CanonizacionAbril

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Subsidios para el retiro mensual:
Hemos elegido el siguiente titulo para reflexionar acerca del camino de santidadproceso de toda una vida- a lo largo de todo este año. En cada mes les vamos a proponer un
paso de este camino. Que nos sirva para seguir a Jesús por el camino de la santidad a la que
hemos sido llamados.
AÑO DE GRACIA: CAMINO HACIA LA SANTIDAD
En este mes de Abril contemplaremos la Cruz a la luz de las experiencias del P.
Arnoldo. La Cruz, la debilidad, el dolor son elementos indispensables en el “camino de la
santidad.
“...La debilidad de Dios es mas fuerte que la fortaleza de los
hombres...” (1 Cor 1, 25 )
Esta frase de S. Pablo se hizo carne en la vida del P. Arnoldo
El mismo recuerda los tiempos anteriores a la fundación: “ Me percate muy pronto, no
importa a donde llegara, que me miraban con mucha compasión como una persona que
sufría bajo el peso de una mente exaltada”
Y no era su parecer subjetivo, sino que realmente los demás lo consideraban incapacitado
para este proyecto, dado que seria según ellos “un personaje singular sin sentido de orden ni
talento organizador.”....expreso: “ El loco Jansen paso por aquí le di diez marcos para
librarme de el ”
Y su propio hermano que al principio estaba entusiasmado en difundir la idea de la
fundación del seminario misionero desistió frente a tantos comentarios negativos referente
a estos planes y la falta de idoneidad de su hermano. Escribió su renuncia para no
desprestigiarse.
Loco, incapaz, poco practico, insignificante, poco elocuente fue el hombre cuya obra esta
perdurando ya mas de cien años y extendida en los cinco continentes, porque este hombre
lo único que deseaba es que el Amor de Dios sea conocido por todos. Y por eso fue tenaz
hasta la locura de seguir la voluntad de Dios. Incapaz a los ojos humanos, sin embargo
experto en reconocer la voluntad de Dios en su corazón y en las circunstancias de cada día.
Poco practico según lo que lo rodeaban pero la enorme construcción de Steyl la llevo a
cabo sin seguridades económicas y la gran imprenta que divulgaba el amor y la
misericordia del Sagrado Corazón de Jesús fue muestra de su espíritu adelantado a la época.
¿ Donde esta el secreto?
Nos lo revela en sus escritos:
“En mal estado anímico y enfermo llegue a mi casa donde debía a hacer frente a la fuerte
tentación a lanzar todo por la borda....
Tuve mi época de pesadas luchas me parecía como que debía dejarme crucificar para el
caso que realizara la obra.”
“...Nosotros anunciamos a un Cristo crucificado, escándalo para los judíos y locura
para los paganos, pero fuerza y sabiduría de Dios para los que han sido llamados..."
¿ Es la cruz nuestra fuerza y sabiduría en la misión?
¿No tenemos muchas veces criterios “paganos” donde lo débil lo frágil lo pequeño no vale?
¿Cuántas veces evaluamos mirando el éxito, lo que luce, las apariencias etc.?
Queremos abrazar la Cruz como fuente de fortaleza y sabiduría en nuestra
vida misionera.
Mayo: DESPOJO de Jose (su casa)
Junio: Imbuido en el Amor de Dios (divino- humano) Sagrado Corazón de Jesús
Julio: José – su Encarnación
Agosto: Arnoldo – Providencia, Confianza
Septiembre: Hacerse todo para todos, Amor heroico de Jose.
Octubre Que Dios, su Corazon viva en todos
Noviembre: Su amor a la Iglesia
Diciembre: Que todos se Salven
Subsidios para el retiro mensual: MAYO
Seguimos reflexionando como provincia acerca de nuestro camino de santidad a la
que todas hemos sido llamadas, contemplando la vida de nuestros futuros santos.
AÑO DE GRACIA: CAMINO HACIA LA SANTIDAD
En este mes de Mayo contemplaremos a la luz de las experiencias del P. José la
virtud del despojo como otro elemento indispensable en el “camino de la santidad.”
