LA VOCACIÓN: EL RETO SIEMPRE NUEVO DE SER IMAGEN DE DIOS TEMA: Leamos un texto bíblico: Gn 1,26-31 Dios llama a la existencia lo que no existe, y todo lo crea hermoso. Entre las criaturas a las que Dios les da existencia, tiene una particular atención cuando crea al hombre. A éste lo sitúa en un lugar singular privilegiado, pues lo hace a “su imagen y semejanza”. Nosotros descubrimos que entre el hombre y los animales hay una diferencia esencia. Estos actúan por instinto, el hombre está dotado de inteligencia y voluntad. A partir de la manera como Dios crea al hombre, podemos descubrir la misión que le encarga. Esta podría ser resumida en ser en el mundo la “imagen de Dios”. Vemos en el texto que el hombre y Dios se encuentran en un diálogo abierto. A partir de este diálogo el hombre descubrirá su vocación-misión. El va a ser imagen de Dios en el mundo al: - Comunicar vida, ser fecundo. - Dar nombre: que el mundo llegue a ser en plenitud lo que está llamado a ser. - Recrear (perfeccionamiento del mundo) - Dominar responsablemente (cuidar al mundo) RESUMIENDO: podemos decir que el hombre es imagen de Dios y es su colaborador en el cuidado de la creación. Somos seres libres que estamos llamados a cumplir con una misión en el mundo. DINAMICA PARA PROFUNDIZAR: Leer el cuento de “El sol que quería ser agua”. EL SOL QUE QUERÍA SER AGUA Un día el sol se puso a pensar y se dio cuenta de que estaba cansado de su trabajo. Todos los días era lo mismo: levantarse al amanecer, asomarse sobre las montañas, volver cálido el aire, broncear a los turistas, acariciar los campos … y así toda la vida, un año era lo mismo que el otro, nunca tenía vacaciones y siempre estaba acalorado. El sol en muchas ocasiones sentía envidia de la sombra. Esta le parecía acogedora, refrescante y suave. A raíz de estos pensamientos se animo a pedir un traslado para instalarse en el Polo Norte, había oído hablar de una ciudad llamada Ushuala, en Argentina. En esta ciudad los días eran muy cortos, por lo que el sol pensaba que tendría mucho tiempo para descansar y tal vez hasta turistear. Se imaginaba que en esta ciudad podría tomar sesiones de sombra y de hielo, durante muchas horas y temporadas. También podría lanzarse a esquiar sobre la nieve, suavemente para que no se derrita. Ya calenté la tierra durante mucho tiempo, y la he lastimado. Ahora debo acariciarla, sin dañarla” Luego el sol pensó: ¿Qué haré cuando me canse de descansar?”. Y entonces se puso a pensar y a soñar. De repente le vino una idea que le llenó de emoción: que hermoso sería ser agua. A partir de ese día éste pensamiento se le metió en la cabeza: cómo se sentiría si fuera agua. De sentía fresco y transparente. Un buen día se decidió a escribirle una solicitud al Señor Dios para que lo convirtiera en agua. Ser agua me parece una misión fascinante –se decía-. Expresaré a Dios todos los motivos que me impulsan. Ya he estado muchos años dando calor. Ahora deseo limpiar y dar frescura. Creo que es motivo válido y convincente”. El sol presentó su solicitud y esperó confiado. Y, mientas le llegaba la respuesta, reflexionaba y pensaba; “Después de todo, no es tan raro querer cambiar de profesión. Uno es artista sensible y se cansa de repetir lo mismo cada día”. Pasaron algunas semanas cuando el sol recibió una carta muy azul con sellos en forma de paloma. Rasgó el sobre y se puso a leer muy emocionado. La carta decía así: “Querido hijo: Gracias por los servicios prestados. Me has representado muy bien durante siglos, dando y vida y alegría. He considerado tu petición. Soy tu Padre y te conozco. Sé que estás hecho para sembrar calidez y salud. He atendido el deseo de tu corazón de un modo conveniente para ti. Te daré gusto, pero sin torcer tu vocación. Serás agua. Pero como no quiero violentar tu vocación que te regalé al nacer, te he dado un destino de acuerdo a tus planes y a tu deseo: desde la semana que viene, irás a Río Hondo y te convertirás en agua… pero en agua termal.”. Siempre a tu lado, tu Padre Dios. P.D. “Mi decisión se ha basado en tu bien. Será peligroso para ti pasar de la noche a la mañana, de una calidez total al frío húmedo del agua. Ser agua termal, será lo ideal para ti. (Y ahora en secreto: ya había previsto este cambio tuyo desde toda la eternidad y te tenía reservado un puesto vacante en una fuente termal hermosa y transparente. Que cures a mucha gente. No defraudes. Has nacido para dar calor)” Puntos a reflexionar y desarrollar - Nuestra vocación nos pone frente a Dios. - Nuestra vocación es algo íntimo que nos da identidad. - Nuestra vocación es algo dinámico, es un ir descubriéndonos - Nuestra vocación nos lleva a desempeñar una misión. DINAMICA PARA ATERRIZAR: Se reparte la siguiente oración Tu me Llamaste Señor, tu me llamaste Para ser instrumento de tu gracia, Para anunciar la Buena Nueva, Para sanar las almas. Instrumento de paz y de justicia, Pregonero de todas tus palabras, Agua para calmar la sed hiriente, Mano que bendice y que ama. Señor, tu me llamaste Para curar los corazones heridos, Para gritar, en medio de las plazas, Que el Amor está vivo, Para sacar del sueño a los que duermen Y liberar al cautivo. Soy cera blanda entre tus dedos, Haz lo que quieras conmigo. Señor, tu me llamaste Para salvar al mundo ya cansado, Para amar a los hombres Que tú, Padre, me diste como hermanos. Señor, me quieres para abolir las guerras Y aliviar la miseria y el pecado; Hacer temblar las piedras Y ahuyentar a los lobos del rebaño. Amen Para Reflexionar y comentar en grupo. 1.- ¿Que sentimientos te despierta esta oración? 2.- Cada uno de nosotros estamos llamados a ser una bendición para los demás y el mundo. ¿Que necesitamos para responder a esta vocación?