SOLDÓ NÚM 21 VERANO-OTOÑO 2003 INFORMATIVO DEL PARQUE NATURAL DELTA DEL EBRO EDITORIAL Este año celebramos los veinte años de la creación del Parque Natural del Delta del Ebro. Un hecho que ha supuesto un antes y un después en la reciente historia del Delta, avalado por el cambio que se ha producido principalmente, en la implantación de una nueva forma de gestionar las relaciones entre los recursos naturales y las actividades económicas y humanas. El modelo de gestión del Parque Natural, aplicado durante este periodo, es una realidad que viene marcada por la aceptación de la población local del Delta. Un objetivo que en la primera etapa representó una dificultad importante, pero que el tiempo, la lógica, el conocimiento de la realidad, la prudencia, el diálogo y el consenso han transformado esa realidad inicial en una situación de consolidación en la cual han participado muchos colectivos, desde la propia administración, los órganos rectores y directivos del Parque (en los que están representados todos los sectores e intereses que actúan en el Delta), y los habitantes que han sabido integrarlo dentro de la propia dinámica social y económica. Durante todos estos años, la política de gestión que se ha llevado a cabo desde el Parque no se puede disociar del contexto y las circunstancias que han marcado la realidad del Delta durante los últimos 20 años. El nacimiento del Parque (1983) coincidió con un momento histórico de cambios importantes que han marcado la dinámica durante estos años. Una agricultura cada vez más integrada en la protección del medio ambiente mediante la aplicación de las medidas agroambientales. Un sector pesquero y de caza que desarrolla una parte importante de su actividad dentro del área protegida y que se ha conseguido compatibilizar los usos con la propia protección del espacio natural. Unos nuevos sectores emergentes como la acuicultura y el turismo, con posibilidades de convertirse en un complemento de la economía deltaica, pero con poca identidad y con todas las dificultades que suponía partir de cero en infraestructuras y servicios. Esta realidad coincidió con un momento crucial de cambio en los temas ambientales y de conservación de la naturaleza que jurídicamente no había dejado de tener un cierto aire romántico y folcklórico por convertirse en un punto básico de la legislación de la Unión Europea. Las Directivas sobre Aves y la de Conservación de los hábitats naturales y de la fauna y flora silvestres representan las piezas básicas de conservación comunitaria y origen en toda Europa de una serie de leyes que su desarrollo también afectarán de lleno al delta del Ebro, como zona considerada de alto nivel ecológico por su importante patrimonio natural. Ante este contexto, la declaración del Parque Natural como instrumento de conservación de los valores naturales, no podía significar una carga pesada y de limitación para sus habitantes. Por eso es por lo que esta realidad ha sido del todo básica para entender la gestión que ha impulsado al Parque durante todos estos años, que ha ido encaminada por dos objetivos centrales: de una parte, conseguir la conservación de los valores naturales de una manera compatible con el aprovechamiento ordenado de sus recursos y la actividad de sus habitantes, y por la otra, ayudar al desarrollo social, económico y cultural de la población local. Han sido muchas las actuaciones que se han realizado durante estos últimos veinte años, enumerarlas todas sería muy extenso, pero las podamos resumir básicamente en: creación de una estructura administrativa y técnica, realización de obras de infraestructura, aplicación de planes de conservación y recuperación de especies amenazadas, ordenación y regulación de las actividades de caza y pesca dentro de las zonas naturales, realización de estudios científicos y trabajos de investigación, promoción del conocimiento del Delta, creación de infraestructuras de uso público , creación de programas didácticos para escolares y programas de conocimiento del Parque para el público en general, participación en programas LIFE, intercambio de experiencias con otros deltas europeos, etc. Es evidente, que pese a toda la mejora que se ha producido en estas dos décadas en la gestión de esta zona, todavía quedan muchos proyectos y actuaciones a realizar, unas de ámbito competencial más local y otras dependientes de las diferentes administraciones con responsabilidad sobre este territorio. En cualquier caso, la experiencia nos conduce a seguir trabajando en este modelo que intenta implicar y coordinar los esfuerzos de todos los sectores como fórmula por ir progresando en el desarrollo sostenible de esta zona húmeda. Este deseo, dibuja la línea de futuro a seguir en la que si conseguimos potenciar todavía más los valores naturales y los enmarcamos en un mayor grado de cultura y bienestar para la población local, los objetivos del Parque se habrán cumplido nuevamente. Immaculda Juan i Franch, Presidenta Junta Rectora PNDE NOTICIAS “ARA QUE TINC VINT ANYS” “Ahora que tengo veinte años...” sí, este año se cumple el vigésimo aniversario de la declaración del Parque Natural del Delta del Ebro, quién lo diría, no! Muchas vicisitudes ha habido a lo largo de este tiempo, mucha gente, trabajadores, colaboradores...algunos de los cuales, desgraciadamente, no podrán celebrar este acontecimiento de madurez de un proyecto ya consolidado y dinámico. Antes de continuar, querría agradecer la oportunidad que se nos da, a l’Escola del Parc, de poder hacer, desde una cierta perspectiva temporal, una breve recapitulación sobre el origen, las actividades y la estrecha relación que mantenemos con el Parque. Casi desde el momento constitutivo del Parque, este se planteó la realización de actividades educativas, como una de las tareas básicas necesarias para dar a conocer el espacio (valores naturales, culturales...), conseguir hacer propio el proyecto entre la población... En un primero momento, se organiza en el verano de 1985 el primero curso de acompañantes turísticos, y los primeros campos de trabajo. Desde entonces y hasta ahora, mucho han cambiado las cosas, se ha pasado por un largo periplo hasta llegar a la situación actual. Así, que surgimos simultáneamente con el comienzo de la declaración de los Espacios Naturales Protegidos en Catalunya, sintiéndonos herederos de este hecho. Es en aquel momento cuando se fijan las bases del origen de l’Escola del Parc, pero no es hasta 1992 (año mágico), después de años difíciles y sin solución de continuidad como personal propio de la institución, que se da el momento clave: la constitución jurídica, como cooperativa de trabajo asociado, como proyecto social desde y por el territorio. Adoptamos este nombre, siguiendo la tradición de las denominaciones como por ejemplo “La Escuela del Bosque”, “La Escuela del Mar”..., representantes de proyectos fruto de los movimientos de renovación pedagógica de principios del siglo XX, encabezados por gente como Artur Martorell o la Rosa Sensat, entre otros. De esta manera, pasamos a cubrir buena parte de las tareas informativas, interpretativas y educativas del Parque Natural. Aunque también, con el paso del tiempo, hemos abierto nuevos frentes de actuación, no directamente relacionados con el Parque. En nuestra tarea diaria, nos basamos y amparamos en los recursos que nos ofrece el entorno, intentando acercar las líneas pedagógicas y las ambientales para facilitar a los visitantes, y a otros usuarios del servicio, la experimentación, la percepción, el goce, vivir -en definitiva- este rico e importante patrimonio que tenemos en nuestra casa, que de esta manera, tengan una visión de conjunto del espacio, que entiendan qué es un todo interdependiente, buscando así, una mejora en nuestra relación diaria con el entorno, hacia la sostenibilidad. Con el objetivo de poder lograr la finalidad descrita anteriormente, las tareas educativas e interpretativas que realizamos, las desglosamos según los destinatarios, entre la población local y foránea, así como según la estructura educativa y edad a la cual van dirigidas. De esta manera, podemos diferenciar entre: A) La educación formal, aquella que realizamos conjuntamente con los centros escolares de primaria y secundaria, tanto de ámbito deltaico como foráneo. Este ámbito de trabajo, es fundamental por lo que supone a los escolares, no ya como futuro, sino como el presente que son. Las actividades van desde las que ejecutamos en las propias sedes escolares, como charlas, talleres... y aquellas otras que recibimos en nuestro centro, haciendo visitas guiadas a museos y a otros equipamientos, excursiones, estancias escolares de varios días, etc... y, B) La educación no formal, atención de grupos organizados fuera del ámbito escolar, pero que tienen una carga educativa importante, así como aquellos que sin tener una idea clara, el programa que se ejecuta con ellos lo pretende, aunque de manera oculta. Por ejemplo, realización de charlas, visitas, itinerarios a centros culturales, grupos de amigos, familiares... Organización y ejecución de campañas ciudadanas de sensibilización y concienciación medioambientales. Todo lo expuesto anteriormente, apunta claramente a lo que podemos denominar educación integral de la persona, y desde aquí, apelo a aquellos agentes tanto públicos como privados que tengan una mínima responsabilidad sobre la gestión en mayúsculas, y a todos los ciudadanos en definitiva, a tener una óptica crítica y abierta a la vez, sobre todo en un mundo, dónde vivimos momentos cambiantes, dónde pasan diariamente hechos absolutamente abominables desde el punto de vista humano. Finalmente, sólo me queda por deciros que “Ara que encara