Contabilidad Completa Una de las normas más antiguas de Contabilidad, la encontramos en el Código de Comercio. Sin embargo, las reglas contenidas en dicho cuerpo legal, sólo limitan y obligan a un grupo perfectamente individualizado constituidos por lo "comerciantes", es decir, por aquellos que ejecutan "actos de Comercio". Por consiguiente, son norma de carácter general, aplicadas particularmente a los comerciantes, los cuales, en Chile, constituyen un grupo dentro del universo denominado "contribuyente". Los actos de comercio se definen en el artículo 3° del Código de Comercio, puede que uno de los contratantes ejecute el acto de comercio o bien ambos o todos los contratantes ejecuten dichas acciones, fijados en veinte ejercicios de la posibilidad de hacer, según el siguiente orden: 01.-La compra y permuta de cosas muebles, hecha con el ánimo de venderlas, permutarlas o arrendarlas, en la misma forma o en otra distinta, y la venta, permuta o arrendamiento de estas mismas cosas. Sin embargo, no son actos de comercio la compra o permuta de objetos destinados a complementar accesoriamente las operaciones principales de una industria no comercial. 02.- La compra de un establecimiento de comercio. 03.- El arrendamiento de cosas muebles hecho con el ánimo de subarrendarlas. 04.- La comisión o mandato comercial. 05.- Las empresas de fábricas, manufacturas, almacenes, tiendas, bazares, fondas, cafés y otros establecimientos semejantes. 06.Las empresas de transportes por tierra, por ríos o canales navegables. 07.- Las empresas de depósito de mercaderías, provisiones o suministros, las agencias de negocios y los martillos. 08.- Las empresas de espectáculos públicos, sin perjuicio de las medidas de policía que corresponda tomar a la autoridad administrativa. 09.- Las empresas de seguros terrestres a prima, inclusas aquellas que aseguran mercaderías transportadas por canales o ríos. 10.-Las operaciones sobre letras de cambio, pagarés y cheques sobre documentos a la orden, cualquiera que sean su causa y objeto y las personas que en ella intervengan, y las remesas de dinero de una plaza a otra hechas en virtud de un contrato de cambio. 11.- Las operaciones de banco, las de cambio y corretaje. 12.-Las operaciones de bolsa. 13.- Las empresas de construcción, carena, compra y venta de naves, sus aparejos y vituallas. 14.- Las asociaciones de armadores. 15.- Las expediciones, transportes, depósitos o consignaciones marítimas. 16.- Los fletamentos, seguros y demás contratos concernientes al comercio marítimo. 17.- Los hechos que producen obligaciones en los casos de averías, naufragios y salvamentos. 18.- Las convenciones relativas a los salarios del sobrecargo, capitán, oficiales y tripulación. 19.- Los contratos de los corredores marítimos, pilotos lemanes y gente de mar para el servicio de las naves. 20.- Las empresas de construcción de bienes inmuebles por adherencia, como edificios, caminos, puentes, canales, desagües, instalaciones industriales y de otros similares de la misma naturaleza. ¿Quiénes son comerciantes? En el artículo 7° del C de Comercio, tenemos la respuesta, señala que "son comerciantes los que teniendo capacidad para contratar, hacen del comercio su profesión habitual" El Título II del Código de Comercio, enumera las obligaciones de los comerciantes y bajo el sub título "de la contabilidad mercantil", signado con el N° 2, desarrolla todo un articulado en que impone y exige llevar para su contabilidad y correspondencia Libros de Contabilidad; lengua en que deben registrarse las operaciones; correlatividad y cronología para hacer las anotaciones, centralizaciones, formación de inventarios, prohibiciones de hacer, procedimientos para salvar errores u omisiones, penas o castigos por incumplimiento, valor probatorio de los libros en juicios, calidad de fe pública que tienen los registros contables en las causas mercantiles, obligación de conservar y guardar libros de contabilidad y copia de cartas despachadas, La contabilidad de los comerciantes llevada de acuerdo a las obligaciones y procedimientos contemplados entre los artículo 25 al 47 del Código de Comercio, se ha denominado por autores