (aurresku, ezpatadantza, brokeldantza y bordondantza), juntamente con los instrumentos tradicionales del txistu y el tamboril, completan una muestra de sus ricas y particulares tradiciones. FOLCLORE CANARIO El folclore canario tiene clarísimas influencias peninsulares (españolas y portuguesas), pero ha bebido también en las fuentes de América del Sur, con la que tantos lazos unen al Archipiélago, y hunde sus raíces últimas en los ritmos autóctonos. Donde más claramente se adivina este recuerdo colectivo prehispánico es en ciertos aires de las islas como el Hierro y La Gomera. De todo ello, surge una música popular con clarísima personalidad, aunque la isa se derive de la jota, o una de las coplas más sentidas por los isleños se llame, precisamente, malagueña, nombre que revela meridianamente su origen. La folía, cadenciosa y sensible, y el tajaraste, alegre y sincopado son los cuatro aires más característicos de este folclore, al que habría que añadir otros no tan conocidos para comprender su riqueza: el tango de la Florida, los aires de Lima, el sirinoque, etcétera. El instrumento canario por excelencia es el timple, una especie de pequeña guitarra −de cuatro o cinco cuerdas, según las islas− de una extraordinaria sonoridad y cuyas posibilidades como pieza solista han sido exploradas por concertistas como Totoyo Millares, José Manuel Aldana o Benito Cabrera. El estudio y la renovación del folclore canario en los últimos años ha tenido como protagonistas a grupos que han logrado grandes éxitos en su investigación y en sus interpretaciones. Citaremos a Los Sabandeños −el más importante− y Añoranza, en Tenerife, Los Gofiones, en Gran Canaria, y Taburiente, en La Palma. 2 2. FOLCLORE CÁNTABRO Los instrumentos musicales peculiares de Cantabria son principalmente el tambor o "caja", el pandero y la pandereta. Son destacables también las castañuelas o "tarrañuelas", en percusión, y la gaita y dulzaina, en viento, utilizadas para acompañar y marcar las tonadas. Respecto a los bailes, estos están divididos en dos grandes grupos. Por una parte están los que se utillizan en las fiestas religiosas para honrar a un Santo determinado, como los clásicos "picayos", que suelen bailar sólo los hombres acompañados por el cántico de las mujeres al son de las panderetas. Por otra parte, están los de tipo lúdico, generalmente bailados por parejas, como la jota montañesa. La principal diferencia respecto a otras jotas es la peculiar elegancia de movimientos de la mujer, que apenas mueve su cuerpo, frente a la forma de bailar del hombre, que no para de moverse ágilmente. Existen otras danzas más características y señoriales, efectuadas a modo de coreografía. Un buen ejemplo es "la Baila de Ibio", tomada aparentemente de "la Danza de las lanzas" y de la que llama la atención sus reminiscencias ancestrales que se derivan del sonido de una caracola y el percutir de un tambor. FOLCLORE CASTELLANO − MANCHEGO Entre los bailes folclóricos de Castilla−La Mancha destaca la seguidilla, considerada como la matriz de las danzas de la región y cuyo origen se disputan Andalucía y La Mancha. De ella se derivan el fandango y el bolero. Estos tres bailes, castellanizados, se han extendido a toda la península (en especial a Castilla y León) a la par que Castilla−La Mancha ha recibido la influencia de las danzas de otras comunidades, las cuales han sido adaptadas a su idiosincrasia (la llamada jota castellana y la jota manchega, por ejemplo). FOLCLORE CASTELLANO − LEONÉS Castilla y León es, debido a su extensión, la parte de España que presenta mayor variedad en lo que a música folk se refiere, aunque curiosamente sea de las que se desconozca más, principalmente sus músicos y grupos folk. De todos los instrumentos que se suelen tocar, hay uno que es el que mejor representa a Castilla: es la dulzaina, siendo sin género de dudas, el instrumento más extendido, con una gran variedad de estilos de ritmos e interpretación según las provincias. 3. Los ritmos tienen la característica de que siendo muchos de ellos comunes, como por ejemplo jotas y pasodobles, quedan marcados por las diferentes influencias de zonas limítrofes y por los diferentes instrumentos empleados. FOLCLORE CATALÁN El folclore catalán se caracteriza en general por su tono contenido. Entre las danzas sobresale la sardana, que se baila en todo el territorio al son de una pequeña orquestina (la cobla), siendo la tenora y la tiple sus instrumentos más típicos. Durante las ferias y fiestas de los numerosos pueblos y ciudades de Cataluña hacen su aparición los grupos de danzas conocidos con el nombre de esbarts. Son innumerables las danzas populares catalanas (ball de Sant Ferriol, ball de bastons, ball de Rentadores, ball de l'Indiot, ball dels Cercolets, ball de Faixes, ball de la Morisca, ball de la Filosa, ball del Ciri). FOLCLORE VALENCIANO Existe un folclore muy rico y diverso, herencia de las influencias históricas recibidas. La pólvora, la música y 3 el baile se entremezclan en las fiestas de la