tenim força”... , todos juntos continuáramos viendo “ volar les gavines amb les plomes de diumenge” Ramon Vidal y Saborit Educador de l’Escuela del Parque, SCCL PUNTO D’AUTOINFORMACIÓ EN EL ECOMUSEU El pasado mes de abril entró en funcionamiento un nuevo sistema de autoinformación turística en el Ecomuseu. Se trata de una pantalla táctil situada en la fachada exterior del museo y adaptada a la estructura del edificio, al estilo de un cajero automático, dónde los turistas pueden obtener información una vez el centro ha cerrado sus puertas. Por medio de una serie de menús y pulsando la pantalla, el usuario puede acceder a diversa información específica del Parque y del Delta en general, como por ejemplo: servicios (alojamientos, alquiler de bicis, canoas, barcas, paseo a caballo, etc..), rutas por el Delta, museos, gastronomía, flora y fauna, ferias, fiestas y otras actividades culturales que se realizan a lo largo del año en los diferentes pueblos con término municipal en el Delta. La principal finalidad de este servicio es ampliar las posibilidades de obtener información turística a través del punto de autoinformación, una vez finalizado el horario del Ecomuseu, aumentando de esta manera la calidad del servicio que se ofrece. La pantalla táctil consta de 4 menús lingüísticos: catalán, castellano, inglés y francés. Próximamente, la Casa de Fusta disfrutará también de este innovador servicio. CURSO DE GESTIÓN DEL USO PÚBLICO EN ESPACIOS NATURALES Durante la novena edición de la Universitat d’Estiu de les Terres de l’’Ebre (UETE) se llevará a cabo el curso de Gestión del Uso Público, entre los días 16 y 20 de septiembre en Deltebre. El curso está coordinado por el Parque Natural del Delta del Ebro, con el apoyo de la Direcció General de Biodiversitat i Boscos y recibe el patrocinio del Ayuntamiento de Deltebre y de la Diputación de Tarragona. El curso está reconocido por el Departament d’Ensenyament –con una valoración de 2 créditos- y como todos los otros cursos de la UETE, cuenta con el apoyo de la UNESCO. El curso está dirigido a profesionales dedicados a la gestión de espacios naturales o a la promoción de actividades ludicodeportivas alrededor de un espacio natural, a estudiantes de ciencias ambientales, biología, turismo, magisterio y de otros campos universitarios, profesorado de primaria y secundaria y, en general, a todas aquellas personas interesadas en el tema. Los principales objetivos del programa son dar a conocer y divulgar los planes y estrategias de gestión del uso público en los espacios naturales de Catalunya. Programa: Martes, 16 de septiembre 17.00-17.15 h. Recepción y entrega de documentación. Antoni España y Xavier Abril, coordinadores del curso. Presentación del curso Imma Juan, presidenta del Parque Natural del Delta del Ebro, Josefa Beltrán, presidenta AUETE 17.15-19.15 h. El uso público en los Espacios Naturales. Objetivos, programas, equipamientos y materiales. Antoni España, biólogo y técnico del Parque Natural del Delta de l’Ebro 19.15-19.30 h. Descanso 19.30-21.30 h. Los equipamientos de recepción en los espacios naturales. Visita guiada al Ecomuseu. Xavier Abril, geógrafo, Parque Natural del Delta del Ebro. Miércoles, 17 de septiembre 17.00-19.00 h. Los espacios naturales como espacios educativos. Òscar Cid, psicólogo y director del Camp d’Aprenentage de l’Ebre 19.00-19.15 h. Descanso 19.15-21.15 h Los espacios Naturales como espacios turísticos. Albert Hernández, Mas de Bernís y profesor del Departamento de Ciencias de la Comunicación, UAB Jueves, 18 de septiembre 17.00-19.00 h. Los materiales de divulgación de un espacio natural protegido (ENP). Visita a la Casa de Fusta. Antoni España, biólogo y técnico del Parque Natural del Delta del Ebro y Fermín Morales, ingeniero técnico agrícola, técnico del Parque Natural del Delta del Ebro. 19.00-19.15 h. Descanso 19.15-21.15 h. Las empresas de guías en los Espacios Naturales. Ramon Vidal, educador social de la cooperativa de l’Escola del Parc, Viernes 19 de septiembre 17.00-19.00 h. Los programas de voluntariado. Los Voluntarios de Collserola. Sebastià Duñó, ingeniero técnico y educador de los voluntarios de Collserola. 19.00-19.15 h. Descanso 19.15-21.15 h. Los centros de documentación como elementos dinamizadores de los ENP. Teresa Canellas, bióloga, técnico de educación del Consorcio del Parque de Collserola Sábado 20 de septiembre 9.30-11.30 h. Actividades para visitantes: recorrido en barca Deltebre-desembocadura-Deltebre. Antoni España, biólogo y técnico del Parque Natural del Delta del Ebro y Xavier Abril, geógrafo, Parque Natural del Delta del Ebro. 11.30-11.45 h. Descanso 11.45-13.45 h. Como detectar las necesitados de uso público en los Espacios Naturales. Estudios y Seguimientos. Xavier Oliver, biólogo y técnico del Parque Natural de la Garrotxa. CAMPANYA DE VIGILANCIA DELS FLAMENCS En la primera fase del cultivo del arroz en el delta del Ebro se realiza la inundación de los arrozales y la siembra. En esta época los arrozales son sitios potencialmente muy favorables para la alimentación de los flamencos, especie protegida por la legislación actual. Los daños que pueden producir al cultivo son importantes y, lógicamente un factor de preocupación para los arroceros. Desde el Parque Natural se pone en marcha todos los años una campaña para evitar tanto como se pueda estos daños. Durante toda la época de riesgo hay tres brigadas nocturnas que se dedican a patrullar por toda la zona arrocera con tal de detectar la presencia de flamencos en los campos de arroz. Cuando se ven flamencos en un campo se espantan y se instalan unas luces para evitar que vuelvan. En estos casos, y como medida de seguridad, se continúa durante unos cuántos días instalando las luces, aunque no se detecte nuevamente su presencia. La campaña de este año ha sido bastante satisfactoria, puesto que los daños producidos han sido mínimos. Para mejorar la eficacia de la campaña es muy importante la colaboración de los propios payeses avisando enseguida que detectan la presencia de flamencos en su campo. INFRAESTRUCTURAS Y EQUIPAMIENTOS DEL PARQUE: UNA VISIÓN CON LA PERSPECTIVA DE LOS AÑOS En 1983 nuestro Parque empezó sus primeros pasos sin ningún tipo de infraestructura, ni tan sólo disponía de terrenos dónde ubicarlas. Esto es un valor añadido a la dificultad de la nueva implantación de un parque natural en un territorio, porque las infraestructuras son las herramientas para la gestión de un espacio natural. La ampliación del Parque al margen derecho supuso la incorporación al Parque de la Casa de Fusta, representando la primera infraestructura importante que dispone el Parque. La Casa de Fusta es un edificio canadiense ubicado en la laguna de la Encanyissada desde 1926, utilizado como refugio de cazadores. Desde el momento en qué este edificio pasa a ser gestionado por el Parque, abre sus puertas a los visitantes y pasa a ser el centro de recepción del Parque en el hemidelta derecho, además de estar expuesta una importante colección ornitológica. En 1998 se restauró totalmente el edificio, puesto que la madera se encontraba en muy mal estado de conservación y en 1999 se inauguró una nueva exposición permanente en sustitución de la antigua colección ornitológica. Por otra parte, en el hemidelta izquierdo, en 1988 se inauguró el Ecomuseu, en Deltebre. Fue el primer centro de información y recepción del Parque en el hemidelta izquierdo. Además, el Ecomuseu incluye una representación a pequeña escala de los paisajes, de las actividades tradicionales y de la arquitectura del Delta y dispone de un interesante acuario-terrario dónde se puede ver en vivo la mayoría de peces y anfibios de Delta. En 1991 se construyó el centro de educación ambiental. Se trata de un edificio cerca del Ecomuseu, que en la actualidad alberga las aulas, dónde se reciben un gran número de escolares, las oficinas técnico-administrativas del Parque y el Centro de Documentación. En 1992 se construyó la Estación Biológica del Canal Vell, que se encuentra ubicada en la laguna del mismo nombre. Este espacio dispone de un centro de recuperación de fauna salvaje, dónde se desarrollan programas de reintroducción de fauna autóctona, se reciben y curan numerosos casos de ejemplares heridos de fauna protegida. También se realizan proyectos de investigación y programas de anillamiento científico de aves. En 1993 se construyó el almacén del Parque con un espacio de 600 m2. En 1995 el Parque hizo el carril de bicicletas de la Encanyissada y de la Tancada. Son los primeros siete kilómetros de carril-bici del delta de l’Ebro. Representa un trayecto con un elevado interés naturalístico. Las infraestructuras más características de nuestro Parque son, sin duda, los miradores. Disponemos de once miradores repartidos por las diferentes zonas que son de uso público, y que hemos ido construyendo a lo largo de toda la vida del Parque. Destacan tres por su magnitud y originalidad arquitectónica: el de la Encanyissada, el de la Tancada y el de Migjorn (con doce metros de altura). Fermín Morales i Subirats. Técnico del PNDE CRONOLOGÍA DEL PARQUE NATURAL DEL DELTA DE L’EBRO 1962 La UNESCO incluye el Delta del Ebro en la lista de las zonas húmedas euroafricanas de interés internacional. 1971 El convenio RAMSAR reconoce al Delta del Ebro como Zona Húmeda de importancia internacional. 1979 La Unión Europea lo declara zona de especial protección para las aves (ZEPA) 1979 El Consejo Europeo, lo declara zona de importancia europea debido a su vegetación halófila, con un total de 8 especies de plantas y 69 de fauna vertebrada protegidas. 1981 Las primeras parejas de Gaviota de Audouin se instalan en la punta de la Banya. 