La comunicación táctil en los simios mayores

ASIGNATURA: LINGÜÍSTICA GENERAL
PROFESOR: ELENA
Tema: Lenguaje animal táctil
Grupo de trabajo: Carmen, Sergio, Bilyana Aleksieva, Alberto Gómez, Spela
Jenko
24 de Febrero de 2012
EL LENGUAJE ANIMAL TÁCTIL
¿QUÉ ES LA COMUNICACIÓN TÁCTIL?
La comunicación táctil se refiere a las señales transmitidas a través del contacto de la
piel o partes exteriores de los seres vivos. Estas señales sirven al alcance de la mano y tienen
una gran importancia entre los primates, como una forma de indicación de amistad y para
tranquilizar. Los mecanismos principales son:
 Transmisión por vibraciones. Actúan sólo en distancias muy cortas. Para indicar su
presencia a las hembras, los machos de las arañas de estuche hacen vibrar sus membranas de un
modo característico. Los cocodrilos producen vibraciones desde el interior de sus cuerpos para
producir vibraciones que la hembra pueda percibir.
 Transmisión eléctrica. Algunos peces que viven en los ríos lodosos de América del
Sur y África usan estas señales capaces de atravesar cuerpos sólidos. Son utilizadas para la
agresión, para el cortejo y para orientarse.
La comunicación táctil, o transmitida mediante el tacto, es especialmente importante en
los animales sociales, incluyendo los insectos. Los miembros de una colonia de hormigas, por
ejemplo, se lamen y se rozan a cada momento; esas actividades refuerzan los vínculos sociales
de las hormigas.
EL TACTO CORPORAL
El tacto y el contacto corporal son utilizados extensamente por los primates, sobre todo
por los mandriles, los gibones y los chimpancés. Esos animales suelen unirse en cálidos abrazos
y también pueden tocarse ligeramente, empujarse, morderse o incluso besarse. El acicalamiento
(el acto mediante el cual los animales se lavan unos a otros) es una forma más estructurada de
comunicación táctil que ayuda a los primates a establecer un dominio social y a fortalecer los
lazos afectivos.
La efectividad de la comunicación táctil está limitada por la distancia –un animal debe
ser tocado por otro para transmitir información. No obstante, la comunicación táctil puede
producirse en medio de una oscuridad total o un silencio completo.
A diferencia de otros tipos de comunicación el tacto se refiere al contacto físico entre
dos individuos, por esta razón, es posterior a las señales visuales y olfativas. Hay dos tipos de
señales táctiles.
LA COMUNICACIÓN TÁCTIL EN LOS SIMIOS MAYORES
Actualmente, la comunicación gestual es un potente medio de investigación y
comunicación con simios mayores como los chimpancés, los bonobos los orangutanes o los
gorilas gracias a la transmisión de información a través de un número reducido de símbolos que
actúan como recurso comunicativo. Entre los tipos de comunicación encontramos los visuales,
los auditivos y los gestuales. Estos últimos cuentan con un carácter mucho más inmediatos y
directos, por lo que le corresponden muchas veces secuencias informativas de carácter muy
intenso (juego físico, cuidados, morder, pegar, empujar, etc).
Hay que afirmar que entre los tipos de gestos que existen en los simios mayores existen
algunos que todos ellos entienden (que se definen como potencialmente ritualizados) y otros que
son particulares de su especie (y que me mencionan como típicas de las especies). Entre los que
todos pueden entender se encuentran los de tipo visible y táctil, mientras que los que solo la
especie comprende incluyen tanto a los dos referidos como a la comunicación auditiva (v.
Gráfico 1).
La trascendencia de la comunicación táctil es muy alta en relación con los modelos
comunicativos de los simios. Aunque no es la única, y podemos decir que los datos que aquí
aportaremos quizá dan una idea mayor de lo que la realidad es, de acuerdo con el estudio
llevado a cabo por algunos de los más reconocidos investigadores del área en 2004 sobre los
chimpancés, sobre un total de 1843 gestos reconocidos eran de comunicación táctil hasta un
76,3% (que se elevaba hasta el 86% en secuencias repetitivas) frente a un 17,3% de los visuales,
o un 6,4% de los auditivos. Como complemento a este dato, cabe señalar que en el caso de los
gorilas se ha estimado que la modalidad de la gestualidad táctil se corresponde con un 33% del
total de tipos de gestos identificados, pero al mismo tiempo alguno de estos gestos llega a tener
hasta diez funciones diferentes, como es el de tocar, el que tiene mayor versatilidad junto con
otros de este tipo como agarrar una mano o dar una bofetada a otro.
El significado directo de estos gestos no lo conocemos, pero sí cuáles son las
intenciones que motivan estas actuaciones. Para ello, podemos hacer una generalización que
tiene muy pequeñas variaciones como son el acceso al otro, la afiliación, la comida, el
acicalamiento, el cuidado, el juego, el espíritu de lucha y el comportamiento sexual. Buena parte
de estas acciones se integran en secuencias de gestos que caracterizan a estas especies, y que
suelen integrarse en un proceso que puede llevar aparejadas distintas reacciones por parte de los
receptores, como indica el gráfico 2. En ese sentido, entre las secuencias gestuales obtenidas de
los chimpancés, la mayoría son de tipo táctil y se producen en contextos de juego.