mayoría de los pueblos y ciudades, lo que proporciona espectáculos llenos de barroquismo. Las Fallas de Valencia, las Hogueras de San Juan en Alicante, la Fiesta de La Magdalena en Castellón, los Moros y Cristianos en Alcoy, Cocentaina y Ontinyent, el Misterio de Elche o las Sexenales de Morella son de las más representativas. La afición y la práctica musical, con uno de los índices de interés más altos de Europa, ha propiciado la aparición de múltiples bandas de música, así como de gran número de ejecutantes extraordinarios. El 9 de octubre, fecha de la entrada del rey Jaime I en Valencia, se celebra la fiesta oficial de la Comunidad Valenciana, aunque también se conmemora el 25 de abril la derrota de los valencianos austracistas (partidarios de los Habsburgo) en la batalla de Almansa (1707), durante la guerra de Sucesión española, lo que provocó la pérdida de los antiguos fueros. 4. FOLCLORE EXTREMEÑO Dentro del folclore extremeño, en lo referido a danzas, podemos destacar las jotas y los fandangos. Extremadura no cuenta con instrumentos musicales típicos con algún elemento autóctono que lo defina como puede ser "el timple" de Canarias o "la gaita" en Galicia; no obstante junto con las tradicionales guitarra, laúd, acordeón y bandurria se han introducido instrumentos de percusión del entorno doméstico como el almirez, el caldero, la botella de anís, el cántaro, la sartén, las campanillas, los cencerros; por otra parte en la Alta Extremadura pervive la flauta y el tamboril. FOLCLORE GALLEGO Galicia posee un rico folclore, frecuentemente relacionado con las romerías. Entre las danzas típicas de esta comunidad destaca la muñeira en sus diversas variantes: la muñeira do Espantallo, la muñeira ribeiriña, la muñeira carballesa y la muñeira redonda. El instrumento popular más genuino es la gaita o cornamusa, así como el redobrante y el bombo que la acompañan. FOLCLORE MADRILEÑO Al ser una zona de tradicional inmigración, gran parte de las manifestaciones folclóricas son traídas de otras comunidades o de reciente creación. FOLCLORE MURCIANO Su folclore combina manifestaciones religiosas de larga tradición con festejos de corte laico y raíz pagana. Su Festival de Folclore Mediterráneo en la primera quincena de Septiembre, la Semana Santa de Murcia, o sus desfiles de moros y cristianos son algunas de las fiestas dignas de presenciar. 5. FOLCLORE NAVARRO Navarra es una comunidad rica en lo que a su folclore se refiere. Destacan por su fama internacional las fiestas de los sanfermines (semana del 7 de julio) que sintetizan la esencia del folclore navarro. Así, por ejemplo, en ellas están presentes tanto los txistus y tamboriles de la Montaña, como la pasión por los toros del resto del país. 6. FLAMENCO 4 El Arte Flamenco es un arte andaluz, nacido al Sur de España. Este arte se manifiesta en tres formas, en el Cante, en el Baile y en la Guitarra. Su procedencia es bastante incierta, pues al poseer raíces muy antiguas y ser a su vez una manifestación popular, no se poseen documentos que nos aclaren muchas dudas. Se cree encontrar sus orígenes en los cantos y danzas populares que existieron en Andalucía hace muchos siglos, ya que estilos propios del flamenco se basan en aires tradicionales de épocas muy remotas. Sin embargo el paso de diversas civilizaciones, razas y culturas por Andalucía, ha aportado tal variedad de influencias, y algunas de ellas tan importantes, que han decidido sustancialmente la evolución de sus ritmos y armonías. La primera noticia escrita sobre el flamenco se encuentra en una de las "Cartas Marruecas " de Cadalso, (1774). En ellas el escritor atribuye su origen a los gitanos, o al menos especifica que es junto a ellos donde se encuentran sus manifestaciones. Si bien ello es una realidad parcial, no es menos cierta, pues los ritmos no europeos que el flamenco contiene son curiosamente muy cercanos a los complejos ritmos asiáticos que proceden de la India, y no es ninguna coincidencia que los gitanos proceden originariamente de la India. Adicionalmente el pueblo gitano ha sido el primero que ha mantenido el flamenco vivo y lo ha representado con dedicación. Otra influencia muy fuerte del flamenco es la árabe que se puede apreciar claramente en sus armonías, el cante flamenco guarda un gran paralelismo con otras manifestaciones musicales del norte de Africa, como la música marroquí. La guitarra recuerda no pocas veces a manifestaciones musicales no sólo norte−africanas, sino incluso de la Africa negra. Y el baile femenino, sobre todo en el movimiento de caderas y manos se asemeja a algunos bailes norteafricanos. Todas estas influencias que, por evidentes no podemos negar, no sorprenden cuando se sabe que Andalucía estuvo tantos siglos influida por esta cultura norteafricana. Adicionalmente en estas tierras convivieron diversas razas, por lo que otras influencias más remotas se pudieran aventurar en los alegres ritmos folclorísticos judíos, o sus antiguas músicas litúrgicas, si bien en ello no se sabe si es