1983 Decreto 357/1983, de 4 de agosto de Declaración del Parque Natural del Delta del Ebro (hemidelta izquierdo) y organización de los primeros servicios: Centro de Documentación y Servicio de Información. 1984 Creación del Servicio de Guías - Creación del Área de Protección y Investigación. 1985 Primeros Campos de Trabajo. - Creación de los Servicios Administrativos - Creación del Servicio de Guardería. 1986 Decreto 332/1986, de 23 de octubre de Declaración del Parque Natural del Delta del Ebro y de las Reservas Naturales Parciales de la punta de la Banya y la isla de Sapinya. 1987 Liberación de 44 tortugas de tierra en la punta de la Banya. 1988 Creación del Servicio de Educación Ambiental. Vivero de árboles de ribera. 1989 Estudiantes de Veterinaria (AVAFES) hacen prácticas en el Centro de Recuperación de Fauna. 1990 Programa gratuito para las escuelas del Delta subvencionado por la Diputación. 1991 Primera colonia de flamencos .Primera edición del rally fotográfico del Parque. 1992 Adquisición de la mitad sur de la isla de Buda por el Departamento de Medio ambiente. Entra en funcionamiento la primera Escuela Taller. Primeros objetores se incorporan al Parque. Declaración de la Reserva Natural de Sebes. 1993 Resolución de 15 de marzo BOE dónde el consejo de ministros incorpora el Delta del Ebro a la Convención RAMSAR . Creación de l’Área de Conservación y Infraestructuras. 10è aniversario del Parque. 1994 Se describe la especie Phagocata ullala endemismo animal encontrado en los Ullals. Fiesta del árbol en la isla de Buda. Primer encuentro de Guías–Intérpretes de Educación Ambiental. Se organiza por primera vez el Día Mundial de las Aves. 1a sesión de trabajo del Centro de Documentación. 1994 Primer Concurso de Fotografía de las Zonas Naturales y Húmedas del Mediterráneo. Informatización del catálogo del Centro de Documentación. 1995 Decreto 269/1996, de 23 de julio, se aprueba el cambio de nombre y la modificación de la superficie de la Reserva de Caza de la Encanyissada. Primer año de celebración de la Semana de la Ciencia. Curso de Arquitectura del Paisaje en Zonas Húmedas. Inauguración de la exposición permanente sobre el Parque Natural en el Ecomuseu. 1996 Creación del Grupo de Voluntarios. Se describe la especie Limonium vigoi, endemismo vegetal del Delta encontrada en la punta de la Banya. Proyecto Life para la mejora de las prácticas agrícolas a los arrozales. Se describe la Spirullina deltiberi en la punta de la Banya, uno de las bacterias más grandes del mundo. Adquisición de la Reserva Natural Parcial de la isla de Sapinya. 1997 Inauguración de la exposición permanente sobre las lagunas del Delta. Primer año de aplicación de las medidas agroambientales. Celebración del primer Día Europeo de los Parques Naturales. Por primera vez se usan medios aéreos para censar las aves nidificantes. Primera web oficial. 1998 Cambio de Departamento: del DARP al DMA. Primeros estudios exhaustivos sobre la afluencia turística en el Delta. 1999 Programa de intercambio entre técnicos de los deltas del Mediterráneo. Primer curso de Gestión de Espacios Naturales organizado conjuntamente con la AUETE. Introducción de caballos camargueses en al Isla de Buda. Firma de un convenio entre la Universitat de Barcelona y el Departamento de Medio ambiente para el reconocimiento de los cursos del Parque. 2000 Traslado de 3 yeguas camarguesas a Sebes. Se detecta la presencia del Mejillón cebra en el Ebro. Inauguración de la exposición 100 imágenes del Delta. Fuerte temporal de levante que afecta gravemente la costa. Inicio de varios seguimientos faunísticos y de vegetación generales del Parque. 2001 Fin de la Prestación Social Substitutoria. Récord de aves invernantes (188.480 ejemplares). Se empieza a montar el SIG del Parque. Redactados dos planes especiales para el Garxal y la Casa de Fusta – Encanyissada. Constitución de la Asociación Delta chiama Delta 2003 Liberación de cigüeñas criadas estabuladas en Sebes. 20 aniversario. CENSO DE AVES ACUÁTICAS INVERNANTES 2003. Introducción Los censos de aves acuáticas constituyen una de las actividades de seguimiento más firmemente arraigadas desde la creación del Parque Natural, e incluso desde bastante antes. Los recuentos de aves forman un campo bastante amplio, como consecuencia de la gran diversidad de especies que caracteriza el conjunto de ecosistemas del Delta. En el caso de los aves invernantes, en el delta del Ebro se hacen recuentos de esta clase desde 1972, si bien en aquellos años no se abarcaba todo el volumen de especies actual (por ejemplo, no se incluían los ardéidos ni las rapaces diurnas), ni se llegaba a cubrir la totalidad del territorio. Este año, el censo se ha realizado entre el 7 y el 15 de enero, de forma simultánea a los que se han realizado en otras localidades de nuestro país. La organización Wetlands International es quien coordina estos recuentos en el ámbito europeo y quién analiza todo el volumen de datos generado. El delta del Ebro se ve atravesado por una de las principales rutas migratorias del mundo, la de la vertiente occidental del Mediterráneo (Europa-África), y dentro del contexto europeo se encuentra situado en una zona templada. A lo largo del invierno el Delta acoge especies que crían en el centro y norte de Europa y que se desplazan hacia al sur huyendo de las condiciones ambientales adversas de estos territorios. De esta manera, todo aquello que pasa, o pueda pasar, en el centro y norte de Europa y que afecta a las poblaciones de aves que vienen aquí, quedará reflejado en el censo de invierno. Esto evidencia la importancia de realizar los censos conjuntamente con el resto de áreas húmedas de Europa, con tal de poder valorar la evolución de las poblaciones también globalmente. Metodología Aún cuando se trata del mismo censo y que se incluyen las mismas especies, los recuentos se han realizado de forma diferente en función de los diferentes ambientes prospectados. A grandes rasgos podemos diferenciar entre lagunas, bahías y mar, dormideros, arrozales y río. El censo en las lagunas, bahías y mar se realiza por la vía de contactos visuales con prismáticos o telescopio terrestre, desde uno o más puntos de observación elevados, habitualmente los miradores que ha instalado el Parque Natural. Los recuentos en los dormideros se llevan a cabo de forma muy similar a los de las lagunas y bahías. A partir de las cuatro de la tarde los observadores se situaban en un punto fijo, desde dónde se tiene una visión lo más amplia posible del dormidero y del espacio por dónde han de entrar las aves. Referente a las zonas de arrozal, la estrategia ha sido necesariamente diferente, dada la gran extensión a prospectar. En este censo se ha llevado a cabo una esmerada programación previa de la cobertura, con una zonificación detallada de toda la superficie de campos y el establecimiento de un cierto número de unidades de censo, las cuales se pueden cubrir en una única sesión ininterrumpida de prospección. Con prismáticos y telescopios, se peina el terreno y se cuentan los individuos detectados de las especies incluidas en el censo. El río ha sido recorrido en barca, desde su desembocadura hasta el puente de Amposta, anotando todos los animales que se levantaban a ambos lados, y también aquellos que se encontraban en las islas de Gràcia y Sapinya. Comentarios generales a los resultados Exceptuando los limícolas, todos los grupos han dado cifras inferiores a las del año anterior, cuando se lograron varios récords, si bien algunos sí que se han aproximado a las cifras máximas obtenidas anteriormente (cormorán, ardeidas, rapaces diurnas, gaviotas, charranes y fumareles, abubilla, y urraca), otros han manifestado un fuerte descenso, como es el caso de los zampullines y somormujos, los ciconiformes y las anátidas. La focha Fulica atra, mantiene efectivos muy similares a años anteriores, incluso ligeramente superiores al último recuento. Los ardeidos, a pesar de disminuir en número de efectivos respeto al pasado año, continúan manteniendo una población invernal muy importante, más sí tenemos en cuenta que la de este año es la segunda cifra más alta de todos los recuentos realizados. Debemos destacar el incremento en el número de garceta grande Egretta alba y, muy especialmente espectacular ha sido el aumento de efectivos de la garza real Ardea cinerea. Las anátidas, tradicional grupo empleado como indicador, experimentan un notable descenso de efectivos, aún cuando se mantienen por encima de la media desde que se iniciaron los recuentos en 1972. Como en el anterior censo, se ha logrado una mayor cobertura como consecuencia de la realización simultánea del Atlas de Aves Invernantes: Esto explica el notable incremento en los números totales de algunas especies de limícolas, como por ejemplo el andarríos grande Tringa ochropus y el andarríos chico Actitis hypoleucos. Las gaviotas, charranes, fumareles, abubilla y urraca, presentan un contingente muy parecido al del año anterior. Debemos destacar el notable incremento en el número total de la gaviota picofina Larus genei, que casi dobla el número máximo de efectivos anteriormente censados. Espectacular ha sido el descenso de la gaviota de audouin Larus audouinii, que ha pasado de una media de 62 ejemplares, con un máximo de 301 el 2002, a sólo los 13 ejemplares de este año, la tercera cifra más baja de todos los recuentos realizados. Especies extrañas o destacables A diferencia del año anterior, en este censo no se ha observado ninguna especie accidental, aunque sí varias especies escasas y amenazadas, o que presentan cifras inusualmente altas. Por segundo año consecutivo, se ha citado un colimbo grande Gavia immer de 1r invierno, visto