I CONGRESO PARA EL ESTUDIO DE LA VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES PONENCIA SOBRE HERRAMIENTAS PARA LA SEGURIDAD Y PROTECCIÓN DE LAS VÍCTIMAS INTRODUCCIÓN: En el año 1998 desde el C.M.I.M de La Rinconada, entonces Área de la Mujer, partió la iniciativa de convocar a varios técnicos de distintos departamentos de nuestro Ayuntamiento, con el fin de coordinarnos y unir nuestros esfuerzos en la lucha contra la Violencia hacia la Mujer. Mantuvimos reuniones de trabajo que culminaron el año 2000, cuando se constituye formalmente la Comisión Local Contra la Violencia de Género, al ser aprobada por el Pleno municipal del 15 de marzo del 2000. Desde entonces hemos ido creciendo, tanto cuantitativa como cualitativamente, siendo siempre ambiciosos e inconformistas y con muchas ganas de avanzar. Sin embargo, al formar parte de una Administración dinámica, en la que las personas evolucionan profesionalmente y cambian de destino, sumado a que la coordinación multidisciplinar es fundamental, vimos la necesidad de plasmar por escrito los protocolos y normas de funcionamiento de cada departamento, con la finalidad de que por encima de las personas, quedase claro la forma de proceder en las distintas situaciones que pudiera verse afectado cada departamento que componía la Comisión, así como las relaciones interdepartamentales y sus nexos de unión. A mediados del año 2008, nos planteamos desde la Comisión Local elaborar un Protocolo Local de Coordinación en esta materia, para transmitir nuestras experiencias y conocimientos a nuestro Ayuntamiento. Bajo la dirección y coordinación del C.M.I.M. de La Rinconada elaboramos el Protocolo de coordinación y seguimiento para la prevención de la Violencia de Género y atención a mujeres víctimas del municipio de La Rinconada. Es un documento base con vocación continua de actualización, para que no quede desfasado en corto espacio de tiempo. Este Protocolo, se incluyó en una Guía, elaborada por Diputación de Sevilla, sobre la creación y funcionamiento de las Comisiones Locales de Seguimiento Contra la Violencia de Género. Con este Protocolo, en el caso concreto de mi departamento, cualquier Policía, independientemente de su formación o especialización, sabe perfectamente los pasos a seguir en el momento en que conoce un episodio de Violencia contra la Mujer, abarcando este documento las posibles variantes que pueda presentar cada caso en concreto, minimizando al máximo la posibilidad de improvisación o malas interpretaciones, cumpliendo precisamente la finalidad principal, unificar criterios y dar las respuestas adecuadas. Pág. 1 I CONGRESO PARA EL ESTUDIO DE LA VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES En el Protocolo, un apartado importante está dedicado a las herramientas que garantizan la seguridad y protección de las Victimas, que hemos querido resumir en un flujograma, que a continuación paso a desarrollar. . En los 12 años de funcionamiento de la Comisión Local, siempre hemos trabajado desde dos perspectivas fundamentales: La prevención, encaminada a evitar que se produzcan episodios de Violencia Contra las Mujeres. La actuación policial, o reacción inmediata en cuanto tenemos conocimiento que se ha producido un presunto delito de Violencia de Género. PREVENCIÓN PARTICIPACIÓN POLICIAL EN CHARLAS... Desde el ámbito de la prevención, los miembros de la Comisión hemos participado principalmente con adolescentes, en jornadas en Centros Escolares de secundaria, coloquios, programas de radio y foros con asociaciones vecinales. Todos los lugares o ambientes donde hemos tenido acceso y entendemos que transmitiendo nuestra información, podemos aportar aspectos positivos para evitar que se produzcan o se sigan produciendo episodios de Violencia de Género. NO DESEA DENUNCIAR..... En muchos casos nos encontramos con el problema de que teniendo conocimiento de un posible suceso relacionado con la Violencia de Género, la mujer no desea denunciar, intentando minimizar lo ocurrido o enmascararlo, bien por miedo o por otras circunstancias diversas. En esos casos contactamos lo más discretamente posible con la víctima, nunca en presencia del agresor, la informamos de forma que le sea perfectamente comprensible, de todos sus Derechos, de las prestaciones sociales que le corresponden cómo víctima de Violencia de Género y de la protección