y escritores como "Contabilidad Completa". Sistema de Contabilidad Completa La Contabilidad Completa, es un sistema que sigue el procedimiento y obligaciones impuestas por el Código de Comercio. En especial, lo reglado para Libros de Contabilidad (artículo 25) y Registros Contables denominados como Libros de Comercio, según lo dispuesto por el artículo N° 35 de dicho Código. Para llevar una Contabilidad Completa, es necesario cumplir con lo prescrito por el artículo 25 de C. de Comercio, lo que en la práctica resulta de hacer las anotaciones en forma diaria y cronológicamente en el Libro Diario, registros que son traspasados a otro Libro denominado "Mayor o de cuentas corrientes", para desembocar en un resumen periódico, generalmente anual, en un Libro de Balances. Como una materia complementaria, una copia de cada carta escrita por los comerciantes, relacionada con sus negocios, se deben poner en un registro especial denominado Libro Copiador de Cartas. Todas las anotaciones registradas en los Libros de Contabilidad descritos por el Artículo 25 comentado más arriba, deben proceder de "operaciones naturales" ejecutada por los comerciantes, es decir, corresponde a la verdadera realidad de sus acciones o negocios. Los libros de contabilidad contienen las declaraciones y dichos del comerciante y ellos se pueden probar sólo con las anotaciones de sus Libros y documentos de respaldo. La Contabilidad completa, llevada en la forma regulada por el C. de Comercio en sus artículo 25 al 47, hace plena prueba en los juicios agitados por los comerciantes en causas mercantiles, así se encuentra dispuesto por el artículo 35 del cuerpo legal individualizado. En desacuerdo de los litigantes con el contenido de sus Libros recién los tribunales decidirán la controversia según las demás pruebas aportadas y rendidas por las partes. Ley de Impuesto sobre la Renta. La letra A) del Artículo N° 14 del DL N° 824, desarrolla una normativa que afecta a los contribuyentes obligados a declarar según contabilidad completa para los efectos de aplicar el impuesto Global Complementario. En el inicio del artículo N° 14 Bis, de éste mismo cuerpo legal, el legislador vuelve a mencionar el concepto de "contabilidad completa". En la letra b) del N° 1 del Artículo N° 20, se introduce una norma que impide tener acceso a la tributación sobre renta presunta a aquellos contribuyentes que "obtengan rentas de primera categoría por las cuales deban declarar impuestos sobre renta efectiva según contabilidad completa". Contabilidad Fidedigna Una norma más reciente que la señalada en el capítulo anterior, la encontramos en el Código Tributario, específicamente en su artículo N° 16, bajo Párrafo segundo, con el título "De algunas normas contables". Esta norma general, regula procedimientos de carácter obligatorio para todo el universo denominado "contribuyente". A diferencia de lo estipulado por el Código de Comercio, que sólo obliga al grupo definido como "Comerciantes". La norma dispone para aquellos casos cuando la ley exija llevar contabilidad, los contribuyentes deben ajustar los sistemas contables a prácticas contables adecuadas, a fin de distinguir el movimiento y resultado de sus actividades mercantiles. Somete al criterio del Director Regional respectivo, quien puede autorizar cambio en el sistema de contabilidad que ha servido de base para el cálculo de la renta. Regula el período de meses que debe contener un balance, para los inicios o plena actividad y términos de giro, contabilización de los ingresos devengados y año para registrar deducciones, rebaja o gastos. En su artículo 17, éste Código regula la contabilidad que servirá a los contribuyentes para acreditar su renta efectiva, señalando que debe hacerlo "mediante contabilidad fidedigna"; la lengua que se usará para escribir los registros contables, período o plazo de conservación de los libros, señalando que el contribuyente debe mantenerlos a disposición del Servicio mientras se encuentre pendiente el plazo para revisión de las declaraciones; el sistema de control que usará la Autoridad Administrativa Tributaria sobre los libros de contabilidad y hojas sueltas que los