ORIENTACIONES PARA PROFESORES DE ALUMNADO CON TDAH Los niños que presentan TDAH necesitan funcionar en un aula organizada y relativamente estructurada. Las estructuras externas les ayudan a apreciar qué se espera de su comportamiento, a anticipar las consecuencias positivas o negativas del mismo y a facilitar el autocontrol. Una buena organización del aula previene problemas de conducta. Necesitan ayuda para: organizarse el tiempo, para abordar los aprendizajes escolares con un mínimo de garantías de éxito, esto conlleva tener en cuenta unas consideraciones especiales a la hora de tomar decisiones metodológicas y de evaluar los aprendizajes. De aquí parte nuestra clasificación en orientaciones al profesorado. 1.-EL ESPACIO 1.A.-EN EL AULA: Sentarle en el lugar adecuado, lejos de estímulos, enfrente de él, entre niños tranquilos y a ser posible cerca del profesor. Darle órdenes simples y breves. Establecer contacto visual con el niño. Estructurar el espacio físico, mediante una disposición por filas que permita la discusión sin entorpecer el trabajo independiente. Se debe evitar agrupar las mesas para la realización de trabajos en grupo ya que se incrementan las distracciones. Si deben trabajar en grupo, las colocaremos en forma de U. La colocación de las mesas debe facilitar la movilidad del profesor por el aula. Es aconsejable que el profesor se sitúe cerca de los alumnos con TDA-H. Para los alumnos con déficit de atención es conveniente NO cambiar de lugar (pupitre) durante un período largo. Debemos evitar que los alumnos con TDA-H se sitúen cerca de ventanas o de la puerta para minimizar las distracciones visuales y/o auditivas. Cuidar que en las aulas sólo estén los materiales indispensables para el trabajo a realizar. Evitar tener a la vista objetos interesantes que inviten al niño a manipularlos en lugar de centrarse en su trabajo. Disminuir los estímulos irrelevantes presentes en la clase, colocándolos fuera de su campo visual, también se puede crear un rincón sin estimulación. Estructurar el ambiente con señales visuales acerca de lo que se espera de él. 1.B.- RECREO- ESPACIOS ABIERTOS Y CAMBIOS DE ESPACIOS. FAVORECER MOMENTOS DE ACTIVIDAD ADECUADA Intentar que su movimiento sea adaptativo haciendo pequeñas tareas que le ayudarán a descargar la tensión acumulada por haber estado quieto (ir a hacer fotocopias, repartir hojas, borrar la pizarra, que acuda a la mesa del profesor para mostrar sus tareas,…) disminuyendo así la frecuencia con la que se levanta de la silla de forma inadecuada. El objetivo es que se levante de la silla en determinados momentos y de forma estructurada Alternar el trabajo de pupitre con otras actividades que le permitan levantarse y moverse un poco. Enseñarle a conocer los sentimientos para que puedan resolver los problemas sin tener que llorar, recurrir a la agresividad, u otras conductas no deseadas…. Entrenarle en cómo pedir las cosas que desea, cómo preguntar, cómo rechazar educadamente una petición , … Organizar juegos para que el alumno aprenda a resolver conflictos. 1.C.- MATERIALES DE TRABAJO. Enseñarle y obligarle a mantener el orden en su mesa. Elegir cuadernos de actividades con formato sencillo evitando dibujos que no estén relacionados con la actividad a realizar. Poner la información de manera explícita, utilizando todo lo que pueda servir, como pistas, recordatorios, señales: post-it, fichas, listas, dibujos, etc. Enseñarle destrezas de organización, como organizar los cuadernos por colores… Dar cinco minutos a toda la clase para organizar el material como parte de la rutina diaria, para que revise si tiene el material necesario, lo ordene y elimine de la mesa lo que no vaya a necesitar. Supervisar las tareas cuando escriba en el cuaderno. Proporcionarle actividades que no le resulten monótonas ni aburridas dentro de un funcionamiento diario de clase estructurado, presentando las tareas con un material más atractivo. Ayudarle en la valoración de sus actividades mediante un autorregistro, tanto cuando concluya con éxito, como cuando no lo consiga. 2.- TIEMPO: No suelen tener conciencia del tiempo por lo que debemos ayudarles con marcadores de tiempo. No sirve darles más tiempo en determinadas ocasiones porque lo perderán igualmente. El tiempo hay que convertirlo en algo real, con relojes, temporizadores, cronómetros, relojes de arena, etc. Supervisar conjuntamente las tareas de cada día, sin enfados Avisar con tiempo los cambios que se efectúen en relación con las demás rutinas. Planificar sus acciones: tener organizado su trabajo y sus descansos para posteriormente enseñar al niño a planificarse sus tareas y a usar una agenda como medio de apoyo. Desglosarles el futuro, advertirles de lo que llega a través de la realización de tareas presentes. No tanto hablarles de la meta sino desglosarle en pasos