en la bahía de los Alfacs. Las 160 garcetas grandes Egretta alba, que se encontraban repartidas por varias localidades y los 84 moritos Plegadis falcinellus de la isla de Buda, suponen nuevos récords de invernada en Catalunya, mientras que las 28 espátulas Platalea leucorodia, que se controlaron en la Punta de la Banya, se acercan mucho al récord del año pasado. Las 9 cigüeñas blancas Ciconia ciconia, censadas en los arrozales del Canal Vell y la Alfacada, representan cifras muy similares a las del año anterior y parece que esta especie va asentando una pequeña población invernal en el Delta. Dentro del grupo de las anátidas, se debe destacar dos ejemplares del porrón pardo Aythya nyroca y un ejemplar del escaso porrón bastardo Aythya marila, todos tres machos de 1r invierno localizados en el Clot de la Encanyissada. Entre las rapaces diurnas debemos mencionar un ejemplar de águila calzada Hieraaetus pennatus y dos de águila pescadora Pandion haliaetus, efectivos idénticos a los del año pasado. En la vertiente negativa debemos destacar el aguilucho pálido Circus cyaneus, con sólo ejemplar en el recuento de este año. Tras cuatro años de ausencia, la grulla Grus grus, ha vuelto a reaparecer con 14 ejemplares en el censo. La focha cornuda Fulica cristata ha invernado por segunda vez en el Delta, siendo localizado un ejemplar marcado con collar blanco, en el Garxal. Cuatro ejemplares de cigüeñuela Himantopus himantopus, cuatro de chorlitejo chico Charadrius dubius y 16 de correlimos de temminck Calidris temminckii, especies escasas e irregulares en este periodo, se observaron en la Punta de la Banya y en los arrozales del Fangar. Lo más sorprendente fue el número de correlimos gordo Calidris canutus, que con 49 ejemplares suponen un nuevo récord de invernada en el Delta y Catalunya. El zarapito trinador Numenius phaeopus ha vuelto a ser controlado, esta vez, pero, con un solo ejemplar. De todos modos, dentro de este grupo debemos citar los 183 ejemplares de Remenarocs Enarenaría interpres, la cifra más alta nunca antes censada, y que supone un incremento espectacular respeto al número máximo nunca obtenido: 67 pájaros en el 2000. Finalmente, un ejemplar adulto de pagaza piquirroja Sterna caspia, especie anual aunque muy escasa en invierno, fue observado en la Punta del Banya. Francesc Vidal, David Bigas i Miquel A. Franch, PNDE. NACEN LAS PRIMERAS CIGÜEÑAS EN LA RESERVA NATURAL DE SEBES El pasado día 22 de mayo se producía el primero nacimiento de cigüeña blanca en las Terres de l’Ebre desde hace más de 70 años Desde que fueron liberadas a comienzos de marzo las 24 cigüeñas criadas en cautiverio en la Reserva Natural de Sebes, muchos habéis ido siguiendo las noticias sobre su proceso de aclimatación. Las muertes por electrocución han sido uno de los principales problemas que se tubo que afrontar. Finalmente una docena de torres eléctricas han sido protegidas. No es más que un grano de arena, puesto que son centenares las torres eléctricas no protegidas en la comarca de la Ribera d’Ebre, y miles en cualquier parte de Catalunya. Como mínimo se resolvieron algunos puntos negros y allí ahora no se pueden electrocutar. Una vez liberadas, las cigüeñas fueron desperdigándose por el territorio, especialmente río abajo. También era remarcable el número de cigüeñas en migración que se paraban en la zona de Sebes. Tras pocos días de ser liberadas ya se formaban las primeras parejas. Finalmente han sido 4 las parejas que se han establecido en los nidos que se construyeron especialmente alrededor del aviario dónde habían vivido. De estas cuatro parejas, dos hicieron puesta de huevos. Precisamente se trata de las dos parejas que están formadas por una hembra criada en cautiverio en Sebes, y un macho de los que pasaron en migración. Se ve que los gustó el sitio y nuestras cigüeñas, y decidieron quedarse. Esto ha sido clave para que tingamos pollos de cigüeña este año mismo. Los machos tardan más a ser adultos, y los que habíamos liberado, a pesar de emparejarse, no eran reproductores. Finalmente se constató que los huevos eran fértiles y empezaron a nacer las primeras cigüeñas: dos pollos en cada nido, y las atenciones de los padres han permitido que vayan creciendo con normalidad. Es un éxito en este tipo de proyectos de reintroducción. Por una parte, por el número de cigüeñas que se han quedado en la zona (entre 10 y 12 de forma permanente); por otra parte, por el número de parejas formadas y que ocupan nido (cuatro) y finalmente por el hecho que dos parejas han hecho puesta y están sacando adelante sus polluelos. De este hecho todavía hace falta destacar que las parejas que se han reproducido están formadas por individuos salvajes, contribuyendo más a fijar una población natural de cigüeñas en la zona. Uno de los motivos que sin duda habrá contribuido al éxito ha sido la gestión del hábitat que se ha hecho mediante el pasto con caballos de la Camarga. No sólo se han criado en cautiverio las cigüeñas en perfectas condiciones y con todas las atenciones, sino que se les preparó el sitio dónde encontrarían alimento. Además de las cigüeñas también otras aves como por ejemplo, las garzas reales o los martinetes, han encontrado en estos recuperados y extensos prados inundables, abundante alimento. Gracias a todos los que han hecho posible un sueño, uno más en el largo camino que desde el Grup de Natura Freixe estamos haciendo para conservar el patrimonio natural. ¿Alguien se podía imaginar hace pocos años que criaran las cigüeñas en Flix?. Seguramente, en pocos años llegarán a criar en el mismo Delta del Ebro. Pere J. Jiménez. RN SEBES LOS VOLUNTARIOS VISITAN LA CAMARGA Un grupo de socios de la Asociación de Voluntarios del Parque Natural del Delta del Ebro, hicimos una de las salidas con las cuales el Parque premia a los voluntarios por sus colaboraciones anuales en el mantenimiento y limpieza del Parque. Esta vez fuimos 3 días a la Camarga, Parque Regional francés infinitamente más grande que el nuestro y que está situado en el delta del río Roine. También cultivan arroz, y la flora y la fauna presentes son muy parecidas a la que tenemos aquí. Hicimos la primera parada en un pueblo que se llama Santas Maries, dónde llegamos un poco dormidos. Pero al dar un paseo por el pueblo, nos extrañó mucho no ver ni un papel, lata, basura....esta “cosecha” que aquí es tanto abundante. En los diferentes centros que visitamos –llenos de gente todos- en todas partes, el cuidado que todo el mundo tenía en recoger los desechos, era igual que estar en su propia casa recogiendo la mesa. ¿Como puede ser que haya tanta diferencia, entre aquella gente y nosotros? Como he dicho antes, y muchos conocéis, allí también se cultiva arroz, pero no había un bancal que no tuviera los márgenes llenos de lirios y flores y también de unos árboles magníficos, caballos y bueyes camargueses. Nos acompañó Jordi Franch y Casanova, guía del Parque Natural, que fue indispensable para tener un viaje sin ningún incidente. Gracias! Albert Rull Voluntario PNDE ADAPTACIÓN DEL RECORRIDO DEL ECOMUSEU A finales de 1999, el Departament d’Agricultura, Ramaderia i Pesca –entonces titular del Parque– y la ONCE firmaron un convenio de colaboración, con el objetivo de facilitar el acceso al Ecomuseu a personas invidentes, deficientes visuales y discapacitas, así como para realizar las adaptaciones necesarias en las instalaciones y colecciones existentes. Las primeras actuaciones que se llevaron a cabo fueron la trascripción al formato Braille del texto de la exposición permanente, la realización de una maqueta-plano en relieve del recorrido externo del Ecomuseu y la adaptación al sistema de audiodescripción del video sobre el Parque Natural del Delta del Ebro. Durante este último año, se ha realizado la adaptación del itinerario por todo el Museo. En la entrada al centro de información se ha colocado un pavimento rugoso de goma, contrastado cromáticamente con el suelo existente. Se han pintado y contrastado las puertas de los lavabos (que también se han adecuado para minusválidos) y la de sala de audiovisuales. Por lo que respeta al itinerario exterior, se ha compactado, elevado y nivelado el camino, con áridos de rechazo de cantera de color amarillo. Se han señalizado los bordes del recorrido, con tal de delimitarlo, con tablones de madera de color verde, sustituyendo las piedras que anteriormente limitaban el camino. También se han creado tres áreas de descanso con bancos de madera distribuidos a lo largo del trayecto. Los puntos principales de información del recorrido –sistema de riego, huerta, los arrozales, las lagunas, los ambientes acuáticos, el bosque de ribera, los ullals y el laúd– se han señalizado cambiando el tipo de pavimento y colocando un entramado de madera perpendicular al recorrido, para que el cambio de rasante indique a los invidentes que hay un elemento informativo. Justamente, en estos puntos, se han instalado unos soportes dónde se colocará la información en Braille y en macrocarácteres. Este mismo sistema se ha empleado en otras partes del Ecomuseu, dónde los invidentes y deficientes visuales, por la vía del tacto y, en algún caso, del olfato, podrán descubrir algunos de los elementos que formen parte de la singularidad del Delta. En el caso de la barraca de arroz y de la pesca se han seleccionado algunas piezas accesibles a partir del tacto y en el acuario se han situado 12 paneles descriptivos –en Braille y macrocarácteres– de las especies de peces más características. Esperemos que estas actuaciones, dirigidas a facilitar la accesibilidad al Ecomuseu, sean uno instrumento de igualdad que permita la integración social y cultural de este colectivo, participando