que le asistirá en el momento en que denuncie. Si no está convencida, la invitamos a que se asesore en el CMIM, pero si en todo caso persiste en no denunciar, actuamos de oficio y lo ponemos en conocimiento de la Autoridad Judicial. SEGUIMIENTO ÓRDENES DE PROTECCIÓN Otro aspecto preventivo es el seguimiento de las Órdenes de Protección en vigor dictadas por la Autoridad Judicial. Este control lo efectuamos en coordinación con la Guardia Civil, repartiendo mensualmente el 50% de las Órdenes para cada Cuerpo, que efectuamos realizando visitas domiciliarias, si es posible por Agentes especializados de paisano y con vehículos sin distintivos policiales. Pág. 2 I CONGRESO PARA EL ESTUDIO DE LA VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES Al estar en dependencias policiales conjuntas, mantenemos comunicaciones continuas con los compañeros de Guardia Civil, para comentar y coordinar aspectos específicos relativos a Órdenes de Protección concretas. VIGILANCIA ESPECIAL ORDEN DE PROTECCIÓN DE ALTO RIESGO Cuando tenemos una Orden de Protección de Alto Riesgo, independiente del Cuerpo que lleve el seguimiento, nos reunimos y concretamos las medidas necesarias y específicas para garantizar plenamente la seguridad de la mujer a proteger, aportando cada Cuerpo los Agentes y medios necesarios. CONTACTO CONTINUO CON EL CMIM Existe un contacto continuo y fluido entre el CMIM y la Jefatura de Policía Local. De todos los atestados emitidos por Delito de Violencia de Género, inmediatamente se remite al CMIM copia de los datos relevantes, respetando la Ley de Protección de Datos personales. Este flujo de información es inverso, cuando el CMIM detecta algún caso que consideren que deba conocer la Policía, inmediatamente informa de los datos necesarios, siempre encaminados a la máxima protección de la mujer, respetando las leyes de privacidad. ACTUACIÓN POLICIAL: A pesar de todas las medidas que he mencionado, por desgracias se continúan sucediendo casos de Violencia contra las Mujeres. En cuanto se tiene conocimiento de un hecho delictivo de esta índole, la actuación policial va encaminada a perseguir con todos los medios a nuestro alcance cualquier tipo de actos que constituya o genere Violencia de Género. Desde esta perspectiva, el conocimiento de los episodios violentos, suele llegar a la Policía por dos vías principalmente, que a continuación voy a analizar, en función de las circunstancias, las formas de actuar y las medidas a tomar. En un principio el conocimiento del hecho delictivo puede llegar por requerimiento en un domicilio o por personación de la víctima en Jefatura. Si el requerimiento es en domicilio puede ser por parte de la propia víctima, algún familiar, por vecinos o incluso por llamada anónima. En cualquiera de los casos se atiende con carácter prioritario y una vez en el lugar, contactado con la víctima, nos podemos encontrar con dos situaciones diferentes, que desee denunciar o que no quiera denunciar: Pág. 3 I CONGRESO PARA EL ESTUDIO DE LA VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES Que desee denunciar. Una vez evaluada la situación, si procede, se detiene inmediatamente al agresor y ser traslada a dependencias policiales. Si el agresor no se encuentra en el lugar de los hechos, en ningún momento se deja sola a la víctima, se le pregunta por la posible ubicación del individuo, vehículo que conduce, lugares que frecuenta, etc. En el caso de no ser conocido físicamente por los Agentes actuantes, se le solicitará a la víctima una foto del inculpado para su rápida localización y detención. Una dotación policial queda en el domicilio con la víctima o algún familiar mayor de edad para realizar una minuciosa inspección ocular, recogiendo pruebas, observando y tomando nota de todos los detalles relevantes para el posterior atestado judicial( enseres rotos, objetos desordenados, posibles armas utilizadas, que se incautarían, manchas producto de la violencia ejercida, etc.) complementándolo con reportaje fotográfico, con el permiso de la víctima, con la finalidad de que la Autoridad Judicial, a la vista del atestado, tome plena conciencia de lo ocurrido en ese domicilio, el nivel de violencia desplegado por el agresor y así pueda obrar en consecuencia. Si tenemos personal suficiente, paralelamente se toma filiación completa de los posibles testigos, bien sean