pequeños centrándoles en el aquí y ahora, y guiarles en su actuación. Programar la realización de tareas que requieran esfuerzo mental después de períodos de movimiento motor intenso como los recreos, clases de gimnasia, partidos o deporte. El niño o joven ha de estudiar en casa cada día, a la misma hora y a ser posible durante el mismo espacio de tiempo. Para ayudarle a organizarse hemos de fijar objetivos claros y concretos para el tiempo de estudio. Confeccionar conjuntamente con el niño, un horario que sea realista y se pueda cumplir, ayudándolo a distribuir el tiempo por asignatura según la dificultad comenzando siempre por la asignatura más sencilla, de esta manera evitaremos que el niño se desmotive rápidamente... Programar, siempre, un pequeño descanso. 3.- RELACIONES PERSONALES 3. A.- CONSIDERACIONES ENTRE PROFESIONALES SOBRE TDAH. Procurar la suficiente y necesaria coordinación entre el profesor de la asignatura y el de apoyo para que las actitudes hacía el alumno y las indicaciones metodológicas sean las mismas. Suficientes horas de apoyo individual a la semana, tanto por parte del PT como de otros profesores, en las asignaturas fundamentales. El profesor de apoyo individual ha de ser la misma persona durante todo el curso y estar coordinado permanentemente con los respectivos profesores de las diversas asignaturas. Cambio a pensamientos positivos, en lugar de pensamientos derrotistas o autodestructivos Ser un profesor que comprenda y asimile el trastorno del niño, que se informe sobre él. Evitar humillarle o contestarle en los mismos términos. Evitar insistir siempre sobre todo lo que hace mal. Tener entrevistas frecuentes con los padres para seguir su evolución. Relacionarse con los niños de forma tranquila y relajada, prestando atención a sus comportamientos adecuados (permanecer sentado, realizar las tareas propuestas, etc.) e ignorando las conductas inadecuadas y perturbadoras (siempre que no comprometan su integridad física ni la de los otros). Mostrarse firme y seguro cuando se han de cumplir las reglas y normas escolares, pero evitar las amenazas, castigos y reprimendas. Emplear sistemas de puntos, fichas y otros privilegios para controlar el comportamiento desadaptado. Alabar al propio niño por sus logros diarios y elogiar a otro alumno como modelo de conducta a seguir. Evitar hacer comentarios sobre la falta de atención. Establecer un vínculo afectivo o de entendimiento puede hacer que mejore su conducta. Utilizar palabras positivas de apoyo a lo largo del trabajo y en las correcciones de sus errores. Cualquier medida que se adopte con este tipo de alumnado deberá estar consensuada por todos los profesionales que incidan sobre él, pues, deberá marcar nuestra actuación a partir de ese momento. 3.B.- RELACIÓN ENTRE IGUALES Establecer compañeros de supervisión o tutores: que le den feedback de inmediato y así poder disminuir la dedicación del profesor. Contener o controlar estos movimientos para que no sean reforzados por otros observadores (CONDUCTAS DE MOVIMIENTO) Determinar ciertas metas fáciles de conseguir y se reforzará a toda la clase, como consecuencia de la consecución de la meta por parte del niño. Colocar junto al estudiante compañeros que sean modelos apropiados Instaurar un sistema de tutoría de un compañero que le ayude a revisar los conceptos fundamentales de la lección. Permitir que el niño con déficit de atención explique los conceptos aprendidos en la explicación a otro compañero más lento que él en el aprendizaje. Recordar con cierta frecuencia las normas sociales que regulan la clase. Qué es aceptable y qué no es aceptable, justificándolo. Pedirle que explique las reglas correctas a seguir ante situaciones concretas que pueden resultar problemáticas. Resulta conveniente poner en práctica un sistema de puntos para reforzar comportamientos adecuados y coste de respuesta o aislamiento para las conductas socialmente negativas. Si aparece una conducta perturbadora que molesta al resto de compañeros se aplicará el sistema adoptado para extinguirla, sin comentarios críticos ni negativos. Debe ser advertido previamente de esta medida. 4.- METODOLOGÍA 4.A.- DURANTE LA EXPOSICIÓN O EXPLICACIÓN Proporcionar al alumno/a antes de la explicación que se va a explicar. un esquema de lo Exponer siempre con posible. Plantearle preguntas durante la explicación para una constante reconducción de la misma. un contacto ocular tan frecuente como sea Promover en lo posible la participación activa del alumno/a con déficit atencional durante la explicación. (que haga de ayudante en la pizarra...). Nunca explicar con ritmo lento en la presentación, porque puede distraerse mucho. Utilizar señales no verbales (gestos, cambios de entonación...) para atraer la atención y mostrar paso a paso todo lo que se está explicando, para hacerlo comprensible al máximo. 