plenamente de nuestro patrimonio natural y cultural. NUEVO MIRADOR EN LA PUNTA DE LA BANYA El pasado mes de abril el Parque inauguró un nuevo mirador en la Punta de la Banya, situado a unos 200 metros tras el cruce de las Salinas. Este nuevo equipamiento, sustituye el mirador que estaba situado en la caseta del guarda que desgraciadamente, se lo llevó la violenta tormenta de levante que se produjo en el otoño del año 2001, y que tantos desperfectos y estragos ocasionó en la costa del Delta. La tipología del mirador es ligeramente diferente a la de los últimos que ha situado el Parque en zonas como el Embut de la Encanyissada o en la laguna del Canal Vell: se trata de una estructura de madera tratada, de 3 m de altura y acabado en una plataforma cubierta. Desde el mirador se pueden contemplar las instalaciones de las Salinas, el espectacular panorama de la bahía de los Alfacs y la imponente avifauna presente a la zona: charranes, gaviota de audouin, gaviota picofina, correlimos, flamencos, etc... Recomendamos la visita por la mañana, mientras tengamos el sol de espaldas, con tal de evitar la fuerte insolación que se produce en los días de verano y el reflejo de la luz sobre el agua. CONOZCAMOS EL PARQUE PROYECTO DE CRÍA DEL GALÁPAGO EUROPEO El galápago europeo Emys orbicularis es una de las tres especies de quelónidos de la familia de los Emídidos europeos que encontramos en Catalunya. En el Delta se ha encontrado en las lagunas, canales y acequias, ambientes dónde antes eran frecuentes. Actualmente su número se ha reducido drásticamente. Entre las posibles causas que han llevado a esta situación encontramos la contaminación química, que ha hecho desaparecer sus presa, la reducción o transformación de su hábitat, disminuyendo los sitios adecuados por efectuar las puestas y la pesca con artes tradicionales dentro de las lagunas, que ha producido la muerte de las tortugas que involuntariamente han sido capturadas. Actividad al centro de fauna: instalaciones y resultados Una de las actividades realizadas al Centro de Fauna del Delta del Ebro es la cría en cautiverio de especies protegidas para reforzar las poblaciones de determinadas zonas que han visto menguar su número en los últimos años e intentar contrarrestar la crítica situación de las poblaciones del Delta. En el caso del galápago europeo, el proyecto tiene la intención de ir reforzando estas poblaciones locales mediante la liberación de las crías obtenidas. Paralelamente, tiene lugar un estudio de seguimiento de las poblaciones, por parte de un técnico especializado. En el año 1993, finalizaron las obras de las instalaciones de cría en cautiverio. El proyecto constaba en aquel momento de una sola pareja. Hasta 1994 no se obtuvieron resultados, con el nacimiento de 6 individuos de los cuales sobrevivieron cuatro, aunque en años posteriores aumentó el número de nacimientos, excepto en los años 1997-98, en los cuales no hubo crías. Desde el año 2002 disponemos de dos jaulas naturalizadas de 10 x 5 m, con balsas excavadas en el suelo y con vegetación natural. Una vez los huevos han eclosionado, las crías son separadas de los adultos e instaladas en acuarios-terrarios especialmente habilitados para ellas. Su instalación está situada en el interior del edificio, en una sala aneja al laboratorio para evitar las inclemencias del tiempo y posibles depredaciones. En invierno, dispone de un sistema de calefacción con calentador de agua, y luz de infrarrojos que las mantiene a una temperatura constante durante los dos primeros inviernos, evitando la hibernación y acelerando su crecimiento. Posteriormente, los jóvenes permanecerán estabulados en el centro en un cercado sin adultos dos años más. Pasado este tiempo está previsto que alcancen el peso y la experiencia que nos aseguren su supervivencia en su medio natural, momento en el que serán debidamente liberados en los puntos más adecuados del Delta. Actualmente disponemos de dos acuariosterrarios con sus correspondientes instalaciones para mantener las crías. Las nacidas en verano-otoño de 2002 han sido estabuladas en los dos acuarios existentes, repartidas según medida. De esta manera hemos evitado que los animales hibernaran, con lo cual la supervivencia en este primer invierno ha sido del 95%. Dado que el número de reproductores es el mismo (2 machos y 3 hembras) y observando los resultados obtenidos este año, parece que el cambio de instalaciones ha mejorado la productividad y que, aumentando en un futuro el número de parejas, podrían obtenerse todavía más juveniles para reforzar la población salvaje existente. En previsión de una producción similar o más elevada para el año que viene, hace falta preparar nuevas instalaciones para el próximo otoño-invierno, de forma que no sea necesario mantener tantos animales en un mismo acuario, con los consecuentes problemas de competitividad existentes. ARTES DE PESCA TRADICIONALES La riqueza y variedad de peces existentes en el Delta han hecho que, ya desde antiguo, la pesca haya sido una importante actividad económica y un recurso vital para muchas familias. Independientemente de los tres puntos de pesca comerciales existentes actualmente en la zona, situados en Sant Carles de la Ràpita y la Ampolla, en cada extremo del Delta y el puerto de Deltebre, en el interior, y de la pesca profesional que se lleva a cabo en las lagunas de les Olles, el Canal Vell, la Tancada y en la Encanyissada, actividad regulada por la Confradia de pescadores de Santo de Pere, ha habido otro aprovechamiento o pesca tradicional que se remonta a la época de los primeros pobladores de la zona. Las familias con menos recursos, tenían que complementar su actividad laboral con la caza y la pesca para poder subsistir. Muchas veces se trataba de una actividad furtiva, realizada por la noche o de madrugada y empleando artes de pesca que eran fabricados, mejorados, perfeccionados y reparados por ellos mismos. Alguno de estos aparejos que han persistido hasta hoy en día son los siguientes: BUSSÓ: El bussó se cala principalmente en las orillas del río y en algunos canales que conectan las lagunas con el mar y se utiliza para capturar la angula. Las anguilas se reproducen en el mar de los Sargazos, en el Atlántico Norte. Las larvas migran hacia Europa aprovechando las corrientes oceánicas. Atraídas por las aguas dulces continentales remontan los ríos agrupadas en bancos en forma de cordón, y es en este momento cuando se las captura. La campaña de pesca en el Delta comienza el 20 de octubre y finaliza el 10 de marzo y hay 340 puntos autorizados. TRESMALL: El tresmall es un aparejo de pesca formado por tres redes superpuestas y de diferente trama. De esta forma los peces pasan la primera red y se quedan enganchados entre la segunda y la tercera. De medidas muy variables, se usa principalmente en el mar y en las lagunas y se capturan especies muy variadas: lisas, carpas, lubinas, doradas... RALL: El rall es un aparejo de pesca de forma semiesférica formado por una red de malla de dimensiones variables. El pescador tiene que ser capaz de echar el rall y formar un círculo, que al sumergirse por el peso de la plomada, atrapa los peces situados en aquella zona. Es un arte de pesca no selectivo, empleado en los canales y desagües de poca profundidad y con el que se capturan principalmente, carpas, lisas y lubinas. GÁNGUIL:_De forma cónica, el gánguil se usa en el mar, en las lagunas, en los canales y acequias. Se cala muy estirado y tensado, sujetado por cañas, de forma que todo pez que entre, se queda atrapado en las bolsas de malla interiores en forma de cono, sin posibilidad de volver atrás. Se capturan, dependiendo del medio, salmonetes, doradas, anguilas, cangrejos, lisas... GAMBER Este ingenio semicircular de madera, revestido de una red, se utilizaba originalmente, como su nombre indica, por capturar gambas, aunque también se emplea para pescar otras especies, como por ejemplo góbidos comunes, pejerrey, anguilas, lisas, etc. Muy extendido entre los pescadores de a pie, se arrastra por el fondo del mar, de los canales o de las acequias atrapando los peces. PALANGRE Arte de pesca consistente en un hilo –cuerda madre- al cual van unidos otros atados verticalmente, en los extremos de los cuales van los anzuelos con el correspondiente cebo. Más bien marino, aunque también se usa en la zona continental, se puede calar, según el pescador, en el fondo, en aguas intermedias o casi en superficie. Se pueden capturar lubinas, lisas, doradas y anguilas. ANGUILERA La anguilera es el arte precursor del gánguil. Más ruda y primitiva, y por lo tanto, menos eficiente que el gánguil. Se elabora a partir de las hojas de junco, de ramas de sauces o mimbreras. Se cala en las entradas de agua de los arrozales, desagües y en los bordes de las lagunas. Se usan caracoles como cebo. Principalmente se capturan anguilas. Xavier Abril, PNDE ¿QUÈ SON LOS MOSQUITOS? Sin lugar a dudas, los mosquitos son los insectos más populares del Delta del Ebro. Su estrecha relación con la transmisión del plasmodio que causaba el paludismo a los habitantes de estas tierras ha hecho que ya, desde hace muchos años, ocupe un sitio muy importante en nuestra historia. Pese a su popularidad, no ha sido hasta la última década que se ha empezado a controlar su población de una manera racional, con un estudio a fondo de su biología y sus hábitats en el Delta. Biología: Los mosquitos son unos dípteros como las moscas, quironómidos, que no tendrían más importancia para las personas si las hembras no tuvieran que ingerir un alimento tan energético como es la sangre para realizar la trofogenesis o desarrollo de los huevos y dar lugar a otra generación. Esta necesidad