familiares, vecinos, etc., y se les cita en comparecencia en Jefatura. Esto debe realizarse lo antes posible, porque si transcurre el tiempo, los testigos que al principio manifestaban haberlo visto u oído todo, en muchos casos tienden a no querer complicarse y no testifican o desarrollan amnesia repentina. Si no tenemos personal suficiente, el equipo que va a realizar la inspección ocular, asegura el lugar de los hechos, toma filiaciones de testigos, antes de que se marchen y posteriormente realiza la inspección ocular. Que no desee denunciar: Si estamos en el domicilio y se encuentra presente el agresor, intentaremos hablar con la víctima a solas, lo más distante posible, para que no se sienta coaccionada en forma alguna y facilitar así su libre expresión. Tendremos en cuenta que la relación víctima/agresor no es la de un delito de agresión normal; entre ellos hay una relación de convivencia, afecto, hijos comunes, posible dependencia económica, etc., por lo que la víctima, si es la primera vez, estará confusa y desorientada, ante una situación que le supera con sentimientos contradictorios. Es por lo que los Agentes actuantes deberán manejar la situación con mucho tacto. Pág. 4 I CONGRESO PARA EL ESTUDIO DE LA VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES Con tranquilidad la informaremos de todos sus Derechos, prestaciones y medidas de seguridad de forma que le sea plenamente comprensible. Si percibimos que el estado de ánimo de la víctima es muy bajo o se siente insegura, conviene no plantear en ese momento nada de denuncia e invitarla a Jefatura con cualquier pretexto. Una vez allí, lejos del lugar de los hechos, en un ambiente más relajado y seguro, se le pide relatar lo ocurrido y si se considera oportuno, formular la denuncia. Si persiste en no denunciar y tenemos la más mínima sospecha de que se ha producido un delito de Violencia de Género, la invitamos a contactar lo antes posible con el CMIM, a ver si en otro ambiente más relajado, asistida por profesionales, accede a denunciar. Si valorando las manifestaciones de los observado por los Agentes actuantes, posibles pruebas y comparecencia de testigos, carecemos de elementos suficientes para probar la existencia del Delito, actuaremos de Oficio, poniéndolo todo lo acontecido en conocimiento de la Autoridad Judicial. En cualquier caso, a la víctima se le proporcionan por escrito todos los números telefónicos de emergencias policiales y asistenciales. La otra forma de tener conocimiento del hecho es PERSONÁNDOSE LA VÍCTIMA EN JEFATURA. En ese momento en que la mujer decide dar el difícil paso de poner en conocimiento de la Policía los hechos que está siendo objeto, hay que ofrecerle un trato esmerado y específico, diferente a cualquier otro tipo de denuncias que cotidianamente se toman en una Jefatura. En cuanto el Agente de recepción es informado que la mujer desea denunciar un presunto delito de Violencia de Género, automáticamente, no la dejará explicar públicamente ningún detalle más y deber poner en marcha tres bloques del flujograma , que deben ser aplicados inmediatamente por este orden: 1º Evitar la victimización secundaria, para ello, sin demora, el Agente trasladará a la víctima a una dependencia interior adecuada, aparte del resto de denunciantes, si es posible específica para este tipo de delitos. Le atenderá personal especializado, a ser posible una mujer Policía, ya que con ella se sentiría más cómoda a la hora de contar ciertas intimidades de su vida privada. La Agente que atienda a la víctima, deberá procurar que se sienta cómoda y relajada, Pág. 5 I CONGRESO PARA EL ESTUDIO DE LA VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES prestarle total dedicación, sin interrupciones para no hacerla repetir innecesariamente el relato y revivir los hechos sufridos. En la dependencia que la atienda no deberá estar presente ningún otro Agente, ni acompañante de la víctima, a menos que ella lo pida expresamente. 