4.B.-DURANTE EL DESARROLLO DE LA TAREA Ajustar el nivel de dificultad de la tarea a fin de evitar el abandono. Favorecer el uso de las instrucciones para focalizar su atención en la tarea y en los pasos a seguir, y si es necesario apoyarse en dibujos como recordatorio. Pedirle que piense en voz alta, que cuente lo que hace, o tiene que hacer, para posibilitar la producción del lenguaje interno que medie en conducta. Dividir las actividades en aprendizajes breves que su capacidad atencional pueda asumir. Esta fragmentación de tareas se hará marcando un tiempo prudente para cada fase y así poder supervisar con más frecuencia su consecución, de forma que le vayamos reforzando positivamente, cada vez que las vaya superando. Si su ritmo es lento es preferible pedirle menos pero bien. Ser constante en la exigencia de pautas concretas en la presentación de trabajos y actividades ( margen, nombre, fecha…). Facilitar la transición de unas actividades a otras mediante claves visuales o auditivas, evitando que se den periodos largos de espera. Alternar actividades para eliminar la fatiga.(actividades de concentración/ actividades motrices… pintar, recortar, recoger, ordenar, dar mensajes…) 4.C.- REVISIÓN Y AUTOEVALUACIÓN Por medio de gráficos, signos o dramatizaciones debemos hacerle revisar el proceso de trabajo del alumno/a. Debemos enseñarle a comprobar si ha efectuado todos los pasos o si le ha faltado alguno de ellos. Comprobar si el resultado conseguido al final tiene lógica o es totalmente absurdo. Enseñarle a autoevaluarse y saber corregir con fiabilidad sus propias actividades y con nuestra supervisión comprobar que sabe también puntuarse. 4.D.- DEBERES PARA CASA. Pueden facilitarse guías, esquemas y preguntas para que pueda programar su estudio semanalmente en casa. Limitar dentro de lo posible los deberes. Dejar tiempo para que copie los deberes y revisar si lo ha hecho. Puede utilizar a un compañero responsable para que le ayude a entender las tareas a realizar. Utilice la agenda para anotar los deberes para que los padres puedan supervisar su trabajo en casa. La agenda puede servir de medio de comunicación donde se anoten las conductas positivas y aspectos a mejorar. No abusar de las críticas sobre la conducta y el rendimiento, puede ser muy negativo. 5.- EVALUACIÓN Y EXÁMENES. Proporcionarle experiencias de éxito, con el objetivo de que el niño pueda hacer atribuciones adecuadas: “el éxito es debido a mi esfuerzo y no al azar”. Es muy útil valorar diariamente sus tareas y controlar sus progresos frecuentemente. Esto les ayuda a saber qué se espera de ellos y si están alcanzando sus metas y si van en la dirección deseada por el profesor. Siempre que EL ALUMNO/A LO NECESITE se realizará la EVALUACIÓN DE FORMA INDIVIDUAL, sustituyendo las preguntas escritas por orales, las orales por escritas, según resulte más beneficioso para el alumno con Déficit de Atención. Reforzar además del resultado final, la conducta, el proceso utilizado. Favorecer el uso de las autoinstrucciones para fomentar el uso del lenguaje interno. Realizar evaluaciones cortas y frecuentes. Aspectos relacionados con los exámenes. - - - - - - - Controlar que anota bien en la agenda las fechas de los exámenes-controles y el contenido que entra en cada examen. Dar cinco minutos a toda la clase para organizar el material necesario y asegurarse de que ese alumno en concreto tiene todo el material. Es muy conveniente no realizar más de un examen-control al día Procurando que sea en las tres primeras horas de la mañana, (esta sugerencia está dirigida especialmente a los alumnos/as que estén con tratamiento farmacológico). Siempre que sea posible reducir el contenido del examencontrol con respecto a sus compañeros, una o dos preguntas por hoja y marcar el tiempo disponible dejando usar los marcadores de tiempo si fuese necesario. Tienen menos dificultad en preguntas tipo test, donde hay respuestas de elección, ya que tiene dificultades en la organización y planificación. Darles instrucciones claras y cortas, sencillamente formuladas. Destacar las palabras claves en los enunciados con escritura a máquina y formato muy claro y expresivo (usar tinta oscura). Procurar poner en un examen-control, en la misma página, dos tareas. Primero una y cuando se ha acabado se pone una segunda con mucho espacio para contestar. Y dar opción de terminarlas con el profesor de apoyo y/o refuerzo. Deberíamos evitar realizar sistemáticamente el mismo examen que los demás alumnos pero repartido en dos sesiones, pues esto le hace perder la explicación de la siguiente clase. Siempre que se pueda durante la realización del examen brindarle un apoyo individual, para centrarles la atención con preguntas como: “vuelve a leer”, “ párate y piensa”, “estoy seguro que lo sabes”,”termina la pregunta”.