sustituyan; los Libros Auxiliares que exija el Director Regional y la periodicidad con que debe hacerse las anotaciones en los libros de contabilidad. En su artículo 20, el C Tributario, prohíbe a los contadores confeccionar balances basados en borradores y no en los libros exigidos por la ley, documento que debe firmarlo el profesional autorizado, al momento de cerrar el Libro de Inventarios y Balances. El Código Tributario traspasa al contribuyente la carga probatoria de la verdad de sus declaraciones, naturaleza y monto de sus operaciones que sirvan de base para calcular los impuestos, según lo dispuesto en su artículo N°21. En dicha norma, el Poder Legislativo ha limitado el accionar del Servicio, imponiéndole la obligación de considerar las declaraciones presentadas por los contribuyentes, basadas en los registros escritos en sus libros de contabilidad; es decir, obliga a las personas que conforman el aparato fiscalizador a pensar, meditar, reflexionar con atención y cuidado las declaraciones presentadas según anotaciones escritas en los respectivos Libros. En su artículo 23, el C. Tributario, dispone en forma tácita la obligación de llevar contabilidad completa a todos los contribuyentes sujetos al impuesto a que se refieren los números 3°, 4° y 5° del Artículo 20 de la Ley de Rentas. Al facultar "a juicio exclusivo de la Dirección Regional", para liberar a los contribuyentes indicados "de la obligación de llevar libros de contabilidad completa. El artículo 23 del C. Tributario, prescribe lo siguiente: "Las personas naturales sujetas al impuesto a que se refieren los números 3°, 4°, y 5° del artículo 20 de la Ley de la Renta, cuyos capitales destinados a su negocio 0 actividad no excedan de dos unidades tributarias anuales, y cuyas rentas anuales no sobrepasen, a juicio exclusivo de la Dirección Regional de una unidad tributaria anual, podrán ser liberados de la obligación de llevar libros de contabilidad completa. No podrán acogerse a este beneficio los contribuyentes que se dediquen a la minería, los agentes de aduana y los corredores de propiedades". De las disposiciones contenidas en el Código Tributario, analizadas precedentemente, podemos concluir dos cosas: Primero: La contabilidad fidedigna mencionada por el artículo 17 y la contabilidad completa referida por el artículo 23, ambos del Código Tributarios, representan el concepto de contabilidad completa a que se han referido varios autores, comentando las normas contempladas por el Código de Comercio y especialmente lo referido a libros de contabilidad contenida en el artículo 25 de éste último cuerpo legal. Segundo: La contabilidad completa referida en el artículo 23 del C. Tributario, el Poder Legislativo ha limitado el accionar del Servicio, imponiéndole la obligación de considerar las declaraciones presentadas por los contribuyentes, basadas en los registros escritos en sus libros de contabilidad; es decir, obliga a las personas que conforman el aparato fiscalizador a pensar, meditar, reflexionar con atención y cuidado las declaraciones presentadas según anotaciones escritas en los respectivos Libros. Lo confirma el SII en Circular N°8 de 2000. La Contabilidad Fidedigna o Completa La contabilidad fidedigna mencionada por el artículo N° 17 del Código Tributario, debemos entenderla como la Contabilidad Completa a que hacen referencia varios autores, en atención a las normas contempladas por el Código de Comercio, artículos 25 al 47. Este sinónimo de contabilidad fidedigna con el de contabilidad completa, queda refrendado por el Legislador al aprobar la norma dispuesta por el artículo N° 23 del Código Tributario, en que en forma tácita, dispone como obligación de llevar contabilidad completa a los contribuyentes personas naturales sujetas al impuesto a que se refieren los números 3°, 4°, y 5° del artículo 20 de la Ley de la Renta. Del mismo modo, debemos entender las indicaciones contenidas en el DL N° 824 referidas a contabilidad completa. Como conclusión, podemos arribar, que tanto la Contabilidad Completa como la Contabilidad Fidedigna es la misma Contabilidad para ambos términos y podemos definirla, repitiendo lo expresado