2º Toma de denuncia, antes de proceder a tomar la denuncia cómo tal, se le informa a la víctima todos sus Derechos, las prestaciones que le pueden corresponder y la protección en caso necesario, de forma que le sea plenamente comprensible, cómo narré anteriormente. Entre sus Derechos está el de asistencia de un/a Letrado/a especializado en Violencia de Género. Si decide hacer uso de este Derecho, se solicita inmediatamente la presencia del Letrado/a, y no se comenzará la toma de denuncia hasta que se persone. Si no desea hacer uso de este Derecho, se inicia la toma de denuncia, para el cual debe existir en todas las Jefaturas un formato específico, en el que conste en un principio los aspectos formales, tales como filiaciones, fecha, etc.. A continuación habrá un apartado para la exposición de los hechos por la víctima, donde se reflejará todo lo narrado por la denunciante sin interrupciones, plasmando expresiones concretas de la Víctima que se consideren de interés judicial para mejor comprensión de lo ocurrido. Le seguirá una batería de preguntas que comprenderá un histórico de la relación con su agresor, la/s agresión/es sufridas, si han sido en el domicilio familiar y en presencia de hijos/as u otros testigos, procedimientos judiciales, denuncias presentadas y/o asistencias médicas, situación laboral y económica del agresor y víctima, agresividad con otras personas, datos de la unidad familiar, posibilidad de represalias al enterarse que lo ha denunciado, circunstancias particulares del agresor ( temperamento, consumo de alcohol y/o drogas, ludopatía, tenencia de armas, etc). De esta batería de preguntas, las que no queden claras en la exposición de la víctima se formulan, las que han quedado claras, se anulan. Se le informa la posibilidad de solicitar Orden de Protección, que en caso de rechazar, se le ofrece la posibilidad de solicitar a la Autoridad Judicial la adopción de medidas cautelares de protección. Si la víctima sufre lesiones visibles en zonas no íntimas, se le solicita permiso para fotografiarlas e incluirlas en el atestado, ya que cuando el forense la examine pueden haber desaparecido y una imagen vale más que mil palabras. Pág. 6 I CONGRESO PARA EL ESTUDIO DE LA VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES También el Instructor hará constar el estado de ánimo de la víctima (temor, tensión, ansiedad, etc.). Por último, pero no por ello menos importante, se complementará la VPR, quedando reflejado el resultado en el atestado policial. El Instructor debe tener muy claro que la finalidad principal de la denuncia y posterior atestado, es trasmitir a la Autoridad Judicial lo más nítido posible todo lo sucedido, circunstancias que rodea el hecho, así como toda la información necesaria para poder determinar la forma más efectiva de proceder. 3º Protección integral de la víctima: Desde el primer contacto de la Policía con la víctima, en ningún momento compartirá espacio físico con el agresor, por lo que estará totalmente segura, pero una vez finalizada su toma de denuncia, hay desplazamientos en los que puede peligrar su integridad física, si no ha sido detenido el agresor o posibles represalias familiares. Dentro de estos desplazamientos puede ser que necesite asistencia médica, ir a su domicilio a recoger enseres, al C.M.I.M., recoger hijos al colegio, etc., en esos casos sería acompañada por una patrulla de Policía que garantice su seguridad y para preservar su intimidad, si es posible, por Agentes de paisano en vehículo sin distintivos. En los casos en que teme volver a su domicilio por miedo a posibles represalias, desde el Ayuntamiento tenemos un acuerdo con varios hostales de la localidad, donde se les proporciona alojamiento, hasta que se resuelva su situación, bien sea por detención del agresor, traslado a casa de acogida o familiar. Se puede dar la circunstancia que el desplazamiento sea fuera de la localidad (juzgado, casa de acogida, etc.), en esos casos, el desplazamiento sería con taxis concertados y si las circunstancia lo aconsejan, escoltadas con Policías de paisano. CONCLUSIÓN: De todo lo expuesto, quiero extraer una conclusión. La Violencia de Género no es un delito más, es necesario darle un tratamiento especial, por lo que cuando un Policía tenga conocimiento de un episodio de esta clase, hay que actuar con total celeridad. Desde el primer contacto físico con la víctima, ésta debe sentir la sensación de seguridad, que la situación está totalmente bajo control, informándola y brindándole todas las facilidades que tengamos a nuestro alcance, con el fin de conseguir un único objetivo, el final de la violencia y el castigo del agresor. Pág. 7 I CONGRESO PARA EL ESTUDIO DE LA VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES Pág. 8