“Si el grano de trigo que cae en la tierra no muere, queda solo;
pero si muere, da mucho fruto. El que tiene apego a su vida la
perderá; el que no está apegado a su vida en este mundo, la
conservará para la Vida eterna” Jn. 12, 24-25
Este ultimo mes de otoño, en el umbral del invierno puede inspirar nuestra reflexión
sobre el despojo, el perder la vida para recobrarla. Al ver los árboles “desnudos” de su
follaje florido podemos recordar a José tan reconocido y amado por los suyos a lo largo de
su vida, pero al mismo tiempo continuamente llamado a despedirse, a dejar, a desarraigarse
y empezar de nuevo. Hojas caídas al lado del árbol representan lo valioso que se perdió,
pero al mismo tiempo lo que fertiliza la tierra para seguir creciendo y al año siguiente, con
más fuerza y riqueza interior llenarse de nuevo de "follaje".
Para poder apreciar el alcance del despojo en la vida de José es indispensable
conocer su contorno familiar y su extraordinaria forma de ser que irradiaba bondad y
entusiasmo. Que fácil sería caer en la tentación de quedarse en los lugares conocidos siendo
amado y reconocido a tal punto que ya como joven tenia fama de santo. Sin embargo él
seguía siempre la voz del Señor que lo enviaba a otra viña.
Cuanto le costó la despedida de los suyos, lo dice el mismo: “ Mis padres vinieron a
mi encuentro una hora y media antes de llegar a mi pueblo natal: Yo veía en sus rostros
cuan dura les sería mi partida. Aumentó el dolor al saber que solo dos días podía
permanecer con ellos. Pronto llegó la noche del segundo día. No quiero describir los
últimos momentos. No se olvide que el misionero es como todos; tiene en su pecho un
corazón que siente como los demás. El ve a su bueno y ya anciano padre, a su querida
madre, a sus hermanos anonadados de dolor y sus rostros llenos de lagrimas. Yo pedía a mi
padre la bendición, luego se la di yo a todos...y me despedí para quizá no volver a verlos.”
En el barco sufrió el vértigo frente al futuro y se sintió abandonado y aplastado
“...llega un tiempo en la vida humana, cuando la amorosa mano de Dios parece ausente ...
durante estos días nuestro Padre me ha dado una que otra de estas amargas gotas, el sabor
de abandono y de la desolación.”
Tan humano en sus sentimientos, tan enamorado de su tierra y de su gente, deja y
sigue. Así también lo hizo toda su vida en cada campo de misión: amó su pueblo
profundamente y en poco tiempo con inmenso dolor deja comunidades llenas de vida para
formar otras. El mismo cuenta:
“ Cuando he recibido la orden de su Eminencia de dejar las florecientes comunidades de
cristianos y buscar una nueva tierra en el Shantung Sur, todo se tornó negro ante mis ojos, y
una pesada carga pesaba sobre mi corazón. Yo no quiero disimular este miedo y angustia.
Pero reuniendo mis pocas pertenencias, me puse en camino, sin saber adonde.”
En su vida apostólica lo experimenta una y otra vez: sentirse amado, realizado y en
el mejor momento del crecimiento de un proyecto apostólico tener que dejarlo todo para
empezar de nuevo.
Es querido y valorado tanto por el pueblo como por sus compañeros y superiores.
Al entregarse con entusiasmo a la tarea de la evangelización el pueblo le respondía,
encontrando en el un testigo auténtico del Amor de Dios. Las palabras de su primer obispo
resumen acertadamente lo que fue José en toda su vida - una perla. " Tome a mi hijo
Freinademetz....en él le doy la perla de mi diócesis."
Sin embargo lo valioso de esta perla no consistió en los éxitos apostólicos ni en su
agradable forma de ser sino en este constante anonadamiento. Finalmente aunque como
dicen los testigos todavía no quería morir, entrego su salud y fuerzas físicas en la plenitud
de la vida. Murió a los 55 años de edad diciendo “ Bien, hemos llegado hasta aquí. Ahora,
adelante y hacia el cielo”
En este retiro te proponemos recordar los momentos de despojo a lo largo de tu vida
y misión. Entra en aquellos sentimientos. Si tu entrega no hubiera sido tan plena como la de
José, hoy puedes ofrecer a Dios una vez más aquel dolor.
Mira todas "tus hojas" viendo lo valioso que has entregado a lo largo de tu vida, y
que esto te colme de alegría y esperanza sabiendo que la tierra de nuestra limitación
humana esta enriquecida por lo que hemos entregado con amor y con fe.
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