por la letra a) del artículo 2° del Reglamento de la Ley N° 13.011 (Decreto N° 15.141, del 30.10.1958), como: Contabilidad Completa o Fidedigna es "la ciencia que trata de la información y control de los hechos económicos y financieros procurando los medios de organización y administración más adecuados para llevar cuenta clara y exacta de las operaciones que se realizan y de sus resultados ", de acuerdo con las anotaciones registradas en los Libros principales de Contabilidad individualizados en el artículo N° 25 del Código de Comercio. El profesor don Sergio Endress Gómez, abogado, magíster en derecho de la U. de Chile, se refiere a "la carga de la prueba en materia tributaria", señala que / >la regla general sobre el modus probandi se encuentra en la norma contenida en el artículo 21 del Código Tributario, los comisionados a cargo de la redacción de esta norma en los años cincuenta, entendieron que no alteraba el mandato del artículo 1681 del CC, sino que venía expresamente a confirmarlo <. Examinando la norma el profesor individualizado dice que permite extraer los siguientes mandatos: 1.- El contribuyente debe probar la verdad de sus declaraciones y antecedentes. 2.- El contribuyente debe probar con los documentos que sean necesarios y obligatorios para él y 3.- La contabilidad fidedigna del contribuyente obliga y limita la determinación del impuesto de la Autoridad Administrativa Tributaria (S.I.I.) Examinado la jurisprudencia de la Corte Suprema, señala el catedrático señor. Endress, ha aplicado frecuentemente el primer numeral, los Tribunales en forma clara y reiterativa han señalado que la carga probatoria de los conflictos tributarios descansa en el contribuyente y dice concordar con esta posición general sobre la carga probatoria. Del mismo modo, los Tribunales la norma indicada en el segundo numeral anterior, que regula los medios que puede utilizar el contribuyente para probar la veracidad de los antecedentes que esgrime. La ley indica que deben acreditarse los hechos con los documentos necesarios y obligatorios para el contribuyente, por ejemplo, escribe, "es necesaria y obligatoria para el comerciante la contabilidad completa como lo ordena el artículo 25 del Código de Comercio". No es obligatoria la contabilidad para las personas naturales por regla general. El mandato legal busca restringir el esfuerzo probatorio del contribuyente restringiéndolo a aquello que la ley exija y no a otra cosa /. Lo anterior, escrito por el profesor don Sergio Endress Gómez, es aplicado en los hechos que digan relación en la investigación de causas agitadas entre comerciantes o por efecto de la fiscalización hecha por la Autoridad Administrativa Tributaria y le son aplicables todas las leyes y normas administrativas que regulan la materia. (Artículo publicado en el "Boletín informativo mes de abril 2006, C. Contadores de Chile A.G., páginas 37 a la 40) El profesor don Cristián Aste M., en su libro de Curso de Código Tributario, página N° 221, bajo el título NORMAS CONTABLES, señala que "los libros contables constituyen un medio probatorio de particular relevancia en materia tributaria", su explicación se basa en los siguiente argumentos: "Dado que lo que se declara debe ser lo mismo que se registra en la contabilidad, y lo que se registra en la contabilidad debe ser lo mismo que se contienen en los documentos, consideramos también que resulta razonable que se exija al contribuyente que, pruebe la efectividad de su declaración, con los antecedentes que la ley le obliga a llevar" No solamente en materia tributaria tienen esta particular relevancia, como se ha dicho, también el Código de Comercio ha destinado un capítulo muy importante para regular la contabilidad mercantil, en toda causa agitada por comerciantes, es lógico exigir que los dichos de las partes sean probadas con sus respectivos libros de contabilidad. Si se negara uno de ellos a exhibirlos está renunciando a su derecho de probar sus dichos con sus propios libros y deberá estar a lo que la otra parte pueda probar con sus respectivos libros de contabilidad. Baltasar Donoso Espinoza. Revista Colegio Contadores de Chile Octubre de 2006