coincidencia o realidad. En cualquier caso tan puro como se considera al arte flamenco, tan mestizo es al mismo tiempo. Contiene elementos sui generis que no comparte con ningún otro folclore, al mismo tiempo que se disfrutan claramente gran cantidad de influencias que otros pueblos fueron aportando para enriquecerlo aún más. Haciendo un recorrido somero en lo que fuera la evolución del flamenco tal como 7. lo conocemos hoy día, ya documentado y tratado profesionalmente, podemos comenzar por una época mucho más reciente, entre 1765 y 1860. En esta época encontramos tres focos de importancia que crearían escuela: Cádiz, Jerez de la Frontera, y el barrio de Triana, en Sevilla. Es a partir de esta época cuando el baile flamenco, empieza a tener un sitio entre los bailes españoles que se desarrollan en las escuelas, representándose frecuentemente en patios, ventas y salones privados cuando se celebraban fiestas. En lo que concierne a la guitarra, al principio no solía acompañar al cante, que normalmente se realizaba sin acompañamiento alguno, como se a dado en llamar a palo seco, salvo percusiones con las manos o toque de palmas. Algunos compositores, como Julián Arcas, comienzan a componer temas con sonidos flamencos que iniciarían una nueva era. Entre 1860 y 1910 se entra en una época más prolífica que se ha llegado a llamar La edad de oro del Flamenco. En esta época florecen los cafés cantantes, desarrollando el flamenco todas sus facetas; la instrumental, la de cante y la de baile, hasta fijar definitivamente lo que pudiéramos considerar clasicismo de lo "jondo". El baile adquiere un esplendor sin precedentes, siendo éste el mayor atractivo para el público de estos cafés cantantes y se da un gran impulso a la guitarra, como complemento fundamental e indispensable para el cante y para el baile. Entre 1910 y 1955, el cante esta marcado por lo que ha llegado a llamarse la etapa de la ópera flamenca donde mandan los cantes más ligeros como los fandangos y cantes de ida y vuelta (estos son los cantes de influencia 5 sudamericana, que trajeron los cantaores que habían sido emigrantes en latino−america). Este camino nuevo que había tomado el flamenco no gusta a todo el mundo y en 1922 intelectuales de la Generación del 27, Falla y otros artistas, crean en Granada un concurso, con la finalidad de buscar nuevos valores que cultiven el "cante" jondo autentico. A partir de 1915 se produce un ciclo de baile teatral de excepcional calidad, llevando el baile español y flamenco por todos los escenarios del mundo. El Renacimiento del flamenco surge a partir de 1955, siendo Antonio Mairena su figura principal, con ese rigor interpretativo y su afán investigador y de divulgación de la ortodoxia del cante. El baile en esta época se desarrolla en los tablaos, que son los herederos de los cafés cantantes anteriores. Esta época cuenta con verdaderas personalidades del baile, que alternan sus actuaciones no sólo en los tablaos, sino en teatros, festivales y otros escenarios. 8. Los guitarristas, acompañando al cante y al baile adquieren un mayor protagonismo, alcanzando este arte su madurez. La música flamenca actual esta en gran parte marcada por el mestizaje con otras músicas como el jazz, la salsa, la bossa nova, y sones étnicos de muy diversas genealogías y geografias. Igualmente el baile introduce elementos de novedad e investigación que pueden decidir el futuro. En la evolución de este siglo se puede observar que el baile femenino va cediendo cada vez más lugar al del hombre. De un lado, aparecen en los años sesenta figuras legendarias como Antonio el bailarín o Rafael de Córdoba que revolucionan el baile masculino llevándolo a las más altas cotas de calidad artística. De otro lado la mujer que a principios de siglo se había concentrado en el baile de cintura para arriba, donde el braceo, el juego de manos, las castañuelas y la altivez de la cabeza habían sido los elementos esenciales, progresivamente transformando esta tendencia. Progresivamente va acentuado la parte inferior, llegando desde los años 50 a los 70 a equilibrar esta atención tanto en la superior como en la inferior, terminando hoy por acentuar los movimientos de la parte inferior. Con ello podemos apreciar hoy excepcionales taconeos. En el baile se puede observar hoy un ligero predominio del hombre. El guitarrista es actualmente no sólo acompañamiento, sino solista. Paco de Lucia marca el inicio de una nueva etapa de esplendor sin precedentes, realizando una verdadera revolución estilística en el toque. Junto a él habría que citar a otros muchos que son verdaderos virtuosos de este instrumento, como a Manolo Sanlucar. El flamenco es una música íntima por antonomasia, pero su auge lo empuja a una nueva era donde los grandes medios de comunicación son testigos de su gracia, su fuerza, su duende y su verdad. Pero siempre donde mejor se sentirá, será en ese circulo pequeño de amigos donde sólo se encuentran la guitarra, la voz, y ese cuerpo bailando en una noche de madrugada. 9. 6