Existe un alto número de gestos que deberíamos destacar como referencia a la variedad
del fenómeno que estamos tratando, pero nos centraremos en una enumeración con el objetivo
de aportar una aproximación al ámbito táctil en los simios. Entre los más destacados están tocar,
agarrar, pegar, abofetear, agarrar-tirar-empujar, empujar, abrazar, tocar la cabeza de otro,
empujar y dar un toque largo en la cabeza. Pero existen otras muchas variedades como el
agarrar con dos manos, el agarrón y empujón con dos manos, el mordisco formal, el mordisco
gentil, y otros tipos de mordisco, golpetear a otro, agarrar a otro y tirar hacia uno mismo,
golpear con un objeto, dar una patada, tocar repetidamente a otro con un dedo, posicionar a
otro agarrándolo con las manos y llevándolo al lugar considerado (usualmente en el
acicalamiento), saltar sobre otros individuos, dar un puñetazo, agarrar con una o dos manos,
golpear a otro con retirada y fuerte movimiento de la palma de la mano, caminar en tandem,
tapar a otro con la palma de la mano y tocar de forma corta o larga.
Las potencialidades de la comunicación táctil son el contacto físico y la falta de
necesidad de que el interlocutor del gesto esté prestando atención previa. De hecho, los índices
que se han realizado con relación a la respuesta ante los gestos realizados por distintos tipos de
simios manifiestan que entre los más altos niveles de reacción (positiva o negativa) se
encuentran los relacionados con las intervenciones a través del tacto. Entre los más destacados,
chocar las manos tiene una efectividad del 100% y empujar el cuerpo del 85%, mientras que los
mordiscos tienen un 82%. Abrazar tiene una efectividad del 70%, empujar un 69,1% y los
toques amistosos un 62%.
LA COMUNICACIÓN TÁCTIL EN LOS CÁNIDOS
El mejor amigo del hombre constituye otro ejemplo útil para la ejemplificación de la
comunicación táctil, fundamentalmente con el objetivo de expresar su rango social dentro de la
jauría o sus formas de convivencia incluso con los humanos. Por ello, se han desarrollado dos
tipos de señales: las de dominancia y las de sumisión.
Entre los de dominancia, existe toda una serie de gestos que configuran el modo de
relación entre los cánidos y los animales de su entorno. Uno de los gestos más conocidos es el
apoyo de los miembros anteriores sobre otro individuo, ya sea otro perro o una persona. La
recepción que hace un perro saltando y apoyando sus patas delanteras sobre el cuerpo de su
dueño es una de las señales táctiles más observadas en la interacción de un perro con su
propietario e interpretada como un saludo. Si bien esta interpretación no es incorrecta, es
importante saber que este saludo es realizado en actitud de dominio de la situación. En otras
palabras, el saltar sobre un ser humano es la forma de saludar que tienen los perros dominantes.
Esta actitud también es adoptada durante el juego con humanos o con congéneres y siempre
lleva implícito el mismo mensaje por parte del perro: “estamos jugando, pero yo mando y pongo
las reglas.”
La demostración de la posición jerárquica a partir de montarse a otro perro, más allá de
la actitud típica de apareamiento, se puede manifestar de distintos modos. Por ello, dentro de las
señales de dominancia, podemos enumerar toda una serie de fenómenos que contextualizan la
circunstancia inmediata que les afecta. En ese sentido, un ejemplo sería la presión de un perro
sobre el cuello de otro al rodearlo con la boca abierta. Esta señal está basada en el
comportamiento que utilizan las madres para trasladar y dominar a sus cachorros. Lo mismo
indica el acto de rodear el hocico de un subordinado con la boca abierta. Esta señal es utilizada
en la jauría por el perro líder y tiene como función controlar el comportamiento de sus
seguidores.
De hecho, si una persona se encuentra con un perro extraño, macho y adulto, y como
actitud amistosa intenta acariciarle la cabeza o el cuello, existen grandes posibilidades de que
esta conducta sea interpretada por el perro como una señal dominante y, por lo tanto, se
produzca una reacción agresiva por parte del animal. Este tipo de reacción tiene su correlato en
la acción de muchos perros de tomar con la boca el brazo de su dueño o la correa durante los
paseos, que muchas personas interpretan que el animal está jugando o quiere llevarle a algún
lado, ya que con ello el cánido intenta indicar a través de señales táctiles de dominancia que el
líder de ese grupo es el perro y no el dueño.
2ª) Señales de sumisión.
Entre las señales táctiles destinadas a demostrar nivel social bajo, llamadas señales de
sumisión, las más comunes son:
El hociqueo, que consiste en dar pequeños golpecitos con el hocico y lamer ya sea el
hocico de un congénere o la cara y las manos de una persona. Esta conducta es reflejo de
aquella utilizada por los cachorros para solicitar comida a los congéneres adultos y se observa
con mucha frecuencia en los lobos.
Es importante tener en cuenta que en muchos casos este comportamiento se modela con
el aprendizaje y es utilizado por muchos perros para captar la atención de sus dueños.
El cabeceo que realiza el animal cuando busca poner su cabeza bajo la mano de su
propietario.
Esta señal suele ser utilizada por los perros para pedir caricias desde una posición de sumisión.
Para las personas que interactúan con perros propios o ajenos es de vital importancia el
conocimiento de estas señales, ya que sólo así es posible entender las actitudes de los perros y
evitar situaciones de agresión como consecuencia de conductas humanas que no son
comprendidas por los animales, o viceversa.
ALGUNOS EJEMPLOS DE ESPECIES VARIADAS
GRÁFICO 1
GRÁFICO 2
GRÁFICO 3
Pero no se le asigna tanto un proceso comunicativo en el que muchas veces la falta de
respuesta del interlocutor conduce a la comunicación táctil. Buena parte del aprendizaje de los
chimpancés se produce por iniciativa individual, de hecho.