hace que resulten molestos y que, a la vez, sean transmisores de diferentes enfermedades, que afectan animales y personas. Las hembras depositan los huevos en aguas tranquilas, de dónde saldrán unas larvas que se alimentan filtrando el agua, y son el paso previo a la formación de adultos, abandonando el medio acuático para ser exclusivamente aéreo. Cuando son adultos, buscan rápidamente emparejarse y volver a dar lugar a otra nueva generación. Tipo de mosquitos: Una de las cosas que más llama la atención es la gran variedad de mosquitos que podemos encontrar en un espacio relativamente pequeño como es el delta del Ebro, dónde se ha llegado a describir una veintena de especies diferentes de mosquitos. Este amplio abanico contiene desde especies que sólo pican a las aves, hasta especies que pican a reptiles, o, como ya sabemos, a los humanos. Centrándonos en este último aspecto, podemos fijarnos en cuatro especies como las más molestas para los humanos: Aedes caspius, Anopheles atroparvus, Culex pipiens y Culex modestus. Hábitats dónde se encuentran: Las diferencias entre las especies no se limitan solamente a su aspecto y a sus preferencias por picar, sino que cada una de ellas trae asociada un hábitat diferente de cría, comportamiento, etc. Partiendo de estas diferencias, el Delta se divide en tres grandes sectores: los arrozales, las zonas y lagunas litorales y finalmente, las zonas urbanas. Las zonas naturales han sido el gran productor de mosquitos durante muchos años. Se trata de zonas salobres, que se inundan periódicamente por las oscilaciones marinas, por lluvias, etc., y que se encuentran a lo largo de todo el litoral y los alrededores de las lagunas naturales. En estas zonas aparece Aedes caspius, con un ciclo biológico muy corto y sobre el control del cual se basa gran parte del esfuerzo del CODE. Los arrozales son el medio idóneo para encontrar mosquitos de la especie Anopheles atroparvus (antiguo vector de la malaria en el Delta) y Culex modestus. A pesar de las 22000 ha de arrozales existentes en el Delta, se trata de mosquitos que no suelen alejarse demasiado de sus sitios de cría, motivo por el cual su control se centra en las zonas próximas a los pueblos o núcleos habitados. Finalmente, en las zonas urbanas se encuentra Culex pipiens. Estos mosquitos están adaptados a vivir cerca del hombre, en todo tipo de aguas que este genera. Por este motivo resulta difícil localizar al 100% sus sitios de cría, y son los causantes de muchos de los problemas que ocasionan los mosquitos dentro de las casas. ¿Qué problemática generan? La presencia de mosquitos tiene una incidencia directa sobre la calidad de vida de los habitantes y visitantes del Delta, que al ser una zona con un creciente potencial turístico, en el que cada vez la población se dispersa más, ya sea en casitas de campo, actividades lúdicas, etc., resulta necesario establecer un buen control de estos insectos. A parte de las molestias que puedan ocasionar sus picaduras, pueden actuar como vectores de diferentes enfermedades, que sí bien hoy en día no están presentes en nuestras tierras, el incremento del transporte de mercancías entre países puede ayudar a importarlas. ¿Cómo luchamos contra ellos? De las diferentes formas de control, es la lucha antilarvaria la que se ha consolidado mundialmente. En este tipo de control se actúa sobre los focos larvarios, minimizando así el área de tratamiento y aumentando la eficacia. A pesar de los pesares se necesita un esfuerzo humano importante, que vigile a diario el territorio para detectar la presencia de larvas y así poder actuar antes de que se desarrolle el mosquito adulto y se pueda dispersar. En estos doce años de experiencia del CODE, se han ido estableciendo las diferentes zonas naturales a tratar, y ha sido en estos últimos tres años cuando, mediante una estrecha colaboración con el Parque Natural del Delta del Ebro, se ha actuado sobre los espacios naturales que rodean las lagunas del Delta, sitios dónde no llegan depredadores naturales y que conforman potentes focos de mosquitos. Por el hecho de ser espacios protegidos, los tratamientos en estas zonas se realizan con un producto altamente específico, una endotoxina de la bacteria Bacillus thuringiensis, que sin afectar al resto de la fauna, actúa por ingestión matando las larvas de mosquito. El hecho de utilizar este producto implica una limitación por el factor tiempo, puesto que se debe aplicar cuando las larvas están en fase de crecimiento y se alimentan (primeras fases larvarias), con un tiempo de actuación de dos o tres días en los meses más calurosos. ¿Qué podemos hacer desde casa? El control de mosquitos en el delta del Ebro es una tarea compleja, que requiere un gran esfuerzo humano y económico, así como un gran conocimiento de la zona y de los sitios de cría. Además de la tarea del CODE, la colaboración del Parque Natural ha sido fundamental en el momento de reducir las poblaciones más importantes situadas a los bordes de las lagunas. En ocasiones pero, se da la existencia de otros tipos de mosquitos, generados en los alrededores inmediatos de las viviendas, masías, etc., a los cuales el CODE no puede hacer frente. Aunque no se trata de especies tan agresivas como las de las zonas litorales, su actividad crepuscular se hace notar dentro de las casas. Seguir algunos consejos prácticos nos puede ayudar a eliminar muchos de estos focos de mosquitos urbanos: se tiene que procurar mantener tan seco como se pueda los sifones de los patios, o añadir lejía una vez a la semana. Se tienen que cerrar herméticamente los pozos con tela mosquitera. Las balsas de riego convendría vaciarlas completamente una vez a la semana (especialmente en los meses calurosos), o también tirar algunos pececitos. En las lagunas o balsas ornamentales también convendría criar peces, ranas, etc. Los recipientes abandonados (latas, cubos, neumáticos, etc.) se tendrían que retirar de los bordes de la casa, o cuando menos, evitar que se llenen de agua. Las fosas sépticas se tienen que cerrar herméticamente y cubrirlas con tierra. Los agujeros de los desagües han de estar siempre al mismo fondo. En las cámaras de aire de las casas se tienen que tapar las aperturas con tela mosquitera. Los riegos y regaderas que no se utilizan se deberían de destruir, y evitar como fuera que se quedara agua estancada. Para más información, podéis consultar la página web del CODE: www.code-ebre.org Montse Masià Bióloga. CODE LA RECERCA AL PARC LOS ORÍGENES DE UN TOPÓNIMO: LA CAVA Este artículo es una nueva versión del que, con el título de “A propòsit“de la Cava”, se publicó en l’Informatiu del Museu del Montsià, número 39, páginas 5-6, de 1996. Son muchas las obras y artículos que, en estos últimos años, han aportado nuevas luces a diferentes aspectos del pasado del delta del Ebro. Nuevas luces que, afortunadamente, van aclarando lo que hasta hace poco era oscuridad y desconocimiento, reiteración de tópicos, interpretaciones idealizadas. Nuevas respuestas a antiguas preguntas. El origen de los pueblos del Delta es una de estas incógnitas. ¿Cuándo se formaron? ¿Quiénes fueron los primeros pobladores? ¿De dónde viene su nombre? Son preguntas que muestran el interés que tienen los habitantes del Delta por conocer su pasado común, como el desconocimiento que hay sobre muchos aspectos de este pasado. Este artículo pretende precisamente aportar información sobre el origen del topónimo la Cava, un topónimo que ha sido objeto de muchas interpretaciones, unas entroncadas con la etimología popular y otras surgidas a partir de una noticia histórica, siendo estas últimas las que, por su propia aparente rigurosidad, han disfrutado de mayor aceptación. Es este el caso de la interpretación que da Jesús Massip, según el cual la Cava podría provenir del árabe al-Kabtil, nombre de un asentamiento anterior a la conquista cristiana que el geógrafo al-Himyari, del s. XIV-XV, sitúa en la desembocadura del Ebro. Al-Himyari menciona también el topónimo al-Askar para referirse a un campamento normando rodeado por un foso y ubicado en el mismo emplazamiento. Massip se pregunta si alKabtil no será la Cava (Massip, 1981, 33). También Joan Coromines considera posible la etimología árabe de la Cava, al creer que puede provenir de kacba, 'casa de forma cúbica' (Coromines, 1995, III, 344). Otras interpretaciones hablan de la Cava como el resultado de cavar, de la Cava de la regalèssia... pero nadie aporta tampoco ningún dato cronológico ni documental, convirtiéndose pues la pregunta de dónde viene el nombre de la Cava en un callejón sin salida dónde caben muchas interpretaciones. Documentación custodiada en el Archivo Histórico Comarcal de las Tierras del Ebro (AHCTE) aporta información que puede ayudar a averiguar la etimología de este topónimo. Esta documentación se refiere a un pleito entre las casas de Jordà y Despujol de una parte, señores ambos del heredado de Puntagrossa, y por la otra, diferentes colonos que habían saneado tierras en la mencionada partida, que consideraron que los páramos eran comunes a los habitantes del término de Tortosa. Este pleito, alargado durante casi quince años (1792-1806) genera lógicamente una gran cantidad de alegaciones, testigos y historiales del heredado de Puntagrossa, recogiendo pues noticias muy anteriores al mismo pleito que aporten información sobre multitud de aspectos del Delta izquierdo: desde la evolución morfológica a la de la propiedad; de las actividades practicadas, a la función de determinadas torres... Nos enteramos así que en 1695 el heredado de la Puntagrossa afrontaba: "de una part ablo Riu ebro de altra ablo alveo del riu vell quant anava a esguassar al golero de altra part ablo mas den cardona vuy nomenat mas devall y altra part abla torra nomenada Marcella fins als mollons del fitament Real que dividixcan dites heretats [de Puntagrossa i Mas d'Avall]." (AHCTE, Puntagrossa, 1695, 1r1v). Existe por lo tanto un cambio morfológico: el Ebro, que desembocaba en el Goleró, en 1695 ya no desemboca. ¿Cuándo y cómo se produjo esta variación del curso fluvial? Un escrito generado en 1789 por el representante de los Jordà y los Despujol dice textualmente: "Por los años de 1660 por particulares conveniencias de algunos vezinos de Tortosa, se abrió una azequia en la tierra firme del frente opuesto de uno de los dos extremos de la heredad designada [Puntagrossa] que se nombró la Cava, y luego la fuerza de las aguas del Ebro que la cogían de frente abrió tal cauce que varraron su antiguo curso, dirigiéndose por el que le proporcionó la obertura de la Cava mencionada, y haviéndose cegado succesivamente el antiguo alveo, en el resto del curso antiguo por el frente de la Puntagrossa, quedó por disposición de derecho propio por metad, a lo largo de los entonces dueños de esta heredad, a saber D. Antonio Pons y D. Pedro Jordà." (AHCTE, Puntagrossa, 1789, 1v-2r). Este es pues el origen de la Cava: la construcción, a mediados de s. XVII, de una acequia que seria rápidamente aprovechada por el Ebro con tal de llegar al mar, abandonando el antiguo curso hacia el Goleró. ¿Pero se puede concretar el inicio de esta acequia? ¿Qué había antes de hacerse? ¿Se puede saber quién eran aquellos vecinos de Tortosa? ¿Para qué se hizo la acequia? Otro documento, sin fecha pero presumiblemente redactado alrededor de 1700, nos concreta el año en qué empezó a construirse esta obra, a la vez que nos informa de alguna de las consecuencias que el cambio de curso del Ebro ocasionó: el documento reproduce y comenta el citamiento real antes mencionado, realizado en 1630 para delimitar las heredades de Puntagrossa y Mas d’Avall, y al localizar un hito entre las torres de la Meca y de Marcella, aparece el comentario siguiente: "Esta torre de D. Miquel Meca en lo any 1640 hi havia della al Riu un tir de bala, y en lo 1645 (senporta lo Riu tanta terra en los cinch anys) que a mes de la terra enderroca la torre y continua enportanse terra que en los anys 1666 en que comença a ferse la Cava arribava a menos de tir de pistola de la torre de la Marcella. Y a no ferse la Cava sen auria portat la de Marcella." (AHCTE, Puntagrossa, sd, 1r. Marge). En referencia a la función anterior del espacio dónde se ubicó la Cava, podemos saber "Que el terreno que ocupava en la Puntagrossa el difunto Pedro Mir, y ocupan aora sus herederos; en su mayor parte, y principalmente donde tienen construida la Cava, antes de ocuparse por Mir, era el recinto o el paso por donde salian y entravan para abrevarse en el rio Ebro las Yeguas que tenia el Marqués de Palmerola [Despujol]." (AHCTE, Puntagrossa, 16, 1806, 2r). Este Pere Mir, a pesar de ser muy posterior a los inicios de la acequia de la Cava consta un establecimiento de 10 jornales de la Puntagrossa a su favor en 1782, discutido por los Jordà y los Despujol (AHCTE, Puntagrossa, sd, 4r)-, debería ser, al igual que los señores de otros heraldados en el terreno denominado la Cava i Bosc en 1749: Francesc Vidal Pons (sotsdiaca de la Catedral de Tortosa); Francesc Baptista Lleyda; Francesca Torres; Vicent Bellet; Francesc Roca; Gaspar Traval y otros (AHCTE, Puntagrossa, 8, 1759, 8r), de los primeros interesados en sanearla (cultivarla), pudiéndolos por lo tanto considerar, relativamente, los iniciadores directos o indirectos (la presencia física del propietario a su heredado es siempre discutible) del proceso de poblamiento de la actual la Cava. Finalmente, debemos mencionar que la acequia de la Cava fue construida para regar los terrenos inmediatos, puesto que el agua del río es "el medio mas exquisito para dulcificar las tierras salobres." (AHCTE, Puntagrossa, 16, 1806, 3r-4v) y dedicarlos así al cultivo de trigo y de cebada, prácticamente los únicos existentes en el Delta antes de la construcción de los actuales canales (AHCTE, Puntagrossa, 8, 1759, 8r). Podemos afirmar, en definitiva, que el topónimo la Cava tiene su origen en la acequia que se empezó a construir en 1666 para regar los terrenos próximos. Esta acequia, llamada simplemente la Cava, a pesar de llegar a ser rápidamente el nuevo cauce del Ebro, propició la progresiva colonización del sitio y el consecuente asentamiento humano, antecedente del núcleo actual. La etimología popular, que relaciona el topónimo con la acción de cavar, se ve así confirmada por las noticias documentales. Xavier Ribas Vilanova Bibliografia COROMINES, J. (1995). Onomasticon Cataloniae. Vol. III. Barcelona: Curial Edicions. MASSIP, J. (1981). "Aproximació a la història del delta de l'Ebre". Seminari Internacional sobre els Deltes de la Mediterrània. Barcelona: Comitè MaB Español: 27-41. RIBAS, X. (1996). “A propòsit de la Cava”. Informatiu del Museu del Montsià, 39: 5-6. EL MAPA DE LOS HÁBITATS DEL GARXAL A ESCALA 1:5 000. Las comunidades vegetales son uno de los elementos más definidores del paisaje y su ubicación se encuentra directamente relacionada con las características físicas, químicas y biológicas de los biotopos. Por otro lado, son el apoyo ecológico de la mayor parte de las comunidades animales, de las cuales dependen directamente. La obtención de datos de este tipo, en el marco de una cartografía detallada, permite hacer un seguimiento en el tiempo de los principales cambios ambientales y predecir, en cierta medida, la evolución de las comunidades animales asociadas. Es por esto, que la cartografía de los hábitats en un espacio protegido, como es el caso del Parque Natural del Delta del Ebro, constituye una herramienta de gestión ambiental de primer orden, y más si se puede desarrollar utilizando un sistema geográfico informatizado. El Parque Natural del Delta del Ebro ha iniciado desde el 2002 un programa anual para cartografiar a una escala más detallada (1:5000) todos los espacios naturales del Delta (EIN y Parque Natural). Como herramienta de trabajo se ha utilizado un SIG (Sistema de Información Geográfica), el cual permite una representación cartográfica, informatizada y georeferenciada, de los diferentes hábitats. Además, permite asociar a cada elemento del mapa (polígono, línea o punto) un conjunto de información múltiple, con la posibilidad de asociarla con bases de datos externos: dimensiones, localización geográfica, comunidades vegetales y o/ hábitats, legislación, etc. En definitiva, permite que las tareas de consulta, análisis, representación y almacenamiento sean muy sencillas, tanto para el público en general, como para los profesionales y gestores. La primera zona que se ha cartografiado ha sido el Garxal, zona que incluye un gran diversidad ecológica y que permite validar la idoneidad de la metodología empleada. ¿Cómo se ha hecho? El procedimiento para el levantamiento cartográfico del mapa de hábitats del Garxal ha sido el siguiente: 1 . Fotointerpretación del área de trabajo a partir de ortofotomapas y otras fuentes cartográficas recientes. Esta operación consiste en delimitar sobre una ortofotoimagen (en papel o directamente sobre la pantalla del ordenador) las diferentes unidades del paisaje que se pueden reconocer aéreamente ya sea por el color, la textura, etc. 2 . Reconocimiento de campo de los elementos fotointerpretados. Se han realizado diferentes campañas de prospección con tal de identificar los diferentes tipos de hábitats presentes en cada polígono previamente delimitado. La caracterización de cada unidad cartografiada se ha hecho siguiendo tres sistemas de clasificación diferentes: Hábitats de Catalunya (basados en la tipología CORINE biotopos), Directiva de Hábitats (Anexo I) y Asociaciones de Catalunya. Normalmente, en cada polígono sólo hay representado un tipo de hábitat; si la heterogeneidad del polígono lo ha requerido, se ha incorporado un segundo hábitat y, entonces, se ha indicado el porcentaje ocupado por cada hábitat. 3 . Elaboración de la cartografía final. Durante este proceso, se han digitalizado todos los polígonos fotointerpretados y validados en el campo, y se ha incorporado toda la información asociada a cada polígono mediante una base de datos. Esta tarea se ha realizado gracias el software MiraMon ®, de amplio uso en la administración de la Generalitat de Catalunya. ¿Cuáles han sido los resultados? El resultado final más inmediato ha sido la elaboración de un mapa de hábitats que es directamente consultable en pantalla (Figura 1). Un ejemplo del conjunto de datos que aparecen al consultar un elemento cartografiado se puede ver en la Figura 2; igualmente se han incorporado enlaces de Internet que permiten ampliar la información de cada sistema de clasificación empleado. Además, este software hace posible un amplio abanico con respecto a la impresión en papel: cambios de escala, de leyenda, de marco geográfico, etc. Otra utilidad que permite este SIG es el análisis, tanto gráfica como numérica, de los diferentes elementos del mapa. Por ejemplo, se pueden seleccionar automáticamente todos los polígonos que incluyan uno o más hábitats prioritarios de la Directiva de Hábitats de la UE. Otro exponente, en este caso numérico, que muestra las grandes posibilidades que ofrece este tipo de cartografía es el cálculo de las superficies que tiene cada uno de los de hábitats analizados. Como muestra de esto, en este artículo presentamos un análisis muy preliminar de esta zona (Figura 3). La superficie total cartografiada es de unas 1.559,9 ha y han sido referenciados 1.493 polígonos, los cuales presentan, por lo tanto, una área mediana de unas 1,04 ha. El grupo de hábitats de más extensión son los marinos (467 ha), constituidos tanto por hábitats pelágicos (aguas costeras próximas) como bentónicos (fondos marinos sublitorales blandos, colonizados sobre todo por animales). En segundo lugar, toman importancia los cultivos herbáceos (321 ha), particularmente los arrozales (99,8% de los cultivos herbáceos). Los hábitats salinos, uno de los grupos más interesantes desde el punto de vista de la conservación, ocupan unas 215 ha y se encuentran ampliamente representados a las marismas del Niño Perdido y alrededor de la urbanización de Riumar hasta el límite del río y de la laguna del Garxal. Entre estos, destacan los prados y junqueras mediterráneas halófilas (103 ha), los matorrales halófilos (70 ha) y las planas hiperhalófilas sin vegetación fanerogámica (27 ha). Otro grupo importante es el formado por las aguas corrientes, que incluye sobre todo los cursos fluviales (el Ebro: 179 ha), la vegetación sumergida y las áreas fangosas fluviales. Los hábitats correspondientes a las aguas salobres o salinas, ocupan unas 108 ha (laguna del Garxal), de las cuales cerca del 40% están recubiertas por comunidades sumergidas de macrófitos. Las zonas urbanas e industriales, que reúnen básicamente las edificaciones humanas y los viales de comunicación, ultrapasan las 77 ha. Otro grupo de hábitats de interés son los ambientes costeros arenosos (63 ha), representados por las playas (unas 12 ha), los hábitats dunares (44 ha) y interdunares (7 ha). El resto de hábitats ocupa, cada uno de ellos, menos del 3% de la superficie global. La mayor parte corresponde a hábitats artificiales (vegetación ruderal, ambientes acuáticos artificiales, parques, etc.), si bien destacan por su importancia ecológica los hábitats inundables (unas 26 ha), dominados por carrizos y otros formaciones análogas, presentes sobre todo a los ambientes palustres de la laguna del Garxal. ¿Cuál es el futuro? Los buen resultados de esta primera experiencia ha conducido a emprender durante en el año 2003 el levantamiento cartográfico de las zonas de la Tancada y de la Platjola. En un futuro próximo, por tanto, se dispondrá de una cartografía detallada de los hábitats de todas las zonas de la EIN y del Parque Natural del Delta del Ebro, y esperemos que constituya una valiosa herramienta para la gestión de este espacio protegido. Antoni Curcó i Masip. Departament de Biología Vegetal Universitat de Barcelona. ATLAS DE AVES DEL DELTA DEL EBRO Este año, el Parque Natural del Delta del Ebro ha puesto en marcha los trabajos de campo para realizar el atlas de aves nidificantes. Este es un estudio de gran envergadura que se añade al del Atlas de aves invernantes, para el cual se han recogido datos desde el año 2001. Dentro del campo de la elaboración de atlas, la ornitofauna ha disfrutado, por lo general, de un tratamiento privilegiado. De hecho, las aves han sido, en buena medida, pioneras como objeto de esta forma de cartografiar la distribución de las especies de la flora y la fauna de una región. Así, ya a medios de los años 80, vio la luz el primer Atlas de aves nidificantes de Catalunya, una obra líder en muchos sentidos y que abrió el camino para muchas de las iniciativas puestas en marcha con posterioridad. Como referencia, se debe tener presente que el primer atlas europeo de nidificantes no se editó hasta una década y media después, igual que el primer atlas de España. Esta proliferación no hace sino demostrar el amplio apoyo que el atlas ha logrado como herramienta descriptiva de la comunidad faunística de un área geográfica determinada. A pesar de los pesares, la inmensa mayoría de los atlas de aves se han centrado en las comunidades reproductoras; dejando a un lado las poblaciones migrantes o invernantes. Esto puede explicarse parcialmente en términos de la especial importancia que tienen las localidades de cría para la dinámica demográfica de las especies. Además, hace falta tener también presente que el periodo de nidificación es en el que los animales muestran, un mayor vínculo con el territorio. Las ventajas de los atlas respeto al sistema tradicional de determinación de las áreas de distribución son realmente altos. La mayoría de ellos derivan de su característica más notable y definitoria, que seria la utilización de un retículo convencional georeferenciado que sirve de base para estructurar toda la información. La primera facilidad que comporta esto cae en la generación de los mapas, mucho más sencilla y objetivable. Una segunda ventaja importante se deriva de la posibilidad de establecer comparaciones entre diferentes fuentes de información, siempre y cuando estas hayan sido estructuradas sobre un mismo tipo de retículo. Esta vertiente puede llegar a constituir un potente recurso para el análisis biogeográfico. Pese a que se han utilizado otros sistemas de coordenadas, la tendencia ampliamente generalizada es la de hacer servir la proyección UTM (Universal Transversa Mercator) Dentro de este marco general, la utilización del sistema UTM permite establecer retículos de escalas muy diversas, con lo cual se puede ajustar a los condicionantes de cada estudio. Pese a la amplia tradición ornitológica existente en el Delta y el gran volumen de datos que se han ido acumulando a lo largo de los años, fruto de la actividad de los Servicios Técnicos del Parque Natural y de muchos ornitólogos externos, el hecho es que no existe ningún análisis detallado sobre la distribución de las especies de aves nidificantes ni invernantes. La elaboración de este Atlas permitirá llenar este hueco de información y conocer las especies de aves presentes en cada kilómetro cuadrado del Delta. CONTRAPORTADA LOS RAPACES DEL DELTA LECHUZA COMÚN La lechuza es una rapaz nocturna de tamaño mediano, conocida sobre todo por el característico reclamo que emite por las noches. Tiene la cara blanca en forma de corazón, los ojos negros y las alas de un color amarillento pálido. Presente todo el año en el Delta, dónde nidifica, se la puede ver al atardecer o por la noche, cerca de las casas viejas y masías aisladas. Caza en terrenos cultivados abiertos y arboledas bajas, normalmente hacia el amanecer y al atardecer. Se alimenta principalmente de pequeños roedores y ocasionalmente también de pequeños pájaros. LECHUZA CAMPESTRE Rapaz nocturna de dimensiones medianas. Con un plumaje intensamente manchado, se caracteriza por tener unas pequeñas plumas auriculares que le sobresalen de la cabeza y que parecen orejas o cuernos. En el Delta, su estancia invernal es corta y parecen más bien un tránsito que una invernada propiamente dicha, probablemente debido a la fuerte presión cinegética que padecen. Sus hábitos diurnos y la frecuentación de ambientes abiertos hacen que sea una de las rapaces nocturnas más fáciles de observar. MOCHUELO Más diurno que el autillo, la mayoría de veces lo podemos encontrar subido a un poste de teléfono o de luz, encima de un tejado, etc - que utiliza como observatorios- más bien en zonas del interior del Delta que limitan con los cultivos de secano, hábitat que le es más favorable. Se alimenta de roedores, pajarillos, insectos, gusanos, caracoles, etc. AUTILO El más pequeño de las rapaces nocturnas se caracteriza por tener los ojos amarillos y unas plumas auriculares que le sobresalen de la cabeza que parecen “orejas”. Migrante y nidificante localizado, no muy frecuente. Llega al Delta a primeros de marzo y permanece hasta septiembre. Se le puede ver esencialmente en las zonas arboladas y en el bosque de ribera. CERNÍCALO COMÚN Pequeño halcón de color rojizo o castaño por encima, con partes inferiores claras y todo él con bastantes marcas oscuras. Se caracteriza por su forma de cazar: con tal de localizar mejor sus presas, suele pararse en el aire con un vigoroso vuelo batido. Durante el invierno es el más común de las rapaces y, no es extraño verlo volar o parado encima de un árbol o de los postes de las líneas eléctricas, aunque prefiere zonas menos inundadas como por ejemplo las playas, los arrozales secos y las zonas de huerta. Cría ocasionalmente en el Delta. RATONERO Rapaz de tamaño mediano, de amplio vuelo y silueta poco esbelta, ya que tiene las alas anchas y redondeadas y la cola y el cuello cortos. Prefiere ocupar ambientes con una cierta cobertura arbórea, que le es imprescindible tanto para dormir como para nidificar y dónde sufre pocas molestias, y encuentra presas y árboles de dimensiones considerables, desde dónde puede cazar y al mismo tiempo refugiarse con mucha tranquilidad. En el delta del Ebro, el ratonero llega al final de agosto y los últimos ejemplares se ven a finales de abril. AGUILUCHO LAGUNERO Es el ave rapaz más característica de las zonas húmedas. Es típica la imagen de su elegante vuelo, a baja altura, con el cual prospecta minuciosamente los carrizales, dónde a menudo obtiene alimento. El Delta es, con diferencia, el área de Catalunya que reúne una mayor población, como lo demuestra el hecho que en invierno acoge más de 200 ejemplares. Aún así, este rapaz de tamaño mediano hace unos diez años que no nidifica. ÁGUILA PESCADORA Se caracteriza por tener la cabeza y el pecho de color blanco, en contraste con el manto que es totalmente oscuro. Como consecuencia de su dieta muy especializada, sólo come peces, ocupa siempre ambientes próximos al agua. En el Delta la podemos observar preferentemente en todas las lagunas principales, en las salinas y en el interior de las bahías. Aunque no nidifica, el Delta es probablemente la localidad más importante de nuestro territorio y la única dónde parece que la especie está presente a lo largo de todos los meses del año.